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TOCA DE APELACIÓN No 806/2007.

SÉPTIMA SALA DEL H. SUPREMO TRIBUNAL DE JUSTICIA DEL


ESTADO DE JALISCO

ASUNTO.- Se interpone AMPARO DIRECTO.

CC. MAGISTRADOS QUE INTEGRAN LA H. SÉPTIMA SALA DEL


HONORABLE SUPREMO TRIBUNAL DE JUSTICIA DEL ESTADO DE
JALISCO.

P R E S E N T E.

CON AT´N A LOS CC. MAGISTRADOS QUE INTEGREN EL


TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL
DEL TERCER CIRCUITO EN TURNO QUE CORRESPONDA
CONOCEDR DEL PRESENTE JUICIO.

JOSE MARTINEZ SANCHEZ, mexicano, mayor de


edad, señalando como domicilio para recibir notificaciones la finca
marcada con el numero 1005 de la Avenida San Rafael, esquina con
Avenida Guadalupe, en la Colonia Chapalita de esta Ciudad, autorizando
para que en mi nombre las reciban y designando en los mas amplios
términos del articulo 27 de la Ley de Amparo a los señores
Licenciados Jesús Maria García Carrillo y Abel Martínez Delgado,
con Cédula Profesional número 479715 y 918852 respectivamente,
con el debido respeto comparezco ante Ustedes, y:

EXPONGO:

En mi carácter de codemandado en el Toca


806/2007 formado con motivo del recurso de apelación interpuesta en
contra de la sentencia definitiva pronunciada por el C Juez Mixto de
Primera Instancia de Colotlan Jalisco en autos del juicio Civil ordinario
numero 293/2005 seguido por la C Maria Bañuelos Díaz en contra del
suscrito y otros y con apoyo en lo dispuesto por los artículos 103 y
107 de la Constitución General de la Republica y en los artículos
1, 158, 159 y 163 de la Ley de Amparo, mediante este escrito vengo
a solicitar la protección y el Amparo de la Justicia federal en contra de
los actos y autoridades que mas adelante señalare.

En cumplimiento a lo ordenado por el artículo 166 de


la Ley de amparo, a continuación formulo el siguiente.

I.- NOMBRE Y DOMICILIO DEL QUEJOSO.- Ha


quedado precisado en el preámbulo del presente escrito.

II.- NOMBRE Y DOMICILIO DE LOS TERCEROS


PERJUDICADOS, Le reviste tal carácter a la C. Maria Bañuelos Díaz
también conocida como Francisca Bañuelos Díaz con domicilio en el
despacho ubicado en la calle Liceo numero 127 interior 6 zona centro
en esta ciudad de Guadalajara, domicilio señalado ante la Responsable.

III- AUTORIDAD RESPONSABLE.- H. Séptima Sala


del Supremo Tribunal de Justicia del Estado de Jalisco y su Secretario
Adjunto, con domicilio en el edificio ubicado en la Avenida Hidalgo
numero 190 de esta Ciudad.

IV.- ACTO RECLAMADO.- A la autoridad señalada


como responsable le reclamo la resolución de fecha 10 diez de
Agosto de 2007 dos mil siete, pronunciada en el Toca numero
806/2007 formado con motivo de la apelación que hice valer en contra
de la Sentencia Definitiva de fecha 16 de marzo del año 2007 dos
mil siete dictada por el C. Juez de Primera Instancia de Colotlán,
Jalisco, en los autos del juicio civil ordinario expediente numero
293/05.

Los antecedentes del acto reclamado son los


siguientes:

1.- El suscrito en mi carácter de codemandado


conteste la demanda civil ordinario que en mi contra y de otros,
presento la C. Maria Bañuelos Díaz, juicio que se radico bajo expediente
número 293/05 ante el Juzgado de Primera Instancia de Colotlán,
Jalisco, culminado el mismo con sentencia definitiva dictada el día 16
dieciséis de marzo del año 2007 dos mil siete y por haber sido adversa
a mis intereses la resolución de merito la impugne a través del recurso
de apelación; dicho recurso fue substanciado ante la responsable H.
Séptima Sala del Supremo Tribunal de Justicia del Estado de Jalisco,
bajo Toca numero 806/2007 tribunal que el día 10 diez de agosto de
2007 dos mil siete emitió su resolución, confirmando en todas sus
partes la sentencia apelada.

V.- FECHA DE NOTIFICACION DE LA SENTENCIA


RECURRIDA.- La sentencia que se recurre fue notificada a través del
boletín judicial de fecha 13 trece de agosto del año 2007.

VI.- PRECEPTOS CONSTITUCIONALES QUE SE


ESTIMAN VIOLADOS.- Artículos 14 y 16 de la Constitución
Federal.

El artículo 14 de nuestra Carta Magna establece.

“”””””Art. 14.- Nadie podrá ser privado de la vida, de la libertada o de sus


propiedades, posesiones o derechos, sino mediante juicio seguido ante los
tribunales previamente establecidos, en el que se cumplan las formalidades
esenciales del procedimiento y conforme a las leyes expedidas con anterioridad
al hecho.””””””””

A su vez el Articulo 16 de la Constitución Federal


previene.

“”””””Art. 16.- Nadie puede ser molestado en su persona, familia, domicilio,


papeles o posesiones, sino en virtud de mandamiento escrito de la autoridad
competente, que funde y motive la causa legal del procedimiento..”

Se afirma lo anterior, si tenemos en cuenta que el


suscrito al hacer valer el Recurso de Apelación referido en este libelo de
Garantías, hice valer molestias que en síntesis se reducen a 3 TRES
AGRAVIOS, consistentes éstos, en los siguientes:
a).- Violación al Principio de Congruencia, por no ajustarse a los
lineamientos legales establecidos antes del acto de molestia, tal y como
lo especifique ante el Tribunal Ad Quem y que establece a su vez los
ordinales que se dicen violentados y expuesto en líneas anteriores.

b).- Expuse en Vía de Agravio el hecho de que el Juez Natural, al


resultar conocedor con anterioridad de los hechos materia del juicio
ponderado a su consideración, debió de haberse excusado y no lo hizo;
empero dicho agravio se extendió en contra del Secretario del Juez de
origen, agravio éste último que el Tribunal Ad Quem, fue
completamente omiso en abordar su estudio en modo alguno, lo que me
deja en completo estado de Indefensión y efectivamente hace
Incongruente su resolución que aquí se combate.

c).- Le manifesté además que, era imposible decretar la Nulidad


de la Escritura Pública número 6,114 de fecha 28 de Mayo de
1988, porque el origen de ésta radicaba en el trámite de Jurisdicción
Voluntaria relativo a las Diligencias de Información Ad Perpetuam que
fueron su origen, y que éstas (LAS DILIGENCIAS CITADAS) no
habían sido atacadas en forma alguna, de donde devenía precisamente
lo improcedente de la acción puesta en ejercicio por mi contraria.

Respecto del primer agravio, la responsable se


concreto a exponer que si estaban reunidas las exigencias de
formalidades del procedimiento, así como dijo, se había cumplido
además con la congruencia alegada en vía de agravio, DESESTIMANDO
sin mayor trámite el citado punto de disentimiento, sin que en el caso,
expusiera en qué consistía ese cumplimiento observado de su parte en
la recurrida, sin citar precepto legal alguno y sin realizar razonamiento
lógico jurídico para sostener su resolución, infringiendo así en perjuicio
del suscrito el artículo 16 primer párrafo del Mandato Máximo.

Al particular cito el siguiente criterio emitido por los


Tribunales Colegiados de Circuito, el que se cita bajo los siguientes
datos y rubro:

No. Registro: 190,790


Jurisprudencia
Materia(s): Penal
Novena Época
Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XII, Diciembre de 2000
Tesis: III.2o.P. J/11
Página: 1231

FUNDAMENTACIÓN Y MOTIVACIÓN, LA JURISPRUDENCIA POR


CONTRADICCIÓN DE TESIS 40/97, SUSTENTADA POR LA PRIMERA SALA
DE LA SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN, NO TIENE LOS
ALCANCES DE EXIMIR AL TRIBUNAL DE ALZADA DE CUMPLIR CON LA
DEBIDA.- La jurisprudencia por contradicción de tesis 40/97, de rubro:
"SUPLENCIA DE LA QUEJA DEFICIENTE EN LA APELACIÓN EN MATERIA PENAL.",
publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época,
Tomo VI, octubre de 1997, página 224, de ninguna manera autoriza al tribunal
ad quem a dejar de observar el principio de legalidad que consagra el artículo
16 constitucional, esto es, que todo acto de autoridad que constituya un acto de
molestia debe estar debidamente fundado y motivado, ni a omitir el estudio de
las constancias que obran en el sumario, o a dejar de sustentar la legalidad de
su fallo, pues dicha jurisprudencia sólo es aplicable al caso particular de la
suplencia de la queja, y no a la integridad y totalidad de las resoluciones, es
decir, sólo es válido para el caso de no encontrar deficiencia de la queja que
suplir, lo cual solamente se puede dilucidar por medio de un examen oficioso,
precisamente de las constancias que obran en autos, hipótesis particular en que
permite remitirse a las consideraciones y fundamentos de la sentencia de
primer grado, con el objeto de evitar un estudio ocioso de aspectos no
controvertidos por el reo o su defensor en su escrito de agravios o en ausencia
de ellos. Estimar lo contrario, aceptando que el tribunal de control constitucional
tenga que analizar la sentencia de primer grado, para estar en posibilidad de
pronunciarse respecto de la legalidad o no del acto reclamado, de acuerdo con
la técnica del juicio de amparo, sería jurídicamente inaceptable, porque aquélla
quedó legalmente sustituida por la de segunda instancia que constituye el acto
reclamado carente de la debida fundamentación y motivación; de ahí que si el
tribunal responsable, para fundar y motivar su resolución, adujo que resultaba
innecesario y absurdo efectuar el análisis pormenorizado de cada una de las
pruebas y su adecuación al hecho típico cuando no encuentra agravio que
suplir, y que con los propios argumentos del Juez natural debe confirmarse la
resolución apelada, apoyándose para ello en la jurisprudencia por contradicción
de tesis 40/97 ya mencionada, es obvio que su proceder va en contra de dicha
jurisprudencia, del primer párrafo del artículo 16 constitucional y de la diversa
jurisprudencia 902 de la anterior Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia
de la Nación, de rubro: "FUNDAMENTACIÓN Y MOTIVACIÓN.", consultable en la
página 1481, del Apéndice al Semanario Judicial de la Federación 1917-1988,
Segunda Parte, criterio que encuentra apoyo en la parte considerativa de la
ejecutoria que dio lugar a la tesis primeramente mencionada en que se sostuvo
lo siguiente: "no es a través de la suplencia de la deficiencia de los agravios, a
que se refiere el Tribunal Colegiado denunciante, como se debe cuestionar el
actuar del tribunal de alzada al resolver la apelación de la sentencia si en ella no
encontró irregularidades, pues tal figura jurídica sólo se entiende referida al
caso de que sí existan; lo cual no implica, evidentemente, que se le exima de la
obligación de fundar y motivar sus resoluciones, en virtud de que tal obligación
ya la exige el artículo 16 constitucional".

SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA PENAL DEL TERCER CIRCUITO.

Amparo directo 143/99. 14 de mayo de 1999. Unanimidad de votos. Ponente: Óscar


Vázquez Marín. Secretario: Ernesto Antonio Martínez Barba.

Amparo directo 195/99. 24 de junio de 1999. Unanimidad de votos. Ponente: Óscar


Vázquez Marín. Secretario: Ernesto Antonio Martínez Barba.

Amparo directo 314/99. 23 de septiembre de 1999. Unanimidad de votos. Ponente:


Hugo Ricardo Ramos Carreón. Secretario: Daniel Castañeda Grey.

Amparo directo 329/99. 7 de octubre de 1999. Unanimidad de votos. Ponente:


Óscar Vázquez Marín. Secretario: Luis Humberto Medina Arellano.

Amparo directo 67/2000. 24 de marzo de 2000. Unanimidad de votos. Ponente:


Jorge Fermín Rivera Quintana. Secretario: Francisco Javier Villaseñor Casillas.

Empero, debe decirse que además con dicha resolución


se infringe lo establecido en los ordinales 430 y 444 del
Enjuiciamiento Civil Estatal, en tanto que dicho ordinales establecen
la obligación del Tribunal de Alzada para analizar de manera oficiosa
aquellas cuestiones que priven de defensa a las partes, como aconteció
en el caso propuesto y el no haberlo hecho, definitivamente que irroga
perjuicios, por cuanto a que, efectivamente me dejan en completo
estado de indefensión.

Al particular cito el siguiente criterio emitido por los


Tribunales Colegiados de Circuito, el que se cita bajo los siguientes
datos y rubro:

No. Registro: 187,872


Tesis aislada
Materia(s): Civil
Novena Época
Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XV, Febrero de 2002
Tesis: III.4o.C.15 C
Página: 755

AGRAVIOS. CUÁNDO RESULTA UNO PREPONDERANTE PARA EL EFECTO


DE REVOCAR LA RESOLUCIÓN RECURRIDA Y CUÁNDO PROCEDE SU
ESTUDIO EN FORMA CONJUNTA O SEPARADA, DE CONFORMIDAD CON
LO DISPUESTO POR EL ARTÍCULO 430 DEL CÓDIGO DE
PROCEDIMIENTOS CIVILES DEL ESTADO DE JALISCO.- La fracción I del
artículo 430 del Código de Procedimientos Civiles del Estado de Jalisco
establece: "La autoridad judicial al conocer y resolver los recursos, salvo los
casos que la ley permita el estudio o revisión oficiosa, y además de las
establecidas en este código, observará las siguientes reglas: I. Examinará y
decidirá en forma conjunta o separada, todos los agravios alegados contra la
resolución o acto procesal recurrido, exceptuándose el caso en que uno solo
resulte preponderante.". De lo anterior se desprende que el ad quem, previo a
emitir la resolución correspondiente en los recursos que resuelve, debe
observar las reglas que al efecto establece el ordenamiento legal citado, esto
es, examinar la totalidad de los agravios señalados, excepto cuando alguno de
ellos resulte preponderante para revocar el fallo recurrido, situaciones que se
presentan cuando: a) se decreta que el recurso quedó sin materia, en atención
a su improcedencia o a la declaración de desierto; b) El examen de algún
agravio pone de manifiesto que se violaron las reglas esenciales del
procedimiento en el juicio de donde emana la resolución recurrida, que tenga
por efecto reponer aquél, en términos del artículo 444 del Código de
Procedimientos Civiles del Estado; c) El estudio de uno de los agravios pone de
manifiesto lo infundado de la determinación impugnada, y no apareciendo otro
motivo legal para sostener el sentido de la resolución, proceda su revocación, y
entrar al examen del fondo del asunto con plenitud de jurisdicción; d) Se
modifique la sentencia, de manera que respecto de algunas prestaciones resulte
favorable a los intereses del recurrente y, por consecuencia, los agravios
producidos en relación con las prestaciones modificadas, no sirvan para variar el
sentido de esa consideración; e) El órgano jurisdiccional previamente se haya
pronunciado sobre el particular, al dar respuesta a otro agravio, de manera que
resulte ocioso reiterar esa consideración; y, f) Se determine que los agravios
son inoperantes, ya sea porque no se orienten a atacar ninguno de los
fundamentos de la resolución recurrida, o sólo se ataquen algunos de los
argumentos que rigen el acto materia del recurso, pero dejen firmes otros,
siendo inútil el estudio de los agravios propuestos, ya que aunque resultaran
fundados, dada la naturaleza de la resolución impugnada, sea imposible revocar
el sentido de la misma. Pero cuando no se trata de agravios preponderantes,
por ser accesorios a la acción ejercida, relacionados, por ejemplo, con la
condena a pagar intereses ordinarios, moratorios y costas, y los agravios
omitidos por la responsable tienen que ver con la improcedencia de la vía, de la
acción de la pena convencional y a la indebida valoración de pruebas, es
evidente que no se está en el caso de excepción a que se refiere la fracción I
del artículo 430 del Código de Procedimientos Civiles del Estado de Jalisco y,
por ende, la Sala de apelación tenía la obligación de analizarlos.

CUARTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL TERCER CIRCUITO.

Amparo directo 208/2001. Adiel Alcántara Ochoa, por sí y como representante legal
de Impulsora Aldama de Guadalajara, S.A. de C.V. 18 de mayo de 2001. Unanimidad
de votos. Ponente: Elías H. Banda Aguilar. Secretario: Luis Ávalos García.

Así las cosas, se insiste en que efectivamente la


sentencia primaria, no fue congruente con la litis entablada en el
natural; para robustecer lo anterior, se cita el siguiente criterio de
jurisprudencia, bajo los siguientes datos y rubro:

No. Registro: 197,938

Jurisprudencia

Materia(s): Civil

Novena Época

Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito


Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta

VI, Agosto de 1997

Tesis: III.1o.C. J/16

Página: 628

SENTENCIAS, PRINCIPIO DE CONGRUENCIA EN LAS (LEGISLACIÓN DEL


ESTADO DE JALISCO).- Las sentencias deben ser congruentes con la
demanda, su contestación y con las demás pretensiones deducidas
oportunamente en el pleito, según lo dispone el artículo 79, antes de su
reforma, del Código de Procedimientos Civiles del Estado de Jalisco (de similar
redacción al actual 87). Por otro lado, de lo preceptuado por los numerales 291,
primer párrafo y 296 del propio ordenamiento, se infiere que, dentro del
procedimiento civil, sólo pueden ser materia de prueba los hechos a que se
contrae la litis, es decir, los que son objeto del debate. De esta suerte, no es
jurídicamente factible que en el fallo se tomen en cuenta hechos que, aun
cuando aparezcan probados, no fueron alegados oportunamente por las partes.

PRIMER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL TERCER CIRCUITO.

Amparo directo 937/89. Guillermina Michel Michel de Velasco. 9 de febrero de 1990.


Unanimidad de votos. Ponente: José de Jesús Gudiño Pelayo. Secretario: Sergio Mena
Aguilar.

Amparo directo 1127/92. Josefina Ruiz Ruiz. 16 de abril de 1993. Unanimidad de


votos. Ponente: José de Jesús Gudiño Pelayo. Secretaria: Alicia Marcelina Sánchez
Rodelas.

Amparo directo 977/95. María del Consuelo Rosales Soria. 19 de octubre de 1995.
Unanimidad de votos. Ponente: Carlos Arturo González Zárate. Secretario: José Luis
Fernández Jaramillo.

Amparo directo 1377/96. Pablo Morales Barajas. 13 de diciembre de 1996.


Unanimidad de votos. Ponente: Carlos Arturo González Zárate. Secretario: José Luis
Fernández Jaramillo.

Amparo directo 884/97. Elva Silvia Ramírez. 19 de junio de 1997. Unanimidad de


votos. Ponente: Carlos Arturo González Zárate. Secretario: José Luis Fernández
Jaramillo.

Respecto del segundo agravio, debe decirse que si bien


el Tribunal de Alzada se ocupo de la molestia consistente en la excusa
que debió de haber hecho valer el Juez Titular del Juzgado, no menos
cierto es que, en modo alguno se ocupo respecto de la propia causa
hecha valer respecto del Secretario del propio Tribunal.

La sola omisión del estudio de dicho agravio, trae


como consecuencia la incongruencia de lo resuelto por el Ad Quem y es
a la postre, bastante para conceder la Protección Constitucional
impetrada, pues de no ser así, se me deja de nueva cuenta en completo
estado de indefensión.

Ahora bien, respecto del agravio hecho valer


consistente en el hecho de que el Juez no se excusó teniendo aquel la
obligación de hacerlo, por haber participado en la creación de la
documental sobre la cual, se solicitaba su nulidad, y que no realizó, el
Ad Quem expone que, de autos se advirtió que el suscrito
oportunamente hice valer el agravio correspondiente ante el natural,
cuestión que fue desechada por aquel y que la haberla consentido, se
trata de actos consumados de modo irreparable. Tal proceder es
contrario a la Ley, porque en sentido opuesto a su razonamiento, debe
decirse que, ante el juez primario el suscrito me inconformé en contra
de la determinación de aquel para excusarse, empero, contra tal
determinación hice valer el medio de defensa que tuve a mi alcance, sin
que ello signifique consentimiento en dicha actuación y que por ende,
aquella quede firme; contrario a ello, dicha inconformidad, más bien,
servía al Ad Quem para proceder a subsanar las irregularidades como la
apuntada, pues en el evento de que no me hubiere inconformado,
evidentemente que entonces si, quedaría dicho acto consentido, más en
los términos en que aparece en autos.

Para efectos de robustecer lo anterior, se cita el


siguiente criterio:

No. Registro: 191,674


Tesis aislada
Materia(s): Civil
Novena Época
Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XI, Junio de 2000
Tesis: I.6o.C.208 C
Página: 577

IMPEDIMENTO. SI EL JUZGADOR NO LO PLANTEA DURANTE EL JUICIO


ORDINARIO A TRAVÉS DE LA EXCUSA, PODRÁ EL INTERESADO
PROMOVER LA RECUSACIÓN, ANTES DE QUE SE DICTE SENTENCIA Y NO
HASTA EL AMPARO.- Una interpretación armónica y sistemática de los
artículos 1132, fracciones X y XI, 1133, 1134, 1138, 1139, 1140 y 1148 del
Código de Comercio, en concordancia con lo establecido por los artículos 39,
fracciones X y XI, 43, 46, 47, 48, párrafo primero, 49, 50, 51, 52 y 53 del
capítulo II "Impedimentos", sección primera "Excusas" y sección segunda
"Recusaciones", del Código Federal de Procedimientos Civiles, debe ser en el
sentido de que el Juez, Magistrado o Ministro que se encuentre en alguna de las
hipótesis normativas de impedimento para conocer de un juicio ordinario
mercantil, deberá plantearlo a través de la excusa; pero si ello no acontece, la
parte interesada "podrá" promover en el procedimiento la recusación en contra
del funcionario judicial que considera impedido, antes de que se dicte sentencia,
dado que si no prepara la violación procesal respectiva, no podrá válidamente
invocar en el juicio constitucional el supuesto o real impedimento, si tal cuestión
no fue previamente ventilada ante la autoridad correspondiente.

SEXTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL PRIMER CIRCUITO.

Amparo en revisión 3356/99. Molinos Miller, S.A. 1o. de marzo de 2000.


Unanimidad de votos. Ponente: Gustavo R. Parrao Rodríguez. Secretario: José
Guadalupe Sánchez González.

Amen de la obligación del Tribunal Ad Quem para


apreciar las violaciones procesales que se cometan en primera instancia
de manera oficiosa, pues ese es el espíritu del artículo 444 del Código
Procesal Civil Estatal y no haberlo hecho así definitivamente que me
para perjuicios.

Respecto del último motivo de disentimiento,


consistente en que el natural decreto la nulidad de una escritura pública
cuyo origen lo constituye un trámite de jurisdicción voluntaria, sin que
éstas previamente hayan sido decretadas nulas éstas, evidentemente
que el Ad Quem infringe los principios más elementales a que debe ceñir
su juicio al resolver un asunto puesto a su consideración, puesto que
conforme a lo resuelto por aquel, se advierte que se ocupó más de
establecer el valor probatorio que cobran el trámite de jurisdicción
voluntaria aludido, cuestión que nada tiene que ver con el motivo de
inconformidad, que en resolver el verdadero agravio, fundando y
motivando su resolución.
En efecto, no puede decirse ni admitirse válida y
legalmente que, se decrete una nulidad sobre una escritura pública que
tuvo su origen en un trámite de Jurisdicción Voluntaria consistentes en
Diligencias de Información Ad Perpetuam, sin que previamente se
decrete la nulidad sobre aquellas que fueron su origen, pues es evidente
que bajo esas condiciones ambas instancias faltaron al Principio de
Exahustividad de que deben estar revestidas todas las resoluciones,
introducido como tal en el texto del artículo 87 del Enjuiciamiento
Civil Estatal, lo que es motivo de queja.

Empero, dichas diligencias siguen vigentes en los


términos resueltos por ambas instancias, dado que éstas no fueron
materia de la Litis, porque no se demando su nulidad y por ende, la
sentencia no se ocupó de este aspecto.

Sabido de todo conocedor del derecho es que, LA


NULIDAD NO EXISTE DE PLENO DERECHO, sino que, debe
declararse ésta por la Autoridad Judicial. En los términos resueltos por
ambas instancias, se advierte PARTIERON LA CONTINENCIA DE LA
CAUSA, pues decretaron la nulidad de un instrumento público, sin
tomar en cuenta el origen de éste, el que huelga decir, se cumplió
observando las formalidades esenciales del procedimiento que para ellas
establece la Ley, así como todos los requisitos de procedibilidad; en este
sentido, debe decirse que, al trámite aludido, se adjuntó oportunamente
el CERTIFICADO DE NO INSCRIPCIÓN respecto del inmueble sobre
el cual versó, circunstancia soslayada por amabas instancias y que al
haber pasado por alto su estudio, ambas infringen el citado principio de
Exahustividad.

Aunado a lo anterior, habrá de decirse además que


bajo las anotadas circunstancias, lo resuelto por el natural y confirmado
por el Ad Quem, equivale a revocarse sus propias determinaciones, lo
cual no le es permitido a ninguna de sendas Autoridades; al particular
habrá de decirse además que, conforme a lo establecido en el artículo
89 C del Enjuiciamiento Civil Estatal, las resoluciones dictadas en
Jurisdicción Voluntarias no pueden alterarse, ni modificarse, si no es, a
través de un juicio autónomo en el que se cumplan las formalidades
esenciales del procedimiento, cuestiones todas inadvertidas por ambas
instancias y que son motivo de queja.

Para robustecer lo anterior, se cita el siguiente criterio,


bajo los siguientes datos y rubro:

No. Registro: 191,508


Tesis aislada
Materia(s): Civil
Novena Época
Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XII, Julio de 2000
Tesis: II.2o.C.237 C
Página: 822

SENTENCIAS DEFINITIVAS QUE HAN CAUSADO EJECUTORIA. SU


ALTERACIÓN O MODIFICACIÓN RESULTA IMPROCEDENTE POR LA VÍA
INCIDENTAL (LEGISLACIÓN DEL ESTADO DE MÉXICO).- De la
interpretación objetiva y analítica del texto del párrafo segundo del artículo 223
del Código de Procedimientos Civiles para el Estado de México, se sigue que las
resoluciones judiciales firmes o ejecutoriadas dictadas en negocios de
alimentos, ejercicio y suspensión de la patria potestad, interdicción, jurisdicción
voluntaria y las demás que prevengan las leyes, pueden alterarse o modificarse
cuando cambien las circunstancias que afecten el ejercicio de la acción deducida
en el juicio correspondiente, pero a ese respecto resulta improcedente la vía
incidental para la modificación de una sentencia definitiva, provista de firmeza,
al ser evidente que del precepto de mérito no se desprende que la alteración o
modificación aludidas pudiera lograrse a través de la promoción de un simple
incidente, cuya hipótesis deviene inadmisible conforme a derecho, pues ello
atentaría contra toda lógica jurídica, precisamente en razón a que una
resolución interlocutoria carece de fuerza suficiente para influir o variar la
inmutabilidad o firmeza de una sentencia de segunda instancia inimpugnable
que decidió el fondo de cierta controversia planteada. Por consiguiente, sólo a
través de un nuevo planteamiento en vía de juicio formal podrá lograrse lo
último, pero no mediante la vía incidental.

SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL SEGUNDO


CIRCUITO.

Amparo en revisión 454/99. Leonor Aurora Brenes Berho. 13 de junio de 2000.


Unanimidad de votos. Ponente: Virgilio A. Solorio Campos. Secretaria: Araceli Delgado
Holguín.

La reiteración de los conceptos de violación que se


vienen vertiendo a lo largo de este estudio, obedece substancialmente a
la postura del Tribunal resolutor que a toda costa en su actuación
pretende sostener en contra de la propia letra de la ley, por lo cual de
manera ilegal y con argumentos carentes de sustento, CONFIRMA la
resolución primogénita, y con ello violentar en mi perjuicio las Garantías
Individuales consagradas en la carta Magna en sus artículos 14 y 16
invocados con inmediata anterioridad.

Por ende solicito se me tenga por reproducido en todos


y cada uno de sus términos el escrito por el cual interpuse el Recurso de
Apelación que fue Juzgado por la responsable.

Ahora bien, para todo aquello que por inadvertencia o


por otras causas hayan pasado desapercibidas por el suscrito y no
hayan sido alegadas como conceptos de violación en este escrito, desde
ahora solicito verme beneficiado con lo establecido por el artículo 76 Bis
de la Ley de Amparo, pues de sostenerse la resolución atacada,
se me estaría privando de defensa y trascendiendo con ello, al
inevitable e irreparable violación a mis derechos más
elementales.

Para robustecer mi causa de pedir, en este


momento cito el siguiente criterio de jurisprudencia, el que resulta de
observancia obligatoria para el Tribunal que deba conocer de este
recurso, en términos de lo establecido en el numeral 193 de la Ley de
Amparo y que se menciona bajo los siguientes datos y rubro:

No. Registro: 194,444


Jurisprudencia
Materia(s): Común
Novena Época
Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
IX, Marzo de 1999
Tesis: VI.2o. J/166
Página: 1337

SUPLENCIA DE LA DEFICIENCIA DE LA QUEJA EN LAS MATERIAS CIVIL Y


ADMINISTRATIVA, PROCEDENCIA DE LA.- De lo dispuesto por el artículo 76 bis,
fracción VI de la Ley de Amparo, se desprende que es procedente suplir la deficiencia de
los conceptos de violación o de los agravios "en otras materias" cuando se advierta que ha
habido en contra del quejoso o del particular recurrente una violación manifiesta de la ley
que lo haya dejado sin defensa; de lo que se sigue, que la suplencia prevista en esa
fracción opera en los amparos en las materias civil y administrativa, toda vez que el
legislador, al emplear las palabras "en otras materias", se refiere a las que no están
expresamente reguladas en las primeras cinco fracciones del artículo citado, y que son,
precisamente, la civil y la administrativa.

SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO DEL SEXTO CIRCUITO.

Amparo en revisión 197/91. Yolanda Julieta Ballesteros Bonne y otros. 15 de mayo de 1991.
Unanimidad de votos. Ponente: José Galván Rojas. Secretario: Armando Cortés Galván.

Amparo en revisión 5/93. Francisca Rendón Bazán. 21 de enero de 1993. Unanimidad de votos.
Ponente: Gustavo Calvillo Rangel. Secretario: Jorge Alberto González Álvarez.

Amparo directo 406/93. Instituto Mexicano del Seguro Social, Delegación Estatal en Tlaxcala. 31
de agosto de 1993. Unanimidad de votos. Ponente: Gustavo Calvillo Rangel. Secretario: Jorge
Alberto González Álvarez.

Amparo en revisión 716/98. Antonio Valdez Fernández. 28 de enero de 1999. Unanimidad de


votos. Ponente: Antonio Meza Alarcón. Secretaria: Myriam del Perpetuo Socorro Rodríguez Jara.

Amparo en revisión 722/98. Martín Valdez Fernández. 4 de febrero de 1999. Unanimidad de


votos. Ponente: Antonio Meza Alarcón. Secretaria: Myriam del Perpetuo Socorro Rodríguez Jara.

Véase: Semanario Judicial de la Federación, Octava Época, Tomo IV, Primera Parte julio-
diciembre de 1989, página 122, tesis P. LIV/89, de rubro: "SUPLENCIA DE LA DEFICIENCIA DE
LA QUEJA. EN LAS MATERIAS CIVIL Y ADMINISTRATIVA PROCEDENTE.".

INCIDENTE DE SUSPENSION.

Con apoyo en lo establecido por los arábigos 124, 125


y relativos y aplicables de la Ley de Amparo, expresamente solicito de
Su Señoría LA SUSPENSION DEL ACTO RECLAMADO,
PROVISIONALMENTE y en su oportunidad la DEFINITIVA, para el
efecto de que las cosas se mantengan en el estado que actualmente
guardan hasta en tanto no se resuelva el fondo del presente Juicio de
Garantías, medida que es a todas luces procedente acorde con lo
establecido por el primero de los arábigos anteriormente citados, amen
de que en la especie no se sigue perjuicio al interés social, ni se
contravienen disposiciones de orden público.

Por lo antes expuesto, fundado y razonado a


Ustedes CC. Magistrados del Tribunal Colegiado en Materia Civil
en Turno del Tercer Circuito, atentamente,

P I D O:

Se me tenga dentro de tiempo y forma legales


interponiendo demanda de Amparo Directo y se admita la misma por
estar ajustada a derecho y en contra de la resolución de fecha 10 diez
de Agosto del actual, dictada por los CC. Magistrados de la H. Séptima
Sala del Honorable Supremo Tribunal de Justicia en el Estado de Jalisco,
dentro del Toca marcado con número de expediente 806/2007.

Se me conceda la Suspensión del Acto Reclamado para


los fines anteriormente indicados.

Emplace al tercero perjudicado en su domicilio


señalado en autos ante la Responsable, para los efectos de que
manifiesten con este Juicio, lo que a su interés legal convenga.

Cumplidos que sean los trámites procesales dicte


Resolución concediéndome el Amparo y Protección de la Justicia Federal
en los términos ya solicitados, ORDENANDO A LA AUTORIDAD
RESPONSABLE PROCEDA A REVOCAR LA RESOLUCIÓN EMITIDA
DE SU PARTE Y DICTE UNA NUEVA, EN DONDE ANTE LA FALTA DE
REENVÍO QUE PRIVA EN EL SISTEMA DE APELACIÓN, REVOQUE
LA RESOLUCIÓN PRIMARIA.

Mande pedir a las Responsables sus Informes Previo


y Con Justificación, los cuales deberán rendir dentro de los términos a
que se refieren los artículos 131 y 149 respectivamente de la Ley de la
Materia.

Desde estos momentos ofrezco como Pruebas de mi


parte, las actuaciones del Toca de Apelación marcado con el número de
expediente 806/2007, las cuales acorde a lo establecido por el artículo
402 del Enjuiciamiento Civil del Estado, tienen pleno valor probatorio y
de las cuales se desprende la violación de Garantías invocadas en este
escrito.

Tenga como mis autorizados en los términos del


numeral 27 de la Ley de Amparo a los Profesionistas que he mencionado
y como domicilio para recibir notificaciones el que he dejado asentado
en el preámbulo de este líbelo de Garantías.

A T E N T A M E N T E.
Guadalajara, Jalisco, en 31 de Agosto de 2007.

JOSÉ MARTÍNEZ SÁNCHEZ.

ACEPTAMOS CARGO CONFERIDO Y PROTESTAMOS SU FIEL Y


LEGAL DESEMPEÑO.

LIC. JESÚS MARÍA GARCÍA CARRILLO.

LIC. ABEL MARTÍNEZ DELGADO.

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