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Burrhus Frederic Skinner: El padre del conductismo operante

Burrhus Frederic Skinner (1904-1990) fue un psicólogo estadounidense,


considerado el principal divulgador del conductismo. Sin embargo, no fue pionero
de esta corriente, ya que algunos autores relevantes ya habían iniciado sus
estudios en este ámbito, como Iván Pavlov con su condicionamiento clásico en
animales o John B. Watson con el mismo mecanismo aplicado a los humanos. Por
otro lado, además de psicólogo, se le consideró también filósofo social e inventor.

Skinner, que se graduó en la Universidad de Harvard, centró su estudio en el


aprendizaje y la conducta observable, que planteaba estudiar sin hacer
suposiciones acerca de los procesos internos o inobservables, propios de los
psicólogos mentalistas. Planteó un nuevo tipo de con En este artículo repasamos
brevemente la vida de Skinner, sobre todo a nivel académico y laboral, a través de
los datos o hitos más relevantes de su biografía.

Origen y estudios

B.F. Skinner nació el 20 de marzo de 1904 en un pequeño pueblo situado en


Pensilvania (EE.UU.), llamado Susquehanna, y falleció en Cambridge (EE.UU.), el
18 de agosto de 1990, a la edad de 86 años. Durante su juventud se planteó vivir
de la creatividad, a través de la escritura. Sin embargo, acabó desistiendo al darse
cuenta de que no tenía tantas facilidades para ello como en un principio creía.

Apostó entonces por estudiar psicología y empezó sus estudios en la Universidad


de Harvard. Pero al llegar a la facultad, se encontró con una psicología que
tampoco era lo que él pensaba: poco desarrollada, muy centrada en la experiencia
mental interna, con ideas inconexas y teorías muy abstractas sobre la conciencia.
Para él, todo esto tenía más que ver con la filosofía que con el estudio científico de
la conducta humana.

La influencia de John B. Watson


B.F. Skinner buscaba en realidad llegar a conocer el comportamiento humano más
observable y no tan “privado”. Así, se dejó influenciar por Watson, psicólogo
conductista que apostaba por una psicología experimental, mucho más científica y
alejada del psicoanálisis.

Pero en aquella época, y en aquella universidad, el método científico no era tan


habitual en Psicología.

La influencia de Fred S. Keller

Más adelante conoció al también psicólogo estadounidense Fred S. Keller. A


finales de los años ‘20, Keller era una promesa de la psicología conductista en
Harvard. Keller convenció a Skinner de que no era imposible hacer de la
psicología una ciencia. Poco después, en 1931, ambos se doctoraron.

En ese momento, Skinner continuó sus investigaciones en Harvard como asistente


de laboratorio de biología, junto al profesor Cro Burrhus Frederic zier y en 1936
empezó a trabajar como profesor en la Universidad de Minnesota. En esta
segunda universidad estuvo nueve años.

Su visión de la psicología

Como hemos visto, Skinner, en su desarrollo como profesional, empezó a


influenciarse por otras figuras. Una de ellas Watson y su teoría conductista, pero
también Pavlov y su teoría de los reflejos condicionados.

A raíz de sus aprendizajes, Skinner empezó a creer en la posibilidad de explicar la


conducta del ser humano como un conjunto de respuestas fisiológicas
condicionadas por el entorno. Por ello, se entregó al estudio de las posibilidades
que ofrecía el control científico de la conducta, a través de técnicas de
reforzamiento en animales.

Y así, poco a poco, Skinner se fue convirtiendo en psicólogo conductista, una


disciplina aún muy reciente de la época, centrada en estudiar el comportamiento
observable del ser humano. Y es que, para Skinner, el concepto de “mente”, o de
“conciencia”, se alejaban de su objeto de interés, al resultarle conceptos muy
abstractos. Él quería estudiar los mecanismos observables que modifican nuestra
respuesta o conducta. Y así fue cuando introdujo el concepto de condicionamiento
operante o instrumental que describiremos a continuación.
“Las propuestas e hipótesis de la psicología deben ser comprobadas
exclusivamente a través de evidencias objetivas”. -B.F. Skinner.

Aportaciones a la psicología

Uno de los aportes más destacables de Skinner es el del condicionamiento


operante o instrumental. Este consiste en un método de aprendizaje que implica la
asociación de reforzadores y castigos con una determinada conducta.

A través de este tipo de aprendizaje, la persona acaba asociando el


comportamiento con sus consecuencias (reforzamiento o castigo) y, en función de
las mismas, acaba aumentando o disminuyendo la frecuencia de dichas
conductas.

Experimentos

Por otro lado, entre los experimentos más célebres de B.F. Skinner encontramos
el del adiestramiento de palomas, utilizando la denominada caja de Skinner.

De hecho, dicha caja aún sigue utilizándose en la actualidad para el


condicionamiento de animales. Otro de sus experimentos fue el diseño de un
entorno artificial específicamente pensado para los primeros años de vida de las
personas.

El primer libro de Skinner

Este famoso psicólogo publicó su primer libro en 1938: El comportamiento de los


organismos: Un análisis experimental (The Behavior of Organisms: An
Experimental Analysis). Se publicó como un volumen de la colección Century
Psychology Series del Copley Publishing Group.

En este libro Skinner establece los parámetros para definir el análisis experimental
del comportamiento y el análisis de la conducta. El libro fue revisado 1 año más
tarde, en 1939, por Ernest R. Hilgard.

Es importante también mencionar el hecho de que el conductismo de Skinner llegó


a considerarse radical y que levantó abundante polémica en su país. Llegó a
alcanzar una fama notable con la publicación de la novela Walden Dos, en 1948;
en ella especulaba sobre una sociedad futura totalmente programada con técnicas
de ingeniería de la conducta o de modificación de conducta.

Además, en su ensayo Más allá de la libertad y la dignidad (1971), Skinner


defendió que tales conceptos (los de libertad y dignidad) resultaban en último
término perniciosos para la sociedad. Agregó en dicho ensayo que la única
manera de alcanzar una convivencia óptima era aplicando unas técnicas
adecuadas en el diseño de la conducta de sus miembros.

El legado de Skinner

Skinner falleció el 18 de agosto de 1990, como consecuencia de una leucemia, a


la edad de 86 años. Estuvo trabajando hasta la misma semana de su muerte. Su
legado sigue aún hoy vigente, un legado que permitió a la psicología que hoy
conocemos empezar a consolidarse como una verdadera disciplina científica.

Podemos decir incluso que sus aportaciones han influido en la psicología cognitiva
actual y en el surgimiento de las terapias cognitivo conductuales. Por otro lado, es
importante remarcar que Skinner también arrojó información útil sobre procesos de
aprendizaje basados en la asociación, a través de sus experimentos y de su
postulado sobre el condicionamiento operante.

Aunque Skinner también generó polémica, se dice que era una persona minuciosa
y dedicada a su trabajo, que buscaba sobre todo generar un conocimiento
empírico y científico de la psicología.

Su recuerdo sigue aún vigente y permanece en las influencias que tuvieron sus
teorías e investigaciones en la psicología actual, donde el conductismo sigue
teniendo un papel muy relevante dentro de las orientaciones terapéuticas .

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