Tercera actividad de evaluación

Historia del arte contemporaneo - Alejandro Balsera García

La primera obra es Pedestal del Mundo de Piero Manzoni, un artista italiano del nuevo
realismo que trabajó mucho con la idea del arte como todo aquello que toca el artista. La
segunda es Sin título de Donald Judd, una obra simple y pulcra como muchas otras de este
artista y del movimiento minimalista. Ambas obras son muy parecidas en los aspectos
formales y muy distintas en el campo conceptual, pero rascando un poco podemos ver que
en ambos casos hay mucho mas de lo que se ve a primera vista.

Las dos son esculturas cuadrangulares de metal con líneas rectas y planos lisos bien
definidos, pero tienen bastantes diferencias. Por ejemplo, la obra de Piero se trata de un
bloque opaco metálico del color del material mientras que la obra de Judd se trata de varias
placas de metal que dejan ver a través de la escultura y a su interior, que es azul. Este
artista a menudo incorpora el color en sus obras y le ayuda a establecer un punto de
conexión entre los distintos módulos que conforman el conjunto. El tratamiento material
también es importante, la primera obra tiene un aspecto mucho más sucio y la de Judd es
mucho más pulcra y brillante.

Los minimalistas tomaron mucha influencia del arte pop, sus obras a menudo son seriadas,
con un acabado industrial. Judd concretamente juega en muchas de sus obras con la idea
del módulo y podemos ver en muchas de sus obras formas similares a las de esta escultura
repetidas por todos lados. Es un arte que habla de sí mismo y no se centra en hablar sobre
el mundo que nos rodea.

La obra de Piero, no trata de parecer sacada de una fábrica. Su aspecto basto y sin lijar nos
recuerdan a las esculturas de metal de las plazas y los museos. El artista coloca lo que es
literalmente un pedestal (con las letras y todo) boca a bajo en medio del campo para que
sostenga al mundo, convirtiendolo en su conjunto en una gran obra de arte. Piero trata el
tema de la relación del artista con la obra del arte en casi todas sus obras. Para él es una
obra de arte todo aquello que el artista señale (lo cual es claramente una idea que tomó de
artistas dadaistas como Duchamp).

Este tipo de acciones y reivindicaciones son muy propias del nuevo realismo, algo que lo s
acerca muchísimo a la performace. Estos artistas fueron los inventores de de-collage,
rompían objetos y los recomponían, pintaban los cuerpos de personas para después
estamparlos en papel. A menudo lo importante de sus obras es el proceso y el método que
ha llevado a la obra final. El minimalismo por el contrario no se preocupa por el acto si no en
el concepto físico de la obra.

No quiere decir esto que esta y otras obras minimalimalistas no tengan puntos de interés
importantes. El minimalismo a menudo juega con los espacios donde se encuentran las
obras y parecen entenderlo como parte de esta. Las obras de Judd, incluso siendo uno de
los minimalistas que menos juegan con este aspecto, desarrollan geometrías en el espacio
en el que se encuentran en distintas direcciones. Muchas de sus obras están hechas para
exponerse de un modo concreto (colgadas en paredes por ejemplo). Tratan de romper con
esta idea de verticalidad de la escultura tradicional montada sobre un pedestal y crean
esculturas con las que el artista puede interactuar con su movimiento por ese mismo
espacio. Esta fue una de las grandes aportaciones de los minimalistas, pusieron el foco en
el espacio y esto influyó en muchos de los movimientos escultóricos posteriores como el
Land Art o incluso el Nuevo realismo. Está claro que la obra de Piero toma esta idea y la
lleva a sus ultimas consecuencias, haciendo una a todo el planeta parte de su obra.

Lo que debemos tener más en cuenta del minimalismo son las puertas que abrieron para
movimientos futuros. Es posible más adelante, en movimientos como el Postminimalismo se
rechacen muchas de las ideas de este movimiento como la frialdad y el cabado industrial o
la falta discursiva en pos de hablar sobre la realidad al espectador. Pero al igual que el
Impresionismo en el siglo XIX, gran parte de la importancia que tuvo fue mostrarnos que
había formas nuevas de entender el arte. En cierta medida, incluso si no lo pretendían se
acercaron mucho a las mismas metas que perseguían los artistas del Nuevo Realismo,
abrieron a muchos artistas posteriores a posibilidades que hasta el momento no se habían
explorado.

Este es el nexo más importante entre estos dos movimientos (y realmente entre la mayoría
de los movimientos artísticos desde la aparición de las vanguardias), ambos tratan de
romper con lo establecido y exploran nuevos lenguajes y nuevos usos de los elementos a
su disposición. Puede que no traten de expresar lo mismo al espectador, pero nos enseñan
nuevas formas de entender el espacio, la escultura, el arte y la realidad.