José María Nieto Tapia

3º Derecho Tarde
6/04/2017

TEMA 8: Disolución, liquidación y extinción de las sociedades

mercantiles. Emisión de obligaciones.

Contenidos del tema 8: I. Disolución: Disolución por pleno derecho. Disolución por
causa legal o estatutaria. Disolución por acuerdo de la junta general. Disposiciones
comunes. II. Liquidación: Disposiciones generales. Los liquidadores. Las operaciones
de liquidación. La división del patrimonio social. III. Extinción de la sociedad. Activo y
pasivo sobrevenidos. IV. La emisión de obligaciones. V. Representación de las
obligaciones. VI. Obligaciones convertibles. VII. El sindicato de obligacionistas. VIII.
Reembolso y rescate de las obligaciones

1- Disolución.

La sociedad es un contrato que se disuelve bien por las causas previstas en la

ley, por la voluntad de los socios o por el contrato mismo. Que la sociedad se disuelva
no implica la extinción de la misma, sino simplemente que se abre la fase de
liquidación y cuando concluya esta fase es cuando se produce la extinción de la
sociedad.
El régimen de la disolución de las sociedades capitalistas viene recogido en los
arts de 360 a 370 de la LSC mientras que la disolución de las sociedades personalistas
viene regulado en los Art 221 a 237 del CCo.
En la ley se distingue entre: 1) la disolución de pleno derecho; 2) la disolución
por constatación de la existencia de causa legal o estatutaria; y 3) la disolución por
acuerdo de la Junta General.
Disolución por pleno derecho

Son causas de disolución por pleno derecho:

1. El cumplimiento del término fijado en el contrato o los estatutos sociales.
2. Por el transcurso de un año desde la adopción de acuerdo de reducción de
capital social por debajo del mínimo legal, como consecuencia del
cumplimiento de una ley, si no se hubiera inscrito en el Registro Mercantil. La
transformación o disolución de la sociedad o el aumento del capital hasta una
cantidad superior a ese mínimo legal. En este caso, si no se hubiera inscrito la
transformación, la disolución o el aumento, sus administradores pasarán a
responder personalmente y solidariamente entre ellos y la sociedad de las
deudas sociales.

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3. Por la apertura de la fase de liquidación en el concurso de cualquiera de los
socios colectivos o por la apertura de las fases de liquidación en las sociedades
de capital.
Disolución por causa legal o estatutaria

Cuando se trate de disolución por la constatación de una causa legal o

estatutaria se requerirá el acuerdo por parte de la Junta General.
Hay que tener en cuenta en este sentido que el artículo 365.1 LSC impone a los
administradores el deber de convocar Junta General en el plazo de 2 meses desde la
existencia de causa legal para que se adopte el acuerdo de disolución o si la sociedad
fuera insolvente, instar la declaración del concurso de acreedores.
Los administradores tienen la obligación de solicitar la disolución judicial
cuando la Junta no pudiera constituirse o el acuerdo fuera contrario a la disolución. Lo
tendrán que hacer en el plazo de 2 meses desde la fecha prevista para la celebración
de la Junta o desde la adopción del acuerdo.
¡OJO! El incumplimiento de esta obligación da lugar a una sanción rigurosa, cual
es la responsabilidad personal y solidaria de los administradores por las deudas
sociales que surjan con posterioridad al acaecimiento de la causa de disolución.
Finalmente, la disolución tiene que ser inscrita en el Registro Mercantil y
publicada en Boletín Oficial del Registro Mercantil.

Disolución por acuerdo de la junta general.

Disposiciones comunes.

2 - Liquidación: Disposiciones generales. Los liquidadores. Las

operaciones de liquidación. La división del patrimonio social.

Una liquidación es una serie de operaciones sucesivas que están dirigidas a

hacer posible el reparto del patrimonio social entre los socios previa satisfacción de
todos los acreedores.
Las normas sobre la liquidación de las sociedades capitalistas vienen recogidas
en los artículos 371 y ss. LSC, por lo que estas normas tienen todas un carácter
imperativo, es decir, no se pueden modificar por lo establecido en los estatutos.

2.1 - Los liquidadores.

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Son el órgano de gestión y representación de la sociedad durante el periodo de
liquidación y, por lo tanto, sustituyen a los administradores.
Para el nombramiento de los mismos, la ley da primacía a los Estatutos pero si
en los estatutos no se establece nada al respecto deberá ser la Junta General quien se
encargue de ello.
Entre sus funciones destacan las siguientes:
1. Formular en el plazo de 3 meses, desde la apertura de la liquidación, un
inventario y un balance.
2. Concluir las operaciones pendientes y realizar las nuevas que sean necesarias
para la liquidación de la sociedad.
3. El cobro de los créditos y el pago de las deudas sociales.
4. Llevar la contabilidad y custodiar los libros de la sociedad.
5. Enajenar los bienes sociales.
6. Someter a la aprobación de la Junta General el balance final de la liquidación.
7. Efectuar la división del patrimonio social resultante de la liquidación y proceder
a satisfacer la cuota de liquidación a los socios previo pago a los acreedores.
8. Otorgar la escritura de extinción de la sociedad y procurar su posterior
inscripción en el Registro, depositando los libros y demás documentos sociales.
Una vez terminadas todas las operaciones de liquidación, es decir, que estén
satisfechos todos los acreedores sociales porque se les haya pagado o porque se haya
consignado el importe de sus créditos y que el balance final sea firme bien porque no
se haya impugnado o bien porque sea firme la sentencia de impugnación, se procederá
al reparto de la cuota de liquidación de cada socio, que si en los Estatutos no se
establece otra cosa, es proporcional a su participación en el capital social.

3- Extinción de la sociedad. Activo y pasivo sobrevenidos.

Queda extinguida la sociedad una vez que se cancelan, en el registro mercantil,

los asientos relativos a la misma. La extinción de la sociedad implica:

 Pérdida de la personalidad jurídica. Si bien la LSC ha previsto la posibilidad de

que una vez cancelados los asientos de la sociedad en el registro mercantil
aparezcan bienes sociales, lo que se conoce con el nombre de activo
sobrevenido, o bien aparezcan deudas de la sociedad que no se hubieren
satisfecho en el periodo de liquidación, lo que se conoce con el nombre de
pasivo sobrevenido.

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En el caso del activo sobrevenido, es decir, que aparezcan bienes de la
sociedad, según el art. 398 LSC los liquidadores deberán adjudicar a los antiguos socios
la cuota adicional que les corresponda
Y por el contrario, en el caso del pasivo, los antiguos socios responden
solidariamente de esas deudas hasta el “límite que hubieren recibido como cuota de
liquidación, sin perjuicio de la responsabilidad que tengan los liquidadores’’. Sin
perjuicio de la responsabilidad en que puedan incurrir los liquidadores en el caso de
dolo o culpa. Así se regula en los artículos 397 y 399 LSC.