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“AÑO DE LA UNIDAD, LA PAZ Y EL DESARROLLO.

FACULTAD DE CIENCIAS AGRARIAS

ESCUELA PROFESIONAL DE AGRONOMIA

I CICLO

Tema: El maíz.

Docente: Ing. Rojas García, José Carlos.  

Integrantes:
Cano Jaimes, Luis Yunior.
Chicana Huamán, Víctor Claudio.
Damián Pingo, Cristian Alejandro.
Ramos Neira, Jhan Carlos.
Rivera Calle, Jerri Iván.
Vásquez Córdova, Alex Edu.

Tarapoto-2023
I. INTRODUCCION.
El maíz (Zea mays) es una planta de la familia Gramínea originaria de América,
es por mucho el cultivo agrícola más importante en algunos países y unos de los
10 principales cultivos agrícolas en el mundo. la cual esta gramínea es de mucha
importancia tanto desde el punto de vista alimentario, industrial, político y
social. Este cereal se consume como alimento humano en varias formas, la
mayor parte del maíz que se usa como alimento humano se somete a molienda y
se consume en forma de una fracción específica o modificada del cereal original.
(Etecé, 2018)

Es un cultivo de mucha importancia económica en nuestro país, se lo siembra


tanto en la costa como en la sierra, bajo diferentes condiciones ambientales de
temperatura, humedad, régimen de lluvias, luminosidad y suelos.

imagen 1: rafting de los principales países que tienen mayor producción


de maíz.

II. IMPORTANCIA.
El maíz es uno de los alimentos básicos más importantes que conoce el ser
humano ya que en torno a él se pueden realizar gran cantidad de preparaciones,
así como también pueden obtenerse de él numerosos productos derivados (por
ejemplo, harinas, aceites, etc.). Subsecuentemente, el maíz es altamente utilizado
como alimento de gran parte de los ganados que luego son consumidos o
utilizados como productores de alimento, por lo cual su importancia es enorme.
(Paliwal, s.f.)
La importancia del maíz para el ser humano ha sido siempre muy clara. Mientras
que en algunas regiones se conocen centenares de especies diferentes de maíz,
en la mayor parte del planeta se consumen sólo un puñado que son los más
comunes y los más accesibles a diferentes terrenos y climas. (Paliwal, s.f.)

El maíz es, junto al trigo y a otros cereales, uno de los alimentos básicos de toda
la Humanidad ya que permite la generación de una gran variedad de
preparaciones y platos que son tanto accesibles en términos económicos como
ricos en energía y nutrientes. Por otro lado, el maíz es también altamente
utilizado como alimento de ganado o de animales de los cuales se obtiene otros
alimentos como la leche. De este modo, ya sea para consumo humano o animal,
la producción del maíz es importantísima para numerosos países y regiones que
la generan para consumo interno o que la exportan a aquellas regiones en las que
el maíz no puede crecer. (Paliwal, s.f.)

Hoy en día se produce en todos los continentes excepto en la Antártida y es


altamente valorado debido a que brinda mayor rendimiento que muchos otros
granos, por lo tanto, no es costoso. Es uno de los tres cultivos más importantes
del mundo, junto con el trigo y el arroz. (Paliwal, s.f.)

Para nosotros el uso práctico más importante de esta planta es la alimentación.


Se puede cocinar entero o utilizar los granos como ingrediente de diversos
platillos. Para hacer comida a partir del maíz cosechado éste se seca y después se
almacena, tiempo después los granos secos se transforman en polvo con ayuda
de un mortero y se pueden hornear para hacer toda una variedad de panes,
tortillas o sémola. Muchos países latinoamericanos consumen productos a base
de masa de maíz, como sustituto del trigo. El valor nutricional que tiene es muy
alto, pues proporciona vitaminas, hidratos de carbono, calcio, fósforo y potasio.
(Paliwal, s.f.)

Pero la alimentación no es lo único, este recurso es apreciado en el mundo


entero debido a la cantidad de productos que se derivan de él. Algunos de sus
usos más comunes comprenden la fabricación de aceite de cocina, que es muy
económico. De la hoja seca se hacen fibras para tejer canastas, sombreros,
tapetes y adornos o bien, puede servir como forraje para alimentar al ganado o
incluso, como papel para cigarros. Los olotes, que son los restos de las
mazorcas, son utilizados para el diseño de artesanías o como composta. Se
considera además que las barbas de choclo o pelos de elote, tienen propiedades
medicinales y son utilizados para el tratamiento de padecimientos renales, el
control de la presión alta, la reducción de los niveles de colesterol y para algunas
molestias digestivas. (Paliwal, s.f.)

Por si fuera poco, sus grandes propiedades permiten utilizarlo como


biocombustible, que es empleado como carburante, e incluso la proteína, mejor
conocida como zeína, puede mezclarse con algún plastificante y formar con
ello polímeros comestibles y gomas de mascar. (Paliwal, s.f.)
El maíz también es importante porque facilita la siembra de otras plantas como
la calabaza o el frijol. Al cultivarse en la misma parcela o milpa, hay un
intercambio de propiedades entre ellas, lo que enriquece su valor nutricional.
Incluso, los nativos americanos llamaban a estas especies “las tres hermanas” y
creían que no debían ser separadas para no enojar a los dioses. (Paliwal, s.f.)

Debido a su versatilidad y propiedades alimenticias, esta planta es, sin lugar a


dudas, una de las mejores aportaciones de Mesoamérica para el mundo. (Paliwal,
s.f.)

III. ORIGEN.
El maíz tiene un origen muy antiguo e interesante y juega un papel central en
muchos mitos y leyendas nativos de América, quienes en los tiempos remotos lo
consideraban el alimento de los dioses que crearon la Tierra. Además de las
creencias divinas, los indígenas tenían razones prácticas para convertirlo en la
base de su dieta. En primer lugar, era fácil de cultivar, de hecho, en esta zona las
plantas crecieron y se desarrollaron tan rápidamente que era posible realizar dos
cosechas en una misma temporada. (Paliwal, s.f.)

Además, la planta era fácil de trabajar, se podía almacenar en diferentes formas


y tenía una gran variedad de usos. Ellos utilizaron las hojas que cubrían los
granos para hacer cestos, tapetes, y mocasines, así como para envolver los
alimentos antes de cocinarlos al fuego. Las sedas, o «pelo», eran aprovechados
como relleno e incluso los tallos de las plantas podrían ser excavados y
utilizados como recipientes para alimentos como el azúcar, la sal o ciertos
medicamentos. (Paliwal, s.f.)

Aunque se ha dicho y escrito mucho acerca del origen del maíz, todavía hay
discrepancias respecto a los detalles de su origen. Generalmente se considera
que el maíz fue una de las primeras plantas cultivadas por los agricultores hace
entre 7 000 y 10 000 años. La evidencia más antigua del maíz como alimento
humano proviene de algunos lugares arqueológicos en México donde algunas
pequeñas mazorcas de maíz estimadas en más de 5 000 años de antigüedad
fueron encontradas en cuevas de los habitantes primitivos. (Paliwal, s.f.) Las
varias teorías relacionadas con el centro de origen del maíz se pueden resumir en
la siguiente forma:

 Origen Asiático:

El maíz se habría originado en Asia, en la región del Himalaya, producto de


un cruzamiento entre Coix spp. y algunas Andropogóneas, probablemente
especies de Sorghum, ambos parentales con cinco pares de cromosomas.
Esta teoría no ha tenido un gran apoyo y se reconoce es uno de los cultivos
alimenticios que se originaron en el Nuevo Mundo. Sin embargo, la teoría de
que el maíz es un anfidiploide está ganando terreno a partir de estudios
citológicos y con marcadores moleculares. (Paliwal, s.f.)

 Origen andino:

El maíz se habría originado en los altos Andes de Bolivia, Ecuador y Perú.


La principal justificación para esta hipótesis fue la presencia de maíz
reventón en América del Sur y la amplia diversidad genética presente en los
maíces andinos, especialmente en las zonas altas de Perú. Una seria objeción
a esta hipótesis es que no se conoce ningún pariente salvaje del maíz,
incluyendo teosinte, en esa región. En los últimos años, Mangelsdorf
descartó la hipótesis del origen andino. (Paliwal, s.f.)

 Origen mexicano:

Muchos investigadores creen que el maíz se habría originado en México


donde el maíz y el teosinte han coexistido desde la antigüedad y donde
ambas especies presentan una diversidad muy amplia. El hallazgo de polen
fósil y de mazorcas de maíz en cuevas en zonas arqueológicas apoyan
seriamente la posición de que el maíz se había originado en México. El lugar
origen del maíz se ubica en el Municipio de Coxcatlán, en el Valle de
Tehuacán, Estado de Puebla, en el centro de México. Este valle se
caracteriza por la sequedad de su clima, con un promedio anual de lluvia
muy reducido; alberga principalmente especies vegetales y animales propias
de tierra caliente y seca. La región cuenta con numerosos endemismos, lo
que la convierte un territorio único".
El antropólogo estadounidense Richard Stockton MacNeish, encontró restos
arqueológicos de plantas de maíz, que se estima datan de hace,
aproximadamente, ocho milenios. Indicios de los procesos que llevaron al
pueblo nativo de este valle a dominar el cultivo de este cereal, han sido
encontrados en la cueva de Coxcatlán, Ajalpan y otros sitios de la zona.
(Paliwal, s.f.)
IV. TAXONOMÍA.
El maíz es uno  de los granos alimenticios más antiguos que se conocen 
el maíz presenta el siguiente perfil taxonómico

reino vegetal

división  tracheophyta: plantas con tejidos vasculares 

subdivisió pteropsidae: con hojas grandes


n

clase  angiospermae: plantas con flor; semillas dentro de frutos

subclase monocotiledoneae: con un solo cotiledón

grupo glumiflora 

orden  graminale: generalmente hierbas 

familia gramineae: hojas con dos filas / tallos aplanados 

tribu maydeae

género zea: maiz

especie  mays: maíz cultivado o domesticado


 Parsons. (1992).   
       
V. DESCRIPCIÓN BOTÁNICA.
La planta de maíz se compone de las siguientes partes:

Raíz: es un sistema radicular fasciculado, formado por raíces adventicias que nacen del
tallo y se ramifican en el suelo. Las raíces tienen la función de absorber agua y
nutrientes, así como de anclar la planta al suelo. Parsons(1992)

Tallo: es un tallo herbáceo, cilíndrico, hueco y nudoso, que puede alcanzar hasta 4
metros de altura. El tallo tiene la función de sostener las hojas y las inflorescencias, así
como de conducir la savia. Parsons(1992)

Hojas: son hojas alternas, lanceoladas, envainadoras y paralelinervias, que rodean al


tallo formando una vaina. Las hojas tienen la función de realizar la fotosíntesis y el
intercambio gaseoso. Parsons(1992)

Inflorescencias: el maíz es una planta monoica, es decir, que tiene flores masculinas y
femeninas separadas en la misma planta. Las flores masculinas se agrupan en una
panícula terminal llamada espiga o penacho, que contiene miles de estambres que
producen el polen. Las flores femeninas se agrupan en una espiga lateral llamada
mazorca o elote, que contiene cientos de pistilos que forman los granos o semillas. Cada
pistilo está rodeado por un conjunto de pelos llamado estigma o barba, que recibe el
polen transportado por el viento. Parsons(1992)

Fruto: el fruto del maíz es un cariópside o grano, que es una semilla con una capa
protectora llamada pericarpio. El grano está formado por tres partes: el embrión o
germen, que contiene el material genético y los nutrientes para la germinación; el
endospermo, que es un tejido rico en almidón que alimenta al embrión; y el aleurona,
que es una capa de células que rodea al endospermo y contiene proteínas y vitaminas. El
color y el tamaño de los granos varían según la variedad de maíz. Parsons(1992)

Sistema radicular:

Raiz seminal o principal:  Esta puede tener de 1 a 4 raices, se origina en el embrion 


este suministra nutrientes en las dos primeras semanas y luego dejaran de funcionar.
Parsons(1992)

Raices adventicias:  Estas raices  son las principales raices de la planta estas sirviran
para la absorción de agua y nutrientes del suelo. 
Parsons(1992)

Raices de sosten o soporte: Estos se originan en los nudos serca ala superficie del
suelo  para tener mayor estabilidad, las raices de sosten realizan las fotosíntesis.
Parsons(1992)

Raices aereas: Estas raices no tocan el suelo. Parsons(1992)

VI. MANEJÓ AGRONOMO.


El manejo agronómico del maíz es una disciplina dentro de la agronomía que se
centra en el cultivo del maíz, una de las plantas más importantes en la
agricultura a nivel mundial. El maíz es un cultivo versátil y ampliamente
utilizado tanto para la alimentación humana como animal, así como para la
industria. Un manejo adecuado del maíz implica una serie de prácticas
agronómicas que buscan maximizar los rendimientos, optimizar la calidad del
grano y garantizar la sostenibilidad del sistema de producción. (vasquez, 2020)

A continuación, se detallan algunas de las prácticas agronómicas clave en el


manejo del maíz:

Selección de variedades: Existen diferentes variedades de maíz adaptadas a


diferentes condiciones de suelo, clima y requisitos específicos. Los agrónomos
evalúan las características de cada variedad, como el ciclo de crecimiento, la
resistencia a enfermedades y plagas, y el rendimiento potencial, para recomendar
las variedades más adecuadas a los agricultores.

Preparación del suelo: Antes de la siembra, es necesario preparar el suelo


adecuadamente. Esto implica labores como la arada, el rastrillado y la nivelación
para asegurar una superficie uniforme y una adecuada estructura del suelo.
También se pueden aplicar enmiendas orgánicas o minerales para corregir
deficiencias nutricionales y mejorar la fertilidad del suelo.

Siembra: La densidad y la profundidad de siembra son factores clave en el


manejo del maíz. Los agrónomos recomiendan la densidad de siembra óptima en
función de la variedad y las condiciones locales, teniendo en cuenta factores
como la disponibilidad de nutrientes y agua. La profundidad de siembra
adecuada también es importante para asegurar una emergencia uniforme de las
plántulas.

Nutrición: El maíz requiere una adecuada nutrición para alcanzar su máximo


potencial de rendimiento. Los agrónomos realizan análisis de suelo para
determinar las necesidades nutricionales del cultivo y recomendar la aplicación
de fertilizantes en las etapas adecuadas de crecimiento. Esto ayuda a optimizar la
absorción de nutrientes y prevenir deficiencias que puedan limitar el
rendimiento.

Riego: El riego adecuado es esencial para el desarrollo óptimo del maíz. Los
agrónomos determinan las necesidades hídricas del cultivo y recomiendan
sistemas de riego eficientes, como el riego por goteo o el riego por aspersión,
para evitar el estrés hídrico y garantizar un suministro adecuado de agua en
todas las etapas de crecimiento.

Control de malezas, plagas y enfermedades: El maíz puede verse afectado por


malezas, plagas y enfermedades que pueden reducir su rendimiento. Los
agrónomos identifican las principales amenazas y desarrollan estrategias de
manejo integrado de plagas que incluyen el uso de prácticas culturales, el uso
selectivo de pesticidas y la implementación de medidas preventivas para
minimizar los riesgos.

Cosecha y postcosecha: Los agrónomos asesoran sobre el momento adecuado


para la cosecha del maíz, teniendo en cuenta el contenido de humedad y la
madurez del grano. También pueden brindar recomendaciones sobre el manejo y
almacenamiento adecuados del grano para prevenir pérdidas por insectos,
hongos o condiciones ambientales desfavorables.

El manejo agronómico del maíz implica la integración de todos estos aspectos,


adaptándolos a las condiciones específicas de cada región y a las necesidades de
los agricultores. Un adecuado manejo del maíz contribuye a maximizar los
rendimientos, garantizar la calidad del grano y promover la sostenibilidad del
sistema de producción, asegurando así el suministro de este importante cultivo
para la alimentación y la industria. Los agrónomos desempeñan un papel crucial
en la asesoría técnica y en la aplicación de prácticas agronómicas efectivas para
el cultivo del maíz. (inia, 2018)

VII. CONDICIONES CLIMÁTICAS.


El manejo agronómico del maíz es una disciplina dentro de la agronomía que se
centra en el cultivo del maíz, una de las plantas más importantes en la
agricultura a nivel mundial. El maíz es un cultivo versátil y ampliamente
utilizado tanto para la alimentación humana como animal, así como para la
industria. Un manejo adecuado del maíz implica una serie de prácticas
agronómicas que buscan maximizar los rendimientos, optimizar la calidad del
grano y garantizar la sostenibilidad del sistema de producción.

A continuación, se detallan algunas de las prácticas agronómicas clave en el


manejo del maíz:

Selección de variedades: Existen diferentes variedades de maíz adaptadas a


diferentes condiciones de suelo, clima y requisitos específicos. Los agrónomos
evalúan las características de cada variedad, como el ciclo de crecimiento, la
resistencia a enfermedades y plagas, y el rendimiento potencial, para recomendar
las variedades más adecuadas a los agricultores.

Preparación del suelo: Antes de la siembra, es necesario preparar el suelo


adecuadamente. Esto implica labores como la arada, el rastrillado y la nivelación
para asegurar una superficie uniforme y una adecuada estructura del suelo.
También se pueden aplicar enmiendas orgánicas o minerales para corregir
deficiencias nutricionales y mejorar la fertilidad del suelo.

Siembra: La densidad y la profundidad de siembra son factores clave en el


manejo del maíz. Los agrónomos recomiendan la densidad de siembra óptima en
función de la variedad y las condiciones locales, teniendo en cuenta factores
como la disponibilidad de nutrientes y agua. La profundidad de siembra
adecuada también es importante para asegurar una emergencia uniforme de las
plántulas.

Nutrición: El maíz requiere una adecuada nutrición para alcanzar su máximo


potencial de rendimiento. Los agrónomos realizan análisis de suelo para
determinar las necesidades nutricionales del cultivo y recomendar la aplicación
de fertilizantes en las etapas adecuadas de crecimiento. Esto ayuda a optimizar la
absorción de nutrientes y prevenir deficiencias que puedan limitar el
rendimiento.

Riego: El riego adecuado es esencial para el desarrollo óptimo del maíz. Los
agrónomos determinan las necesidades hídricas del cultivo y recomiendan
sistemas de riego eficientes, como el riego por goteo o el riego por aspersión,
para evitar el estrés hídrico y garantizar un suministro adecuado de agua en
todas las etapas de crecimiento. (valdivia, 2018)

Control de malezas, plagas y enfermedades: El maíz puede verse afectado por


malezas, plagas y enfermedades que pueden reducir su rendimiento. Los
agrónomos identifican las principales amenazas y desarrollan estrategias de
manejo integrado de plagas que incluyen el uso de prácticas culturales, el uso
selectivo de pesticidas y la implementación de medidas preventivas para
minimizar los riesgos. (valdivia, 2018)

Cosecha y postcosecha: Los agrónomos asesoran sobre el momento adecuado


para la cosecha del maíz, teniendo en cuenta el contenido de humedad y la
madurez del grano. También pueden brindar recomendaciones sobre el manejo y
almacenamiento adecuados del grano para prevenir pérdidas por insectos,
hongos o condiciones ambientales desfavorables. (valdivia, 2018)

El manejo agronómico del maíz implica la integración de todos estos aspectos,


adaptándolos a las condiciones específicas de cada región y a las necesidades de
los agricultores. Un adecuado manejo del maíz contribuye a maximizar los
rendimientos, garantizar la calidad del grano y promover la sostenibilidad del
sistema de producción, asegurando así el suministro de este importante cultivo
para la alimentación y la industria. Los agrónomos desempeñan un papel crucial
en la asesoría técnica y en la aplicación de prácticas agronómicas efectivas para
el cultivo del maíz. (valdivia, 2018)

VIII. FERTILIZACIÓN.
En la fertilización del maíz se debe considerar, como punto de partida: el análisis
del suelo, los precios de los fertilizantes, el mercado y la cantidad de cosecha
que se espera tener. Estos factores son muy importantes, porque inciden
significativamente en la dosis de fertilizantes. Ante la falta de información sobre
la producción de maíz, se afirma que la producción nacional no abastece el
consumo interno y, por esto, se recurre a la importación, en parte; y también a
los escases de recursos hídricos, falta de créditos, asistencia técnica casi
inexistente y falta de tecnología adecuada. Además, el sistema de fertilización
para este cultivo siempre ha sido objeto de estudio de acuerdo con las
condiciones en las que se desarrolla; de ahí que es imperativo impulsar y
mejorar su tecnología, para conseguir niveles óptimos de producción y calidad,
mediante el uso racional de recomendables recursos agrícolas y adecuados a la
realidad socioeconómica de los agricultores. (Wilson Leon-2016).
Los tres macronutrientes principales en la fertilización de maíz son nitrógeno,
fosforo y potasio.

imagen 2: tres macronutrientes principales en la fertilización del maíz.

El nitrógeno es el factor decisivo para el resultado productivo del cultivo:


influencia tanto en los rendimientos, como en la cantidad de proteínas en los
granos. Según transcurre el crecimiento fisiológico de la planta, también se
precisa aumentar la intensidad de la nitrificación del suelo.
En este caso es muy necesario adoptar estrategias agronómicas para evitar que la
nitrificación tenga lugar antes de que la planta sea capaz de absorberlo. No es
recomendable la aplicación de fertilizantes agrícolas nitrogenados demasiado
pronto, sobre todo en climas cálidos y muy húmedos, con suelo permeable, o
regados con grandes volúmenes de agua. (Suelos y encalado-Yara Perú 2018)

El fosforo es la parte de los componentes que regulan los intercambios de


energía. Así mismo este forma parte de la membrana celular y de diferentes
compuestos que intervienen en el metabolismo. Promueve el crecimiento
radicular, la floración, la fecundación y la maduración. Su demanda es más alta
en las primeras etapas de desarrollo tras la germinación.
Tener en cuenta de que como el fosforo no es un elemento móvil en el terreno,
debe estar disponible en las inmediaciones de la semilla y la del maíz. En este
sentido se ha desarrollado la técnica de fertilización localizada, usando gránulos
para liberar fosforo tan pronto como el cultivo ha comenzado a germinar.
Siguiendo con respecto al fosforo, las etapas iniciales del desarrollo de la planta
son el periodo más crítico. Una deficiencia de ese nutriente en esta fase del
crecimiento de la planta tiene efectos más dañinos que si falta después, aunque
la tasa de absorción de fosforo sea paralela al ritmo del maíz. (Suelos y
encalado-Yara Perú 2018)

El potasio regula todos los procesos metabólicos: absorción de nitrógeno, la


división celular, la humedad de las hojas, la fotosíntesis, la síntesis de proteínas.
Mejora la productividad de la planta, especialmente desde el punto de vista
cualitativo. La absorción de potasio termina prácticamente en el momento de la
floración. (Suelos y encalado-Yara Perú 2018)
imagen 3: componentes que necesita el suelo.

Elementos esenciales manejo de suelos y fertilización, en campos de maíz:

 Los elementos primarios como el Nitrógeno(N) Fósforo (P) y Potasio (K) son
determinantes para el crecimiento de las plantas, normalmente el suelo no puede
suministrarlo en cantidades suficientes para el desarrollo normal de las plantas
por lo tanto se necesita incorporarlos en forma de abonos sintéticos o
fertilizantes. (Los Micronutrientes en la Nutrición del maíz / Ingrari S.C s.f )
 Los elementos secundarios como el Calcio (Ca), Magnesio (Mg) y el azufre(S)
las plantas los requieren en cantidades elevadas, pero no son tan determinantes
para el crecimiento como los primarios, normalmente se presentan en el suelo en
cantidades suficientes. (Los Micronutrientes en la Nutrición del maíz / Ingrari
S.C s.f )
 El Boro (Bo), Cobre (Cu) Fierro (Fe), Manganeso (Mn), Zinc (Zn) y Cloro
(Cu) son micronutrientes que las plantas también los requieren, pero en
cantidades muy pequeñas, sin embargo, una deficiencia puede ser determinante
en los niveles de productividad del cultivo. (Los Micronutrientes en la Nutrición
del maíz / Ingrari S.C s.f )

Abonos orgánicos

imagen 4: abono orgánico, dieta sana para nuestra tierra


Los abonos orgánicos provienen residuos vegetales y estiércoles de animales que
se incorporan al suelo a fin de mejorar las características del suelo, crean
condiciones favorables para el desarrollo de microorganismos, contribuyen en la
retención del agua y aportan nutrientes indispensables para las plantas. (López–
Martínez et al., 2001)

También aportan materia orgánica, nutrimentos y microorganismos, lo cual


favorece la fertilidad del suelo y la nutrición de las plantas; sin embargo, su
capacidad como fuente de nutrimentos es baja, respecto a los fertilizantes. El
contenido de N de las compostas es 1–3% y la tasa de mineralización del
nitrógeno es cercana al 10%, por lo cual sólo una fracción del N y otros
nutrimentos está disponible el primer año después de su aplicación. Para
satisfacer las necesidades nutricionales de cultivos como el maíz, se requieren
altas cantidades de abonos, lo que implica una elevada disponibilidad de
residuos orgánicos para su elaboración y condiciones adecuadas para su
almacenaje y aplicación. Un enfoque alterno es usar bajas cantidades de abonos
orgánicos y complementar con fertilizantes inorgánicos. (López–Martínez et
al., 2001)

La mineralización de la materia orgánica implica procesos metabólicos


catalizados por enzimas. La actividad enzimática es un indicador de cambios
tempranos en la calidad del suelo por sus relaciones con la microflora y la
facilidad de su medición y su rápida respuesta a las prácticas de manejo agrícola.
La ureasa y las fosfatasas han recibido más atención por sus implicaciones en los
ciclos biogeoquímicos y de nutrición. La ureasa cataliza la reacción de hidrólisis
de los enlaces C–N de algunas amidas y de la urea en amonio y dióxido de
carbono. Las fosfatasas catalizan la reacción de hidrólisis de los enlaces ésteres
y anhídridos de fosfato. Estas enzimas tienen una función fundamental en el
ciclo del P al liberar el ión ortofosfato de compuestos orgánicos e inorgánicos, el
cual queda disponible para las plantas. (Makoi y Ndakidemi, 2008)

imagen 5: abonos orgánicos – fertinal.

La aplicación de materia orgánica también aumenta la actividad de las fosfatasas


al estimular de la biomasa microbiana y la secreción de las raíces. La fosfatasa
ácida es influenciada por la fisiología de la planta y el suministro de P
inorgánico: su actividad disminuye con la edad y aumenta cuando hay
deficiencia. Por el contrario, la actividad de ureasa muestra una respuesta
variable a la aplicación de abonos orgánicos y hay una mayor actividad ureasa
en suelos. (De la Paz–Jiménez et al., 2002).

IX. PLAGAS Y ENFERMEDADES.

Principales plagas (insectos plaga y enfermedades) y su control integrado

IX.1. Insectos Plaga del suelo: Feltia experta, Copitarsia turbata, Agrotis
ypsilon, Cuchi cuchi (Puranius sp), Astilus (Astilus variegatus), Racka o
gallina ciega (Phyllophaga sp o Ancognatha scarabioides), Silhui o cogollero
(Spodoptera frugiperda), Lorito verde (Diabrotica sp). ()

imagen 6: gusano del suelo; cogollero (spodoptera frugiperda) y rack


(phyllophaga sp).

Las larvas se alimentan cortando el cuello de las plantas recién emergidas,


los daños se detectan por las mañanas, su actividad es mayor durante la
noche; los campos fuertemente infestados presentan gran número de “fallas”.

Es importante que el agricultor conozca bien sus campos, para prevenir el


ataque de los gusanos del suelo antes indicados, se debe efectuar el barbecho
después de la cosecha anterior, una buena preparación del suelo, aplicar
riegos profundos, adecuado tratamiento de la semilla con el insecticida
específico, uso de cebos tóxicos, de trampas de luz y trampas alimenticias
para la captura de insectos adultos, y control biológico con los controladores
existentes en campo o liberando poblaciones específicas. Cuando el cultivo
está establecido y hay fuerte ataque de gusanos del suelo, su control es
difícil, ni los insecticidas sistémicos logran controlar el ataque, una
alternativa para evitar daños a nivel de raíces y cuello de la plántula es
aplicar riegos pesados con cierta frecuencia. (Wikifarmer - 2022)

IX.2. Insectos Plaga de la Planta: Cogollero (Spodoptera frugiperda), Cañero


(Diatraea saccharalis) y Choclero o mazorquero (Helicoverpa zea). - En las
zonas altas por encima de los 3000 metros de altitud el ataque de los gusanos
cogollero, cañero y choclero no es significativo, sin embargo, con el
incremento de la temperatura producto del cambio climático, estas plagas
van apareciendo en altitudes mayores, constituyéndose en plagas potenciales.
(Wikifarmer - 2022)
- Gusano cogollero (Spodoptera frugiperda), en las zonas con
condiciones favorables para su proliferación es la plaga más importante
del maíz, ataca las plantas desde que estas tienen entre 10 a 15 cm de
altura; sus daños pueden afectar todas las plantas, las larvas pequeñas
producen raspados en las hojas; y a partir del 3er. estadio “mascan” y
perforan el “cogollo”, afectando la densidad y los rendimientos. Para
prevenir su ataque, los campos deben estar libres de malezas (grama
china y otras gramíneas), para disminuir la población de adultos colocar
en el campo trampas de luz y de melaza; realizar liberaciones de
controladores biológicos como chinches (Podisus sp), avispitas del
género Telenomus, crizopas, moscas parásitas y otros. Cuando hay
ataque, primero realizar la evaluación de daños, si es focalizado para
eliminar las larvas, aplicar solo a las plantas que presentan daños
sustancias líquidas elaboradas a base de productos vegetales como el
rocoto, agave, neem o aplicar baculovirus en el cogollo de las plantas, en
última instancia aplicar insecticidas recomendados sobre todo cuando el
ataque es fuerte; en la primera etapa con 17 insecticidas líquidos y
cuando esté formado el cogollo con insecticidas granulados en dosis
comerciales especificadas en los envases. (Wikifarmer - 2022)

imagen7: daños causados por el gusano cogollero.

- Gusano cañero (Diatraea saccharalis), las larvas de color blanco


cremoso causan daños en los tallos, perforan los entrenudos, barrenan los
tallos y forman galerías. Cuando el ataque es muy intenso los entrenudos
se pudren y se quiebran fácilmente con el peso de las mazorcas o con el
viento, en ocasiones pueden producir daños en las mazorcas. Para su
control se recomienda, realizar siembras oportunas, buena limpieza del
campo, para disminuir la población de adultos utilizar trampas de luz y
trampas de hembras vírgenes para captura de adultos; control biológico

imagen 8: tallo y panoja atacados por el gusano cañero (Diatraea saccharalis)


natural o mediante liberaciones de avispitas del género Trichogramma.
No se recomienda uso de insecticidas, los hábitos de la plaga hacen
difícil su control. (Wikifarmer - 2022)

- Gusano choclero (Helicoverpa zea), las polillas (adulto) ponen huevos


en las “barbas” del choclo tan pronto aparecen, las larvas se alimentan de
los pistilos dirigiéndose hacia la punta de la mazorca, donde se alimenta
del grano lechoso; en los maíces duros el daño está limitado
generalmente a la punta de la mazorca; al completar su desarrollo las
larvas abandonan la mazorca perforando las brácteas, orificios por donde
ingresa la mosca Euxesta sp. y el agua de lluvia que causan pudrición en
la mazorca. 18 Para controlar el ataque se recomienda, para la captura de
adultos el uso de trampas de luz oscura y de lavatorios con agua más
detergente en las noches con luna; para el control de larvas el control
biológico natural o mediante liberaciones de avispitas del género
Trichogramma que parasitan los huevos, y la aplicación de 3 gotas de
aceite comestible vegetal sobre los “pelos o barbas” de cada choclo
cuando estos han alcanzado el estado de pincel, en tres fechas: la primera
cuando han emergido los “pelos” en el 30% de choclos, la segunda 8 días
después cuando hayan salido en otros 30% y la tercera 8 días de la
segunda aplicación a todos los choclos faltantes. Por el hábito de las
larvas la efectividad del control químico es muy relativo, se requiere al
menos tres aplicaciones dirigidas para tener éxito. (Wikifarmer - 2022)

imagen 9: mazorca atacada y control del gusano choclero (Helicoverpa


zea)

- Diabrótica o Lorito verde (Diabrotica spp), a este género pertenecen


varias especies de diabróticas; las larvas se alimentan de raíces y del
cuello de la planta, debilitan el desarrollo y vigor de la planta, facilitan la
entrada de patógenos, provocan que las plántulas emitan macollos,
eventualmente causan la muerte de la planta. Los adultos pueden dañar
severamente la
plántula en su primera etapa de crecimiento y posteriormente interferir
con la polinización.
El ataque de esta plaga también aumenta en los períodos de mayor
temperatura y sequía, las larvas atacan a nivel del cuello de la planta. Si
los daños son severos provocan deformaciones y hasta ramificación o
ahijamiento anulando la formación de mazorcas.
Los adultos (loritos) se encuentran en la corona o cuello de las plantas;
para su control aplicar riegos profundos, y de ser necesario insecticidas
recomendados preferentemente sistémicos. (Wikifarmer - 2022)

imagen 10: daños en plántulas y ciclo biológico del lorito verde


(Diabrotica spp).

- Pulgones: Pulgón negro del maíz (Rophalosiphum maydis) se prolifera y


ataca más en los períodos con mayor temperatura y sequía, los pulgones
en las primeras etapas de crecimiento se alimentan de las hojas basales y
en la fase de inicio de floración a nivel de la hoja bandera o última hoja y
en la panoja. Los pulgones se localizan en el cogollo, pero pueden llegar
a poblar toda la planta, producen gran cantidad de mielecilla que provoca
debilitamiento y secamiento de las plantas. En casos severos las hojas se
encarrujan y propician el ataque secundario del hongo Fumagina de color
oscuro que cubre parte de las láminas foliares ocasionando disminución
en la capacidad de fotosíntesis, en el rendimiento y en la calidad del
grano. Para el control de los pulgones se recomienda control biológico,
porque tienen un gran complejo de controladores biológicos como las
mariquitas (Hipodamia sp.) y las Crysopas. Cuando el ataque es fuerte,
se debe aplicar soluciones a base de detergentes agrícolas o de
insecticidas específicos. (Wikifarmer - 2022)

imagen 11: pulgones del género rophalosiphum.

IX.3. Insectos Plaga de Almacén:


Gorgojo del grano (Pagiocerus frontalis).
En el maíz, las plagas de almacén causan pérdidas de rendimiento,
disminución del valor comercial, pérdidas de calidad en el grano y de su
valor nutritivo, que conlleva a la reducción de los ingresos del agricultor y su
familia y pone en riesgo su seguridad alimentaria. (Wikifarmer - 2022)

En zonas frías la probabilidad de que haya ataque de gorgojo es menor, sin


embargo, se recomienda monitorear en campo las mazorcas con mala
cobertura, las mazorcas en el secadero y los granos durante el desgrane y
almacenamiento. (Wikifarmer - 2022)

El ataque de gorgojo del grano (Pagiocerus frontalis) generalmente se


presenta en los valles interandinos con altitudes menores a 3200 m; para su
control se recomienda, antes y durante la cosecha y en el secado separar y
tratar las mazorcas con granos atacados por gorgojo, durante el desgrane
eliminar los granos atacados. (Wikifarmer - 2022)

Para conservar pequeñas cantidades de semilla, éstas se mezclan con arena


fina o con ceniza, las cuales dificultan su desplazamiento y ataque a otros
granos. (Wikifarmer - 2022)

En mayores volúmenes su control se efectúa aplicando sustancias químicas


preferentemente gasificantes en dosis comerciales recomendadas, colocando
los granos y semillas dentro de ambientes, silos metálicos o depósitos de
plástico o metálicos (cilindros) herméticamente cerrados. (Wikifarmer -

2022)
imagen 12: granos atacados por gorgojo del maíz (Pagiocerus frontalis).

IX.4. Principales enfermedades y su control integrado


Al igual que los insectos plaga, con el calentamiento global y en los lugares
donde se practica el monocultivo de maíz, entre otras las provincias de Calca
y Urubamba, en las que en algunos sectores se tiene la presencia de una
nueva enfermedad llamada comúnmente “seca seca”, cuyo agente causal aún
no es identificado. En la mayor parte de la sierra sur en años normales y
cuando la siembra se realiza en época oportuna, el ataque de las
enfermedades foliares fungosas más comunes causadas por hongos de los
géneros Helminthosporium y Puccinia (roya) no tienen repercusión
económica, por lo cual no se efectúa control alguno. (Wikifarmer - 2022)
El mayor problema por la susceptibilidad de las variedades son las
pudriciones de mazorca, cuya intensidad de ataque depende de las
condiciones ambientales.

En los lugares donde se práctica el monocultivo, para disminuir el ataque de


enfermedades y plagas se recomienda: realizar la cosecha oportuna para que
las hojas secas con enfermedades no se desintegren y caigan en el campo;
que el campo quede libre de rastrojos; concluida la cosecha realizar el
barbecho del terreno con la finalidad de eliminar los rastrojos, romper el
ciclo de los patógenos causantes de las enfermedades y de los insectos plaga,
así como oxigenar mejor el suelo. (Wikifarmer - 2022)

imagen 13: hojas dañadas por tizón foliar (Helminthosporium maydis) y


roya común (Puccinia sorghi).

Pudriciones de mazorca por Fusarium y Diplodia, el principal problema


son las pudriciones de mazorca causadas por hongos de los géneros
Fusarium y Diplodia, el porcentaje de daños depende de las condiciones
ambientales, en años más lluviosos se tiene mayor cantidad de mazorcas con
pudrición.

Control, para evitar su diseminación se recomienda que, durante el


deshojado de las mazorcas no se dejen las mazorcas enfermas en el campo,
éstas deben secarse en espacios alejados de las mazorcas sanas; las más
podridas y los granos enfermos obtenidos durante el desgrane deben ser
quemados o enterrados en hoyos profundos; el hongo Fusarium produce
micotoxinas denominadas fumonisinas que son tóxicas para los humanos y
animales, por cuanto bajan sus defensas; el hongo Diplodia también produce
micotoxinas,
que son tóxicas para las aves, por lo que no se recomienda el consumo de las
mazorcas y granos con estas enfermedades. (Wikifarmer - 2022)
imagen 14: pudrición de mazorcas por Fusarium y Diplodia.
Carbón Común (Ustilago maydis), INIA 613 - Amarillo Oro e INIA 607 –
Ch’ecche Andenes y variedades similares de las razas Cusco Cristalino
Amarillo y Pisccoruntu, son moderadamente susceptibles al ataque del

Carbón
imagen 15: mazorcas con ataque de Carbón común (Ustilago maydis).

común del maíz comúnmente llamado pacorma o hat’upa, causado por el


hongo Ustilago maydis, que, en años con menor precipitación pluvial
durante la floración, aumenta el porcentaje de plantas con mazorcas y tallos
atacados por esta enfermedad.

Control, se recomienda eliminar estas plantas antes de que los órganos


afectados presenten agallas con esporas negras, si llegan a este estado de
ataque, cortar y enterrar estas plantas en hoyos profundos. (Wikifarmer -
2022)

El Puca poncho (Spiroplasma kunkeli), se presenta en zonas templadas


por debajo de los 3000 metros de altitud, muchas veces en cultivos de
siembras tempranas. El agente causal es el complejo spiroplasma –
fitoplasma denominado mollicute transmitido por cigarritas de la especie
Dalbulus maydis que atacan en las primeras etapas del cultivo y que
transmite también el virus del rayado fino.
Si no realiza el control de las cigarritas, el daño generalmente es muy severo,
las plantas prácticamente no dan mazorcas ni granos; la chala no es aceptada
como alimento por el ganado. Una alternativa es realizar dos aplicaciones de
insecticidas en dosis comerciales, uno antes del primer aporque y la segunda
después del segundo aporque.
Cuando las plantas manifiestan los síntomas de manchas rojizas o
amarillentas en las hojas, formación de mazorcas en cada nudo, el mal ya
está avanzado y no se puede hacer control alguno. (Wikifarmer - 2022)
Imagen 16: cigarrita (Dalbulus maydis) y planta con Puka poncho.

X. COSECHA Y POT COSECHA.


 Cosecha:
Una vez que el grano ha alcanzado su madurez, se puede dejar en el
campo de 8 a 10 días como máximo. Esto se hace para que pierda un
poco más de humedad. La semilla y/o grano que permanece en el campo
por más de 10 días después de la madurez, está expuesta a la pérdida de
vigor y germinación. Además, puede sufrir daños por insectos,
enfermedades y animales.

Para el grano y/o semilla, el campo de producción es el peor lugar de


almacenamiento, debido a los cambios bruscos de temperatura que se
dan durante el día y la noche. Es recomendable que la madurez
fisiológica de los cultivos coincida con la época seca de la zona, sobre
todo para facilitar el secado natural. En la zona seca la madurez
fisiológica del maíz se alcanza aproximadamente a los 40 a 50 días
después de la floración (fecundación del ovulo). La presencia de a capa
negra en el grano es un buen indicador de la madurez fisiológica. Cuando
el grano de maíz llega a su máximo peso seco, en la base del grano se
forma una línea llamada “Capa Negra”, la cual está formada por lo que
originalmente fueron células del tejido de la placenta que unía a cada uno
de los granos con el olote. Cuando el grano deja de crecer, esas células se
ennegrecen y dejan de pasar nutrientes del olote al grano. Usualmente la
capa negra se forma cuando la humedad grano es aproximadamente el 30
%.

Sí el 90 a 95% de los granos situados en la base de la mazorca tienen la


“Capa Negra” en las plantas cuyas hojas estén más verdes, el maíz ya
puede cosecharse sin ningún riesgo, siempre y cuando el maíz haya
madurado con normalidad. El muestreo para determinar si el cultivo
llego a la madurez fisiológica, se cosechan 12 mazorcas escogidas al azar
y si 9 de ellas tienen 3 granos de cada 4 de la parte basal de la mazorca,
una “Capa Negra”, quiere decir que la humedad del grano estará muy
cerca del 30%, y está listo para la cosecha. (Inia, 2018)
Se recomienda cosechar temprano para garantizar lo siguiente:
- El máximo rendimiento de grano y/o semilla y la apariencia de estas
- Mayor germinación y vigor
- Reducir los riesgos por condiciones adversas que se puedan presentar
como son precipitaciones, altas temperaturas.
- Reducir perdidas en los rendimientos debido daño por insectos, roedores,
pájaros, mapachines y otros.
- Reducir la incidencia de la pudrición de mazorca y tallo, germinación y
manchado de grano.
- Evitar el deterioro de la semilla (disminución de germinación y vigor)
- Evitar los frutos se desgrane en el campo o se desprenda de la planta.
- Aprovechamiento de los precios en el mercado
- Preparación del terreno para las siembras subsiguientes
 Cosecha manual:
Por lo general, antes de efectuar la cosecha manual, es práctica común
dejar el maíz en el campo adherido a las plantas por un tiempo variable
que depende de diversos factores como los ya mencionados, durante el
cual el grano se seca en forma gradual. (Fao, 2023)
Entre las prácticas más comúnmente usadas se podrían mencionar:
a) Dejar las plantas enteras en pie tal como se desarrollaron.
b) Cortar la parte superior de las plantas (espiga o flor masculina),
para permitir una mayor exposición de las mazorcas al sol.
c) Doblado o quebrado. Este procedimiento consiste en doblar la
parte superior de la planta o solamente la mazorca, para que la
punta quede hacia abajo. Con esta práctica se pretende evitar que
el agua de lluvia penetre al interior de la mazorca y disminuir el
daño de los pájaros.
La cosecha o separación de las mazorcas de la planta se efectúa de
dos maneras con y sin hojas (chalas, tusas, totomoxtle)
Cuando se quitan las hojas, la deshojadura puede realizarse con la
ayuda de un instrumento manual llamado "gancho" que el operario se
coloca en la mano derecha y que le facilita grandemente la operación.
En el caso que la separación de las mazorcas se preluzca sin quitarle
las hojas, su posterior deshojadura se puede efectuar con otro
instrumento manual llamado "clavija" (Fao, 2023)
 Cosecha semimecanizada (con deschaladora o deshojadura)
Esta máquina que es arrastrada por un tractor, permite sacar las
mazorcas de las plantas, quitarle las chalas (hojas, tusas, totomoxtle)
y cargarlas en un carretón. (Fao, 2023)
Cosecha mecanizada (con automotriz)
La cosechadora automotriz debe ser utilizada con un cabezal para
maíz, cuyas partes principales y su funcionamiento se describen a
continuación.
El cabezal es esencialmente una recolectara de maíz montada al
transportador del alimentador de la cosechadora. Los cabezales para
maíz varian de tamaño, desde unidades para dos hileras hasta
unidades para doce hileras.
A medida que la cosechadora se mueve a través del campo, las
puntas juntadoras, van colocadas entre las hileras del maíz. Los
rodillos despojadores sujetan los tallos del maíz y tiran de ellos
rápidamente hacia abajo entre los rodillos.
Cuando una mazorca llega a la barra despojadora, no puedo pasar
porque la abertura es angosta.
Los rodillos despojadores continúan tirando del tallo y arrancan la
mazorca separándola del tallo.
Las cadenas juntadoras recogen las mazorcas y las transportan a un
sinfín transversal que las lleva al transportador del alimentador. El
transportador del alimentador lleva las mazorcas hasta el cilindro
trillador.
Los rodillos despojadores deben operar a una velocidad en relación
con la velocidad de avance hacia adelante de la cosechadora, para
tirar de los tallos a través de los rodillos antes que la cosechadora les
pase por encima. Si los rodillos despojadores son operados en forma
muy rápida, las mazorcas pueden saltar hasta afuera del cabezal para
maíz y perderse en el suelo. La alta velocidad puede causar un
desgranamiento en las barras despobladoras lo que dará también por
resultado pérdida de material. También puede causar que todo el tallo
sea introducido a la cosechadora, dando. Como resultado una
sobrecarga de la máquina. (Fao, 2023)
 Post cosecha.
La postcosecha del cultivo de maíz involucra una serie de actividades
que se realizan después de la cosecha para asegurar la calidad y
conservación de los granos. (Inia, 2018)

- Secado:

El maíz cosechado contiene un alto nivel de humedad, generalmente más


del 20%. Para evitar el deterioro y el crecimiento de hongos, es necesario
reducir el contenido de humedad a un nivel seguro para el
almacenamiento a largo plazo. El maíz se seca utilizando secadoras de
aire caliente o mediante métodos de secado natural, como la exposición
al sol o el aire ambiente. (Inia, 2018)

- Limpieza:

Después del secado, es importante limpiar el maíz para eliminar


impurezas como hojas, tallos, piedras y otros materiales extraños. Esto se
puede hacer utilizando zarandas y tamices que separan las impurezas del
grano. (Inia, 2018)

- Clasificación y selección:

Los granos de maíz se pueden clasificar y seleccionar según su tamaño,


color y calidad. Esto ayuda a separar los granos dañados, enfermos o
inmaduros de los granos sanos y de calidad superior. La clasificación y
selección se realizan utilizando máquinas clasificadoras o mediante una
inspección visual cuidadosa. (Inia, 2018)

- Almacenamiento:

Después de la limpieza y clasificación, los granos de maíz se almacenan


en instalaciones adecuadas para mantener su calidad durante períodos
prolongados. Los métodos comunes de almacenamiento incluyen silos,
bodegas o almacenes. Es importante que las instalaciones de
almacenamiento estén bien ventiladas, protegidas contra plagas y con
control de humedad para prevenir el deterioro y la proliferación de
hongos. (Inia, 2018)

- Control de plagas y enfermedades:

Durante el almacenamiento, se deben tomar medidas para prevenir y


controlar plagas como insectos y roedores, así como enfermedades que
puedan afectar los granos de maíz. Esto puede incluir el uso de métodos
de control químico, físico o biológico, y la inspección regular de los
granos para detectar cualquier signo de infestación o deterioro. (Inia,
2018)

- Monitoreo y mantenimiento:

Durante todo el proceso de postcosecha, es esencial monitorear


regularmente los granos de maíz almacenados para detectar cualquier
cambio en la calidad, como aumento de humedad, calentamiento o signos
de deterioro. Además, se deben realizar tareas de mantenimiento
periódico en las instalaciones de almacenamiento y equipos utilizados
para garantizar un ambiente óptimo para el maíz almacenado.
Las prácticas específicas de postcosecha pueden variar según la región,
el tamaño de la operación y los recursos disponibles. Por lo tanto, es
recomendable seguir las recomendaciones locales y consultar a expertos
en agricultura para obtener directrices más detalladas. (Inia, 2018)

XI. COSTO DE PRODUCCIÓN.


Los costos de producción del cultivo de maíz pueden variar según diversos
factores, como la ubicación geográfica, las prácticas agrícolas utilizadas, el
rendimiento esperado y otros factores relacionados con el mercado, también son
variables, dependiendo del nivel tecnológico, así tenemos que para un nivel
medio el costo es aproximadamente S/. 2,700 por hectárea y para un nivel
tecnológico alto es aproximadamente S/. 3,100 por hectárea. (Midagri, 2019)

Preparación del suelo:


Incluye el arado, la nivelación del terreno, la eliminación de malezas y la
aplicación de fertilizantes. Los costos de preparación del suelo pueden variar
según el método utilizado y las condiciones específicas del campo. (Midagri,
2019)
Semillas:

El costo de las semillas de maíz varía dependiendo del tipo de semilla (híbrida,
modificada genéticamente, etc.) y el proveedor. Los agricultores suelen comprar
semillas cada temporada. (Midagri, 2019)

Fertilizantes:

Los fertilizantes son necesarios para proporcionar los nutrientes necesarios para
el crecimiento saludable del maíz. Los costos pueden variar según la cantidad y
el tipo de fertilizante utilizado, así como las tasas de aplicación. (Midagri, 2019)

Tratamientos fitosanitarios:

Esto incluye pesticidas, herbicidas, fungicidas y otros productos químicos


utilizados para controlar plagas y enfermedades en el cultivo. Los costos varían
según el programa de control de plagas y las condiciones locales. (Midagri,
2019)
Riego:

Si el cultivo de maíz requiere riego, los costos pueden incluir la instalación y el


mantenimiento del sistema de riego, así como los costos de agua. (Midagri,
2019)

Mano de obra:

Los costos laborales incluyen el salario de los trabajadores agrícolas, tanto para
las tareas de siembra y cosecha como para el mantenimiento del cultivo a lo
largo de la temporada. (Midagri, 2019)

Maquinaria y equipos:

Los costos de maquinaria agrícola, como tractores, sembradoras, cosechadoras y


equipos de mantenimiento, deben ser tenidos en cuenta. Estos costos pueden
incluir el arrendamiento o la compra de maquinaria, así como los gastos de
mantenimiento y reparación. (Midagri, 2019)

Energía:

Se incluyen los costos de combustible o electricidad necesarios para operar


maquinaria y equipos agrícolas. (Midagri, 2019)

Almacenamiento y comercialización:
Si se planea almacenar el maíz después de la cosecha, se deben considerar los
costos de almacenamiento y los gastos asociados con la comercialización del
producto. (Midagri, 2019)

REFERENCIAS:
EL MAIZ EN LOS TROPICOS: Mejoramiento y producción. (s/f). Fao.org.
Recuperado el 14 de junio de 2023, de https://www.fao.org/3/x7650s/x7650s03.htm
Equipo editorial, Etecé. (2023). Maíz: historia, cultivo, variedades, usos y
características. Enciclopedia Humanidades. https://humanidades.com/maiz/
Vegetable program / prepared by David B. Parsons. (1992). University of Arizona
Libraries.

Los Abonos Orgánicos. Beneficios, Tipos y Contenidos Nutrimentales | Intagri S.C. (s. f.-


b).https://www.intagri.com/articulos/agricultura-organica/los-abonos-organicos-
beneficios-tipos-y-contenidos-nutrimentales

Wikifarmer. (2022). Plagas y enfermedades del


maíz. Wikifarmer. https://wikifarmer.com/es/plagas-y-enfermedades-del-maiz/

Cosecha de granos - Cosecha de maíz. (s/f). Fao.org. Recuperado el 14 de junio de


2023, de https://www.fao.org/3/x5051s/x5051s03.htm
Costos de Producción. (n.d.). Gob.pe. Retrieved June 19, 2023, de
https://www.midagri.gob.pe/portal/30-sector-agrario/maiz/253-costosde-produccion

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