CONCEPTOS SOBRE ESCULTURA

Técnicas y análisis de obra

La escultura es el juego de volúmenes en el espacio, ubicado en un tiempo

determinado como objeto único e irrepetible cuya percepción estética dependerá de
los elementos constitutivos en lo conceptual, en lo temático y en lo técnico.
Así como el escultor necesita tiempo, ya sea para dar forma a una idea y de
concretar esta en materia, así también necesitará por ende de los conocimientos
técnicos que le ayuden a materializar en lenguaje perceptible ese mundo propio de su
intuición y su sensibilidad que el intelecto procesará en una idea clara y coherente al
cual la técnica deberá adecuarse.
Para que la obra exista por si misma, una vida independiente de quién la realizo
exige de este, tiempo interno de desarrollo de la idea, tiempo de materialización y
conocimientos de cómo llevarla a cabo.
No solo basta saber como servirnos de la materia y de los materiales, en primer
lugar, debemos tener en cuenta que la idea que queremos transmitir con nuestra obra,
como todo lenguaje sea lo suficientemente clara; además como composición debe
soportar un análisis de los elementos constitutivos.
A nivel compositivo se requiere una unidad de la estructura básica, con una variedad
de formas que le den una mayor riqueza visual, creando un ritmo, marcado por las
direccionales y un equilibrio fundado en la ubicación tempo-espacial de las masas que
la construyen.
Pasemos a analizar esto que aparentemente suena oscuro. Hablamos de una
estructura básica, porque la obra está inscripta en una ó en una sucesión de figuras
geométricas simples, que nos de la idea general de cómo será plantada en el espacio,
ya sea que hablemos de escultura de bulto, tridimensional o de la escultura mural,
básicamente bidimensional (pues la tercer dimensión se ve reducida en relación a las
otras dos, pero nunca visualmente ya que sigue percibiéndose como tridimensional),
Este conjunto de figuras geométricas simples, una o varias como ya he dicho, nos
remitirá a una percepción global de la esculturas , es decir una visión de su totalidad,
en donde los detalles y el acabado de pierden y se fusionan dentro de ese todo.
Aquí es el punto donde debemos pensar la obra, en relación al entorno, que al mismo
tiempo que la enmarquen, determinará la dimensión del todo y de las partes en la
percepción visual final.
Esta estructuración básica basada en figuras geométricas simples nos dará las
formas dominantes de la obra aun cuando tratemos de la copia de la figura humana
del natural.
Estas formas dominantes sobre las cuales se irá construyendo la obra deberá tender
a una armónica unidad. Unidad visual que lleva implícita una multiplicidad de formas
congregadas, espacios o vanos que determinarán la realización de una forma cerrada
dentro de su espacio límite o continente, o por el contrario formas abiertas de
interacción entre espacios y llenos en una equilibrada conjunción de formas sólidas y
vacías jugando con el espacio envolvente. Las figuras geométricas simples que
constituyan el organigrama de estructuración base, marcará las direccionales en el

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juego de volúmenes, es decir la dirección del campo de fuerza de estos volúmenes y
el ritmo creado por esas direccionales, como en las piezas musicales regulará el
movimiento de la percepción visual, ese movimiento virtual que contiene la obra
aunque objetivamente sea estática, es decir exenta de movimiento.
Las direccionales nos marcarán el peso de las masas y por ende nos mostrará la
estructura interna que deben llevar las mismas para mantener no solo un equilibrio
visual, sino el equilibrio de masa. Así la estructura interna, como un esqueleto óseo al
hombre, le permitirá aún en las poses más ingrávidas, mostrar con énfasis su conexión
con la base y lo que es más importante el apoyo al plano horizontal, que es no solo la
referencia natural del ojo humano, sino su punto real de apoyo. Evidentemente este
soporte interno tendrá en cuenta no solo la pose sino la escala elegida para la obra.
A los efectos de la ubicación de la obra en el contexto en el que irá emplazada
debemos imaginar la relación espacial obra-entorno, y así percibir las modificaciones
que se producen, tanto en la obra como en el espacio físico donde se inserta.

Recordamos que toda escultura debe tener:

a) UNIDAD ESPACIAL
b) ESTRUCTURA BÁSICA DE LAS FORMAS DOMINANTES
c) EQUILIBRIO EN LA RELACIÓN DE MASAS, en los llenos y vacíos
d) RITMO
e) DIRECCIONALES DOMINANTES, marcarán
f) LA LÍNEA DE CONTINUIDAD ENVOLVENTE que en la
g) VARIEDAD FORMAL encuentra la UNIDAD ESPACIAL

En cuanto a la temática, cada uno elaborará de acuerdo a la imagen personal, las

propuestas que considere expresen mejor el mensaje a transmitir. Toda obra, inscripta
en cualquier corriente estética, sea clásica, renacentista, neoclásica, pop, arte pobre,
etc., conlleva un sentido trascendente como lenguaje inmerso en su realidad plástica.
La técnica es solo el vehículo, el medio que permitirá que nuestro lenguaje se
concretice, su importancia radica en el simple hecho que nuestra obra no sea el
resultado de la casualidad, del azar, sino de la causalidad que le brinde nuestra mano.
Evidentemente los materiales que elijamos, determinarán la técnica a aplicar, y ambos
deben provenir de la obra misma.
Por cierto, es que los elementos compositivos conceptuales, temáticos y técnicos se
encuentran incluidos en los dibujos preliminares y bocetos de la obra. Estos tienen
como razón de ser fundamental, el que sirven para clarificar la idea del tema, la
resolución en la composición y la elección de la técnica correspondiente para su
realización.
En ESCULTURA los dibujos ó croquis deben ser de todas sus caras y de planta para
que desde el comienzo podamos lograr ajustar todos los volúmenes en la composición
y no parcializar en una de sus caras, riesgo corriente en el que caen los principiantes y
da como resultado vistas parciales que en nada favorecen a la unidad de la obra.
De acuerdo a los dibujos se podrá, además calcular la estructura interna para realizar
la obra en material precario como la arcilla, para resolver luego definitivamente su
composición a los efectos de ser pasada al material definitivo.
La técnica en si misma no transmite nada, no nos conmueve, el mensaje está en el
tema y supeditado a la composición, lo cuál en última instancia determina la obra
como objeto estético.

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 Revisemos las posibilidades que ofrecen cada uno de los elementos de la
composición a los que me he referido anteriormente.
Toda masa ó volumen posee una tensión orgánica interna, ese juego de tensión
hacia donde se percibe, es lo que nos muestra la dirección hacia donde se desplaza la
fuerza y como se consigue el equilibrio de unas fuerzas con otras.
Cuando hablamos de direccionales, estas pueden ser por ejemplo ortogonales, lo
que otorgará un arcaísmo ó una estaticidad de acuerdo a la imagen elegida, esto
puede ser compensado por el uso de una direccional preponderantemente diagonal, lo
que lleva implícito una concepción más dinámica.
Ya me he referido al ritmo como un elemento que determinara el movimiento visual
sobre la obra. La línea de continuidad se desplaza por las direccionales relevantes,
pero también encuentra su cauce en ese ritmo, que puede ser de repetición, de
simetría, de crecimiento, en cualquiera de los puntos de nuestro encuadre visual de la
obra.
Este ritmo puede estar construido por huecos y llenos; los vacíos, el aire son parte de
la forma totalmente concebida. El ritmo puede estar dado también por las zonas
texturadas, ya sea con la textura propia del material utilizado ó como parte de la
expresión dada al material.
Las soluciones para lograr un ritmo armónico y equilibrado dentro de las
direccionales es tarea de cada autor, y dependerá de la sensibilidad de cada uno.
Analizando nuestras propias obras y las que la historia nos brinda, aprenderemos a
ejercitar nuestra visión, de tal manera que nuestra intuición resista el análisis crítico.

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Somera guía para análisis de obras escultóricas
(incluyendo murales)

DIRECCIONALES: Ortogonales – Estática

Diagonales - Dinámica

RITMO: Repetición, Oposición , Simetría,

crecimiento, etc.

LINEA DE CONTINUIDAD: envolventes,

espiraladas, en ondas, superpuestas,
geométricas, etc.

PUNTOS PREGNANTES: centros de máximo

interés
A) COMPOSICIÓN
TEXTURA: propias del material; propia de la
expresión

FIGURA-FONDO: espacios cerrados , abiertos

VANOS: parte de la forma

EQUILIBRIO: visual de la forma en el espacio

GRAFISMOS: en el mural, exploración de

distintos niveles del muro, a la esencia de la obra,
solo ornamento.

DESCRIPTIVO ANECDÓTICO: Realista

B) TEMÁTICA
PRESENTATIVO: Realidad nueva

DESCRIPTIVO ALEGÓRICO: Realidad nueva

que nos remite a lo conocido

Cálculo del diseño y visualización de la ubicación.

C) ESCALA Influencia hacia el hábitat, modificación del
entorno por la obra y/o mural; e influencia del
entorno en la percepción visual final de la obra

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 Elementos plásticos escultóricos

Volúmenes o masas:

Es el elemento plástico básico, esencial de toda escultura, al que se subordinan y para

el cual existen los otros elementos plásticos escultóricos.

Puntos escultóricos

Llamamos así todo bulto, prominencia, exaltación o centro mínimo que sirve como
eficaz referencia para la determinación de líneas, planos y volúmenes

Las líneas escultóricas:

Determinan planos reales, ubicados correctamente y modelada configura los

volúmenes

El plano

Es un elemento escultórico de importancia capital, su determinación delimita y

conforma volúmenes reales, los planos pueden ser rectos (que son estáticos o
neutros) o bien curvos (que son dinámicos y activos ya que son creadores del
espacio). El manejo de planos es fundamental para la ceración de relaciones
espaciales (concavidades, convexidades, ritmos mixtos).

Espacio

Es un protagonista fundamental en el diseño de la escultura moderna. Cuando el

espacio interpreta las masas los volúmenes se compensan y equilibran con los
huecos, se aligeran, se suavizan y se funden. Los planos curvos son un recurso
potente de la creación de espacios.

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Cóncavos y convexos

Es una relación fundamental dentro de la escultura moderna, equilibran y contrapesan

los volúmenes.

En geometría, la concavidad de una curva o de una superficie es la parte que se

asemeja a la zona interior de un objeto determinado, es decir, que tiene su parte
hundida dirigida al observador. Es el concepto complementario al de convexidad.

La convexidad de una curva o una superficie, es la zona que se asemeja al exterior de

un objeto determinado, es decir, que tiene su parte sobresaliente dirigida al
observador. Es el concepto opuesto a la concavidad.

lado convexo

lado cóncavo

Equilibrio

Consiste en la buena disposición de las masas o elementos que integran la

composición, es un factor esencial para lograr la buena forma. El desequilibrio, es
decir, la mala distribución de los elementos produce una sensación desagradable de
inestabilidad. En ocasiones este se logra intuitivamente

Simetría y asimetría:

Un plano o volumen son simétricos con sus mitades tienen la misma configuración con
respecto a un eje central (eje de simetría). La simetría es parcial cuando se realiza de
un solo lado (el cuerpo humano es simétrico de frente no de perfil, por lo tanto, es
parcialmente simétrico)

La distribución asimétrica de los volúmenes, son fuentes de dinamismo, variedad y

tensión y por lo tanto poseen una mayor carga expresiva.

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Composición forma abierta y cerradas

Son formas cerradas las que no interactúan con el espacio circundante. Son
estructuras compactas, de planos rectos, el espacio no logra penetrar la masa y nada
se proyecta hacia el exterior. Las formas abiertas son aquellas en las cuales el espacio
constituye una dimensión esencial. En esta, la organización está dada por la masa y el
espacio. La obra invade el espacio y el espacio penetra la masa

Composición dinámica y estática

En una composición dinámica se percibe movimiento, tensión y dirección. La

utilización de diagonales o sus perpendiculares y oblicuas dinamizan una obra. Las
composiciones estáticas son aquellas en las que prevalecen las líneas, planos o
volúmenes horizontales.

Textura:

Existen dos tipos de textura, por un lado, tenemos a la táctil y por el otro a la visual. La
táctil es aquella perceptible únicamente a través del tacto y que permite distinguir entre
materiales rugosos como puede ser un cartón, con relieve, como ser la de algún mapa
dibujado con relieves en los pertinentes accidentes geográficos, finas como el papel o
aquellas suaves, el terciopelo. La visual refiere a aquellas texturas impresas que imitan
la realidad, como puede ser el caso de la arena, la piedra o las rocas, pero, además, lo
que permite la visual es la creación de texturas, aunque no tengan su correspondiente
versión en la realidad.