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tiempos modernos

charlie chapin
(Ánalisis crítico)

Integrante:
guerrero acosta
yadivana del valle
c.i 30.523.911
1er año "A" mercadeo
tiempos modernos
Sin duda, "Tiempos modernos" (1936) no es un documental (ni una película
antropológica visual), pero las novelas que nos presenta no pueden
detenerse de alguna manera e influir en la prueba de estilo cinematográfico.
Quizás la conexión entre la novela y el documental que la gente moderna
parece mostrarnos (y la inquietante aleación entre el engaño y el registro)
pueda atribuirse a la calidad del arte en los estudios estéticos de Adolf
Sánchez Vázquez. Para explicar que su capacidad para producir una cierta
verdad sobre el “movimiento real” (Sánchez Vázquez, 2005, p. 17), esta
verdad no tiene nada que ver con la lealtad y el plegamiento irrestricto de la
realidad, sino que debe hacerse, al igual que Chaplin. Como escribí, "Puedes
hacer esto con imaginación" (Chaplin, 1989, p. 423), y Posee la capacidad de
producir lo que Sergei Eisenstein llama "imágenes" que no solo contienen la
"representación" de la realidad, sino también otras cosas, un importante
desbordamiento crítico que hace aparecer al espectador de la obra , "The
New Thing" (Eisenstein, 1974, p. 19), un excedente crítico relativo a la
realidad, su expresión naturalizada, una distorsión, sin embargo logra
producir una experiencia capturada. La novela satírica de Chaplin satiriza la
ironía del capitalismo y la captura con un enorme "poder representativo"
(Barthes, 1999, p. 42) -quizás más evocador que el realismo- la organización
del trabajo capitalista inherente Razón violenta.

Quizás es aquí donde se interesan y fascinan muchos pensadores marxistas


o diferentes pensadores críticos -a través de la absurda y cómica
comprensión de la racionalidad capitalista y las trivialidades de la vida
moderna (cómo hacer José Carlos Mariátegui (José Carlos Mariátegui), F
Vladimir Lenin (Vladimir I. encontró la "visión del discurso" en el cine (citado
por Hansen en Kraniauskas, 2012, p.47) debido a la problemática del
capitalismo y su esclarecimiento sobre la violencia interna.
Como afirmó María Tegui, Chaplin fue "el receptor alerta de la información
más confidencial en ese momento" (María Tegui, 1928, p. 4). El payaso
encontró un espacio representativo en la sala de cine. A través de su
imitación silenciosa y hermosa, condenó el sufrimiento del mundo y provocó
la risa del público.3 Este tipo de risa contenía posibilidades en su excitación y
sobriedad. El nacimiento de posiciones importantes sobre algunas
coordenadas básicas de la socialidad capitalista (en mi opinión, la socialidad
es el objeto principal y frecuente de las fotografías de Chaplin).

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