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FISIOLOGÍA GENERAL

Bio 312

Profesor: César A. Villarreal, Ph.D.

Código de Asignatura 09431

Primer y Segundo Semestre

2017
2

PREFACIO

El presente texto tiene como propósito brindar al estudiante de la Asignatura


Biología 312 (Fisiología General) una guía de estudio actualizada cubriendo los
aspectos más sobresalientes de esta disciplina y dirigida a satisfacer los objetivos
del curso. El texto recoge la experiencia del autor, conjuntamente con la
contribución que los estudiantes de la asignatura han hecho en forma de
preguntas e inquietudes a lo largo de treinta años de docencia.

El texto aquí propuesto esta por terminar, la lectura atenta por parte del estudiante
debe contribuir a mejorar y corregir sus errores más obvios, tanto como los errores
conceptuales que seguramente aparecen en él, es pues un texto abierto a críticas
y mejoras. El número de las citas incluidas es elevado, para efectos de estudio por
parte del estudiante, las mismas pueden ser ignoradas, pero para aquél lector
interesado en revisar los textos por sí mismo encontrará al pie de página, dónde
fue extraída la cita o el concepto.

Al final del escrito se agrega una bibliografía de los libros y artículos científicos
citados y pretende ser lo más exhaustiva posible. En los casos donde la cita
proviene de un sitio de Internet el vínculo (link) de origen se agrega al pie de
página. Gran parte de las figuras que ilustran el texto son de la autoría del escritor,
en los casos cuando los mismos provienen de otras fuentes el reconocimiento ha
sido debidamente subrayado.

A pesar que muchas personas han leído el texto, y han sugerido mejoras, los
desaciertos u omisiones son de la absoluta responsabilidad del autor.

CAV.
Julio de 2005.
3

Capítulo 1

CARACTERÍSTICAS DE LOS SERES VIVOS

1- Introducción.

1.1- La Fisiología General ha sido definida como el estudio de las actividades de la


célula, a saber: nutrición, crecimiento, respuestas al medio, división celular y
diferenciación. También es el estudio de los fundamentos físico-químicos de la
materia viviente1. De acuerdo con J. Fuset Tubiá (1931) la Fisiología General
(Etimológicamente del griego physis, natural y logos tratado, desde el S. XVIII
estudio de las funciones orgánicas) estudia los fenómenos de la vida, sin
aplicación, ni comparación a un grupo o a una especie determinada 2. En fin, la
Fisiología General se interesa por los procesos vitales fundamentales aplicables a
todos los seres vivientes, guarda sin embargo, estrechas relaciones con otras
ramas de la fisiología a saber:

Históricamente hablando, la primera Fisiología en desarrollarse fue la Fisiología


Humana, bajo la atención de Claude Bernard, quien llevó a esta disciplina a
alcanzar a sus últimas consecuencias que consistió en advenimiento de la
Fisiología General. A lo largo de este curso, estudiaremos aquellos principios que
son los fundamentos del funcionamiento orgánico de todos los seres vivos.
Nuestro objetivo último es el de describir una célula abstracta con todas sus
estructuras y funciones.

1.2- Características de los seres vivientes.

1.2.1- Definición de la vida.

Se entiende por definir fijar, delimitar con claridad y exactitud el significado de una
palabra o la naturaleza de una cosa. Definición, en sentido estricto, es una
correspondencia signo a signo; aunque en su sentido más corriente es establecer
1
A. Masters, comunicación personal, 1979.
2
Fuset Tubiá, 1931, p. 245.
4

límites. Así pues, definir la vida es establecer los límites existentes entre lo vivo y
lo no vivo. Esta forma de plantear el problema nos lleva a reconocer que existen
objetos manifiestamente no – vivos, que muestran características típicamente
vitales entre los cuales podemos mencionar a los virus, los virus de las
computadoras y los robots. El hecho de que por cada manifestación vital podemos
anteponer un organismo no- vivo, que la posea; nos lleva a proponer que la
definición de la vida es para el Biólogo un típico escándalo filosófico, según el cual
el Biólogo es incapaz de encontrar la definición de su objeto de estudio. En forma
más exacta debemos afirmar que no existe una teoría biológica que abarque todas
las especies biológicas y todas las propiedades necesarias y suficientes de los
organismos3.

Una solución a este problema ha sido introducida recientemente por Konrad


Lorenz (Premio Nobel de Fisiología o Medicina 1973), según la cuál la vida puede
ser definida inyuntivamente. Una definición inyuntiva es aquella según la cual el
objeto es limitado por la enumeración de sus características; en pocas palabras, el
objeto es caracterizado. La caracterización nos es en puridad una definición, pues
depende de conceptos que no han sido previamente elucidados 4. Inyuntivamente,
se ha caracterizado la vida por poseer los siguientes rasgos:

Presenta una organización compleja, capacidad de metabolizar se reproduce, se


adapta y muestra excitabilidad.

1.2.2- Organización compleja:

Estas característica indica que los seres vivos están conformados por unidades
más simples o sencillas y diversas. Pero, estas unidades guardan entre sí
relaciones sistémicas que no son reducibles a sus componentes. Los seres vivos
son biosistemas. Aunque un organismo superior puede ser descompuesto en
subsistemas (órganos, tejidos o células) encontramos que las células son, a su
vez, irreducible a otros subsistemas biológicos, pues las organelas celulares,
aunque son sistemas, no son subsistemas vivos o biosistemas. Encontramos pues
un límite inferior de organización biológica, las células. Las células como unidades
de organización indican que está formada por unidades no reducibles a sus
componentes ultraestructurales elementales.

1.2.3- Adaptación:

De todas las características arriba mencionadas, la de adaptación tiene especial


relevancia; por adaptación se entiende la especialización, en estructura y función,
de los seres vivos que les permite sobrevivir en un ambiente dado. Donde
sobrevivir significa dejar más descendientes a la próxima generación. La
característica adaptativa está asociada entonces a la de reproducción
(reproducción diferencial). Desde el punto de vista fisiológico, en cambio,
adaptación significa modificaciones funcionales o comportamentales que permiten
3
Bunge, 1985, p. 100.
4
Bunge, ibid.
5

al individuo ajustarse a un medio variable (clima. temperatura, mareas, sequedad,


etc.). La primera definición es la definición biológica de adaptación y no debe
confundirse con la segunda. La segunda definición, la de adaptación fisiológica,
hace uso del concepto de ámbito de ajuste al cual puede ser sometido un
individuo, por encima o por debajo del cual perece o disminuye su capacidad
reproductiva. Al tiempo que tarda el individuo u órgano en ajustarse a la variación
en las condiciones del medio se le llama tiempo de aclimatación.

La adaptación propiamente dicha se desarrolla a lo largo de muchas generaciones


en respuesta a variaciones continuas en los organismos sexualmente
reproductivos al ser sometido a la acción de un ambiente en constante
modificación; proceso estudiado por la Biología Evolutiva.

1.2.4- Excitabilidad:

Especial atención le damos al carácter de excitabilidad; se denomina a así, a la


propiedad que presentan los seres vivos de responder a estímulos del ambiente.
Ésta es una propiedad de todas las células, tanto procariotas como eucariotas. Se
ha utilizado el término inapropiado de irritabilidad para denominar esta
característica, el mismo debe ser descartado pues sugiere que las células muestra
un período de conciencia subjetiva de lo que la estimula.

1.2.5- Metabolismo:

Las células son capaces de integrar materia y energía del medio,


transformándolos, y produciendo desechos que son debidamente eliminados. A la
serie de complejos procesos de ingestión y transformación de dichos materiales es
lo que se conoce como metabolismo y que también es propiedad constitutiva de
los seres vivos.

1.3- Relación entre los enlaces débiles y la materia viviente 5.

1.5.1- Enlaces químicos.

Los componentes de la célula en última instancia son átomos, pero los átomos en
la materia viva se hayan unidos mediante enlaces químicos, que pueden ser
descritos como producto de la ganancia o pérdida de un par de electrones (ē),
resultando átomos cargados negativamente (el que pierde el par de ē) o
positivamente (el que gana el par de ē). Estas partículas cargadas eléctricamente
reciben el nombre de iones. Como tales iones tienen cargas opuestas se atraen y
se crea entre ellas una fuerza electrostática; a esta fuerza se le conoce como
enlace electrovalente.

5
Smith, 1971; Dyson, 1977; Avers, 1983; Lodish et al., 2002, pp. 14 – 29.
6

Por otra parte, la unión interatómica puede deberse a que el par de ē sea
compartido por dos átomos, desarrollándose una fuerza electrostática conocida
como enlace covalente.

Existen otros enlaces que mantienen unidos los átomos y moléculas entre sí; pero
en todos los casos es necesario efectuar trabajo para romperlos o sintetizarlos. A
la energía necesaria para romper o sintetizar un enlace se le define como
equivalente a la energía de dicho enlace o energía de unión o de enlace6.

Cuadro 1.1
Energía de enlace de varios tipos de enlaces químicos.
Tipos de enlace Molécula Energía (kcal/mol.)
Electrovalente NaCl 118
Covalente doble C=C 146
Covalente sencillo C-C 83
C-N 70
C=O 84
Enlace de hidrógeno - H∙∙∙ 5
Interacción. van der Waals 1

1.5.2- Energía de Unión es una magnitud que se expresa en kcal/mol7 A medida


que aumenta la energía de unión entre dos átomos, aumenta la estabilidad de la
molécula. A las uniones termodinámicamente más estables se las denomina
uniones fuertes y las menos estables uniones débiles8 (Cuadro 1.1). Las uniones
fuertes incluyen a los enlaces covalentes y electrovalentes; cuyas energías de
unión fluctúan entre 5 – 212 kcal/mol. En cambio las uniones débiles incluyen los
puentes de hidrógeno, las uniones hidrofóbicas y las uniones de corto alcance,
con energías de unión menores de 5 kcal/mol.

1.5.3- Enlaces débiles, son enlaces con poca energía y su característica más
llamativa es la de ser rotos o reorganizados con relativa facilidad debido a que su
energía es menor que la disponible a temperatura ambiente (25°C) o en el
organismo (37°C)9. En consecuencia, la estructura celular estabilizada por este
tipo de enlaces se puede reorganizar fácilmente, es decir pueden ser libremente
armados y desarmados; lo cual explica la característica más importante de los
organismos vivientes la de estar sometidos a cambios constantes.

Podemos concluir afirmando que las funciones más importantes de los enlaces
débiles en los sistemas celulares son:

1.5.5.1- Los enlaces débiles permiten el establecimiento de la compleja


configuración de las proteínas y de los ácidos nucleicos.

6
Smith, ibid, p. 90; Dyson, ibid, p. 64 – 75.
7
1 caloría es la cantidad de energía necesaria para elevar la temperatura de 1 g de agua 1° C, entonces 1 Kcal.
= a 1000 cal.; ver Smith op cit., p 34.
8
Dyson, ibid, p. 65.
9
Lodish, et al., op. cit., p. 17.
7

1.5.5.2- La unión entre la enzima y el sustrato (E-S) durante las catálisis


enzimáticas es debida a enlaces débiles.

1.5.5.3- La unión y separación de los ácidos nucleicos durante la reproducción


celular y durante la síntesis proteica es producida por este tipo de atracción
química.

1.5.5.4- El mantenimiento de la estructura de las membranas celulares y de la


cubierta de algunos virus es debida a enlaces débiles.

1.5.4- Los enlaces o puentes de hidrógeno, son enlaces direccionales que se


forman cuando un átomo de hidrógeno unido por enlace covalente a un átomo
electronegativo, se aproxima a un átomo igualmente electronegativo. Se piensa
que el átomo más electronegativo que el hidrógeno lo despoja del electrón
compartido, dejando a éste con una carga positiva parcial, formándose un
pequeño dipolo dentro de la misma molécula de las cargas opuestas. El enlace
resultante se representa como una línea punteada y la magnitud de su carga es de
4 – 5 kcal/mol. (Figura, 1.1)

Figura 1.1
Puente de hidrógeno entre un átomo de nitrógeno y oxígeno.

1.5.5- Uniones o enlaces hidrofóbicos, se refiere a la tendencia de los grupos no


polares, es decir compuestos que poseen una nube electrónica en forma
simétrica, y por ende, son insolubles en agua con la cual no pueden establecer
puentes de hidrógeno. Este tipo de enlaces permite estabilizar las micelas de
grasa presente en los sistemas celulares, pues la tendencia de las grasas no
polares es a excluir el agua de su interior conduciendo a las uniones
hidrofóbicas10. La energía de unión de los enlaces hidrofóbicos fluctúa entre 1 – 3
kcal/mol.

1.5.6- Uniones de corto alcance, se establecen cuando grupos potencialmente


unibles se acercan mucho y su energía o fuerza disminuye cuando los grupos se
separan. La energía efectiva de unión disminuye como el recíproco exponencial de
r, entre 1/r4 – 1/r6; donde r es la distancia entre los grupos. La energía de unión de
este tipo de enlace fluctúa alrededor de 1 kcal/mol.

Estas uniones suelen dividirse en:

1.5.5.1- Interacción ión – dipolo, donde un ión interactúa en una molécula neutra,
como el ejemplo que mostramos a continuación (Figura 1.2 y 1.4c):

10
Dyson, ibid, p. 71.
8

Figura 1.2
Interacción ión dipolo entre el ión cloro y el agua.

1.5.5.2- Interacción van der Waals11, aparece inespecíficamente cuando


interactúan dos moléculas neutras y ocurre cuando se aproximan dos dipolos o un
dipolo y una molécula simétrica que es inducida por el dipolo, aunque menos
eficientemente que un ión. Si dos átomos unidos en forma no covalente están
suficientemente cerca, el dipolo transitorio resultante en un átomo perturbará la
nube electrónica del otro. Esta perturbación genera un dipolo transitorio en el
segundo átomo y los dos dipolos resultantes se atraerán débilmente entre sí. En
otros términos, si el polo negativo del dipolo se aproxima a la molécula, los ē van a
presentar una repulsión neta y permanecerán más tiempo en el extremo de la
molécula más alejada del dipolo, produciéndose un dipolo inducido. Finalmente,
entre moléculas neutras pueden ocurrir distorsiones al azar de la distribución de
cargas de la nube electrónica, formándose un dipolo fluctuante. El valor energético
de alrededor de 1 kcal/mol. (Figura 1.3 y 1.4a)

Figura 1.3
Dos moléculas de oxígeno en contacto van der Waals. Los dipolos transitorios en las nubes electrónicas de
todos los átomos dan origen a fuerzas de atracción débiles denominadas interacciones van der Waals.
(Redibujado de Lodish, et al., p. 25).

Si dos de tales dipolos se aproximan, los átomos presentan una ligera fuerza de
atracción. F. London describió y calculó la energía de tales enlaces; a este tipo de
enlace se le conoce como fuerza dispersiva de London, en su honor. Estas
interacciones contribuye a las uniones hidrofóbicas (Figura 1.4)

1.5.5.3- Significado funcional de las uniones de corto alcance, estas interacciones


al igual que las hidrofóbicas son individualmente débiles, pero si entre dos
moléculas se producen un número elevado de tales uniones pueden resultar en
estructuras muy estables12.

11
Reciben este nombre en honor a su descubridor el físico holandés Johannes Diderik van der Waals (1837 –
1923), ver Lodish, et al., pp. 24 – 24.
12
Dyson, ibid, p. 72.
9

Figura 1.4
Diferentes interacciones de corto alcance.

1.4- Significado funcional del agua en los sistemas vivientes.

El agua es el constituyente más abundante de la materia viviente, pues


comprende entre un 50-95% del peso de cualquier sistema vivo 13. Este porcentaje
varía de acuerdo a diferentes factores, a saber: la especie, el tipo de tejido, la
etapa de desarrollo y el estado funcional del organismo. No obstante, el promedio
de agua en el cuerpo humano es de 61,4%.
Cuadro 1.2
Contenido acuoso de diversos tejidos vegetales y animales.
Plantas (a) Animales (b)
Tipo de tejido Semillas Madera Dentina Hueso Musc. Esq. Sust. gris
% de agua 5 – 15 35 - 75 10 46 76 84
a) Taiz y Zeiger, 2002 p. 33. b) Giese, 1980 p. 55; Oser, 1964. p.542.

El porcentaje de agua varía de especies a especie, alguna de ellas, tanto animales


como vegetales, tienen mayor contenido acuoso que otras. Por ejemplo, la
lechuga y la zanahoria contienen de un 85-95% de agua 14, y en general los
celenterados, poseen más agua que la mayoría de los vertebrados. Los
microorganismos poseen entre un 70 – 90% de H 2O15. En el caso del hombre la
muerte sobreviene si pierde un 20% de su contenido acuoso 16.

El tipo de tejidos también es un factor importante, como se ejemplariza en el


Cuadro 1.2, el cual demuestra que en general los tejidos más activos tienen más
agua que los menos activos.

13
Brown, Cole y Wayne Greene, 2005, pp. 871 – 873; Curtis y Barnes, 1993, p. 65; Taiz y Zeiger, 1991, p.
61; De Robertis y De Robertis, 1991. p. 24.
14
Taiz y Zeiger, ibid, p. 33.
15
Broca y Madigan, 1993,
16
Oser, 1965; Alpert, 2005.
10

La etapa de desarrollo también puede afectar el contenido de agua de un


organismo; así podemos mencionar que el contenido acuoso es más abundante
en los organismos más jóvenes que en los más viejos. Yo encontré que en el
salmón del Atlántico (Salmo salar, L) de menos de un año de edad el porcentaje
de agua es mayor que al cumplir un año de edad (Villarreal, 1983). Aunque las
semillas son uno de los tejidos vegetales más secos, antes de germinar deben
absorber una cantidad considerable de agua 17. El contenido de agua en el embrión
de los vertebrados es de un 95-90% y disminuye el adulto 18.

El estado funcional del organismo también influye en el contenido de agua, por


ejemplo el contenido acuoso de los bronquios y los músculos de Dormitator
latifrons (Richardson, 1833) luego de 10 horas de ser sometido a agua de mar
(AM) es menor que cuando esta adaptado a agua dulce (AD) (Villarreal, et al.,
1986, 1993).

1.5.1- El agua y la célula viviente.

En la célula el agua se encuentra en dos formas a saber: cómo agua libre o


combinada. El agua libre es aquella disponible para procesos metabólicos,
representando el 95% del contenido acuoso total. El agua combinada es la que
está unida a macromoléculas por atracción dipolo. Se calcula que en general un
4,5% del agua disponible en la célula se encuentra en esta forma 19. En la célula
viva, sin embargo, el agua libre no tiene el grado de libertad del agua común, de
manera que una fracción importante de ella (10-25%) se parecen más al hielo; lo
cual sugiere que el agua citoplasmática tiene un mayor grado de estructuración
que el agua libre20.

1.5.1- Propiedades del agua y estructura de la molécula de agua.

El agua posee propiedades especiales y casi únicas, las cuales la convierten en


un compuesto fundamental para la vida. Para entender dichas propiedades y su
importancia biológica hay que familiarizarse con la estructura de esta molécula
singular.

En la molécula de agua, el oxígeno forma con el par de átomos de hidrógeno un


ángulo de enlace (AE) promedio de 104,5º y no de 180º que correspondería a una
molécula electrónicamente simétrica. Éste AE produce un alto grado de asimetría
a la molécula de agua (Figura 1.5).

17
Taiz y Zeiger, ibíd, p. 61
18
De Robertis y De Robertis, ibid, p. 24.
19
Giese, op cit., p. 54.
20
Dyson, op cit., p. 82; Dick, 1979, p.12.
11

Figura 1.5
Diagrama de la molécula de agua, donde se nota que los enlaces entre el oxígeno y el hidrógeno describen
un ángulo de enlace de 104,5°, lo cual permite la formación de un dipolo (en verde). Se entiende por momento
dipolar a la tendencia de una molécula de H2O de orientarse en un campo eléctrico (Lehninger 1972, p. 40).

Como quiera que el átomo de oxígeno presente en el agua es más electronegativo


que el hidrógeno, tiende a atraer hacia sí el par de ē compartidos, dejando al
átomo de hidrógeno desnudo y con una carga parcial positiva (+ = +0,41) y al
átomo de hidrógeno oxígeno con una carga parcial negativa (- = -0,82). Estas
cargas parciales son iguales, así pues las moléculas de agua no portan una carga
neta21. Sin embargo, esta separación parcial de cargas junto con la forma de las
moléculas, hace de la molécula de agua una molécula polar, dando origen a un
dipolo22 (Figura 1.5). El grado de separación de las cargas en una molécula dipolar
esta dada por su momento dipolar.

La polaridad del agua tiene una consecuencia importante, pues los dipolos
permanentes de ésta, atraen ligeramente otra molécula de agua mediante
atracciones dipolo – dipolo denominados enlace de hidrógeno, con una energía de
unión 5 kcal/mol (Figura 1.4a). Cada molécula de agua atrae mediante puentes de
hidrógeno cuatro moléculas de agua (Figura 1.6). Este arreglo le confiere al agua
una resistencia relativa para formar estructuras, mientras que su debilidad relativa
la dota de alta movilidad; lo cual explica las propiedades singulares de esta
sustancia.

1.5.1.1- El agua tiene alto calor de evaporación (CE) y se refiere a la cantidad de


energía calórica necesaria para evaporar un g de agua. El calor de evaporación
del agua es de 539,95 cal/g; en comparación el alcohol etílico tiene un CE de 204
cal/g y el mercurio 70,6 cal/g y la acetona 124,5 cal/g 23 (Cuadro 1.3).

Cuadro 1.3
21
Taiz y Zeiger, ibid, p. 62; Rawn, 1989, p. 28.
22
Smith, ibid, p. 98.
23
Davis y Day, 1964, p. 25.
12

Principales propiedades físicas del agua, comparada con las de otras sustancias.
Sustancia Calor de Fusión Calor de Evaporación Calor Específico
(cal/g) (cal/g) (cal/g)
Acetona 23,4 124,5 0,506
Alcohol etílico 24,9 204,0 0,535
Mercurio 2,8 70,6 0,033
Agua 79,7 539,5 1,007
Tomado de Davis y Day, p. 25.

1.5.1.2- El agua tiene un alto calor de fusión (CF).

Se entiende por calor de fusión a la cantidad de calor necesaria para fundir un g


de hielo, cuyo valor para el agua es de 79,71 cal/g. El agua es la sustancia con
mayor CF, consignamos aquí que el alcohol etílico tiene un CF de 24,9 cal/g, y la
acetona 23,4 cal/g y el mercurio 2,82 cal/g 24.

 ¿Por qué el agua tiene un calor de fusión tan elevado?

Figura 1.6
Puentes de hidrógeno que la molécula de agua es capaz de establecer con atrás cuatro moléculas de agua
dada su naturaleza dipolo.

Estas dos propiedades explican la enorme capacidad de amortiguación térmica


confiere a los organismos vivientes.

1.5.1.3- El agua es líquida a temperatura ambiente.

El agua a pesar de su bajo peso molecular relativo es líquido a temperatura


ambiente (Cuadro 1.4). Esta característica se debe al hecho de que como esta
sustancia puede establecer muchos enlaces de hidrógeno con otras tantas
moléculas de agua, se requiere una elevada cantidad de energía calórica para que
pase del estado líquido al gaseoso.

24
Ibid, p. 2.6
13

Cuadro 1.4
Estado de diferentes sustancias a Temperatura ambiente
Sustancia CH4 NH3 C2H6 HCl CH3CH2OH H2O
PM 16 17 30 36 45 18
Est.T° amb Gas Gas Gas Gas Líquido Líquido

1.5.1.4- El Agua tiene un alto calor específico.

Se entiende por calor específico la cantidad de calor expresado en calorías


necesario para elevar la temperatura de un g de agua un grado °C. El calor
específico del agua es igual a 1 y no se conoce ninguna otra que tenga tan alto
calor específico con la excepción del amoniaco líquido 25, el cual tiene un valor de
calor específico de de 1,23 26. Esta propiedad explica el porque la temperatura de
los mares y lagos permanece constante.

Un hombre de 75 kg produce 2,4 kcal que elevan la temperatura corporal 32 ºC


pero si el solvente celular fuera otra sustancia la temperatura corporal se elevaría
100 a 150 oC. En plantas, el alto calor específico reduce el potencial efectivo
dañino de las fluctuaciones térmicas. Adicionalmente, la transpiración es un
mecanismo importante de regulación de la temperatura en las plantas.

 Explique el ¿por qué esta propiedad explica el alto poder de regulación térmica
corporal del agua?

1.5.1.5- El agua tiene una alta constante dieléctrica (kd)

Se entiende por kd a la habilidad que posee una sustancia para reducir la


intensidad de un campo eléctrico que la atraviesa cuando se compara con aquella
correspondiente al vacío (Dick, 1979). También, se afirma que kd es una medida
de la disminución de las fuerzas eléctricas existentes entre dos iones cuando
están sumergidas en un líquido con respecto a los existentes entre los mismos
cuando están al vacío, y se expresa mediante la ecuación (Bénézech, 1972,
Austen, 1982):

F = e1 e2/Dr2 (1)

DondeF = la fuerza de atracción entre iones de carga opuesta


e1 y e2 = carga de los iones
r = la distancia que los separa.
D = constante dieléctrica.

De esta relación se deduce que mientras más grande sea la constante dieléctrica
más débil es la fuerza de atracción entre dos cargas.

Cuadro 1.5
Constantes dieléctricas de solventes diversos.

25
Asimov, 1975, p. 205.
26
Raven, et al., 1980. p. 517.
14

Sustancia Constante dieléctrica (D)


Agua 80,0
Metanol 33,0
Etanol 24,0
Acetona 21,4
Benceno 2,3
Hexano 1,9

De acuerdo con Dick (1979) la reducción del campo es debido a que el agua
orienta sus moléculas en el campo impuesto, de manera que sus pequeños
campos individuales se suman; juntos en vez de cancelarse como ocurriría si
tuvieran orientaciones normales al azar. La fuerza combinada de los campos de
las moléculas se opone, y efectivamente reduciendo el campo impuesto. A la
temperatura ambiente la kd del agua es 80 mientras que la de la gasolina es de 5,
razón por la cual es incapaz de disolver la sal 27(Cuadro 1.5 y Figura 1.7).

Debido a las fuerzas electrostáticas de atracción y repulsión que gobiernan las


interacciones entre las moléculas de agua entre sí, y con otras moléculas polares
e iónicas. Las moléculas de agua, entonces, se organizan en forma de capas o
cubiertas alrededor de un foco de carga eléctrica. El número de cubiertas
dependerá de la fuerza de la carga 28. La solvatación del ión es ayudada por la
tendencia del agua a oponerse a la atracción electrostática entre las cargas
opuestas de los iones. Esta propiedad de promover ionización facilita las
reacciones químicas y su velocidad29.

1.5.1.6- El agua tiene una alta tensión superficial.

Se define tensión superficial (TS) o permitividad relativa, a la fuerza que se


desarrolla entre dos interfases una de las cuales es un líquido y la otra es un gas,
como la interfase agua/aire, se la distingue de la tensión interfacial en donde las
dos fases son fluidas30.

En el caso de la interfase agua/aire, las moléculas de la superficie del líquido son


atraídas asimétricamente y empujadas hacia adentro, pues ellas están en contacto
con la atmósfera exterior. La resultante de las fuerzas que actúan sobre una
molécula de la superficie, está dirigida según una vertical descendente, lo cual
implica un aumento en la densidad de moléculas en el plano superficial. La mayor
cohesión intermolecular de la superficie del líquido con respecto a las que existen
entre el resto de las moléculas de la columna de agua constituye la tensión
superficial.

27
Höber, 1945, p. 127.
28
Coplan, 1984, p. 84.
29
Oser, op. cit., p. 545.
30
Lora Tamayo, 1983, p. 456; Bénézech, op. cit., p. 20; Berlow, et al., 1982, p. 310.
15

Figura 1.7
Disolución del NaCl en agua, la sal común es un cristal cuyos átomos son mantenidos unido por uniones
electrostáticas fuertes. Al mezclarse con el agua, las uniones de las moléculas dipolo de agua son más fuertes
y numerosas que las existentes entre los iones de la sal, por lo que el cristal se disuelve rodeándose cada ión
de una esfera de dipolos de agua llamada esfera de solvatación.

La TS del agua a 20 °C es de 72,5 dina/cm y es una de las más altas que se


conoce. Este valor enorme explica el por qué insectos pequeños pueden caminar
sobre la superficie del agua, otro tanto pueden hacer algunos reptiles como el
meracho.

1.5.1.7- El agua ioniza.

En el agua líquida algunos átomos de hidrógeno por el hecho de tener un bajo


peso molecular y por que el electrón compartido con el oxígeno está más próximo
a él, hay una tendencia finita de separarse del enlace covalente y saltar al átomo
de oxígeno de la molécula adyacente a la cual está unido por puente de
hidrógeno; produciéndose dos iones, tal y como se representa en la reacción a
continuación:

En sentido estricto el protón tiene una vida media muy corta y se una rápidamente
a la molécula de agua para dar origen al ión hidronio (ver arriba) pero para efectos
prácticos es muy válida la representación siguiente:

y a temperatura de 25 °C,

Como en el agua pura la concentración de iones de hidrógeno e hidroxilos son


iguales, entonces:
16

Magnitud que puede ser representada como una función logarítmica en términos
de potencial de hidrogeniones o pH y es iguala a:

(2)
Para el agua pura a 25 °C el pH del agua será igual a:

pH = - Log 10-7 = 7,0

En la escala de pH el valor de 7 es neutro, los valores inferiores indican acidez y


los superiores alcalinidad. El hecho de que la escala de pH sea logarítmica indica
que a cada aumento en valores enteros indican un incremento en 10 unidades de
acidez o alcalinidad.

El pH del citosol es de aproximadamente 7,2 aunque en algunas organelas de la


célula eucariótica su valor puede variar, como es el caso de los lisosomas y las
vacuolas cuyos valores de pH son de 4. Mientras que el pH promedio del plasma
humano es de 7,431. Estos valores son mantenidos dentro de ámbitos más bien
estrechos mediante los sistemas de amortiguamiento intra y extracelulares
naturales, que son estudiados en el laboratorio del curso de Fisiología General.

31
Lodish, et al., p. 32; Berkow, et al., 1977, p. 2065; Houssay, et al., 1973, p.384.
17

CAPITULO 2

Termodinámica y los sistemas vivientes

2.-Termodinámica: es la rama de la física que estudia las transformaciones de


energía. La misma nos permite predecir si un proceso es posible o no desde el
punto de vista energético, aunque no nos responde sobre la naturaleza o
mecanismo del mismo. Ha sido definida, por razones que se aclaran a
continuación, como la ciencia física de la adivinación 32. Los métodos de la
termodinámica son aplicados a los sistemas macroscópicos, tanto orgánicos como
inorgánicos. La Bioenergética en cambio es la rama de la termodinámica que
aplica los principios de ésta a los sistemas biológicos.

Figura 2.1
Clasificación de los sistemas de acuerdo a su relación con el medio que les circunda.

2.1- Conceptos y leyes de la termodinámica.

2.1.1- Sistema: es una porción limitada, pero arbitraria de materia. Los sistemas
termodinámicos son aquella porción del universo sobre la cual se centra la
atención, de allí su arbitrariedad.

2.1.1- Medio es todo lo que rodea al sistema, y en forma más precisa, la materia
del universo restante exceptuando el sistema. De acuerdo con el carácter de su
interacción con el medio los sistemas pueden ser (Figura 2.1):

Sistemas aislados, que no intercalan ni materia ni energía con el medio.

Sistemas cerrados, aquel que puede intercambiar energía más no materia con el
medio.

32
Pérez, et al., 1984 p 22; Rawn, op. cit., p. 264.
18

Sistemas abiertos son aquellos que pueden intercambiar materia y energía con el
medio, como es el caso de los sistemas vivientes.

Sistemas adiabáticos son aquellos que intercambian materia pero no calor con el
medio. Cuando un sistema está rodeado por una pared adiabática es posible
realizar trabajo sobre él, o bien que el sistema entregue trabajo, sin embargo no
puede haber intercambio de calor entre el sistema y el medio.

Otra manera de describir el sistema adiabático es indicando que como un sistema


donde no hay intercambio de calor con el exterior, esto es que no libera ni absorbe
calor, por lo que la variación de sus entalpias es igual a cero (0): ΔH=0

2.1.2.- Leyes de la termodinámica y su aplicación a la vida.

2.1.2.1.- Primera ley de la termodinámica, es también conocida como principio de


conservación de la energía, que sostiene que la energía total del sistema más la
del entorno permanece constante, es decir, la energía ni se crea ni se destruye,
solo se transforma.

De acuerdo con esta noción, la fuente primaria de energía de los animales son los
alimentos, y la energía solar para las plantas; puesto que la energía que los
organismos vivos utilizan para su crecimiento, desarrollo y demás funciones vitales
debe tener un origen que no puede ser de novo, en virtud de que la energía no se
crea ni se destruye solo se transforma.

2.1.2.2.- Segunda ley, se puede formular como: no todo el calor de una fuente puede
transformarse en trabajo; sino que parte de ese calor deberá cederse a una fuente a menor
temperatura (formulación William Thompson, Lord Kelvin). Otra manera de formularlo
reza: en un sistema cerrado la entropía tiende a aumentar.

Esta ley establece limitaciones a los tipos de transformación energética que puden ocurrir
en los procesos físico-químicos

2.1.3- Parámetros termodinámicos se refieren a las propiedades determinadas que


caracterizan un sistema.

El conjunto de los parámetros termodinámicos determinan el estado del sistema


en forma tal que la variación de uno de ellos conduce a la variación del sistema en
su conjunto. Cuando un sistema sufre una transformación, ésta viene dada por la
diferencia de los valores de las funciones en estudio, existentes entre los estados
final o inicial, y son independientes de la ruta específica a través de la cual ha
tenido lugar la transformación; en fin solo dependen del estado inicial y final.

Aquella variable que depende del camino recorrido, como el trabajo, no son
función de estado, sin embargo, la temperatura la presión y la concentración de
los componentes son variables de estado y pueden analizarse para determinar los
cambios de estado termodinámico.
19

Los parámetros o propiedades termodinámicas son:

Entalpía (H), que es el contenido energético de un compuesto o un sistema y el


cambio de entalpía o ∆H es una medida de la variación de energía de un sistema
en un proceso. Aquellos procesos que liberan calor se denominan exotérmicos, y
la variación de entalpía ∆H es negativa (- ∆H ó < 0). Si el proceso va a
acompañarlo por una absorción de calor del medio la variación de entalpía es
positiva (∆H > 0) se dice que la variación es endotérmica33.

Entropía (S) es la función que indica el grado de desorden de la energía de un


sistema. La energía potencial, por ejemplo, es muy ordenada, pero a medida que
se transforma en energía cinética el desorden o entropía aumenta.

Energía libre o función de Gibbs (G)34 es la cantidad máxima de trabajo útil que
una reacción puede producir a temperatura y presión constante o también aquella
parte de ∆H que puede realizar trabajo. En general, en un sistema la capacidad de
realizar trabajo disminuye a medida que se alcanza el equilibrio. Como quisiera,
que el cambio de energía libre o ∆G = ∆H + T∆S, y que ∆H y ∆S, son propiedad de
la primera y segunda ley, ∆G es la unificación de estos dos principios 35. El valor de
∆G pueden ser negativo, positivo o igual a 0; cuando su valor es negativo (- ∆G ó
< 0), la reacción o el proceso bajo análisis es exergónico,36 produce trabajo y es
espontáneo. En cambio, cuando el valor de ∆G es positivo (+ ∆G ó > 0), el proceso
es endergónico o el sistema debe consumir energía para producir trabajo 37. Para
terminar, si ∆G = 0, el sistema está en equilibrio.

El contenido de energía de cada estado es función de variable que se formulan o


interrelacionan por medio de una ecuación de estado (EE), siendo la más
importante:

(3)

 (4)
Que indican que la cantidad máxima de energía del sistema que puede ser
utilizada para realizar trabajo esta limitada por la cantidad de energía que se disipa
en el medio (dSe) y la que se pierde en el funcionamiento del sistema (dS i) así:
∆S = dSe + dSi (5)

33
Rawn, op. cit., p. 34 y 265.
34
La denominación se hace en honor al químico norteamericano Josiah Willard Gibbs (1839 – 1903), uno de
los fundadores de la termodinámica y quién desarrolló esta función en 1878. Ver Lodish et al., op. cit., p. 36 y
Stryer, et al., 2003, p. 15.
35
Ibid, p. 270.
36
Proceso que suministra o libera energía. Ver De Robertis y De Robertis, op. cit., p. 265.
37
Proceso que requiere grandes cantidades de energía y trabajo. Ver Ibid p. 265.
20

Como dSe se puede revertir por cambio de flujo es un proceso reversible, pero dS i
no, de manera que a la larga o a la corta, parte de la energía del sistema tiene que
ser invertida en el mantenimiento del sistema, lo que impone límites al rendimiento
máximo de trabajo para cualquier sistema. La segunda conclusión derivada de la
ecuación de estado es la de que no son posibles máquinas perfectas, es decir que
no incurran en gasto de energía en su mantenimiento 38.Cuando se trata de
reacciones químicas, los parámetros se conservan paro tienen una formulación
compatible con las descripciones de Le Châtelier y que se describen en el Anexo 1
(Ver página 22).

El tipo de trabajo realizado por los sistemas vivientes es de cuatro tipos: químico o
de síntesis de moléculas biológicas, mecánico o de movimiento de parte del
cuerpo o de las células (contracción muscular), osmótico o de transporte de
sustancias y eléctrico o de creación de diferencia de potenciales, generación o de
descarga potentísimas por animales eléctricos (torpedos y rayas) o para la
iluminación.

Energía es la capacidad de realizar trabajo 39. Para la realización del trabajo


celular. Los sistemas biológicos requieren de una fuente de energía, siendo la más
importante la proveniente del sol, cuya energía es almacenada por las plantas
gracias a la fotosíntesis y la transfieren entonces a los herbívoros. Sin embargo, la
energía solar o la resultante de los procesos celulares de oxidación, no son la
fuente directa para realizar trabajo, sino el contenido en enlaces macroenergéticos
de algunas sustancias como el ATP y otros agentes primarios de fosforilación.

2.2- Entropía y Filosofía.

En la actualidad, la palabra entropía es utilizada indiscriminadamente por


diferentes disciplinas como sinónimo de desorden, probabilidad, ruido, mezcla
aleatoria, calor, etc. Existen al menos tres formas de definir entropía:

2.2.1.- En términos termodinámicos, donde se relaciona con el calor (1865).


2.2.2.- En términos de la teoría estadística, donde se relaciona con el desorden
(1875).
2.2.3.- En términos de la teoría de la información, donde se relaciona la
neguentropía (lo opuesto a la entropía) con la información (1940-1950).
Las dos leyes de la termodinámica se aplican solamente a sistemas cerrados, es
decir, en los que no existe intercambio de energía, información o material. El
Universo en su totalidad puede ser considerado como un sistema cerrado de este
tipo. La Primera Ley de la Termodinámica indica que la cantidad total de energía
del Universo se mantiene constante.

38
Prigogine y Stengers, 1983, 118 – 127.
39
Broda, 1975, p. 1.
21

La Segunda Ley indica, por su parte, que la energía del Universo es


irreversiblemente degradada. El trabajo de diferente tipo, ya sea físico, químico o
eléctrico, pueden ser totalmente transformadas en calor. Pero la situación inversa,
la conversión de calor en trabajo, no puede hacerse sin ayuda externa o sin la
inevitable pérdida de energía en forma de calor. Esto no significa que la energía es
destruida, sino que parte de esta energía deja de ser útil para la realización de
trabajo. Este aumento irreversible en la energía no utilizable en el Universo es lo
que mide la entropía. La Primera Ley no distingue una jerarquía entre las formas
de energía, sino que simplemente propone un balance para establecer su
conservación, la Segunda Ley jerarquiza las formas de energía, en el sentido que
el trabajo (energía direccional) puede degradarse en una forma de energía de
menor calidad, el calor (energía no direccional). Los conceptos de entropía e
irreversibilidad que surgen de la Segunda Ley de la Termodinámica han tenido un
enorme impacto en la forma en que vemos el Universo. La idea de una continua
degradación de la energía conlleva a una inexorable muerte del Universo. En este
sentido, la Segunda Ley nos indica que el único futuro posible es la aniquilación,
dejando al Hombre una sensación que afecta sus posiciones filosóficas y su visión
del mundo en forma pesimista. Por otra parte, la Segunda Ley de la
Termodinámica provee un argumento incuestionable de validación de las teorías.
En otras palabras, toda aquella teoría que no cumpla con la Segunda Ley puede
ser descartada sin más.

2.3.- Crisis energética o entropía.

De acuerdo con la Primera Ley de la Termodinámica, la energía del Universo es


constante. Cuando quemamos combustibles fósiles (carbón, petróleo, gas) no
estamos reduciendo las existencias de energía (la Primera Ley no lo permite), sino
que estamos utilizando energía de alta calidad para producir trabajo, dejando libre
una energía de menor calidad. En definitiva, de acuerdo con la Segunda Ley, lo
que estamos haciendo es aumentar la entropía del Universo. En este sentido, la
llamada “crisis energética”, estrictamente, debiera llamarse “crisis entrópica”.

Las leyes de la termodinámica y la vida.

La primera ley de la termodinámica, afirma que la energía de un sistema y de su


entorno es constante.

La segunda ley indica, en cambio, que en un sistema aislado la entropía tiende a


aumentar o que el estado más probable de un sistema es el de desorden máximo.

Los organismos vivientes cumplen con la primera ley, pues se ha demostrado que
el trabajo realizado por un organismo intacto se hace a expensas de la energía
interna del sistema. También se ha podido calcular los efectos térmicos de
transformaciones químicas complejas que tienen lugar en los organismos vivos,
22

cuando se conocen los productos iniciales y finales del proceso y se desconocen


la naturaleza y número de los estadios intermedios 40.

La segunda ley, en cambio, fue considerada durante muchos años como no


aplicable a los sistemas biológicos. Esto es así, porque el estado más probable de
un sistema es el de máxima disipación de la energía o de máximo aumento de la
entropía y por tanto de disminución de la energía libre disponible para hacer
trabajo, estableciéndose al final un estado de equilibrio termodinámico por
disminución de gradiente. Sin embargo, en los sistemas vivientes ocurren tanto
procesos de gradiente (eg. transporte pasivo de sustancia) como procesos de
contragradiente (eg. transporte activo). Aunque la capacidad de realizar trabajo en
los sistemas vivientes no parece disminuir y puede durar años; contradiciendo
aparentemente la segunda ley41. La contradicción se resuelve si tomamos en
consideración el hecho de que las leyes de la termodinámica clásica fueron
elaboradas para los sistemas aislados. Los sistemas vivos, por otra parte, son
sistemas abiertos y por ende intercambian libremente materia y energía con el
medio y es gracias a este intercambio que pueden mantener su alto grado de
orden. En relación con esto podemos afirmar que la termodinámica de los
sistemas vivos es analizada por la termodinámica de los sistemas abiertos
elaborados por Kolosovkiy, De Donde y Prigogine 42.

Todos los procesos biológicos, no obstante, tiende a provocar que se alcance el


equilibrio termodinámico (muerte). La diferencia entre los sistemas vivos y los no
vivos se refiere a dos procesos termodinámicos diferentes los irreversibles y los
reversibles. Los primeros son típicos de los sistemas mecánico-técnicos como los
servomecanismos, la difusión y disolución de sustancias, entre otras, en los cuales
el cambio en entalpía es mayor que cero (+∆S), con decremento de la energía
libre. En los procesos reversibles un proceso se lleva acabo con un cambio de
entalpía igual a cero.

La degradación progresiva de la energía como consecuencia de la irreversibilidad


de los procesos naturales, también se produce como consecuencia de la vida, otro
proceso irreversible. La sustentación de la vida se encuentra en la energía
proveniente del Sol, que es un tipo de energía de máxima calidad. Esta energía es
progresivamente degradada a medida que pasa a los vegetales, los animales y
finalmente al hombre. La vida implica un continuo estado de desequilibrio en el
cual la energía fluye constantemente (alimentación, realización de trabajo,
etc.).Como cualquier sistema termodinámico, los seres vivos, una vez apartados
del equilibrio, buscan alcanzar el equilibrio a través de procesos que implican
cambios en sus propiedades. El equilibrio sólo se alcanza con la muerte.

40
Pérez, et al., op. cit., pp. 40 – 45.
41
Engels, 1961, p. 244 – 244.
42
Pérez, et al., op. cit, pp. 79 – 85.
23
24

CAPÍTULO 3

Actividad Enzimática

3- Enzimas son catalizadores biológicos o biocatalizadores, que a su vez son


sustancias que influyen en la velocidad de reacción sin alterar el punto de
equilibrio. Químicamente las enzimas son proteínas de organización tridimensional
globular; una excepción importante a esta regla son la ribozimas, que representan
catalizadores eficientes constituidos por ARN 43.

La primera enzima cristalizada fue la ureasa por Sumner en 1925. En la actualidad


se han identificado aproximadamente 3000 enzimas y cristalizado casi 200 44

5.1- Activadores y coenzimas:

Cuadro 5.1
Activadores de diversas enzimas de importancia biológica.
Enzima Activador
1- Aconitasa Fe++
2- Carboxilasa oxalosuccínica Mn++
3- Succinil CoA Tiocinasa Mg++
4- Fosfoglucomutasa Mg++
5- 6-P-Fructoisomerasa Mg++
6- 3-P-glicerato cinasa Mg++
7- DH-Láctica Zn++
8- Amilasa salivar Na+ y Cl-
9- Pepsina H+

Aunque algunas enzimas son exclusivamente proteicas, otras requieren de un


cofactor no proteico para ejercer su actividad; el mismo puede ser una sustancia
orgánica compleja (coenzima) o un ión metálico o ambos 45. La enzima sin su
cofactor se denomina apoenzima; la enzima catalítica completa se denomina
holoenzima. Algunos autores46 establecen una distinción entre coenzima y el
grupo prostético de una enzima; el primero, estaría menos fuertemente unido a la
apoenzima que el segundo. Así se afirma que la coenzima solo se une a la
apoenzima durante la catálisis. A los iones metálicos presentes en la holoenzima
se les conoce también con el nombre de activadores (Cuadro 5.1). La función
enzimática de los activadores explica la enorme importancia de los oligoelementos
en la dieta. A las enzimas que requieren iones metálicos se les denomina
metaloenzimas.
43
Stryer et al., op cit, p. 23; Cech, 1995.
44
Giese, op cit, p. 252 y Doolittle, p. 984.
45
Stryer et al. ibid., p. 191.
46
Avers, 1983, Stryer et al. ibid., p. 1292.
25

La gran mayoría de las coenzimas son derivados de vitaminas que en realidad


actúan como cosustratos. Las coenzimas más importantes incluyen los
transportadores de electrones, NAD, NADP y FAD. Casi todas las coenzimas son
derivados del complejo vitamínico B (Cuadro 5.2). En el caso de los citocromos,
que son enzimas del transferencia de electrones, el grupo prostético esta
fuertemente unido a la apoenzima. El grupo prostético se parece mucho al grupo
hemo de la hemoglobina y al igual que éste tienen hierro. En este grupo de
enzimas el hierro pasa de de su forma oxidada (Fe +++) a su estado reducido (Fe ++)
al recibir un electrón.

5.2- Clasificación de las enzimas.

Las enzimas se identifican agregando el sufijo asa al sustrato sobre el cual actúa o
a la reacción que cataliza. En donde sustrato es la molécula sobre la cual actúa la
enzima (Cuadro 5.3)47. Y su clasificación agrupa, según las reglas de la IUB
(International Union of Biochemistry) en seis categorías o clases principales
numeradas del 1 al 6; estas clases luego se subdividen en un código de cuatro
dígitos precedido de las letras EC (Enzime commission).

Cuadro 5.2
Principales coenzimas de los sistemas vivientes.
Clase Naturaleza química Función celular
B1 Tiamina Metabolismo del piruvato
B2 Riboflavina Coenz. Flavo proteínica FAD
Pantotenato Ácido pantoténico CoA (parte)
B6 Piridoxina Coenz para la conver. de AA.
H Biotina Coenz para la fijación de CO2
B9 Ácido fólico Transferencia de comp. con un C
B12 Cobalamina Transferencia de metilo
B3 Niacina Coenz de las DH

5.3- Características de las enzimas

5.5.1- Las enzimas son eficaces en pequeñas cantidades.


Se necesita pequeñas cantidades de enzima para transformar enormes
cantidades de productos, debido a que las enzimas no se consumen durante el
proceso catalítico; de manera que una vez terminada la catálisis están
nuevamente disponibles par participar en la reacción. La actividad enzimática se
expresa mediante el número de recambio (turnover number o Vmax) de la enzima,
que es el número de moléculas de sustrato (S) transformada en productos (P) por
una molécula de enzima (E) por unidad de tiempo cuando la actividad de la
enzima es máxima (Vmax). La enzima con mayor actividad es la anhidridasa
carbónica que tiene una actividad de 600 000/seg.
47
Lehninger, op. cit., p 185.
26

Cuadro 5.3
Las seis clases principales de enzimas.
Clase Tipo de reacción Ejemplo
1. Oxidorreductasas Oxidación-reducción Lactato deshidrogenasa
2. Transferasas Transferencia de grupo Nucleósido monofosfato

quinasa (NMP quinasa)


5. Hidrolasas Reacciones de hidrólisis (transferencia
de grupos funcionales al agua) Quimotripsina
5. Liasas Adición o separación de grupos
para formar dobles enlaces Fumarasa

4. Isomerasas Isomerización (transferencia intramolecular


de grupo) Triosa fosfato isomerasa

5. Ligasas Unión de dos sustratos a expensas


de la hidrólisis del ATP Aminoacil-tRNAsintetasa

5.5.2- Las enzimas no se consumen en la reacción que catalizan.

Las enzimas, aunque participan del proceso catalítico no se consumen durante la


reacción enzimática; de allí que se la represente de la siguiente forma:

Donde [S] es la concentración del sustrato, [E] es la concentración de la enzima,


[S**] es un estado de transición y [P] son los productos de la reacción catalítica. De
la representación cinética de la catálisis es evidente que al final de la reacción la
enzima queda libre para reaccionar otra vez con sustratos frescos. Los asterisco
(*) que signan el estado de transición indican que éste tiene mayor energía libre (-
ΔG) que los P o S. La energía libre del estado de transición recibe el nombre
energía libre de activación de Gibbs48

5.5.3- Las enzimas presenta especificidad49.


48
Cifrado en Stryer et al., ibid., pp. 196 – 197.
49
Cifrado en Lehninger, op. cit., pp. 169 – 170; Giese, op cit, pp. 367 – 369.
27

A la propiedad que tienen las enzimas de actuar sobre uno o pocos tipos de
sustratos se le denomina especificidad. Se reconocen cuatro modos de
especificidad:

5.5.5.1- Especificidad absoluta, es cuando la enzima actúa sobre un y solo un


substrato, como es el caso de la ureasa, lactasa y la amilasa.

5.5.5.2- Especificidad absoluta de grupo, se denomina así a aquella en la cual la


enzima actúa sobre un grupo químico, como es el caso de la deshidrogenasa
alcohólica (DH-alcohólica), que remueve un átomo de hidrógeno a un grupo
hidroxilo, en cualquier molécula que lo posea.

5.5.5.3- Especificidad relativa de grupo, en cuyo caso se cataliza un sustrato que


tenga presente un tipo común de grupo químico, tal es el caso de las enzimas
proteolíticas (endopeptidasas), quimiotripsina, pepsina y tripsina. La primera,
rompe los enlaces peptídicos únicamente por el lado carboxílico de los residuos de
arginina o lisina; mientras que la segunda lo hace por el lado amínico del enlace
peptídico entre la tirosina o fenilalanina y otros ácidos aminados. Por último la
tripsina actúa sobre el carboxilo de la arginina o lisina.

5.5.5.4- Estereoespecificidad, se denomina así a la capacidad de la enzima de


distinguir los diversos estereoisómeros de un sustrato.

5.5.4- Las enzimas bajan la barrera de energía.

Para que cualquier reacción química, catalizada o no, tenga lugar son necesarias
dos condiciones: [1] que los reactantes estén previamente activados y [2] que la
reacción sea termodinámicamente posible. La primera condición determina la
velocidad de la reacción, mientras que la segunda indica si la reacción tendrá
lugar espontáneamente o no.

Las reacciones enzimáticas deben ocurrir a temperatura ambiente a corporal, bajo


tales condiciones todas las moléculas tienen, en promedio, la misma energía
cinética; lo que significa que algunas moléculas tienen energía más elevada que
otras. La velocidad de reacción, entonces, dependerá de la concentración de
moléculas que tengan mayor energía cinética. Se deduce que las moléculas
deben alcanzar una energía crítica para que reaccionen entre sí, llamada energía
de activación. Cualquier reacción química, catalizada o no, debe entonces
alcanzar el nivel representado por el máximo nivel de energía de activación para
que se lleve a cabo; se dice entonces que este estado representa una barrera de
28

energía que debe ser superada por los reactantes. Las reacciones catalizadas
enzimáticamente lo que hacen es disminuir la energía de activación (Figura 5.1),
permitiendo de esta forma que las reacciones en cuestión, puedan llevarse a cabo
a las condiciones de temperatura y presión existente en los sistemas celulares.

Cuando se estudia el progreso de una reacción química de reactantes a productos


(Figura 5.1) se nota que va acompañada de cambios continuos de estado
energético. En el estado inicial o de menor energía, y por tanto más estable, las
longitudes, ángulos de enlace y distribución electrónica de los reactantes tienen
los valores de equilibrio y de acuerdo con el segundo principio de la
termodinámica deben permanecer invariables. A medida que los reactantes se
aproximan, comienzan a reaccionas y la energía del sistema aumenta, hasta
alcanzar el estado máximo de de energía denominado estado de transición (S**)
de la reacción. Durante dicho estado, las longitudes, los ángulos de enlace y el
arreglo electrónico de los reactantes están distorsionados y poseen la
configuración más energética. A medida que continúa la reacción la energía del
sistema disminuye hasta alcanzar un mínimo en los productos. La representación
de la energía del sistema permite obtener el perfil energético de la reacción
(Figura 5.1).

Figura 5.1
Diagrama mostrando el perfil energético de cualquier reacción y de la barrera de energía representada por la
energía de activación (ΔG**), para una reacción no catalizada (1), una con catalizador inorgánico de H + (2) y
otra catalizada enzimáticamente (3).

La magnitud de la energía de activación condiciona la velocidad de la reacción


pues a menor energía de activación mayor es la velocidad de reacción; las
enzimas al disminuir la barrear permite acelerar la reacción. Se afirma entonces,
que las enzimas bajan la energía de activación alcanzando un estado de transición
29

representado el complejo enzima-sustrato (ES) más estable termodinámicamente


que los reactantes separados.

La formación del complejo ES disminuye la barrera, al parecer, debido a que sitúa


al sustrato en una posición tal que es accesible al sitio catalítico de la enzima (sitio
activo), proceso denominado efecto de proximidad. Esta interacción entre la E y el
S disminuye la movilidad del reactante, y por tanto, también disminuye la entropía.
Consecuentemente la diferencia de entropía entre los reactantes y los productos
es menor, la energía de activación se reduce y la reacción procede a mayor
velocidad; esta es la razón de por qué se les llama a las enzimas trampas de
entropía.

5.4- Formación del complejo enzima sustrato.

La esencia de la catálisis es la unión específica entre la enzima y el sustrato lo


cual facilita la formación de los estados de transición. Existen evidencias que
demuestran la existencia física del complejo ES, siendo ellas:

5.8.1- La primera evidencia se infiere de que a concentración constante de la E la


velocidad de reacción aumenta hasta alcanzar un valor máximo (V max). Esta
evidencia sugiere que a una concentración relativamente alta de sustrato todos los
sitios activos de la enzima se encuentran ocupados.

Figura 5.2
Sistema desarrollado por B. Chance y Theorell para demostrar la existencia física del complejo ES mediante
la determinación de sus características espectroscópica.

5.8.2- Evidencias obtenidas por cristalografía de rayos X muestran imágenes de


alta resolución mostrando sustratos y análogos de sustrato unidos a los centros
activos de muchas enzimas. Una técnica más reciente, la cristalografía de
resolución de tiempo, que depende de la co-cristalización de un análogo fotolábil
del sustrato con la enzima, permite la detección del complejo ES, pues el análogo
30

se convertirá en sustrato luminoso que mediante un sincrotón producirá una


imagen del complejo ES en una fracción de segundo.

5.8.3- Mediante procedimientos espectroscópicos que permiten detectar


compuestos coloreados que cambian su perfil espectrofotométrico cuando
interaccionan con la enzima par dar origen al complejo ES (Figura 5.2). En este
caso se usa la propiedad de algunas enzimas de presentar coloración especial
como es el caso de la peroxidasa (chocolate). La peroxidasa al interaccionar con
el sustrato no coloreado (peróxido), muestra cambios en el patrón de absorción
comprendiendo la aparición de un compuesto verde (ES I) y uno rojo (ES II). Esta
evidencia sugiere que pueden formarse uno o más estados de transición (Figura
5.3).

Figura 5.3
Patrón de absorción lumínica por los diferentes estados de transición (Es I y ES II) de la enzima peroxidasa y
el sustrato (H2O2).

5.5- Mecanismo de acción enzimática.

El sustrato se une al enzima por el sitio activo mediante enlaces débiles lo que
hace posible la formación de los estados de transición. Todas las enzimas
independientemente de su estructura específica y modo de catálisis poseen sitios
activos de interacción que se caracteriza por:

5.4.1- El sitio activo es una hendidura tridimensional formada por grupos activos
provenientes de diversas partes de la secuencia primaria de la enzima.

5.4.2- El sitio activo comprende una porción muy pequeña del volumen total de la
enzima. En una enzima solo unos pocos residuos de aminoácidos están en
contacto con el sustrato. Se puede argüir, sin embargo, acerca del significado de
¿porque las enzimas son tan grandes? La razón es que los residuos restantes
constituyen el andamiaje que permite la creación de un sito activo tridimensional.
Los aminoácidos activos por la razón mencionados están obligados a colocarse en
31

el sitio donde harán la interacción adecuada para disminuir la energía de


activación.

5.4.3- Los centros activos son hendiduras u oquedades escavadas en la enzima.


En las enzimas el sitio activo es una oquedad donde al agua ha sido removida
salvo en casos en donde participa de la reacción. La oquedad es no polar lo que
aumenta la posibilidad de interacción ES. Los pocos puntos polares adquieren
propiedades excepcionales que permiten la catálisis.

5.4.4- Los S se unen a la E por numerosas fuerzas débiles. Las interacciones


entre la E y el S tienen valores entre 3 – 12 kcal/mol, es decir interacciones
débiles.

5.4.5- La especificidad de la unión ES depende de la disposición definida de los


átomos que conforman el sitio activo. El sustrato debe tener una forma adecuada
para introducirse en el sitio activo posibilitando la interacción ES mediante fuerzas
de corto alcance que requieren contactos muy próximos.

Figura 5.4
Modelo de acción enzimática lave-cerradura, propuesto por E. Fisher.

Se han postulado dos modelos par dar cuenta de esta interacción, una propuesta
por Emil Fisher en 1894, según la cual la enzima se una al sustrato como una llave
a una cerradura (modelo llave-cerradura, Figura 5.4). Por razones derivadas en
parte por el tamaño relativo de los inhibidores que pueden ocupar el sitio activo,
D.E. Koshland propuso en 1958 el modelo del ajuste inducido. De acuerdo a este
modelo hipotético la E se une al S como una pelota de béisbol se une al guante.
Esta teoría sugiere que la configuración más probable de la E puede ser distinta
en presencia que en ausencia del S (Figura 5.5).

Figura 5.5
Modelo de acción enzimática ajuste inducido, propuesto por D.E. Koshland.

5.8.- Factores que influyen en la tasa de actividad enzimática.


32

En la sección 5.5.1, se definió la velocidad de reacción enzimática en este aparte


discutiremos los factores que son capaces de alterarla, siendo ellos:

5.8.1- Efecto de la temperatura.

En un sistema experimental en donde la concentración relativa de E y S se


mantienen constates, a medida que se aumenta temperatura la velocidad de la
catálisis aumenta hasta alcanzar un máximo o a partir de la cual la actividad
disminuye (Figura 5.8.). La temperatura a la cual la actividad enzimática es más
alta se denomina temperatura óptima. La temperatura máxima ara una E
específica dependerá de la temperatura normal del organismo del cual se aisló si
se trata de un animal homeotermo o del lugar donde se desarrolla un animal
poiquilotermo o una planta.

Figura 5.8.
Diagrama mostrando el efecto de la temperatura sobre la actividad enzimática.

Debe distinguirse los procesos que tienen lugar por debajo o por encima de la
temperatura óptima. Por debajo de ella, la actividad enzimática se incrementa
porque la temperatura aumenta el número de moléculas que alcanzan el nivel de
la energía de activación requerida para la reacción. Por arriba de la temperatura
óptima la actividad se desacelera pues un número cada vez mayor de enzimas se
desnaturalizan. Casi todas las enzimas se desnaturalizan a temperaturas que
fluctúan entre 50 – 80 ºC, aunque algunas resisten temperaturas mayores (100 –
33

250 ºC). El Q10 de las reacciones enzimáticas es >2 a temperatura inferiores a la


temperatura óptima.

5.8.2- Efecto del pH.

Existe, para cada E, un pH al cual la actividad de la misma es máxima o pH


óptimo, por debajo o por enzima de dicho pH la actividad disminuye (Figura 5.7).
El efecto ejercido por el pH sobre la actividad enzimática se debe a su acción
sobre las cargas presentes en el sitio activo, que a su vez dependen de los
radicales de los aminoácidos que se encuentren o no cargados en el sitio activo.

Figura 5.7
Diagrama mostrando el efecto del pH sobre la actividad enzimática. Se muestra la actividad enzimática de la
pepsina, que es un componente enzimático del jugo gástrico, razón por la cual su pH óptimo fluctúa entre 1,5
– 2,5; en cambio para la tripsina que es una enzima pancreática el pH óptimo se inclina hacia el lado alcalino
(pH 8 – 11).

Para entender el proceso debemos entender la propiedad de anfoteridad de las


proteínas. Por propiedad anfotérica se entiende la capacidad que tienen las
proteínas de actuar como bases o como ácidos, que a su vez depende de los
aminoácidos con restos alcalinos o ácidos. Supóngase una proteína con tres
radicales libre ácidos y tres básicos (Figura 5.8) el número de radicales cargados
positiva o negativamente dependerá del pH, a pH ácido predominarán las cargas
negativas mientras que a pH básico predominaran las cargas negativas. Existirá
para cada enzima un pH al cual si es sometida a un campo eléctrico ésta no
migrará, a dicho pH se le llama punto isoeléctrico (pI). Al punto isoeléctrico todas
las propiedades físico químicas de la proteína se ven disminuidas (Figura 5.9). Al
ser la enzima una proteína y el sitio activo un lugar superficial de la misma, estará
expuesta a los mismos efectos del pH que hará variar la carga superficial del sitio
activo afectando la posibilidad de interacción ES.
34

Figura 5.8
Diagrama representativo de la propiedad anfotérica de las proteínas, y por ende de las enzimas, de variar su
carga de acuerdo con el pH. A un pH bajo predominan las cargas positivas, mientras que a pH alto
predominan las cargas negativas. Existe un pH al cual la proteína no migra al ser sometida a un campo
eléctrico, pues sus cargas se neutraliza; a es pH se le denomina punto isoeléctrico (pI)

Figura 5.9
Diagrama de la conducta de una proteína al ser sometida a diversos pH. Se nota que en el caso diagramado
hacia el lado ácido existe un pH al cual todas las propiedades de la proteína se encuentran disminuidas.

5.8.3- Efecto de la concentración relativa de la enzima y el sustrato.

Cuando hay exceso de sustrato en un sistema experimental, al aumentar la


concentración de la enzima la velocidad de reacción enzimática aumenta
linealmente (Figura 5.10). Por otra parte, cuando se mantiene constante la
concentración de la enzima al aumentar la concentración del sustrato se presenta
el fenómeno de saturación (Figura 5.11).

La velocidad de acción enzimática instantánea puede expresarse de la siguiente


forma:
35

-dS/dt = k[S]n
Donde, -dS/dt es la tasa de disminución molar de la concentración del
sustrato.
k es la constante de tasa de actividad.

n puede tener un valor de 1 en cuyo caso la reacción es de primer orden; en


cambio cuando vale 0 la reacción es de cero orden.

Cuando la reacción es de primer orden la actividad depende de la concentración


del sustrato, se dice entonces que la tasa de reacción es directamente
proporcional a [S]. Si la [S] continúa aumentando se alcanzará una magnitud a la
cual aunque se aumente [S] la velocidad de reacción no aumenta, se dice que se
ha alcanzado la velocidad máxima (Vmax) y la reacción es de cero orden esto es
que no depende de la [S] (Figura 5.11).

Figura 5.10
Diagrama mostrando el efecto de la concentración de la enzima sobre la actividad enzimática, se realiza la
experiencia a un exceso de sustrato.

Este comportamiento cinético sugiere que se forma un complejo ES (ver sección


5.5), tal y como lo postularon en 1913 los químicos Leonor Michaelis (Alemania-
EU., 1875 – 1940), y Maud L. Menten (Canadá, 1879 – 1960) y consistente con el
equilibrio siguiente:
36

Figura 5.11
Diagrama mostrando el efecto de la concentración del sustrato sobre la actividad enzimática, se realiza la
experiencia a una concentración constante de la enzima. KM = constante de Michaelis. Vmax = Velocidad
máxima.

Del estudio cinético de este equilibrio los esposos Michaelis-Menten derivaron la


ecuación que lleva su nombre50:

Como

Entonces:

50
La derivación de la ecuación de Michaelis-Menten en su forma actualmente en uso fue derivada por Briggs
y Haldane en 1924.
37

De manera que la KM es igual a la [S] cuando la velocidad de la reacción


enzimática es la mitad de la velocidad máxima.

La KM es una propiedad de la enzima con dimensiones mM/L, es independiente de


la [E] y es inversamente proporcional a la afinidad entre la E y el S en aquellos
casos en que la enzima tiene varios sustratos. Por ejemplo la hexoquinasa tiene
como sustratos la glucosa y la fructosa con K M de 0,15 y 1,50 mM/L,
respectivamente, por ende, su sustrato normal es la glucosa.

La ecuación Michaelis - Menten se deriva de una ecuación hiperbólica lo cual hace


difícil la determinación precisa de la K M, por ello se hace más fácil transformándola
en una ecuación lineal, tomando el reciproco de la ecuación M-M, tal y como se
deriva a continuación.

Esta forma de la ecuación M-M recibe el nombre ecuación Lineweaver-Burke que


puede ser representado como una gráfico linear que se aviene a la ecuación
general de una línea del tipo y =, mx + b, donde el 1/V0 es graficado contra el 1/[S]
y KM/Vmax es la inclinación, 1/Vmax el sitio donde la línea intercepta la ordenada y –
1/KM el punto donde la línea intercepta la abscisa (Figura 5.12A).

5.8.4- Efecto de los inhibidores

Se denomina inhibición enzimática a la disminución de la actividad enzimática


causada por una sustancia llamada inhibidor. En otras palabras, cualquier
sustancia que disminuye (inhibe) la actividad enzimática es un inhibidor 51. Se
conocen tres tipos básicos de inhibición competitiva, no-competitiva y
acompetitiva52.

51
Berlow, et al., 1982.
52
Cifrado en Rawn, op. cit., pp. 178 – 184 y Stryer et al., ibid., pp. 209 – 222.
38

Figura 5.12
Diagrama mostrando el efecto de los inhibidores sobre la cinética enzimática. (A) En la inhibición competitiva
se aumenta la KM pero no afecta la Vmax. (B) En la inhibición no-competitiva se reduce la V max pero no se afecta
la KM (C) en la inhibición se aumenta la KM y se reduce la Vmax.
39

5.8.4.- Inhibición competitiva (Figura 5.12A)

Se llama así por que el inhibidor (I) compite con el S normal para unirse al sitio
activo. El inhibidor reacciona reversiblemente con la E para formar un complejo
[EI]. El inhibidor imita al S normal por eso es llamada inhibición competitiva. Esta
inhibición es reversible pues la misma es disminuida si se aumenta la
concentración del sustrato normal. En la Figura 5.12ª es notorio que la inhibición
no afecta 1/Vmax, indicando que no interfiere en la tasa de degradación del
complejo (ES). Pero en esta misma inhibición se aumenta el reciproco de K M
(1/KM) lo que sugiere que se requiere más S para alcanzar la V max; también varia la
inclinación. Un ejemplo de Inhibición competitiva es la inhibición de la DH-
Succínica (DHS) por el malonato o por un anión dicarboxilado (Figura 5.13). Otro
ejemplo está representado por la sulfanilamida que Inhibe al ácido p-amino
benzoico de las baterías, lo cual las mata.

Figura 5.13
Representación gráfica de la inhibición competitiva de la DH-succínica por parte del malonato, la misma
enzima puede ser inhibida por el oxalato.

5.8.4.2- Inhibición no-competitiva (Figura 5.12B).

En este caso el inhibidor se une a la E en un sitio distinto al sitio activo, lo que


normalmente deforma la E, de manera que no se forma el complejo ES a su tasa
normal, una vez formado el complejo ES éste no se descompone para liberar sus
productos normales. Aquí el reciproco de v o se ve afectado pues a mayor
Inhibición aumenta el valor de 1/v o indicando que la Vmax a disminuido por la
acción del inhibidor y que no puede ser restaurada aunque se aumente la
concentración del S, es decir no es reversible. Ejemplos de Inhibición no-
competitiva tenemos el yodo acetato que inhibe la ribonucleasa. Se incluye aquí
también al inhibidor de la acetilcolinesterasa, encargada de degradar la
acetilcolina en el espacio sináptico de la unión neuromuscular, el
40

diisopropilfosfofluoridato (DIFP), también conocido como gas de nervio53. Algunas


enzimas con grupos SH son inhibidas irreversiblemente por iones de metales
pesados como el Hg++ y el Pb++. Cabe mencionar en este contexto la enfermedad
de Minamata (Japón) causada por envenenamiento con mercurio 54. Las enzimas
que requieren cofactores metálicos para su actividad son inhibidas por agentes
quelantes como el tetraacetato de etilendiamida (EDTA). Finalmente tenemos la
ouabaina, un cardiotónico de acción rápida, que refuerza y regula las
contracciones del corazón modificado la permeabilidad de la membrana a iones,
en dosis tóxicas provoca paro cardíaco; es un inhibidor de la ATPasa Na +/K+55.

5.8.4.3- Inhibición acompetitiva (Figura 5.12C).

Se denomina inhibición acompetitiva cuando el inhibidor se une al complejo ES


pero no a la enzima libre. En este caso la reacción nunca alcanza la V max aún a
elevadas concentraciones del sustrato y también aumenta la K M.

5.9- Autorregulación de la actividad enzimática.

Las enzimas son capaces de autorregular su actividad a tales enzimas se les


llama enzimas reguladoras. Existen dos tipos de enzimas reguladoras las enzimas
alostéricas y las enzimas covalentemente moduladoras. La regulación por este
tipo de enzimas es rápida la de enzimas, es del orden de segundos en las
primeras y de minutos en las segundas.

5.9.1- Enzimas alostéricas.

Figura 5.14
Regulación de la actividad enzimática mediante la actividad de enzimas alostéricas por retroalimentación
positiva (+) la cual el producto (P) aumenta su producción y negativa (-) donde el incremento en la liberación
de productos inhibe su propia producción.

En los sistemas multienzimáticos el producto final actúa como un inhibidor


específico de una enzima al inicio de la secuencia, deteniendo de esta forma la
tasa de actividad de toda la secuencia. Esta inhibición, no es competitiva, ni no
competitiva y se le llama inhibición por retroalimentación (Figura 5.14), pues el
producto de su actividad la autorregula. A la enzima inicial se le denomina enzima
alostérica pues, el modulador se une a la enzima, en otro lugar distinto al sitio
activo. Los moduladores pueden inhibir la enzima o estimular su acción; así que la
retroalimentación puede ser positiva o negativa. Un ejemplo de regulación por

53
Cifrado en Frisell, op. cit., p. 487; Stryer et al., ibid., pp. 211; Giese, op. cit., p. 388.
54
Cifrado en Simkis, 1984 y http://www1.umn.edu/ships/ethics/minamata.htm
55
Reinberg, 1982.
41

retroalimentación negativa (-) es el caso de la L-isoleucina (modulador) a partir de


L-treonina.

5.9.2- Enzimas covalentemente moduladoras56.

Figura 5.15
Cascada de reacciones enzimáticas que conducen a la activación de la fosforilasa del glucógeno.

En este caso la enzima presenta un estado activo y otro inactivo, que son
interconvertibles mediante modificaciones covalentemente introducidas por otras
enzimas, como es el caso de la fosforilasa del glucógeno, que cataliza la
conversión de glucógeno en restos de glucosa-1-P. En realidad, se trata de una
cascada de reacciones que se inician con la llegada de una hormona (primer
mensajero) al hígado o al músculo o a ambos. Las hormonas involucradas son la
adrenalina y el glucagón. La primera actúa sobre la membrana de las células
musculares y hepáticas; mientras que la segunda lo hace exclusivamente sobre el
hígado. Sin embargo en ambos casos existe un receptor de superficie
representado por una proteína intrínseca de la membrana que al unirse con la
adenilciclasa promueve la conversión citosólica de ATP en AMPc (segundo
mensajero). El AMPc fosforila la forma inactiva de la proteína quinasa AMPc
dependiente (PQ-AMPc dependiente) que una vez fosforilada se transforma en la
forma activa. La proteína quinasa activa ahora a una fosforilasa quinasa inactiva
con participación de ATP. La fosforilasa quinasa activa, a su vez activa a la
fosforilasa del glucógeno inactiva con participación de ATP, la cual es ahora capaz
de degradar al glucógeno (Figura 5.15).

56
Lehninger, op. cit., p. 235.
42

CAPÍTULO 4

Respiración celular

4- Se define respiración celular a los procesos bioquímicos de oxidación de


sustratos acoplados la producción de ATP y a la oxidación de las coenzimas NAD
y FAD. Se afirma entonces, que mediante la respiración la célula libera la energía
(entalpía) contenida en los compuestos químicos que le sirven de alimento. Los
procesos así descrito son esencialmente procesos de oxidorreducción.

4.1- Tipos de oxidorreducciones.

Las oxidorreducciones pueden ocurrir a través de varis procesos por transferencia


de oxígeno, hidrógeno o electrones, así tenemos los siguientes casos:

4.1.1- La oxidación pude ocurrir por remoción o adición de un átomo de oxígeno.

(4.1)

4.1.2- Oxidación por remoción o adición de átomos de hidrógeno.

(4.2)

4.1.3- Finalmente por adición o remoción de electrones (ē)½

(4.3)
Los dos últimos tipos de oxidorreducciones son las más importantes para los
sistemas celulares, no obstante, como veremos más adelante, en las células
aeróbicas, el último aceptor, a través de una serie de enzimas (cadena
respiratoria) de transferencia de hidrógeno y electrones, es el oxígeno. La
transferencia de una enzima a la otra depende del potencial de oxidorreducción o
43

potenciales de reducción (E). El potencial de oxidorreducción es una medida de la


tendencia de cada enzima a ceder o ganar electrones.

El estudio de los potenciales de reducción de los sistemas celulares es importante


pues éstos rigen la particular sucesión de reacciones que ocurren en la célula.
Éstos potenciales se miden en voltios (V) a partir de un punto arbitrario fijado por
un potencial de la reacción media de ionización del hidrógeno a condiciones
estándares (25 ºC, 1 atmósfera y reactantes a 1M), mediante el uso de un
electrodo57.

(4.4)

El valor de E bajo condiciones estándares se conoce como potencial de reducción


estándar (Eº), que puede ser diferente a las condiciones persistentes en la célula
que posee concentraciones de reactantes significativamente distintos de 1M.
Aunque el potencial de reducción se mide empíricamente en voltios estoes son
libremente interconvertibles en cambio de energía libre (ΔG) mediante la ecuación
(Cuadro 4.1):

Donde, n es número de electrones, F es la constante de Faraday (96500 joule/volt)


y ΔE el cambio de potencial en voltios.

Cuadro 4.1
Valores de potenciales de reducción (Eº) y de cambio de energía libre (ΔGº) para reacciones de
oxidorreducción seleccionadas.
Oxidante Reductor n Eº(voltios) ΔGº(kcal/mol)
Succinato + CO2 α-cetoglutarato 2 -0,67 +30.9
Ferredoxina (oxidadada) Ferredoxina (reducida) 2 -0,43 +19,4
NAD+ NADH + H+ 2 -0,32 +14,8
NADP+ NADPH + H+ 2 -0,32 +14,8
Piruvato Lactato 2 -0,19 + 8,7
Fumarato Succinato 2 +0,03 - 1,4
Citocromo c (+3) Citocromo c (+2) 1 +0,22 - 5,1
Ver, Lodish, et al., op. cit., pp. 494. n= número de electrones transferidos.

Nótese en el Cuadro 4.1, que cuando aumenta el voltaje del potencial de


reducción de una reacción disminuye su cambio de energía libre es decir aumenta
la capacidad para realizar trabajo.

4.2- Reacciones acopladas.


57
Un electrodo es un dispositivo que conduce electrones. Para una discusión detallada de los potenciales de
reducción y sus características ver Giese, op. cit., capítulo 17, pp. 416 – 432 y Lodish, et al., op. cit., pp. 494 -
497.
44

Como ya observamos anteriormente de acuerdo con la segunda ley de la


termodinámica las reacciones químicas ocurren en la dirección del menor nivel de
cambio de energía libre (-ΔG, reacción exergónica), como las reacciones de la
respiración liberan energía este tipo de reacciones son favorables. Pero en la
célula también ocurren reacciones que consumen energía (+ΔG endergónicas), en
especial las de síntesis de compuestos. La célula resuelve esta situación
paradójica gracias a los mecanismos de acoplamiento, mediante los cuales las
reacciones exergónicas (-ΔG) brindan la energía necesaria para que las
reacciones de síntesis (+ΔG) tengan lugar (Figura 4.1). El proceso de
acoplamiento implica la participación de un agente intermediario conocido con el
nombre genérico de compuestos acopladores, pues una reacción que consume
energía pude llevarse acabo en un lugar relativamente distante del sitio de la
célula donde ocurren las reacciones de producción de energía; a estos
compuestos se les agrupa en tres categorías:

(4.5)
Figura 4.1
Diagrama representativo de las reacciones acopladas, las poco probables o favorables (+ΔG) tienen lugar en
la célula viva pues están acopladas con aquellas altamente probables (-ΔG). Debajo el caso concreto de la
síntesis de Glucosa-6-P a expensas de la energía liberada por el ATP, producto del metabolismo intermedio
de la glucosa58.

4.2.1- Agentes primarios de fosforilación.

Como se mencionó en el aparte anterior, la forma más eficiente de transferir


energía, bajo las condiciones de presión y temperatura existente en los sistemas
celulares, de las reacciones que liberan energía (-ΔG) hacia las que consumen
energía (+ΔG) es que entre ambos tipos de reacciones exista un enlace
representado por los agentes primarios de fosforilación Estos se caracterizan por
poseer enlaces ricos en energía (~) casi siempre con valores energéticos de 7
kcal/mol, siendo el más conocido el derivado organofosforado de la tirosina el
trifosfato de adenosina (ATP), aunque también se incluye en esta categoría el
trifosfato de uridina (UTP) el trifosfato de citidina (CTP) y el trifosfato de guanosina
(GTP). Cada uno de estos compuestos participa en procesos biosintéticos muy

58
Cifrado en Stryer et al., ibid., pp. 374 – 377 y Hoar, 1975, p. 219.
45

especializados y desde el punto de vista energético son equivalentes al ATP, sin


embargo, son sintetizados con consumo de moléculas de ATP y los principales
transportadores de electrones, el dinucleótido de nicotinamida-adenina (NAD) y el
dinucleótido de flavina-adenina (FAD) son derivados del ATP 59, razón por la cual
se considera al ATP como el actor principal del metabolismo energético celular 60.

Para todos los procesos de trabajo celular (transporte, potencial eléctrico,


contracción muscular, etcétera) se usa como agente primario el ATP. Se dice que
éste compuesto actúa como la batería energética de la célula; de manera que el
contenido celular de ATP debe ser mantenido dentro de límites más bien
estrechos, este proceso homeostático se realiza conservando el nivel energético
del adenilato o carga energética, que es una medida de la porción de todo el
adenilato disponible, en forma de ATP, para realizar trabajo y es proporcional a la
fracción molar de ATP más la mitad de la fracción de ADP, como se demuestra a
continuación:

(4.6)

El valor de ½ que aparece en el coeficiente es debido a la estequiometría de la


reacción de degradación del ATP por la enzima adenilato quinasa, que cataliza la
desfosforilación del ATP, como se prueba a continuación:

(4.7)
Por consiguiente se necesitan dos moléculas de ATP para formar una molécula de
ATP y una de AMP61.

La carga energética puede variar desde 0, cuando solo hay AMP, a 1 cuando solo
esta presente el ATP, pero en la mayoría de las células fluctúa ente 0,8 – 0,94.
Ahora bien, un aumento de la carga por encima de 0,95 inhibe las rutas
catabólicas o regeneradoras de ATP, y acelera las rutas anabólicas del ATP, que
lo consumen.

A continuación se reseña algunas de las funciones primordiales de los agentes


primarios de fosforilación62:

4.2.1.1- UTP es el donador inmediato de energía en los tejidos animales que


llevan a la síntesis de polisacáridos.

59
Cifrado en Stryer et al., ibid., pp. 708 – 709.
60
Cifrado en ibid., pp. 376 – 380.
61
Cifrado en Rawn, y Stryer et al., ibid., pp. 390 – 391.
62
Stryer et l., ibid, pp. 376 – 380 y Gimeno y Gimeno, op. cit., pp. 21 – 25.
46

4.2.1.2- CTP esta involucrado en los procesos de síntesis de los lípidos.

4.2.1.3- GTP es el compuesto más importante en la síntesis de proteínas.

4.2.2- Agentes intermediarios de fosforilación.

Se denominan así a aquellos compuestos involucrados en la síntesis de los


agentes primarios de fosforilación, siendo ellos la acetil-coenzima A (acetil-CoA),
el ácido difosfoglicérico, el ácido fosfoenol pirúvico.

El ATP es un compuesto estable y su contenido en la célula está rigurosamente


regulado (ver sección 4.2.1) y en muchos casos la energía de hidrólisis del ATP es
almacenada en forma de un fondo de reserva representado por las llamados
fosfágenos, esto es especialmente cierto en el caso de la fibra muscular de los
vertebrados. Cuando estos organismos realizan trabajo muscular intenso se utiliza
los fosfágenos para regenerar el ATP. Los fosfágenos más importantes en los
animales son la creatina fosfato en vertebrados y la arginina fosfato en
invertebrados.

(4.8)

En el músculo en reposo las concentraciones de ATP son de 4 mM, 0,13 mM de


ADP, 25 mM de creatina fosfato y 13 mM de creatina. Las cantidades de ATP
disponibles aseguran una actividad muscular durante un segundo, la gran
disponibilidad de creatina fosfato asegura la rápida reconversión de ATP. En
realidad la fuente de energía para un corredor de 100 metros planos durante los
primeros 4 segundos es el fosfato de creatina.

4.3- Oxidación de moléculas orgánicas

Aunque la fuente inmediata de energía para la síntesis de compuestos y para la


ejecución del trabajo celular es el ATP, su cantidad total en el cuerpo humano es
de 100g. Esta pequeña cantidad satisface las necesidades del cuerpo gracias a su
elevada capacidad de recambio, lo cual explica que sea capaz de satisfacer la
necesidad que tenemos de consumir 40 kg de ATP por día. Durante una carrera
de 2 horas se consumen 60 kg de ATP. Esta enorme demanda de ATP solo puede
ser satisfecha si el ATP está constantemente regenerándose. Para tal efecto las
moléculas combustibles, glucosa y ácidos grasos, deben ser oxidadas para utilizar
la energía almacenada en ellos para regenerar el ATP.

4.5.1- Etapas de extracción de energía de los compuestos orgánicos.

Hans A. Krebs y Hans L. Kornberg propusieron en 1957 63, que el proceso de


producción de energía en forma de ATP ocurría a través de tres fases: en la
63
Davson, op. cit., pp. 149 – 151; Krebs y Kornberg, 1957.
47

primera (I), los compuestos son trasformados por hidrólisis, los almidones en
glucosa, las proteínas en amino-ácidos, y los lípidos en ácidos grasos y glicerol.
En la segunda etapa (II) representa la oxidación parcial de los compuestos
anteriores dejando como resultado tres productos principales, acetil-Co A, α-
cetoglutarato y oxaloacetato. Finalmente en la tercera etapa (III) los compuestos
anteriores, son degradados a CO 2 y H2O con participación del O 2, en las
reacciones del ácido tricarboxílico o ciclo de Krebs (Figura 4.2).Al conjunto de
trasformaciones bioquímicas que sufren las sustancias alimenticias desde que
ingresan hasta la producción de desechos finales se le conoce como metabolismo
intermedio.

Figura 4.2
Diagrama de la obtención de energía a partir de los alimentos se puede dividir en etapas.

4.5.2- Glicólisis o camino de Embden-Meyerhof-Parnas (EMP).

El metabolismo intermedio64 se inicia con el proceso de degradación de la glucosa


o glicólisis (del griego glyk, dulce y lysis, disolución), esta vía termina con la
formación de ácido pirúvico, mediante diez paso enzimáticos que no requieren de
participación del oxígeno, de allí de también se le denomine respiración anaerobia.
Existen organismos que solo utilizan esta vía metabólica para la obtención de
energía y se les conoce como anaeróbicos estrictos, tales como las eubacterias
Clostridium tetani (bacteria del tétano), C. perfringes (bacteria de la gangrena
gaseosa) y el C. butilinum (bacteria del butilismo). Otros organismos anaeróbicos
facultativos pueden subsistir en ausencia o en presencia de O 2. En principio todas
64
El término metabolismo intermedio se refiere a un amplio grupo de reacciones químicas a través de las
cuales la célula degrada algunas moléculas pequeñas (capturando la mayor parte de su energía química,
principalmente en forma de ATP o de un gradiente de protones) y sintetiza otras como precursores de las
macromoléculas necesarias para la estructura, la función y el crecimiento de la célula.
48

las células del cuerpo de los animales y las plantas pueden vivir facultativamente,
auque algunas células necesitan suplemento constante de oxígeno como es el
caso de la célula nerviosa de los mamíferos. Tanto los organismos anaerobios
facultativos como los estrictos deben transformar el piruvato en lactato o en
alcohol etílico o en otro compuesto orgánico de bajo peso molecular proceso
conocido como fermentación. Es necesario hacer esta distinción, pues el proceso
de la glicólisis termina en piruvato 65 que puede después sufrir varias
transformaciones siendo una de ellas su degradación a acetil-CoA.

Las reacciones de la glicólisis fueron descubiertas inicialmente en levaduras en


1897 por los hermanos Hans y Eduard Buchner, utilizando extractos de levadura
libres de células el cual degrada sacarosa a alcohol. Más tarde, las reacciones
fueron detectadas en todas las células, tanto eucariotas como procariotas, de allí
que se haya sugerido que es el paso metabólico más antiguo de la célula 66. Desde
el punto de vista de las etapas de Krebs y Kornberg, las reacciones de la glucólisis
corresponden a la etapa II del metabolismo intermedio y ocurren intracelularmente,
pues las correspondientes a la etapa I acaecen extracelularmente.

● Explique esta última afirmación a la luz de la estructura de la célula eucariota.

Las reacciones de la glicólisis ocurren en el citosol (Figura 4.2) 67. La glucólisis se


inicia con la glucosa que debe ser activada fosforilándola en posición 6 por la
enzima hexoquinasa. La glucosa puede también entrar al ciclo de EMP a partir del
glucógeno pero debe ser escindida mediante una fosforólisis realizada por la
enzima glucógeno fosforilasa, ésta enzima adiciona un residuo ortofosfato en
posición 1 de la molécula de glucosa, reacción que ocurre espontáneamente. La
glucosa-1-P es entonces interconvertida por su isómero glucosa-6-P por la
fosfoglucomutasa.

La glucosa-6-P que posee seis átomos de carbono, es isomerizada (fosfoglucosa


isomerasa) en fructosa-6-P, la cual es a su vez fosforilada en posición 1, para dar
origen a la fructosa 1-6-bifosfato68. La molécula será partida en dos restos de
azúcar con tres carbono (gliceraldehído-3P) cada uno, por la acción de la aldolasa,
que producirían dos restos de ATP cada uno y que sufrirá una deshidrogenación
(DH-del gliceraldehído) dando como resultado final la producción de dos moles de
ácido pirúvico. Los pasos enzimáticos

65
Los ácidos orgánicos en los sistemas celulares se encuentran ionizados de allí que se describan mejor en
esta forma, cifrado en Boda, 1975, p. 45.
66
Cifrado en Stryer et al., ibid., p. 426; Villarreal, 1977; Boda, ibid, pp. 46 – 47; Oparin, 1970, pp. 317 – 321.
67
Cifrado en; Lodish, et al., op. cit., p. 619.
68
El prefijo bis significa que dos grupos monofosfatos están presente en la molécula en forma separada,
mientras que el prefijo di, significa que dos restos de fosfato están conectados entre sí por enlaces anhídro.
49

Figura 4.3
Diagrama de los principales pasos de la glucólisis o vía de Embden-Meyerhof-Parnas y el de la fermentación
láctica y alcohólica. Los números representan enzimas (0) glucógeno fosforilasa, (1) fosfoglucomutasa, (2)
hexoquinasa, (3) fosfoglucosa isomerasa, (4) fosfofructoquinasa, (5) aldolasa, (6) Triosa fosfato isomerasa, (7)
deshidrogenasa del gliceraldehído-3-fosfato, (8) fosfogliceratoquinasa, (9) fosfoglicermutasa, (10) enolasa,
(11) piruvatoquinasa, (12) decarboxilasa pirúvica, (13) deshidrogenasa alcohólica, (14) deshidrogenasa
láctica.

envuelto en esta trasformación han sido sintetizados en la Figura 4.5. Se


recomienda al estudiante que estudie detenidamente cada uno de ellos y los
memorice.

El ácido pirúvico es un compuesto modal importante, por un lado posee suficientes


átomos de carbono e hidrógenos susceptibles de ulterior degradación, y por otra,
puede ser fermentado a otros compuestos como el alcohol etílico y el ácido láctico.
Con él, termina la glicólisis propiamente dicha.

4.5.2.1- Significado de la fermentación de ácido pirúvico.


50

El ácido pirúvico es un compuesto que puede ser reducido a lactato o etanol por
un agente reductor apropiado, como la coenzima NAD reducida (NADH + H +) de la
DH-láctica o la DH-alcohólica, respectivamente. Este proceso ulterior es
importante pues a su vez permite la oxidación del PGAL a ácido 1-3-
bifosfoglicérico. Por consiguiente la fermentación del ácido pirúvico tiene como
función oxidar el PGAL.

4.5.2.2- Rendimiento de energía de la conversión de glucosa en piruvato.

Cuadro 4.2
Rendimiento energético neto de la glicólisis.
Reacción enzimática Nº de ATP producidos Nº de ATP producidos
desde PGAL desde Glucosa
Producción Ácido 1-3-bifosfoglicérico 1ATP 2ATP
Producción Ácido fosfoenolpirúvico 1ATP 2ATP
Consumo Glucosa-6-P -1ATP
Consumo Fructosa 1-6-bifosfato -1ATP
Producción neta 2ATP

● ¿Cuál es la producción energética bruta durante al glucólisis y por qué?

El balance energético del metabolismo anaeróbico de la glucosa indica que la


producción neta es extremadamente pequeña (2ATP, Cuadro 4.2), y como se
indicó con anterioridad, todavía hay suficiente energía en forma de enlaces
químicos en el piruvato susceptible de degradación ulterior. La pregunta pertinente
es ¿por qué una serie de reacciones tan ineficientes son utilizadas por la mayoría
de los organismos terrestres? La primera razón es que no requiere O 2, de manera
que puede ocurrir en sitios donde este gas no esta presente (suelos, aguas
profundas, debajo de la piel). La segunda razón es por que los organismos
terrestres se originaron en un ambiente anaeróbico y todavía conservan formas de
su pasado69.

4.5.3- Ciclo del ácido tricarboxílico, ciclo del ácido cítrico o ciclo de Krebs.

La glicólisis, como acabamos de ver, no libera toda la energía contenida en la


molécula de glucosa. En presencia de O 2, el contenido energético total de la
glucosa es liberado, siendo sus productos finales CO 2 y H2O. Este proceso tiene
lugar durante las reacciones del ciclo del ácido cítrico, también denominado ciclo
del ácido tricarboxílico (CAT) o de Krebs, que constituye la vía final común de
todas las molécula energéticas de la célula, ácidos grasos, aminoácidos y hexosas
(tercera etapa, ver sección 4.5.1).

69
Villarreal, op. cit; Boda, op. cit., pp. 46 – 47.
51

Figura 4.4
A) Micrografía de células secretoras de la hipófisis del pez Dormitator latifrons (Richardson, 1833) mostrando
la ultraestructura mitocondrial. B) Diagrama de los componentes ultraestructurales de la mitocondria.

4.5.5.1- La mitocondria y el ciclo del ácido tricarboxílico.

Las reacciones del CAT ocurren en el interior de la mitocondria lo que se refleja en


el comportamiento de esta organela en la célula viva. Por ejemplo, el número de
mitocondrias es más abundante en las células más activas. En una célula dada las
mitocondrias tienden a agruparse donde se requiere más energía, como es el caso
de la musculatura de los insectos donde la mitocondria tiende a acumularse cerca
de los miofilamentos, en las neuronas se acumulan cerca o en los botones
sinápticos y en otras células cerca de las gotas de grasa 70.

La mitocondria está entre las organelas más grandes, con un valor que fluctúa
entre 1-4 µm de largo y 0,5 µm de diámetro. Su tamaño promedio es similar al de
una eubacteria como la Escherichia coli y en la célula eucariota pueden ocupar
tanto como el 25 al 40% del volumen total de la célula, en promedio su número es

70
Álvares, Novoa y Boveris, 1994 y una versión actualizada en:
http://www.antioxidantes.com.ar/12/FrArt085.htm
de 300 a 400 mitocondrias por célula 71. El oocito humana es una excepción, pues
posee aproximadamente 100,000 mitocondrias, mientras que en el
espermatozoide no sobre pasan los 100 72 Al microscopio electrónico muestran la
presencia de dos membranas una externa y otra interna, que limitan al espacio
intermebranoso, entre las dos, y la matriz mitocondrial central (Figura 4.4). El
estudio bioquímico de cada una de las membranas mediante centrifugación
diferencial ha permitido estudiar la composición del contenido de cada membrana.

La membrana externa es lisa y presenta porinas mitocondriales similares a la


descrita para bacterias gram positivas (ver sección 5.4.2.1), la mayoría de los
iones y de las moléculas orgánicas de pequeño tamaño (5 kd) pueden atravesar
esta membrana, siendo la principal barrera entre el citosol y el interior mitocondrial
la membrana interna mitocondrial73.

Estudios de congelación fractura han demostrado la presencia de una gran


cantidad de proteínas transmembranales que constituyen tanto como el 76% del
contenido proteico de la membrana mitocondrial interna. Entre estas se encuentra
la ATP sintetasa o complejo F0F1, los transportadores de electrones (citocromos).
También están presentes transportadores de ATP, ADP y Pi, al igual que otras
moléculas de bajo peso molecular asociadas al metabolismo oxidativo.

El ATP y el ADP atraviesan la membrana interna mitocondrial mediante una


translocasa de nucleótidos de adenina o ATP-ADP translocasa. Esta translocasa
es muy abundante y constituye el 14% del contendido membranal. La translocasa
esta formada por dos subunidades de 30 kd que tiene un centro de unión afín a
ambos metabolitos. La energía necesaria para el transporte la aporta la fuerza
protón motriz, que se describe más adelante. Dicha fuerza crea una diferencia de
potencial positiva afuera con respecto al interior (Figura 4.5). La translocasa
transporta hacia fuera el ATP pues es más electronegativo que el ADP. Una vez
afuera la afinidad de la translocasa por ADP aumenta y lo trasporta al interior.

Se han descrito transportadores similares, molecular y funcionalmente similares a


la ATP-ADP translocasa para los compuesto dicarboxílicos, tricarboxílicos y
piruvato 3 fosfato74.

La membrana interna mitocondrial es impermeable el NAD y NADH + H+. Durante


la glicólisis se produce NAD reducido que debe ser regenerado (ver sección
4.5.2.1). El transporte de este metabolito ocurre indirectamente transportando
electrones (ē) y no NAD, mediante el sistema de lanzaderas, una de ellas es la
Ianzadera del glicerol 3-fosfato. En ésta última, el NAD reducido pasa sus
electrones e hidrógenos a la Di-OH-cetona-P, un metabolito de la glicólisis que se
encuentra en el citosol, produciendo PGAL. La reacción es catalizada por la DH-
del gliceraldehído-3-P del citosol. El PGAL es trasportado a la membrana interna
71
Lane, 2005, p.1.
72
Lane, ibid, pp 13-14.
73
Lodish, et al., op. cit., p. 622.
74
Cifrado en Stryer et al., ibid., pp. 514 – 517.
mitocondrial donde es reoxidado a Di(OH)cetona-P, por la DH-glicerol 3-P
mitocondrial que se encuentra en la superficie citosólica de la membrana interna
mitocondrial y que tiene como coenzima el FAD. Éste último pasa el par de ē a
coenzima Q que los transporta a la matriz mitocondrial. Así se regenera la
Di(OH)cetona-P (Figura 4.5)

Figura 4.5
A la izquierda el diagrama de la lanzadera del glicerol-3-P, (1) enzima DH-glicerol 3-P citosólica, (2) DH-
glicerol 3-P mitocondrial, nótese que la primera tiene como coenzima el NAD y la segunda el FAD. A la
derecha la ATP-ADP translocasa.

Finalmente, diremos que existen diferencias en cuanto a la distribución de


enzimas en la membrana interna. Embebidas en la matriz lipídica se encuentran
localizadas las NAD y FAD deshidrogenadas, los citocromos, b, c, c 1, aa3, la ATP
sintetasa. En cambio, ubicadas en la membrana interna, con sus sitios activos
dirigidos hacia la matriz, se encuentran las enzimas la DH-succínica junto con el
FAD y la DH-α cetoglutárica. El resto de las enzimas del CAT, se encuentran
disueltas en la matriz formando tanto como el 50% del contenido interno
mitocondrial, lo que le da un aspecto de gel. Según datos recientes se encuentran
de 5000 – 30000 juegos de enzimas del CAT por mitocondria. Se supone que
estos juegos enzimáticos se ordenan en forma continua de manera que los
productos metabólicos se pasan de una enzima a la otra sin difundir 75.

4.5.5.2- Reacciones del ciclo de ácido tricarboxílico.

A lo largo del CTA ocurren dos descarboxilaciones y cinco deshidrogenaciones


que degradan completamente a la acetil-CoA, producto de la degradación del
ácido pirúvico. A continuación se describen a grandes rasgos los principales
eventos de esta serie de reacciones. Las mismas son de carácter cíclico pues se
75
Stryer et al., ibid., p. 626, Lane, op. cit., p. 164.
inician con la condensación de la acetil-CoA con el ácido oxaloacético y su
subsiguiente degradación y terminan con la regeneración del mismo. Durante
dicho proceso se oxida la molécula de acetil-CoA. Dado el hecho que las
reacciones son cíclicas se le denomina ciclo (Figura 4.7), y los otros nombres
asociados, indican la presencia de diversos ácidos (cítrico, tricarboxílico) o en
honor a su descubridor, Hans A. Krebs, lo cual le valió el Premio Nobel de
Fisiología o Medicina en 195376.

Las reacciones del CTA, se inician con la oxidación del ácido pirúvico, que
previamente ha entrado a la matriz mitocondrial gracias a un antiportador
Piruvato/OH-. El trasporte de piruvato se realiza mediante transporte activo
secundario, pues la actividad respiratoria favorece la formación de una fuerza
protón motriz (ver más adelante) que crea una diferencia de potencial y de pH que
impulsa el OH- y confiere energía suficiente para trasportar piruvato hacia el
interior de la mitocondria (Figura 4.6).

Figura 4.6
Antiporte Piruvato/OH- en la membrana interna mitocondrial, este es un caso clásico de transporte activo
secundario.

El piruvato, una vez en el interior de la mitocondria, es oxidado a un compuesto de


2 carbonos a acetil-CoA, por la acción del complejo DH-pirúvica. Esta enzima es
un complejo macromolecular consistente de tres enzimas que realizan tres
acciones coordinadas, la oxidación del ácido pirúvico a acetilo, la descarboxilación
del ácido y su transacetilación, con participación de la coenzima A, y el NAD como
coenzima. Seguidamente, la acetil-CoA es condensada con un ácido dicarboxílico
de cuatro carbonos el ácido oxaloacético dando origen a un ácido tricarboxílico de
seis átomos de carbono, el ácido cítrico. La condensación es catalizada por la
enzima citrato sintasa.

A partir del ácido cítrico, ocurren cuatro deshidrogenaciones, tres de las cuales
requieren NAD y una que requiere FAD; mientras que dos descarboxilaciones
oxidan completamente la acetil-CoA (Figura 4.7). Al igual que para el caso de la
glicólisis se recomienda al estudiante aprender en detalla las reacciones que se
describen en dicha Figura 4.7.
76
Krebs, 1955.
Figura 4.7
Reacciones principales del ciclo del ácido cítrico, a través del cual los carbonos presentes en el ácido pirúvico
son degradados a CO2.

4.5.5.3- Reacciones de la cadena respiratoria.

Cada vez que las enzimas del ciclo de Krebs oxidan un sustrato, esto es le
remueven hidrógenos y electrones, los transfieren a una serie de enzimas cuya
función es cederlos al O2 atmosférico, que constituye el último aceptor. Esta serie
de enzimas reciben el nombre de cadena respiratoria (CRes). La transferencia
ocurre a través de tres grandes complejos proteicos: la NADH-Q oxidorreductasa
(complejo I), la Q-citocromo c oxidorreductasa (complejo III) y la citocromo c
oxidasa (complejo IV) (Figura 4.8)77. A lo largo del complejo NADH-Q
oxidorreductasa, básicamente se transfieren hidrógenos y electrones desde los
sustratos oxidados a la coenzima Q, lo que provoca al final la expulsión de cuatro
protones (4H+) al exterior de la matriz mitocondrial (Figura 4.8, en celeste).

77
El complejo II, corresponde al complejo succinato-Q reductasa de la DH-succínica.
Los electrones fluyen ahora por una serie de componentes proteicos intrínsecos
de la membrana interna mitocondrial el complejo Q-citocromo c oxidorreductasa
(complejo III). Los citocromos son proteínas transportadoras que poseen un grupo
prostético hemo férrico en su estructura. Durante el proceso de trasporte de ē, el
hierro pasa de su forma oxidada férrica (Fe +++) a su forma reducida ferrosa (Fe ++).
El complejo III es especialmente importante para la transferencia de protones al
exterior mitocondrial.

La última etapa, la del complejo citocromo c oxidasa (complejo IV), consiste en la


oxidación del citocromo c reducido con la subsiguiente reducción del O 2 a dos
moléculas de H2O. Los citocromos de este complejo son diferentes estructural y
funcionalmente de los citocromos del complejo III y también han evolucionado
para bombear cuatro protones al exterior de la matriz; por consiguiente cada ciclo
de reducción de sustratos comporta la expulsión de ocho protones a la cara
citosólica de la mitocondria. La transferencia de ē al O 2 no es absolutamente
eficiente pues se producen con cierta frecuencia anión super óxido y la
transferencia de dos electrones origina la formación de peróxido. El peróxido es
altamente tóxico para la célula eucariota así que debe ser reducida a peróxido de
hidrógeno (H2O2) por la enzima superóxido dismutasa.

(4.9)
El superóxido, el peróxido de hidrógeno y el OH - derivados del metabolismo
aerobio constituyen los llamados derivados reactivos del oxígeno (ROS), todos
tóxicos de una manera u otra. Una forma de desembarazarse de estos residuos es
mediante la acción de la enzima catalasa, presente en la mitocondria y en el
citosol que descomponen finalmente H2O2 en oxígeno libre y agua; otra defensa
natural contra el daño oxidativo es la presencia de las vitaminas E y C.

La CRes constituye la ruta final común al cual fluyen todos los electrones e
hidrógenos procedentes de todos los compuestos combustibles de la célula y es el
objetivo final de todas las oxidaciones celulares. Durante el proceso de
transferencia de H+ y ē los potenciales redox son lo suficientemente elevados
como para que el ΔG sea suficiente para que se libere energía en forma de ATP,
gracias al proceso de fosforilación oxidativa.

4.5.5.4- La fosforilación oxidativa y su acoplamiento con la cadena respiratoria.

Se entiende por fosforilación oxidativa al proceso de síntesis de ATP a partir de la


energía liberada de la oxidación de los compuestos alimenticios durante las
reacciones de la cadena respiratoria. Las reacciones de la CRes pueden ser
entendidas coma la caída, a través de un gradiente de potencial redox, de
electrones y átomos de hidrógenos al O2. En efecto, si se colocan los
componentes de la CRes en orden descendente de potencial de redox (Cuadro
4.1, Figura 4.9) se observa que caen como una cascada del punto de máxima
oxidación -320 mV del NAD a los +800 mV del O 2. A lo largo de la caída hay
suficiente energía para producir tras moléculas de ATP (Figura 4.8).

Figura 4.8
Reacciones de la cadena respiratoria mostrando la transferencia de hidrógenos y electrones desde un
sustrato reducido (A. L-málico) al último aceptor de hidrógenos y electrones, el oxígeno. En casi todas las
enzimas del CAT el aceptor inmediato de H+ y ē son la coenzimas NAD ó NADP, con excepción de la DH-
succínica que tiene como coenzima el FAD, ver Figura 4.7. En colores los complejos NAD-Q-oxidorreductasa
(celeste), Q-citocromo c oxidorreductasa (naranja) y citocromo c oxidasa (rosado). En recuadro inhibidores de
la respiración.

El proceso de fosforilación oxidativa, sin embargo, no es directo ocurre a través de


dos procesos interrelacionados:

4.5.5.5.1- Durante el primer proceso, los H + y ē liberados de los sustratos


oxidados, por el NAD durante la glicólisis y el CAT, son transportados a lo largo de
los tres complejos de la CRes hasta el O 2 generando un gradiente de protones a
través de la membrana interna mitocondrial y plasmática de las eubacterias. Este
gradiente de electrones recibe el nombre de fuerza protón-motriz.

4.5.5.5.2- La fuerza protón-motriz como generadora de energía metabólica en


forma de ATP.

El gradiente de protones es una fuente de energía libre (-ΔG), la cual se disipa


cuando loe protones fluyen al interior de la matriz mitocondrial, a través de la ATP
sintasa o complejo F0F1, enzima que cataliza la conversión de ADP+Pi en ATP
(Figura 4.10). Nótese que el acoplamiento entre las reacciones de la CRes y la
fosforilación oxidativa (FO) se establece mediante un flujo de protones que entra a
la mitocondria, luego de su expulsión, en contra de un gradiente de concentración
gracias a la energía aportada por el flujo de electrones. A este proceso fisiológico
se le conoce como modelo quimiosmótico del acoplamiento CRes-FO. El modelo
fue propuesto hace más de treinta años por el químico británico Peter Mitchell, lo
cual le valió el Premio Nobel de Química en1977 78.

78
Mitchell, 1978.
Figura 4.9
Diagrama mostrando el flujo gradual de energía a través de las enzimas de la cadena respiratoria desde el
NAD hasta el oxígeno. Las barras un contenido energético libre (-ΔG) capaz de realizar trabajo quimiosmótico
generatriz de ATP.

4.5.5.5.3- Agentes desacopladores y venenos metabólicos.

Existen sustancias capaces de desacoplar ambas reacciones que reciben el


nombre genérico de desacopladores, entre ellos tenemos el 2-4-dinitrofenol (DNP)
y algunos compuestos ácido aromáticos. Los desacopladores no afectan el libre
flujo de electrones del NADH al O2 pero no se produce ATP pues disipan la fuerza
protón-motriz y no puede actuar la ATP sintasa. Esta inactivación de actividad
generadora de energía metabólica hace que se aumente el consumo de oxígeno y
la oxidación de NADH sin producir ATP y la disipación de energía en forma de
calor; de hecho, el desacoplador DNP se usó como un adelgazante hasta su
prohibición por sus efectos secundarios. Existen desacopladores naturales que
actúan cuando el animal inverna, en los recién nacidos y en mamíferos adaptados
al frío como una forma de generar calor para mantener la temperatura corporal a
largo plazo. El tejido adiposo pardo es rico en mitocondrias y está especializado
en generar respuestas termogénicas sin escalofríos facultativa o respuestas
termogénicas a largo plazo79. Las membranas internas mitocondriales de estas
células poseen una gran cantidad de una proteína intrínseca llamada proteína
desacoplante (PD) o termogenina o PD-1, un dímero de 33 kd que establece una
ruta para la entrada de protones lo que actúa como cortocircuito al crear una ruta
alterna para la disipación de la energía contenida en la fuerza protón-motriz. Se
han descubierto otras proteínas desacopladoras especializadas, PD-2 (en muchos
tejidos del cuerpo) y la PD-3 del músculo. En general, estas proteínas generan
calor al disipar la energía producida por la mitocondria, en vez de utilizarla en la
79
Respuesta termogénica se refiere a la propiedad que tienen algunos tejidos de generar calor. En cambio es
facultativa pues solo aparece cuando el mamífero es sometido a una exposición prolongada al frío, ver Stryer
et al., ibid., pp. 519 – 520; Berne y Levy, op. cit., p. 495 y 505.
síntesis de ATP. Se piensa que estas proteínas representan una vía de regulación
del peso corporal.

Figura 4.10
Diagrama de el modelo quimiosmótico del acoplamiento cadena respiratoria-fosforilación oxidativa.

Existen otras sustancias capaces de bloquear la respiración al inhibir algunas de


las proteínas de la CRes, conocidas genéricamente como venenos metabólicos,
entre ellos la rotenona, el amital, (bloqueadores del complejo I) la antimicina A
(bloqueador del complejo III) y el cianuro (CN-) la azida (N3-) y el monóxido de
carbono (CO) (bloqueadores del complejo IV) (Figura 4.8)

Se puede distinguir entre ambos grupos de sustancias, pues los desacopladores


incrementan el consumo de oxígeno, los inhibidores no.

4.5.5.5- Producción energética de la respiración aerobia.

Una vez identificados los puntos de oxidación de sustrato ya sea por el NAD o el
FAD reducido, es fácil calcular la producción neta de ATP durante la respiración
aerobia; la misma, es sintetizada en el Cuadro 4.5.
● Determine la producción neta de ATP a partir de una molécula de ácido cítrico y
de una de ácido fumárico.

4.5.4- Metabolismo de los ácidos grasos80

Los ácidos grasos constituyen la principal forma de almacenamiento de energía en


los diversos grupos animales son capaces de rendir el doble de energía que los
carbohidratos y proteínas, así tenemos que los ácidos grasos producen tanto
como 9 kcal g-1 en comparación con los segundos que producen solo 4 kcal g -1.
Esto es debido posiblemente a que las cadenas alifáticas de los ácidos grasos y
80
Cifrado en Rawn, op. cit., Cap. 16: 421 – 456; Stryer et al., op. cit., Cap. 22, pp. 601 – 630.
triglicéridos están más reducidas, tienen menos oxígeno, que las proteínas. Por
otra parte, dada su hidrofobia poseen menor contenido acuoso 81.

Cuadro 4.3
Rendimiento energético neto durante la respiración completa de una molécula de glucosa.
Reacción enzimática Nº de ATP producidos Nº de ATP
desde PGAL producidos desde
Glucosa
Producción DH-3-P glicérica 3ATP 6ATP
Producción Fosfogliceratoquinasa 1ATP 2ATP
Producción Piruvatoquinasa 1ATP 2ATP
Producción DH-pirúvica 3ATP 6ATP
Producción DH-isocítrica 3ATP 6ATP
Producción DH-α-cetoglutárica 3ATP 6ATP
Producción DH-succínica 2ATP 4ATP
Producción DH-málica 3ATP 6ATP
Producción Succinil-CoA-tiocinasa 1ATP 2ATP
Consumo Glucosa-6-P -1ATP
Consumo Fructosa 1-6-bifosfato -1ATP
Producción neta 38ATP

Las reacciones de oxidación de los ácidos grasos tienen lugar en la mitocondria,


aunque algunas oxidaciones tienen lugar en los peroxisomas, que poseen una alta
concentración de catalasa. La oxidación de los ácidos grasos en estos orgánulos,
que acaba en octanoil-CoA, que puede servir para acortar las cadenas largas y
hacerlas mejor sustrato para la β-oxidación mitocondrial. En los peroxisomas una
deshidrogenasa de flavoproteína transfiere un par de ē al O 2 produciendo H2O2 y
la catalasa presente le degrada a agua y oxígeno.

La degradación celular de las cadenas hidrocarbonadas de los ácidos grasos


ocurre a través de la ruta de la β-oxidación mitocondrial, estas reacciones derivan
su nombre debido al hecho de que liberan secuencialmente fragmentos de dos
átomos de carbono por rotura entre el C α y el Cβ del ácido graso.

4.5.5.1- Ruta de la β-oxidación (Figura 4.13)

El proceso de utilización de los ácidos grasos (AG) se inicia con la hidrólisis de los
triglicéridos almacenados en los adipocitos por la enzima lipasa en un proceso
llamado lipólisis. La lipasa de los adipocitos se activa por la acción de las
hormonas, glucagón, adrenalina, noradrenalina y ACTH, que desencadenan la
liberación de AG libres y glicerol, que vía sistema circulatorio puede alcanzar las
mitocondrias de los tejidos metabólicamente activos. El glicerol es transformado
en el hígado en glucosa o ácido pirúvico lo que le permite entrar al proceso
metabólico.

81
Cifrado en Stryer et al., op. cit., p. 605.
Figura 4.13
Reacciones principales de la ruta de la β-oxidación de los ácidos grasos saturados.

La reacción se inicia con la activación del AG por la enzima acil-CoA sintetasa o


ácido graso tioquinasa y participación del ATP. El proceso ocurre en dos etapas,
primero el AG reacciona con el ATP para producir un aciladenilato. Durante la
segunda, el grupo sulfihidrilo de la Co-A reacciona con al aciladenilato para formar
acil-CoA y AMP. Estas reacciones ocurren en la membrana externa mitocondrial.
El AG activado es transportado por una translocasa a la matriz mitocondrial, donde
ocurren subsiguientemente cuatro reacciones, la oxidación por el FAD (DH-acil-
Co-A), una hidratación (Enoil-Co-A-hidratasa), una oxidación por el NAD (DH-L-3-
hidroxiacil-CoA) y una tiolisis (β-cetotiolasa). La secuencia detallada de las cuatro
reacciones se diagrama en la Figura 4.15. La tiolisis descrita se refiere a la
propiedad que tiene la encima β cetotiolasa de escindir la 3-cetoacil-CoA en acetil-
CoA y otro resto de acil-CoA acortado en dos átomos de carbono. Este resto de
acil-CoA entra de nuevo a la ruta de la β-oxidación, dando los mismos productos.
Este ciclo se repite tantas veces queden restos del acilados del AG. Los restos de
acetil CoA, en cambio entran al ciclo de Krebs en donde son completamente
oxidados a CO2 y H2O.

La β-oxidación lleva a cabo la degradación completa de los AG saturados que


tienen un número par de carbonos. La mayoría de los AG tiene esta constitución
debido al proceso de síntesis de los mismos. No obstante todos los AG son tan
simples, de manera que los AG insaturados o de número impar requieren algunas
etapas adicionales de degradación no descritas aquí.
4.5.5.2- Producción de ATP durante la degradación de los AG.

Una vez descritas las reacciones de la ruta de la, podemos calcular el rendimiento
energético de un AG. Para tal efecto, debemos calcular cuantos restos de acetil-
CoA se producen durante la β-oxidación completa de un AG saturado par,
mediante la fórmula:

(4.10)
Como quiera que todas las moléculas de acetil-CoA que se producen todas no son
el resultado de la oxidación del AG sino:

(4.11)

Entonces el número de ATP producido durante la oxidación completa (CAT) de un


AG par será:

A manera de prueba calculemos la cantidad de ATP producidas por una mole de


ácido palmítico (C16). Como quiera que el AG tenga dieciséis átomos de carbono
puede producir ocho restos de acetil-CoA (16/2), mientras que debe pasar seis
veces ([16/2]-1) la ruta de β-oxidación, para convertirse completamente en las
ocho moléculas de acetil-CoA. Como quiera que por cada molécula de Acetil-CoA
producida por β-oxidación ocurren dos deshidrogenaciones (FADH y NADH 2) se
producirán por tanto 35 ATP (5 x 7). Las ocho moléculas de acetil-CoA entrarán al
ciclo de Krebs produciendo 12 ATP por cada una, por tanto la producción bruta a
partir del palmitato durante el ciclo será de 96 ATP (12 x 8), la producción bruta
total será entonces de 131 ATP. Como se consume una molécula de ATP a AMP
para activar el ácido y otra para la conversión subsiguiente de AMP en ADP, la
producción neta es de 129 ATP.

● Calcule la producción neta y bruta de ATP durante la respiración de una


molécula de ácido laúrico (C10) y araquídico (C20).
4.5.5- Metabolismo aerobio.

Luego del estudio detallado del proceso bioquímico de la respiración podemos


guiar nuestra exposición al estudio al análisis de la respiración a nivel celular y
organísmico. Como hemos visto, el efecto final del metabolismo aerobio es un
aumento en el consumo de O2 y un aumento en la producción de CO2 y H2O. Es
posible entonces, determina la actividad metabólica total de un organismo
midiendo el consumo de oxígeno por una célula o por un organismo intacto,
mediante el uso de un respirómetro o determinando el oxígeno disuelto consumido
mediante el procedimiento de Winkler82. A este método de estudio del índice
metabólico de una célula o de un organismo se le conoce como calorimetría
indirecta. El respirómetro es un instrumento capaz de detectar, manométrica o
digitalmente el consumo de oxígeno por una célula o cualquier otro organismo
intacto83. El respirómetro celular por excelencia esta representado por el
Respirómetro de Warburg, uno de los cuales reposa en el Laboratorio de
Fisiología General del Departamento de Fisiología y Comportamiento Animal.

El consumo de O2 se mide por volumen de gas consumido por un individuo, por


peso del organismo en la unidad de tiempo en ayuna y en reposo y se denomina
tasa de actividad respiratoria o Qo2 que para el caso de la célula se expresa en
μL/mg/hora para organismos mayores en mL/g/hora. El peso puede ser seco o
húmedo, siendo el primero en promedio cuatro veces superior. El metabolismo
medido bajo las condiciones aquí mencionadas constituye lo que se conoce como
metabolismo basal (MB)84.

4.5.4.1- Factores que afectan el consumo de oxígeno

Utilizando el procedimiento de medida de la actividad metabólica anteriormente


descrito se puede determinar el efecto de diversos factores sobre el consumo de
oxígeno.

4.5.4.1.1- Tipo de organismo.

En general el consumo de oxígeno por peso húmedo en los tejidos vegetales es


ligeramente menor que para los tejidos animales. Esto es debido a la existencia,
en los tejidos maduros, de contenido metabólicamente inactivo, como la vacuola
central y la pared celular. No obstante, en algunos tejidos vegetales el consumo de
oxígeno es comparable a los reportados para los animales 85.

4.5.4.2- Actividad.
82
Este procedimiento no se discute aquí pues es realizado en las pruebas de laboratorio.
83
Para un estudio más detallado sobre los métodos de medición directa e indirecta de la actividad metabólica
revisar los siguientes textos: Richards, 1973, pp. 44 - 50; Schottelius y Schottelius, 1973, p. 403 – 408;
Selkurt, 1976, pp. 593 – 598; Giese, op. cit., Apéndice, pp. 450 – 457.
84
Cifrado en Höber, et al., op. cit., p. 375 y Giese, op. cit., p. 433; Selkurt, ibid, p. 595.
85
Cifrado en Taiz y Zeiger, op. cit., p. 282.
Las células y organismos más activos consumen más O 2 que los menos activos.
Por ejemplo, cuando los organismos realizan una actividad máxima su
metabolismo puede aumentar de 20 – 100 veces. En animales, este aumento
durante actividad es causada por un aumento en la acción de la musculatura que
en la mayoría de ellos comprende tanto como un 45% de la masa corporal 86.

4.5.4.3- Tamaño.

Figura 4.11
Relación entre la tasa de consumo de oxígeno (µg/g/hora) y el peso corporal (g) de Dormitator latifrons
adaptado a agua dulce (Durán, 1996).

Las células más grandes consumen más O 2 que las más pequeñas; ésta regla
también la cumplen los organismos intactos (Figura 4.11). En animales
homeotermos por lo menos, parece ser cierto que a mayor relación área
superficial-volumen mayor es el consumo de oxígeno, por consiguiente, mayo
resulta la pérdida de calor y la actividad respiratoria. Para entender estas
relaciones es necesario recordar que, por ejemplo, para una esfera, el volumen
crece como una función cúbica del radio (V=4πr 3/3) mientras que su superficie lo
hace como una función del cuadrado (A=4πr2) del mismo,

Por consiguiente, el volumen de la esfera crece más rápido que su área


superficial. La relación área volumen determinará entonces la velocidad a la cual
se disipa el calor por la superficie del animal, una musaraña, si la comparamos
con un gato por ejemplo, disipará más calor que éste por su enorme relación área

86
Cifrado en Richards, ibid, pp. 70 – 71; Schottelius y Schottelius, ibid, p. 409; Guyton, 2001, p. 987.
volumen y deberá en consecuencia ingerir más alimento para conservar su
temperatura.

El O2 consumido por un animal en la unidad del tiempo puede relacionarse con la


superficie y el volumen mediante la ecuación:

(4.12)
Donde OV es el volumen de oxígeno consumido en la unidad del tiempo, K es una
constante y b es un exponente. Para casi todos los casos estudiados b es igual a
0,73; como OV = Qo2, por consiguiente, para todos los pesos el consumo de
oxígeno es proporcional a la potencia de 0,73 87

Para explicar el por qué desciende el consumo de O 2 a medida que aumenta el


peso, Giese (1975) sugirió que un incremento en tamaño implica que como el
volumen del animal aumenta en proporción cúbica a sus dimensiones lineales, la
fuerza de los músculos y otros tejidos conectivos lo hacen en función al cuadrado
creando una desproporción favorable al incremento de tejidos inertes y de poco
consumo de oxígeno88.

4.5.4.4- Temperatura.

El consumo de oxígeno aumenta, dentro del ámbito vital (zona biocinética), en


forma proporcional a la temperatura en cultivos celulares, en plantas y en animales
poiquilotermos con un Q10 que fluctúa entre 2 – 5.

● ¿Cómo interpreta usted esta última observación? (Ver sección 5.7.5.5)

En los animales homeotermos adultos la conducta es distinta, pues al aumentar la


temperatura del medio la temperatura permanece constante y por ende el
consumo de oxígeno permanece inalterado; más cuando desciende la temperatura
aumenta el consumo de O2, incrementando así la liberación de calor para
mantener la temperatura corporal.

4.5.4.5- Sexo.

El consumo de oxígeno por la hembra humana es menor de un 6 a 10% en


comparación con el macho del mismo tamaño y edad 89. Estas diferencias suelen
ser adscritas al tono muscular y a factores hormonales (Ver más adelante).

4.5.4.6- Nutrición.

En mamíferos que llevan mucho tiempo ingiriendo alimentos bajos en calorías


suelen tener metabolismo basal bajos, ocurre lo contrario con una alimentación

87
Cifrado en Richards, op. cit., pp. 56 – 61; Selkurt, ibid, pp. 595 - 596; Giese, op. cit., pp. 435 – 437.
88
Cifrado en Giese, ibid., p. 437.
89
Cifrado en Selkurt, ibid, p. 596 y Guyton, op. cit., p. 987.
excesiva. Dentro de ciertos límites, sin embargo, el organismo ajusta la intensidad
de su oxidación a la cantidad disponible de alimento.

El tipo de alimento también es importante, un individuo en reposo que ingiere


alimentos aumenta la producción de calor por encima del valor basal; a este efecto
se le llama acción dinámica específica de los alimentos. La acción dinámica
específica varía con el tipo de alimento.

La relación existente entre consumo de oxígeno y el tipo de alimento se hace más


obvia si se recurre al concepto de coeficiente respiratorio (CR)90 que es la relación
entre el CO2 producido y el O2 consumido durante la respiración;

(4.13)

Cuando un organismo se alimenta de proteínas su cociente respiratorio es alto con


un valor de 0,82, en cambio es de uno (1,0) para los carbohidratos y de 0,7 para
los lípidos; para el caso de una dieta balanceada el CR es de 0,824.

Si se observa la ecuación de CR se notará que se requiere más oxígeno para


metabolizar los lípidos que a los carbohidratos y los aminoácidos que ya tienen
más oxígeno en su estructura. Así tenemos que cuando se metaboliza glucosa
mediante la reacción:

(4.14)
Entonces:
CR = 6CO2 / 6O2 = 1

En cambio para un lípido:


(4.15)
Entonces:
CR = 16CO2 / 23O2 = 0,7

Es evidente que hay que consumir más oxígeno para quemar un ácido graso que
a un carbohidrato.

4.5.4.7- Desarrollo.

Los organismos jóvenes consumen más que los adultos, pero en mamíferos el feto
consume menos que el neonato que alcanza su consumo máximo durante el
destete91

90
No confundir con coeficiente de reparto que usa el mismo acrónimo; ver sección 5.7.5.1 y Giese, ibid., pp.
440 - 442.
91
Cifrado en Selkurt, ibid, p. 596; Schottelius y Schottelius, ibid, p. 408.
4.5.4.8- Hormonas.

Las hormonas también influyen sobre el consumo de O 2, como es el caso de las


hormona sexual masculina (testosterona) aumenta el consumo de oxígeno; en
cambio las hormonas femeninas (progesterona y estrógenos) aumentan muy poco
el consumo de oxígeno. El efecto parece estar asociado al efecto anabólico de
estas sustancias que aumentan la masa del músculo esqueletal.

La hormona del crecimiento (somatotrofina o STH) aumentan el consumo de


oxígeno al estimular directamente el metabolismo celular.

Por último la hormona tiroidea (triiodotiroxina y tiroxina) aumentan el metabolismo


basal; esta hormona explica las diferencias en MB existente entre personas que
viven cerca del Ecuador y las que viven más al norte 92, los primeros aumentan la
secreción de la hormona tiroidea, mientras que los últimos la disminuyen.

4.5.4.9- Ritmicidad.

Bajo condiciones constantes de humedad, luz, concentración de sales y


metabolitos las células consumen más a una hora que a otra. Igual ocurre con el
metabolismo total de un organismo intacto 93. Se ha postulado la existencia de un
reloj fisiológico o biológico que regularía dicha actividad.

Figura 4.12
Representación diagramática de los diversos aspectos de un ritmo biológico y los términos a los que se hace
referencia en el texto. Para una definición terminológica detallada ver Palmer, op. cit., pp. 363 – 365.

La ciencia que estudia la ritmicidad de los organismos vivientes se denomina


bioritmicidad o cronobiología. Según esta disciplina, los organismos vivos están
dotados de un reloj biológico interno que regula la ritmicidad biológica. Como
quiera que los ritmos están acoplados a variaciones periódicas de factores
ambientales (eg. luz y oscuridad, cambios estacionales, cambios fotoperiódicos y
otros) la teoría cronobiológica debe dar cuenta de dicho acoplamiento. Por otra
parte, es obvio que es ventajoso desde el punto de vista adaptativo que los ritmos

92
Cifrado en Guyton, op. cit., pp. 986 – 987.
93
Cifrado en Palmer, 1976, pp. 41 – 44.
de actividad biológica del organismo estén ajustados a los ritmos de variación
ambiental.

Los ritmos biológicos tienen una duración o fase aproximadamente igual al ciclo al
cual están acoplados (Figura 4.12); así los ritmos pueden ser:

4.5.4.9.0.1.- Ritmos circadianos (del latín circa, próximo y diem, día), son aquellos
que tienen una duración aproximada de 24 horas, como los ritmos motores de los
roedores o de la cucaracha. También pertenecen a esta categoría el ritmo
metabólico de muchas plantas y animales que consumen más oxígeno a un
determinado momento del día y lo disminuyen a otra. Así mismo se incluye en esta
categoría los ritmos biológicos asociados a los movimientos de las mareas o
circamareal.

Entre los ritmos circadianos en animales destacan los ritmos de actividad diurna
de los vertebrados (eg. ratones, ratas, ardillas y el hámster 94) y de los
invertebrados (eg. mosca de la fruta, la cucaracha, y el cangrejo violinista 95). Este
fenómeno rítmico consiste en que el animal es más activo durante una fase del
ciclo de luz y oscuridad del día e inactivo completa o parcialmente a otra. Dentro
de este ciclo se incluye el ciclo de sueño y vigilia en muchos animales, incluyendo
al hombre96.

En el caso de los artrópodos litorales al ritmo circádico diario se le suma el de


actividad mareal, es decir no solo son activos o inactivos a una hora del día sino
que coinciden también con ele ritmo de marea alta o baja (ritmo circamareal)97.

4.5.4.9.0.2.- Ritmos infradianos, son los ritmos biológicos mayores de 24 horas,


como es el caso del ritmo menstrual en la hembra humana y los ciclos
reproductivos de muchos mamíferos que pueden ser anuales. Al primero, el ciclo
menstrual, es circalunar; mientras que el último es circanual.

4.5.4.9.0.3.- Ritmos ultradianos, son aquellos que tienen una duración menos que
los ritmos circadianos, como el ritmo de alimentación, o el pulsar del corazón.

El postulado fundamental de la teoría de los relojes biológicos es el de que el


mecanismo del reloj es de carácter endógeno y que no necesita información
externa para mantener su ritmicidad periódica 98; es decir que corre
independientemente de la información externa. La pregunta que surge como
resultado de esta afirmación es la de que ¿cómo se acoplan los relojes biológicos
con las variaciones de factores ambientales que ocurren a su alrededor?

94
Ver, Bünning, 1967, p, 14; Takahashi y Hoffman, 1995; pp. 162 – 164.
95
Ver, Brown, et al, 1970, pp. 15 – 20; Palmer, 1996, Ishida, et al., 1999.
96
Jouvet y Jouvet, 1969, p. 155; Kandel, et al., 2000, p. 937.
97
Palmer, ibid., pp. 572 – 574.
98
No siempre ha sido aceptada la hipótesis endógena del reloj biológico, la hipótesis alternativa es la de que
los ritmos biológicos son la expresión de fenómenos periódicos externos impuestos a los organismos vivos.
Para una revisión de ambas alternativas ver Brown, et. al., 1972.
Esta característica, aparentemente paradójica, se explica si tomamos en
consideración las propiedades de los relojes biológicos y su mecanismo íntimo.

4.5.4.9.2.- Propiedades de los relojes biológicos.

4.5.4.9.2.1– Los relojes corren independientes de factores ambientales obvios. En


efecto, se ha observado que los animales mantenidos en condiciones constantes
de presión, temperatura y luz u oscuridad fluctúan libremente (corren libremente)99.
Es decir, una rata presentará periodos de actividad e inactividad motora cada 24
horas, aunque este sometida a oscuridad y temperatura constante.

4.5.4.9.2.2.- La ritmicidad de los relojes tienen períodos (longitudes) mayores o


menores de 24 horas y fluctúa en un ámbito entre 20 – 28 horas con desviaciones
muy pequeñas, de allí el nombre de circadiano 100. Los ritmos circanuales también
presentan desviaciones del período 365 días ¼ anual.

4.5.4.9.2.5.- La ritmicidad de los períodos de los relojes biológicos, son típico de la


especie, aunque pueden variar dentro de ámbitos muy estrechos entre individuo
de la misma especie.

4.5.4.9.2.5.- Los ritmos de los relojes son innatos o heredables y en algunos casos
se ha podido identificar y aislar el gen que lo regulan 101.

4.5.4.9.2.5.- Los ritmos son independientes de la temperatura. El ritmo de


actividad endógena fototóxica de Euglena, por ejemplo, entre 20 – 30 ºC se aleja
muy poco del ritmo de 24 h. Una revisión compresiva del factor coeficiente de
temperatura (Q10) en el ritmo endógeno de diferentes organismos reportó un valor
que fluctuó entre 1,0 y 1,1. La conclusión es que el período del ritmo es
independiente de la temperatura102.

4.5.4.9.2.4.- Los relojes biológicos son insensibles a gran variedad de inhibidores,


agentes narcotizantes, estimulantes del crecimiento, dosis subletales de venenos
metabólicos y otras sustancias químicas103

4.5.4.9.2.5.- los relojes fisiológicos son sincronizados por factores ambientales que
reciben el nombre técnico de zeitgeber (dador temporal)104, entre los que se
cuentan la luz y la temperatura.

4.5.4.10- Inhibidores y desacopladores

99
Ver por ejemplo Villarreal, 1972.
100
Bünning, op. cit., p. 13, Palmer, op. cit., p. 8 y 20 – 25.
101
Estos genes han sido denominados “genes reloj” Lewis, 1995; Takahashi y Hoffman, op. cit.; Balys y
Pyza, 2001.
102
Cifrado en Bünning, op. cit., p. 48 y Palmer, op. cit., p 17.
103
Cifrado en Bünning, op. cit., p. 124 - 125 y Palmer, op. cit., p 19.
104
Zeitgeber, es cualquier estímulo externo que entrena (entrain) o pone en fase (refase) un ritmo biológico.
Cuando se estudiaron estas sustancias se indicó que muchas de ellas inhiben
específicamente puntos de la maquinaria metabólica de la célula, así que en este
aparte solo mencionaremos aspectos muy generales que atañen más que nada al
consumo de oxígeno.

Los inhibidores del complejo IV, tales como el cianuro y la azida que se fijan al Fe
del citocromoxidasa evitan el paso de ē al y por consiguiente disminuyen el
consumo de oxígeno.

Los desacopladores disipan la fuerza protón-motriz sin afectar el libre flujo de


electrones al O2 y por tanto aumentan el consumo de oxígeno.

4.5.4.11- Salinidad.

Figura 4.13
Relación entre la tasa de consumo de oxígeno (µg/g/hora) y el peso corporal (g) de Dormitator latifrons
aclimatado a diferentes horas en agua de mar, la comparación estadísticos entre las diversas regresiones
demostró que sus inclinaciones no son significativamente diferentes (F= -0,209 p > 0,05; Durán, 1996).

En general, para animales acuáticos, la tasa respiratoria es mayor para especies


de agua dulce que para es especies marinas. Para las especies eurihalinas
(Mytilus), el consumo de oxígeno es mayor en aguas salobres diluidas que en
agua de mar; mientras que las estenohalinas (Asterias) es menor105. Esta síntesis
sugiere que el animal para osmoregular a bajas concentraciones de salinidad debe
aumentar su metabolismo aerobio. Esta explicación parte de la asunción de que
como los animales derivan de un antepasado marino su situación original es la
una concentración iónica próxima a la condición marina por ende deberá hacer

105
Prosser, op. cit., p. 189.
trabajo osmótico para mantener la diferencia de concentración iónica y osmótica
en un medio diluido.

En el caso de los peces, la asociación parece ser más bien controversial, pues se
ha afirmado que la salinidad altera las tasas metabólicas, mientras que otras
opiniones sugieren que los cambios metabólicos son transitorios y solo reflejan
situaciones estresantes. En una revisión detallada, Durán (1996) agrupó los peces
en las siguientes categorías:

4.5.4.11.1- Aquello peces que no varían su consuma frente a variaciones amplias


de salinidad.

4.5.4.11.2- Aquello que el consumo aumenta a bajas y altas salinidades.

4.5.4.11.3- Los que al adaptarse a agua de mar presentan tasas metabólicas


disminuidas cuando las salinidades internas se equiparan con las externas.

4.5.4.11.4- Aquellos peces que las tasas aumentan cuando las concentraciones
iónicas del medio interno están en equilibrio con las del medio externo.

El mismo autor demostró que el Dormitator latifrons, se comporta como el primer


caso pues no varía su rutina metabólica al ser sometido, durante varias horas, a
agua de mar (Figura 4.13).

4.5.6- Fotosíntesis106.

Etimológicamente fotosíntesis significa síntesis usando luz107, de manera que se


define fotosíntesis a las reacciones mediante las cuales las plantas con clorofila
absorben la energía de la radiación solar y la transfieren a aceptores de electrones
y la conservan en forma de energía química para realizar trabajo.

4.5.5.1- El cloroplasto y la fotosíntesis.

Las reacciones de la fotosíntesis, en algas y plantas verdes, ocurren en el


cloroplasto (Figura 4.13) El cloroplasto al igual que la mitocondria está rodeado de
una doble membrana (externa e interna) que limita el espacio intermembranal. La
membrana interna rodea el estroma, que es el lugar donde tienen lugar algunas de
las reacciones orgánicas de la fotosíntesis (reacciones del estroma108). En el
interior del estroma se encuentran unas bolsas membranosas aplastadas, los
tilacoides. Los tilacoides se agrupan en pilas formando un granum. Los diferentes
grana están conectados a regiones de la membrana tilacoidal llamadas lamelas
del estroma. Las membranas tilacoidales separan el espacio tilacoidal del estroma.
Por consiguiente en el cloroplasto existen tres membranas, la externa, la interna y
106
Taiz y Zeiger, op. cit., Cap. 7 - 9; Rawn, op. cit., Cap. 18 y Stryer et al., op. cit., Cap. 19 – 20.
107
Taiz y Zeiger ibíd, 11
108
Ibíd, 118.
la tilacoidal (Figura 4.13). Las membranas tilacoidales poseen todo el aparato de
traducción de la energía lumínica, a saber: las proteínas captadoras de luz, los
centros de reacción, la cadena de transporte de los electrones y la ATP sintetasa
(reacciones del tilacoide109.

Figura 4.13
A) Micrografía electrónica de un cloroplasto de planta superior. B) Diagrama de los componentes
ultraestructurales del cloroplasto,

4.5.5.2- Conceptos generales sobre la fotosíntesis.

Fotosíntesis es el proceso fisicoquímico mediante el cual las plantas, algas y


bacterias fotosintéticas usan la luz como para impulsar la síntesis de compuestos
orgánicos110. Existen organismos capaces de usar la luz solar para expulsar
protones al exterior de la célula produciendo un gradiente protónico, entre ellas la
arqueobacteria, Halobacterium, pero como fuente de carbono necesita
compuestos orgánicos, por ello son llamados organismos fotoheterótrofos.

109
Ibíd, 118.
110
Whitmarsh y Govindjee, 1999.
Diferenciándolos así, de los organismos fotoautótrofos, que utilizan la luz para
sintetizar compuestos orgánicos a partir de compuestos inorgánicos simples como
CO2 y H2O (plantas, algas y bacterias fotosintéticas). Los organismos
fotoautótrofos a su vez pueden ser: fotótrofos oxigénicos (plantas, algas y
cianobacterias) que producen oxígeno y tienen como donador de electrones e
hidrógenos al H2O y los fotótrofos anoxigénicos (bacterias verdes y púrpuras) que
no producen oxígeno y tienen como donadores de electrones a el H 2S, el ión
tiosulfato (S2O3-2) o el succinato.

Durante las reacciones iniciales de la fotosíntesis autotrófica, el H 2O es el dador


de ē e hidrógenos para reducir el CO 2 y otros aceptores de ē. El primer proceso la
captación de energía lumínica recibe el nombre genérico de reacciones a luz;
mientras que la segunda, la fijación del CO 2 el de reacciones a oscuridad pues no
necesitan de la presencia de luz. En términos generales, durante la fotosíntesis la
energía lumínica es usada para fijar CO2 a otros compuestos orgánicos siendo el
H2O el donante de electrones para tal reducción. La fotosíntesis cumple con la
reacción general:

(4.16)
De acuerdo con la ecuación (4.16) el O 2 debe provenir del agua que es el dador de
electrones e hidrógenos; hecho que se comprobó marcando radiactivamente el
oxígeno presente en el CO2 y en el H2O con isótopos de oxígeno 16 y 18,
respectivamente:

(4.17)
Termodinámicamente hablando las reacciones de la fotosíntesis ocurren cuesta
arriba esto es en contra de un gradiente termodinámico (+ΔG) mientras que la
respiración ocurre cuesta abajo (-ΔG). Lo que significa que el agua tiene una baja
tendencia perder electrones (potencial de oxidorreducción positivo) y fijar oxígeno.
La fotosíntesis constituye el único proceso metabólico conocido que utiliza el agua
como dador de electrones.

La fotosíntesis vegetal ocurre a través de cuatro procesos:


4.5.5.2.0.1. La absorción de luz.
4.5.5.2.0.2. El trasporte de electrones, que conduce a la reducción del NADP a
NADPH.
4.5.5.2.0.3. La generación de ATP.
4.5.5.2.0.4. La conversión de CO2 en carbohidratos o fijación del carbono111.
Las dos primeras ocurren en el interior del tilacoide del granum por ello se
conocen con el nombre de reacción del tilacoide; resultando en la síntesis de
111
Lodish, et al. op. cit. ,p. 649.
NADPH+H+112. Esta reacción del tilacoide necesita luz de allí que se les denomine
reacciones a luz y comprende dos reacciones diferenciadas las llamadas
reacciones de Hill 113o reacciones de reducción del NADP (. Durante estas
reacciones se libera O2 al ser desdoblado a partir de H 2O, reduciendo el NADP
(4.18).

(4.18)
La tercera reacción (4.5.5.2.0.3) que también ocurre en presencia de luz recibe el
nombre de fosforilación fotosintética

Para explicar este proceso necesitamos familiarizarnos con conceptos muy


generales de cómo opera la interacción entre la luz y la materia. Cuando una
molécula fotorreceptora absorbe un cuanto de luz, la luz excita un electrón de un
nivel basal a un nivel energético superior. En la mayoría de los casos el electrón
excitado regresa a su estado anterior liberando la energía absorbida en forma de
calor o luz. Sin embargo, si existe un aceptor adecuado el electrón excitado puede
ser transferido de la molécula inicial, al aceptor. Durante este proceso la molécula
inicial adquiere una carga neta positiva, debido a la pérdida del electrón; mientras
que el aceptor adquiere una carga neta negativa por la ganancia del mismo, a este
proceso se le denomina separación de cargas fotoinducida114. El lugar donde
ocurre la separación de cargas se conoce como centro de reacción que descansa
en la membrana tilacoidal.

La sustancia fotosensible por excelencia en las plantas y algas es la clorofila y en


las eubacterias fotosintéticas la bacterioclorofila., aunque otras sustancias también
contribuyen al proceso de absorción de la luz (pigmentos accesorios)

4.5.5.2.1- Clorofila y pigmentos accesorios.

En la mayoría de las plantas verdes la clorofila a y la b son las principales


molécula fotorreceptoras, éstas están formadas por un anillo complejo de la
porfirina (tetrapirrólico) al igual que el grupo hemo (eg. hemoglobina, citocromo y
mioglobina), pero a diferencia de estos últimos, posee Mg ++ en su estructura y
esterificado por un alcohol graso de cadena (C 12) larga el fitol (Figura 4.13). Esta
cadena le permite a las clorofilas anclarse en el medio hidrofóbico de la membrana
tilacoidal. El patrón de absorbancia de cada pigmento es ligeramente diferente,
aunque en general, absorben en el azul (λ 424 – 491 nm) y el rojo (λ 647 – 700
nm) (Figura 4.14). Las células procariotas poseen como pigmento la
bacterioclorofila a y b.

112
NADP, dinucleótido de nicotínamida fosfato es un derivado de la vitamina Niacina o vitamina B3.
113
Estas reacciones derivan su nombre de su descubridor, el bioquímico y fisiólogo Robert Hill en 1939 (Hill,
1939; Walker, 1997)
114
Stryer, et al. op. cit. ,p. 530.
Figura 4.13
Estructura molecular de los pigmentos fotosintéticos. Las clorofilas tienen un anillo porfirínico con un átomo de
Mg coordinado en el centro y una larga cola hidrocarbonatada hidrofóbica el fitol.
Los organismo que fotosintetizan poseen otros pigmentos que reciben el nombre
genérico de pigmentos accesorios, entre ellos, los carotenos y la ficobilinas
(ficoeritrina y ficocianina). Las clorofilas absorben la luz correspondiente a una
fracción del espectro visible, la función de los pigmentos accesorios es la de
absorber el segmento del espectro no captado por las clorofilas y canalizarlos al
centro de reacción de los fotosistemas aumentando eficacia del sistema
fotosintético (Figura 4.14).

Figura 4.14
Espectro de absorción de los pigmentos fotosintéticos. (a) Bacterioclorofila a. (b) Clorofila a. (c) Clorofila b. (d)
ficoeritrobilina. (e) β caroteno.
4.5.5.2.2.- Complejo de antenas y fotosistema.

La luz es colectada por 200 – 300 pigmentos (clorofila y pigmentos accesorios)


unidos a un complejo proteico colector localizado en la membrana del cloroplasto
denominado centro de reacción. El primer paso en la conversión de la luz en
energía química contenida en los compuestos orgánicos es la excitación
electrónica, por un fotón de luz, de una molécula de pigmento antena localizada en
el sistema o complejo antena. El sistema de antena (Figura 4.15) consiste de
cientos de pigmentos (principalmente clorofila a, carotenoides o bacterioclorofila)
anclados a proteínas dentro de la membrana tilacoidal El sistema de antena
comprende, además de un complejo proteínico conocido como centro de reacción
que también posee clorofila (Figura 4.16). La antena funciona como un
cosechador de luz o LHC (del inglés light-harvesting complex115).

Figura 4.15
Sistema de antena de pigmentos y el centro de reacción.

El LHC, al absorber un cuanto de luz lo transfiere a la clorofila del centro de


reacción que a su vez lo trasfiere a la plastoquinona (QA y QB, Figura 4.16) a
través de la feofitina

115
Taiz y Zeiger, op. cit., p. 117.
Figura 4.16
Diagrama del fotosistema II, compuesto de numerosos polipéptidos pero solo dos D1 y D2 se une al portador
de electrones envuelto en la transferencia de los mismos de YZ a la plastoquinona. Abreviaturas YZ : tirosina;
P680: centro de reacción de la clorofila (donador primario de electrones); Feo: feofitina; QA y QB
plastoquinona unida; PQH2, plastoquinona reducida; Cit b559, citocromo b.
78

Capítulo 5

PERMEABILIDAD

5.- Se entiende por permeabilidad a la facilidad relativa con que una sustancia
atraviesa un medio. Como quiera que en la célula, el medio atravesado por
cualquier sustancia es una membrana, se afirma los fenómenos de permeabilidad
son fenómenos de membrana. Para que una sustancia atraviese una membrana,
sin embargo, es necesario aplicar una fuerza. Pero antes de continuar debemos
familiarizarnos con la membrana celular.

5.1. Membrana celular

Clasificación de las membranas: De acuerdo a su permeabilidad a diferentes


moléculas las membranas puede ser: impermeables, permeables.

5.1.1- Membranas impermeables, son aquellas que no permite el paso ni de


solvente ni de soluto.

5.1.2- Membranas permeables son las que permite el paso de solventes o de


soluto o de ambos, y a su ver puede ser:

5.1.2.1- Membranas permeables puras, las que permiten el paso de solventes más
no de solutos, como es el caso de las membranas de ferrocianuro cúprico
depositados en crisoles porosos de porcelana 116

5.1.2.2- Membranas selectivamente permeables, las que permite el paso de


ambos en forma diferencial o selectiva. La membrana celular pertenece a este tipo
de membranas. Antiguamente, estas membranas fueron erróneamente
denominadas como membranas semipermeables; lo cual implica que son medio
permeables, y este no es el caso. En efecto, las membranas celulares son
libremente permeables a unos solutos y no a otros, es más, pueden variar su
permeabilidad a un soluto de un momento a otro.

5.3- Funciones de la membrana celular

5.5.1- Función reguladora.

La membrana celular controla la entrada y salida de sustancias a la célula, en


especial cuando ésta debe sobrevivir rodeada de ambiente diversos y
potencialmente nocivo. (Avers, 1987).

5.5.2- Mantener un gradiente eléctrico.

116
Salisbury y Ross, 1969; Morris, 1987.
79

Existe una diferencia de potencial entre el interior y el exterior de la membrana


celular, gradiente en última instancia sostenido por ella.

5.5.3- Mantener un gradiente químico.

Existe una diferencia de concentración de iones y metabolitos, entre el interior y el


exterior de la célula viva, gradiente también sostenido por la membrana celular.

5.5.4- Compartamentalizar la célula117.

La membrana es una barrera dinámica que asegura el orden interno, que se


evidencia por la función diferencial que realiza cada organela (división del trabajo
celular).

5.5.5- Traduce información externa.

Muchas proteínas de la membrana tienen como función recibir información


proveniente del medio externo o de otras células y trasmitirla al interior. Esta
función la realizan en gran medida proteínas receptoras y algunas enzimas de la
membrana.

5.4- Propiedades de la membrana celular

5.5.1- La membrana tiene cargas eléctricas.

La superficie de la membrana está cargada, en parte por la presencia en su


superficie de grupos polares. El hecho de que entren más fácilmente las partículas
sin cargas que las cargadas, sugiere esta propiedad 118 (ver más adelante, sección
5.4.1). Como están afectados tanto los cationes, como los aniones se considera
que la superficie membrana es un mosaico de áreas cargadas positiva y
negativamente (ver modelo de fluido Figura 5.4)

No obstante, la carga global sobre la superficie externa de la membrana


plasmática de la mayoría de las células es predominantemente positiva por lo
tanto las aniones entra más fácilmente que los cationes.

5.5.2- La membrana celular está polarizada.

Todas los membranas, de todas las células, tanto eucariota como procariota está
polarizada; por lo cual entendemos que la superficie externa esta cargada
positivamente con respecto al interior (Figura 5.1).

5.5.3- Tiene una baja tensión superficial (TS).

117
Giese, 1983, p. 227.
118
Ibid, p. 442.
80

La membrana celular tiene un tensión superficial de de 0,1 dina cm -1, este valor
para la TS de la membrana es relativamente baja, para un sistema formado por
lípidos (el agua tiene una TS de 75,3 dina cm -1 y el aceite 32 dina cm -1), lo que
sugiere la presencia, en la membrana celular, de moléculas tensoactivas como las
proteínas, capaces de disminuir dicha tensión 119.

Figura 5.1
Sección transversal de un axón de fibra gigante de calamar, mostrando la polaridad de la membrana.

5.5.4- Tiene una alta resistencia eléctrica.

Resistencia eléctrica se refiere a la dificultad con que una sustancia se opone al


paso de la corriente a través de ella 120. Como quiera que la membrana celular esta
formada por lípidos, y se sabe que las cadenas hidrocarbonatadas son malos
conductores de la electricidad no es de extrañar que le confiera a la membrana
esta propiedad121.

5.5.5- Tiene una composición química específica (Anexo2).

La membrana celular la componen básicamente lípidos y proteínas de carácter


anfipático (del griego amphi, doble), es decir formados por una porción hidrofóbica
y otra hidrofílica. Los lípidos más abundantes en la membrana son: los fosfolípidos
(50%), los esfingolípidos (18%) y el colesterol (23%)122.

Los fosfolípidos son los ésteres de los ácidos grasos y el glicerol-3-fosfato, en


donde al grupo fosfato se le ha unido un grupo cargado, que puede ser la colina
(+); la serina (-) o la etanolamina (+) o inositol (fosfatidilos). (Figura 5.2). Los
esfingolípidos son ésteres fosfóricos de los ácidos grasos, en donde la glicina ha
sido substituida por la esfingosina, aunque posee resto de ácido fosfórico
esterificado y la fosforilcolina. Estos dos grupos de lípidos son estructuralmente
muy similares entre sí y por tanto guardan muchas propiedades fisicoquímicas
comunes.

119
Davson, 1960, p. 247.
120
La unidad de resistencia eléctrica es el ohmio que es igual a la resistencia entre dos puntos de un conductor
cuando una diferencia de potencial constante de un voltio, aplicado entre ellos, produce una corriente de un
amperio, ver Lora-Tamayo, 1983, p. 354.
121
Davson, ibid, p 245.
122
Rawn, op cit., p. 225.
81

Los glicolípidos son lípidos que contienen uno a varios azúcares unidos a un
esqueleto de esfingosina. El glicolípido más sencillo es el cerbrósido, que solo
tiene un residuo de glucosa o galactosa. Los glicolípidos más complejos son los
gangliósidos que contienen una cabeza ramificada hasta de siete monosacáridos.
Los restos de azúcares de los glicolípidos siempre están orientados hacia la cara
externa de la membrana celular123.

Figura 5.2
Diagrama de una molécula de un fosfolípido, mostrando la porciones afines al agua (hidrofílicas) y las
porciones no afines al agua (hidrofóbicas)

Los fosfolípidos de las membranas de las arqueobacterias difieren de los de los


eucariotas y procariotas en que los ácidos grasos se unen al glicerol mediante
enlaces éter y no éster, más fuertes que los segundos. Por otra parte, las cadenas
carbonatadas son ramificadas y no lineares como en los grupos antes
mencionados. Estas dos características les permiten a estos organismos resistir
las condiciones extremas de alta temperatura, bajo pH y altas concentraciones de
sales (extremófilas)124.

Los ácidos grasos presentes es la membrana procariota son instaurados o


monoinstaurados, mientras que en la eucariota son poliinstaurados 125.
123
Para una revisión detallada y actualizada de la bioquímica de los lípidos de la membrana ver Stryer, et al.,
op cit, pp.320 – 321.
124
Lane, 2005, pp.39 – 41.
125
Stanier, et al 1985.
82

Los esteroles como el colesterol se encuentran presentes en la membrana de la


célula eucariota, más sin embargo, la membrana procariota carece de colesterol al
igual que la membrana de la mitocondria y del cloroplasto. El colesterol también es
anfipático dada la presencia de un grupo alcohólico en posición 3 del anillo A de la
molécula.

Figura 5.3
Diagrama de una molécula de colesterol.

Las proteínas de la membrana son en su gran mayoría de carácter anfipático


también, pero su estructura más fina será descrita más adelante. Baste señalar
aquí, que la proporción de proteínas-lípidos puede variar enormemente de tejido a
tejido y de especie a especie, hay membranas muy ricas en proteínas como la
membrana mitocondrial y otras de bajo contenido proteico como es el caso de la
membrana de mielina (Cuadro 5.1).

Cuadro 5.1
Contenido proteico y lipídico de varios tejidos animales.

Especie Tejido Proteínas % Lípidos % P/L


Hombre Mielina (SNC) 23 79 0,25
Vaca Mielina (SNA) 23 76 0,30
Rata Músculo 65 35 1,85
Rata Hígado 60 40 1,50
Hombre Eritrocito 60 40 1,50
Rata Mitocondria (hígado) 70 29 2,41
De Robertis y De Robertis, 1980; Karp. 1987; Pérez et al, 1987; Smith y Wood, 1997.

5.5.8.- Tiene una estructura compleja.

Las propiedades de la membrana, antes mencionadas, se explican por la


composición y arreglo ultraestructural de los componentes de la membrana celular
de allí la necesidad de conocer los diversos modelo de membrana propuestos por
diferentes investigadores.

El espesor de la membrana varia de 5,0 – 10,0 nm, de acuerdo con el tipo, una de
las más delgadas es la membrana de mielina, mientras que una de las más
gruesas es la membrana interna mitocondrial.
83

5.5- Estructura de la membrana celular, modelo del mosaico fluido.

El modelo de la membrana que utilizamos en la actualidad fue propuesto por T.S.


Singer y G.L. Nicholson en 1972 (Figura 5.4). Según este modelo los fosfolípidos
se arreglan en doble capa (bicapa) con sus porciones hidrófobas dirigidas hacia el
interior de la membrana, mientras que sus porciones hidrofílicas se dirigen hacia el
medio acuoso del exterior e interior de la célula. Insertado entre las moléculas de
fosfolípidos se encuentra el colesterol.

Figura 5.4
Interacciones de los diferentes componentes de la membrana de acuerdo al modelo de Singer y Nicholson
del mosaico fluido.

Algunas proteínas se encuentran adheridas a la superficie de la membrana


mediante enlaces no covalentes y de fácil remoción, denominadas proteínas
periferales o extrínsecas; mientras que otras se encuentran embebidas en la
matriz fosfolípidica y solo puede ser removidas mediante el uso de detergentes,
las llamados proteínas intrínsecas y integrales o transmembranales126. Algunas
proteínas atraviesan la membrana formando una hélice, como es el caso, de la
glicoforina A; mientras que otras, lo hacen describiendo varias hélices, como la
bacteriorrodopsina127. La mayoría de las proteínas integrales tienen porciones
hidrófobas que interactúan con las porciones respectivas de los fosfolípidos.

La presencia física de las proteínas intrínsecas de la membrana en el medio de la


matriz fosfolípidica ha sido demostrada mediante la técnica de congelación y
fractura (freeze fracture).

Los componentes de la membrana, como ya se indicó son anfipáticos es decir


tienes un extremo hidrofílico y otro hidrofóbico. Los fosfolípidos, por su parte, se

126
Muñoz, 1985.
127
Lodish, et al., op. cit., p. 80; Stryer, et al., op. cit, p. 335.
84

mantienen en la membrana por interacciones hidrofóbicas lo que hace difícil la


extracción de las proteínas intrínsecas.

El hecho de que la doble capa lipídica este atravesada por proteínas intrínsecas
explica el hecho de que, a pesar de los resultados preliminares ofrecidos por
Gorter y Grendel128, no se haya encontrado suficiente fosfolípido para doblar el
área del fantasma del eritrocito.

De acuerdo con este modelo, los lípidos y las proteínas tienen movilidad lateral,
proceso denominado difusión lateral. Por otro lado, el movimiento de arriba-abajo
(flip flop) esta restringido, ya que implica el paso de componentes hidrofílicos, tales
como azucares y aminoácidos, a través de la bicapa hidrofóbica con enorme gasto
de energía libre. No obstante, algunas membranas pueden realizar este
movimiento pero el mismo es realizado por proteínas muy especializadas llamadas
flipasas129. La difusión lateral de los componentes la membrana ha sido
demostrado mediante la técnica FRAP o de fluorescencia después de
fotodecoloración (fluorescence recovery after photobleaching). La técnica consiste
en marcar un componente de la superficie de la membrana celular, tal como la
cabeza de un fosfolípido o de una proteína con un reactivo fluorescente específico.
Luego se focaliza un rayo de láser en un punto específico de la superficie de la
célula, lo que decolora en forma irreversible el área iluminada. Al poco tiempo, la
fluorescencia del área iluminada aumenta por migrado de componentes no
decolorados de otras áreas de la superficie de la célula (Figura 5.7). La velocidad
de recuperación depende de la movilidad del componente membranal que puede
expresarse como un coeficiente de difusión. Mediante esta técnica se ha podido
calcular que la velocidad de difusión de los fosfolípidos es de 1 µm seg -1, a esta
velocidad una molécula de fosfolípido puede moverse de un extremo a otro de una
célula bacteriana típica en un segundo 130. Esta conducta es debida a que los
lípidos de la membrana tienes una consistencia liviana, lo que le confiere a la
membrana un carácter fluido, de allí el nombre del modelo.

El primer modelo de membrana fue desarrollado por J. Danielli y H. Davson en


1935, en el cual la doble capa fosfolípidica esta emparedada entre dos capas de
proteínas hidratadas de carácter periferal, de allí el nombre de modelo del
sándwich (Figura 5.8)131. De acuerdo a este modelo los fosfolípidos están
fuertemente empaquetados y de estructura casi cristalina, por consiguiente la
movilidad lateral debía ser pequeña. Esta es una de las razones por las cuales el
modelo es rechazado en la actualidad. La otra, es el hecho de que no hay
suficiente fosfolípidos para constituir una doble capa continua (ver arriba).

128
Gorter y Grendel, 1925; Davson, op. cit., p. 246; Edidin, 2005.
129
Lodish et al., op. cit., p. 165.
130
Ibid, p. 163;
131
Davson, op. cit. pp. 246 – 255.
85

Figura 5.7
Técnica de recuperación de fluorescencia después de fotoacalaración. (Redibujado de Lodish, et al., op. cit. p.
164)

La fluidez de la membrana es debida a la composición lipídica y a las propiedades


de las cadenas alifáticas de los fosfolípidos membranales que la componen, los
cuales pueden tener un carácter rígido y altamente ordenado o fluido o de gran
desorden. El estado rígido lo confieren ácidos grasos largos e insaturados, pues
sus cadenas largas y rectas favorecen interacciones de van der Waals.
Contrariamente, ácidos grasos de cadena corta e insaturados tienen menor
superficie para establecer este tipo de interacción favoreciendo el estado fluido. Se
dice entonces que la membrana puede existir en dos estados o fases una rígida o
de gel y otra fluida, de acuerdo con la composición lipídica señalada. Cuando la
membrana pasa de un estado al otro, se dice que está en transición de fase,
durante la cual la membrana absorbe una cantidad elevada de calor en un rango
estrecho de temperatura; el punto medio de esta temperatura constituye la
temperatura de fusión de la bicapa132

Los organismos ajustan la fluidez de su membrana haciendo uso de las


propiedades de transición de fase de la membrana. Por ejemplo las bacterias
aumentan la fluidez de su membrana aumentando la concentración de ácidos
grasos insaturados. Así tenemos, que en Escherichia coli la relación ácidos grasos
saturados-ácidos grasos insaturados desciende de 1,6 a 1,0 cuando la
temperatura de cultivo pasa de 42° a 27°C. Por otra parte, en animales el
colesterol es el principal regulador de la fluidez de la membrana. El grupo
alcohólico del colesterol interacciona con el grupo carbonilo de la cabeza del
fosfolípido (Figura 5.9) y la porción hidrofóbica de la bicapa. La forma del
colesterol interrumpe las interacciones entre las cadenas adyacentes de ácidos
132
Ver Lodish, et al., op. cit., p. 164; Stryer, et al., op cit, pp. 337 - 338
86

grasos, de manera que a concentraciones elevadas de colesterol, el sistema rígido


y apolar impide la existencia de uniones compactas entre las cadenas de acilos
saturados de los fosfolípidos, actuando como una impureza que disminuye la
temperatura de fusión de la bicapa haciendo la membrana más fluida. Su efecto
sobre los ácidos grasos insaturados es, sin embargo, paradójica pues el sistema
rígido del colesterol permite a éste encajar en el borde acodado de los ácidos
grasos insaturados, facilitando la formación de uniones van der Waals, con la
consiguiente disminución de la fluidez de la membrana 133. El resultado neto de
estas interacciones del colesterol es la de modular la fluidez de la membrana
frente a fluctuaciones de la temperatura y el grado de instauración 134.

Figura 5.8
Modelo de membrana según Danielli y Davson o del sándwich.

5.4.1- Asimetría de la membrana.

Se refiere a que las dos capas de la membrana celular no son iguales, sino que la
cara externa e interna son funcional y estructuralmente distintas, pues tienen
diferentes componentes y enzimas en cada una de ellas. Podemos anotar que
aunque los lípidos son los mismos en ambas caras sus proporciones relativas son
diferentes; por ejemplo la fosfatidilcolina y la esfingomielina, ambos cargados
positivamente, son más abundantes en la cara externa de la membrana. En
cambio, los fosfolípidos con grupos neutros o cargados negativamente
(fosfatidiletanolamina, fosfatidilserina y fosfatidilinositol) son más abundantes en la
cara interna. Las proteínas funcionales son distintas en la superficie interna y
externa de la membrana y los azúcares de las glucoproteínas plasmáticas se
proyectan desde la superficie externa135.

133
Rawn, op. cit., p. 222.
134
Lodish et al., op. cit., p. 338.
135
Bretscher 1985, p. 88; Lodish et al., op. cit., p. 162.
87

Figura 5.9
Diagrama mostrando como las moléculas de colesterol pueden aumentar la fluidez de la membrana,
interrumpiendo la coherencia en el alineamiento de las cadenas hidrofóbicas de los ácidos grasos
fosfolipídicos.

5.4.2- Pared celular y cubierta de la membrana.

En las plantas y los animales las células no existen como entidades aisladas, sino
que están asociadas formando tejidos, mientras que las membranas de
eubacterias y arqueobacterias están recubiertas por paredes. Estas entidades, en
tanto que externas a la célula son “no-vivas”, aunque realizan una función
importante para la supervivencia de la célula viva.

5.4.2.1- Pared celular.

En bacterias, plantas y algunos protozoarios, la membrana celular está rodeada de


una envoltura protectora externa relativamente gruesa. La función esta estructura
resistente en bacterias es la de proporcionar su forma característica (coco, bacilo,
etc.), protegerles del daño mecánico y osmótico, actuar como intermediario en las
interacciones célula a célula y de servir de barrera primaria a la penetración de
sustancias de alto peso molecular. Adicionalmente para nosotros tiene importancia
pues es el sitio donde se fijan muchos virus y hacia donde van dirigida la acción de
numerosos anticuerpos del sistema defensivo del hospedero.

A continuación describiremos la pared de las bacterias. Las bacterias Gram


positivas (eg. Streptococus) poseen una pared celular gruesa (50 nm) de
sustancias macromoleculares, siendo las más importantes los peptidoglicanos y el
ácido tecoico. Esta cubierta gruesa le permite retener el complejo cristal de violeta
–yodo característico de la tinción. Las bacterias Gram negativas (eg. E. coli) tiene
una pared delgada (2,5 nm) cubriendo la membrana plasmática y una segunda
membrana que recubre a las dos anteriores, resultando que la pared se encuentra
emparedada entre dos membranas. La más interna recibe el nombre de
membrana interna y actúa como barrera de permeabilidad, la externa es bastante
permeable a pequeñas moléculas debido a la presencia de proteínas de poro de
gran tamaño, la porina. La pared contiene fosfolípidos, proteínas y
lipopolisacáridos, estos últimos representan sus componentes más característicos.
El alcohol, no puede atravesar la pared gruesa y compleja de las bacterias Gram
88

positivas, en cambio difunde fácilmente por la pared con mayor contenido lipídico
de las Gram negativa disolviendo la coloración 136. Las arqueobacterias al igual que
las bacterias Gram positivas tienen una pared gruesa 137 (Figura 5.10).

Figura 5.10
Membrana celular de la eubacteria Gram positiva Escherichia coli.

En las plantas, la pared celular también se ubica en el exterior de la membrana


plasmática, aunque a diferencia de la bacteriana esta constituida de los
polisacáridos celulosa, pectina, lignina, proteína y agua, la proporción de estos
componentes, sin embargo varía con el tipo de célula, y el estadio de la pared.

5.4.3- Uniones intercelulares.

Los tejidos de los organismos superiores están constituidos por células


interconectadas, que interactúan entre sí y realizan funciones armónicas, más que
independientes, gracias a las uniones intercelulares y de las paredes
citoplasmáticas, que no son otra cosa que especializaciones de la membrana
plasmática. Dichas uniones pueden ser de tres tipos: uniones de comunicación,
uniones impermeables y uniones adherentes (Figura 5. 11) 138.

5.4.5.1- Uniones de comunicación son las que permiten a las células intercambiar
sustancias o señales y por tanto coordinar actividades e incluyen las uniones en
hendidura o de intersticio (Figuras 5.11). En general, en este tipo de uniones, las
membranas celulares están separadas por un espacio no mayor de 4 nm al
microscopio electrónico de transmisión. En preparados obtenidos por criofractura y
por cortes tangenciales finos, las uniones de comunicación se caracterizan por la

136
Smith y Wood, op. cit, pp.47 – 52.
137
Karp, op. cit, pp. 236 – 241; Lodish et al., op. cit., p. 339.
138
Giese, op. cit., pp. 224-227; Avers, op. cit., pp. 102-105.
89

Figura 5.11
Diagrama mostrando los diversos tipos de uniones célula-célula que encontramos en los tejidos animales.

disposición poligonal de partículas incluidas en la membrana (Figura 5.13). Las


partículas intramembranales son en realidad seis subunidades dispuestas a la
redonda y próximas entre sí. Dichas subunidades están constituidas por una
proteína llamada conexina y la estructura completa se denomina conexón y
(Figura 5.12). Los conexones sirven de canales células – células, conectando
regiones de la membrana celulares adyacentes y permitiendo el libre flujo de
metabolitos de una célula a su vecina. El movimiento de moléculas puede ser
estudiado mediante la localización y medición de moléculas marcadas
radiactivamente o mediante fluorescencia. No obstante, la individualidad de cada
90

célula se mantiene ya que los ácidos nucleicos (ADN y ARN) no se intercambian 139
Este tipo de uniones se encuentran en el hígado de rata, en células embrionarias,
a las sinapsis de los axones gigantes del cangrejo y las células de Mauthner de los
peces.

Figura 5.12
Modelo de unión en hendidura y sus componentes estructurales, en especial los conexones. A la derecha
micrografía electrónica de un corte transversal a través de una unión en hendidura mostrando los conexones.

5.4.5.1- Uniones septadas.

Se encuentran en invertebrados y se caracterizan por la presencia de septos o


escaleras en el espacio intercelulares de las membranas adyacentes. En
preparación por criofractura se observa la existencia de hileras de partículas. Al
igual que la unión anterior permite el paso de sustancias a través del espacio
intercelular.

5.4.5.2- Uniones impermeables.

Están restringidas a los vertebrados, y en particular a los tejidos epiteliales de


estos, a diferencia de las anteriores son regiones de oclusión intercelular. Están
representadas por las uniones estrechas o herméticas (Martinet y Houdebine,
1982), las cuales no presentarán espacio alguno entre las regiones adyacentes,
de manera que las dos membranas están totalmente fusionadas (tigh junction)
(Figuras 5.11 y 5.14).

Las uniones estrechas son regiones de oclusión entre células adyacentes, de


manera que el paso de moléculas es bloqueado. Al estudiar la barrera de
impermeabilidad de la unión oclusiva al microscopio electrónico se observa la
existencia de partículas, llamadas bandas de cierre, las que se interconectan
formando una red. Las partículas son proteínas intrínsecas embebidas en la matriz
fosfolipídica de cada membrana adyacente que se funcionan (Figura 5.14).
139
De Robertis y De Robertis, op. cit., p. 117.; ver también http://faculty.uca.edu/~johnc/matrix.htm
91

Figura 5.13
Unión en hendidura. (MET) Micrografía electrónica de transmisión de un corte a través de una unión de
comunicación, perpendicular al plano de la membrana. (MEB) Replica por criofractura de una unión en
hendidura, mostrando la presencia de partículas membranales. (Purificado) Micrografía ET de conexones
purificados.

Figura 5.14
Modelo de una unión estrecha mostrando dos membranas adyacentes unidas por una banda de cierre.
92

La función principal de las uniones estrechas es la de permitir que los fluidos


internos mantengan su constancia química con respecto al medio que los rodea; lo
que explica que este tipo de unión sea típico de las células epiteliales externas,
tanto como de las paredes que dan al lumen del sistema digestivo.

Figura 5.15
Micrografía electrónica de barrido de criofractura de una unión oclusiva. El plano de fractura pasa a través de
la membrana plasmática de una de las dos células adyacentes.

5.4.5.2- Unión adherente.

Se denominan también desmosomas y son aquellas que permiten a las células


adhesividad y al mismo tiempo actuar mecánicamente en conjunto (Figura 5.11).
En el desmosoma existe un espacio intercelular de 30,0 nm lleno de un material
filamentoso. Se reconocen dos tipos de desmosomas, en cinturón, asociadas a
filamentos de 7,0 nm de ancho que contiene actina, y desmosomas en punto
asociadas a tonofilamentos de 10,0 nm de espesor que pueden estar más
relacionados a propiedad de tensión que a actividades contráctiles (Figura 5.16).
Si se intenta separar dos células epiteliales, jalándolas con dos agujas por
ejemplo, se notará que estas son resistentes a separación mecánica. Sin
embargo, un tratamiento previo con tripsina facilita la separación 140. La fuerte
adhesión se las confieren los desmosomas.

5.4.5.3- Cubierta celular.

Se denomina así a la capa más externa de la célula animal, que se renueva


constantemente y que se haya en contacto directo con la membrana plasmática,
también se le denomina glucocálix141. Este último término se refiere al hecho de
que la cubierta se caracteriza por poseer unidades de azúcar en forma de
glucopolisacáridos y glucolípidos, expuestos en la superficie de la célula (Figura
5.4). Las funciones de la cubierta son muy variadas entre ellas:

140
Karp, op. cit., p. 255.
141
Ver De Robertis y De Robertis op. cit., pp. 122 – 131 y p. 611.
93

Figura 5.16
Izquierda, micrografía electrónica de un desmosoma. Derecha representación diagramática del desmosoma.

5.4.5.5.1- Protección, actuando mecánicamente como barrera protectora.

5.4.5.5.2- Microambiental, la cubierta está cargada negativamente razón por la


cual fija activamente Ca++ y Na+, lo que explica que la superficie celular externa
esté cargada positivamente (Ver sección 5.5.1).

5.4.5.5.3- Enzimática, se ha demostrado la presencia en la cubierta de fosfatasa


alcalina, tanto como el complejo enzimático participante en la digestión terminal de
carbohidratos y proteínas.

5.4.5.5.4- Grupos sanguíneos, la clasificación de los eritrocitos humanos en ABO,


se basa en la presencia en su cubierta celular de glucolípidos y glucoproteínas,
cuyos azúcares le dan especificidad antigénica. En realidad muchos otros grupos
antigénicos están presentes en la membrana del eritrocito, tanto como en otros
tipos celulares, el aspecto a resaltar es, sin embargo, que el componente de
carbohidratado es el esencial142.

5.4.5.5.5- Adhesión celular, las células de los tejidos animales se encuentran


unidos gracias a las propiedades de agregación que le confieren glucoproteínas
integrales de la membrana llamadas moléculas de adhesión celular ó CAM. Las
proteínas CAM de la superficie celular median entre la adhesión homófila (entre
células iguales) y heterófila (entre células de diverso tipo). Estas proteínas
presentan distribución uniforme a lo largo del cuerpo del animal; los dominios
citosólicos de estas proteínas se encuentran conectados al citoesqueleto.

Se reconoce la existencia de cinco clases principales de proteínas CAM: las


cadherinas, las inmunoglobulinas (Ig), las selectinas, las mucinas y las integrinas.
142
Giblett, 1983, pp. 1909 – 1913 y Stryer, et al., op cit, p. 304 – 304.
94

Las adhesiones mediadas por las cadherinas y selectinas requieren Ca ++, a


diferencia de las CAM-Ig y las integrinas que no le requieren.

A continuación se describen esquemáticamente el papel que desempeñan estas


proteínas de la cubierta en algunos procesos de adhesión 143.

5.4.5.5.4.1- Cadherinas, estas CAM Ca ++ dependiente, son las principales


moléculas de adhesión intercelular homófila durante el proceso de diferenciación
celular. Se reconoce la existencia de más de 40 cadherinas diferentes que
participan en diversos procesos de diferenciación celular. Cada cadherina es una
glucoproteína integral de la membrana de 720 – 750 restos de aminoácidos.
Durante la diferenciación y en algunas patologías se modifican el número y las
características de la cadherinas, lo que afecta la adhesión y la migración celular.
El ejemplo más típico de esta propiedad la evidencia el caso de las metástasis144

En el vertebrado adulto la Cadherina E, mantiene unido la mayoría de las láminas


epiteliales.

Figura 5.17
Tipos principales de moléculas de adhesión molecular o CAM. (Redibujado de Lodish et al., op. cit., p.970)

5.4.5.5.4.2- CAM-Ig, también conocidas como N-CAM o como moléculas de


adhesión de células nerviosas. Las N-CAM son proteínas de adhesión homófila
independientes de Ca++. Al igual que las cadherinas aparecen durante el proceso
de diferenciación y morfogénesis de las células gliales, musculares y nerviosas.

5.4.5.5.4.3- Selectinas y otras CAM, estas CAM participan, entre otros casos, en
los procesos de extravasación de cuatro tipos de leucocitos, monolitos, neutrófilos
y linfocitos T y B. Se llama extravasación al proceso mediante el cual los linfocitos
143
Para una discusión detallada ver Lodish et al., op. cit., pp. 968 – 975.
144
Se define metástasis al proceso mediante el cual células aisladas, o grupo ellas, pertenecientes a un tumor
maligno son arrastradas por el torrente sanguíneo y trasladadas a lugares más o menos remotos, donde se
fijan, multiplican y crecen, formando nuevas colonias tumorales, ver Marinello, 1985.
95

se salen de los vasos sanguíneos, evento que ocurre cuando ocurre inflamación e
infección de un tejido desencadenados por la presencia de virus o bacterias. La
extravasación requiere la formación y ruptura sucesiva de contactos intercelulares
entre los leucocitos y las células endoteliales que revisten los vasos sanguíneos.
Estos contactos son mediados por moléculas específicas de la mediación entre
estos dos tipos celulares, las selectinas. En la extravasación también participan las
integrinas y mucopolisacáridos de los glucolípidos y glucoproteínas de la cubierta
celular, las CAM-mucinas y Ca++ (Figura 5.17)
96
97

5.5. - Transporte de sustancias a través de la membrana celular.

Las sustancias atraviesan la membrana celular impulsadas por alguna fuerza, esto
es que requiere energía. En virtud del tipo de energía utilizada para atravesar la
membrana podemos distinguir dos tipos de transporte, pasivo y activo. El
transporte pasivo se hace a expensas de la energía de las mismas moléculas
(energía cinética) y a la energía potencial química representada por la
concentración relativa de las sustancias. El transporte activo, en cambio, se hace
a expensas de la energía metabólica de la célula (consume ATP).

Para entender correctamente los fenómenos de transporte debemos


familiarizarnos con los conceptos de difusión y ósmosis. Difusión es el movimiento
de partículas de un punto a otro por acción de una fuerza química como el
gradiente de concentración. La difusión está regida por la Ley de Fick145 que se
expresa matemáticamente como la cantidad de moléculas de una sustancia que
se mueve en la unidad de tiempo es igual a:

(6)
En donde:

dS = la cantidad de sustancia que se difunde en mol.

dt = un lapso infinitamente breve.

D = coeficiente de difusión, el cual varia con la sustancia y el medio a través del


cual difunde.

A = área sección transversal por lo cual ocurre la difusión.

dC/dx = el gradiente de concentración referida a la distancia (dx) que los separa

 dC = Cext - Cin

La Ley de Fick afirma entonces que la velocidad de difusión de una mol de una
sustancia (S) que se difunde a través de un área (A) a un ritmo dS/dt, depende de
la diferencia de concentración de la sustancia separada una cierta distancia.

dx = para el caso de las células es igual al grosor de la membrana (M) (Figura


5.18).

La ley de Fick fue descrita en 1855, por el físico alemán Adolf Fick (1829 – 1901) a la edad de veinticinco
145

años (Hamilton y Richards, 1982)


98

(7)
Para una misma sustancia D/M = k ó constante de de permeabilidad.

Figura 5.18
Diagrama representativo de la difusión de cualquier partícula, de acuerdo con la Ley de Fick.

La solución de la ecuación (7) permite comparar la permeabilidad de diferentes


células para una sustancia dada. Aunque ello es aproximado, pues solo toma en
cuenta la difusión de solutos cuando en realidad tanto solutos como solventes
atraviesan la membrana celular. Se ha propuesto otro modelo que toman en
cuenta estas objeciones y que no se describe aquí 146.

Otra manera de expresar la difusión es en término de flujo (J) de agua o solutos


que es el número de moles de soluto que difunden por unidad de área.

(8)

Cuando el flujo (J) es hacia el interior de la célula, se le llama influjo (influx) Jin y
cuanto se dirige hacia fuera se denomina eflujo (outflux) Jout.

Como se indicó arriba, la función más importante de la membrana es la de regular


la entrada y salida de sustancia desde y hacia la célula. Los mecanismos
encargados de tal control pueden ser de dos tipos: aquellos en que la membrana
actúa como una barrera que impide el flujo de sustancias y aquellos en los cuales
la membrana actúa directamente a través de algunos de sus componentes en el
proceso de transporte. A lo largo del presente capítulo estudiaremos ambos
procesos el primero con el nombre genérico de transporte pasivo y el segundo
como transporte especializado147:

146
ver Apéndices 17.1. y 17.2 de Giese.
147
Armstrong, 1975.
99

5.5.1- Transporte o flujo de agua:

La membrana celular es permeable tanto a solventes como a solutos; en el caso


particular del agua, ésta se mueve a través de la membrana más rápido que a
cualquier soluto, de allí que la mayoría de las células se comportan como
osmómetros perfectos, esto es que parecen ser solo permeables al agua. Al
proceso mediante el cual el agua o cualquier solvente se mueve espontáneamente
de una región con una disolución donde su actividad es alta a otra donde su
actividad es baja se llama ósmosis148.

Figura 5.19
Diagrama de un osmómetro sencillo. Los poros del recipiente se han sellado con un precipitado de
ferrocianuro cúprico permeable al agua pero no al soluto.

5.5.1.1- Sistema osmótico concepto tradicional y moderno.

En la práctica de laboratorio, el estudio de las leyes que rigen los fenómenos de


difusión de agua a través de la membrana, se realizan mediante el uso de
osmómetros perfectos. Estos dispositivos, se caracterizan por el hecho de utilizar
membranas puras o perfectas (ver sección 5.1).

El osmómetro fue desarrollado por el fisiólogo alemán W.F.P. Pfeffer; gracias al


cual se establecieron empíricamente algunos de los principios esenciales que
rigen la ósmosis. El osmómetro de Pfeffer constaba de un crisol poroso de
porcelana en cuyos poros se depositaba ferrocianuro cúprico. El crisol era
humedecido primero en una solución de ferrocianuro de potasio y luego en una de
148
Morris, 1987, p. 70; Salisbury y Ross, 1969, p. 55.
100

sulfato cúprico, lo que permite la formación, en el poro, del ferrocianuro cúprico. El


osmómetro se esquematiza en la Figura 5.19. En el vaso de precipitación A, se
coloca agua pura o una solución acuosa muy diluida de un soluto no-electrolito y
en B una solución más concentrada del mismo soluto que alcanza una altura h 0 en
el tubo capilar A’. Luego de un período de tiempo t 1, el menisco del capilar
asciende una altura h1, de manera que el fluido ha recorrido una altura h 2 = h1 – h0,
donde permanece estacionario. En este punto de equilibrio la disolución en B,
ejerce una presión en la membrana permeable pura que es mayor que la ejercida
en sentido contrario por la dilución menos concentrada de A. La magnitud de esta
diferencia de presión se mide por la altura de la columna del líquido en B (h 1).

La presión osmótica a una temperatura definida es igual la “presión” que se debe


ejercer sobre la disolución para contrarrestar cualquier movimiento neto de
disolvente entre la disolución y el disolvente puro cuando estos están separados
por una “membrana permeable pura”.

Los principios del sistema osmótico fueron desarrollados por los fisiólogos de
finales del siglo XIX e introduce conceptos manifiestamente irracionales. Por
ejemplo sugieren que una solución posee una presión osmótica, ya que el
fenómeno se manifiesta en un sistema en el cual el disolvente puro y la solución
se encuentran separados por una membrana pura. En segundo, lugar porque
sugiere que la presión osmótica es aquella que debe ejercerse sobre la disolución
pura para mantener su disolvente puro a la misma temperatura. En fin se refiere a
la presión como si fuera exhibida por la disolución en el mismo sentido de que un
gas ejerce una presión. De allí que se haya introducido el concepto coherente de
potencial osmótico, que se define como el componente del potencial de agua
resultante de la presencia de partículas de soluto o como el componente del
potencial de agua que se hace marcadamente negativo con la adición de solutos
(Salisbury, y Ross, 1969; Morris 1983). Potencial osmótico es conceptualmente
equivalente a presión osmótica pero de signo opuesto, como veremos más
adelante.

5.5.1.2- El proceso de ósmosis

Los estudios de Pfeffer fueron publicados en 1877 y aplicados subsecuentemente


al desarrollo de la termodinámica. De acuerdo en él, la presión osmótica (PO) está
directamente relacionada a la altura alcanzada por disolución en el compartimiento
B al equilibrio y estará relacionado por la ecuación.

(9)

Pfeffer estudiando la PO ejercida por varias disoluciones observó que al dividir la


misma entre la concentración se obtiene una constante (Cuadro 5.2). De acuerdo
con el físico-químico holandés Jacobus Henrich Van’t Hoff (1852-1911) si
imaginamos que una solución muy diluida de un soluto puede comportarse como
101

Cuadro 5.2
Presión osmótica ejercida por diversas concentraciones de sacarosa
[Sacarosa %] π(atm) π/c
1 0,70 0,70
2 1,34 0,67
4 2,74 0,68
6 4,10 0,68

un gas perfecto149, entonces, sus moléculas estarían dispersas en un gran


volumen de solvente. A esta formulación del problema se le conoce como teoría
de las disoluciones de Van’t Hoff, que dice que la PO de una solución diluida es
idéntica a la que ejercería el soluto si fueran un gas perfecto que ocupase el
mismo
volumen que el de la solución a la misma temperatura. De acuerdo con esta
generalización si una mol de un gas perfecto o ideal contenido en un volumen de
22,4 L ejerce una presión de 1 atmósfera, si se comprime la misma mol del gas en
un volumen de un litro ejercerá una presión de 22,4 atmósfera; por consiguiente
una solución diluida de un soluto no - electrolito ejercerá una presión regida por la
ecuación:

(10)
 Si:
PV = nRT Donde R es la constante de los
gases150.

De (10) π = V/n RT Donde V/c = concentración (c).

π = cRT (11)

Así tenemos que para una solución 1 mol de sacarosa la PO será, a 0 °C:

= 22,386 atmósferas,

que era lo que se quería probar.

En la práctica, sin embargo, se ha demostrado la ecuación de Van’t Hoff


representa en realidad el comportamiento de una solución diluida ideal. Si como
vimos en el aparte 5.5.1, en un osmómetro el agua se mueve del compartimiento
de solución inicial menos diluida (A) al compartimiento de solución más
concentrada (B), de manera que podemos concluir que el agua se mueve del sitio
de menor presión osmótica al de mayor presión osmótica, lo que hace manifiesta

Se define como gas perfecto o ideal el que cumple con la Ley de Boyle y Joule.
149

R tiene un valor igual a 0,082 Latm/moleK-1 ó 0,008314 L MPa/mol K; donde 1 atm = 0,1013 MPa. Ver
150

Taiz y Zeiger, op. cit., p. 68.


102

la irracionalidad mencionada arriba (ver sección 5.5.1.1). Para interpretar el


fenómeno de ósmosis debemos recordar los siguientes aspectos:

5.5.1.2.1- No es importante tomar en consideración como la membrana discrimina


entre solvente y soluto, solo basta recordar que la membrana celular es
selectivamente permeable.

5.5.1.2.2- La presencia del solvente disminuye la energía libre de las moléculas


del solvente o lo que es lo mismo su potencial químico 151.

5.5.1.2.3- Si la solución es diluida o no hay interacción entre solvente y soluto, el


efecto arriba mencionado (sección 5.5.1.2.2) es independiente del tipo de solutos.

5.5.1.2.4- Sólo el número de partículas de solventes y de soluto son importantes.

5.5.1.2.5- De todas formas la presencia del soluto decrece el número de partículas


agua libre comparadas con el de agua pura (Andrew, 1976).

5.5.1.2.6- Por definición el potencial de agua pura es 0 (cero) de manera que el de


una solución tendrá un potencial de agua de valor de negativo (menor que cero).

5.5.1.2.7- En una situación como la descrita anteriormente, el agua fluye del lugar
de mayor a menor potencial de agua. El resultado será el aumento de la presión
en el osmómetro o sobre la membrana celular, hasta que los potenciales de agua
sean iguales a ambos lados de la membrana.

5.5.1.2.8- Resumiendo, la PO de una solución es aquella que debe ejercerse


sobre ella para elevar el potencial químico del solvente hasta que iguales la del
solvente puro152 (Figura 5.20).

5.5.1.3- El potencial de agua tiene dos componentes el potencial de presión (ψp)


que es debido a la adición de presión y al potencial osmótico (ψπ) que es debido a
la presencia de solutos. Así tenemos que

ΨH2O = Ψp + Ψπ (12)

Si Ψp = 0 entonces ΨH2O = Ψπ
El potencial osmótico es numéricamente igual pero de signo contrario a la PO. Así
pues, el Ψπ de 1M de soluto a 0,0 °C es igual a 0,987 atm = -1 bar. Por
consiguiente el agua se difunde del lugar donde su concentración efectiva es
mayor, esto es donde su Ψπ es mayor (mayor actividad de las moléculas de agua)
al sitio de menor Ψπ (solución más concentrada, Figura 5.20). Se nota allí que el
H2O se mueve “ahora” del sitio mayor Ψπ al de menor Ψπ (solución más
concentrada).

151
potencial de agua, según Salisbury y Ross op. cit., p. 35.
152
Morris, op. cit., p. 74.
103

Figura 5.20

5.5.1.3- Presión osmática de los electrolitos.

La fórmula de Van’t Hoff nos permite comparar PO de diferentes solutos. Por


ejemplo, una sol 1M de glucosa ejercerá la misma PO que una solución 0,5M de
NaCl y que de 0,25M de H3PO5.

● ¿Por qué? Explique y fundamente.

El NaCl al disolverse en H2O aumenta en 2 el número de partículas y el H 3PO4 en


4 por ello una sol 1 M de NaCl ejerce una PO de 44,8 atm ó de un potencial
osmótico de -44,8 bar aproximadamente. Cuando se comparan soluciones se
prefiere utilizar el término osmolaridad. La unidad de osmolaridad es el Osmol, que
es la presión ejercida por una mol de un soluto no ionizado y un mOsmol
(miliosmol) es la milésima parte de un Osmol. Cuando dos soluciones ejercen la
misma PO se dice que son isosmolares. Si ejerce diferentes PO, la de mayor PO
es hiperosmolar la de menor PO es hiposmolar153.

Cuando los solutos iónicos están en solución concentrada, y para efectos


prácticos todos los solutos; la solución deja de comportarse idealmente es decir en
forma proporcional a su concentración (ver ecuación 11). Y en realidad, la presión
ejercida por ellos es mucho menor que la esperada. Es como si el soluto poseyera
153
Nótese que no debe confundirse isosmolar con isotónico, pues dos soluciones isotónicas, una de un
electrolito y otra de un no-electrolito ejercerán presiones osmóticas distintas y por consiguiente serán
entonces heterosmolares.
104

una concentración efectiva (actividad) manifiestamente diferente a su


concentración en la solución. En el caso de los iones de casi todos los solutos
existe una alta interacción solvente soluto que tiende a disminuir el número de
partículas en solución. Este efecto se corrige introduciendo el concepto de
coeficiente de actividad. La magnitud a la cual una especie química se aparta de la
solución ideal se llama coeficiente de actividad154. El coeficiente de actividad varía
con la sustancia en cuestión y con la concentración, y se expresa con la letra ƒ.
Esta magnitud corrige el efecto de concentración así:

A = concentración efectiva = ƒc (13)

Introduciendo este factor en (11) tenemos:

π = ƒcRT (14)

π = ART (15)

Por ejemplo la glucosa tiene un ƒ = 0,8 a 30 °C por consiguiente una solución 1M


ejercerá una π de:

π = ƒcRT

= (0,8 mol/L) (0,082 L atm/mol °K) (303 °K)


= 19,8 atm
= 20,06 MPa155

5.5.1.4- La célula como osmómetro.

La célula viviente puede ser sometida a cambios en la presión osmótica del medio,
para tal propósito, en la caso de las bacterias y de las plantas se hace necesario la
remoción previa de la pared usando disolventes o enzimas apropiadas. Una vez
terminada esta acción, la célula así obtenida puede ser sometida a las tres
situaciones que describimos a continuación (Figura 5.21):

5.5.1.5.1- Célula sometida a un medio de agua destilada y desionizada, se turge


pues la presión osmótica dentro de la célula es mayor que en el exterior; como
quiera que afuera no hay partículas el agua sigue entrando hasta un punto que la
membrana es incapaz de soportar la presión rompiéndose. Si la célula
experimental es el eritrocito humano hay hemólisis.

5.5.1.5.2- Si la célula es colocada en un medio hiperosmótico entonces la célula


pierde agua y se plasmolisa. No obstante, pasado un tiempo la célula vuelve a
ganar su turgor mediante un proceso conocido como desplasmólisis.

Morris, op. cit., p. 82.


154

Comparación entre varias unidades de presión 1 atm = 760 mm Hg al nivel del mar = 0,1013 megapascales
155

(MPa) = - 1,013 bar = 1,0113 x 105 pascales (Pa.)


105

Figura 5.21
Diagrama mostrando las diversas situaciones osmóticas a las cuales puede ser sometido un eritrocito humano
y sus respuestas.

● Explique el proceso de desplasmólisis.

5.5.1.5.3- Por último la célula puede ser colocada en un medio isosmolar, en cuyo
caso, el turgor de la célula se mantiene igual.

La desplasmólisis es el ejemplo típico de que la célula no es un osmómetro


perfecto, lo cual es debido a que la membrana celular es más permeable al agua
que a la mayoría de los solutos; sin embargo, eventualmente estos entrarán
afectando el turgor de la célula.

5.5.1.5- Canales para el agua156.

Aunque la membrana de fosfolípidos puros es permeable al agua y la urea, la


membrana celular acelera el transporte de agua hasta 100 veces gracias a una
proteína transportadora (ver más adelante). Se ha reportado, la existencia de una
proteína de canal que transportan agua a favor de un gradiente de concentración
(difusión facilitada). Existen pocas dudas de la presencia en membrana de muchas
células, y en especial la del eritrocito, de una proteína intrínseca especializada en
el transporte masivo de agua, la acuaporina. Esta proteína es un tetrámero de
subunidades idénticas de 28 kDa157; cada una de las cuales, posee seis hélices 

Agre, 2003; Agre, et al., 2002; Berne y Levy, 2001; p. 10; Lodish et al., op. cit., p. 610; y Coro, 1995.
156

El kilo Dalton (kDa) = 1000 Dalton en donde 1 Dalton es la doceava parte del nucleido del carbono 12 es
157

decir 1, Berlow, et al., op. cit., p. 40.


106

transmembranales que forman tres pares de homólogos arreglados en forma de u.


Se ha sugerido que el poro se forma cuando ocho hélices  transmembranales se
arreglan circularmente dejando un espacio central que corresponde al canal de
agua propiamente dicho, con un diámetro de 2 nm aproximadamente (Figura
5.22). El descubrimiento y estudio de las características de la acuaporina le
valieron el Premio Nobel de Fisiología o Medicina, 2003, al investigador
norteamericano Peter Agre. En la actualidad se conocen 9 acuaporinas en
animales y se han reportado cuando menos dos en la membrana plasmática de
plantas superiores158.

Figura 5.22
Diagrama mostrando el arreglo de la proteína intrínseca transportadora de agua o acuaporina. (a) Arreglo
esquemático de los seis dominios transmembranales  de la acuaporina. (b) Vista del arreglo superior del
tetrámero de acuaporina según se deduce de determinaciones de cristalografía de rayos X, dejando libre el
canal para transporte masivo de agua (Redibujado de Lodish et al., op. cit., p. 611).

5.7- Flujo de solutos.

5.7.1- Métodos de estudio de la permeabilidad 159.

Se han desarrollado diversos métodos para estudiar los fenómenos de


permeabilidad que en general pueden categorizarse en dos cualitativos y
cuantitativos. Los primeros, comprenden aquellos procedimientos que permiten
determinar si una sustancia sale o entra de la célula; en cambio, los segundos
precisan la magnitud de entrada o salida de los solutos. Los métodos cuantitativos
son los mejores, pues no solo permiten demostrar que una sustancia sale o entra,
sino en que cantidad lo hace.

158
Siefritz, et a., 2001.
159
Giese, op. cit., pp. 209 – 301; Gimeno y Gimeno, 1965, pp. 83 – 88.
107

Figura 5.23
Diagrama de un Paramecio mostrando la permeabilidad de la membrana del protozoario a el soluto NH3
5.7.1.1- Métodos cualitativos.

El método más usado consiste en el empleo de colorantes. En un caso se usa una


sustancia coloreada y se observa si penetra o no a la célula; en otro, se usa un
indicador como el rojo neutro que cambia de color (rojo a amarillo) en medios
básicos (Figura 5.23).

5.7.1.2- Métodos cuantitativos, aquí se incluyen la determinación de los cambios


en volumen celular, como es el estudio del tiempo de desplasmólisis. En cuyo
caso, se sumerge la muestra celular en una solución de una concentración diluida
de un soluto, lo cual produce su plasmólisis (Figura 5.21) y se determina la
velocidad de desplasmólisis. La velocidad de desplasmólisis es una función de la
velocidad de entrada del soluto (Figura 5.24).

Otro método cuantitativo volumétrico consiste en medir el volumen de una masa


de células antes y después de ser sumergirlas en una solución hipertónica. En el
caso del eritrocito se usan tubos de hematocrito de 1 a 2 mm de diámetro, la masa
de células se miden antes y después de sumergidas en soluciones hipertónicas.

En algunos casos se puede determinar el tiempo de hemólisis pero como este


método es realizado en el laboratorio del curso, aquí solo se menciona de paso. El
estudiante deberá repasar lo referente a él en sus guías de laboratorio y en el
informe respectivo.

Análisis químico cuantitativo, consiste en determinar la entrada o salida de solutos


por procedimientos propios de la química analítica, estableciendo el contenido
interior y exterior del soluto presente en las células, luego de ser sometidas al
efecto de una solución hipertónica, en especial en células vegetales grandes como
Valonia, Chara y Helicytis que poseen vacuolas grandes, en el caso de la célula
animal este método es de difícil aplicación.
108

Figura 5.24
Recuperación de volumen por los huevos de erizo de mar, luego de ser sometidos a soluciones de etilenglicol
y glucosa. Nótese que la velocidad de desplasmólisis es menor para el etilenglicol, por tanto es más
permeable a éste soluto que a la glucosa.

Una variante muy eficiente y precisa que puede ser aplicada a todo tipo de células,
independiente de su tamaño es el método isotópico. El mismo se basa en el uso
de isótopos radioactivos de un soluto o de solutos marcados isotópicamente. Para
tal propósito se coloca la muestra de tejido a estudiar en una solución caliente160
del isótopo a estudiar, glucosa marcada con 36C por ejemplo, y se va tomando
muestra de células a cada intervalo de tiempo. La muestra, una vez lavada del
isótopo con una solución fría, es expuesta a un contador Geiger que cuantifica la
cantidad de material radiactivo absorbido expresado en cuentas por minuto (CPM).
También se puede determinar la tasa de salida del soluto si la muestra cargada
radiactivamente mediante el procedimiento anterior, es colocada en una solución
fría y se detecta la radiactividad presente en la solución fría, tomando muestras a
intervalos sucesivos y determinado su contenido radiactivo con el contados Geiger
(Figura 5.25).

5.7.2- Tipos de soluto.

Los solutos suelen catalogarse en las siguientes categorías:

5.7.2.1- Solutos no polares. En donde los electrones (ē) son compartidos por igual
entre los átomos que forman enlace, como son el caso de los solutos grasos, las
parafinas, y compuestos parafínicos cíclicos, cosa que no ocurre en el agua, por
ejemplo.

5.7.2.2- Solutos polares no iónicos, donde el par de ē son atraídos a uno de los
dos átomos que le comparten y menor magnitud hacia el otro, de manera que se
160
Se denomina solución caliente a la que posee un material radioactivo, para diferenciarla de aquella que
tiene el isótopo no radioactivo.
109

forma un dipolo, tal es el caso de los alcoholes, ácidos orgánicos de cadena corta,
etc. (ver .sección 1.3).

5.7.2.2- Solutos iónicos. Donde se ceden o ganan ē de manera que sus átomos
son iones, aún en estado cristalino. Éstos pueden ser electrolitos fuertes o débiles
los primeros son muy solubles en agua y en menor cuantía en grasas.

Figura 5.25
Grafica de la cuenta por minutos (CPM) de material radioactivo en una muestra celular la cual ha sido
previamente colocada en una solución caliente de glucosa marcada radiactivamente.

5.7.3- Factores que afectan la permeabilidad de los solutos.

5.7.5.1- Coeficientes de Reparto161.

Se define coeficiente de reparto (CR) como la relación de solubilidad de un


compuesto en aceite y en agua.

(16)

De (16) es evidente que a medida que aumenta el CR, mayor es la solubilidad de


los solutos en cuestión en aceite, de allí que se afirme que:

Si el CR = 1, entonces la solubilidad de ese soluto es igual en ambos disolventes.


En cambio, si CR < 1, entonces el soluto es más soluble en agua que en aceite. Y
por último, si CR > 1, ergo el soluto es más soluble en aceite. Empíricamente lo
que se ha observado es que la permeabilidad, para solutos de peso molecular
similar, el CR esta relacionado directamente con ella (Figura 5.26) 162. La
161
Para una descripción detallada de la derivación de la ecuación de reparto ver Höber, et al, op. cit., pp. 88 -
91.
162
Höber, et al., op. cit. 1945, pp. 231 – 235.
110

explicación que se da a este comportamiento es que como la membrana está


constituida por lípidos, es lógico pensar que los solutos se disuelven más
fácilmente en la matriz fosfolipídica y por ende entran más rápidamente.

Figura 5.26
Relación entre el coeficiente de reparto y la permeabilidad, el gráfico indica que mientras más soluble es el
soluto en aceite, más fácilmente penetra.

5.7.5.1- Tamaño molecular.

Cuadro 5.3
Entrada de una serie aldehídica a una bacteria luminosa *
N° de carbonos Nombre Penetración (cm/segx10-4)
7 Heptanal 10,60
8 Octanal 6,40
9 Nonanal 1,68
10 Decanal 0,95
11 Undecanal 0,85
12 Dodecanal 0,70
14 Tetradecanal 0,31
Ver Giese op cit., p 305.
En general, para solutos de CR similar, a mayor tamaño menor es la
permeabilidad de la membrana dichos solutos (Figura 5.21). En el Cuadro 5.3 se
puede observar el mismo comportamiento para una serie aldehídica. A diferencia
del caso anterior la entrada del soluto esta limitada no tanto por su solubilidad en
lípidos sino por su tamaño, en parte por que no caben en los poros de la
membrana o porque por su diámetro no se pueden disolver en el continuo de la
matriz fosfolipídica (Figura 5.22).
111

Figura 5.21
Comportamiento de los solutos de CR similar pero tamaño diverso, al atravesar la membrana de la bacteria
sulfurosa Beggiota.

El hecho de que a mayor peso molecular menor permeabilidad, explica el por qué
la célula es impermeable a prácticamente todas las macromoléculas (polipéptidos,
proteínas, polisacáridos y ácidos nucleicos). Las macromoléculas entran por
mecanismos distintos a los aquí expuestos y serán estudiados más adelante.

Figura 5.22
Diagrama mostrando la dificultad relativa que tiene las partículas de soluto para atravesar la membrana a
medida que aumenta su diámetro o peso molecular.

5.7.5.2-Presencia de cargas eléctricas.

La presencia de cargas también afecta la permeabilidad pasiva de la membrana a


diversos solutos, pues ésta es más permeable a los iones monovalente que a los
divalentes y a estos que los trivalentes. Por ejemplo en la siguiente serie de
permeabilidad163:
163
Höber, et al, op. cit., p. 244.
112

Na+; Cl-; K+ > Ca++; Mg++ > Fe++; SO4=

Dado el carácter polar de los iones su difusión se hace seguramente a lo largo de


poros. Los poros estarían cargados positiva o negativamente, de manera que los
primeros permitirían el paso de aniones, mientras que los últimos facilitarían el
paso de los cationes, a estos poros se les conoce con el nombre técnico de
canales iónicos y serán discutidos en el capítulo 7.

Figura 5.23
Diagrama mostrando la relación entre el radio cristalino, el radio de hidratación y la permeabilidad de los
iones.
Cuadro 5.4
Radio de hidratación de varios cationes en relación con su tamaño (PA y radio cristalino)
Catión Peso atómico Radio cristalino(Å) Rad. de hidratación(Å)
Li+ 6,9 0,70 2,85
Na+ 22,9 0,98 2,39
K+ 39,09 1,33 1,95

El hecho es que las sustancias cargadas pasan con mayor dificultad sugiere que
la membrana es un mosaico de cargas positivas y negativas sin embargo la carga
global es positiva lo que facilita la entrada de aniones y dificulta para los Cationes.
No obstante dentro de un mismo la membrana también presenta diferencias n
permeabilidad en permeabilidad. Por ejemplo en esta segunda serie de
permeabilidad164:

NH4+ > K+ > Na+ > Li+

Nótese que en esta secuencia las partículas involucradas todas son cationes
monovalentes pero la permeabilidad disminuye del amonio hacia el litio. La causa
no puede deberse solo a carga algún otro factor debe ser la causa de esta
conducta y la misma a sido adscrita al radio de hidratación. El radio de hidratación
se refiere al número de moléculas de agua que rodean a un ión o a un grupo polar
164
Ibid, p. 245.
113

cargado. La molécula en solución debe ser considerada como una partícula


constituida por ella y la capa hidratada que la rodea (Figura 5. 23 y Cuadro 5.4).
Por consiguiente, a menor radio cristalino mayor serán las capas sucesivas de
moléculas que de rodean el catión aumentando significativamente su volumen y
por ende el diámetro de la partícula al atravesar el canal iónico.

Figura 5.25
Efecto del pH en la penetración de ácido carbónico a la célula.

5.7.5.3- Efecto del pH

El pH también afecta la permeabilidad de la membrana a un soluto pues aumenta


o disminuye el grado de disociación de los ácidos y bases débiles. Así tenemos,
que para los ácidos débiles a mayor pH mayor es la disociación, por consiguiente,
menor será la permeabilidad al ácido correspondiente (Figura 5.25). Ésta regla es
válida para a para ácidos débiles como el ácido sulfhídrico (H 2S), el ácido
cianhídrico (HCN), las auxinas, y estos ácidos débiles.

Para las bases débiles como son los casos de los aminas y alcaloides, la regla se
invierte, es decir a menor pH mayor disociación y por consiguiente menor será la
permeabilidad.

5.7.5.4- Presencia de proteínas y otros aniones no difusibles.

Las proteínas forman iones o partículas que no pueden atravesar la membrana


pero su gran tamaño (ver sección 5.7.5.1), igualmente se encuentran otros iones
que por su elevada carga no difunden o difunden poco (ver sección 5.7.5.2) como
el anión fosfato (PO4=); de tal manera que se establece un equilibrio debido a que
la membrana permite la difusión de todos los iones, menos de uno o unos pocos,
llamado Equilibrio de Donnan (Figura 5.26).
114

Figura 5.26
Equilibrio de Donnan, se establece cuando una membrana es permeable a todos los iones, más no a uno
llamado ión no difusible (A-).

Donnan demostró que al equilibrio la concentración de iones difusibles es igual


dentro y fuera del compartimiento entonces:

[K+]i [Cl-]i = [K+]e [Cl-]e (17)

(18)

En una situación como la descrita por el equilibrio de Donnan a la concentración


inicial interna del ión no difusible A - se le llama Ci, mientras que a la concentración
inicial interna del ión Cl, también se le llama C i. Como el ión cloro entra a favor de
un gradiente de concentración en una magnitud igual a x, la misma cantidad (x) de
ión potasio entrará para mantener el equilibrio eléctrico. Estableciéndose el
equilibrio cuando hayan penetrado las cantidades x de iones difusibles al
compartimiento interno cuando se cumple la situación descrita por (17).
Sustituyendo en (17), tenemos (18) y al equilibrio la presión osmótica será mayor
115

en el compartimiento donde se encuentra el ión no difusible y por consiguiente hay


entrada de agua.

● Calcule la cantidad de iones difusibles que se mueven de un compartimiento A a


otro B, separados por una membrana selectivamente permeable, si en el primero
(A) hay 0,2M de KCl y en el segundo (B) 0,2M de Proteinato de cloro.

5.7.5.5- Efecto de la temperatura.

Al estudiar el afecto de la temperatura sobre la actividad enzimática se nota que al


aumentar la temperatura la actividad enzimática aumentaba hasta alcanzar una
temperatura a la cual la actividad enzimática es máxima o temperatura óptima.

Para determinar el efecto de la variable temperatura sobre la permeabilidad es


habitual medir la tasa de penetración o salida de un soluto desde la célula a una
temperatura dada y se hace la misma medición a una temperatura 10 °C por
debajo. A la relación resultante se le denomina coeficiente de temperatura ó Q10.
En sentido estricto se puede medir este coeficiente para cualquier fenómeno
fisiológico y se puede calcular mediante la ecuación (19).

(19)

Donde T2 es la temperatura de 10 °C por encima de la temperatura T 1 a la cual se


midió la tasa de actividad K1. Mientras que K2 es la tasa de actividad a la
temperatura T2

El valor de Q10 puede fluctuar entre 1 – 2 ó más de dos. Ahora sabemos que
cuando la difusión es simple el valor de Q 10.fluctúa entre 1,3 – 1,4; en cambio
cuando el trasporte de un soluto se hace en forma activa el valor de Q 10 es ≥ 2.
Este último valor indica que el transporte requiere energía metabólica y actividad
enzimática. Aunque la actividad debe encontrarse en rangos vitales de
temperatura.

5.7.5.6- Antagonismo de sales165.

El ambiente salino al cual la célula es expuesta afecta la permeabilidad de la


membrana a otras sustancias. Cuando una célula como la Laminaria, por ejemplo,
es inmersa en NaCl isotónica con el agua de mar (0,52M) su resistencia eléctrica
decrece, indicando un aumento de la permeabilidad al NaCl y al H 2O. Luego de un
165
Ver Giese, op cit., pp. 310 – 315.
116

período más o menos largo la célula es libremente permeable a H 2O y sale


sugiriendo que la membrana ha sido lesionada. Sin embargo si la célula no es
sometida por largo tiempo a la concentración salina se recupera, esto es reasume
su nivel de resistencia eléctrica anterior (Figura 5.27)

Figura 5.27
Efecto del NaCl sobre la permeabilidad de los discos de Laminaria.

Cuando se usa CaCl2 isotónico con agua de mar (AM), en cambio, la resistencia
primero aumenta, indicando una disminución de la permeabilidad al CaCl 2 y al
H2O; luego esta resistencia disminuye, sugiriendo nuevamente lesión de la
membrana (Figura 5.28).

El cloruro de potasio isotónico tiene el mismo efecto que el cloruro de sodio y el


cloruro de magnesio el mismo efecto que el cloruro de calcio.

Si los discos de Laminaria son sometidos a una mezcla isotónica de cloruros de


calcio y sodio en igual proporción que en el AM su resistencia eléctrica permanece
inalterada por largo tiempo, indicando que estos cloruros tienen efectos opuestos,
se dice entonces, que presentan antagonismo.

El mismo fenómeno de antagonismo ha sido reportado para la célula animal; por


ejemplo, el corazón de sapo deja de latir si es expuesto a NaCl puro, pero revive si
se le adiciona CaCl2 en proporción igual a la plasmática. Pero el latido es normal,
solo cuando se le adiciona KCl, glucosa y un buffer apropiado. Este balance de
soluciones para el corazón de sapo fue desarrollado por el médico británico
Sydney Ringer, da allí que se le denomine Solución de Ringer. Se han propuesto
soluciones similares para diferentes animales y tejidos 166

166
Prosser, 1973, pp. 83 – 89.
117

Figura 5.28
Efecto del CaCl2 isotónico sobre la permeabilidad de discos del alga Laminaria. Se muestra la resistencia
global en por ciento de la inicial (Según Giese, op. cit., p 312).

5.7.5.7-Efecto de anestésicos.

En general los anestésicos ejercen sus efectos en proporción a su solubilidad en


lípidos; lo cual indica que deben entrar a la célula para ejercer su efecto. No se
entiende bien, sin embargo, el mecanismo pero es probable que se acumulen
primero en la superficie celular, aumentando o disminuyendo la entrada de otras
sustancias (Cuadro 5.5).

Cuadro 5.5
Efecto de diversos anestésicos sobre ratones y su solubilidad relativa en lípidos.
Compuesto % para inmovilizar ratones Solubilidad en aceite (37°)
Etano 80,0 1,3
Acetileno 65,0 1,8
Dimetil-éter 12,0 11,6
Cloruo de metileno 6,5 14,5
Cloroformo 0,5 265,0
Según Giese op. cit., pp. 445 – 445.

5.8 Transporte especializado.

Algunas sustancias atraviesan la membrana de forma compleja que no puede ser


explicada por difusión a través de la barrera fosfolipídica o por canales. Hoy día
sabemos que muchas sustancias atraviesan la membrana mediante la
combinación reversible con moléculas proteicas (integrales) específicas de la
membrana llamadas transportadores, carriers, permeasas o simplemente
portadores167. El nombre de permeasas se refiere a que al igual que las enzimas
pueden alterar la velocidad de transporte de un soluto y el punto de equilibrio, lo
167
Giese, op cit., p. 459; Avers, op cit., pp. 97 – 101; Frisell, 1982, p. 391; Lodish et al., op. cit., p. 580.
118

que a su vez les distingue de las enzimas en el sentido que estas últimas solo
afectan la velocidad de reacción sin alterar el punto de equilibrio 168.

En general los transportadores se unen reversiblemente a la sustancia a


transportar y la translocan al otro lado de la membrana. La unión entre el
transportador y la sustancia a transportar es transitoria y específica. Se reconoce
la existencia de tres tipos básicos de proteínas transportadoras: proteínas de
canal, permeasas, y bombas impulsadas por ATP. Los dos primeros se
especializan en el trasporte de moléculas orgánicas e inorgánicas de pequeño
tamaño, iones y agua, a favor de un gradiente de concentración. La última se
especializa en el transporte de moléculas pequeñas y iones en contra de un
gradiente de concentración o de potencial eléctrico, con consumo de energía
metabólica (ATP).

5.8.1- Transportadores o permeasas

Este tipo de proteínas intrínsecas actúan tanto en la llamada difusión facilitada.


Estas moléculas fijan un substrato a transportar, una vez fijado el sustrato, el
complejo cambia de estado conformacional, translocando el sustrato al otro lado.
Se reconoce la existencia de tres tipos de transportadores, los uniportadores los
antiportadores y los sinportadores; a estos últimos también se les denomina
genéricamente contransportadores169.

Figura 5.29
Diagrama de los tres tipos básicos de transportadores (en rosado), a cada lado del transportador el
correspondiente gradiente del sustrato translocado (en gris y azul). El unitransportador, transloca una
sustancia a favor de un gradiente de concentración. En el simporte ambas sustancias son trasnlocadas por el
mismo transportador en el mismo sentido. En el antiporte las dos sustancias son trasnlocadas en sentidos
inversos.

Los uniportadores transportan un soluto a favor de un gradiente de concentración,


en cambio en el contratransporte el movimiento de una sustancia se realiza en
contra de un gradiente de concentración, acoplándola al movimiento de una
168
Avers, op cit., pp. 98; Lodish et al., op. cit., p. 581.
169
Rawn, op. cit., p.; Lodish et al., op. cit., p. 581.
119

molécula diferente a favor de su gradiente de concentración. El movimiento


contragradiente es termodinámicamente improbable, pero es favorecido por el
movimiento termodinámicamente probable, en sentido inverso, por la otra
sustancia (Figura 5.29)

Algunos transportadores son de carácter constitutivo, es decir se encuentran


siempre presentes en la membrana celular, mientras que otros son inducidos. Con
este último término queremos indicar que algunos transportadores solo aparecen
en la membrana cuando el sustrato apropiado está presente, tal es el caso de la
permeasa para la lactosa en la Escherichia coli170.

5.8.2- Difusión facilitada.

Las proteínas trasportadoras tipo uniporte están especializadas en el tránsito de


aminoácidos, nucleósidos, monosacáridos y en otras moléculas orgánicas
pequeñas, que entran y salen de la célula en respuesta a un gradiente de
concentración (Figura 5.29). El proceso de transporte mediado por uniportadores
es completamente reversible y el flujo neto está determinado por la concentración
relativa del metabolito a ambos lados de la membrana, razón por la cual también
se le denomina transporte mediado pasivamente. Como el uniportador acelera un
proceso termodinámicamente favorable, el cambio de energía libre será negativo
(-G), participe un transportador o no. Por consiguiente, debe existir una forma
objetiva de diferenciar el proceso de transporte pasivo no-mediado (sin
uniportador) y el mediado (con uniportador). La diferenciación de ambos procesos
es posible mediante el estudio de la cinética de difusión para cada caso haciendo
uso de la ecuación:

(20)

Obteniéndose el gráfico siguiente (Figura 5.30):

Son notorias allí dos diferencias fundamentales para una temperatura igual (20°C),
la tasa de trasporte del soluto es mayor para el soluto mediado (difusión facilitada)
que para el soluto no-mediado (a). Y que se alcanza una concentración del soluto
tal que por encima de la cual la tasa de transporte no aumenta (b); se dice
entonces que el transportador esta saturado. Como quiera que la unión
transportador-soluto guarda similitudes con la unión enzima-sustrato, guarda
algunas características similares como lo son la cinética de saturación. Por la
misma razón, agentes alcalinizantes y oxidantes interfieren no-competitivamente
con la función transportadora.

170
Lwoff, 1970, p. 46; Stent y Calendar, 1986, p. 630, Madigan, et al., 2003, pp. 72 – 75.
120

Figura 5.30
Comparación entre la velocidad de captación de un soluto mediante difusión pasiva (verde) y difusión
facilitada.

5.8.3- Mecanismo molecular de la difusión facilitada.

Figura 5.31
Modelo molecular propuesto para el uniporte de glucosa GLUTI1. (a) Fijación externa de la glucosa por el
transportador. (b) Formación del complejo transportador-metabolito. (c) Liberación del metabolito al interior. (d)
Si la concentración de glucosa es mayor en el citosol que en el exterior, esta se fija al sitio interno de fijación
de la glucosa al transportador continuando la secuencia en sentido inverso y depositando el metabolito al
exterior. 171

El mecanismo de difusión facilitada mejor estudiado es el transporte de glucosa


por las membranas de la mayoría de las células de mamíferos. Todas estas
células expresan el gen GLUTI1, un uniporte de la membrana que facilita el
transporte de D-glucosa a favor de un gradiente de concentración. Como las
células están constantemente consumiendo metabólicamente D-glucosa o la
transforman en glucosa-6-fosfato, que no es un sustrato de la, casi siempre hay un
gradiente favorable a la entrada del soluto.

171
Lodish et al., op. cit., pp. 581 – 584.
121

El GLUT1 existe en la membrana en dos estados conformacionales, uno de ellos


un sitio de fijación para la D-glucosa que mira hacia la parte externa de la
membrana, mientras que el otro sitio fijador de glucosa mira hacia la cara interna.
Mientras que su cinética de difusión explica bastante bien la conducta de este
transportador, tal y como se ilustra en la Figura 5.31. Como casi siempre hay más
glucosa fuera que adentro la glucosa se une al fijador externo, formándose un
complejo transportador-metabolito que luego libera la molécula de glucosa al
interior. El transporte es libremente reversible, de manera tal que si la
concentración interna de glucosa aumenta con respecto al interior la reacción se
invierte iniciándose con la fijación al sitio interno del GLUTI1.
El uniportador de glucosa GLUT1, forma parte de una gran familia de
transportadores de difusión facilitada que va del GLUT1 al GLUT5, que se
diferencian no solo en su secuencia de aminoácidos, sino también en el tipo
celular donde se les encuentra. Esta gran familia se encarga del transporte
facilitado de glucosa, con excepción del GLUT5 que transporta fructosa en las
células del intestino delgado de los mamíferos 172 (Cuadro 5.6).

Cuadro 5.6
Familia de trasportadores de glucosa en mamíferos.
Nombre Localización Km (mM) Nota
GLUT1 Todos los tejidos 1 Entrada de glucosa basal
GLUT2 Hígado y páncreas 15 - 20 Regulación por insulina
GLUT3 Todos los tejidos 1 Entrada de glucosa basal
GLUT4 Músculo y adiposo 5 Aumenta en entrenamiento
GLUT5 Intestino delgado - Transporta fructosa
Según Stryer et al., op cit, p. 448.

5.8.3- Transporte activo mediante bombas impulsadas por ATP.

Cuando el trasporte de una sustancia requiere energía metabólica se le conoce


como transporte activo. El trasporte activo se realiza contra gradiente de
concentración, por tanto tiene G positivo y por ende es poco probable que se
realice la translocación sin gasto de energía. Lo que se indica con la siguiente
ecuación:

(21)

Donde W es el trabajo celular, C 1 es la concentración más alta y C 2 es la


concentración más baja, T la temperatura absoluta y R la constante general de los
gases 173. Es evidente allí que a medida que la diferencia de concentración a
remontar por el soluto en contra del gradiente de concentración el trabajo que
tiene que realizar la célula es mayor. Si el soluto a remontar esta cargado, el
trabajo aumenta como clarifica la ecuación (22):
172
Stryer et al., op cit, pp. 448 – 450.
173
Giese., op. cit., p. 455.
122

(22)

Donde n es la valencia del ión, F es la constante de Faraday (96 500 Culomb/


Volt·mol), E es la diferencia de potencial en voltios entre el medio y la superficie.

El transporte activo al igual que la difusión facilitada es realizado por proteínas de


la membrana Estos transportadores se pueden agrupar en tres categorías:
bombas iónicas de clase P, bombas iónicas clase F y V, y las superfamilia ABC
(Figura 5.34).

5.8.5.1- Bombas iónicas clase P.

Figura 5.32
Diagrama de los cuatro grandes tipos de proteínas intrínsecas transportadoras de la membrana. Las bombas
tipo P están compuestas por dos subunidades α y β, la primera posee el sitio de fijación del ATP. Las bombas
tipo F y V que no forman intermediario fosfoproteico y no están relacionadas con las tipo P. Las familia ABC
están constituidas por cuatro subunidades dos T y dos A (ver Lodish et al., op. cit., p. 589).

Las bombas clase P son proteínas integrales conformadas por un tetrámero


compuesto por dos subunidades  y dos. La subunidad  tiene funciones
reguladoras, mientras que la  contiene el sitio de unión para el ATP, de allí el
nombre de P. Durante el transporte cuando menos una de las subunidades  se
fosforila, aportándose así la energía necesaria para realizar el transporte contra
gradiente. Este tipo de bomba incluye la ATPasa Na +/K+ dependiente de la
mayoría de las membranas plasmáticas, varias ATPasas Ca ++ dependientes que
bombean Ca++ del citosol al exterior de la célula o al retículo sarcoplasmático del
músculo. También pertenece a esta familia el transportador de protones (H +)
desde la célula al exterior e iones K + al interior de las células epiteliales del
estómago de los mamíferos.

5.8.5.2- Bombas iónicas clase F y V.


123

Las bombas clase F y V son similares entre sí, aunque muy diferentes de las clase
tipo P y son más complicadas estructuralmente hablando. Estas bombas están
constituidas por tres proteínas transmembranales y cinco polipéptidos extrínsecos.
Algunas de las proteínas intrínsecas y extrínsecas de estos transportadores
presentan homología de secuencia, de allí que se piense que evolucionaron a
partir de un polipéptido común.

Las bombas F y V son transportadores de protones (H +) en un proceso donde no


interviene intermediario fosfoproteico. Las bombas V transportan protones de la
fase citosólica a la cara exoplasmática de la membrana en contra de un gradiente
de concentración con hidrólisis de una molécula de ATP. Esta bomba mantiene el
pH bajo en el interior de la vacuola vegetal, el lisosoma y otras organelas
animales. Mientras tanto, las bombas F promueven la síntesis de ATP a partir de
ADP y Pi a favor de un gradiente electroquímico originado por el transporte
independiente de protones. Las bombas tipo F son características de la membrana
interna mitocondrial, cloroplástica y membrana bacteriana.

5.8.5.3- Superfamilia ABC

Figura 5.33
Las bacterias gram-negativas hacen uso de permeasas del tipo ABC, tal es el caso de la permeasa de
histidina.

El acrónimo del nombre deriva del término anglo-sajón ATP-binding cassette,


(casete fijador de ATP) e incluye una familia de más de 100 transportadores
distribuidos a todos los niveles taxonómicos. Cada proteína ABC está
especializada en el transporte de un metabolito o metabolito muy relacionado,
124

entre ellos iones, monosacáridos, péptidos, con fijación e hidrólisis de de una


molécula de ATP. Todas las bombas ACB constan de cuatro dominios centrales,
dos transmembranales (dominios T) y dos citosólicos (dominios A); a éste último
se fija el ATP. Los dominios T constituyen la vía por la cual las sustancias
atraviesan la membrana.

Una gran cantidad de permeasas de la bacterias Gram negativas como E. coli,


poseen en su membrana plasmática transportadores tipo ABC, capaz de
transportar, aminoácidos, monosacáridos, vitaminas y proteínas, con hidrólisis de
ATP174. En este grupo de microorganismos, entre la membrana externa e interna
existe el espacio periplasmático, donde se encuentra la pared celular (Figura 5.6).
En dicho espacio se encuentran proteínas de unión (binding proteins), cuya
función es transportar y fijar el metabolito al sistema de transporte ABC ubicado en
la membrana interna. El complejo metabolito proteína de unión se fija a la
subunidad T de la permeasa; mientras que la hidrólisis del ATP de la subunidad A
impulsa la sustancia al interior. La permeasa de este tipo mejor estudiada es la de
histidina (Figura 5.33).

Todas las permeasas ABC son en general inducibles, es decir que su cantidad en
la membrana está regulada por la concentración del metabolito en el medio
extracelular (ver sección 5.81) o por las necesidades de la célula.

Este tipo de permeasas también está presente en ciertas situaciones patológicas


como el cultivo de células cancerosas con resistencia a fármacos y en la
enfermedad genética fibrosis quística.

5.8.5.4- Translocación de grupo.

En procariotas existe un tipo muy especializado de transporte, en el cual la


molécula es alterada durante el transporte conocido como translocación de grupo.
Dicho transporte también es activo pues se consume energía metabólica. El
sistema de este tipo mejor conocido es el sistema de la fosfotransferasa (SFT) de
E. coli y Salmonella typhimorium. El referido sistema consiste en una serie de
proteínas que se fosforilan y desfosforilan en cascada, antes de que el azúcar sea
transportada al interior de la célula. El donador de fosfato rico en energía es el
fosfoenolpiruvato (PEP). El complejo SFT, consta de dos enzimas y la proteína
termo-estable (HPr). Las enzimas son: la enzima I (EI), citoplasmática y la enzima
II. Esta última, a su vez, constituida por la enzima IIA (EIIA) soluble también, la
enzima IIB, también hidrofílica pero unida a una fracción hidrófoba embebida en la
matriz fosfolipídica de la membrana llamada enzima IIC (EIIC). El fosfato es
transferido a la EII por el PEP, a través de la EI y la HPr. Entonces el azúcar es
fosforilado mientras atraviesa la membrana por la EII (Figura 5.34). El componente
EII es muy específico para cada tipo de azúcar, mientras que le componente HPr y
EI es común para todos lo SFT175.
174
Ver Lodish et al., op. cit., pp. 595 – 597; Stryer et al., op cit, p. 351; Prescott, et al., 2002 y Madigan, et al.,
2003, pp. 72 – 75.
175
Rawn, op. cit, p. 1035 – 1936; Prescott, et al., ibid, p. 103 – 104 y Madigan, et al., ibid,, pp. 72 – 75.
125

El sistema SFT está ampliamente distribuido en las bacterias anaerobias


obligadas y facultativas, en cambio no existe en bacterias aerobias.

Figura 5.34
Translocación de grupo en bacterias mediante el sistema de la fosfotransferasa (SFT).

5.8.5.5- Contratransporte por simporte y antiporte.

Además del transporte de moléculas gracias al consumo de ATP, la célula es


capaz de mover sustancias en contra de un gradiente de concentración, mediante
proteínas de la membrana que utilizan la energía almacenada como gradiente
electroquímico de Na+ ó H+. Por ejemplo el movimiento favorable de Na + hacia el
interior de la célula gracias a un gradiente de concentración y eléctrico, puede ser
acoplado al transporte obligado de otra molécula fenómeno conocido como
cotransporte. Cuando el cotransporte va en la misma dirección se denomina
entonces simporte. Si las sustancias se mueven en sentidos opuestos el
cotransporte es conocido como simporte (Ver sección 38.1). Esta forma de
transporte activo de sustancias también es denominada transporte activo
secundario176.

El caso de cotransporte mediante simporte es el caso del movimiento de


aminoácidos y glucosa en muchas células animales; las cuales usan un
simportador Na+/Glucosa. En este caso la ATPasa Na+/K+ utiliza el ATP para crear
un contragradiente de sodio entre el interior y el exterior de la célula, que además
desarrolla un potencial de membrana que favorecerá la entrada pasiva de sodio.
La entrada se realiza a través del simportador Na +/Glucosa que arrastra dos iones
de sodio por cada molécula de glucosa (Figura 5.35). Lodish et al. (2002) han
calculado que el ΔG producido (-6 kcal/mol) por esta estequiometría es lo
suficientemente grande como para favorece una entrada de glucosa que es
aproximadamente 30 000 veces mayor que el estado de equilibrio de la glucosa.

176
Dahl y Hokin, 1975.
126

Figura 5.35
Cotransporte mediante un simportador. La ATPasa Na/K convierte la energía libre de l transferencia de un
fosforilo en energía libre de gradiente eléctrico y químico de Na. En celeste el simportador permeasa Lac de
Escherichia coli. El gradiente iónico puede emplearse para bombear materiales al interior en contra de un
gradiente de concentración.

Otro ejemplo importante de simporte esta representado por el portador de Lactosa


mencionado con anterioridad177, mediante la cual Escherichia coli incorpora el
azúcar mediante un simportador llamado permeasa Lac. Este es un simportador
clásico pues la bacteria incorpora la lactosa junto con un protón (Figura 5.35, en
celeste).

El ejemplo de antiporte por excelencia está ejemplarizado por el antiportador


aniónico Cl-/HCO3-, este antiportador a sido caracterizado con el nombre de
proteína AE1 que se ubica en la membrana del eritrocito regulando el transporte
de CO2 de los tejidos profundos al pulmón (Figura 5.36).

El transporte de CO2 de los tejidos a los pulmones y el de O 2 en sentido inverso se


realiza con la participación de la proteína AE1 del eritrocito de mamíferos, que en
los tejidos profundos favorece la salida de bicarbonato (HCO 3-) que se intercambia
por Cl-, como ambos son aniones monovalentes el intercambio no afecta el
potencial de membrana178. Por tanto el movimiento de partículas solo depende del
gradiente de concentración respectivo.

En los tejidos la cantidad de CO 2 es elevada debido a la actividad metabólica de


las células que tiene a éste compuesto como su producto final. Debido a que la

177
Ver sección 5.8.1.
178
Más adelante se define el potencial de membrana y se explican sus causas.
127

Figura 5.36
Diagrama del transporte de CO2 y O2 de los capilares de los tejidos profundos a los del pulmón.

concentración de CO2 dentro del eritrocito es baja se favorece su entrada. El CO 2,


ahora reacciona con H20 para formar ácido carbónico (H 2CO3). Esta reacción es
relativamente lenta, pero en el interior del eritrocito, es acelerada hasta 5 000
veces por la anhidridasa carbónica. El oxígeno, por otra parte abandona el interior
del eritrocito también a favor de un gradiente de concentración, liberando a la
hemoglobina que adquiere afinidad por el ión H + que se deriva de la reacción entre
el CO2 y el H20 (Figura 5.36). El CO2, entonces, es transportando casi en su
totalidad (70%) disuelto en el plasma en forma de HCO 3-. Al alcanzar el eritrocito
los capilares pulmonares, la situación se invierte. El CO 2 es ahora poco abundante
en el plasma y mucho el O2; por consiguiente, la anhidridasa promueve la
disociación del ácido carbónico en agua y CO 2 que ahora escapa del eritrocito en
virtud a su gradiente de concentración. El protón deja la hemoglobina que ahora
es ocupada por el O2 y el cloro abandona el citosol.

5.9- Transporte masivo.

El término se refiere al movimiento de partículas y de masa de líquido demasiado


grande para atravesar la membrana celular por alguno de los mecanismos hasta
ahora descritos; como son los casos de las macromoléculas, ácidos nucleicos,
proteínas simples o complejas, las cuales salen y entran a la célula mediante
exocitosis y endocitosis179 (Figura 5.37). De especial interés, en este contexto, es
el proceso de transporte de proteínas sintetizadas en el citosol a los diversos
compartimientos celulares (mitocondrias, cloroplasto, peroxisomas, lisosomas y
otras) que comprenden la célula. Al proceso de orientación de los péptidos recién
sintetizados hacia un destino particular se le denomina orientación o clasificación
proteica. Estos fenómenos también serán estudiados en este aparte.

179
De Robertis y De Robertis, op. cit, pp. 232 – 250; Lodish et al., op. cit., pp. 675 – 747.
128

Figura 5.37
Aspectos dinámicos de la ingestión de moléculas de gran tamaño relativo por parte de la célula y el papel de
los lisosomas en su integración al citosol.

5.9.1- Endocitosis.

Se denomina así al mecanismo de captación masiva de partículas o líquido a


través de la membrana celular con la formación consiguiente de un endosoma. Se
conocen tres tipos de endocitosis, la pinocitosis, la fagocitosis y la fagotrofia.

5.9.1.1- Pinocitosis.

Se denomina así al proceso de ingestión y otras sustancias solubles en agua, que


tiene como resultado final la formación de una vacuola muy pequeña, cuyo
diámetro se encuentra casi en límite de resolución del microscopio óptico, que
recibe el nombre de pinosoma.

La pinocitosis ha sido reportada en amebas, leucocitos, células epiteliales del


intestino, las células endoteliales que revisten los capilares , las células tubulares
renales y neuronas de mamíferos, pero no se han reportado en vegetales. Por otra
parte, la pinocitosis presenta inducción, por ejemplo se ha reportado pinocitosis en
Amoeba proteus sumergida en medios conteniendo sales, proteínas aminoácidos
y virus.

El pinosoma que resulta del proceso pinosítico se fusiona con un lisosoma para
ingerir su contenido.

5.9.1.2.- Fagocitosis.

Es el caso de ingestión de partículas por la célula; las partículas en este caso son
muy grandes, de manera que la vacuola formada será de tamaño considerable y
se le denomina fagosoma.
129

La fagocitosis ha sido reportada en Amoeba, linfocitos en especial los neutrófilos


polimorfos nucleares (NPM) y monocitos, los macrófagos fijos (presentes en los
conductos del hígado, la médula y el bazo); organismos todos que atrapan
bacterias, desechos celulares, etc. También se encuentran células fagocíticas fijas
en celenterados, platelmintos, turbelarios y moluscos bivalvos. Los fagosomas
resultantes se fusionan con los lisosomas primarios para dar origen a los
lisosomas secundarios que digieren su contenido.

5.9.1.5.- Fagotrofia.

Es la ingestión de partículas o líquido por organismos que poseen citostoma (boca


celular, como el caso de la ciliatea) formándose una vacuola alimenticia.

5.9.2- Exocitosis.

Es la expulsión de substancias por la célula y es el fenómeno inverso a la


endocitosis.

5.9.3- Mecanismo de orientación de proteínas.

Las proteínas que son sintetizadas en el interior de la célula y deben ser


exportadas al exterior, como hormonas, proteínas de matriz extracelular y de la
cubierta y paredes celulares, deben ser llevadas al exterior. Para este propósito,
las mismas deben atravesar la membrana de diversos compartimientos. A los
mecanismos que permiten a las proteínas ubicarse en el sitio donde van a ejercer
su función se le conoce como orientación o clasificación proteica. Durante dicho
fenómeno es imprescindible el transporte de dichas moléculas a través de la
membrana180.

El ejemplo que describiremos aquí está representado por la importación de


proteínas por la mitocondria (Figura 5.38). La mayoría de las proteínas
mitocondriales son sintetizadas bajo las órdenes del ADN nuclear y no el
mitocondrial (ADNm). En el extremo terminal N de la proteína mitocondrial a
exportar, se le adiciona una secuencia de señal de captación u orientación, que
informan a proteínas especializadas del citosol y receptores de membrana
mitocondrial el destino final de la proteína.

Antes de su fijación en el receptor de membrana, la proteína se une a una proteína


chaperona (acompañante) la MSF (factor estimulante de la importación
mitocondrial)181 que utiliza ATP con el fin de mantener la proteína mitocondrial
desplegada y evitar su agregación antes de unirse al receptor. El complejo MSF-
proteína precursora mitocondrial se unen a un complejo receptor de la membrana
externa mitocondrial las proteínas Tom70 y Tom37. Una vez unidos el MSF se
180
Para una discusión detallada referirse al capítulo 17 de Lodish et al., op. cit., pp. 674 – 750.
181
Se define como proteína chaperona a aquella que evita el enrollamiento de la proteína en el citosol,
evitando así la formación de la estructura terciaria de la misma. Chaperonas son proteínas cuya función es la
de asistir a otras proteínas realicen el plegamiento apropiado.
130

libera la proteína precursora que queda adherida al complejo Tom70/37. Éste


último se une ahora al complejo transportador, compuesto entre otras más
pequeñas, por la proteína Tom40. Una vez en el espacio intermembrana, el
precursor es translocado a la matriz mitocondrial propiamente dicha por otro
transportador, la Tim23/Tim17. La Tim23/Tim17 utiliza como fuente de energía la

Figura 5.38
Importación de proteínas a la matriz mitocondrial. Las proteínas mitocondriales sintetizadas en el citosol,
emergen con una secuencia de orientación en su extremo terminal N, que orienta a la proteína chaperona
MSF (factor estimulante de la importación mitocondrial) para que identifique la proteína y la oriente al receptor
(Complejo Tom70 y Tom37). La chaperona usa ATP para mantener la proteína desplegada. Una vez la
proteína mitocondrial se ha unido al receptor la MSF es liberada nuevamente. El complejo receptor proteína
se una al transportador de membrana externo Tom40. Una vez translocada la proteína es transportada a
través de la membrana interna mitocondrial por el transportador Tim23/17 de energía protón-motriz
dependiente al interior de la matriz mitocondrial.

fuerza protón motriz para el transporte. Una vez en el interior una chaperona, la
Hsc70 fosforila la proteína que realiza el mismo propósito que su homóloga la
MSF en el citosol.

El ejemplo anterior no es el único que se realiza en la célula, procesos similares


ocurren en el Golgi, el retículo endoplasmático, en la mitocondria y los lisosomas y
todos tienen las siguientes características:

5.9.5.1- Requieren energía metabólica en forma de ATP.


131

5.9.5.2- Muchos requieren proteínas compañeras o chaperones.


5.9.5.3- Requiere un translocador especializado (Tim23/Tim17, Toc75 y
translocones).
5.9.5.4- Requieren un receptor de membrana (Tom70, Tom35, receptor SRP y
otros).
132

CAPÍTULO 6

Biopotenciales

6- Se denomina biopotenciales a los potenciales eléctricos desarrollados por los


sistemas vivos. El estudio de los fenómenos bioeléctricos fue iniciado por L.
Galvani (1757 – 1798) por 1786, cuando demostró que las ancas de rana se
contraen al ser estimuladas eléctricamente, concluyendo que los músculos
generan electricidad.

Los fenómenos bioeléctricos y la capacidad de responder a estímulos o


excitabilidad, sin embargo, son una propiedad de todas las células, aunque está
más desarrollada en las células nerviosas y musculares. De allí que todo estudio
de los fenómenos bioeléctricos debe iniciarse con una descripción de los mismos.

6.1. Estructura microscópica del nervio.

Figura 6.1
Organización histológica de los nervios periféricos de los vertebrados (Redibujado de Cormarck, op- cit., p.
460).

Al conjunto de fibras nerviosas182 que corren fuera del Sistema Nervioso se les
denomina nervios, en oposición a los que corren dentro del sistema nervioso que
se les llama en conjunto haces o tractos nerviosos. Los nervios periféricos se
diferencian histológicamente de los haces por ser más resistentes y fuertes que
los últimos, debido a que están incluidos en un conjunto de vainas de tejido
conectivo de orden decreciente en magnitud, que envuelven consecutivamente las
fibras. La capa conjuntiva más externa es el epineurio, cubierta ésta de tejido
conjuntivo laxo, dentro de cuyo tronco se encuentran las fibras nerviosas rodeadas
a su vez por una cubierta de tejido conectivo el perineurio. Dentro del perineurio se
encuentran las fibras individuales recubiertas por una capa de tejido conectivo laxo
182
Se denomina, por convención, al axón de una neurona fibra nerviosa, Cormack, 1988, p 421.
133

el endoneurio. Los nervios periféricos de poco calibre carecen de epineurio, los de


grueso calibre presentan las tres cubiertas (Figura 6.1) 183

Figura 6.2
Diagrama de una neurona multipolar, la motoneurona de la médula de los vertebrados.

6.2. Estructura de la neurona.

La neurona es la unidad morfológica y fisiológica del Sistema Nervioso. La


neurona típica está representada por la neurona multipolar del asta ventral de la
médula espinal, que consta de tres zonas morfológicas y funcionales: zona
dendrítica, zona axónica y telodendria (Figura 6.2). La zona dendrítica está
especializada en la recepción de impulsos o de estímulos, la axónica en la
conducción de impulsos y la telodendria en la transmisión de impulsos. El hecho
de que cada una de estas áreas de una misma neurona realice funciones diversas

183
Ibid, p. 461.
134

es manifestación clara de que la estructura íntima de sus respectivas membranas


plasmáticas es distinta.

Figura 6.3
Diagrama de la relación entre las células de Schwann y las fibras nerviosas. (A) En el caso de las fibras
amielínicas varias fibras nerviosas están embebidas en una célula Glial, mientras que en las mielínicas, una
célula Glial va girando alrededor de la fibra, depositando capas sucesivas de membrana de mielina.

El área dendrítica esta constituida por el pericarion (gr. karyon, núcleo) debido a
que aloja el núcleo; de él emergen numerosas ramificaciones cortas y
arborescentes denominadas dendritas y un filamento largo, en algunos casos, el
cilindro eje o axón. El axón puede o no estar cubierto por una cubierta
membranosa producto de la actividad de las células gliales, denominadas células
de Schwann, la mielina: lo cual permite distinguir dos tipos de neuronas
amielínicas (sin mielina) y neurona mielínicas (con mielina), respectivamente
(Figura 6.3)184. Algunos axones muestran ramificaciones colaterales aunque la
unicidad es la norma.

La membrana plasmática del axón tiene la denominación específica de axolema y


el protoplasma que envuelve el de axoplasma.

6.6. Tipos de neuronas

Las neuronas suelen clasificarse en virtud a criterios diversos, para los efectos de
este curso, solo tomaremos en consideración dos criterios: el número de
ramificaciones y la dirección a la cual transmiten la información.

De acuerdo con el primer criterio las neuronas pueden ser: bipolares (dos
ramificaciones), seudounipolares (en realidad bipolares) y multipolares (muchas
ramificaciones) (Figura 6.2).

Mientras tanto, de acuerdo con la dirección a la cual transmiten la información las


neuronas pueden ser: aferentes o sensoriales, eferentes o motoras e
internunciales o asociativas (Figura 6.5). Las neuronas aferentes llevan
184
Smith, 1972, p.
135

información de la periferia (órganos de los sentidos) al Sistema Nervioso Central


(SNC). Las eferentes traen información del SNC a la periferia (efectores). Por
último, las internunciales establecen conexión con las anteriores.

Figura 6.4
Reconstrucción virtual de una neurona piramidal de la corteza de mamíferos.

Figura 6.5
136

6.4- Estímulos.

Se define estímulo como cualquier cambio, cualitativo o cuantitativo de cualquier


factor ambiental capaz de generar una respuesta.

6.4.1.- Tipos de estímulos.

Los tipos son muy variados e incluyen cualquier forma de energía, eléctrica,
mecánica, química, lumínica y otras. No obstante la más utilizada en Fisiología es
la estimulación eléctrica, pues se puede regular su duración e intensidad y no
dañan la célula.

6.4.2- Características de los estímulos.

Las características de los estímulos son las de poseer intensidad, duración y


frecuencia.

Figura 6.7
Respuesta de un organismo animal a diversas intensidades de estimulación.

La intensidad del estímulo se refiere a la magnitud del estímulo, eg. 1 mV; 23 mV


etc. Aunque también hace referencia a la magnitud de la respuesta que
desencadena, así tenemos que las intensidades pueden ser subumbrales,
umbrales, submaximales, maximales y supramaximales. La intensidad subumbral
es toda intensidad por debajo del umbral pero que no genera ninguna respuesta.
La intensidad umbral es la intensidad mínima que genera una respuesta; en
137

cambio la intensidad maximal es aquella que genera una respuesta máxima.


Aunque existen intensidades por encima de la maximal estas no producen
respuestas mayores.

● ¿Por qué?

Entre la intensidad umbral y la maximal existen intensidades variables de


estimulación que producen respuestas también graduadas, que reciben el nombre
de intensidades submaximales (Figura 6.7).

Figura 6.8
Relación entre la intensidad de un estímulo y la duración de la aplicación del mismo.

La duración en cambio se refiere al tiempo que se prolonga la aplicación de un


estímulo. Para que el mismo sea eficaz, es decir capaz de generar una respuesta,
es necesario que el estímulo sea aplicado un intervalo de tiempo, a dicho intervalo
se le conoce como tiempo útil. Dentro de cierto ámbito de intensidad a medida que
la intensidad es mayor el tiempo útil es menor. En otros términos, a medida que se
diminuye la intensidad del estímulo, la duración a la que hay que aplicarlo es
mayor, hasta llegar a una intensidad a la cual la duración es infinita (), a tal
intensidad es denominada reobase. En la práctica se prefiere comparar
excitabilidades refiriéndose a la intensidad cronaxia. En donde cronaxia es el
doble de la reobase (Figura 6.8)

Por último la frecuencia de estimulación se refiere a las veces que se aplica un


estímulo en la unidad de tiempo, eg. 1 mV/seg, 2 mV/seg…etc.

6.5- El potencial de reposo como caso de transporte múltiple en la célula.


138

Para efectos didácticos, se han separado los diversos mecanismos de transporte


en compartimientos estancos, en realidad en la célula viva muchos de estos
mecanismos coexisten temporal y espacialmente en la misma célula. El mejor
ejemplo de coexistencia de mecanismos lo representa el potencial eléctrico de la
célula viva o biopotencial. El biopotencial mejor estudiado es el denominado
potencial de reposo o potencial de membrana.

A la diferencia de potencial que existe, a través de la membrana, entre el interior y


el exterior del citoplasma, se le denomina potencial de reposo (Figura 6.9). El
mismo es una propiedad de la célula viva pues ha sido reportado en la célula
microbiana, la animal y la vegetal 185 y es abolido cuando la célula muere. El
potencial de reposo tiene una magnitud que fluctúa entre -10 a -130 mV. En los
animales su ámbito es más bien bajo entre -10 y 100 mV, con promedio cercano a
los -60 mV; en plantas, en cambio varía entre -110 a 130 mV.

Figura 6.9
Potencial de reposo de una célula animal típica, en base a las concentraciones empíricamente obtenidas. Se
representan los canales de reposo del Na + (violeta), K+ (rosado), Cl- (verde), la ATPasa Na+/K+ dependiente
(gris) y el transportados de Cl- (Café)

185
Madigan, et al., ibid, p.70; Lodish et al., op. cit., p. 585; Taiz y Zeiger, op. cit., pp. 123 – 128.
139

6.4.1- Causas del potencial de reposo.

El potencial de membrana se debe a restricciones que impone la membrana al


libre flujo de iones, de manera que se establece una diferencia sostenida de
concentración de cationes y aniones entre el exterior y el exterior de la célula
(Figura 6.9 y Cuadro 6.1). Esta diferencia se establece pues la membrana en
reposo es más permeable el ión K que a ningún otro ión, de manera que su
tendencia a salir en respuesta a la diferencia de concentración y su tendencia a
entrar en respuesta a un gradiente de potencial es suficiente para explicar el
potencial de reposo, siempre y cuando haya un transporte activo de K y Na que
mantenga los gradientes de concentración respectivo. En otras palabras el
potencial de membrana depende del ión al cual la membrana es más permeable,
en este caso al ión potasio.

Cuadro 6.1
Algunos valores representativos de concentraciones iónicas intra y extracelulares (mM/L de agua) de algunos
tejidos animales y de los potenciales de reposo que comportan.
Ión Calamar (axón Músculo Ser Humano D. latifrons
gigante) (a) sartorio(Sapo) (a) (eritrocito) (a) (plasma) (b)
Intracel. Extracel. Intracel. Extracel. Intracel. Extracel. Intracel. Extracel.
K+ 344,0 10,0 136,0 2,5 136,0 5,0 34,0
Mg++ 10,0 53,0 14,0 1,0 5,0 2,2
Ca++ 3,5 450,0 5,0 2,0 0,0 5,0
Cl- 80,0 540,0 3,0 90,0 78,0 112,0 107,3
Na+ 65,0 460.0 13,0 110,0 19,0 155,0 139,0
PR -77 mV -99 mV -6 a -10mV
(a)Tomado de De Vore, 1972 (b) Villarreal et al, 1987.

Si como sugiere nuestra explicación, la membrana es más permeable al ión


potasio, la ecuación de Nernst (23) describe el potencial eléctrico alcanzado al
equilibrio por el ión permeable186. Según ella, la diferencia de potencial eléctrico
que debe aplicarse, a través de la membrana, para equilibrar las fuerzas
dependientes de la diferencia de potencial químico que hacen difundir un ión de
cierta carga será igual a:

(23).

En donde Ek es el potencial eléctrico del ión K, Z la valencia del ión y F la constate


de Faraday. La solución de esta ecuación indica, para la membrana, un valor del
potencial próximo a los -59 mV por debajo del valor determinado
experimentalmente que es ≈ -60mV. Esta ecuación indica, adicionalmente, que si
se modifica experimentalmente la concentración externa de K +, se puede modificar
el potencial Ek, pues a su vez se hará variar la relación [K +]e / [K+]i. Observaciones
de tales respuestas han sido reportadas mediante gráficas como la que se
186
Lodish et al., op. cit., p. 587; Young, 2004, p. 46.
140

diagrama en la Figura 6.10 (redibujada a partir de Davson, 1960;Gimeno y


Gimeno, 1965; De Vore, 1974) 187. Es notorio allí que, en efecto, un descenso en la
concentración externa de potasio abate el potencial de reposo debido a que el
gradiente de concentración de este ión desaparece a medida que aumenta la
concentración del ión. Por otra parte, a bajas concentraciones externas la
diferencia del gradiente es alta lo que aumenta el potencial de reposo. La
discrepancia entre el valor teórico y el experimental entre los 20 y 3mM de potasio
(ámbito fisiológico) se debe a que a tales concentraciones la permeabilidad de la
membrana al sodio está aumentada, sin compensación por la salida activa del ión
sodio.

Figura 6.10
Efecto de la concentración externa de potasio sobre el potencial de reposo (en rojo) y la relación teórica (en
morado). En gris la divergencia entre ambos a bajas concentraciones

La ecuación de Nernst solo toma en consideración un ión para explicar el potencial


de reposo, pero en realidad la membrana es también permeable a otros iones,
hecho tomado en consideración por la ecuación de Goldman (24)188

(24)
187
Páginas 311 y 141, respectivamente.
188
Lodish, et al., op. cit., p. 918.
141

Donde PK, PNa, PCl son los coeficientes de permeabilidad de los iones K +, Na+, Cl-;
cuyos valores son 1,0; 0,5; 0,005, respectivamente. Es evidente que en reposo la
membrana es mayormente permeable al ión K + que a cualquiera de los otros
iones, de manera que la ecuación de Goldman se reduce a la de Nernst, aunque
los cálculos obtenidos mediante ella son más exactos que los obtenidos por la
primera.

6.4.2- Canales de reposo.

Figura 6.11
Representación molecular de un canal de K+ en reposo, las esferas verdes representan el ión potasio
atravesando el canal, en blanco la matriz fosfolipídica de la membrana, la parte superior representa el exterior
de la célula, la inferior el citosol.

En reposo los iones se mueven en respuesta a sus respectivos gradientes de


concentración gracias a la existencia de canales que permanecen abiertos y
reciben el nombre de canales de reposo en oposición a los canales cuya apertura
depende de mecanismo reguladores de carácter eléctrico (canales voltaje
dependiente), químico (canales químico dependientes) o mecánico (canales
mecano dependientes), llamados canales regulados189. Como se mencionó
189
Kandel, op. cit., p. 107.
142

anteriormente, en reposo, los iones potasio se mueven hacia el exterior en


respuesta el gradiente de concentración, movimiento que realiza a través de los
canales de iones K+ (K+ leak channel) o canales K+ de reposo que se encuentran
abiertos, lo que explica que el P K sea tan elevado y son los responsables directos
de que el interior sea negativo con respecto al exterior (Figura 6.9). El canal de K +
de reposo esta compuesto de cuatro subunidades idénticas. Cada subunidad tiene
dos hélices α, que atraviesan la membrana y revisten parcialmente el poro
conductor de los iones en el centro de la proteína 190 (Figura 6.11). Como sugiere la
ecuación de Goldman, también existen canales en reposo para los iones Cl - y Na+,
que al igual que los de K + están abiertos y por tanto contribuyen importantemente
al mantenimiento del potencial de reposo; es más, las características eléctricas
especificas de cada membrana celular está determinada por la proporción relativa
de los diversos canales de reposo abierto 191.

Para que la membrana mantenga un potencial de membrana estable, ella debe


mantener separados los iones cargados en forma constante por un tiempo muy
prolongado. Esto es que el eflujo de cargas positivas (K +) debe ser balanceado por
el influjo de cargas positivas. Como hemos visto la salida pasiva de K + a través de
los canales de reposo son balanceados por la entrada pasiva de Na +, pero estos
escapes (ion leaks) deben ser opuestos pues de otra forma tarde o temprano los
gradientes de K+ y Na+ decaerían reduciendo el potencial de membrana (PM). La
disipación del PM es evitado mediante el transporte en contra de un gradiente de
potencial del K+ hacia el interior de la célula y el de Na + afuera de ella, con gasto
de ATP; acción que realiza la ATPasa Na +/K+ dependiente. El Cl- también se
mueve pasivamente a través de canales de reposo el control activo de este ión es
mantenido mediante un transportador de Cl - que mueve el ión en contra de un
gradiente de concentración; aunque sin gasto de ATP pues el transporte se hace
por transporte activo secundario a expensas de la energía almacenada por el
transporte activo de Na+ y K+ (Figura 6.9)192

6.4.3- Técnicas de identificación de los canales iónicos.

Le identificación bioquímica precisa de los diversos canales iónicos ha sido posible


gracias a dos técnicas concurrentes, la de parche con grapas (patch clamp)
desarrollada por E. Neher y D. Sakmann (1992) trabajo que les valió el Premio
Nobel de Fisiología o Medicina en 1991 y la reacción en cadena de la polimerasa
(PCR) diseñado por K.B. Mullis en 1984 193. La primera técnica consiste en el uso
de micropipetas de cristal, que se fija fuertemente a la membrana celular, aislando
de esta forma, un pequeño parche de la membrana conteniendo un canal iónico.
Si el parche es ligeramente aspirado la resistencia del parche de membrana por
un sellado del mismo. Con un ligero halado de la pipeta el parche puede ser
aislado completamente aumentándose la resolución de las mediciones biofísicas
190
Lodish et al., op. cit., p. 586; para una caracterización más detallada ver en Internet el sitio
http://fig.cox.miami.edu/~cmallery/255/255ion/K_channel.htm
191
Kandel, et al., 2000, p. 128.
192
Ibid, 131 – 132.
193
Mullis, 1990; Stryer, et al., op. cit, pp. 149 – 150.
143

(Figura 6.12). Una vez separado el canal el bioquímico puede dilucidar la


estructura primaria del canal iónico, creando a continuación una sonda de ADN
que le permita identificar el segmento del cromosoma que le produce y ampliarlo
por PCR para su estudio más refinado. Esta convergencia tecnológica ha
permitido la definición molecular del transportador protónico de las plantas
(Assmann, 2001). Una convergencia similar ha permitido la identificación,
purificación y caracterización del canal de K+ en reposo.

Figura 6.12
Técnica para aislar un canal mediante parche con grapas (patch clamp), mediante la presión sobre la
membrana de una micropipeta, y luego una ligera aspiración separa la membrana y el canal del resto de la
célula.

6.4.4- Determinación de los potenciales celulares.

Figura 6.13
Dos técnicas de mediación del potencial eléctrico de la célula. A la izquierda potencial determinado mediante
el uso de microelectrodos y a la derecha mediante la injuria.

Los potenciales son medidos gracias al uso de un par de electrodos colocados en


el exterior o el interior de las células excitables, que vía un preamplificador es
derivado a un osciloscopio. Sin embargo, si ambos electrodos son colocados
sobre la superficie del tejido o la célula excitable, no se notará diferencia de
potencial eléctrico pues ambos extremos tendrán la misma carga (Figura 6.13). En
esta última situación, para que se pueda determinar diferencia eléctrica alguna es
necesario que un extremo de la célula sea injuriada, notándose entonces la
existencia de una diferencia de potencial negativo de la parte injuriada con
144

respecto a la no-injuriada; razón por la cual se llama a este potencial, potencial de


injuria.

● ¿Por qué se observa una diferencia?

La forma moderna de determinar los biopotenciales es mediante el uso de


micropipetas de vidrio con un volumen <1 µM, llenas de una solución concentrada
de sal que sirven de electrodos. La micropipeta es insertada en el interior de la
célula, mientras que otro electrodo es colocado fuera, se supone que el diámetro
de la pipeta es los suficientemente pequeño como para no lesionar la membrana
(Figura 6.13).

Figura 6.14
Diagrama mostrando los cambios locales de polaridad del axón entre la zona estimulada (con microelectrodo
implantado) y la no estimulada.

6.8. El potencial de acción o potencial autopropagado (PA).

Cuando se estimula el axón, la permeabilidad de la membrana en la región


estimulada al ión sodio cambia, el cual entra en virtud del gradiente de
concentración, resultando que la polaridad local se invierte tornándose el interior
positivo con respecto al interior (Figura 6.14). El cambio inicial de permeabilidad
compromete solamente al ión sodio como se nota al comparar las constantes de
permeabilidad para los diversos iones presentes en el interior del axón durante el
desarrollo del potencial de acción (PA) (Cuadro 6.2).
145

CUADRO 6.2
Cambio en el coeficiente de permeabilidad del Na+ durante el desarrollo del potencial de espiga.
Coeficiente Axón en reposo Axón estimulado
Pk 1,00 1,00
PNa 0,50 20,00
PCl 0,05 0,05

El PA, rápidamente, alcanza su punto más alto de positividad interior con respecto
al exterior, punto denominado sobretiro u “over shoot”, seguida de una fase
durante la cual el potencial regresa a la situación de reposo o fase de
repolarización (Figura 6.15). En muchos casos concretos, antes de retornar al
reposo, el axolema transita por una fase en la cual la membrana se hiperpolariza,
esto es que la polaridad de la membrana aumenta la negatividad de reposo y
recibe el nombre de pospotencial negativo o post-hiperpolarización (Figura 6.19)
194
.

Figura 6.15
Representación diagramático del potencial de acción de una célula excitable obtenida luego de la
implantación de un microelectrodo intracelular.

El potencial de acción (PA) es el cambio momentáneo del potencial eléctrico, entre


la región estimulada y la no-estimulada de la célula. Este potencial tiene la
propiedad de desplazarse de un extremo al otro de la célula estimulada de allí que
también se le conozca con el nombra de potencial propagado; en tanto que se
desplaza a la misma magnitud y velocidad se le denomina potencial
autopropagado. Mientras que, por el tipo de trazo que describe en el osciloscopio,
se le conoce como potencial de espiga. Este potencial es característico de las
células nerviosas y musculares, aunque también se ha descrito en plantas
194
Mora y Sanguinetti, 1996.
146

superiores como la mimosa y en células libres como el óvulo durante la


fecundación.

No todos los estímulos fisiológicos o experimentales producen PA, es necesario


que los mismos alcancen una intensidad y duración capaz de desencadenarlos
llamado potencial umbral. En electrofisiología el término umbral se aplica a la
magnitud absoluta del potencial de membrana a la cual el PA se inicia o a la
magnitud de despolarización que el potencial de reposo requiere alcanzar para
iniciar el potencial de acción195. El umbral, sin embargo varía de célula a célula.

Una fibra nerviosa o muscular específica, para un potencial umbral dado o


responde o no responde y si responde lo hace maximalmente, a esta propiedad se
le conoce con el nombre de ley del todo o nada.

6.8.1- Causas del potencial de acción

Figura 6.16
Variación sucesiva en la conductancia para los iones sodio, potasio y calcio respectivamente; las cuales se
pueden calcular a partir del tiempo y la amplitud en conductancia del ión sometido a grapas de voltaje (voltaje-
clamp)196.

La causa del potencial de acción fue dilucidada gracias a los trabajos iniciales de
Kenneth Cole y Howard Curtis en 1939, quienes observaron que el axón gigante
del calamar la conductancia iónica aumenta durante el potencial de acción 197. Más
tarde, Alan Hodgkin y Bernard Katz (1949) 198 demostraron que la amplitud del PA
disminuye si se disminuye la concentración externa de Na +, lo cual confirma,

195
También se le denomina umbral absoluto, ver Brinley, 1974 y Mora y Sanguinetti, ibid.
196
Para una descripción detallada ver Kandel, et al., op. cit. pp. 152 – 154.
197
Cole y Curtis, 1939.
198
Ambos Premio Nobel en Fisiología o Medicina en 1963 y 1970, respectivamente.
147

independientemente, que el aumento del potencial se debe principalmente a un


aumento en la permeabilidad al Na + ión sodio, seguido de un aumento en la
permeabilidad al K+. En sentido propio, la membrana aumenta la conductancia al
sodio y al potasio respectivamente (Figura 6.16)

Hoy sabemos que los cambios en conductancia son debidos a la apertura de


canales voltaje dependiente, de la célula excitable. Se llaman así a aquellos
canales que se abren en respuesta a cambios en el voltaje de la membrana del
axón. Se han identificado, en mamíferos, cuatro canales voltaje dependiente para
el K+ (canales de K+ de activación lenta, los canales de K + activados por Ca++, los
canales de K+ tipo A y los canales de K+ tipo M), cinco de Ca++, cuando menos un
canal voltaje dependiente de Cl- y dos o más de Na+. Esta enorme variedad de
canales, contrasta con los solo dos presentes en el axón gigante del calamar. La
diversidad puede ser adscrita a la mayor habilidad de procesamiento de la
información que presentan los mamíferos.

Figura 6.17
Variaciones en permeabilidad a los diferentes iones debidas a la apertura y cierre de los canales de voltaje al
Na+, K+ y Cl- durante el potencial de acción de la fibra nerviosa.

El descubrimiento e identificación de estos canales permite explicar en términos


moleculares las características fisiológicas del PA. En efecto, cuando la membrana
es estimulada eléctricamente con un estímulo de intensidad umbral, la magnitud
del mismo es capaz de abrir todos los canales de Na+ voltaje dependiente. Como
la concentración de Na+ externa es mayor que la interior, entra sodio, tornando el
interior positivo con respecto al exterior (despolarización), hasta alcanzar el nivel
de sobretiro. Durante sobretiro se cierran los canales de Na + y la magnitud del
148

potencial alcanzado abre los canales de K +, Ca++ y Cl-. La apertura de los canales
voltaje dependiente de Na +, K+, Ca++ y Cl- secuencialmente, da cuenta de las
variaciones en conductancia de los iones respectivos (Figura 6.19). La apertura de
los canales de voltaje de K+, Ca++ y Cl- tiene como efecto neto que salga K+, entren
Ca++ y Cl- en respuesta a sus respectivos gradientes de concentración. Las
variaciones de permeabilidad y las respuestas pasivas que comportan son
descritas en la Figura 6.17.

6.8.2- Papel del Calcio durante el potencial de acción.

Como se anotó arriba, la magnitud que la corriente iónica de sodio eleva el voltaje
a niveles susceptibles de abrir los canales de voltaje de Ca ++, entrando calcio en
virtud a su gradiente de concentración. Este ión, a diferencia de los de K+, Na+ y
Cl-, cambia la concentración interna de Ca++. Esta diferencia es debido, en parte, a
que la concentración intracitoplasmática de Ca ++ es muy baja con un valor de 10 -7
M, esto es varios órdenes de magnitud menos concentrado que el exterior de
manera que su entrada a la célula aunque pequeña en valor absoluto es enorme
en términos relativos.

Figura 6.18
La excitabilidad de la membrana varía durante el ciclo de actividad nerviosa, durante la fase de
despolarización la membrana no responde a ningún estímulo adicional (período refractario absoluto), mientras
que durante repolarización responde aunque de forma disminuida (período refractario relativo).

La entrada masiva y significativa de Ca ++ tiene dos efectos. Primero, su aumento


estimula los canales de K+ activados por Ca++, lo cual aumenta la entrada de
potasio e inactiva los canales de Ca++, efectos ambos, que aceleran la
repolarización de la membrana. Y segundo, contribuyendo a repolarizar la
membrana mediante la entrada de iones positivos.
149

6.8.3- Ciclo de actividad de la fibra.

Durante la fase de despolarización la fibra es incapaz de responder a un estímulo


adicional, propiedad conocida como período refractario absoluto. En cambio
durante fase de repolarización la fibra puede responder a estímulos, siempre y
cuando sean de alta intensidad (Figura 6.18).

6.8.4- Propagación del potencial.

Una vez que el potencial en un sitio específico del axón está decayendo, durante
la fase de repolarización, activa la membrana adyacente, despolarizándola,
reiniciando el ciclo un poco más adelante. Esta onda, a su vez, despolariza la
porción de la membrana subsiguiente como una onda de despolarización que viaja
a todo lo largo del axón sin variar su magnitud ni su velocidad, en fin viaja como un
potencial autopropagado (Figura 6.14).

Dado que los canales de voltaje de Na + permanecen inactivo durante algunos


milisegundos (período refractario absoluto), después de su apertura. Los canales
ubicados detrás de la onda de despolarización no se pueden abrir asegurando así
que la propagación sigue una dirección y limitan el número de PA que una fibra
puede conducir en la unidad de tiempo (frecuencia de PA).

Figura 6.19
Variación velocidad de conducción de la fibra nerviosa a medida que aumenta el diámetro.

6.8.5- Velocidad de conducción nerviosa.

La fibra nerviosa conduce a una velocidad cuyo orden de magnitud es de m/seg;


aunque puede variar de organismo a organismo y de célula a célula en un ámbito
que fluctúa entre 0,121 – 100 m/seg.

La variación en velocidad de conducción puede deberse a factores diversos, entre


los cuales podemos mencionar:
150

6.8.4.1- El diámetro de la fibra, en general a mayor diámetro mayor velocidad de


conducción (Figura 6.19). La resistencia de la membrana, como se notará con
claridad más adelante, depende del radio del axón, pues a mayor radio menor
resistencia debido a un aumento del área que por ende incremente el número de
canales por unidad de área de membrana.

6.8.4.2- Presencia de mielina.

La presencia o no de mielina también es un factor importante, pues cuando la fibra


está mielinizada el impulso se transmite de forma saltatoria, es decir de un nódulo
de Ranvier a otro (Figura 6.22).

6.8.6.- Potenciales de acción monofásicos y bifásicos.

Figura 6.20
Preparado para estudiar la respuesta eléctrica del nervio.

Cuando se estudia la actividad eléctrica de un nervio mediante el uso de un


osciloscopio, no se recoge la actividad eléctrica unineuronal sino la actividad
colectiva de las fibras presentes en el nervio. Para tal propósito se coloca el nervio
en una cámara húmeda y los electrodos superficiales se derivan a un
preamplificador y de allí al osciloscopio (Figura 6.20)

En una preparación como la arriba descrita cuando el PA llega al primer electrodo


de registro (R1), este se torna negativo con respecto a (R2) que se representa
convencionalmente en el osciloscopio como una onda de deflexión hacia arriba.
Una vez pasado el impulso ambos electrodos regresan a potenciales positivos y
por ende no hay diferencia entre ellos. Cuando el evento estimulador alcanza (R2),
ahora éste es electronegativo con respecto a (R1) que se representa como una
deflexión hacia abajo, constituyendo un potencial bifásico (Figura 6.21).
151

Figura 6.21
Despliegue de los potenciales monofásicos y bifásicos de acción de un nervio. Explicación en el texto.

6.8.7.- Potenciales de acción compuestos.

Los nervios mixtos, tales como los nervios somáticos, están formados por fibras de
diámetro diverso, de manera que a altas intensidades de estimulación producen
potenciales compuestos. Estos se deben a la suma de potenciales de fibras de
neuronas de grupo A, que comprende las fibras de los subgrupos , , , , cada
una con diámetro mayor que la anterior (Figura 6.22 y Cuadro 6.3) 199

Figura 6.22
Potencial de acción compuesto de un nervio de mamífero.

Se define sinapsis (gr. unión)200 como la unión funcional entre dos neuronas, o
entre una neurona y el músculo. La sinapsis no es pues, un contacto físico, toda
vez que la microscopia electrónica ha revelado que entre dos neuronas existe un
espacio que fluctúa entre 3,5 – 40 nm, llamado espacio sináptico (Figura 6.23).

Cuadro 6.3

199
Houssay, 1973 pp. 941 – 942; Mountcastle, 1974, pp.72 – 75; Selkurt, 1976, p. 42.
200
El término sinapsis fue introducido por Ch. Sherrington a comienzos del siglo 20.
152

Propiedades de conducción de algunas fibras nerviosas de mamíferos.


  
Diámetro (µm) 12 - 22 5 - 12 2-5
Velocidad de conducción (m/seg) 5 - 120 3 - 15

6.7.- Sinapsis.

La sinapsis es una unión especializada entre la telodendria de un axón y la


dendrita de una neurona adyacente, aunque la sinapsis puede ser variadas formas
(ver la clasificación más adelante). La telodendria suele prestar una terminación
dilatada, el botón sináptico o terminación presináptica. El botón posee en su
interior unidades membranosas, las vesículas sinápticas, cuyo diámetro fluctúa
entre 10 – 50 nm (promedio de 20 nm). Las vesículas están llenas de miles de
moléculas de transmisores específicos (neurotransmisores).

Figura 6.23
Sinapsis de la corteza cerebral mostrando dos botones sinápticos (S 1 y S2) y la dendrita (Den) de una célula
estrellada. Los botones se encuentran llenos de vesículas sinápticas.

La neurona en promedio establece 1000 conexiones sinápticas y pude recibir


tantas como 10,000 sinapsis. Las neuronas pueden establecer dos tipos
funcionales de sinapsis, la sinapsis eléctrica y la sinapsis química. La primera, la
eléctrica, en el cerebro, es de transmisión rápida, estereotipada y no puede
promover grandes cambios en las propiedades eléctricas de la membrana
postsináptica. La sinopsis química, por otra parte, es capaz de producir respuestas
muy variables y cambios en la actividad eléctrica de la neurona postsináptica 201.
Efecto desencadenado por la liberación en el espacio sináptico de una sustancia
química que se une específicamente a un receptor de la membrana postsináptica
llamado neurotransmisor.

201
Kandel, et al., op. cit., p. 174.
153

Las vesículas sinápticas se agrupan en una región de la membrana presináptica


especializada en su liberación llamada zona activa (Figura 6.23). Para la liberación
del neurotransmisor es necesario que el PA alcance el botón sináptico, donde
desencadena la activación del canal iónico de Ca ++ voltaje dependiente
promoviendo así la entrada de gracias a un gradiente de concentración. El
incremento intracelular de Ca ++ causa la fusión de las vesículas a la membrana
presináptica; liberándose por exocitosis el neurotransmisor al espacio sináptico. El
neurotransmisor viaja a todo lo largo del espacio sináptico hasta alcanzar sus
receptores en la membrana postsináptica. La unión entre el receptor y el
neurotransmisor provoca la apertura de canales de Na+ químico dependiente;
resultando en un influjo de este ión, despolarizando la membrana (Figura 6.24).

Figura 6.24
Componentes morfológicos de la sinapsis y la transmisión química.

6.7.1- Neurotransmisores.

Se define neurotransmisor como aquella sustancia liberada al espacio sináptico


por una neurona y que afecta la célula postsináptica, ya sea otra neurona o una
célula efectora, tal como un músculo, una glándula. Típicamente los
neurotransmisores suelen ser agrupados en dos clases discretas de sustancias,
moléculas de pequeño tamaño y péptidos neuroactivos. Los primeros son
almacenados en vesículas pequeñas y translúcidas, liberadas en las zonas activas
con la participación activa del Ca ++ (Figura 6.23). Los neuropéptidos, en cambio,
son almacenados vesículas grandes, conteniendo material denso al microscopio
electrónico. Las neuronas pueden tener ambos tipos de vesículas, aunque en
proporción y pueden contener, en su interior adicionalmente, neurotransmisores
de pequeño tamaño diversa. Las vesículas pequeñas son especialmente
abundantes en aquellas neuronas que liberan acetil colina, glutamina, GABA y
glicina; mientras que las grandes vesículas aparecen en neuronas
catecolaminérgicas y seratoninérgicas. De acuerdo con el tipo de neurotransmisor
154

que libera una neurona específica es costumbre denominarla de acuerdo con la


sustancia química en colinérgica, gabaminérgica, etcétera.

El neurotransmisor actúa directa o indirectamente sobe la membrana


postsináptica. Los efectos directos se realizan mediante la unión del
neurotransmisor a un canal iónico químico o ligando dependiente. El canal quicio
dependiente es una proteína intrínseca de la membrana postsináptica que existe
en dos estados conformacionales, abierto o cerrado; estados que dependen de la
unión o no con el ligando, respectivamente Este tipo de receptores han sido
denominados receptores ionotrópicos (Figura 6.24).

Los efectos indirectos los realizan los neuropéptidos, los cuales realizan
actividades moduladoras de allí que se les denomine neuromoduladores. Los
transmisores neuropeptídicos se unen a receptores postsinápticos que ejercen su
efecto alterando reacciones metabólicas intracelulares; razón por la cual se llama
receptores metabotrópicos. Estos receptores ejercen su efecto a través del
sistema del segundo mensajero como el AMPc202.

Los receptores ionotrópicos y metabotrópicos difieren funcionalmente. Los


ionotrópicos median las respuestas sinápticas rápidas, con duraciones de algunos
milisegundos (actos reflejos). Mientras que los receptores metabotrópicos
producen respuestas sinápticas lentas con duraciones de segundos o minutos.
Estas respuestas generalmente alterando la excitabilidad de la neurona
postsináptica, modulando de esta forma la respuesta conductual.

6.7.2- Características de la sinapsis.

A continuación se enumeran las propiedades funcionales de la sinapsis en forma


de características203:

6.7.2.1- La sinopsis presenta retardo.

En cuanto a la duración del retardo se distingue uno de corta duración con una
magnitud de < 0,1 mseg y otro de mayor duración 0,3 – 10 mseg. Los tiempos
mencionados reflejan el retardo del PA en saltar de una neurona a la otra. En la
transmisión eléctrica el espacio sináptico es estrecho gracias a la presencia de
uniones en hendidura o de comunicación (ver sección 6.4.6.1). Este tipo de
canales conectan la membrana pre y postsinápticas reduciendo de esta forma la
resistencia eléctrica (aumentando la conductancia) entre las dos células. En otros
términos, los potenciales electrotónicos de la neurona presináptica no encuentran
oposición eléctrica (resistencia) para su transmisión a la neurona adyacente,
reduciendo así el retardo sináptico. El término retardo hace referencia al tiempo
que tarda en desarrollarse el PA en la neurona postsináptica luego de haber
alcanzado el botón sináptico de la neurona presináptica (Figura 6.24).

202
Kandel, op. cit., pp. 183 - 186
203
Berne y Levy, op. cit., pp. 39 - 51.
155

Figura 6.24
Preparación para determinar el retardo sináptico (A). Retardo sináptico, sinapsis eléctrica (B). Diferencias
entre la sinapsis eléctrica y la química (C)

En la transmisión química, la neurona presináptica libera un neurotransmisor que


debe saltar el espacio sináptico y alcanzar la membrana postsináptica
desencadenando el desarrollo de potencial en la neurona adyacente. La
transmisión química, entonces, transita por dos pasos, el de transmisión y el de
recepción, los cuales son largos en comparación con la transmisión eléctrica, que
es casi instantánea.

La transmisión eléctrica, adicionalmente, solo manda ondas de despolarización, la


química puede desencadenar post potenciales estimuladores o potenciales de
estimulación postsinápticos (PEPS) o post potenciales inhibidores o potenciales de
inhibición postsinápticos (PIPS). El que se desarrolle uno u otro depende del
neurotransmisor y del receptor postsináptico (Figura 6.25).

Los PEPS estimulan la neurona postsináptica pues la despolarizan, en cambio los


PIPS la inhiben pues hiperpolarizan la neurona postsináptica.
156

Figura 6.25
Potencial de inhibición postsináptica (PIP) y de estimulación postsináptica (PEP) registrados con un
microelectrodo implantado en una motoneurona medular de un gato. Hay un total de 40 trazos superpuestos.

6.7.2.2- La sinapsis es unidireccional.

La dirección de la transmisión sináptica es siempre ortodrómica, pues va de la


telodendria de la neurona presináptica hacia la zona dendrítica de la neurona
postsináptica, nunca en sentido inverso. Esta direccionalidad de la transmisión del
impulso nervioso está asegurada por el hecho de que las membranas de ambas
neuronas son molecularmente distintas; una la presináptica, libera
neurotransmisores; mientras que la otra, la postsináptica, posee los receptores
apropiados para el neurotransmisor. Esta diferencia tiene manifestaciones
morfológicas muy características, toda vez que al microscopio electrónico de
transmisión la membrana presináptica muestra vesículas y la postsináptica una
alta densidad al microscopio de transmisión debajo de la membrana

Figura 6.25
Diagrama mostrando la direccionalidad ortodrómica de la sinapsis y la prohibición del trasiego de la
información en sentido inverso o antidrómico.

6.7.2.3- La sinapsis presenta facilitación.

Cuando impulsos sucesivos producen un incremento del potencial postsináptico


local que el precedente, en lugar de solamente sumársele, se dice que ha ocurrido
157

facilitación. Este fenómeno parece deberse a la acumulación sucesiva de


neurotransmisores204 (Figura 6.26)

6.7.2.4- La sinapsis es sensible al efecto de drogas anestésicos y anoxia.

Existen drogas capaces de inhibir y excitar las uniones sinápticas, por ejemplo la
cloropromacina y los antipsicóticos relacionados inhiben los receptores del
neurotransmisor dopamina de las membranas postsinápticas disminuyendo los
efectos de la dopamina. Los neuromoduladores opiáceos endógenos tales como la
-endorfina, las encefalinas, y las dinorfinas, se unen específicamente a
receptores postsinápticos denominados receptores opiáceos. Los compuestos
derivados del jugo de la dormidera reciben el nombre de opiáceos y pueden unirse
a los receptores antes mencionados. Finalmente, los receptores GABAérgicos se
unen a dos clases de fármacos, las benzodiacepinas y los barbitúricos, estas
sustancias son utilizadas como ansiolíticas y relajantes.

Los anestésicos generales prolongan el tiempo de apertura de los canales de cloro


receptores de GABA, prolongando los efectos inhibidores (PIP) sobre las neuronas
postsinápticas, en las terminaciones GABAérgicas.

La falta de oxígeno bloquea la sinopsis y venenos como el curare inhiben la unión


neuromuscular uniéndose específicamente al canal iónico de Na + químico
dependiente de la membrana postsináptica.

Figura 6.26
Facilitación causada por la liberación de neurotransmisor al espacio sináptico. (A) Cuando el intervalo entre
estímulos es relativamente grande se producen respuestas postsinápticas similares. (B) cuando se
disminuyen los intervalos (se incrementa la frecuencia de estimulación) el impulso postsináptico subsiguiente
se incrementa.

204
Cifrado en Davson, 1960; 573; Fernández, 1998, p. 162; Berne y Levy, op. cit., p. 44.
158

6.7.2.5- La sinapsis presenta divergencia y convergencia

Una neurona puede unirse a una fibra nerviosa y de normal a una célula muscular
este tipo de sinapsis se denomina uno a uno. Aunque es más frecuente que una
célula postsináptica reciba múltiples conexiones sinápticas o convergencia
(sinapsis de mucho a uno). Por último una neurona presináptica puede hacer
sinapsis con muchas neuronas postsinápticas o divergencia (Figura 6.27).

Figura 6.27
Diagrama mostrando la estructura morfológica de una sinapsis convergente (izquierda) y otra divergente
(derecha)

6.7.2.6- La sinapsis presenta sumación temporal y espacial.

Se dice que hay sumación temporal cuando una única neurona presináptica
descarga en sucesión rápida (alta frecuencia), trae como resultado la
superposición de potenciales sinápticos superpuestos, que si alcanzan el umbral
disparan el PA en la neurona postsináptica.

La sumación espacial, en cambio, se produce cuando dos o más neuronas que


alcanzan la neurona postsináptica en dendritas separadas, descargan
simultáneamente. Los potenciales se suman si el neurotransmisor desencadena
PEPs o se cancelan si uno desencadena un PEP y el otro un PIP (Figura 6.28)
La sumación en ambos casos es debida a la acumulación de una mayor cantidad
de neurotransmisores en el espacio sináptico.

6.7.2.7- La sinapsis presenta fatiga.

Cuando una sinopsis es estimulada repetidamente durante un tiempo largo, se


alcanza un punto al cual la respuesta postsináptica se disminuye, fenómeno
descrito como fatiga sináptica. La fatiga no es debida a que la capacidad de
respuesta de la membrana postsináptica ha disminuido, pues ésta responde
adecuadamente cuando es estimulada con el neurotransmisor correspondiente
159

mediante el uso de una micropipeta. La fatiga es causada por la depleción del


neurotransmisor de las vesículas sinápticas.

Figura 6.28
Sumación temporal de una neurona postsináptica inervada por una neurona (A). Sumación espacial de una
neurona postsináptica inervada simultáneamente por dos neuronas que descargan PA al mismo tiempo. (B).

6.7.6.- Tipos de sinapsis (Figura 6.29).

De acuerdo con las conexiones que una neurona hace con las terminaciones de
otra las sinapsis pueden ser:

6.7.6.1.- Sinapsis axodendríticas, cuando la comunicación se establece entre la


terminación axonal (telodendria) de la neurona presináptica y las dendritas de de
la neurona postsináptica.

6.7.6.2.- Sinapsis axosomática, entre la telodendria y el cuerpo celular de la


neurona.

6.7.6.6.- Sinapsis axoaxónica, se establece entre axones de dos neuronas.

6.7.6.4.- Sinapsis dendodendrítica, aquella que comprende dendritas entre sí.

6.7.6.4.- Placa terminal o unión neuromuscular, la sinapsis entre una neurona y


una fibra muscular.

6.8.- Propiedades pasivas de la membrana celular.

Un potencial con una magnitud inferior al umbral no desencadena un potencial e


acción pues su magnitud es incapaz de abrir los canales voltaje regulado. A los
cambios en el potencial de membrana que no abren los canales regulados se les
denomina potenciales electrotónicos. Estos potenciales de membrana pueden
fluctuar dentro de cierto ámbito de voltaje y constituyen lo que se denomina
respuestas pasivas de la membrana. Estas respuestas pasivas son susceptibles
160

de abrir algunos canales de sodio permitiendo la entrada de algunos de estos


iones lo cual hará el interior ligeramente positivo o menos negativo, esto es, que
despolariza ligeramente la membrana. Si por otra parte, abre los canales para el
potasio entonces el exterior de la membrana se hace más electro positiva o se
hiperpolariza (Figura 6.30).

Figura 6.29
Diagrama de la clasificación morfológica de las sinapsis de acuerdo con el tipo de prolongación axonal con la
cual hacen contacto.

El estudio de los potenciales electrotónicos permite evidenciar las propiedad


pasivas o de cable de la membrana excitable. Para tal propósito, se implanta, en
una fibra nerviosa, un microelectrodo conectado a una batería y se mantiene el
voltaje, digamos a -40 mV. En el punto de implante la membrana se despolariza es
decir hay un exceso de cargas positivas en el interior en particular K +. Estos iones
tenderán a desplazarse en direcciones opuestas al punto de estimulación
despolarizando las zonas adyacentes. Al proceso de despolarización así originado
se le denomina difusión pasiva de la despolarización. Igualmente se puede inducir
carga negativa aumentando la polaridad de la membrana o hiperpolarizándola.
Mientras más se aumenta la corriente negativa o positiva mayor es la
despolarización o hiperpolarización. La relación entre la corriente y el voltaje
define la resistencia de entrada (Rin) de la neurona. Mucho de la conducta de
variación de los potenciales de despolarización e hiperpolarización puede ser
descrita por un circuito equivalente constituido por resistores, capacitores y
baterías (Figura 6.31).
161

Figura 6.30
Potenciales electrotónicos producidos cuando se hace fluir una corriente de potencial positivo o negativo
subumbral

Para entender el modelo de circuito equivalente, la fibra muscular y nerviosa


deben ser consideradas como formando un tubo conductor con el eje
representando el citoplasma (axoplasma o sarcoplasma), separado de un medio
conductor externo por una membrana poco conductora (con alta resistencia), el
cual es análogo a un cable de cobre envuelto en una cubierta aislador plástico.

Figura 6.31 (14)


Circuito equivalente de una porción pequeña de la membrana neuronal (axoplasma) utilizada para explicar el
efecto la capacitancia de la membrana sobre el cambio de potencial de la membrana en respuesta al flujo de
la corriente. Cm capacitancia de la membrana. Em potencial de la membrana. Rm resistencia eléctrica de la
membrana. Ri resistencia axial. Im corriente total fluyendo por la membrana. Ii corriente iónica de la membrana.
Ic corriente capacitiva de la membrana.

En donde el citoplasma presenta una resistencia axial (R i) del citoplasma. La


membrana esta compuesta por una resistencia (R m) y un capacitor (Cm) en
paralelo. La membrana actúa como una resistencia debido a los canales
conductores de iones, pues la resistencia dependerá del número de canales de
reposo por unidad de área de membrana 205. Así que mientras más grande sea una
neurona mayor será el área superficial expuesta y por consiguiente tendrá un
mayor número de canales lo que disminuirá su resistencia. La capacitancia en

Por definición la resistencia de la membrana es el recíproco de la conductancia (gm) a los iones por esa
205

misma membrana por consiguiente Rm = 1/gm, razón molecular por la cual, a mayor conductancia de iones
menor es la resistencia.
162

cambio depende de la presencia de fosfolípidos arreglados en bicapa presentes


en la membrana.

Para entender las propiedades de capacitor de la membrana debemos recordar


que el voltaje a través de un capacitor es proporcional a la carga almacenada en él
que es igual a:

(25)

Donde ΔQ es el cambio de la carga en coulombs, ΔV es el cambio de voltaje y C


la capacitancia en faradios. Entonces, para alterar le voltaje (ΔV) de la membrana,
la carga (ΔQ) ha de ser añadida o sustraída del capacitor. Como el cambio de
carga (ΔQ) es el resultado del flujo de corriente a través del capacitor (Ic) y puesto
que la corriente es el flujo de carga en la unidad del tiempo (Ic = ΔQ/Δt). Entonces
se puede calcular se puede calcular el cambio de voltaje a través del capacitor
como una función de la corriente y el tiempo en que la corriente fluye (Δt)
mediante la ecuación (26)

(26)

De acuerdo con (26) el voltaje a través del capacitor continúa aumentando con el
tiempo mientras se aplique un pulso de corriente. En la membrana, sin embargo,
el potencial electrotónico desaparece al poco tiempo, como muestra la figura 6.30,
pues la membrana actúa como un resistor y un capacitor en paralelo. Es notorio
allí, que la corriente que fluye por la membrana (Im) a través de los canales iónicos
(resistor) o por la doble capa fosfolipídica (capacitor). A la primera se le denomina
corriente iónica de membrana (Ii) y a la segunda corriente capacitiva de la
membrana. Así, una corriente capacitiva que fluye hacia el exterior agrega cargas
positiva al interior mientras se las quita al exterior. Y la corriente total que fluye por
la membrana será igual a la suma de la corriente capacitiva e iónica:

(27)

Ahora bien, si la membrana solo tuviera propiedades resistivas un solo pulso de


corriente a su a través debería cambiar su potencial instantáneamente. Mientras
que, si tuviera solo propiedades capacitivas el potencial de membrana debería
cambiar linealmente con el tiempo en respuesta al cambio de un solo pulso de
corriente (Figura 6.31). Esto no ocurre así pues la membrana tiene tanto
propiedades capacitivas como resistivas en paralelo 206.
206
Para una discusión detallada ver: Coro, op. cit. pp. 138 – 141 y Kandel, et al., op. cit. pp. 140 – 149.
163

Figura 6.32 (15)


Disminución de la tasa de cambio del potencial de membrana por la capacitancia de ella. Arriba. La respuesta
del potencial de membrana con el aumento de un solo pulso de corriente. Abajo. Muestra la corriente total de
la membrana (Im) y sus componentes (Im = Ii + Ic) iónicos (Ii) y capacitivos (Ic) en relación con la corriente del
pulso. a. Corriente puramente resistiva. b. Corriente puramente capacitiva

Se puede explicar el aumento de la corriente que se describe en la figura 6.14,


como que la resistencia y la capacitancia están en paralelo, de manera que la
suma del voltaje que fluye a través de cada componente debe ser igual al
potencial de membrana (Im = Ii + Ic). Si por ejemplo, comenzáramos con un
potencial de 0 mV a t = 0 y aplicamos un pulso de corriente de magnitud Im,
inicialmente no fluirá corriente ni por la resistencia ni el capacitor pues V = 0 mV.
Seguidamente, y de acuerdo con la ley de Ohm (Ii = V/ Ri), no fluirá corriente por la
resistencia (pues el V = 0 mV), de manera que toda la corriente fluirá por el
capacitor, pues Ii = 0; entonces Im = Ic. Como resultado de la elevada corriente
capacitiva inicial, el potencial de membrana se hace positivo.

Posteriormente, a medida que Vm aumenta, la diferencia de voltaje fluye a través


del capacitor y la resistencia. Como el potencial de la membrana se hace más
positivo, más corriente fluye a lo largo de la resistencia y menos por el capacitor,
pues Im = Ii + Ic. Como resultado el potencial de membrana crece más lentamente
hasta que toda la corriente fluye por la resistencia Im = Ii. En este punto la corriente
capacitiva es = 0 y cumple con la ecuación (26). Ahora la corriente total de
membrana (Im) es igual a cero, de manera que la corriente positiva fluye a lo largo
de la resistencia nuevamente al interior de la célula con una corriente capacitiva
igual y opuesta (Im = - Ic). Si no se continúa aplicando corriente, la carga del
capacitor se disipa volviendo el potencial a cero.

El incremento de cambio de potencial puede ser descrito por la siguiente ecuación:


164

(28)

Donde e tiene un valor próximo a 2,72 (base del sistema de logaritmos naturales)
y  es la constante de tiempo y Im Ri el producto la salida de resistencia y
capacitancia. La constante de tiempo puede determinarse experimentalmente a
partir de imágenes del osciloscopio como la figura 6.32 y se la define como el
tiempo requerido para que el potencial de membrana alcance el 65% de su valor
estable.

Figura 6.32 (16)


a y b. Comparación entre la propagación de una señal eléctrica en un alambre de cobre y un axón. b y c.
Representación de un axón como un serie de circuitos equivalentes en tándem.

La asunción implícita en la descripción hasta aquí realizada se adecua bien a un


sistema celular esférico, no obstante, como ya se indicó con anterioridad, los
axones, las dendritas y las fibras musculares son de forma cilíndrica. En un
sistema cilíndrico, el voltaje subumbral desciende con el aumento en la distancia
desde su punto de origen. Para explicar esta conducta, el axón puede ser descrito
como un cilindro lleno de fluido, dividido por circuitos equivalentes de unidades de
igual longitud (Figura 6.32), arreglo el cual tiene las mismas propiedades eléctricas
cuantitativas de un alambre de cobre aunque guardan entra sí algunas diferencias
que señalamos a continuación:

6.8.1- El axoplasma es 107 veces peor conductor que un alambre, en virtud de que
la densidad de los portadores de carga, los iones, es menor que en un alambre de
cobre representada por electrones (ē).

6.8.2- La membrana eléctrica aunque relativamente impermeable no es un aislante


perfecto, pues tiene un valor de conductancia iónica. Razón, esta última, que
explica el por qué que la corriente eléctrica se vaya perdiendo gradualmente a
medida que los iones se “fugan” por los canales de reposo.

6.8.3- El pequeño diámetro de los axones (0.1 – 20 μm) limita la transmisión de


corriente debido a la alta resistencia longitudinal (Rin) (Figura 6.32).
165

Si se implanta un microelectrodo en un axón y se conecta a una batería


despolarizando la membrana, manteniéndose el voltaje, se notará que la corriente
positiva fluye a ambos lados del punto de estimulación (Figura 6.33) y que en
dicho punto, el interior de la membrana tendrá un exceso de cargas positivas,
incluyendo K+. En fin, hay una corriente de despolarización en las secciones
adyacentes al punto de estimulación que recibe el nombre de corriente pasiva de
despolarización. A diferencia del potencial de acción, la difusión pasiva se
conduce en ambas direcciones y su magnitud decrece con la distancia del punto
de origen; debido entre otras cosas, a que los cationes en exceso regresan, a
través de membrana al exterior por los poros en reposo. El decaimiento del voltaje
para un punto específico (x) del cilindro es exponencial y esta dado por la
ecuación (29).

(29)

Donde λ es la constante de longitud, x es la distancia del punto de aplicación de la


corriente y ΔV0 es el cambio de potencial de membrana producido por el flujo de
corriente en el sitio de inyección (x = 0). La constante de longitud (λ) es definida
entonces, como la distancia a lo largo del axón hasta el sitio donde el ΔV m ha
decaído en un 37% de su valor original y esta determinado por la ecuación (30)

(30)

De (30) se deduce que cuando mejor se el aislante (mayor R m) y las propiedades


conductoras del cilindro interior (menor R i), mayor es constante de longitud de la
dendrita. Esto significa que la corriente se puede desplegar a lo largo del cilindro
conductor antes de “fugarse” a través de la membrana.
166

Figura 6.33 (17)


Respuesta pasiva en voltaje del axón mostrando el decaimiento del mismo debido a su conducción
electrotónica. La corriente inyectada a un axón mediante microelectrodos sigue un camino de mínima
resistencia al atravesar la membrana.

Para entender el efecto antes descrito debemos entender el efecto que tiene el
diámetro de la fibra sobre Rm y Ri. Primero, Como la resistencia de la membrana
(Rm) depende del número de canales de reposo por unidad de área y al área de la
membrana. Puesto que Rm esta inversamente relacionado con el número de
canales (esto es con la conductancia) por el área y el área de un cilindro depende
de la circunferencia, Rm esta dado por la ecuación

(31)

Donde Re es la resistencia específica de una unidad de área de membrana (en


unidades Ω•cm2) y Rm tiene unidades de Ω•cm.

Segundo como Ri, que también se relaciona con el radio, tiene un valor que
depende de las propiedades resistivas intrínsecas del axoplasma que se expresa
por la resistencia específica ρ de 1 cm3 de axoplasma (Ω•cm) y el área de sección
transversal, que determina el volumen por unidad de longitud y viene dada por
(32).
167

(32)

Como se dijo anteriormente el diámetro del axón varía entre0.1 – 20 μm, estas
variaciones controlan la eficiencia de la conducción neuronal de señales pues el
diámetro determina la constante de longitud. Para neuronas con las mismas
propiedades intrínsecas, es decir con valores de R e y ρ similares, a mayor
diámetro del axón mayor la constante de longitud, porque R e/ρ está directamente
relacionado con el radio (ecuaciones 31 y 32). Por consiguiente la constante de
longitud puede ser expresada en términos de las propiedades intrínsecas de R e y
ρ como:

(33)

Entonces la constante de longitud es proporcional a la raíz cuadrada del radio del


axón. Por consiguiente mientras más grueso sea el axón, mayor es la constante
de longitud y por tanto transmitirá la señal electrotónica a mayor distancia (Figura
6.32).
168

CAPÍTULO 7

Contracción muscular

7. Función de los músculos

7.0.1- Locomoción.

La función de los músculos es permitir la locomoción, es decir, la traslación del


cuerpo de un lugar a otro o de parte del organismo con respecto al resto del
cuerpo o al medio. También permite mantener la posición en contra de la fuerza
de gravedad.

7.0.2.- Mantenimiento de la postura.

En los vertebrados, la postura es mantenida activamente debido al conjunto de


contracciones musculares que obedecen a reflejos coordinados. Habitualmente no
hay conciencia de estas acciones, pues en vertebrados, por ejemplo, después de
decorticación completa presentan posturas normales. Sin embargo, a mayor
encefalización, mayor es la integración central de la postura. Algunos músculos
antigravitatorios207, como los extensores de los miembros son más importantes
para el mantenimiento de la postura corporal.

La postura está edificada sobre el tono muscular, que es el estado de contracción


muscular refleja constante (tétano parcial), mantenido por impulsos nerviosos
asincrónicos originados en los motoneuronas y se debe principalmente al reflejo
obtenido por estiramiento o reflejo miotático 208.

7.0.6.- Los músculos además realizan funciones asociadas a la vocalización,


digestión, excreción y reproducción.

Estas diversas funciones son llevadas a cabo por varios tipos de músculos que a
pesar de sus diferencias tienen en común la propiedad de contractilidad.

7.1.-Clasificación de los músculos.

Histológicamente se distinguen tres tipos musculares a saber, esquelético,


cardíaco y liso; sin embargo, para los efectos del curso de Fisiología General solo
prestaremos atención al primero.

207
Se denominan músculos antigravitatorios, a aquellos que contribuyen al mantenimiento
erguido de la postura, el estar parados y a moverse. Estos músculos al actuar se oponen
a la fuerza de gravedad. Los fisiólogos por tradición llaman a estos músculos extensores,
aunque puede darse la situación que algunos flexores sean antigravitatorios como es el
caso del flexor digitorum longus
208
Houssay, et al., 1973 p. 1086.
169

Figura 7.1
Diagrama de los componentes moleculares de una miofibrilla las cuales forman paquetes cilíndricos ubicados
dentro de la miofibra o fibra muscular. La unidad estructural y funcional de una miofibrilla es el sarcómero que
se extiende de una línea Z a otra.

Los músculos estriados o esqueléticos, están constituidos por fibras musculares


multinucleados y normalmente de gran diámetro ( 100 µm) y longitud (1 – 40
mm). Su control por parte del sistema nervioso es en gran medida voluntario, de

Figura 7.2
Micrografía electrónica del músculo esquelético mostrando la estructura fina de una miobibrilla. La letra A
indica la banda A o anisotrópica, mientras que la I indica al ámbito de la banda isotrópica dividida por la línea
Z.
170

allí su nombre de músculos voluntarios, y como casi siempre insertan en huesos,


se denominan músculos esqueléticos. Al microscopio óptico presentan
estriaciones longitudinales y transversas muy claras, de allí su otro nombre. La
unidad estructural de un músculo estriado es la fibra muscular o miofibra en cuyo
interior se encuentran sistemas subcelulares llamados miofibrillas. La fibra
muscular es la unidad más pequeña del músculo capaz de realizar todo el proceso
de contracción muscular. Cada fibra se encuentra cubierta por una membrana
llamada sarcolema, que rodea el material citosólico o sarcoplasma. En este
contenido citoplasmático se encuentran en suspensión la sustancia contráctil, la
miofibrilla con diámetros entre 0,5 – 2 µm (Figura 7.1)209.

Figura 7.3
Diagrama mostrando la estructura fina del sarcómero y los filamentos moleculares de actina y miosina que lo
constituyen.

Al microscopio electrónico la mifibrilla consiste de regiones o bandas oscuras y


claras estriadas (Figura 7.2). Las bandas oscuras son altamente birrefringentes y
reciben el nombre de bandas A o anisotrópicas; éstas se alternan con otras menos
refringentes y claras, las bandas I o isotrópicas. La banda I está dividida por la
línea Z o membrana de Krause que las sostiene. Ésta banda la constituyen
filamentos finos de actina; mientras que la banda A, lo está por fibras gruesas de
miosina. Existe sin embargo, un área de traslape de ambas fibras en gran parte de
la banda A, pero formada solo de miosina, la banda H (Figura 7.3A). La
microscopia electrónica permite constatar ultraestructuralmente que las miofibrillas
están compuestos por miofilamentos; unos gruesos o primarios (diámetro, 100 µm)
ubicados a la altura de la banda H. Los otros miofilamentos son delgados o

209
Lodish, op. cit., pp 774 – 782.
171

secundarios (diámetro, 5 µm) ubicados en la banda I. A ambos lados de la banda


H los dos componentes se mezclan (Figura 7.3B). De manera que la
birrefringencia de la banda A se debe a las fibras gruesas y la de la banda I a la
presencia de fibras delgadas.

El segmento de miofibrilla comprendido entre dos líneas Z constituyen la unidad


funcional de la misma o sarcómero (2,5 µm). Los sarcómeros varían de músculo a
músculo, los que contraen poco tienen sarcómeros cortos, con bandas I
pequeñas. Los músculos que se contraen mucho tienen sarcómeros más largos
(Figura 7.2 y 7.3).

El sistema tubular consiste de inserciones tubulares membranosas que penetran a


distancia variables de la línea Z o de la conjunción entre la banda

Figura 7.4
Micrografía electrónica del sistema tubular de una fibra muscular esquelética, mediante un corte tangencial.
Se observa el retículo sacoplásmico (RS) y el sistema T constituido por una prolongación directa de la
membrana celular de la fibra muscular (sarcolema)

A e I, llamado sistema de túbulos transversos o sistema T. El retículo


sarcoplásmico o RS, corre longitudinalmente al sarcómero, este sistema coalece a
la altura de sistema T. El resultado es que a nivel de la línea Z o la conjunción
banda A-banda I se observa un túbulo interno perteneciente al sistema T y
adyacente a éste están las cisternas terminales del RS constituyendo lo que se
conoce como tríada (Figura 7.4 y 7.5). El sistema T permite transmitir la actividad
electrónica de la superficie al interior de la fibra muscular a cuya altura produce la
liberación de Ca++ por RS lo que permite la contracción del sarcómero fenómeno
denominado acoplamiento excitación- contracción, que se describe en detalle más
adelante
172

Figura 7.5
Diagrama del sistema de túbulos o sistema T y de el retículo sarcoplásmico de la fibra muscular.

7.2.- Estructura molecular de la miofibrilla.

A cada lado de la línea Z se insertan filamentos cilíndricos delgados que son los
filamentos de actina. Cada filamento de actina esta formado por una doble hebra
de moléculas de actina que se enrollan una sobre la otra. En esta organización la
actina se denomina actina F. Cada filamento de actina esta constituido por unas
400 unidades de actina-G, que es una proteína globular con un peso molecular de
alrededor de 42 kDa. En el centro del sarcómero se insertan filamentos gruesos,
de miosina. Cada uno de estos filamentos está formado por 150 a 360 moléculas
de miosina (Figura 7.3B).

Cada molécula de miosina presenta una cola formada por dos fibras alargadas de
meromiosina ligera. La cola se continua con un segmento llamado cuello que se
une a una estructura molecular bífida llamada cabeza, Al conjunto de la cabeza y
cuello se le llama meromiosina pesada. El segmento de unión de la cola con la
porción cuello-cabeza parece funcionar como una articulación y tiene cierto grado
de movimiento. Cada cabeza tiene ATP con propiedades ATPásicas.

El sarcómero se encuentra rodeado de un sistema membranoso, el retículo


sarcoplásmico (Figura 7.5). En reposo, los filamentos de miosina están rodeados
ordenadamente por filamentos de actina de modo que en los extremos de la
banda A ambos tipos de filamentos coinciden aunque permanecen separados. Ello
ocurre así porque sobre los filamentos de actina se ubican dos proteínas, la
troponina y la tropomiosina que constituyen un complejo que evita esa unión
(Figura 7.6). La troponina es una proteína globular que se ordena por pares sobre
el filamento de actina cada 40 nm. Cada troponina esta formada por tres
subunidades: la troponina C, que tiene afinidad por el Ca ++: La troponina T, unida a
173

la tropomiosina y la troponina I, inhibe la formación de puentes entre la miosina y


la actina.

El sistema se activa cuando aumenta la concentración de calcio en el


sarcoplasma, el cual se une a la troponina, provocando un cese del bloqueo
ejercido por la tropomiosina y se forma un complejo actina-miosina, el cual
estructuralmente, aparece como un puente. Al formarse el puente se activa la
capacidad ATPásica de la cabeza de la miosina y el ATP presente cerca de la
cabeza de la miosina se disocia en ADP + Pi (fósforo inorgánico) proceso que
requiere de una cierta cantidad de Mg++ (Figura 7.6).

La salida de fosfato de la cabeza de la miosina provoca un giro o un movimiento


de la cabeza, provocando el desplazamiento del filamento de actina a lo largo del
de miosina hacia el centro del sarcómero. Esto significa que las líneas z también
son arrastradas hacia el centro del sarcómero resultando en un acortamiento de
esta estructura. Ello se traduce en una reducción o desaparición de las bandas I
(Figura 7.7).

De lo hasta aquí expuesto es de notar que la contracción muscular ocurre porque


las cabezas de miosina se deslizan de manera cíclica sobre los filamentos de
actina con dirección a la línea Z, proceso que ha sido denominado teoría del
deslizamiento de los miofilamentos, (Huxley y Hanson; 1954; Huxley y
Niedergerke, 1954).

Figura 7.6
Diagrama de la miosina y sus sitios de unión con el ATP y la actina.

El ATP que se perdió de la cabeza de la miosina es recuperado a expensas del


ATP del sarcoplasma. Al ocupar este su posición, la cabeza de la miosina se
174

suelta de la actina y el sarcómero recupera su longitud inicial. Si ello no ocurre, es


decir, cuando por alguna razón (muerte por ejemplo) no se repone el ATP en la
cabeza de la miosina se presenta el fenómeno de rigidez.

Figura 7.7
Diagrama mostrando el probable mecanismo de contracción del sarcómero mediante deslizamiento de los
miofilamentos.

7.6.- Mecanismo de acoplamiento excitación/contracción.

Como se indicó anteriormente la llegada del potencial de acción a la fibra muscular


desencadena el proceso de contracción muscular, fenómeno conocido como
mecanismo de acoplamiento excitación contracción. El mecanismo se inicia en
una sinapsis especializada, la placa neuromuscular o placa motora. La neurona
motora que inerva la fibra muscular lo hace en una relación uno a uno, es decir
una neurona inerva una fibra muscular. La llegada del PA a la placa motora
estimula los canales voltaje dependiente de Ca ++ que entra a la telodendria en
virtud de una diferencia de concentración. La entrada del ión calcio permite la
liberación por exocitosis de la acetil colina contenida en las vesículas sinápticas,
que saltando el espacio sináptico estimula los canales de sodio ligando
dependiente de acetilcolina (receptores nicotínicos). La apertura de los canales
postsinápticos permite la entrada de Na + y la salida de K+210 despolarizando la
210
Aunque el canal de la membrana postsináptica permite el movimiento de ambos iones
la entrada de sodio tiene primacía sobre la salida de potasio así que para efectos prácticos
el importante es el sodio que entra.
175

placa motora. El potencial desarrollado en la membrana de la fibra muscular,


aunque homólogo del PEP, recibe el nombre específico de potencial de placa o
potencial de placa terminal (PPT)211. El potencial de placa inicia un PA muscular
que se propaga por todo el sarcolema alcanzando el tubo transverso o sistema T
(Ver secciones 4.8.2; 4.7 y Figura 7.8-1)

Figura 7.8
Diagrama mostrando el inicio del mecanismo excitación contracción.

Los pies o cisterna terminal del retículo sarcoplásmico (RS) se encuentran


localizados a ambos extremos del RS y adyacentes a los tubos T; de forma tal que
junto con él forman la tríada (Figuras 7.4 y 7.5) T. El calcio se encuentra en el
interior del RS unido a la proteína calsecuestrina.

La despolarización de la membrana del túbulo T aumenta la conductancia al Ca ++


de las cisternas terminales, el cual se difunde al sarcoplasma donde se
encuentran los miofilamentos desencadenando la contracción del sarcómero.
Concluimos entonces que es el calcio el componente que acopla la excitación a la
contracción (Figura 7.9).

Cuando cesa la estimulación de la fibra nerviosa los PA del sarcolema y por ende
la liberación del Ca++ al sarcoplasma y se invierte la situación, esto es que el ión es
ahora secuestrado por el RS gracias a la acción de la ATPasa Ca++ dependiente
ubicada en el medio del RS, con consumo de ATP. La fibra muscular disminuye su
concentración sarcoplásmica Ca++ retornando así a su estado de reposo.

Cifrado en Mountcastle, 1974, 157 – 160; Ochs, 1976, pp. 61 – 64; González-Gómez,
211

1998, p. 176;
176

Figura 7.9
Diagrama mostrando la liberación del calcio del RS evento que desencadena la contracción muscular.

7.4.- Mecanismo de liberación voltaje sensitivo (VSRM)

Se denomina así al mecanismo molecular que da cuenta de la liberación del Ca++


por parte del RS. Los túbulos T poseen una proteína intrínseca de la membrana
denominada receptor de dihidropiridina (receptor DHP), adyacente a la membrana
de las cisternas terminales. Ésta proteína es voltaje sensitiva, es decir es sensible
a cambios en el voltaje de la membrana tubular, lo que provoca cambios
conformacionales de la misma y que influyen en la proteína intrínseca de la
cisterna terminal el receptor de ryanodina212. Éste receptor recibe su nombre de la
propiedad que tiene de unirse específicamente al alcaloide vegetal ryanodina 213.
Éste último receptor es un tetrámero que cambia su conformación por influjo de los
cambios voltaje sensitivo del receptor DHP. El receptor de ryanodina es un canal
de Ca++, que es el cual al final permite la liberación al citoplasma de la fibra
muscular del ión (Figura 7.9)214.
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