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INSTITUTO UNIVERSITARIO
CARL ROGERS
FACULTAD DE PSICOLOGÍA
TESIS
PRESENTA
Resumen
El abuso sexual en mujeres no es algo normal ni algo que deba tolerarse, en México
seis de cada diez mujeres han sido víctimas de abuso sexual, por consiguiente, la
Es importante mencionar que las mujeres han hecho una llamada a las
físicamente para poder llevar acabo la demandar, porque lo que se debe sancionar el
abuso sexual verbal, de esta manera la mujer no es expuesta a seguir siendo víctima
de violencia.
nivel global una de cada tres mujeres ha sufrido violencia física, en algunos países
Por lo que, la campaña, escúchame también, tuvo como resultado que las
proceso, debido a que la víctima tiene una evitación referente al suceso traumático
las víctimas.
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Índice
Capítulo I. Introducción..............................................................................................7
3.1. Sujetos………...................................................................................................70
3.2. Material………..................................................................................................70
3.3. Procedimientos.................................................................................................70
Referencias…………...............................................................................................71
Documentos oficiales:..............................................................................................71
Artículos periodísticos..............................................................................................72
Libros…………………..............................................................................................72
Tesis………………...................................................................................................74
Documentos de internet...........................................................................................74
Artículos científicos..................................................................................................76
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Capítulo I. Introducción
Las mujeres víctimas de abuso sexual, desarrollan diferentes bloqueos del ciclo de la
experiencia, para afrontar lo vivido. Cabe mencionar que la salud sexual es
importante para la salud emocional, así pues, cuando una persona es víctima de
abuso sexual, su organismo se ve afectado, teniendo como resultado la formación de
diferentes bloqueos en su ciclo de la experiencia, al formarse los bloqueos las
víctimas comienzan a evadir, y dejan de contactar con su exterior, protegiéndose
físicamente, así como emocionalmente. Teniendo como resultado no darse cuenta
de sus necesidades en su aquí y ahora impidiéndole a la víctima estar en reposo.
Al vivir un abuso sexual ¿Cuáles son los bloqueos y de qué manera afectan a
la víctima en su vida cotidiana? Hay que resaltar que cada bloqueo tiene una
necesidad como son; relajación, placer, reconocimiento, aceptación, expresión,
identificación, pertenencia e independencia. Definitivamente al tener bloqueos en el
ciclo de la experiencia, dichas necesidades se ven alteradas al estar bloqueadas.
Teniendo como resultado problemas de salud, problemas al momento de
relacionarse, así como problemas con su pareja amorosa.
1.2 Hipótesis
abuso sexual, al identificar y eliminar los bloqueos del ciclo de la experiencia, debido
1.3 Objetivos
Generales:
experiencia.
Particulares:
Específico
de la victima
carnalmente o con objetos, y el agresor puede ser mayor de edad o menor. Cabe
como una manera de recibir afecto por parte del agresor, lo que significa que
emocionalmente.
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que son responsables del abuso y la confianza hacia las demás personas se ve
afectada.
presiona (sea física o emocionalmente) a que hagas alguna cosa de tipo sexual. La
violación es cuando alguien te fuerza o presiona para que tengas sexo” (párr. 2).
abuso sexual.
Cabe mencionar que los temores que presentan las víctimas de abuso sexual
son: a sufrir, al castigo, al rechazo, a enfrentar, al abandono, a ser libres, por
consiguiente, tiene conflictos en su entorno y de manera personal (Salamá, 1990).
Teniendo en cuenta las fases bloqueadas del ciclo de la experiencia, el abordaje
terapéutico Gestalt, es adaptado de acuerdo a la persona y la manera que se suscitó
el abuso sexual, así como la edad, y si el agresor es cercano. Por esta razón
teniendo identificado el bloqueo que más le afecta en su aquí y ahora, se aborda con
una técnica Gestalt, como puede ser expresiva, integrativa o supresiva, esto
depende de cual sea la necesidad y estado emocional de la persona. De esta
manera no se pone en riesgo a la víctima físicamente, ni emocionalmente.
Así pues, el sueño ya no será una complicación para ella, ya que tendrá
confianza en el espacio en el que se encuentra, ya que ella ha decidido estar ahí, y si
lo ha decidió es porque es un lugar seguro para ella.
1.5 Limitaciones
encontrarlos.
víctimas de abuso sexual, así como terapeutas dejaron de atender, teniendo como
están trabajando online, o algunos dejaron de trabajar, así mismo conocer a fondo
los contras del abordaje terapéutico online, es complicado, ahora se les contacta por
Acción: la persona logra el contacto, con lo que necesita o desea, a través de haber
movilizado y dirigido su energía. Se está satisfaciendo esa necesidad.
Awareness: darse cuenta de lo que uno persona siente y percibe de la realidad para
entrar en contacto consigo mismo.
Fenomenología: escuchar, observar, ponerte en los zapatos del otro, sin dejar los
tuyos.
Homeóstasis: es la tendencia general de todo organismo al restablecimiento del
equilibrio interno cada vez que éste es alterado.
Penetración: pasar a través de un cuerpo, con genitales, objetos o partes del
cuerpo humano.
Para algunos teóricos el término Gestalt tiene una traducción bien definida.
Aznar-Casanova 1991, menciona que:
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debido a diferencias con la escuela neoyorkina pero sobre todo por un debilitamiento
de la percepción que el tenia sobre esta.
Sin embargo, no fue hasta 1951 que junto a Paul Goodman y Ralph Hefferline
se sientan las bases teóricas fundamentales a través del libro Terapia Gestalt:
Excitación y Crecimiento de la Personalidad Humana (Sarrió, 2017).
La Gestalt incompleta, por otro lado, se aborda como la ley del cierre, que
expresa la tendencia de los sujetos a completar aquello que perciben a pesar de que
se encuentre incompleto, de manera que toda persona tiende a completar su propia
existencia, similar a como el organismo tiende a un equilibrio armónico a través de la
autorregulación (Peñarrubia, 2008).
gestáltica se centra en lo que una persona sabe o siente sobre si misma a nivel
emocional, corporal y en general cualquier vía observable.
Para el psicoanálisis la neurosis deriva del conflicto del ser sobre su medio y
es estático, mientras que la para la escuela gestáltica este mismo conflicto es el
inicio de diversos conflictos posteriores dado que la interrupción de una etapa,
necesidad o prohibición de algún deseo causa que el sujeto busque cerrar esta
ventana lo que a la postre se convierte en patrones recursivos.
Esta propuesta identifica las diferentes etapas por las que pasa la energía
destinada a satisfacer las necesidades. En primera instancia se distinguen la parte
pasiva, en la que el organismo después de un proceso de equilibrio y sensación
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De acuerdo con Stange y Lecona (2014) una persona bien integrada reconoce
su capacidad para saber lo que necesita, se adapta a nuevas situaciones, transita
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entre la individualidad y la interacción con los otros sin aferrarse esquemas que no le
funcionan. Sin embargo, mencionan que:
Por ejemplo, en México la Ley para Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de
Violencia (2021) ofrece una definición integral que identifica el abuso sexual como
parte de:
Así el abuso sexual puede definirse como cualquier acto cometido a una
persona, en la cual se ha ejercido violencia física o psicológica, incluyendo
amenazas o generación del miedo, para establecer contacto sexual en contra de su
voluntad y que atenta contra su dignidad y salud mental. Existe un profundo
subregistro de estas agresiones tanto a nivel internacional como en el contexto
mexicano que impide conocer el número exacto de víctimas (Anarte, 2020).
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La OMS estima que al menos 30% de las mujeres a nivel mundial han sufrido
violencia sexual alguna vez durante su vida (OMS, 2021); por otro lado, menos del
5% de las victimas adultas de abuso y violencia sexual notifican el delito ante las
autoridades.
Esta carencia de datos no solo impide el acceso a la justicia por parte de las
victimas y sus familias si no que además actúa como una plataforma de impunidad
que, al ser conocida por los agresores, fomenta la perpetuación del abuso al no ser
perseguida ni notificada ante la autoridad.
Así, los indicadores de abuso y violencia sexual más empleados por diversos
observatorios de derechos humanos en América Latina son el embarazo adolescente
y el feminicidio, debido a que, si bien son fenómenos que por sí solos no revelan un
origen violento, la mayoría de estudios indican que existe un componente de abuso
sexual o algún tipo de agresión en un amplio número de estos eventos.
Estudios previos han identificado que las victimas de abuso sexual son más
propensas a desarrollar desordenes emocionales, alimenticios, de conducta además
de que estos eventos traumáticos interfieren en su proceso de aprendizaje y
disminuyen sus posibilidades de superación y adecuación social.
Por ejemplo, Sarasua et al., (2013) identificó que el 44% de las mujeres
participantes presentaban síntomas de estrés postraumático relativo a un abuso
sexual en la infancia. Otros estudios de corte humanista destacan la repetición de
patrones, el desarrollo de fobias, bloqueos y una amplia gama de consecuencias que
limitan la experiencia de vida y la relación entre la víctima y su entorno.
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Las conductas de índole sexual en las que el agresor ejerce el abuso pueden
presentarse en diferentes contextos, esto también dependerá de la relación con la
víctima, la edad y el sector vulnerable al que esta pueda pertenecer, es decir si es
una niña, adolescente, mujer u otro grupo de alta vulnerabilidad como individuos con
necesidades educativas especiales o población indígena y afrodescendiente. De
acuerdo al Fondo Internacional de Emergencia de las Naciones Unidas UNICEF el
abuso sexual hacia niñas, niños y adolescentes (ANNA) puede definirse como el
conjunto de prácticas sexuales impuestas por un adulto a una niña, niño o
adolescente, independientemente de la forma en que se ejerza la coerción.
Para lograr esto, el adulto agresor debe tener acceso constante al menor; por
ello que se estima que una buena parte de las historias de abuso se originan dentro
de los círculos sociales más próximos a la víctima, especialmente al interior de la
familia y conocidos cercanos (Herrero Ibarra, 2020).
género que resulte en daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico a las mujeres,
incluyendo amenazas, coerción o privación de la libertad tanto en el ámbito público
como en el privado (ONU mujeres, 2020).
El modelo ecológico ha demostrado ser de gran utilidad para asociar factores cuando
el abuso sexual ya se ha presentado, sin embargo, identificar plenamente los
estadios previos al abuso sexual suele ser una tarea complicada debido a que, dado
que el fenómeno ocurre a disposición del agresor y cada experiencia de abuso es
individualizable.
La identificación del perfil del agresor sexual es y ha sido durante los últimos
años un área de interés para las ciencias jurídicas, la sociología y la psicología.
Cuadro 2. Modelos teóricos que abordan las conductas del agresor sexual
Modelo Empleado de manera consistente para explicar el abuso sexual infantil, retoma
conductual la importancia de experiencias tempranas de condicionamiento en las que el
agresor recuerda su propio abuso y esa fantasía adquiriría propiedades
sexuales de excitación.
Teoría del apego El apego inseguro predispone a necesidades de dominio de las relaciones.
Se estima que las mujeres que han sufrido una agresión sexual tienen mayor
probabilidad de desarrollar Trastorno pro Estrés Postraumático y síntomas
depresivos. Así, la mayoría de los estudios muestra que una buena parte de las
mujeres víctimas de violencia sexual presentan conductas de temor, ansiedad y
aversión a las relaciones sexuales.
Los efectos de este estado depresivo son más frecuentes y agudos entre las
mujeres cuyo agresor era su pareja, familiar o conocido (Lövestad et al., 2017). En
este sentido, la victima tiende a desarrollar un estado de hipervigilancia y
pseudoparanoia, tendiendo a perder la confianza progresivamente de los sujetos en
su entorno, lo que agudiza aún más la sensación de soledad y desesperanza, que
afecta no solo al estado de ánimo sino además a su bienestar físico.
Un estudio llevado a cabo por Sachs-Ericsson et al., (2014) concluyo que las
personas que habían sufrido violencia sexual presentaban una autoestima menor
que aquellas que no lo habían sufrido y a su vez, estos se asociaban con diversas
complicaciones y síntomas psicológicos.
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A nivel fisiológico se han realizado estudios que identifican una relación entre
un antecedente de abuso sexual y afectaciones en sistema cardiovascular y
endocrino, además de alteraciones en la estructura cerebral tales como la perdida de
la densidad neuronal y la calidad de las conexiones dendríticas o la pérdida total o
parcial de estas que afectan la capacidad cognitiva y de autonomía de una parte de
las víctimas de violencia sexual.
Han sido muy diversos los aspectos en los que se ha analizado este fenómeno
(desde el impacto en el embarazo, alteraciones cardiovasculares, percepción de
técnicas o procedimientos invasivos, has aparición de lesiones) para tratar de
averiguar si se podía establecer un nexo de unión entre la aparición de los mismos y
ser víctima de una violación.
Las víctimas de abuso sexual infantil callan el suceso del abuso; esto
en gran medida depende de la edad del menor, el tipo de vínculo que tiene
con el abusador y las concepciones sociales que tiene sobre la infancia y la
sexualidad. Generalmente, cuando se guarda silencio por parte del niño,
probablemente sea porque aún no tiene edad suficiente para comprender lo
que está sucediendo, no sabe expresar con palabras lo sucedido, ha sido
persuadido o amenazado para que no hable, por vergüenza o culpa; en
caso de creer ser cómplices o que han provocado los hechos, piensan que
nadie les va a creer o que van a ser castigados por eso (Párr. 9).
Por otra parte, el agresor es una persona que representa autoridad hacia la
víctima, por lo tanto, el abuso sexual se convierte en un secreto.
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Se plantean las dos fases del síndrome por trauma post abuso; menciona
que la víctima recurre a estados de llanto, sollozos, sonrisa o risa calmada y muy
controlada, pánico, sentimientos de shock y adormecimiento, enmascarar
sentimientos y actuar como si todo estuviera bien, vergüenza, culpa, ira, deseos
de venganza o temor a un nuevo asalto.
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Con los pacientes que han sufrido abusos, este proceso de apoyo debe
ampliarse considerablemente. Se anima al paciente a abrazar la parte del yo que
ha sido apartada para no abrumar al ego. Si el paciente se resiste, cuanto más no
"intente" cambiar, las ideas, sentimientos y experiencias que surjan producirán el
cambio de forma natural con el tiempo (Beisser, 1970). Esto requiere paciencia y
voluntad para "permanecer con lo que está sucediendo" en el momento de la
conexión.
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Los adultos que sobreviven a los abusos suelen quedarse sin las
herramientas adecuadas para vivir plenamente en el mundo. Sentirse víctima,
impotente, atormentado, abandonado, impotente, vacío y solo son quejas
habituales de estos pacientes. La fragmentación y la escisión del "falso" y del
"verdadero" yo son un resultado directo del impacto psicosocial en los adultos
supervivientes de los abusos. Los niños hacen "lo mejor que pueden" basándose
en lo que les modelaron sus cuidadores, pero cuando se convierten en adultos se
quedan cortos. La ira, la dificultad en las relaciones y la continuación interna del
abuso se observan comúnmente en los sobrevivientes del abuso (Farmer, 1989).
Por razones de diagnóstico, los adultos supervivientes de abusos presentan
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Los pacientes que han sufrido abusos necesitan contar su historia y sentirse
comprendidos, en lugar de exponerse en exceso al momento presente, que es lo
que propugna la primera terapia gestáltica. Una vez que la persona se siente
comprendida, el terapeuta ayuda a crear un significado en la propia relación. Esta
validación de la experiencia subjetiva permite al cliente actuar sobre su sistema de
creencias personal. Los esfuerzos fenomenológicos piden que el terapeuta deje de
lado sus sistemas de creencias y acepte a la persona tal y como es, a pesar de las
diferencias y los sentimientos negativos que surjan en el trabajo.
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Así como lo señala el marco teórico, las mujeres víctimas de abuso sexual
desarrollan bloqueos en el ciclo de la experiencia, fragmentando su ser, las
mujeres víctimas se vuelven dependientes emocionales de su agresor, teniendo
como resultado la presencia de la somatización ante las emociones reprimidas
durante/después del acontecimiento mencionado.
Por tanto, leyendo los testimonios de dos mujeres violentadas, así como: El
protocolo tipo y del debido proceso legal. Delito de violación. El 50% de mujeres
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víctimas de abuso sexual, abandonan el proceso terapéutico que les brindan las
autoridades al demandar el agresor
…los retos más importantes para los y las servidores públicos/as del Centro de
Justicia para las Mujeres en el delito de VIOLACION o en otros de esta naturaleza será
básicamente, abandonar la idea de que la palabra o los hechos relatados por la victima
que ha sufrido una violencia sexual, requiere indefectiblemente de una confirmación, a
través del tradicional dictamen del médico forense o cualquier médico que certifique la
existencia de datos reveladores de la violencia sexual (párr.4).
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Los estudios han revelado que entre 36% y 62% de todas las víctimas de
agresión sexual tienen 15 años de edad o menos (véase el cuadro
en la hoja de información sobre violación y agresión sexual). Las
investigaciones indican que el maltrato sexual del niño es algo
común (pág. 16).
En efecto la violencia hacia las mujeres ha incrementado cada año, un
ejemplo de lo que se vive en México es ciudad Juárez, adonde al aumentar los
empleos hacia el sexo femenino, el número de mujeres desaparecidas fue cada
día mas mayor. Así mismo el micro machismo sigue siendo aprendido por las
nuevas generaciones, teniendo como resultado el incremento de la violencia hacia
la mujer.
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3.1. Conclusión
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Nos recuerda que hay una reacción entre este tipo de experiencias y el
establecimiento de relaciones interpersonales cargados de temores ante la
vulnerabilidad, a posibles revictimizaciones y a la desconfianza generalizada hacia
parejas sexuales. Aunque parezca paradójico, coexisten con una tendencia a
depender o a idealizar a sus parejas. Debido a una excesiva preocupación por lo
sexual tiende a sexualizar vínculos no sexualizados y a tener una historia de
múltiples parejas con contacto superficial que se abandonan a medida que los
vínculos comienzan a profundizarse.
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insomnio y depresión. Estos síntomas suelen persistir durante mucho tiempo, años
y, a veces, durante toda la vida, impidiendo de esta manera, a la víctima y aun a
su familia, la adaptación a la vida y la resolución adecuada de las crisis normativas
y no normativas del desarrollo.
Entre ellos, encontramos las adicciones a drogas y/o alcohol, las tendencias
suicidas y otras conductas dirigidas a disminuir la tensión (por ejemplo: cualquier
comportamiento impulsivo y/o de riesgo, las automutilaciones, las conductas
sexuales compulsivas, los trastornos compulsivos de la alimentación, el gasto y/o
el juego compulsivo). Con estos comportamientos se consigue: Atenuar
transitoriamente los estados emocionales negativos, ciertos niveles de euforia,
desconectar de los recuerdos traumáticos y dolorosos, posibilidad de expresar
emociones tales como la rabia, la tristeza que no se podrían expresar en otro
contexto, cierta autonomía de la necesidad de contar con un grupo de pares para
recibir apoyo y contención.
Siguiendo con Intebi 2012 otra de las secuelas internalizadas del abuso/
violación son las alteraciones emocionales, las más frecuentes en las víctimas de
agresiones sexuales y malos tratos crónicos son la depresión y la ansiedad.
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Cabe mencionar que, las diferentes autoras de estudios sobre las secuelas
psicológicas de la violencia sexual, y más específicamente de la violación,
coinciden en señalar la profunda duda que embarga a la víctima en torno a sí
misma, en torno a la culpabilizarían por las fantasías –vividas ahora como
premonitorias, como revertidas siniestramente contra sí misma-, a la
culpabilización por “provocar” o por no haber previsto suficientemente la situación
de peligro, a la culpabilización por no haberse resistido “suficiente”, por haberse
quedado paralizada, “como si aceptara pasivamente” aquella cosa terrible que le
estaba sucediendo, a la culpabilización por intentar salvar la vida ante un peligro
que, posteriormente , pudo pensarse como algo banal, como algo que no ponía en
riesgo la vida, culpabilización por intentar, de manera activa, formas distintas de
sometimiento que satisfaga las fantasías y el ansia de dominio de su victimario.
Por último, es importante mencionar que, por el temor hacia la propia vida,
se sede al control del victimario, generando así, un sentimiento de culpa y
vergüenza por parte de la víctima, por haberse permitido el contacto, por haber
cedido a la agresión, e incluso por que el cuerpo responde sexualmente ante el
acto, formando así, la idea de la indefensión y de la responsabilidad de la agresión
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Para concluir las personas que han sufrido esta experiencia solo el 30%
(Echeburúa & Corral,2010, citado por Bermudez y Blanco,2020,p.31)de ellas
tienen sintomatología severa a largo plazo y los demás pueden desatar un tipo de
secuelas, en este caso se evidencian secuelas emocionales como la dependencia,
desconfianza y baja autoestima, ,el papel de los factores de apoyo como la familia,
las relaciones sociales y en este caso la relación amorosa, ayuda a la reducción
del impacto psicológico siendo así sumamente importante para el afrontamiento
del suceso.
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3.2. Sugerencias
El abuso sexual son actitudes que son aprendidas por el sexo opuesto,
fortaleciendo de esta manera el micromachismo/machismo, por ello es importante
primeramente como primer paso es entender por qué ocurre, la causa
fundamental de la violencia sexual es la opresión, la cual es la experiencia de la
amplia, injusticia sistémica y repetida. Muchos individuos y grupos viven opresión
diariamente, lo que significa que aprendemos a clasificar la misma humanidad, sin
importar que daño repercute hacia la otra persona.
Es por ello que considero importante primero indagar el cómo inicia los
rasgos de la violencia, teniendo en cuenta la historia de vida del agresor y de la
víctima, para saber cómo aprendió que debía actuar y por miedo a que.
Teniendo los resultados de dicha indagación que se llevaría a cabo con una
entrevista escrita o verbal, esto dependiendo de los recursos y limitaciones que
conlleve la población en la cual se tiene como objetivo mermar la violencia, se
plantea un proceso educativo a nivel primeria, de esta manera se tendrá el vínculo
con los padres de familia o tutores, y posterior a ellos se adecua talleres
vivenciales, adonde los padres de familia aprendan que es la educación sexual, ai
mismo los valores, teniendo como objetivo que lo aprendido sea reflejado con los
hijos ya que habrá un cambio de conducta.
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Así pues, el aprender valores e iniciando con los pueblos alejados al puerto
seria iniciar realmente desde la raíz, ya que los programas se enfocan adonde hay
más poblaciones, dejando como última opción a las personas de la montaña y es
por ello que cuando una mujer ecnia emigra a otro lugar como lo es la ciudad, se
auto considere en el sexo vulnerable, ya que es la manera que lo aprendió.
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Al igual el amor propio, dando talleres adonde las actividades sean de auto
cuidado, que sepan cuál es su límite y que el decir no, siempre y cuando ellas se
sientan bien es lo correcto.
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