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Instituto de Educación Superior N° 28 “Olga

Cossettini”

Trayecto de Práctica: Taller de Docencia II

Informe de observación de clase

Alumno: Sterlin, Gisela


Profesora: Insausti, María Fernanda
Año: 2022

Institución observada: Escuela de Educación Secundaria


Orientada N° 436 "Juan Mantovani"
El presente trabajo se realizó en base a las observaciones realizadas en
un primer año del nivel secundario de la escuela N° 436 "Juan Mantovani" que
se encuentra ubicada en la calle Uriburu 546 del Barrio General Las Heras, un
barrio ubicado en el sudeste de la ciudad de Rosario, delimitado por las calles:
Lamadrid, Avenida Abanderado Grandoli, Avenida Boulevard Seguí y Avenida
San Martín.

Mapa: OpenStreetMap (CC-BY-SA).

El barrio se caracteriza por ser un barrio mixto, con casas de familia y


empresas pequeñas. Las edificaciones en su mayoría son sencillas, con
algunos sectores más precarios en el sudeste. Sobre las avenidas se
encuentran algunas torres de baja y mediana altura. También en el extremo
sudeste, sobre la Avenida Abanderado Grandoli se encuentra unos complejos
de Fonavi y torres de viviendas.

En el sur del barrio, sobre Avenida Uriburu, se encuentra el Centro


Municipal del Distrito Sur Rosa Ziperovich que atiende al Distrito Sur. En sus
cercanías se encuentra el Ex Batallón de Comunicaciones 121, el cual fue
remodelado y reconvertido en espacios públicos como un museo, un extenso
parque con diversos senderos y juegos.

A través de lo observado y lo aportado por diferentes actores


institucionales, puedo decir, que la mayoría de las familias de la que son parte
los alumnos de la escuela, son familias muy humildes, con escasos recursos
económicos. Muchos padres están incluidos en los planes de ayuda del
estado., otros son empleados o changarines sin un puesto fijo, en tanto las
madres son por lo general amas de casa y si se desempeñan en el plano
laboral lo hacen como empleadas domésticas o en trabajos poco remunerados
y sin aportes jubilatorias ni perciben el beneficio de una obra social.

En general el nivel de escolaridad de los padres, alcanza en su mayoría


la escolaridad primaria, y un menor número de ellos concluyeron el secundario.

Un poco de historia…

La escuela Juan Mantovani se inauguró en marzo de 1986, contaba en


ese momento con siete divisiones, seis correspondientes a primer año y un
numeroso grupo de segundo año, con un plantel inicial de 210 alumnos,
funcionando en turno mañana y tarde.
En el mismo año de la inauguración comenzó la búsqueda del nombre
para la Escuela. Se realizó una encuesta que promovió una amplia
participación en la comunidad. La mayoría de los sufragios recayó en Juan
Mantovani, quien fuera un destacado pedagogo santafesino, cuyo pensamiento
filosófico y pedagógico contribuyó a la formación de varias generaciones de
profesores, ya que sus obras más difundidas se refieren a la educación
secundaria, entre otras: "Bachillerato y formación juvenil" y "Adolescencia,
formación y cultura".
A continuación, prosiguieron los trámites correspondientes y recién en
1988 pudo imponerse oficialmente el nombre elegido.

En el año 1990 la Escuela alcanzó su estructura actual: seis divisiones


de Primero, Segundo y Tercer Año respectivamente; cuatro divisiones para
Cuarto Año y otras tantas para los quintos. Veintiséis en total, divididas en
turno mañana y tarde.

No todo fue festejo, hubo momentos difíciles. La crisis económica que


afectaba a muchas familias de la comunidad se acentuó en esos años.
Particularmente la pérdida del empleo se cernía como un peligro potencial o
como una preocupante realidad en muchas de ellas y que actualmente sigue
siendo preocupante. Se recibió subsidio oficial en alguna oportunidad, pero
nunca bastaba para cubrir las necesidades más inmediatas, sobre todo
respecto al edificio. Y pese a los aportes generosos de los padres no se podía
cubrir ese déficit.

Hubo meses en que se perdían días de clase ya que las distintas


divisiones debían turnarse para ocupar las aulas existentes y las nuevas no
llegaban a terminarse a tiempo. También se dictó clase en el sótano y aún bajo
los árboles. Durante un tiempo debió utilizarse un aula precaria construida en
madera y con techo de chapa la que apodaban "la cabaña".
Hubo que esperar al año 1995 para que el establecimiento cambiara
oficialmente ' su denominación y adquiriera la actual: Escuela de Enseñanza
Media N° 436 "Juan Mantovani”.

EL 15 de octubre de 1996 se festejaron los primeros diez años junto con


la inauguración de obras edilicias. Se dejaron inauguradas tres aulas: en planta
alta, una de la cuales se utilizó provisoriamente como laboratorio, además de
dos baños otra aula en planta baja.

Hoy en día la escuela se puede ver así:


La escuela es de gestión pública como mencioné anteriormente y aloja a
una cantidad aproximada de 400 alumnos entre turno mañana y tarde. Cuenta
con seis secciones primero, segundo y tercer año, y dos divisiones de cuarto y
quinto año con 18 alumnos de promedio por curso, si bien los primeros años
son más numerosos a medida que van ascendiendo los cursos va
disminuyendo la cantidad.
La misma no cuenta con un equipo de asesores pedagógicos, pero sí
me comentó la directora reemplazante que algunos cursos, como el que yo
estuve observando tienen una “facilitadora de la convivencia” que es una
docente que realiza talleres con los alumnos de acuerdo a diferentes
situaciones problemáticas detectas o comentadas por los mismos. Debido a los
paros docentes realizados en las semanas que hice las observaciones, no
pude observar ninguno de esos talleres, ni conversar con la profesora a cargo,
ya que los mismos se realizan los días jueves, días en que se realizaban los
paros anteriormente mencionados.

En la institución no se cuenta con comedor, pero todos los días se


entrega a los alumnos un alfajor como merienda, no sé si siempre se entrega lo
mismo, pero por lo menos así fue mientras duró mi estadía allí.

En cuanto a la estructura edilicia, la misma cuenta con dos plantas, si


bien es una edificación de más de 30 años, ambas se encuentran en buenas
condiciones generales, tanto de albañilería, como de pintura u otras
instalaciones indispensables para el buen funcionamiento de la misma. Los
salones no son muy amplios algunos, pero de acuerdo a la cantidad promedio
de 20 alumnos por sesión que asisten, es más que suficiente el espacio.

Además, la escuela cuenta con biblioteca con libros para trabajar


durante el horario de clases y también para llevarse a casa, en forma de
préstamo.

Plano casero de ambas plantas:


PLANTA BAJA:

PLANTA ALTA:
En cuanto a los proyectos institucionales, los docentes me comentan
que se plantearon en el presente año proyectos por áreas específicas
pensados en los diferentes departamentos de cada área, en donde a su vez se
trata de incluir en ellos problemáticas actuales de la institución, como son:
deserción escolar, consumos problemáticos, relaciones sociales, educación
sexual, etc. También cuentan con proyecto de inclusión llevado a cabo con
diferentes escuelas especiales, de hecho, en todos los años hay chicos
incluidos y hay diferentes escuelas y diferentes profesores que asisten, algunos
acompañan todo el tiempo y otros van una o dos veces por semana y
mensualmente hay reuniones con las escuelas especiales y los tutores para
darle información de los alumnos en cada una de las áreas. Incluso hay
proyectos de trabajo para esos chicos.

En la institución no funciona ningún centro de estudiantes, pero sí se


observa que hay delegados en cada curso, que por ejemplo se encargan de
buscar y distribuir la merienda para todos los alumnos del curso.

En cuanto al funcionamiento de las instalaciones de la institución, los


alumnos ingresan a partir de las 13 hs. pero se quedan en el patio descubierto
a techado de la parte de adelante sin tener acceso a la parte de las aulas o
patios internos.

A las 13:15 hs. suena un timbre y el portero abre una puerta de rejas que
da acceso a las instalaciones mencionadas, luego se cierra y no se abre hasta
el horario de salida.

Las horas de Ed. Física se desarrollan en los patios de adelante con


estricta supervisión de los profesores a cargo, los cuales acompañan la entrada
y salida de los alumnos al lugar. De todos modos, resulta un lugar peligroso,
desde mi juicio, ya que ahí se encuentra la puerta que sale a la calle y la misma
no se encuentra con llave durante la jornada escolar.

Durante el período que asistí a la institución si bien puede observar


aspectos de la escuela en general, la mirada estuvo puesta sobre 1° 3° del
turno tarde, en cuya división hay un total de alumnos inscriptos, aunque en
dicho tiempo nunca hubo asistencia perfecta e inclusive no siempre asistían los
mismos chicos, un día asistían unos y otro día asistían otros.

El curso se encuentra en el salón indicado con un , si bien no es


un aula muy amplia, tal como detallé anteriormente que eran las aulas de toda
la institución, es un lugar adecuado para la cantidad de alumnos que a ella
asisten.

Durante el primer día de observación (19/09) asistieron 14 alumnos, del


total de los presentes solo una chica llevaba la remera de la escuela, el resto
traía cualquier ropa, pese a que es una escuela pública y no tienen uniforme,
tampoco se los ve que lleven el uniforme de Ed. Física que es generalmente
solicitado. También me llama la atención que en ningún momento nadie les
dice nada al respecto, ni la preceptora, ni los docentes o directivos. Lo mismo
sucede con el uso del celular y el vocabulario que usan.

Da la sensación que los docentes en general no se involucran en este


tipo de situaciones y que inclusive utilizan un lenguaje coloquial, parecido al de
los alumnos como una forma de llegar a ellos. Se los nota por lo general muy
permisivos ante los pedidos de los alumnos, así como también se observa una
naturalización con respecto al comportamiento de los alumnos en el aula, como
cuando se besan o cuentan historias personales en donde se han involucrado
con drogas o alcohol.

De los relatos de los alumnos se desprende la idea que no son todos del
radio escolar y cuentan experiencias en los que fueron víctimas de robo o
intentos de robo. También relatan experiencias de esfuerzo personal para
seguir realizando algún deporte, ejemplo fútbol.

En las dos primeras horas de clases los alumnos tienen Biología, en esta
materia los alumnos realizan una corrección cruzada de las evaluaciones
tomadas unas clases atrás, luego, una vez finalizada dicha actividad la docente
les solicita que saquen el cuadernillo con el que cuenta cada uno de los
alumnos para continuar allí trabajando con el tema: células.

Realizan una lectura colectiva de un texto y reflexionan sobre el mismo.


en general se nota un buen clima de trabajo, en donde si bien no son muchos
los alumnos que participan activamente, el resto de los alumnos se los observa
atentos a la clase.

Durante el recreo los alumnos se mantienen en el salón conversando


entre ellos y con alumnos de otras áreas.

Luego ingresa la docente de Formación Ética y Ciudadana quien se la


nota dirigirse a los alumnos de una manera más formal que la profesora
anterior, la profesora propone realizar un repaso de lo trabajado en la última
clase, ya que ella se encontraba de licencia y no sabe cómo lo trabajaron con
la reemplazante.

Realizan un repaso oral y también en el pizarrón sobre “Etnocentrismo”.


A los alumnos se los nota muy dispuestos a trabajar, inclusive se puede ver
como se animan a contar experiencias personales que por momentos dejan sin
palabras a la docente. Luego avanzan sobre el tema “culturas juveniles” y les
asigna actividades para realizar del cuadernillo.

Finaliza esta hora también con el toque del timbre correspondiente al


segundo recreo y luego ingresa la profesora de Geografía con quienes tienen
dos horas de clases, pero ese día solo tuvieron una hora porque después
asistieron al acto del día del profesor.

Durante esa hora de Geografía se trabajó con el tema “problemas


ambientales”, se les solicitó a los alumnos que buscaran algunos conceptos en
el diccionario para continuar charlando sobre el tema. La mayoría de ellos
realiza la búsqueda a través del celular. Se escriben las definiciones y
rápidamente se hace la hora de asistir al acto.

Durante el acto se pudo observar la participación de alumnos de todos


los años, el resto que estaban como espectadores se los notaba muy
distraídos. Una vez finalizado el acto los alumnos y docentes se retiraron.

En el segundo día de observación (23/09/, los alumnos participaron de


una jornada de juegos por el día del estudiante y la primavera.

Se organizaron diferentes juegos por los que los alumnos iban pasando
por grupos. Muchos chicos se negaron a participar y se los veía con el celular.
Ocurrieron algunos episodios en los que fue necesaria la intervención de los
docentes.

A mitad de tarde realizaron una merienda y luego continuaron pasando


por los juegos, alrededor de las 16:30 se dio por finalizada la jornada y tanto
alumnos como docentes se retiraron del establecimiento.

En el último de observación (26/09) en las dos primeras horas tuvieron


Biología, realizaron un repaso de la clase anterior en la que hablaron sobre
“células”, luego avanzaron en el tema de la reproducción de los seres vivos.
Escribieron la definición de autótrofos y heterótrofos y citaron algunos
ejemplos.

En las dos horas siguiente continuaron con clases de Formación ética y


Ciudadana en la que también repasaron lo trabajado en la clase anterior sobre
“culturas juveniles” y avanzaron en conceptos tales como: construcción de
identidades individuales y colectivas.

Luego la docente les dicta algunas definiciones referidas al tema y les


propone una actividad que entusiasma mucho a los chicos, en donde tienen
que elaborar un escudo o un símbolo que los represente.

En las próximas dos horas los alumnos asisten a la hora Geografía en


donde la docente les comunica que van a realzar actividades con los libros de
biblioteca. Dos alumnos son asignados por la docente para traer los libros para
todos, luego les dicta las consignas y les propone que en grupos de 2 o 3 las
realizan.

Para la última hora los alumnos ya se encuentran muy cansados, la


profesora de Lengua y Literatura intenta hacer un repaso del último libro leído
pero es imposible poder escuchar lo que se hala en la parte de adelante del
aula y la misma docente me comunica que esos días en los que tienen clases a
la última hora generalmente no pueden trabajar.

Pasa muy rápido esa última hora ya que el timbre toca 10 minutos antes
para darle tiempo a los alumnos a que ordenen el aula y formen antes de salir.
De esta manera finaliza el día y tanto los alumnos como docentes se retiran del
establecimiento.

De acuerdo a los altos índices de inasistencias registradas, son claros


indicadores de la presencia de este problema en la escuela. Sin embargo, la
problemática no se agota allí, sino que acarrea una serie de problemas que
implican consecuencias para toda la comunidad educativa. El estudiante que
falta reiteradamente pierde el ritmo escolar, y este tiempo es irrecuperable. Al
docente, por su parte, se le dificulta poder desarrollar su planificación diaria y
tener continuidad en las actividades propuestas para la enseñanza. También
los compañeros de curso se ven afectados, por ejemplo, en realización de
trabajos grupales

Observada dicha situación, me pregunto: ¿Cuál son los principales


motivos de las reiteradas inasistencias? ¿Además de las razones personales,
qué otros factores influyen en esta problemática? ¿Qué responsabilidad toma
la familia frente a esta situación? ¿Qué estrategias emplea la institución? ¿Qué
impacto tienen estas medidas?

Tomando a Terigi (2007), la autora indica dos cosas a propósito del


ausentismo: por un lado, que las inasistencias de los estudiantes en la escuela
se derivan de múltiples razones y motivos que no necesariamente tienen que
ver con lo que hace o deja de hacer la escuela.

Furtado (2003) asegura que La inasistencia es un concepto único que


implica por parte del estudiante el abandono del sistema educativo, no
obstante, no existe una definición pura de inasistencia, en el sentido de que
sólo se está seguro que el individuo no va a volver al sistema educativo cuando
se fallece (p. 5-6). El enunciado de Furtado permite entender la inasistencia
como un estado y no como un acto, por lo contrario, el acto sería el abandono o
la no asistencia. González (2005) ejemplifica esta idea señalando que la
repetición y la inasistencia son fenómenos que en muchos casos están
concatenados, ya que la investigación demuestra que la repetición reiterada
conduce, por lo general, al abandono de los estudios; no obstante, no es
posible determinar que ésta sea la única causa de inasistencia. Elías y Molina
(2005) señalan que los principales factores que causan la inasistencia escolar
pueden ser resumidos en las siguientes líneas: - Problemas de desempeño
escolar, esto es, un bajo rendimiento, dificultades de conducta y aquellos
relacionados a la edad. - Problemas con la oferta educativa o la falta de
establecimientos, es decir, ausencia del grado, lejanía, dificultades de acceso,
ausencia de los maestros. - Falta de interés de las/los adolescentes y de sus
familias en la educación. - Problemas familiares, básicamente mencionado por
las niñas y los adolescentes, tales como la realización de quehaceres del
hogar, el embarazo y la maternidad.

- Problemas relacionados al medio que los rodea, tanto comunitario


como las redes sociales existentes. - Razones económicas, falta de recursos
en el hogar para hacer frente a los gastos que demanda la escuela, el
abandono para trabajar o buscar empleo. - Otras razones, tales como la
discapacidad, servicio militar, enfermedad o accidente, asistencia a cursos
especiales, entre otros. Rosalba Ruiz, José Luis García y María Pérez (2014),
en su publicación sobre la inasistencia escolar, destacan las principales
consecuencias que se presentan en diversas esferas de la vida de las
personas. - Consecuencias en el ámbito personal: pueden ser múltiples, dado
que el alumno inasistente abandona la escuela en su adolescencia e inicia una
vida de adulto con responsabilidades, tales como mantener una familia, cuidar
hijos, etc. - Consecuencias en lo económico: la falta de educación dificulta que
mujeres y hombres rompan el círculo de la pobreza, ya que carecen de
conocimientos, competencias y habilidades que les permitan ingresar a
trabajos remunerados y estables. - Consecuencias sociales: la pérdida de
valores y vínculos los convierte en presas fáciles de caer en drogadicción y
delincuencia; además, pueden ser excluidos de la sociedad quedando
expuestos a vulnerabilidad social; asimismo, al no tener trabajo, serán una
carga para la sociedad.

El problema de las inasistencias escolares reiteradas está relacionado


con otras problemáticas, algunas de estas pueden ubicarse en un nivel previo,
operan como causas, y otras se desencadenan como consecuencias de las
mismas.
Un estudiante cuya trayectoria escolar queda truncada no sólo es un
número más que aumenta las estadísticas, sino que es un sujeto que queda
despojado de contención, vulnerable ante la sociedad y con menos
herramientas para desenvolverse en la vida laboral y profesional.

Las trayectorias escolares han comenzado a ser objeto de atención en


los estudios sobre infancia, adolescencia y juventud, en las políticas sociales y
educativas y en las iniciativas de las escuelas. La noción de trayectoria escolar
refiere al desempeño de los alumnos a lo largo de su escolaridad, año a año,
observando su punto de partida y los procesos y resultados del aprendizaje.
Este concepto subraya la importancia de conocer la historia de cada alumno en
la escuela, teniendo en cuenta su pasado y su futuro (López, 2015). Flavia
Terigi (2008) distingue entre trayectorias teóricas y reales. Las primeras
expresan recorridos de los sujetos en el sistema que siguen la progresión lineal
prevista por éste en los tiempos marcados por una periodización estándar. Tres
rasgos del sistema educativo son especialmente relevantes para la
estructuración de las trayectorias teóricas: la organización del sistema por
niveles, la gradualidad del Curriculum y la anualización de los grados de
instrucción. Por su parte, las trayectorias reales son los recorridos concretos
que realizan los estudiantes en el sistema escolar, y están atravesadas por
diversos factores: el 30 ingreso tardío al sistema, el abono temporario o
definitivo, las inasistencias reiteradas o prolongadas, los índices de repitencia,
la sobreedad, el bajo rendimiento académico. La discontinuidad en las
trayectorias escolares acarrea un perjuicio para quien la sufre; sin embargo, la
perspectiva de trayectorias educativas (no sólo de trayectorias escolares)
puede sustentar políticas de ampliación de las oportunidades de aprendizaje
fuera de la escuela, y permite reconocer los aprendizajes que los sujetos
realizan fuera de la escuela (Maddoni, 2009). Si bien es política de nuestro
sistema educativo evitar que un alumno repita de curso, utilizando diferentes
estrategias que apuntan a darle oportunidades para aprobar las materias2, el
problema de las inasistencias reiteradas afecta directamente el desempeño del
estudiante y lo orilla a tener dificultades para promocionar las materias que se
requieren para avanzar al siguiente curso. La repitencia es, sin dudas, una de
las consecuencias de la no asistencia a clase.
Flavia Terigi (2009) señala que desde que fue creada la escuela
moderna, se advirtió tempranamente la presencia de niños que no aprendían
según lo esperado. El fenómeno usualmente denominado fracaso escolar,
señala la autora, es un fenómeno contemporáneo de la escolarización masiva y
posiblemente sea funcional a algunas de las finalidades de la escolarización.

En resumen, la repitencia y el fracaso escolar pueden repercutir en un


estudiante desmotivándolo a tal punto de decidir abandonar o desertar de la
escuela.
Anexos
Entrevistas
Bibiografía:

 Furtado, M. (2003). Trayectoria educativa de los jóvenes: el problema de


la inasistencia. Cuaderno de Trabajo No 22. ANEP, Comisión y
Secretaría Técnica para la Transformación de la Educación Superior.
Montevideo.
 Martino A. (2016). Las inasistencias de los estudiantes: la escuela
secundaria en cuestión. Revista de la Escuela de Ciencias de la
Educación, año 12, nro. 11, vol. 1. Pp. 47-68.
 Rossano, A. (2007). Alternativas al ‘fracaso escolar’: la construcción de
estrategias educativas inclusivas como líneas de política pública
curricular. Conferencia dictada 75 en el seminario de gestión educativa
“Diseño y desarrollo de políticas educativas inclusivas”, San Salvador de
Jujuy, 13 de abril.
 Terigi, F. (2009). El fracaso escolar desde la perspectiva psicoeducativa:
hacia una reconceptualización situacional. Revista Iberoamericana de
Educación, N° 50, pp. 23- 39.  Terigi, Flavia (2008). Detrás está la
gente. OEA, Proyecto Hemisférico "Elaboración de Políticas y
Estrategias para la Prevención del Fracaso Escolar", Seminario Virtual
de Formación, Clase 1.
 Elias, R. y Molina, J. (2005). La inasistencia escolar de adolescentes en
Paraguay, Instituto de Desarrollo, Asunción, Paraguay.

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