Está en la página 1de 2

CASO 2

A partir de la lectura del siguiente caso reflexionar:

 Justificar con qué tipo de cultura institucional se puede identificar.

Creemos poder identificar este caso con la cultura institucional donde la institución
escolar: una cuestión de familia. En esta cultura es habitual encofrar una
correspondencia entre el sistema de relaciones institucionales y el sistema de
parentesco. Ej: en este caso la maestra Marta, dice que tiene buena relación con todas
las familias, los conoce a todos. En la situación particular del niño Juan, la maestra
recuerda que a su primo también le costó mucho adaptarse a primer año, y asegura
que esto es lo que le está sucediendo a él. Para no frustrarlo decide no calificar su
desempeño escolar. Se enteró por otra madre miembro de la cooperadora que la
madre de Juan está pasando por un mal momento con su pareja, y por este motivo
decide no llamarla para comentarle sobre el desempeño del niño, y preocuparla.

Este rasgo de intercambio entre sus miembros, es un peligro para las instituciones
educativas ya que los términos de intercambio son ambiguos, lo que no facilita ni el
encuadre de las tareas ni su desempeño. Esto se ve claro en el caso, ya que la
Maestra decide no calificar el desempeño escolar del niño para no frustrarlo. Decide
no llamar a la madre para no preocuparla. La directora ve a Marta como la madre-
abuela de los niños, adjudicándole roles paternos. Le tiene plena confianza, y por lo
general no observa sus clases ya que no lo cree necesario.

En este tipo de cultura institucional, no se recurre al marco normativo, en particular al


curriculum prescripto, para establecer derechos y obligaciones de las partes, y por lo
tanto, no hay una clara asignación de responsabilidades. En este caso particular el
curriculum prescripto se ignora.

 Caracterizar las relaciones de poder en la institución.

Como dice el autor “un actor o un grupo de actores posee poder cuando tiene la
capacidad de hacer prevalecer su posición o enfoque en la vida institucional, de influir
en la toma de decisiones, obtener reconocimiento, espacios, recursos, beneficios,
privilegios, cargos, o cualquier otro objetivo que se proponga.
Que uno sea consciente del poder que tiene, que lo busquen, y hasta lo acumulen, no
quiere decir, sin embargo que los demás actores están desprovistos de poder. En
efecto, cada uno tiene siempre la posibilidad “el poder” de desempeñar su rol con mil
matices. Todos conocemos el poder de los otros, sufrimos a veces de aquellos de
quienes depende la limpieza, que pueden hacer bien o a desgano su tarea, de la
impuntualidad, ese poder de no cumplir con los horarios formales o de cumplirlos
formalmente pero sin llenarlos de tarea sustantiva; del poder de la asociación
cooperadora.
El poder remite a las relaciones de intercambio entre los actores institucionales.
Esto se puede percibir en la forma como se maneja Marta en la Escuela, ya que ella
decide no calificar a los niños para no frustrarlos, si bien los meses pasan y Juan no
avanza en sus aprendizajes. El Equipo Directivo desconoce esta situación ya que muy

1
pocas veces hacen seguimiento a sus docentes. La Directora le tiene plena confianza,
la ve como una madre-abuela de los niños, tampoco hay un seguimiento por parte del
consejo directivo.
La fuente de poder que puede estar circulando en este caso es “el control de las
relaciones con la comunidad en la que está inserta la escuela”. Ya que Marta tiene
buena relación con las familias, los conoce a todos, porque en algún momento fue
maestra de todos los hijos de ellos; es la maestra más querida de la Escuela.

 Señalar los conflictos se evidencian. Ver que tratamiento reciben.

En toda institución el conflicto es inherente a su funcionamiento, es parte de su


propia dinámica.

En este caso se podría decir que él conflicto que surge tiene carácter previsible, que
son aquellos conflictos recurrentes en las instituciones, es decir que se puede anticipar
su aparición.

Marta hace 10 años que da clases en la escuela, y ella considera que evaluar el
desempeño a sus alumnos los frustra. Es por esta situación que ella hace pasar a
Juan aunque este no haya alcanzado los contenidos previstos para el primer grado,
luego habla con Marisa maestra de segundo grado para comentarle la situación y para
que ella le tenga paciencia. Esta situación crea el conflicto entre las maestras, ya
que la maestra nueva Marisa se preocupa por la situación que presenta Juan, y a su
vez, ya estaba molesta con Marta debido a que el año anterior le había hecho lo
mismo al promover niños con dificultades.

La postura que toma en este conflicto la maestra Marisa es “Ignorarlo”, decide no


preocuparse, ya que lo considera en vano, total ella sabe que esta situación no va a
cambiar y de ultima la que va a tomar las decisiones en segundo grado es ella, y si
Juan tiene que repetir lo hará.

En cambio la Maestra Marta, la directora y la docente con quien habla Marisa de la


situación, tienden a “eludir” el conflicto, ya que si bien perciben el conflicto, se evita
para que aparezca claramente explicitado. Una docente le dice a Marisa que mejor no
diga nada, que no se preocupe y que ya se va a adaptar a como son las cosas en la
escuela; la Directora llama a Marta y a Marisa a una reunión informal para que puedan
conversar sobre lo ocurrido. Marta sigue con su misma posición, a Marisa no le
convence las explicaciones de Marta, se percibe una circulación de información
segmentada, desde distintas versiones – rumores de una docente a otra. Es habitual
percibir situaciones de malestar y encontrar comunicaciones que circulan por los
canales informales de comunicación, bajo forma de “chismes”, etc.
Lo que también creemos que eluden la Directora y la maestra Marta, son los
problemas de aprendizajes que presenta Juan.

También podría gustarte