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Servicio Bíblico Latinoamericano

Semana del 31 de enero al 6 de febrero de 2021 – Ciclo B

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Domingo 31 de Enero
4º Ordinario
Juan Bosco, fundador (1888)

Dt 18,15-20: Suscitaré un profeta y pondré mis palabras en su boca


Salmo 94: Ojalá escuchen hoy la voz del Señor.
1Cor 7,32-35: La mujer soltera se preocupa por los asuntos del Señor
Mc 1,21-28: No enseñaba como los letrados, sino con autoridad

La palabra Deuteronomio viene de Deuteros = segundo, y Nomos = ley. Es la


segunda versión de la legislación mosaica. El Deuteronomio fue elaborado a partir
de pequeños fragmentos que fueron compilados por el autor o los autores a lo
largo de más de seiscientos años. El material que conocemos tuvo un origen muy
diverso. Una parte pertenece a la gran tradición oral que la confederación de tribus
empleó para regular la aplicación de la justicia al interior de la comunidad y entre
las tribus durante el tiempo de los Jueces. Otra parte proviene de las tradiciones
del reino del Norte, elaborada por grupos que se oponían a la monarquía y
proponían legislaciones alternativas para tratar de cambiar el despótico gobierno
instalado en Samaría. Otra parte, es elaboración de tradiciones orales del reino del
Sur vigentes en tiempos del rey Josías. Esta diversidad fue re-elaborada después
del destierro por los sacerdotes y los sabios, hasta alcanzar la forma que hoy
conocemos.
El documento tuvo varias ediciones en las que fue sucesivamente ampliado.
Insiste en la necesidad de vivir unas relaciones interhumanas justas. La ley no es,
en este documento, un fárrago de decretos aislados. Cada precepto está en función
de defender la vida y la dignidad de cada persona en la comunidad. La ley expresa
la vida íntima de la comunidad, la necesidad de que cada persona tenga lo mínimo
para sobrevivir y nadie viva en una situación oprobiosa y miserable. De este
modo, la ley deja de ser una ominosa obligación y pasa a ser un «don» que otorga
Dios a todo el pueblo. Este don o alianza se fundamenta en el derecho de cada
familia a poseer lo mínimo necesario, esto es, un pedazo de tierra donde pueda
cultivar y donde pueda vivir sin ser una carga para los demás: “Como Yavé ha
hecho don de este país su pueblo, nadie puede apropiarse de la tierra” (Dt 15, 4).
Para este autor la alianza, la ley o «don» debe ser interiorizada. La
convivencia en el país que Dios ha dado al Pueblo peregrino exige un cambio de
mentalidad que se traduce en una organización social donde el derecho divino
prevalece sobre todas las instituciones. Lo central de este derecho es la justicia
interhumana, entendida como fundamento de la convivencia social. “El rey debe
ser hermano y recortar ventajas e intereses personales. Este abrirse generosamente
a los otros es lo que demuestra la pertenencia a Yavé y lo que permite la
pertenencia a este pueblo”.
En esta misma línea se ubica la promesa acerca del profeta venidero. Ese
profeta se compara con Moisés. No viene a recordar al pueblo una u otra cosa.
Viene para indicar cuál es el rumbo que el pueblo debe seguir. El profeta se
preocupará por mantener vivo el Espíritu de la Ley, tema en el que insiste el
Deuteronomio, de modo que no se convierta en una mera formalidad, sino que
exprese las necesidades vitales de la comunidad y de cada ser humano.
El Deuteronomio da inicio a una tendencia que Jesús llevará adelante. Para
Jesús, y en general para todos los profetas, lo fundamental de la ley es preservar la
dignidad, la intimidad y el valor de cada ser humano, el derecho a vivir en una
comunidad donde sea valorado por lo que es y no por lo que tiene. De este modo,
la legislación deja de ser un precepto que rige alguna cosa en particular, y se
convierte en expresión de las necesidades vitales del ser humano. A esto llama la
Biblia “llevar la Ley en el corazón”.
Esta nueva manera de ver la ley es la que aplica Pablo en la carta a los
corintios. Él aconseja, sugiere, opina, exhorta y amonesta teniendo en cuenta la
situación de la comunidad, en el marco social, y la situación de la persona, en el
marco de la comunidad. No impone criterios rígidos que agobien la conciencia de
las personas, sino que busca que cada persona esté a gusto con su situación.
La comunidad, preocupada por opiniones adversas al matrimonio, le
pregunta al apóstol Pablo: ¿sería preferible no casarse? Para Pablo lo importante
es que cada persona de la comunidad cristiana se sienta a gusto y motivada para
servir. Por eso su mensaje no orienta a los que están casados, sino que se preocupa
por los judíos y por los esclavos. Los judíos para que no renieguen de su cultura y
tradiciones, pero para que tampoco se la impongan a los demás. A los esclavos los
anima a no desanimarse por su condición y a buscar una oportunidad para
liberarse. De este modo, ninguno se puede sentir ni inferior ni superior a los otros.
Todos son iguales porque al interior de la comunidad se respeta la diferencia. Este
es el principio de igualdad.
En todos los casos, situaciones, estados civiles, posiciones sociales... Pablo
insiste en la urgencia de buscarse un camino para vivir la libertad que nos dejó
Cristo y, siendo libres, preparar la irrupción del Reino. El Señor vuelve cuando la
comunidad, libre ya de trabas sociales, culturales o ideológicas, da testimonio de
un modo de vivir alternativo y liberador.
Esta capacidad, para discernir cada situación en particular, fue una de las
cosas que más admiró la multitud en Jesús. Mientras otros maestros y líderes
respondían con exhaustivas explicaciones y citando códigos, preceptos y
doctrinas, Jesús respondía con la verdad simple y llana.
Jesús estaba interesado en la situación particular de cada ser humano: en sus
sufrimientos, en las ideas que lo atormentaban, en aquellas cosas que le impedían
ser libre y espontáneo. Este interés no obedecía a un interés político encubierto,
sino a una genuina valoración de cada persona que encontraba en el camino.
Muchos movimientos y grupos muestran interés por los individuos mientras estos
sirven a sus intereses proselitistas, mientras son sus adeptos, luego, si disienten,
los ignoran o los marginan. Jesús se manifestó abiertamente contra este modo de
actuar y lo declaró abiertamente: el sábado, o sea la ley, las costumbres, todo lo
prescrito, está al servicio de cada ser humano y no al contrario.
Precisamente, su lucha contra los demonios fue una lucha contra las
ideologías instaladas en las sinagogas, que buscaban un mesías glorioso, un
militar implacable, un reformador religioso. Jesús nunca se identificó con estos
propósitos. Por esta razón, conmina a los “espíritus inmundos” o ideologías
opresoras a guardar silencio y a no tratar de seducirlo con falsas aclamaciones y
reconocimientos.
El pueblo sencillo reconocía esta lucha contra el formalismo de la ley la
ideología que la sustentaba. La propuesta de Jesús los liberaba de la pesada carga
moral, económica y cultural que suponía cumplir los más de seis mil preceptos
que estaban vigentes para regular todos los aspectos de la vida personal y
comunitaria. Mucha gente se preguntaba: ¿no será este hombre el nuevo
legislador? ¿No será el hombre prometido como reemplazo del profeta Moisés?
¿No será la propuesta de Jesús, el Reinado de Dios, la “nueva Ley?” ¿Por qué sus
acciones liberadoras y su lucha contra el mal es tan eficaz?
Hoy debemos preguntarnos: ¿hemos seguido la propuesta de Jesús de que
cada ser humano tenga un valor inalienable? ¿Creemos que nuestra tarea, como
anunciadores de la buena nueva, es ayudar a todos los seres humanos a liberarse
de las trabas que nos les permiten crecer con libertad y espontaneidad? ¿Tiene
carácter normativo la Buena Nueva de Jesús, o la tomamos a la ligera como las
noticias de cada día?
El evangelio de hoy es dramatizado en el capítulo 18 de la serie «Un tal
Jesús», de los hnos. López Vigil. El audio, el guión, y su comentario bíblico-
teológico, pueden ser tomados de aquí: https://radialistas.net/18-un-loco-quiere-
entrar/
La serie «Otro Dios es posible», de los mismos autores, aborda el tema
«¿Endemoniados?»: es su entrevista número 46, cuyo guión y/o audio puede
recogerse en https://radialistas.net/46-endemoniados/
Si se quiere abordar el tema del celibato o del voto de castidad (segunda
lectura de hoy), la misma serie tiene dos capítulos, el 38, titulado «¿Voto de
castidad?» ( https://radialistas.net/38-voto-de-castidad/), y el 67
(https://radialistas.net/67-celibato-sacerdotal/), titulado «¿Celibato sacerdotal?»,
que, sin duda, pueden suscitar un diálogo-debate sobre el tema.

Para la revisión de vida


- La palabra de Jesús fue siempre una palabra autorizada, llena de verdad y
de vida; por eso expulsaba demonios y liberaba a los oprimidos por el mal.
¿Somos verdaderos discípulos de nuestro Maestro? ¿Es nuestra palabra,
como la suya, una palabra autorizada y eficaz, que engendra libertad,
justicia, paz, esperanza, amor y vida a los hermanos más necesitados?

Para la reunión de grupo


- Una constante tentación de la gente religiosa es la de pretender forzar y
manipular la divinidad. ¿Busco en mi vida a un Dios doméstico y
domesticado, hecho a mi imagen y semejanza, de acuerdo con mis
conveniencias personales, ideológicas y sociales, o le acepto tal cual El es y
se me da a conocer?
- Todos y cada uno de los miembros de la comunidad tenemos que realizar la
misión que el Señor nos encomienda; casados o solteros, lo importante es
responder a su llamada y no utilizar esa condición para establecer
categorías entre nosotros. ¿Cómo colaboro yo, con los dones que el Señor
me ha dado, a la construcción de una Comunidad rica por su variedad, y a
la implantación del Reino entre nosotros?
- Jesús actuaba de tal manera que nadie quedaba indiferente ante él; unos lo
admiraban, otros no podían soportar su libertad y su cercanía a Dios
Padre. Mi actuación, la de mi comunidad, ¿interpela a la gente que nos ve
y nos rodea, impresiona, cuestiona, hace reflexionar, alegra, libera, trae
paz, justicia y esperanza, o deja indiferentes a los demás?
-
Para la oración de los fieles
- Para que la Iglesia tenga siempre una palabra creíble, basada en su
compromiso real y eficaz con los pobres. Roguemos al Señor.
- Para que los pobres, los enfermos, los ancianos, los emigrantes y todos los
que sufren escuchen la Buena Noticia de su liberación en palabras y en
hechos. Roguemos…
- Para que tanto los que viven el celibato como los que ha construido una
familia sepan vivir en fidelidad a lo que Dios ha pedido a cada uno.
Roguemos…
- Para que los gobernantes sepan trabajar eficazmente por el bien común,
preocupándose de manera especial por los pobres. Roguemos…
- Para que nuestros hermanos difuntos vivan ya la plenitud de vida junto a
Dios. Roguemos…
- Para que todos nosotros sepamos hacer de nuestra fe, nuestra vida y demos
testimonio autorizado ante todos de Jesucristo Muerto y Resucitado.
Roguemos…

Oración comunitaria
- Dios, Padre nuestro, Tu que nos amas hasta el extremo, enséñanos a amar
a los demás con todas nuestras fuerzas, y que nuestro amor no se quede en
buenas palabras, sino que se traduzca en obras de justicia, de amor y de
servicio a favor de todas las personas. Por Jesucristo.
-
- Oh Dios, que suscitaste líderes y profetas que hablaran en tu nombre y
guiaran a tu pueblo en todos los momentos de su historia, y que en la
plenitud de los tiempos enviaste a tu hijo para que fuera maestro, camino,
verdad y vida. Suscita de en medio de nosotros nuevos profetas para que
sepamos iluminar con tu palabra los retos que nos plantea la historia y
seamos verdaderos testigos de tu proyecto. Por Jesucristo.
Lunes 1 de Febrero
Brígida de Irlanda (525)

Heb 11,32-40: Dios tiene algo mayor para nosotros


Salmo 30: Sean Fuertes y valientes de corazón, los que esperan en el Señor
Mc 5,1-20: Cuenta lo que el Señor te ha hecho

V ivimos en un mundo muchas veces gobernado por la malignidad y la muerte.


De esas fuerzas del mal no está exenta la religión. El territorio de los gerasenos
estaba dominado por las fuerzas de la muerte, que Roma, con su sistema político-
militar-imperial, ha hecho reinar en esa zona. Jesús llega a liberar del dominio de
la muerte a esa región y a los que habitan allí. Jesús se enfrenta con las fuerzas del
maligno que ha puesto su imperio en medio de la gente simple y sencilla. Siempre
son los pobres y los humildes, las víctimas de la dominación del mal. Jesús
abiertamente se coloca del lado de las víctimas de la historia y desenmascara al
mal que se busca enseñorear sobre los pequeños. El gran problema es que el mal
ejerce una fascinación tal, sobre sus propias víctimas, que llega a gustar tanto, que
sus inmolados quieren quedarse viviendo con él y deciden expulsar a los que son
portadores de la vida, de la dignidad, del bien, de la felicidad.
Martes 2 de Febrero
Presentación del Señor

Mal 3,1-4: Llega el mensajero del Señor


Salmo 23: El Señor, Dios de los ejércitos, es el Rey de la gloria
Heb 2,14-18: Jesús, un ser humano en plenitud
Lc 2,22-40: Será signo de contradicción

J esús es reconocido como la luz que ilumina a las naciones. Esta tarea que
Simeón indica sobre Jesús de Nazaret, es la que ha de cumplir todo discípulo. Un
cristiano está llamado, por vocación, a ser signo de luz y de liberación en el
mundo y en medio de las realidades donde se encuentre inmerso. Hay una
invitación concreta para quienes siguen a Jesús: ser portadores de fe y de
esperanza frente a tanta angustia, sufrimiento y muerte que se imponen. No se
trata que un cristiano esté llamado a hacer un “happy end” como el de las
películas de Hollywood, sino que la invitación es a ser testigo de la vida, la luz, la
justicia y la felicidad en medio de las situaciones adversas que se presentan. Ser
como Jesús y vivir como él vivió, es llegar a ser luz en medio del mundo y a vivir
lo paradójico de su mensaje: no acumular, no atesorar, perderse a sí mismo, es la
garantía de vida en abundancia, de la felicidad.
Miércoles 3 de Febrero
Óscar (865); Blas, mártir (316)

Heb 12,4-7.11-15: Dios los trata como a hijos


Salmo 102: La misericordia del Señor dura para siempre
Mc 6,1-6: A un profeta lo desprecian en su patria

J esús siente en carne propia el desprecio por parte de los suyos, en su pueblo
natal, allí donde la gente lo conoce a él y a su familia. Es allí, y no en otro lugar,
donde desprecian su enseñanza. Preguntan que de dónde saca esa inteligencia y
esa manera de discernir en la vida, si todos conocen su origen. Jesús cae en
desgracia en medio de su pueblo, simplemente porque su forma de pensar, de
hablar y de actuar no se acomoda a la forma tradicional, establecida y acogida
como normal, en medio de sus conciudadanos. Esto es lo que sucede con
permanente frecuencia en cualquier círculo humano social, cultural o religioso,
cuando alguna persona se sale del esquema tradicional: se le condena, se le
estigmatiza, se le expulsa. Se le suele cobrar ese atrevimiento con la propia vida.
Ser como Jesús y optar por la causa que el optó acarrea problemas serios con la
familia, con la sociedad, con la religión. ¿Estamos dispuestos a asumirlos?
Jueves 4 de Febrero
Andrés Corsini (1373)

Heb 12,18-19.21-24: Se acercaron a Sión


Salmo 47: Oh Dios, meditamos tu misericordia en medio de tu templo
Mc 6,7-13: Los envió de dos en dos

J esús envía a los Doce a la Misión. Este mandato que dio a ese grupo de amigos
cercanos suyos, es un mandato que llega a todos los bautizados por extensión. La
misión es la identidad de la Iglesia. Quien ha sido introducido en la causa de
Jesús, a través del bautismo, está llamado a vivir la misión de anunciar la Buena
Nueva. La Misión consiste en llevar felicidad, alegría, sanidad, esperanza a la
gente que recibe la Buena Noticia. La misión es el compromiso que tiene el
discípulo de extender y propagar el proyecto de humanización querido por Dios e
inaugurado por Jesús, haciendo que otro mundo sea posible. Aquí es donde la
Iglesia se juega, hoy más que nunca, su credibilidad. Por ello hay que decir No a
una misión que hace del cristianismo una cuestión doctrinal-teórico, moralista y
espiritualista. No a una misión que genere un cristianismo eclesiocéntrico. No a
una misión desencarnada de la historia, de la realidad política, de la cultura de un
pueblo.
Viernes 5 de Febrero
Santo

Heb 13,1-8: Jesucristo es el mismo siempre


Salmo 26: El Señor es mi luz y mi salvación
Mc 6,14-29: Muerte de Juan el Bautista

C ualquier propuesta generadora de conciencia crítica frente a los sistemas


tradicionales, son vistos y entendidos como una amenaza para los que detentan el
poder en cualquier tiempo y ambiente geográfico. Los poderosos saben cobrar,
con la vida de los carismáticos, el temor de perder el poder, que se suscita en ellos
con la llegada de la nueva propuesta que hace la persona que desafía el estamento
tradicional. Es eso lo que le pasó a Juan Bautista. Él fue una amenaza para
Herodes, para su vida sucia y su cruel política. Los sistemas de poder totalizantes
y totalizadores suelen imponer el miedo a base de violencia. Quien opta por la
justicia, la verdad, la paz, la vida digna, la inclusión, la defensa de la creación, el
acompañamiento a los grupos vulnerados entra en conflicto con la política y la
religión. Que la figura de Juan el Bautista ayude a plantearse cuestiones, a entrar
en crisis y en conversión, a romper seguridades propias y estructurales. Que su
memoria siga animando la caminada.
Sábado 6 de Febrero
Santo

Heb 13,15-17.20-21: Hagan el bien


Salmo 22: El Señor es mi pastor, nada me falta
Mc 6,30-34: Parecían ovejas sin pastor

F ue el sufrimiento humano, la realidad que le quitó el sueño a Jesús de Nazaret.


Fue el dolor, el hambre, la enfermedad y la exclusión lo que preocupaba
grandemente al Maestro de Nazaret. Pero sobre todo la mentira que se tejió
entorno al sufrimiento humano y Dios. Jesús está en desacuerdo con las lecturas
que la religión ha hecho de vincular a Dios con el sufrimiento que padecían las
personas, en especial los más pobres. Por eso la propuesta de Buena Noticia,
buscaba mostrar al Padre Dios como el Padre bueno, misericordioso, incluyente,
garante de la vida y de la felicidad de las personas. Por ello la Buena Nueva no es
la transmisión de una nueva doctrina, de nuevas formulas religiosas, litúrgicas, o
disciplinares, sino la puesta en marcha de un camino de felicidad y de vida
abundante. Jesús al sentir en carne propia el dolor y la angustia que sentía la
gente, propone algo novedoso en favor de la vida y felicidad de los que la pasan
mal en la historia.
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