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De los Fabulistas en la Antigüedad (Esopo y Fedro) a los Fabulistas Modernos (Bembo, La

Fontaine, Iriarte, Samaniego).


Las fábulas son un género didáctico de origen hindú, generalmente protagonizado por
animales, con una enseñanza final llamada moraleja ofreciendo al lector consejos y
enseñanzas morales. En la India tenían una gran cantidad de colecciones de fábulas que se
encontraban en libros como, por ejemplo, el Panchatantra (Los Cinco Libros). De ahí, a
través de los persas y sobre todo de los árabes, las fábulas pudieron llegar a Grecia y
Roma y, desde ellos, hasta la modernidad.
Los Fabulistas Griegos: Esopo
Las fábulas cuentan con más de 2700 años de existencia. A lo largo de la historia de la
literatura, las fábulas siempre han estado presentes y, en la actualidad, contamos con una
cantidad numerosa de ellas. Entre los muchos creadores de estas, predominan por su
importancia los siguientes (la lista podría ser demasiado extensa): Esopo, Fedro, Bembo,
La Fontaine, Iriarte, Samaniego.
Esopo (Aesopus) fue un fabulista de la Antigua Grecia, nacido en Amerium, sobre el año
620 a. C. Gozaba de gran popularidad, pero no se pueden establecer con seguridad datos
relacionados con su biografía. Vivió como esclavo del filósofo Janto y, tras ello, de Jadmón,
hasta que consiguió liberarse y fue admirado por la aristocracia de la época por su talento
para contar historias de animales.
En una ocasión, Esopo fue enviado al oráculo de Delfos, advocado al dios Apolo. El
fabulista apreciaba poco a los sacerdotes, por lo que no les entregó una cantidad de
dinero que ellos esperaban y, como venganza, decidieron tenderle una trampa, poniendo
en su equipaje una copa de oro consagrada a Apolo. Por ello, fue acusado de robo,
condenado y ejecutado, lanzado al vacío desde la roca Hiampa. Según la leyenda, antes de
morir anunció el fin de Delfos, por su falsa condena.
Las fábulas de Esopo fueron recopiladas en la Edad Media por el monje Planudes
Maximuses y su vigencia resiste el paso del tiempo. Esopo ha influido en los más grandes
fabulistas posteriores: Fedro, Jean de La Fontaine, Félix María Samaniego... Todos se han
inspirado en el padre Esopo.
Además, sus escritos solían presentar animales que actuaban con cualidades humanas y
contenían siempre una moraleja, un rasgo que se ha vuelto imprescindible en cualquier
fábula que se precie.
Fabulistas Romanos: Fedro
Cayo Julio Fedro nació en Macedonia, hacia el 20-15 a.C., y murió hacia el 50 d.C.
Fue un fabulista latino de la época imperial y autor de cinco libros de fábulas en verso.
A pesar de que era un esclavo, recibió una buena educación desde su infancia. Fue llevado
a Roma siendo todavía un niño y allí entró a formar parte del grupo de esclavos de
Augusto, del que luego fue liberado.
Bajo el gobierno de Tiberio, se ganó la enemistad del grande y poderoso ministro Sejano,
el cual le acusó de haber hecho maliciosas alusiones personales, tras la máscara anónima
de los animales de sus primeros libros, y fue condenado por ese supuesto "delito".
Su estado de desgracia absoluta lo llevó a pedir el apoyo de libertos ricos, como por
ejemplo Eutico y Particulón, a quienes dedicó sus dos primeros libros. Escribió los tres
últimos en la vejez
En cuanto a sus fábulas, se conservan más de un centenar en verso. Algunos de los cinco
libros que las recopilan son especialmente breves. A ellos, hay que añadir treinta nuevas
fábulas, conocidas como Appendix Perottina en las ediciones modernas.
Sus fábulas siguen el estilo de Esopo. Fedro es claro y sencillo. Se caracteriza por la
brevedad, la variedad y el cuidado de la expresión.
Aún en nuestros días, es difícil no conocer las fábulas de "El lobo y el cordero", "La zorra y
las uvas" o "La zorra y el cuervo".
Fabulistas del Clasicismo Francés (siglo XVII): La Fontaine
Fabulistas de la Ilustración española (Siglo XVIII): Iriarte y Samaniego
Tomas de Iriarte fue un escritor y fabulista español nacido en las Islas Canarias. En 1764,
se trasladó a la península junto a su tío, el bibliógrafo y poeta Juan de Iriarte, con quién
estudió las lenguas griega y francesa. Además de estudiar la literatura castellana, ocupó el
cargo de oficial traductor de la secretaría de estado. Y así es como tradujo el Arte poética
(1777) de Horacio y como compuso La Música, 1779, poema escrito en silvas, donde
desarrolla su teoría acerca de ese arte que "habla a los corazones/. El idioma genial de las
pasiones". Escribió las comedias La señorita mal criada (1788) y El señorito mimado
(1790). En Guzmán el Bueno (1791) introdujo el monólogo dramático con
acompañamiento de orquesta. Es, sobre todo, conocido por sus Fábulas literarias y se
reivindicó como el primer español en introducir el género, lo que motivó una contienda
con su examigo Félix María Samaniego, que había publicado su colección de fábulas en
1781.
Encontramos a Felix María de Samaniego unos cuantos años después (nació en Laguardia,
Álava, en 1745, y murió en el mismo pueblo, en 1801), uno de los mejores fabulistas de
España. Autor de Fábulas morales, 157 fábulas distribuidas en 9 libros, escritas para los
alumnos del seminario de Vergara. Samaniego ridiculiza los defectos humanos en cada
una de sus fábulas, imitando así a los grandes fabulistas (Fedro, Esopo y La Fontaine).
Aunque sus fábulas están escritas en verso, su carácter es prosaico y su finalidad,
didáctica.
Esopo
Esopo no se sabe en donde nació. Unos dicen que nació en Tracia (Provincia romana que
ocupaba la actual Bulgaria, Grecia y Turquía), otros en Samos (una isla griega), en Sardes
(Antigua ciudad de Asia menor) y otros decían que era de Egipto (País de África). Era
esclavo de un filósofo muy famoso llamado Janto. Murió en el año 564 a.C. en Delfos,
Grecia.
Antonia de Ibarra
Antonia Ibarra era una mujer que usaba la imprenta de su padre para imprimir las fabulas
de Esopo en griego. Su padre era el dueño de una imprenta. Tras la muerte de su padre se
hizo a cargo su mujer María Antonia Ibarra Cous después se puso a cargo su hija Antonia
Ibarra. Sus fábulas las publicó Antonia Ibarra en 1768 en la imprenta de la Universidad de
Cervera (Cataluña).
Tomás de Iriarte
Tomas de Iriarte nació el 18 de septiembre de 1750 en Puerto de la Cruz, Tenerife y
falleció el 17 de septiembre de 1791 en Madrid. Se murió a los cuarenta y un años. Era
fabulista, traductor. Dramaturgo y poeta español de la ilustración.
Félix María Samaniego
Félix María Samaniego nació en La Guardia (Álava) un pueblo muy bonito el 12 de octubre
de 1745. Estudio en el colegio de Francia. Cuando se hizo mayor estudió en la universidad
de Valladolid. Su madre llamada Juana y su padre Félix Ignacio estaban muy orgullosos
porque se hizo famoso escritor español de fábulas. Luego murió igual en que donde nació,
en La Guardia el 12 de agosto de 1801.
María de Francia
María de Francia, en francés Marie de France, nació en el siglo XII y vivió en Inglaterra.
Fue fabulista y era una mujer que sabía latín. Adaptó las fábulas de Esopo.
Origen de las Fábulas
Del origen de las fábulas es un ensayo publicado en 1684 por el pensador y filósofo
francés Bernard Le Bovier de Fontenelle.
Fontenelle aplica, en El origen de las fábulas, el método comparativo de la religión para
atribuir a la ignorancia de los primeros hombres, que debían recurrir a las divinidades
superiores para explicar los hechos de los que ellos desconocían la causa, su creencia en lo
sobrenatural.
La fábula nació en Oriente, concretamente en la India, con un afán didáctico o de
enseñanza para educar a los hijos de los nobles e infundir en ellos valores y virtudes que
les ayudaran a convertirse en gobernantes. Debido a su intención, brevedad y fácil
comprensión, estos relatos se difundieron por Oriente y llegaron a Europa gracias a
viajeros navegantes. En Grecia fue Esopo quien retoma el género y crea sus fábulas en
medio del intenso ambiente cultural griego. En Roma, Horacio y Fedro se inspiraron en
Esopo para escribir sus textos morales. Posteriormente, en la Edad Media y el
Renacimiento, los cruzados difundieron las nuevas fábulas de Oriente aprendidas en los
lugares donde combatían.
Así es como la fábula fue evolucionando y enriqueciéndose hasta nuestros días para
continuar con el propósito principal con el que fueron creadas: moralizar.
El Panchatantra es una colección de fábulas en prosa y verso, escrita en Sánscrito y
compuesta después del siglo III a. C. y cuya autoría se atribuye, con cierta incertidumbre, a
Vishnú Sharma.
Según la historia que se cuenta en el Hitopadesha (siglo VII), el rey Sudarshana,
preocupado por la educación de sus jóvenes príncipes, le encarga la enseñanza de la
moral a un bráhmana (sacerdote) llamado Viṣṇu Śarman (quien es considerado el autor
del Pañcha tantra).
El texto consiste en la ilustración antropomórfica de los cinco principios más importantes
del rāja nīti (ciencia política) a través de los animales. Los cinco principios ilustrados son:

 Mitra bheda (como dividir a la familia)


 Mitra lābha (cómo ganar amigos)
 Suhrid bheda (disensión con la amada)
 Vigraha (separación)
 Sandhi (unión)
Nota:
Dicen que Esopo era un esclavo muy feo. De ahí el dicho "Ser más feo que Esopo". Otros
añaden que era negro de Etiopía y que el nombre Αἴσωπος (Aisopos) deriva de Αἰθίοψ
(Aitheops = etíope, de cara quemada). Una de sus fábulas es "Lavar al etíope (o moro
negro) hasta que quede blanco".
https://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/los-fabulistas-espaoles---con-especial-
referencia-a-los-siglos-xviii-y-xix-0/html/ffcb0a88-82b1-11df-acc7-
002185ce6064_4.html#I_0_
https://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/fabulas-literarias--0/html/
https://es.wikipedia.org/wiki/F%C3%A1bulas_de_Esopo
http://etimologias.dechile.net/?Esopo#:~:text=Dicen%20que%20Esopo%20era%20un,)
%20hasta%20que%20quede%20blanco%22.

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