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Certificado Oficial en Formación Pedagógica y

Didáctica en Formación Profesional y Deportiva


(COFPYD)

ACTIVIDAD 5
DESARROLLO PSICOLÓGICO Y APRENDIZAJE

TEMA 5. TRASTORNOS PSICOSOCIALES Y RENDIMIENTO ACADÉMICO.

Nombre: Manuel Jesús

Apellidos: Perera Reposo

Fecha límite de 2ª entrega de actividades: viernes 20 de enero de 2023

Descripción del caso


Identificación de la paciente
Marta es una adolescente de 12 años que está cursando 1º de ESO en un IES público
de un pueblo de la provincia de Valencia. Vive con sus padres y su hermana pequeña
de 8 años. Ambos padres tienen 44 años y son empresarios. El nivel socioeconómico
familiar es medio-alto. Desde niña ha sido muy callada, en casa apenas cuenta nada,
pero desde hace unos meses, se pelea y pega con su hermana sin motivo aparente
alguno. Está muy irritable. Nunca ha sido contestona; ahora grita con facilidad y
protesta por todo. Hace unos días, ha traído las notas de la 3ª evaluación con 2
suspensos en Educación Física y en Matemáticas, cuando ella siempre ha sido una
estudiante brillante. Es entonces cuando los padres hablan muy seriamente con ella
para averiguar que le sucede. Ella les dice que ha perdido el interés de ir a clase
porque allí algunas compañeras se ríen de ella, e incluso a veces la insultan y
empujan.

Motivo de consulta
Los padres acuden a una reunión, solicitada por ellos, con la profesora-tutora, muy
preocupados porque desde el comienzo del curso escolar su hija mayor sufre
reiterados episodios de abuso, tanto psicológico como físico, por parte de otra nueva
alumna de clase (viene de otro colegio distinto al de Marta), que con sus habilidades
sociales se gana la amistad de varias compañeras entre las que está la delegada de
clase. Esta situación está provocando un deterioro del bienestar psicológico de Marta,
de sus relaciones sociales, familiares y de su rendimiento académico. Los padres
solicitan mejorar la autoestima y habilidades sociales de su hija para que sea capaz de
enfrentar la situación de acoso sufrido.

Historia del problema


Marta comienza el curso escolar manteniendo las mismas amistades de la educación
primaria. La mencionada compañera nueva (con historial de problemas de

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comportamiento a su paso por Educación Primaria, a pesar de haber superado los
cursos sin dificultad) se gana la confianza de la líder del grupo (la delegada), a la que
persuade para aislar a Marta por su aspecto (lleva gafas y está un poco “rellenita”) y
porque siempre atiende a los “profes” (la ponen como buen ejemplo).

Paulatinamente, esta nueva compañera consigue que las amigas de la adolescente


dejen de contar con ella para salir y que le hagan el vacío. Además, esta compañera
insulta y se burla de la chica del caso diariamente, difunde rumores falsos sobre ella,
en ocasiones la agrede físicamente (empujones, zancadillas) y la fotografía o graba
con el móvil cuando está desprevenida para publicarlo en redes sociales y humillarla
debido a su sobrepeso. Ante esta situación, Marta se muestra con bajo estado de
ánimo, discute en casa, desarrolla un autoconcepto muy negativo de sí misma, se
aísla, y su rendimiento académico disminuye. Los padres están preocupados, sobre
todo su madre, porque tampoco queda con amigas o compañeras de clase para salir o
compartir actividades en el tiempo libre. Le gusta quedarse en casa, hacer las tareas de
clase, manejar el ordenador o salir con su madre con la que compare la afición por la
moda. A su madre no le parece normal que a su edad no salga con amigas e insiste,
constantemente, para que llame a alguien e incluso la obliga a hacerlo, lo que provoca
discusiones y gritos por parte de ambas. Finalmente, ambos padres, deciden informar
al colegio sobre su situación, a su tutora en primer lugar, y aunque el centro niega la
existencia de acoso escolar (tutora, jefa de estudios y director), se interviene a nivel
grupal (no a nivel de centro ni individual), sin resultados beneficiosos para ella. Cómo
los padres, y la niña, insisten en que continúa existiendo el problema de convivencia,
la tutora habla con la orientadora del centro que concierta una cita con los familiares y
la presunta acosada para analizar, más en profundidad, el caso.

Evaluación del caso


La evaluación psicológica y psicopedagógica se realizó durante tres sesiones de una
hora a lo largo de tres semanas. Fue llevada a cabo por la psicopedagoga u orientadora
educativa del colegio, en colaboración con los datos aportados, no sólo por los padres
de Marta y los suyos propios, sino también por los que informaron la tutora y otros
profesores de la alumna (mediante “Hojas de observación general de indicadores para
la detección de maltrato entre iguales”), amén de otros compañeros/as de su clase y de
su curso. Para ello se utilizaron los siguientes instrumentos obteniéndose los
resultados que detallamos a continuación:

Información cualitativa

Entrevista con los padres y la adolescente. Recogen información biográfica de la


adolescente y su familia, así como el tipo de situaciones de acoso sufridas, su génesis,
mantenimiento y consecuencias derivadas del problema. Asimismo, se recaba
información sobre el ambiente familiar, funcionamiento escolar, estado de ánimo,

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relaciones sociales, salud física, hábitos diarios, implicación del equipo docente en el
problema, etc.

Test de la familia (Corman, 1967). Este test proyectivo evalúa el estado emocional
con respecto a la adaptación al medio familiar, la percepción de su familia y del lugar
ocupado en ella. Su estructura y contenido han sido investigados por Vives (2005)
constatando su utilidad clínica. El dibujo de Marta evidencia en general adecuadas
relaciones familiares (con la excepción de ciertas disputas con la madre que, ante la
pasividad de la hija, en ocasiones, ejercía un estilo educativo autoritario) y mayor
vínculo afectivo con su padre (con un estilo más democrático), pero también refleja
inseguridad, retraimiento y necesidad de apoyo social.

Autorregistro. Se registran los pensamientos, emociones y conductas de Marta ante


las situaciones sociales y frente a su acosadora para evaluar su estilo de interacción y
la aplicación de estrategias adquiridas durante el tratamiento.

Información cuantitativa

Cuestionario Autoconcepto Forma 5, AF-5 (García & Musitu, 2014). Evalúa el


autoconcepto social, académico/profesional, emocional, familiar y físico. Está
compuesto por 30 afirmaciones, a las que se les debe asignar un valor de 1 a 99, según
el grado de acuerdo con cada frase. Las puntuaciones obtenidas muestran que Marta
se considera apoyada y querida en la familia (PC = Percentil = 95), muy buena
estudiante (PC = 90), modestamente atractiva (PC = 65), muy poco aceptada y
habilidosa socialmente (PC = 20) y escasamente capaz para gestionar sus emociones
(PC = 15).

Escala de autoestima de Rosenberg (Rosenberg, 1965). Consta de 10 ítems a los que


se responden mediante una escala de 1 (muy en desacuerdo) a 4 (muy de acuerdo).
Mide la autoestima, entendida como sentimientos de valía personal y respeto a sí
mismo. Para mujeres adolescentes, una puntuación inferior a 27 puede indicar una
baja autoestima. La puntuación obtenida es 28, lo cual indica una autoestima media-
baja.

Cuestionario de Evaluación de Dificultades Interpersonales en la Adolescencia,


CEDIA (Inglés, Hidalgo & Méndez, 2005). Evalúa dificultades de relación social,
por lo que percentiles altos indican mayor dificultad interpersonal. Consta de 36 ítems
de escala tipo Likert con cinco opciones de respuesta (Ninguna dificultad-Máxima
dificultad) agrupados en cinco dimensiones: asertividad, relaciones heterosexuales,
hablar en público, relaciones con iguales y relaciones familiares. La puntuación total
se sitúa en el percentil (PC)= 80, siendo la situación más conflictiva las relaciones con
chicos (PC = 90), seguida de dificultades altas en asertividad y habilidades de
comunicación (PC = 75).

Sistema de Evaluación de la Conducta de Niños y Adolescentes, BASC. (Reynolds


& Kamphaus, 2004). Este instrumento multidimensional mide numerosos aspectos

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del comportamiento y la personalidad, incluyendo dimensiones tanto adaptativas
como clínicas. En este caso únicamente se aplica la escala de valoración para padres
(BASC-P), integrada por 15 dimensiones, en la cual los padres destacan como
principal problema el retraimiento de Marta, con una puntuación de PC = 75.

Inventario de Miedos Escolares, IME (Méndez, 1988). La puntuación total fue de


117, realizándose más una valoración cualitativa que cuantitativa de las respuestas. Se
puso de evidencia una ansiedad elevada que le generaban muchas situaciones de
interacción en clase y con sus compañeros.

1) En relación al concepto de maltrato escolar entre iguales en la adolescencia:

- Defina con sus propias palabras el “bullying” o maltrato escolar.


- Resuma las características de la intimidación y abuso entre adolescentes en
entornos escolares.
2) En relación al caso práctico de la niña presentado anteriormente:
-Justifique con sus propias palabras si, “a priori”, piensa que en este caso hay o no
“bullying” y, en caso afirmativo, expliqué por qué llega a esa conclusión.
- Diseñe un plan de actuación (intervención psicoeducativa) tratando 2 aspectos:
a) Intervención del profesorado a 3 niveles: centro, aula e individuo (la alumna del
caso)
b) Intervención con la familia.
Al final, exprese su “opinión/valoración personal y posicionamiento sobre este
tema”, limitando su extensión (máximo 200 palabras).

1.

A) Podemos definir el bullying como acoso prolongado en el tiempo dirigido hacia un


individuo que suele ser más vulnrable frente a la sociedad ya sea por motivos físicos o
ideales del propio individuo, llegando a causar problemas en éste malestar general.

B)

– Las víctimas: suelen ser sensibles, tímidas, ansiosas e inseguras, suelen tener
menos amigos y por lo general son más infelices y solitarios, presentan baja
autoestima y suelen verse poco atractivos, fracasados e incluso avergonzarse de
ellos mismos.

– Factores de intimidación: Los intimidadores suelen disfrutar intimidando, a


veces presionan para conseguir algo a cambio, algunos suelen presionar por
propias presiones dentro de su grupo de amigos, los intimidadores pueden tener
un estilo de educación o ambiente familiar desfavorable.

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– Efectos de la intimidación: Influye en la salud física y mental a largo plazo, los
que la sufren suelen faltar más a la escuela.

2.

A) Pienso que sí puede existir caso de bullying, pues los comentarios y la actitud que
muestra Marta en casa evidencian que hay problemas, además, Marta comenta que
incluso le insultan o sufre algunas agresiones físicas por parte de sus compañeras.

B)

PLAN ACTUACIÓN

* Medidas del centro *

Concienciar a los alumnos, profesores y todos los miembros de la comunidad educativa


del maltrato entre iguales y fomentar el debate sobre este tema entre los alumnos.

Establecer programas de formación para toda la comunidad educativa para que todos
sepan identificar el problema y cómo enfrentarlo.

Establecer mecanismos para colaborar con las familias y orientar a los familiares en
caso de no saber cómo afrontar el problema.

Tomar decisiones como el seguimiento individual del alumno, vigilancia de pasillos y


patios, etc.

* Medidas de Aula *

Establecer normas claras, concretas y con consecuencia inmediata.

Fomentar métodos de enseñanza y aprendizaje de manera que todos sean iguales.

Programas actividades que fomenten la paz entre iguales, la igualdad en general y la


mejora de habilidades sociales.

Cambiar algunos miembros del grupo de alumnos de la víctima, nunca a la misma.

* Intervención en el Individuo *

Es importante el trato con víctima y agresores, pero es igual o más importante el trato
con las familias implicadas para que el programa tenga éxito de verdad.

Métodos orientados al entrenamiento de las habilidades sociales de forma que faciliten


las relaciones entre uno mismo y un grupo de personas, favoreciendo a su vez la
autoestima del individuo y sus relaciones con los demás.

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* Entorno Familiar *

El objetivo principalmente es el de mostrar a los padres que enseñar un estilo educativo


equilibrado o mejor dicho fuera del extremismo es lo correcto. En caso de familias de
riesgo, aplicar técnicas o métodos recomendados por el propio equipo educativo o los
responsables de orientación para intentar reducir la disciplina coercitiva. Acudir a
terapia familiar podría ser una buena medida de prevención.

Mi opinión sobre esta actividad es que pese a no ser de referencia en mi especialidad,


considero que es una de las más importantes que hemos hecho hasta la fecha dentro de
lo que es el COFPYD en general, pues ésta actividad nos enseña algunas de las pautas y
los primeros pasos a dar dentro de lo que es el bullying, el cómo hacerle frente y sobre
todo nos muestra que somos de gran ayuda para todas las partes implicadas.

CORRECCIÓN ACT 1

– Resuma las características de la intimidación y abuso entre adolescentes en


entornos escolares.

La intimidación es un abuso de poder intencionado hacia una persona o grupo de


personas generalmente más débiles con la intención de causar daño o sufrimiento en
repetidas ocasiones. Los daños más comunes suelen ser insultos, agresiones físicas,
amenazas y falsas alegaciones.

Las víctimas suelen ser sensibles, tímidas, ansiosas, inseguras, suelen tener menos
amigos y ser más solitarios y suelen verse a ellos mismos como fracasados y poco
atractivos. Éstas personas tienen actitudes o comportamientos que dejan ver a los demás
chicos que son inseguros y tienden a no responder cuando les insultan o les provocan
teniendo un comportamiento que les hace más vulnerables ante estos ataques.

Algunas víctimas pueden presentar conductas mixtas teniendo actitudes más pasivas o
agresivas, este grupo de víctimas puede presentar problemas de concentración o
hiperactividad teniendo comportamientos que incomodan a los que están a su alrededor.

Factores de intimidación:

Los intimidadores disfrutan dominando y controlando.

Pueden presionar a las víctimas para conseguir cosas (dinero, cigarrillos, etc).

La intimidación puede ser un síntoma de comportamiento global antisocial.

Este comportamiento puede ser a causa del estilo de educación y el ambiente familiar.

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Los intimidadores suelen ser hijos de anteriores intimidadores, teniendo estilos
educativos inconsistentes.

Las víctimas suelen tener padres sobreprotectores.

Efectos de la intimidación:

Afecta a la salud física y mental de las víctimas.

Los chicos que la sufren suelen faltar mucho al colegio.

Las personas que la sufrieron independientemente de mujer u hombre, suelen tener la


autoestima muy baja.

Hay una continuidad intergeneracional en las víctimas.

Los trastornos psiquiátricos en las víctimas suelen ser la depresión, y en los


intimidadores aumenta el índice de depresión y trastornos de conducta.

La educación a padres de intimidadores y víctimas para erradicar estas conductas.

Las políticas anti-intimidación que disminuyen este tipo de conductas.

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