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Intervención Psicosocial desde el gabinete de Psicología e instituciones


penitenciarias en la violencia de género

Chapter · January 2010

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Beatriz Montes-Berges
Universidad de Jaén
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VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES:
DESCRIPCIÓN EN INTERVENCIÓN BIOPSICOCIAL.
BEATRIZ MONTES BERGES
Universidad de Jaén

Resumen
En este capítulo abordamos la intervención en el marco de la violencia de
género. Así, por un lado, y tras una breve introducción sobre todas las consecuencias
que la violencia de género puede tener en las víctimas, explicamos cómo se realiza esta
evaluación así como las características de los programas individuales y grupales,
deteniéndonos en el programa de atención a las víctimas de violencia de género que
llevamos a cabo en el Gabinete de Psicología de la Universidad de Jaén. Por otro lado,
también nos centramos en las características y peculiaridades de los agresores, y las
técnicas de tratamiento que se aplican en estos casos, tratando de manera más detallada
el Programa de tratamiento que se lleva a cabo en las Instituciones Penitenciarias.

Palabras Clave: Violencia de género, agresores, víctimas, tratamiento.

Abstract
In this chapter we focused on the intervention in the gender violence framework.
A brief introduction on all the consequences that the victims could suffer caused by this
gender violence appeared. Secondly, we explained battered women’s assessment as well
as the individual and group treatment program characteristics. We focus on the battered
women attention program that we use in the Psychology Office of the University of
Jaén. Finally, we also centred on aggressors’ characteristics and peculiarities, and the
treatment methods applied in these cases, dealing in detail the treatment program that is
carried out in the Penitentiary Institutions.

Keywords: Gender violence, aggressors, victims, treatment.


Introducción
Como hemos visto previamente en otros capítulos, la violencia de género es la
causa fundamental de reducción de la calidad de vida, daño y muerte (Hughes y Jones,
2000; Resnick, Acierno, Holmes, Dammeyer y Killpatrick., 2000). Las consecuencias
de esta violencia en la salud física y mental de las víctimas, que usualmente persisten
aún cuando el maltrato ha desaparecido, serán más graves mientras más severo haya
sido el maltrato (Follingstad, Brennan, Hause, Polek y Rutledge, 1991). Estas
consecuencias pueden abarcar desde el plano físico (síndromes de dolor crónico,
discapacidad, fibromialgia, fracturas, colon irritable, abrasiones, daño ocular, reducción
del funcionamiento físico, etc.), hasta el plano psicológico y conductual (depresión,
ansiedad, fobias y trastornos de pánico, baja autoestima, inactividad física, trastorno de
estrés postraumático, conducta suicida, etc.), pasando por consecuencias sexuales y
reproductivas (trastornos ginecológicos, infertilidad, disfunción sexual, complicaciones
en el embarazo o aborto, enfermedades de transmisión sexual, embarazo no deseado,
etc.) y llegando hasta resultados fatales como homicidio, suicidio, mortalidad maternal
o relacionada con el SIDA (tomado del Informe Mundial de Violencia y Salud de la
OMS, revisado en Krug, Dahlberg, Mercy, Zwi y Lozano, 2002).
Teniendo en cuenta, tanto las consecuencias variadas que la violencia de género
puede generar, así como las peculiaridades que el ámbito íntimo en que se ejerce
provoca tanto en las víctimas como en el agresor, vamos a centrarnos en la evaluación y
tratamiento de las víctimas y en el tratamiento de los agresores.

Tratamiento de las víctimas


CARACTERÍSTICAS Y PECULIARIDADES DEL TRATAMIENTO A VÍCTIMAS
DE VIOLENCIA DE GÉNERO
La evaluación o tratamiento de las víctimas de violencia de género se hace
indispensable que el/la profesional sea una persona especialmente cuidadosa y
empática, que anime a la mujer a hablar y confiar. Por la propia situación que estas
mujeres han vivido, presentan una autoestima muy baja que les hace sentir vergüenza
por lo que han experienciado y hasta donde se han dejado avasallar. Si el/la profesional
no realiza la acogida en un ambiente de confianza total, las probabilidades de que la
mujer no vuelva a este servicio concreto y aún más, a pedir ayuda en general, son
bastante elevadas. Esto significa que crear este ambiente debe ser el objetivo principal
de la primera entrevista, dejando que se ella la que lleve el ritmo y la que decida lo que
le apetece contar en primeros términos. En ningún caso debe aparecer el más mínimo
reproche o sorpresa por lo que la mujer ha vivido que, lejos de resultar de apoyo para
ella, la hará sentir peor, generando lo que se conoce por victimización secundaria.

EVALUACIÓN Y TRATAMIENTO DE LAS VICTIMAS DE VIOLENCIA DE


GÉNERO
El Gabinete de Psicología de la Universidad de Jaén cuenta desde su fundación
con un Programa de atención a las mujeres víctimas de violencia de género y detección
precoz de la violencia. Los objetivos fundamentales de este programa son:
Detectar a mujeres víctimas de malos tratos de la comunidad Universitaria
(alumnas, PDI y PAS, así como sus familiares así como dar cobertura a las
necesidades derivadas de su situación.
Acoger a la víctima y promover su toma de conciencia de que lo que les pasa no
es “normal” y que puede hacer algo para cambiar su situación, ayudándole en la
expresión y comprensión de su problemática.
Orientar, asesorar e informar de los servicios que ofrece el Instituto Andaluz de
la Mujer (IAM), en colaboración con esta institución.
Valorar el riesgo potencial que la mujer tiene de homicidio en función de la
peligrosidad del agresor.
Abordar las estrategias urgentes de afrontamiento en su caso.
Evaluar psicológicamente a la víctima.
Elaborar un plan de seguridad individualizado que incluya cómo reaccionar y
actuar durante una agresión, cómo organizar un plan de huida y qué hacer
después de una agresión.
Ofrecer un servicio de asistencia psicológica básica en el que se puedan tratar
los siguientes problemas: elevados niveles de ansiedad, depresión, baja
autoestima, falta de estrategias para la resolución de conflictos, patrones de
comunicación inapropiados y falta de habilidades sociales.
Ofrecer un programa de terapia grupal en colaboración con el IAM.
Entrenar en competencias y habilidades para la educación adecuada de los hijos
de estas mujeres.
Orientar sobre posibles problemáticas manifiestas en los hijos.

Estos objetivos se llevan a cabo mediante 3 servicios fundamentales: el Servicio


de Orientación Básica, el Servicio de Asistencia Psicológica y el Servicio de Atención a
los Hijos.
1. SERVICIO DE ORIENTACIÓN BÁSICA: es el que se encarga de la
acogida y evaluación de la mujer. En la acogida realizada en las primeras entrevistas
(normalmente dos, pero algunas veces puede incrementarse a tres o cuatro según el
nivel emocional con el que llegue la mujer), el objetivo fundamental de este servicio es
promover que vuelva al servicio en la próxima cita, concienciándola de que lo que le
pasa no es normal ni es culpa suya, sino que es resultado del comportamiento de su
pareja. Para evitar al máximo el abandono del servicio, se hace imprescindible
establecer la segunda cita en un breve plazo de tiempo, siendo lo ideal que haya dos o
tres días de separación entre ambas. Una vez recogidos los datos fundamentales, se
llevará a cabo la evaluación a través de las escalas y cuestionarios oportunos. En
función de los resultados de la evaluación, se llevarán a cabo los programas de
tratamiento necesarios estableciendo una pauta de actuación personalizada para cada
mujer, en la que se priorizan aquellos aspectos que estén más afectados. Además, todos
estos datos nos servirán para realizar un informe para el juzgado, en el caso de ser
solicitado, acerca de que la mujer es usuaria de un programa de atención a mujeres
maltratadas y que presenta sintomatología compatible con la historia sufrida de
violencia de género.
De esta manera, la evaluación de un caso de violencia de género consta de cuatro
partes. Las tres primeras las recogemos mediante la información obtenida a partir del
material elaborado expresamente para este programa (Anexo 1). Uno de los propósitos
para no interrumpir el relato de la mujer es escribir delante de ella lo menos posible,
intentando que se limite a los datos personales. Por ello, los ítems referidos a la historia
de violencia física, sexual y psicológica están preparados para ir sólo subrayando los
que aparezcan en el transcurso de su narración. Las cuatro partes de las que consta la
evaluación son:
1) Datos:
En este apartado se recoge su nombre, lugar y fecha de nacimiento, con
quién vive, si trabaja, si tienes hijos y edades de los mismos, si ha acudido
previamente a algún profesional, si es la primera vez que solicita un servicio de
estas características, qué ha hecho para resolver el problema, si ha interpuesto
denuncia, etc.
2) Historia de la violencia de género:
Aunque como hemos comentado anteriormente, lo mejor es que el ritmo de
la conversación lo lleve la mujer, es recomendable que en el transcurso de la
misma, tengamos claro los siguientes aspectos: cuándo comenzó, si ha habido
violencia física y de qué tipo (sacudidas, bofetadas, patadas, empujones, heridas
con arma blanca, etc.), si ha habido violencia psicológica y de qué tipo (control,
aislamiento, celos, acoso, humillación, amenazas, indiferencia ante las demandas
afectivas, actos de intimidación, dar portazos, jugueteo con cuchillos, romper
objetos, críticas destructivas, burlas, gritos, insultos, manipular a través de los
hijos; abuso de autoridad: exigir siempre, mandar, tomar unilateralmente
decisiones que afectan a la pareja; falta de respeto: interrumpiendo, no
escuchando ni respondiendo, distorsionando el sentido de las palabras, hablando
mal de los amigos y de la familia de ella; abuso de confianza: mintiendo,
ocultando información, tendiendo trampas, siendo celoso patológicamente;
Incumpliendo promesas: no respetando acuerdos, no compartiendo
responsabilidades; negación afectiva: no expresando ningún sentimiento, no
dando apoyo, atención o respetando los sentimientos o pensamientos de la
mujer; existe minimización de la mujer: desmintiendo o culpabilizando a la
víctima, quitándose de encima la responsabilidad de las conductas abusivas;
existe control económico: interfiriendo en el trabajo de la mujer, no
permitiéndole trabajar, negándole o cogiéndole su dinero, quitándole las llaves
del coche, etc.; existe conducta autodestructiva: amenazando con el suicidio o
con conductas autolesivas, etc.; hay aislamiento: evitando o dificultando que vea
a amigos o familiares, controlando las llamadas telefónicas, diciéndole donde
puede o no puede ir; existe acoso: haciendo llamadas o visitas sin aviso,
siguiéndola, comprobando donde está continuamente, creándole situaciones
embarazosas o violentas en público, negándose a irse cuando ella se lo pide.
3) Peligrosidad del agresor:
Antes de que termine la primera entrevista resulta fundamental evaluar los
factores de riesgo que tiene la mujer en función de la peligrosidad del agresor.
Elaborando un listado de estos factores provenientes de diversas fuentes
(Campbell, 1995; Easteal, 1993; Ferreiro, 1995; Hart, 1988; Villavicenco y
Sebastián, 1999; Walker, 1994) hay que tener en cuenta:
a. Posesión de armas
b. Intentos de suicidio
c. Heridas graves en episodios anteriores
d. Sexo forzado
e. Abuso de drogas
f. Trastorno psiquiátrico grave
g. Amenazas
h. Comportamiento obsesivo, celos patológicos, dominancia
i. Historial de violencia en la familia de origen
j. Antecedentes de violencia con otras parejas
k. Grado en que se percibe así mismo como perjudicado
l. Aumento de la violencia con el tiempo
m. Antecedentes delictivos penales
n. Tiene otra relación paralela
o. Maltrata a sus hijos
p. Haber sido agredida durante un embarazo
q. Aumento de la frecuencia de las agresiones físicas
r. Expansión de los episodios de la violencia a espacios públicos
s. Ideaciones suicidas
t. Depresión cíclica
u. Comentarios a terceros sobre ideas de suicidio u homicidio
v. Persecución de la víctima a partir de la separación
Cuantos más factores de peligrosidad presente el agresor, mayor riesgo existe
la mujer de ser agredida o asesinada por su (ex)pareja. Consideraremos que
existe un riesgo elevado cuando el agresor muestre 3 factores, en cuyo caso, y
especialmente si la mujer no es consciente del peligro que sufre, es importante
explicar esto a la mujer con el fin de que evite al agresor todo lo posible.
4) Consecuencias psicológicas de la violencia de género:
Este apartado fundamentalmente se evalúa en una segunda entrevista a través
de una serie de escalas y cuestionarios sobre las consecuencias psicológicas más
frecuentes estas mujeres. Concretamente, en el Gabinete utilizamos las
siguientes:
a. Sintomatología Asociada: Escala de Inadaptación (Echeburúa y Corral,
1987a)
b. Depresión: Inventario de Depresión de Beck (BDI) (Beck, Ward,
Mendelson, Mock, y Erbaugh, 1961), Satisfacción con la Vida (SWLS)
(Diener, Emmons, Larsen, Griffin, 1985; adaptación española de
Cabañero y cols., 2004) y Escala de Conductas Objetivo (Echeburúa y
Corral, 1987b).
c. Ansiedad: Inventario de Ansiedad Estado-Rasgo (STAI) (Speilberger,
Gorsuch y Lushene, 1970; adaptación española por Speilberger, Gorsuch
y Lushene, 1982).
d. Síndrome de Estrés Postraumático: Escala de Gravedad de Síntomas del
Trastorno de Estrés Postraumático (Echeburúa, Corral, Amor,
Zubizarreta y Sarasua, 1997).
e. Autoestima: Escala de Coopersmith (1981) y Escala de Autoestima de
Rosenberg (Rosenberg, 1965; adaptación española por Fernández-
Montalvo y Echeburúa, 1997)
f. Habilidades Sociales: Escala de Asertividad (Gambril y Richey, 1975;
adaptación al castellano de Carrobles, Costa y del Ser, 1975) y Escala de
Angustia y Evitación Social (Watson y Friend, 1969; adaptación
española por Bobes y cols., 1999).
g. Habilidades para la Resolución de Problemas: COPE (Carver, Scheier y
Weintraub, 1989; adaptación española de Crespo y Cruzado, 1997).
Por último, aunque fuera ya de la evaluación realizada, el Servicio de
Orientación Básica se encarga de elaborar un plan de seguridad individualizado, basado
en el que utilizan Labrador, Paz, de Luis y Fernández-Velasco (2005) en su programa.
Este plan tiene tres objetivos esenciales: a) identificar los factores de riesgo del entorno
de la víctima; b) incrementar la seguridad en el entorno habitual de la víctima; y c)
diseñar medidas de seguridad individualizadas que incrementen su seguridad, entre las
que se encuentran la ruptura de la convivencia con el maltratador, la obtención de una
orden de alejamiento u otra medida cautelar, y conseguir apoyo familiar o social.

2. SERVICIO DE ASISTENCIA PSICOLÓGICA BÁSICA: En este servicio se


lleva a cabo tanto tratamiento individual como grupal. El tratamiento individual es
personalizado de acuerdo a la priorización realizada por el Servicio de Orientación
Básica, pudiendo la mujer ser tratado como máximo en seis programas diferentes: a)
Programa de Depresión y Autorreforzamiento; b) Programa de Ansiedad y Relajación;
c) Programa de Autoestima y Autoconcepto; d) Programa de Habilidades Sociales; f)
Patrones de comunicación; e) Programa de Estrategias de resolución de conflictos o
problemas. Después de cada sesión la mujer contesta la Escala de Percepción Global de
cambio (Echeburúa y Corral, 1987c) con una doble finalidad: que la terapeuta evalúe su
mejora y que la mujer sea consciente de ésta.
El tratamiento grupal consiste en la creación de grupos de intervención en los que la
terapeuta es una psicóloga del Instituto de la Mujer que se traslada a la UJA para
realizar estas sesiones. El tratamiento en grupo les sirve para descubrir que su
problemática es mucho más compartida por otras mujeres de lo que creían previamente,
y les ayuda a entender que la anomalía está en la situación de violencia que han vivido y
no en ellas ni en su comportamiento. Asimismo, el hecho de participar en un grupo les
obliga a poner en prácticas las habilidades sociales, los patrones de comunicación y las
estrategias de resolución de problemas que han aprendido, recobrando la confianza en
las relaciones sociales y consiguiendo generar nuevas redes de apoyo social. Echeburúa
y Corral (1998) señalan que además de estas dos ventajes existen otras que no conviene
olvidar: desarrollo de la independencia personal, puesto que el tener que relacionarse en
grupo estimula la confianza en sus recursos y debilita la dependencia de la terapeuta;
compromiso público de cambio ante el resto del grupo que resulta muy motivante para
realizar las tareas que se vayan mandando para realizar en casa; y aumentar la sensación
personal de utilidad y la autoestima puesto que se convierten en apoyo social de otras
mujeres. Sin embargo, no todas las mujeres víctimas de violencia de género pueden ser
tratadas en grupo. Concretamente, la terapia de grupo está contraindicada, por una parte,
en los casos de mujeres agresivas, carentes de motivación o que requieren una atención
mayor, puesto que estas mujeres son incapaces de descentrarse de ellas mismas y
atender a lo que ocurre en el grupo. Por otra, también son excluidas de la terapia grupal
las mujeres con depresión grave, porque no se implicarían en las tareas del grupo y
podrían desmoralizar al resto de componentes.

3. SERVICIO DE ATENCIÓN A LOS HIJOS: Por último, en el caso de que las


mujeres tengan hijos, también contamos con un Servicio de Atención a los hijos. Este
servicio parte de la idea de que el maltrato a la mujer también tiene repercusiones
importantes en los hijos, derivadas de tres aspectos fundamentales: a) a menudo son
también víctimas de la violencia del agresor; b) el simple hecho de ser testigos de la
violencia provoca importantes consecuencias negativas tanto en su desarrollo físico y
psicológico como emocional y social; c) el propio estado en que el agresor ha sumido a
la madre conlleva también repercusiones negativas para los hijos. En este sentido, este
servicio persigue dotar o reforzar en la mujer todas las habilidades necesarias para
atender a sus hijos de la manera más eficaz posible que, en muchos casos, puede haber
olvidado por causa del maltrato al que ha estado siendo sometida.

Tratamiento de los agresores


CARACTERÍSTICAS Y PECULIARIDADES DEL TRATAMIENTO A
AGRESORES DE VIOLENCIA DE GÉNERO.
Las posibilidades de que los agresores de las situaciones de violencia de género
vuelvan a maltratar a su pareja u otra en el futuro son muy grandes. Las medidas
penales han demostrado no ser nada disuasorias de la conducta violenta. Por otro lado,
las terapias psicológicas sólo muestran efectividad cuando el paciente reconoce y acepta
su problema y está motivado para hacer todo lo necesario para solventarlo, por lo que,
de manera general, tampoco constituyen ninguna solución para la modificación de esta
conducta. Por esta razón, el tratamiento para los agresores suele inscribirse dentro de las
terapias coactivas. Entre los agresores que reciben este tratamiento hay un 81% de éxito
y un 69% pasados 3 meses después de la finalización del programa (Echeburúa y
Fernández-Montalvo, 1997). Shephard (1992) explica que las diferencias en la
reincidencia parecen depender más de las características personales de los maltratadores
que del programa concreto de terapia coactiva. Estas características son: edad del
agresor, situación económica desahogada, comienzo tardío de la violencia y la
realización de un mayor número de sesiones de pareja (Harris, 1986).
Las terapias se ofrecen al agresor como alternativa al cumplimiento de una medida
penal, lo suficientemente grave como para que el agresor esté motivado a seguir un
tratamiento psicológico. La terapia coactiva posee unas peculiaridades muy concretas
con respecto a otro tipo de terapias. En primer lugar, es imprescindible que el terapeuta
conozca todos los datos que acontecieron en la situación de maltrato, así como todas las
pruebas que lo evidencien. En segundo lugar, el agresor ha de entender que el terapeuta
llevará a cabo una doble tarea: la propia como terapeuta y la de evaluación para que el
juez tome la decisión final de las medidas a adoptar en su caso.
Siguiendo a Echeburúa (1994), el programa de tratamiento de estos agresores
parte de la consideración de una serie de decisiones iniciales sobre el mismo:
Formato individual o grupal
Tratamiento paralelo del alcoholismo y/o abuso de drogas
Posibilidad de una terapia de pareja una vez finalizado con éxito el
tratamiento individual o grupal
Duración aproximada de la terapia (desde tres meses a un año)
Frecuencia de las sesiones (una a la semana)

En relación a la elección de sesiones individuales o grupales para el agresor, hay


divergencia de opiniones. Algunos autores parten de la idea general de que el
tratamiento grupal supone dos ventajas cruciales: la primera es que el grupo supone la
superación de los mecanismos de defensa puesto que el maltratador se hace consciente
de que su caso no es el único; la segunda se centra en la importancia del modelamiento
del comportamiento de los agresores que se acaben de incorporar al grupo en relación a
los que lleven más tiempo y por lo tanto, manifiesten un avance visible. Sin embargo,
otros autores (Labrador, Paz, de Luis y Fernández-Velasco, 2005) creen que la terapia
grupal está especialmente desaconsejada en el caso de conductas agresivas.
Los objetivos fundamentales del tratamiento con agresores son (Echeburúa,
1994): terminar con la violencia física, sexual y de destrucción de la propiedad (no tanto
la psicológica que es más sutil y por tanto, más difícil de detectar), la asunción de la
responsabilidad de sus actos; fomentar el sentimiento de autocontrol; desarrollar las
habilidades de comunicación y de conducta asertiva; y tomar conciencia de la relación
entre la educación recibida y a violencia hacia las mujeres.

EVALUACIÓN Y TRATAMIENTO INDIVIDUAL


En las primeras fases resulta primordial evaluar tanto el grado de peligrosidad actual
del agresor como el nivel de motivación para el cambio (Corsi, 1995), puesto que la tasa
de abandono de la terapia roza el 50% (Echeburúa y Fernández-Montalvo, 1998). El
paciente sólo estará listo para empezar con el tratamiento en el momento que acepte que
él es, sino el culpable, al menos el responsable del daño que le ha producido a su pareja.
(Echeburúa y Fernández-Montalvo, 1998).
Para la evaluación del agresor se suelen utilizar los siguientes instrumentos
(Echeburúa y Fernández-Montalvo, 1998):
a. Entrevista General Estructurada de Maltratadores (Echeburúa y
Fernández-Montalvo, 1997).
b. Cuestionario de Variables Dependientes del Maltrato (Echeburúa y
Fernández-Montalvo, 1997).
c. Inventario de Pensamientos Distorsionados sobre la Mujer y el Uso de la
Violencia (Echeburúa y Fernández-Montalvo, 1997).
d. Inventario de Depresión de Beck (BDI) (Beck, Ward, Mendelson,
Mock, y Erbaugh, 1961).
e. Inventario de Ansiedad Estado-Rasgo (STAI) (Speilberger, Gorsuch y
Lushene, 1970).
f. Escala de Autoestima de Rosenberg (1965).
g. Escala de Inadaptación (Echeburúa y Corral, 1987b).
h. Cuestionario de Satisfacción con el Tratamiento (Larsen, Attkinson,
Hargreaves y Nguyen, 1979).
i. Listado de Síntomas (SCL-90-R) (Degoratis, 1975).
j. Inventario de Manifestación de la Ira Rasgo-Estado (STAXI)
(Speilberger, Gorsuch, Lushene, Vagh y Jacobs, 1988).
k. Cuestionario de Alcoholismo (AUDIT) (Babor, De la Fuente, Saunders
y Grant, 1989).
l. Escala de Ajuste Diádico (DAS) (Spanier, 1976).
m. Escala de Expectativas de Cambio (Echeburúa y Corral, 1987d).

El programa de tratamiento debe seguir según Echeburúa y Fernández-Montalvo


(1998), el siguiente orden: Ira descontrolada, Ansiedad-Estrés, Celos patológicos,
Consumo abusivo de alcohol, Déficits de asertividad y de comunicación, Déficits en la
resolución de problemas, Ideas distorsionadas sobre los roles sexuales y sobre la
violencia como forma de solución de problemas, Déficits de autoestima y Déficits en las
relaciones sexuales. Entre las técnicas de tratamiento más usadas para llevar a cabo el
tratamiento de estos problemas se encuentran la escenificación de la violencia (role-
playing), la autoobservación y registro de las reacciones de ira, la suspensión temporal,
la reestructuración de actitudes, las técnicas de relajación, el entrenamiento en
asertividad y habilidades sociales y las autoinstrucciones encubiertas (Echeburúa,
1994).

TRATAMIENTO GRUPAL
Según Holtzworth-Munroe, Bates, Smutzler y Sandin (1997), la terapia en
grupo con maltratadores consta de entre 10 y 15 sesiones con 1 o 2 terapeutas varones, y
se centra en los siguientes temas:
Enseñar técnicas de suspensión temporal
Abordar los celos
Controlar los hábitos de bebida
Revaluar los sesgos cognitivos
Diseñar estrategias de solución de problemas
Entrenar en relajación
Entrenar en habilidades de comunicación
Enseñar técnicas de afrontamiento de la ira y de control de los impulsos
Echeburúa y Fernández-Montalvo (1997) puntualizan que las sesiones deben
prolongarse al menos durante 4 meses y el seguimiento debe extenderse durante 2 años.
Además, señalan que puede resultar muy útil el hecho de que junto con el terapeuta
aparezca un ex maltratador que actúe como modelo, puesto que de esta manera, se
neutralizarían los mecanismos de negación ayudando a la responsabilización de las
propias conductas mediante atribuciones internas, controlables e inestables.

PROGRAMA DE TRATAMIENTO PENITENCIARIO


Aunque muchas de las peculiaridades generales que ya hemos comentado
continúan apareciendo en el ámbito penitenciario, también es cierto que éste tiene por su
propia esencia de medida punitiva algunas características únicas, como la obligación de
asistencia al programa (con 0% de abandono de la terapia). El programa que se está
llevando a la práctica desde el año 2006 en todas las prisiones de España comprende
una evaluación compuesta por una entrevista y la pasación de una serie de instrumentos.
En la entrevista se pregunta por: a) los antecedentes sociales (familia, colegio, amistad y
relaciones sociales, historia laboral y relaciones de trabajo, relaciones anteriores,
relación con la víctima, relación actual con la víctima e hijos, nueva relación y
proyectos de futuro); b) los antecedentes personales (relaciones y habilidades sociales,
emociones, cogniciones, actitudes, psicopatología); y c) carrera delictiva (exploración
del delito, conducta habitual de maltrato y consecuencias). Los instrumentos que se
usan para la evaluación de los maltratadores internos son:
a. Guía para la Estimación del Riesgo de Violencia (VRAG) (Quinsey, Harris,
Rice y Cormier, 1998). (Adaptación española por Moltó, Toy y Torrubia, 1996).
b. Inventario de Hostilidad de Buss y Durkee (BDHI) (Buss y Durkee, 1957)
(Adaptación española por García-León, Pérez-Marfil, Valencia-Naranjo,
Muñoz-López y Reyes del Paso, 1994).
c. Autobiografía familiar, general y social
d. Autorregistro de emociones
e. Listado de Psicopatía (PCL-R) (Hare, 1991). (Adaptación española por Moltó y
Torrubia, 2000).
f. Inventario Multifásico de Personalidad de Minnesota-2. (MMPI-2) (Butcher,
Dahlstrom, Graham, Tellegen y Kaemmer, 1989) (Edición española en TEA,
1999).
g. Inventario Clínico Multiaxial de Millon-II (MCMI-II) (Millon, 1997)
(Adaptación española por Ávila y Jiménez,1998).
h. Cuestionario Big Five (BFQ) (Costa, McCrae y Die, 1991). (Adaptación
española por Caprara, Barbaranelli y Borgogni, 1995).
i. Inventario de Pensamientos Distorsionados sobre la Mujer y el Uso de la
Violencia (Echeburúa y Fernández-Montalvo, 1997).
j. Índice de Respuesta Interpersonal (IRI) (Davis, 1980) (Adaptación española por
Garrido y Beneyto, 1995).
k. Escala de Autoestima de Rosenberg (1965) (Adaptación española por
Fernández-Montalvo y Echeburúa, 1997).
l. Inventario de Manifestación de la Ira Rasgo-Estado (STAXI) (Speilberger,
Gorsuch, Lushene, Vagh y Jacobs, 1988). (Adaptación española por Miguel-
Tobal, Casado y Cano-Vindel, 2001).
m. Escala de Impulsividad (BIS-10) (Barratt, 1985) (Adaptación española por
Luengo, Carrillo de la Peña y Otero, 1991).

El programa de tratamiento consta de 10 unidades repartidas en 3 bloques


(Documentos Penitenciarios 2. Programa de tratamiento en prisión para agresores en el
ámbito familiar. Grupo de trabajo sobre violencia de género, 2006):
Bloque I. Asunción de la Responsabilidad.
a. Unidad I. Asunción de la responsabilidad y mecanismos de defensa
b. Unidad II. Identificación y expresión de emociones
c. Unidad III. Empatía con la víctima
d. Unidad IV. Distorsiones cognitivas y creencias irracionales.
Bloque II. Control de Emociones.
a. Unidad V. Parte A. Ansiedad
b. Unidad V. Parte B. Celos
c. Unidad V. Parte C. Ira y resentimiento
Bloque III. Entrenamiento en Habilidades
a. Unidad VI. Habilidades de relación y comunicación
b. Unidad VII. Solución de problemas
c. Unidad VIII. Educación sexual
Bloque IV. Cierre
a. Unidad IX. Estilo de vida positivo
b. Unidad X. Prevención de recaídas

Estas unidades se trabajan fundamentalmente en sesiones grupales, aunque


durante el bloque de asunción de responsabilidad las sesiones grupales deben estar
combinadas con sesiones individuales. Este programa entiende como especialmente
conveniente que lo desarrollen dos terapeutas de ambos sexos.

Referencias bibliográficas
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ANEXO 1. MATERIAL PARA LA EVALUACIÓN Y SEGUIMIENTO EN
SESIONES DEL PROGRAMA DE ATENCIÓN A MUJERES MALTRATADAS Y
DE DETECCIÓN PRECOZ DE VIOLENCIA EN LA PAREJA DEL GABINETE DE
PSICOLOGIA DE LA UNIVERSIDAD DE JAÉN.

MATERIAL PARA LA EVALUACIÓN


Y SEGUIMIENTO EN SESIONES

GABINETE DE PSICOLOGÍA

Programa de Atención a Mujeres


Maltratadas y de Detección Precoz de
Violencia en la Pareja

Directora: Dra. Beatriz Montes Berges


PROGRAMA ATENCIÓN MM Y DETECCIÓN PRECOZ

Curso 2008/09

RELACIÓN DE MUJERES ATENDIDAS

DATOS PERSONALES

Nombre Teléfono e-mail


1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
8.
9.
10.
11.
12.
13.
14.
PROGRAMA ATENCIÓN MM Y DETECCIÓN PRECOZ
Curso 2008/09

DATOS PERSONALES DE LA MUJER

Apellidos

Nombre

D.N.I.
Lugar de
nacimiento
Fecha de
nacimiento

Domicilio

Teléfono
Correo
electrónico

Estudios
¿Trabaja?
Actividades de
su interés

¿Con quién
vive?

¿Tiene
hijos/as?
¿Qué edades
tienen los/as
niños/as?
¿Por qué
solicita el
servicio?
¿Es la primera
vez que solicita
un servicio de
estas
características?
¿Es la primera
vez que habla
de esto?
¿Qué ha hecho ¿Se ha ido de casa, etc?
para resolver
este problema?
¿Se ha
interpuesto
denuncia?
¿Está siendo
atendida por
un/a
psicólogo/a
privado/a?

Otras
inquietudes

¿Ha habido violencia física? ¿De qué tipo?


¿Tirones de pelo o del brazo, sacudidas, bofetadas, golpes,
Violencia
puñetazos, empujones?
Física ¿Opresión o afixia?
¿Lanzarle algún objeto?
(subrayar los
¿Usar un cuchillo o arma para herirle?
existentes) ¿Forzar las relaciones sexuales: coito, anales, orales, sin
preservativo?
Otros:
¿Control, aislamiento, celos, acoso, humillación, amenazas,
indiferencia ante las demandas afectivas, actos de intimidación (dar
portazos, jugueteo con cuchillos, romper objetos), críticas
destructivas, burlas, gritos, insultos, manipular a través de los hijos,
etc.?
¿Abuso de autoridad: exigir siempre, mandar, tomar unilateralmente
decisiones que afectan a la pareja?
¿Falta de respeto: Interrumpiendo, no escuchando ni respondiendo,
distorsionando el sentido de las palabras, hablando mal de los
amigos y de la familia de ella?
¿Abuso de confianza: mintiendo, ocultando información, tendiendo
trampas, siendo celoso patológicamente?
¿Incumpliendo promesas: no respetando acuerdos, no compartiendo
Violencia responsabilidades?
¿Existe negación afectiva: no expresando ningún sentimiento, no
Psicológica
dando apoyo, atención o respetando los sentimientos o pensamientos
(subrayar los de la mujer?
¿Existe minimización de la mujer: desmintiendo o culpabilizando a
existentes)
la víctima, quitándose de encima la responsabilidad de las conductas
abusivas?
¿Existe control económico: interfiriendo en el trabajo de la mujer, no
permitiéndole trabajar, negándole o cogiéndole su dinero, quitándole
las llaves del coche, etc.?
¿Existe conducta autodestructiva: amenazando con el suicidio o con
conductas autolesivas, etc.?
¿Hay aislamiento: evitando o dificultando que vea a amigos o
familiares, controlando las llamadas telefónicas, diciéndole donde
puede o no puede ir?
¿Existe acoso: haciendo llamadas o visitas sin aviso, siguiéndola,
comprobando donde está continuamente, creándole situaciones
embarazosas o violentas en público, negándose a irse cuando ella se
lo pide?
Posesión de armas 
Intentos de suicido 
Heridas graves en episodios anteriores 
Sexo forzado 
Abuso de drogas 
Trastorno psiquiátrico grave 
Amenazas 
Comportamiento obsesivo, celos patológicos, dominancia 
Historial de violencia en la familia de origen 
Antecedentes de violencia con otras parejas 
FACTORES
Grado en que se percibe así mismo como perjudicado 
DE RIESGO
Aumento de la violencia con el tiempo 
Antecedentes delictivos penales 
Tiene otra relación paralela 
Maltrata a sus hijos 
Aumento de la frecuencia de las agresiones físicas 
Expansión de los episodios de la violencia a espacios públicos 
Ideaciones suicidas 
Depresión cíclica 
Comentarios a terceros sobre ideas de suicidio u homicidio 
Persecución de la víctima a partir de la separación 
PROGRAMA ATENCIÓN MM Y DETECCIÓN PRECOZ Curso 2008/09

Nombre ______________________________________________________

CALENDARIO DE ATENCIÓN

MODALIDAD Individual Colectiva

FECHA
HORA
______________________________________________________
______________________________________________________
______________________________________________________
TEMAS QUE SE ______________________________________________________
TRATARON ______________________________________________________
______________________________________________________
______________________________________________________
______________________________________________________

PROGRAMA ATENCIÓN MM Y DETECCIÓN PRECOZ Curso 2008/09

Nombre ______________________________________________________

CALENDARIO DE ATENCIÓN

MODALIDAD Individual Colectiva

FECHA
HORA
______________________________________________________
______________________________________________________
______________________________________________________
TEMAS QUE SE ______________________________________________________
TRATARON ______________________________________________________
______________________________________________________
______________________________________________________
______________________________________________________
PROGRAMA ATENCIÓN MM Y DETECCIÓN PRECOZ
Curso 2008/09

NOMBRE

SESIONES GRUPALES
1º SESIÓN
________________ Asiste  No Asiste 
Fecha

Inquietudes /
Motivo de la
sesión

Temas que se
tratan

Orientaciones
realizadas por la
psicóloga

Escalas pasadas

Observaciones

2º SESIÓN
________________ Asiste  No Asiste 
Fecha

Inquietudes /
Motivo de la
sesión
Temas que se
tratan

Orientaciones
realizadas por la
psicóloga

Escalas pasadas

Observaciones

3º SESIÓN
________________ Asiste  No Asiste 
Fecha

Inquietudes /
Motivo de la
sesión

Temas que se
tratan

Orientaciones
realizadas por la
psicóloga
Escalas pasadas

Observaciones

3º SESIÓN
________________ Asiste  No Asiste 
Fecha
Inquietudes /
Motivo de la
sesión

Temas que se
tratan

Orientaciones
realizadas por la
psicóloga
Escalas pasadas

Observaciones

4º SESIÓN
________________ Asiste  No Asiste 
Fecha

Inquietudes /
Motivo de la
sesión

Temas que se
tratan

Orientaciones
realizadas por la
psicóloga

Escalas pasadas

Observaciones

5º SESIÓN ________________ Asiste  No Asiste 


Fecha

Inquietudes /
Motivo de la
sesión

Temas que se
tratan

Orientaciones
realizadas por la
psicóloga
Escalas pasadas

Observaciones
PROGRAMA ATENCIÓN MM Y DETECCIÓN PRECOZ
Curso 2008/09

NOMBRE

TEMAS ABIERTOS

Tema Consideraciones

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