La formación docente, una actividad

transformadora
Ana Ma. Gurrola Togasi. Escuela Nacional Preparatoria. UNAM. Ciudad de México.
Actualmente, la profesión docente de nivel medio superior requiere un perfil multidisciplinario ya que es
necesario que los profesores dominen su campo de conocimiento, diversas metodologías didácticas, la
aplicación de las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC) en el proceso educativo, el manejo
adecuado de su lengua materna y el conocimiento de una segunda, entre otros aspectos.
Este nuevo perfil puede representar un verdadero conflicto para algunos docentes sin importar su edad, ya
que puedo decir que conozco profesores de más de setenta años totalmente dispuestos a formarse
permanentemente y a innovar en sus clases y otros, menores de treinta, que se resisten a modificar sus
prácticas docentes. Los tiempos actuales exigen que los profesores nos percatemos de la imperiosa
necesidad de cambiar para poder desarrollar en nuestros estudiantes las habilidades y competencias
necesarias para hacer frente al mundo globalizado y a la Sociedad del Conocimiento.
Pero, ¿cómo obtener ese perfil docente multidisciplinario? Las respuestas no son sencillas, en México, mi país
de origen, es desafortunadamente frecuente que los profesores responsabilicen de forma exclusiva a las
instituciones educativas de su formación docente.
No podemos negar que las instituciones educativas y el gobierno mismo, tienen la obligación de ofrecer a los
profesores actividades formativas actuales y de calidad, pero también es innegable que los profesores
debemos tomar el control de nuestra propia formación. La docencia es una actividad que demanda la reflexión
constante de lo que hacemos y de cuáles son los resultados que obtenemos, en realidad nos convertimos en
investigadores de nuestra propia práctica docente. El resultado de esta reflexión debe ser la identificación de
lo que hacemos bien, de aquello que todavía no dominamos y lo que nos falta por aprender de tal forma que
podamos diseñar nuestras propias líneas formativas.
Para lograr lo anterior, la autoformación docente es una estrategia útil ya que podemos recurrir a la gran
cantidad de fuentes de conocimiento de libre distribución como las bibliotecas virtuales y los reservorios
académicos de las universidades para aprender prácticamente cualquier tema de nuestro interés , o participar
en diversos MOOC (Massive Online Open Courses o Cursos online masivos y abiertos) con contenidos
actuales y diversos recursos para el aprendizaje.
La autoformación es más efectiva cuando se lleva a cabo en colectivos académicos que comparten intereses
comunes mediante la creación de comunidades de aprendizaje. En estas comunidades sus miembros deben
ser participativos y sentirse plenamente integrados, ya que el objetivo es compartir experiencias y
conocimientos que permitan a todos los miembros avanzar. El producto más importante de una comunidad de
aprendizaje debe ser la creación de una inteligencia colectiva que pueda trascender fuera de la misma
comunidad y ayudar a otros docentes en su proceso de formación
En el caso de una comunidad virtual, la interacción entre las personas se lleva a cabo mediante las TIC, ya
que permiten a los miembros dialogar, reflexionar y socializar sobrepasando las barreras espacio-
temporales, lo que representa una importante ventaja para los docentes que se encuentran en diferentes
regiones, aún de la misma ciudad, permitiéndoles administrar mejor sus tiempos y esfuerzos.
Es por demás señalar que nuestra comunidad es un claro ejemplo que ofrece a los docentes la oportunidad
para formarse, trabajar colaborativamente, compartir experiencias, materiales didácticos y discutir sus ideas.
La participación en esta comunidad, inspiró la idea para fundar la Comunidad Virtual de Aprendizaje “Cienci@
Virtu@l” creada en 2009 por 13 profesores de Ciencias de 7 planteles de la Escuela Nacional Preparatoria y
que se desarrolló gracias al apoyo de proyectos institucionales.
El principal objetivo de Cienci@ Virtu@l es que los docentes puedan aprender, compartir su experiencia y
diseñar actividades de enseñanza aprendizaje basadas en el uso de TIC. Una vez que el nivel de formación
de los participantes de la Comunidad fue óptimo, consideramos oportuno compartir nuestra experiencia
docente en la aplicación didáctica de las TIC con nuestros colegas a través de la impartición de cursos en
línea.
Lo fundamental en cualquier programa de formación de profesores, es la transformación de los
planteamientos pedagógicos que estos tienen. La idea principal consiste en romper el paradigma del modelo
de transmisión - recepción de la información, el cual está centrado en el profesor. Las nuevas propuestas
atribuyen al alumno un papel activo en la adquisición del conocimiento, proponen que la información no se
presente a los alumnos de manera expositiva, sino en un entorno abierto de aprendizaje en el que se
promueva que sean ellos mismos quienes construyan su propio conocimiento, mediante la indagación, la
resolución de problemas, los razonamientos hipotético-deductivo e inductivo y el trabajo cooperativo entre
compañeros.
La formación docente debe ser una actividad transformadora de las prácticas de los profesores, debe
obedecer a la motivación de aprender lo que nos interesa o lo que nos hace falta para mejorar nuestro trabajo
diario con los estudiantes, y no a la búsqueda de certificados que generen puntos para conseguir un mejor
salario o ascender en la carrera profesional.