Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Los criterios establecidos de inicio de diálisis incluyen la presencia de uno o más de los siguientes:
signos (pericarditis, pleuritis o encefalopatía) o síntomas de uremia (astenia, anorexia, náuseas,
prurito), hipervolemia o HTA resistentes al tratamiento médico, deterioro del estado nutricional,
hiperpotasemia o acidosis metabólica graves refractarias al tratamiento médico, o la diátesis
hemorrágica.
Las complicaciones agudas son las que aparecen durante la sesión de hemodiálisis o en las horas
siguientes. Son variadas y repercuten negativamente en la eficacia y la tolerancia de esta. Gracias a
los avances tecnológicos en los monitores, biosensores, dializadores, soluciones de diálisis y en el
tratamiento del agua, han disminuido en intensidad y frecuencia. La hipotensión es la complicación
más frecuente durante la sesión. Los calambres musculares son otra complicación común. Se deben
principalmente a ultrafiltración excesiva, hiponatremia o sodio bajo del dializado. Suelen ceder al
reducir la ultrafiltración y con la administración de suero fisiológico o agentes hipertónicos. La
cefalea es otra complicación frecuente, que sucede más comúnmente al final de la sesión y persiste
después de esta. El síndrome de desequilibrio de diálisis es una complicación muy poco frecuente y
evitable.
Diálisis peritoneal: En esta terapia de sustitución renal se utiliza el peritoneo como la membrana de
intercambio. Entre los capilares del peritoneo y el líquido de diálisis que se introduce a través de un
catéter en el abdomen del paciente, se realiza el intercambio de líquidos y sustancias. Existen dos
tipos de modalidades de la diálisis peritoneal: 1) Diálisis continua o crónica ambulatoria y 2) Diálisis
automatizada; en la primera el líquido se debe cambiar 4 veces al día y, en la segunda, el cambio se
realiza a través de una cicladora durante la noche.
Referencias bibliográficas:
1) Farreras Rozman. Medicina Interna. 19 edition. Ciril Rozman Borstnar & Francesc Cardellach.
2) Harrison: Principios de medicina interna. Vol. 1, 2 (20.a ed., Vol. 2). McGraw-Hill.