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TP Nº2 Historia 3
TP Nº2 Historia 3
Introducción
Para poder analizar en profundidad la obra de un compositor debemos primero tener en cuenta y
entender varios factores que dan origen a dicha pieza, de forma directa o indirecta. Estos son el
entorno de desarrollo intelectual que tuvo dicho compositor (la forma en la que se desarrollo como tal,
escuela, autodidacta) la época en la que vivió y la época puntual en la que compone la obra. Esto da
un marco de referencia para poder entender la pieza compositiva y lograr una mayor comprensión de
la misma, así también la intensión del autor o que quiso lograr al componerla.
De esta manera empezaremos a desarrollar nuestro trabajo por el contexto en el que se desarrolla la
vida de nuestro compositor y su vida para luego desarrollar un análisis de la obra.
El Imperialismo
La era del Imperialismo fue un fenómeno histórico que se produjo entre los siglos XIX y XX (1870-
1914) que tuvo como protagonistas principales a los países europeos, de mayor a menor
importancia: Gran Bretaña, Francia, Bélgica, Países Bajos, Alemania, Rusia, Portugal, España e
Italia. La política imperialista se centró en la conquista y dominación de amplios territorios sobre todo
en África, Asia y Oceanía. También existieron potencias imperialistas fuera del continente europeo,
como fueron los Estados Unidos de América y Japón.
Esta época contemporánea fue un proceso histórico que se originó en la década de los
años 1870 cuando buena parte de los países europeos, además de Estados Unidos y Japón, iniciaron
una carrera de conquista y control de amplios territorios como consecuencia de la coyuntura
económica de recesión de ese momento y con el pretexto de extender la cultura del hombre blanco
en todo el planeta (racismo).
El debate historiográfico alrededor del colonialismo durante el siglo XIX planteaba este fenómeno de
dos formas muy diferentes: como una continuidad de la anterior fase de conquista (las colonias
americanas de España, Portugal, Inglaterra y Francia) y como un fenómeno totalmente nuevo.
Optimismo Europeo
Todo el continente europeo da sus primeros pasos en el siglo XX donde reina un fervor de optimismo.
Ya la tirantez mundial se había aplacado, un espíritu de paz gobernaba desde que termino la última
guerra, lo que llevo a un crecimiento general a la búsqueda de un vivir mejor y a una estabilidad en
todos los aspectos. Este periodo de apogeo se vio también en otros rubros, descubrimientos científicos
como el teléfono, la luz eléctrica (comienza la vida nocturna en las calles), los dibujos animados (los
hermanos Lumiere presentan el cinematógrafo), los rayos X, expansión territorial (colonialismo de los
pequeños pueblos de África y Asia) cuando muere la Reina Victoria de Inglaterra uno de cada cuatros
habitantes del mundo eran sus súbditos, crecimiento en el transporte (época del ferrocarril), en las
comunicaciones, en los servicios públicos, en la atención médica (se crearon mejoras en técnicas
quirúrgicas y en el control de enfermedades infecciosas) los pensamientos científicos ( la teoría de la
evolución por Charles Darwin) todo este conjunto de crecimiento llevo a considerar que Europa se
encontraba en lo más alto. El novelista vienes Stefan Zweig describió el proceder general:
*La creencia en un progreso ininterrumpido e irresistible tenía la fuerza de la religión para esta
generación. La gente empezaba a creer más en este progreso que en la biblia. La comodidad comenzó
a extenderse desde las casas de los ricos hacia las de las personas de clase media. Le higiene se
extendió y la suciedad desapareció.
Denigración Europea
Esta Europa tan feliz y optimista era solo una pequeña parte de la realidad de la población, la Europa
Denigrante, el drama humano de la revolución industrial donde nos encontramos con trabajadores que
cumplen jornadas laborales diarias de doce a catorce horas de trabajo, también que los niños son
obligados a trabajar a la tierna edad de cinco años, los niños no son visto como lo que son sino como
adultos pequeños, también nos encontramos una Europa marcada por la tensión políticas entre los
imperios, en la zona de los Balcanes el imperio Austrohúngaro, el imperio Otomano y el imperio Ruso
Erik Satie
Satie nació en 1866 en Honfleur, en la costa de Normandía, hijo de madre escocesa y padre corredor
marítimo. La familia se mudó a París, pero tras la muerte de la madre de Satie en 1872, fue enviado
de regreso a Honfleur, a la casa de sus abuelos. Seis años después regresó a París, donde, en 1879,
ingresó en el Conservatorio. Allí demostró ser un alumno insatisfactorio, demorándose, como alegaba
un amigo, para evitar los cinco años obligatorios de servicio militar, reducido para los estudiantes a un
año, que, en su caso, se redujo aún más por una enfermedad.
Después de su salida de la infantería, Satie hizo que su padre publicara sus primeros artículos, que
ahora tenía una pequeña empresa editorial y una papelera. En 1905, después de un período de
ganarse la vida como café pianista, Satie se matriculó en la Schola Cantorum, donde sus maestros
incluyeron a Vincent d'Indy y Roussel. Aquí, durante tres años, trató de remediar sus defectos técnicos
Parade fue la inspiración de Cocteau. Se describe como un Ballet réaliste en un tableau (Un ballet
realista en una escena). El telón, el vestuario y la decoración fueron de Picasso y la coreografía de
Leonid Massin y se representó por primera vez en el Théâtre du Châtelet el 18 de mayo de 1917 por
los Ballets russes de Dyagilev, con Lydia Lopokova, Massin, Leon Woizikovsky y Nicholas Zvereff. La
idea de Cocteau era ofrecer una obra escénica que representara los principios del cubismo, y en esto
lo logró. La escena está fuera de una caseta de feria, donde los ladrones y los artistas intentan atraer
a la audiencia. La obra se abre con un Coral, seguido de una exposición fugaz, Prélude du Rideau
Rouge ('Preludio del telón rojo') y la entrada del primer Manager. El prestidigitador chino hace trucos
con un huevo y come fuego, con peligro inminente para todos, ya que las chispas se dispersan y tienen
que ser apagadas, todo ello logrado mediante el uso de efectos de percusión inusuales de flaques
sonores (ruidos de agua) y ruedas de lotería. La Petite fille Américaine ('The Little American Girl'), que
se deriva de las películas, imita a Charlie Chaplin, es acompañada en un episodio de cine mudo por
el sonido de una máquina de escribir, dispara a un ladrón, baila al ritmo del Ragtime du paquebot, se
arruina en el Titanic y disfruta de una mañana de primavera. Se presentan los Acróbatas, payasos
tristes, por así decirlo, del período azul de Picasso, acompañados primero por el xilófono y luego por
lo que la partitura describe como un teléfono-botella. Se escucha el sonido áspero de una sirena con
el regreso de las reminiscencias de lo pasado, y el espectáculo llega a su fin, meramente un Desfile,
una pobre representación de lo real, ahora cerrado por una breve referencia al Preludio del Telón Rojo.
Bibliografia
Imperialismo y expansión colonial en el siglo XIX - Historia Abierta (hispantic.com)