Cindy Luna Espinoza

“The Playlist”

Daniel es un programador no conformista que desde un inicio siempre quiso hacer lo

mejor con el uso de la tecnología, realizaba páginas webs y las ponía en venta, pero ello
no era suficiente para él, tuvo un papel importante en tradera vendiendo artículos
nuevos y de segunda mano, como ropa, productos electrónicos y arte online, y a pesar
del éxito tampoco era lo que buscaba. Tras su paso fundando Advertigo y
posteriormente vendiéndolo y volviéndose rico, continuo con la idea de seguir buscando
nuevas ideas tecnológicas, hasta que encontró esta nueva idea “Spotify”, que
combinaría dos grandes pasiones: la música y la tecnología.
La industria de música que el encontró en ese momento era una industria ilegal, donde
tenían su web que para descargar la música que deseabas, tenias que esperar un tiempo
para poder escuchar la música deseada, además su web era totalmente paupérrima, por
lo que busco una solución para acabar con la piratería. Como stakeholder estaba el
gobierno y los medios de comunicación, que siempre es bueno cuidar y mantenerse
informado, los poseedores y los anunciantes, donde se dependerá de los poseedores para
obtener los productos que vende la música y con los anunciantes se obtendrá beneficios
y los consumidores que tienen prácticamente la decisión de hacer crecer Spotify, sin
ellos no hay Spotify.
Spotify es una plataforma abierta para todos con la finalidad de compartir música y
acceder a todo el repertorio y variedad de géneros que una persona desee, permitiendo
conectarse desde cualquier parte del mundo en cualquier momento y de forma
inmediata. Es un modelo premium porque tiene una parte de servicio gratuito y otro de
pago, se puede utilizar en ordenadores, tablets y teléfonos moviles. Spotify ofrece
opciones sociables, como compartir su música, crear su propia lista de reproducción
donde otros usuarios pueden suscribirse.
El problema no fue la realización del software para compartir y escuchar música de
forma legal, sino convencer a las grandes empresas discográficas que pusieran sus
catálogos de música en línea y que todo el mundo tuviera acceso a ellas y que las
ganancias llegarían por medio de la venta de publicidad o por el pago de una membresía
fija, una idea que a la fecha suena disparatada para muchos.
Actualmente, las personas siguen prefiriendo Spotify a pesar de la competencia que
apay como una alternativa de solución viable sería el crear su propia discográfica, ya
que es la manera de poder resolver los conflictos con sus stakeholders y así cumpliendo
su objetivo de ofrecer la música del mayor numero de artistas. El ahorro de costes en
royalties facilita el pago a los artistas de manera directa, por número de reproducciones,
un modelo que muchos de ellos ansían para obtener un mayor beneficio de su
contenido. Eliminando el intermediario de las discográficas, la conexión entre artista y
oyente se multiplica en beneficio para Spotify.
Como conclusión, la innovación, el ensayo y el aprendizaje fueron elementos esenciales
para desarrollar la estrategia empresarial. Spotify es uno de los proyectos que comenzó
de una idea sencilla pero funcional, logro crear un alto impacto y cambio de vida,
Daniel resalto que la forma del éxito se define en una idea y puesta en marcha del
proyecto
Y en no rendirse por la competencia.