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ACTIVDADES ECONÓMICA.

EL TURIMO
EL TURISMO COMO FENÓMENO MULTIDIMENSIONAL
El turismo es una actividad humana que, de un modo u otro, está presente en nuestro
conocimiento cotidiano, es decir: todos tenemos alguna idea para responder a la pregunta
“¿Qué es el turismo?”. Sin embargo, esta pregunta no se responde de la misma forma para
todos; tal como sucede en el campo de los conocimientos sociales, existen diversas lecturas
e interpretaciones sobre un mismo concepto.

Una de las primeras lecturas que podemos hacer sobre el turismo es reconocerlo como
actividad económica generadora de empleo y de divisas. Describamos este fenómeno
aplicando una mirada cuantitativa…
En nuestro país, como en el mundo, el turismo es una de las actividades más pujantes de
las últimas décadas. De acuerdo con las cifras que arroja la Organización Mundial del
Turismo, en su expansión, la tasa de crecimiento del turismo internacional sufrió
fluctuaciones. Sin embargo, desde la década del 50 no registró en todo el mundo ni un solo
año de disminución significativa.

En palabras del secretario general de la OMT, Taleb Rifai:

“Para un sector que es responsable directamente del 5 % del PIB mundial, del 6 % de las
exportaciones totales y del empleo de una de cada 12 personas, tanto en las economías
avanzadas como en las emergentes, los resultados son alentadores, especialmente al llegar
en un momento en el que necesitamos urgentemente actividades que estimulen el
crecimiento y la creación de empleo”.

Es interesante además entender que el desarrollo que está teniendo esta actividad en
nuestro país no es producto de la casualidad, sino que en gran medida es posible como
consecuencia de una serie de medidas del Estado. Entonces vemos que el turismo también
tiene una dimensión política, es decir, en nuestro país el turismo es política de Estado y
ocupa un lugar en la agenda pública. Veamos algunas medidas de los últimos años que han
favorecido el desarrollo del turismo: la sanción de la Ley de Turismo, el diseño del Plan
Federal Estratégico de Turismo Sustentable como herramienta participativa y federal para
el cumplimiento de la ley, la creación del Instituto Nacional de Promoción Turística, la
creación de la marca país, la recuperación de la línea aérea de bandera, el régimen de
feriados, etcétera.
Por ello, cuando pensamos en las potencialidades del turismo no pensamos solamente en
el desarrollo económico, sino que, y desde una mirada sustentable, el turismo es una
actividad social, que involucra a la comunidad en su conjunto promoviendo espacios de
inclusión, participación y mejora de la calidad de vida para los actores involucrados. Así
como lo relata el video de la calesita, el turismo en nuestro país representa directa o
indirectamente posibilidades de desarrollo. Es esperanza y dinamismo para las
comunidades de muchos destinos.

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También podemos analizar la dimensión cultural del turismo. El turismo tiene una
innegable dimensión cultural en tanto es actividad humana, acción y modo de ser de los
hombres. Y a su vez se vincula directamente con el patrimonio cultural que ocupa en
variadas ocasiones el lugar del atractivo que motiva los desplazamientos y encuentros de
las personas.
¿Qué es el turismo?

Cuando hablamos de turismo nos referimos a una actividad cuyo protagonista es el hombre.
Siendo así, y tal como lo desarrolla Margarita Barretto en el texto que sugerimos antes, su
desarrollo no ha sido ni es lineal. De forma personal cada quien construye su noción ligada
a sus experiencias, expectativas, cultura, ideología etc. Pero al englobar la definición para
satisfacer la expectativa general, definir el turismo resulta una tarea desafiante.
“El turismo es una práctica social. Se da en escenarios singulares, con multiplicidad de
dimensiones simultáneas que operan en ella" (Maglione, Espinosa;2008;9).

La complejidad y el dinamismo del turismo han dado lugar a que a lo largo de los años se
hayan generado diversas definiciones, a veces contradictorias.

Hemos visto en el apartado anterior que siendo un fenómeno multidimensional permite


diversos análisis, y a la hora de definir pareciera que todos los enunciados dejan algo afuera
y/o que todas las dimensiones se esgrimen como determinantes del fenómeno.

A continuación les proponemos analizar algunas de las definiciones que muestran cómo el
concepto se ha ido ampliando a medida que se desarrollaba la actividad. Ustedes, en el foro,
ya empezaron a intercambiar sus experiencias y conocimientos previos sobre el turismo.
Seguramente encontrarán muchas de sus ideas en las siguientes definiciones.

Definiciones de turismo

Uno de los primeros aspectos que aparece –si no el primero- es la idea del viaje, o sea, el
turismo tiene que ver con viajar y así lo vemos reflejado en la definición a través del término
desplazamientos. Además, en esta definición podemos ver la diferenciación que se realiza

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entre turismo y trabajo, o dicho más claramente entre ocio o tiempo libre y trabajo,
asociando directamente al turismo con las actividades que corresponden al uso del tiempo
libre. Del mismo modo la definición de la Unión internacional de Organismos Oficiales de
Turismo (UIOOT), de 1967, expresa que el turismo son los desplazamientos “no motivados
por razones de negocios o profesionales”. Con el devenir de la actividad esta concepción se
irá superando, pero primero veamos qué otros aspectos abordan otras definiciones.

En esta definición encontramos que la dimensión temporal es delimitada, el turismo implica


desplazamientos a lugares distintos del lugar de residencia, y la realización de actividades,
pero para ser considerado turismo la permanencia en el destino no debe superar el período
de un año. Actualmente se sostiene el consenso en torno a esta idea. Y a su vez
identificamos otros elementos importantes: por un lado, hace referencia a las facilidades
creadas, es decir, el desplazamiento de personas tiene como contraparte el desarrollo de la
oferta de servicios tendientes a satisfacer las necesidades de las personas durante su
estancia en el destino. Y aquí nos detenemos en otro aspecto importante: el turismo
representa el conjunto de actividades que realizan las personas motivados por la
satisfacción de sus necesidades, necesidades que pueden ser múltiples y diversas, no
siempre ni exclusivamente relacionadas con el uso del tiempo libre.

La necesidad de consenso y la mirada internacional de la OMT


Como analizamos en las definiciones anteriores, distintos autores enfatizan ciertos aspectos
de la actividad turística para circunscribirla.
Con el objeto de unificar criterios y fomentar la creación de estadísticas representativas, y
aumentar la comparabilidad entre datos, la Organización Mundial del Turismo (OMT)
elaboró una definición de turismo amplia, que contempla tanto el turismo que se desarrolla
en los distintos países como al interior de cada uno de ellos, así como a los viajeros que
pernoctan como aquellos que permanecen un solo día en el lugar de destino.
La Organización Mundial del Turismo (OMT) es el organismo de las Naciones Unidas
encargado de la promoción de un turismo responsable, sostenible y accesible para todos.
Son miembros de la OMT 155 países, entre ellos la Argentina.
Veamos la definición que proponen…

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En síntesis, el turismo es una actividad socioeconómica que comprende:
1. Movimiento físico de los turistas: viaje
2. Estadía temporal en el destino: por un tiempo no permanente y menor a un año.
3. Actividades: senderismo, observación de aves, playa, compras, etc.
4. Motivaciones: descanso, ocio, aprendizaje, cultura, etc.
5. Servicios y productos que satisfacen necesidades.
Modalidades del turismo
Antes de cerrar este apartado es importante conocer algunas de las modalidades que se
utilizan para clasificar la actividad turística.
Dependiendo del lugar de origen del turista, podemos diferenciar entre:
 Turismo nacional: aquel realizado por los ciudadanos dentro del país.
 Turismo internacional: ciudadanos de un país que deciden visitar otro país.

 También, dependiendo del lugar de origen del turista y el destino elegido, podemos
distinguir entre:
 Turismo doméstico: residentes que visitan su propio país.
 Turismo emisor: residentes del propio un país que deciden visitar otros países.
 Turismo receptivo: no residentes procedentes de otros países.
 Turismo interior: llegadas de turistas residentes y no residentes a los principales
destinos nacionales.

EL DESARROLLO DEL TURISMO


El sistema turístico
Para comprender la importancia del turismo, vamos a analizar primero qué significa la
actividad, qué elementos los componen y cómo afecta nuestro entorno. Para ello,
pensemos por ejemplo que tomamos la decisión de tomarnos vacaciones y viajar a algún
lado, ya sea para visitar a nuestra familia, amigos o conocer nuevos lugares. Desde el mismo
momento en que formulamos nuestro deseo y nos dirigimos a obtener información para

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decidir acerca del posible viaje, estamos poniendo en funcionamiento una enorme cantidad
de factores y elementos que dan como resultado lo que llamamos la actividad turística.
Un modelo que nos ayuda a analizar el fenómeno turístico es el sistémico. Un sistema es un
conjunto de elementos que interactúan entre sí en un proceso de transformación
organizado en pos de un objetivo en común.

Pero ¿cuál es el objetivo que persiguen los distintos elementos que conforman la actividad
turística?
En el gráfico mostramos los distintos componentes del sistema turístico, sus elementos de
entrada y de salida, y el entorno donde se desarrolla la experiencia turística.

Aquí los turistas conforman los elementos de entrada que ingresan al sistema turístico, el
cual está representado por el espacio físico donde tiene lugar la experiencia turística, es
decir el destino. Por medio de los operadores turísticos, que actúan como intermediarios
poniendo al alcance de los turistas la amplia gama de alternativas existentes, entran en
contacto con distintos subsistemas: los medios de transporte con los que se trasladan los
establecimientos donde se alojan, los locales de comidas donde se alimentan, los
transportes en los que se mueven, los locales donde realizan sus compras, etc. Finalmente,

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terminan su estadía y regresan a sus hogares, transformándose en los elementos de salida,
que idealmente son “turistas satisfechos”.
Pero tengamos en cuenta que, así como todos los sistemas tienen una composición y una
estructura, también trabajan o actúan inmersos en un entorno. Asimismo, todos los
sistemas pueden formar parte de otros sistemas. Si trasladamos esto al Sistema turístico
significa que éste se encuentra inmerso, y por ende condicionado, en un entorno marcado
por factores político-económicos, sociales y naturales.
Si bien es posible hacer diversas clasificaciones, para entender más profundamente el
fenómeno turístico resulta útil diferenciar dos elementos básicos que interactúan en el
sistema turístico: la demanda y la oferta turística. Ambos elementos están
indisolublemente ligados, pero es indudable que para que se materialice la experiencia
turística, es necesario que existan los turistas, y por ello empezaremos definiéndolos, es
decir describiendo a lo que llamamos la demanda turística.

Demanda turística

Es frecuente en el lenguaje turístico, oír que hubo un aumento de la demanda o que


es necesario captar mayor demanda. ¿Qué quiere decir este término? Volviendo al ejemplo
anterior, si nosotros estamos dispuestos a hacer un viaje, ya sea por trabajo o vacaciones,
desde el momento en que tenemos el deseo de viajar formamos parte de la demanda.
turístico significa que éste se encuentra inmerso, y por ende condicionado, en un entorno
marcado por factores político-económicos, sociales y naturales.
Si bien es posible hacer diversas clasificaciones, para entender más profundamente el
fenómeno turístico resulta útil diferenciar dos elementos básicos que interactúan en el
sistema turístico: la demanda y la oferta turística. Ambos elementos están
indisolublemente ligados, pero es indudable que para que se materialice la experiencia
turística, es necesario que existan los turistas, y por ello empezaremos definiéndolos, es
decir describiendo a lo que llamamos la demanda turística.

Demanda turística

Es frecuente en el lenguaje turístico, oir que hubo un aumento de la demanda o que


es necesario captar mayor demanda. ¿Qué quiere decir este término? Volviendo al ejemplo
anterior, si nosotros estamos dispuestos a hacer un viaje, ya sea por trabajo o vacaciones,
desde el momento en que tenemos el deseo de viajar formamos parte de la demanda.
“La demanda, técnicamente puede definirse como “el número total de personas
que viajan o desean viajar, para disfrutar de facilidades turísticas o servicios en lugares
distintos al lugar de trabajo o residencia habitual” (Matthieson y Wall, 1982)”.
De la definción anterior se desprende que podemos diferenciar a los turistas que
efectivamente viajan, es decir los que llamamos la demanda efectiva o real, de aquellos
que podrían visitar nuestro destino pero que aún no lo han hecho. Este grupo es los que

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denominamos la demanda potencial. Es muy importante saber cual es la demanda
potencial de un lugar, porque nos permite crear condiciones para atraer a ese grupo de
personas y logar que efectivamente viajen.
Aquí podemos encontrar dos tipos de demanda diferente: aquella conformada por las
personas que desean y podrían eventualmente viajar, la que se llama demanda potencial,
y la que abarca a las personas que efectivamente viajan, es decir la demanda real.
Más de una vez habremos escuchado el término viajero, visitante o turista. Ésta es
otra forma de diferenciar a la demanda según el tiempo de permanencia o estadía en los
lugares de destino. Veamos las siguietes definiciones:

Dentro de la demanda de un destino podemos diferenciar distintos tipos o


segmentos de turistas. Así podemos diferenciar a los turistas por grupos de edad, por su
origen, sus intereses o motivaciones. Estas diferencias pueden verse claramente cuando
hablamos por ejemplo de “turismo de tercera edad” o “turismo europeo” o “ecoturismo”.
Todas estas denominaciones nos están mostrando diferencias en los perfiles de turistas, y
son muy útiles a la hora de estimar los visitantes que recibiremos.
Oferta turística

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Si vivimos en un municipio turístico, podemos preguntarnos cuántos hoteles y
restaurantes hay, cuales son los lugares más bonitos que pueden ver los turistas, cómo
hacen para llegar o qué pueden hacer cuando visitan nuestra ciudad, y de esta manera
estamos analizando la oferta del destino, donde en este caso nosotros somos los
anfitriones.
Con el término oferta turística nos referimos al conjunto de elementos a los que
accede el turista al llegar al destino. Ello incluye en primer lugar a los atractivos,
motivadores del viaje, pero tambien comprende desde los hoteles hasta las actividades
que el turista puede realizar, así como los accesos, los caminos, la infraestructura y las
comunicaciones.
A continuación, describiremos los principales elementos que conforman la oferta turística.

Atractivos y productos turísticos


Un atractivo turístico es un lugar, objeto o acontecimiento capaz de generar un
desplazamiento turístico. Los atractivos pueden ser naturales -bosques, mares, desiertos,
montañas-; o culturales -fiestas, tradiciones, construcciones, museos, etc-.

Un producto turístico define a un conjunto de elementos que se asocian para


satisfacer una necesidad. Por ejemplo, el producto “nieve andina” se refiere a la montaña,
el frío y la nieve de la cordillera de los Andes, como así tambien a las actividades viculadas
con la nieve como esquí, snowboard, chocolate caliente, calor en una cabaña de madera, y
podríamos encontrar un sifin de otros elementos asociados con sensaciones y experiencias.
En términos técnicos podemos decir que el producto se caracteriza por tener un
contenido simbólico asociado a ciertos rasgos técnicos que lo definen como un conjunto
identificable destinado a cubrir una necesidad.
Los accesos en turismo son sumamente importantes, porque son los medios que nos
permiten alcanzar los atractivos, como los caminos, las rutas, las líneas aéreas, etc. Sin
accesos, es muy dificil que pueda desarrollarse el turismo.
Alojamiento, gastronomía y transporte
Cuando los turistas se desplazan motivados por un atractivo, el alojamiento es la base desde
la cual entran en contacto con el resto de las actividades y servicios, como por ejemplo la
gastronomía y el transporte, aunque en ocasiones el alojamiento puede ser el atractivo en
sí mismo.
La oferta hotelera en Argentina se clasifica en hotelera y parahotelera. La primera
comprende los hoteles de 1 a 5 estrellas y otros tipos de hoteles, mientras que entre la
oferta parahotelera se incluyen hosterías, hospedajes, residenciales, y cabañas, entre otros.
La gastronomía comprende por ejemplo a los cafés, bares, cantinas y restaurantes.
El papel del transporte es esencial en tanto que un destino, por más bellos que sean sus
atractivos, difícilmente podrá desarrollarse sin una infraestructura de transporte. La

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accesibilidad es la primera condición de su desarrollo. El transporte puede ser terrestre
(ferrocarril, rutas, caminos, autovías), aéreo o por navegación.
Operadores turísticos
Para poder funcionar, la actividad turística necesita de estructuras y organizaciones que
faciliten o sean intermediarias entre el turista y la oferta turística. Estos son los operadores
turísticos.

Los operadores de turismo son un tipo de empresas intermediarias entre el consumidor y


el destino turístico. Tienen la función de distribución y comercialización del proucto
turístico, pero en muchos casos el operador intermediario crea el producto turístico.

La distribución de viajes está dividida en minoristas y mayoristas. Los minoristas,


proveen información sobre las alternativas de viaje, alojamiento y servicios asociados. Los
mayoristas preparan, antes de que la demanda sea formulada, los viajes y estadías,
organizando el transporte y proponiendo los servicios.
IMPACTO DEL TURISMO
El turismo es a nivel global una de las actividades económicas de mayor crecimiento.
Pero así como su desarrollo puede aportar importantes beneficios, lleva tambien implícitos
ciertos riesgos. Éstos incluyen por ejemplo el deterioro ambiental de los recursos
ocasionado por su uso intensivo, el exceso de visitantes – lo que disminuye la calidad de la
visita – o el crecimiento urbanístico descontrolado.
Los efectos generados por el turismo, tanto los positivos como los negativos, son llamados
impactos, y pueden clasificarse en tres tipos: económicos, ambientales y sociales.

Impactos económicos
Tal como mencionamos anteriormente, el turismo involucra a múltiples sectores
económicos para su desarrollo. Tradicionalmente se lo consideró como una exportación de
una región o un país hacia un destino receptor en el que genera renta, favorece la creación
de empleo, aporta divisas, equilibra la balanza de pagos, y fomenta la actividad empresaria.
¿Qué quiere decir que el turismo genera renta?
Quiere decir que los gastos de los turistas contribuyen tanto el pago de una habitación de
hotel así como una variedad de servicios y bienes de consumo tales como alimentos,
transporte, excursiones, actividades, entretenimientos, etc. Y que eso genera una
corriente, o flujo de divisas hacia el destino que constituye una fuente de ingresos, no solo
para las empresas y personas directamente relacionadas con la actividad, sino que
beneficia al resto de los sectores de la economía, generando un efecto multiplicador.
¿Por qué se produce un efecto multiplicador?
El efecto multiplicador se produce por la estrecha interdependencia que existe
entre los distintos sectores de la economía. Así por ejemplo, cuando las empresas turísticas,
renuevan sus materiales o mobiliario, pagan a sus proveedores, pagan salarios, impuestos,

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facturas de gas, luz, agua y seguros, están generando un reparto de la renta que se
reinvierte en la economía local y en la compra de bienes extranjeros.
Sin embargo el aumento de la actividad turística tambien puede acarrear ciertos costos,
dado que los recursos, ya sean éstos naturales, sociales o culturales, siempre tienen un
límite.
Además, la interdependencia del sector turismo con el resto de los sectores, hace
que las fluctuaciones de la demanda del turismo pongan en riesgo al destino en general.
Impactos socioculturales
La actividad turística pone en contacto a personas de diferentes entornos culturales y socio-
económicos y esto pude aportar beneficios o generar deterioros en la sociedad. El turismo
es positivo porque refuerza la identidad cultural e histórica de la comunidad anfitriona, a la
vez que impulsa el interés por el patrimonio local, impulsando acciones para su
conservación y restauración. Asimismo favorece la comprensión y tolerancia hacia las
diferentes culturas.
Pero existe un umbral de tolerancia en las comunidades anfitrionas, que superado éste
en duración e intensidad puede ser perjudicial, tanto para el destino como para los
turistas. Un número excesivo de turistas afecta la calidad de la visita, y puede generar en
el destino la desculturación y mercantilización de la cultura.
Impactos ambientales
La calidad del ambiente es esencial para el turismo. Tenemos que tener en cuenta las
actividades turísticas, si no son controladas, pueden tener efectos ambientales adversos.
Muchos de estos impactos están ligados a la construcción de infraestructura como son: los
caminos y aeropuertos, las instalaciones turísticas, incluyendo hoteles, restaurantes,
tiendas, canchas de golf, etc.
Los impactos negativos del desarrollo del turismo pueden destruir gradualmente
los recursos ambientales de los cuales depende. Pero el turismo tiene el potencial para
crear efectos beneficiosos sobre el medio ambiente al contribuir con su protección y
conservación. De esta manera se crea una consciencia a favor de los valores ambientales
que puede servir como herramienta para financiar la protección de áreas naturales y para
aumentar su importancia económica.” (PNUMA)
EL TURMISMO SOSTENIBLE

Hoy en día se reconoce que el turismo se desarrolla en entornos que tiene límites propios
y que la actividad es vulnerable, no solo a los cambios del medio ambiente natural sino a
los del entorno cultural. Por ello es necesario alcanzar el crecimiento de la actividad,
potenciando los efectos positivos y evitando que los negativos produzcan un deterioro
irreversible.
El concepto de desarrollo sostenible se define como aquel que satisface las necesidades del
presente, sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus
propias necesidades.
El concepto de sosteniblidad está ligado a tres hechos importantes: continuidad, calidad y
equilibrio. El turismo sostenible persigue:

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 Mejorar la calidad de vida de la población local, es decir la gente que vive y trabaja
en el destino.
 Proveer una experiencia de calidad al visitante.
 Mantener la calidad del medio ambiente del que la pobalción local y los visitantes
dependen.
 Obtener mayores niveles de rentabilidad económica para los residentes locales.
 Asegurar beneficios para los empresarios turísticos, de lo contrario se olvidará el
copromiso de la sostenibilidad y se alterará el equilibrio.

El Plan Federal Estratégico de Turismo Sustentable del Ministerio de Turismo de la


Nación Argentina (PFETS) reconoce a la sustentablidad como una de las premisas de su plan
de actuación, y la define como un crecimiento económico compatible con la conservación
de los recursos naturales y culturales, que se fortalece hacia una equidad distributiva.

EL TURISMO COMO ACTIVIDAD ECONÓMICA


En muchos países el turismo constituye una actividad de gran relevancia económica, ya que
desempeña un papel fundamental en la generación del producto, el empleo y la renta.
Existe una necesidad creciente de medir el impacto económico del turismo, por lo que
diversos países y organizaciones internacionales han desarrollado técnicas para su
evaluación de manera transparente y homogénea.
La metodología de la Cuenta Satélite de Turismo, aprobada por la División de
Estadística de las Naciones Unidas cuantifica el impacto del turismo en la economía. El
cálculo refleja la contribución directa del turismo al Producto Interno Bruto (PIB) y a los
principales agregados macroeconómicos del país. Consiste en medir el gasto interno en
Turismo (es decir el gasto total dentro de un determinado país en viajes de turismo de
residentes y no residentes, con fines de ocio y negocios), así como los gastos del Estado
Nacional en servicios de turismo directamente vinculados con los visitantes, por ejemplo,
culturales o recreativos como museos o en los parques nacionales.

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