Asignatura: Curso o Seminario Optativo 8-III. Orientación Educativa
y Neuro-Aprendizaje Emocional II. Prof. Deveaux González Paulo César. Nombre: Pérez Tabla Eliott Jordán. Grupo: 8GM2. La Orientación Educativa en los Procesos de Enseñanza y Aprendizaje (Apuntes de Apoyo) Para empezar, bien puede entenderse, en primera instancia, a la Orientación Educativa como: […] aquella relación de ayuda (proceso interactivo) que se establece entre el Orientador y el Orientado (individuo o grupo). Y en cuanto a sus orígenes, se llegan a identificar de manera independiente entre los Estados Unidos de Norteamérica y Europa, durante el Siglo XX (Ruiz, 2016, p. 48). Este fenómeno impulsó el estudio y, posteriormente, el tratamiento de las características de las personas para desempeñarse en diferentes ámbitos de labor, al mismo tiempo que los procesos de ayuda, consistentes en el intercambio entre el Orientador y el Orientado en función del mejoramiento del rendimiento académico y la disciplina de este último, se introducen con mayor intencionalidad en la escuela y en otros contextos, esto con el fin de contribuir a la formación integral de la personalidad de todos los implicados. De este modo, la Orientación Educativa comenzó a abarcar nuevos contenidos relacionados no solamente con la ayuda encaminada a la capacitación para una futura profesión (Orientación Profesional), dando lugar al desarrollo de la Orientación Personal, la Orientación Familiar y la Orientación Escolar. Esta última habría que resaltar, ya que, de acuerdo con Parra (2009), citado en Ruiz (2016), la Orientación Escolar es considerada una de las áreas prioritarias de actuación de la Orientación Educativa: […] teniendo en cuenta los continuos cambios y las crecientes necesidades que caracterizan la práctica educativa en correspondencia con las variables demandas de la sociedad; al mismo tiempo, el accionar en esta área de orientación se encuentra en estrecha relación con las teorías de aprendizaje que se asuman, las características del educando y el contexto escolar, así como demás áreas que rodean a la propia Orientación Educativa (p. 48). En pocas palabras, la Orientación Escolar estudia los conocimientos, teorías y principios que facilitan los procesos de aprendizaje, refiriéndose a temas como son, por ejemplo, hábitos y técnicas de estudio, habilidades y estrategias de aprendizaje, así como aquellas dificultades que surgen en durante el proceso. Sin embargo, y como bien afirma Pérez (2007), citado en Ruiz (2016), la Orientación Educativa tiene como centro “la asistencia al estudiante, el cual surge con el fin de que este aumente su rendimiento académico y, así, encuentre soluciones a los problemas de aprendizaje a presentarse” (p. 48). Por otra parte, Nerici (1990), citado en Ruiz (2016), plantea que la Orientación Educativa constituye “un proceso educativo, a través del cual se asiste al educando con el fin de que este pueda obtener un pleno rendimiento en sus actividades escolares a realizarse” (pp. 48- 49). De igual modo, para Ayala (1998), citado en Ruiz (2016), la Orientación Educativa implica: […] un proceso de asesoramiento continuo en el que el docente promueve actividades de tipo preventivo, que estén dirigidas a la formación de hábitos de estudio, de atención y concentración en clase, y del aprovechamiento del tiempo y el desarrollo de habilidades cognitivas (p. 49). Por su parte, Torres (2005), citado en Ruiz (2016), asume que la orientación escolar es “un proceso continuo e integrado en la actividad de enseñanza y aprendizaje, mediante la cual el docente atiende las necesidades individuales y grupales, en conjunto con la cooperación de todos los miembros de la comunidad educativa” (p. 49). Para Repetto (2006), citado en Ruiz (2016), la Orientación Educativa: […] consiste en la ayuda que se le presta al Orientado para que su aprendizaje sea eficiente e individualizado; esto sugiere que el estudiante alcance el máximo rendimiento académico posible. Y para alcanzar esa meta, el Orientador debe de imbricar tres sectores: El alumno, los profesores y el currículum (p. 49). En resumen, estos autores consideran que la Orientación Educativa debe de contribuir a facilitar el proceso de adquisición de contenidos por parte del alumno, así como el conocimiento de los factores que inciden en el rendimiento académico y al asesoramiento para la prevención del fracaso escolar; abogando a que la orientación forme parte de los planes y programas de las escuelas, ya que el aprendizaje de los alumnos es una de las principales razones que deben de ser considerados en los centros educativos. En conclusión, el garantizar el derecho a la educación de los alumnos va asociado a generar las condiciones para que éstos accedan y desarrollen los conocimientos y competencias que se consideran imprescindibles para su desarrollo integral, para que así puedan participar activamente en el mundo en que viven e imaginar otros posibles. Esto, más que nada, tiene que ver con, entre otras cosas, con la contextualización y personalización de los procesos de enseñanza y aprendizaje; es decir, de su ajuste a la diversidad existente. Es aquí donde se ha querido ubicar en este trabajo la Orientación Educativa, así como la función general del docente. Como reconocimiento de la importancia que tiene el papel de la Orientación Educativa en los procesos que contribuyen a garantizar el derecho a la educación, y a el acceso a los aprendizajes socialmente relevantes para los alumnos. Referencia Bibliográfica. Ruiz, R. (2016). La Orientación Escolar en el Proceso de Enseñanza y Aprendizaje de las Ciencias Naturales. Universidad de Holguín, (21), pp. 48-49. Recuperado de: https://revistas.uniminuto.edu/index.php/Inventum/article/download/ 1449/1384/3867#:~:text=El%20proceso%20de%20ense%C3%B1anza%20%2D %20aprendizaje%20de%20las%20ciencias%20naturales%20posee,las%20restantes %20%C3%A1reas%20de%20orientaci%C3%B3n.