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¿Por qué le tenemos tanto miedo al error?

El miedo al error considero que se desarrolla desde la infancia, es algo que viene
con la educación, siempre se enseña lo que está bien y lo que está mal y mientras
que lo bueno produce aprobación un error es reprendido, señalado o penalizado.

Ahora visto desde la perspectiva organizacional, para un trabajador el miedo a


cometer errores y ponerlos al descubierto implica no solo una posible penalización
económica sino la pérdida del trabajo. A pesar de que existe un refrán acerca de
que “de los errores se aprende” es algo que rara vez es considerado por las
empresas como aceptable más si el error implica pérdidas monetarias para la
organización.

Además, no se teme únicamente al error sino a la vergüenza, culpa y


señalamientos que le acompañan.

¿Cuál es la cuota de responsabilidad del sistema educativo tradicional en estos


temores?

Ciertamente se sabe que, en los estudiantes se presenta el estrés, el temor y la


angustia a cometer errores al momento de presentar una evaluación.

El sistema educativo tradicional en su evaluación no sólo mide los resultados, sino


que condiciona qué se enseña y cómo, y muy especialmente qué aprenden los
estudiantes y cómo lo hacen. Por ejemplo, si las preguntas de los exámenes son
de brindar una respuesta exacta de lo que dice el libro de texto y no de
comprensión, es normal que el alumno crea que sólo es necesario memorizar el
día antes del examen para después olvidarlo todo.
El reto del sistema educativo debe ser buscar la mejor manera de explicar la
información o hacer actividades interesantes para conseguir que el estudiante
cuando escuche las explicaciones o realiza la actividad realmente comprenda y
asimile la información.

El docente debe construir un entorno de confianza y seguridad, todos aprendemos


a diferente ritmo. Implementar sistemas de evaluación que contemplen el error
como una oportunidad para aprender y no como un castigo, que las actividades de
evaluación tengan la finalidad de que sean los propios alumnos que puedan
detectar sus dificultades y darles herramientas para superar las debilidades y así
generar y motivar el pensamiento crítico, la curiosidad, imaginación y creatividad.

¿Por qué se nos hace difícil tener un pensamiento creativo?

La manera de pensar cambia cuando este es influenciado y estimulado, desde la


niñez se concentran en enseñarnos destrezas intelectuales y no habilidades
cognitivas como sería pensar de una manera distinta, a reinventar, redefinir y crear
soluciones novedosas y originales. Los docentes pueden impulsar y propiciar una
mayor participación de los estudiantes, dando lugar a proyectos y tareas de
planear, implementar, solucionar y crear relacionados a temas que tengan mayor
aplicación en el mundo real más allá del aula y así estimular el pensamiento
creativo e innovador desde pequeños y no solo evaluaciones de marque con
equis.
El peor enemigo de uno mismo, es uno mismo. Muchas veces nos referimos a
nosotros mismos como “no soy creativo” “no puedo hacerlo” “no tengo la habilidad”
y muchas ocasiones sentimos que no vamos a ser capaz de hacer algo porque
nos faltan conocimientos, paciencia, persistencia, ingenio o las habilidades que
sean. Sin importar la edad todos podemos alcanzar altísimos niveles de
creatividad, y el aprender a pensar de manera poco convencional pueda activar el
potencial que a veces creemos no poseer.

Claro, de acuerdo a como mencionas, la creatividad se encuentra potencialmente


en todos, sin embargo, como toda facultad que podemos cultivar y desarrollar
requiere ser estimulada. Tanto a nivel educativo como laboral, lo ideal sería
brindar oportunidades y espacio para que las personas puedan sugerir ideas,
cambios y solución a problemas todo dentro de un ambiente de respeto que
motive y promueva el pensamiento creativo.

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Hola Andrea,

Tal y como indicas "sistema educativo no fomenta la creatividad, si no que impone


estándares tradicionales" ciertamente el error del sistema educativo y de algunos
docentes es hacer las cosas como siempre se han hecho o como las hace todo el
mundo, la rigidez de un profesor no ayuda a crear un ambiente de participación y
libertad para fomentar el pensamiento creativo, si queremos que desde pequeños
se estimule el pensamiento lo ideal sería dar el espacio y oportunidad para hacerlo
para que sean capaces de pensar de forma crítica y creativa (de este modo
podemos conocer el interés, esfuerzo y avances que con otras metodologías como
la de memorizar es difícil de observar).

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