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Trufas de chocolate blanco y macadamia

Receta de Trufas de chocolate blanco y macadamia con un toque de licor, una


elaboración rápida y sencilla, explicada paso a paso, para hacer unas trufas con las que
disfrutar de un capricho goloso de vez en cuando o deleitar a nuestros invitados.
Conserva las trufas en el frigorífico para disfrutar de ellas bien frescas, principalmente en
los meses calurosos.

Las trufas que más nos gustan son las de chocolate negro, pero de vez en cuando
también tenemos que pensar en nuestros seres queridos y agasajarles con caprichos
golosos que sean más de su agrado. No obstante, estas Trufas de chocolate blanco y
macadamia nos gustan a todos, ¡son una delicia!

Así que aunque seáis de los que renegáis del denominado chocolate blanco, como os
hemos comentado en otras ocasiones, hay recetas en las que sorprende y conquista,
como en el caso de estas trufas con nueces. Decir que las nueces de macadamia
utilizadas en esta receta es en forma de pasta, se comercializa así, pero si no la
encontráis podéis hacerla con un buen robot de cocina o sustituirla por la pasta de otro
fruto seco que os guste combinar con chocolate, cada uno aporta su sabor, pero todos
suelen quedar bien.

Ingredientes

 180 gramos de chocolate blanco para fundir


 100 gramos de pasta pura de nueces de macadamia
 20 gramos de crema de licor
 c/n virutas de chocolate blanco.

Elaboración

La elaboración de las trufas siempre es sencilla, y en el caso de estas trufas de chocolate


y nueces de macadamia incluso más. Pon un cazo para fundir el chocolate al baño maría,
también se puede hacer en el microondas, pero si quieres asegurarte de que no se te
queme (es más delicado que el chocolate negro), la suavidad del calor proporcionado por
el baño maría es mejor.

Trocea el chocolate y ponlo en el recipiente del baño maría (no debe entrar en contacto
con el agua), incorpora la pasta de nueces de macadamia y la crema de licor (si no se
quiere añadir alcohol se puede sustituir por leche).

Enciende el fuego y cuando veas que el chocolate empieza a fundirse, bate suavemente
con una espátula para que se combinen los tres ingredientes. Cuando hayas obtenido una
crema fina y homogénea, retira del fuego y deja que pierda algo de temperatura.

Después enfría esta especie de ‘ganache’ en el frigorífico, cubriendo el recipiente con film
transparente. Cuando la preparación se haya enfriado y endurecido, puedes empezar a
formar bolas. Según el tamaño que les des, saldrán más o menos trufas, si cada bola
pesa unos 15 gramos, saldrán unas 20 trufas.

Cuando tengas las trufas formadas, rebózalas con las virutas de chocolate blanco y
ponlas en cápsulas de papel. Déjalas reposar de nuevo en el frigorífico para que cojan
cuerpo, en verano es donde mejor se conservarán. Ya están listas para comer. ¡Buen
provecho!

Abreviaturas
c/s = Cuchara sopera
c/p = Cuchara de postre
c/c = Cuchara de café
c/n = Cantidad necesaria

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