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»Número de Referencia: 173-D-2010

»Origen: CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA


»Nombre del Tribunal: CORTE PLENA
»Tipo de Proceso: CONFLICTOS DE COMPETENCIA EN DERECHO PRIVADO Y SOCIAL
»Tipo de Resolución:
»Fecha de Resolución: 30/11/2010
»Hora de Resolución: 15:42:00
173-D-2010
CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: San Salvador, a las quince horas y cuarenta y dos
minutos del treinta de noviembre de dos mil diez.
VISTOS en competencia negativa suscitada entre el Juez Tercero de Menor Cuantía
de esta ciudad y la Jueza Segundo de lo Civil y Mercantil de esta ciudad, en el Juicio
Ejecutivo Mercantil, promovido por el Licenciado Edgardo Antonio Salazar Pineda,
actuando como endosatario al cobro de UNICOSERVI, S.A. de C.V., en contra de la señora
Rosario Margarita Campos Serrano, reclamándole cantidad de dinero y accesorio.
VISTOS LOS AUTOS; Y,
CONSIDERANDO:
I.- El Licenciado Edgardo Antonio Salazar Pineda, en la calidad antes mencionada,
presentó demanda de Juicio Ejecutivo Mercantil ante el Juzgado Tercero de Menor Cuantía
de esta ciudad, motivando su pretensión en un "pagaré sin protesto", el cual fue aceptado
por la señora Rosario Margarita Campos Serrano, por la cantidad de DOS MIL
TRESCIENTOS CINCUENTA Y CINCO DOLARES CON OCHO CENTAVOS DE
DÓLAR DE LOS ESTADOS UNIDOS DE AMERICA, cantidad que se obligó a pagar a
un interés convencional del cinco punto veinticinco por ciento mensual, mas interés
moratorios del cinco punto sesenta y cinco por ciento mensual; y habiendo caído en mora e
incumplido con la obligación contraída a la fecha, es que se promueve el proceso de mérito;
a fin de que en sentencia definitiva sea condenada al pago de lo reclamado en el libelo.
II.- El Juez Tercero de Menor Cuantía de esta ciudad, por auto de las quince horas
del trece de agosto de dos mil diez, RESOLVIÓ: [...] Analizados que han sido los
requisitos que en todo proceso judicial deberá contener la demanda escrita, al amparo de lo
regulado en los Arts. 276 y 460 del Código Procesal Civil y Mercantil y en cumplimiento a
lo dispuesto en los Arts. 14 y 15 del mismo cuerpo legal; en cuanto a lo expuesto y pedido
en el escrito inicial, el suscrito Juez considera que la demanda escrita presentada por el
Licenciado EDGARDO ANTONIO SALAZAR PINEDA, [...] Abogado [...], como
endosatario al cobro de la sociedad UNICOSERVI, SOCIEDAD ANONIMA DE
CAPITAL VARIABLE, de este domicilio, adolece de oscuridad, ya que en la parte
expositiva el actor manifiesta que viene a promover "Juicio Ejecutivo Mercantil en contra
de la señora ROSARIO MARGARITA CAMPOS SERRANO, Mayor de edad, Empleada,
del domicilio de San Salvador, como librador del pagaré sin protesto que adjunta a la
demanda, a fin de que pague a su representada la cantidad de SEIS MIL SEISCIENTOS
SETENTA Y NUEVE DOLARES CON SETENTA Y NUEVE CENTAVOS DE
DÓLAR", y siendo que la cantidad que el actor exige en su parte expositiva como en su
parte petitoria no se encuentra dentro de la competencia que enumera el artículo 32
Numeral 4° del Código Procesal Civil y Mercantil. Asimismo dicha cantidad no es
conforme con el Pagaré "Sin Protesto" presentado; como consecuencia y de conformidad a
los Arts. 1, 2, 3, 17, 18, 178, 180, 276, 278, 460 Inc. 2° del Código Procesal Civil y
Mercantil, se le previene al Licenciado Salazar Pineda que dentro del término de tres días, y
vista la oscuridad de la demanda, aclare el monto de lo reclamado en su demanda." (sic)
III.- Luego de cumplida la prevención que hiciere, el Juez Tercero de Menor Cuantía
de esta ciudad, en auto de las nueve horas y quince minutos del dos de septiembre de dos
mil diez, EXPUSO: [...] En base al Art. 31 numeral 4° (sic) en el que se establece la
competencia de este Tribunal, respecto a la cuantía a reclamar y esta no debe superar los
veinticinco mil colones o su equivalente en dólares de los Estados Unidos de América, y
siendo que el licenciado SALAZAR PINEDA en su escrito presentado y en la demanda de
folio 1, manifiesta que la cantidad a reclamar al deudor es de $ 6, 679.09, cantidad superior
a lo establecido en la disposición antes relacionada, en consecuencia DECLARESE
IMPROPONIBLE LA DEMANDA presentada. Remítase el expediente a la Oficina de
Recepción y Distribuidora de Demandas de los Nuevos Juzgados de lo Civil y Mercantil
[...]" (sic).
IV.- Recibido el expediente por la Secretaría Receptora de Demanda de San
Salvador, quien lo asignó a la Jueza Segundo de lo Civil y Mercantil de esta ciudad,
funcionaria que por auto de las once horas y cuarenta y cinco minutos del veinticuatro de
septiembre de dos mil diez, RESOLVIÓ: " I) La remisión del presente proceso ejecutivo
por parte del Juzgado Tercero de Menor Cuantía fue ordenada mediante resolución de las
nueve horas y quince minutos del día dos de septiembre del presente año, en atención a que
el Licenciado EDGARDO ANTONIO SALAZAR PINEDA, en su calidad de endosatario
al cobro de la Sociedad UNICOSERVI, Sociedad Anónima de Capital Variable, que puede
abreviarse UNICOSERVI S.A. DE C.V., relaciona tanto en su demanda de fecha once de
agosto del presente año, como en su escrito de fecha veinticuatro de agosto del año en
curso, que el valor del documento base de la pretensión es por la cantidad de DOS MIL
TRESCIENTOS CINCUENTA Y CINCO DÓLARES DE LOS ESTADOS UNIDOS DE
AMÉRICA , y que los intereses convencionales como los moratorios ascendían a esa fecha
a la cantidad de CUATRO MIL CATORCE DOLARES CON VEINTITRÉS CENTAVOS
DE DÓLAR DE LOS ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA, y TRESCIENTOS DIEZ
DOLARES CON CUARENTA Y SIETE CENTAVOS DE DÓLAR DE LOS ESTADOS
UNIDOS DE AMÉRICA, respectivamente, los cuales hace un total de SEIS MIL
SEISCIENTOS SETENTA Y NUEVE DOLARES CON SETENTA Y NUEVE
CENTAVOS DE DÓLAR DE LOS ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA. En virtud de lo
antes mencionado, dicho Juzgado aduce que carece de competencia en razón de la cuantía
pues conforme al Art. 31 numeral 4 CPCM, los Juzgados de Primera Instancia de Menor
Cuantía conocerán de los procesos ejecutivos cuya cuantía no supere los veinticinco mil
colones o su equivalente en dólares. II) Ahora bien es preciso analizar la competencia
objetiva, al respecto ésta presupone la existencia de variedad de tribunales del mismo tipo,
y toma como base ya sea la materia o la cuantía de la pretensión para efectos de determinar
a cual dé esos se atribuye la competencia para conocer de los procesos. III) en esa línea de
ideas, esta Juzgadora es del criterio que la competencia objetiva y en específico la que se
refiere a la cuantía, está determinada por la cantidad reclamada en el documento base de la
pretensión, es decir para el caso en concreto, la cantidad consignada en el título valor
consistente en un pagaré siendo ésta de DOS MIL TRESCIENTOS CINCUENTA Y
CINCO DÓLARES CON OCHO CENTAVOS DE DÓLAR DE LOS ESTADOS UNIDOS
DE AMÉRICA. Si bien es cierto, en el mismo título valor se han consignado intereses
convencionales del cinco punto veinticinco por ciento mensuales e intereses del cinco punto
sesenta y cinco por cierto mensual sobre saldos en mora, es preciso señalar que la cantidad
reclamada y que conforma la pretensión principal es el capital antes relacionado y los
referidos intereses serían pretensiones accesorias o complementarias, ya que dependen del
capital en comento. Lo anterior guarda concordancia con lo prescrito en el Art. 458 Inc. 1°
CPCM, el cual prescribe que el proceso ejecutivo podrá iniciarse cuando del título
correspondiente emane una obligación de pago exigible, liquida o liquidable, con vista
del documento presentado. IV) Aunado a lo antes expuesto, en los procesos ejecutivos en
los cuales se reclamen deudas liquidas la competencia objetiva en razón de la cuantía está
determinada por la cantidad consignada en el documento base de la pretensión, pues éste
delimita la pretensión principal, la cual a su vez nos permite distinguir si ésta será ventilada
en un Juzgado de Primera Instancia de Menor Cuantía o en un Juzgado de Primera
Instancia de lo Civil y Mercantil, así pues en el caso subjudice y tal como antes se dijo se
advierte que la cantidad reclamada asciende a un total de DOS MIL TRESCIENTOS
CINCUENTA Y CINCO DOLARES CON OCHO CENTAVOS DE DÓLAR DE LOS
ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA, o su equivalente en colones es decir, VEINTE MIL
SEISCIENTOS SEIS COLONES CON NOVENTA Y CINCO CENTAVOS DE COLÓN,
por lo cual conforme al Art. 31 Ord. 4 CPCM, éste (sic) Juzgado NO ES COMPETENTE
para conocer de la pretensión incoada, en virtud de carecer de competencia objetiva en
razón de la cuantía. Hechas las anteriores consideraciones la suscrita Juez conforme a los
Arts. 15 y 18 Cn.; Arts. 1, 2, 3, 14, 18, 31 Ord. 4°, 47 y 216 CPCM, RESUELVE: A)
DECLÁRESE INCOMPETENTE ÉSTE (sic) TRIBUNAL en razón de la cuantía para
conocer de la pretensión planteada por el Licenciado EDGARDO ANTONIO SALAZAR
PINEDA, en su calidad de Endosatario al Cobro de UNICOSERVI SOCIEDAD
ANONIMA DE CAPITAL VARIABLE, que puede abreviarse UNICOSERVI S.A. DE
C.V., en contra de la señora ROSARIO MARGARITA CAMPOS SERRANO. B)
Conforme a lo prescrito en el Art. 47 Inc. 2° CPCM., REMITASE el expediente a la Corte
Suprema de Justicia, a efecto que determine el tribunal competente por razón de la cuantía
para conocer del presente proceso, consecuentemente ofíciese lo pertinente." (sic)
V.- Los autos se encuentran en esta Corte para dirimir el conflicto de competencia
negativa suscitada entre el Juez Tercero de Menor Cuantía de esta ciudad y la Jueza
Segundo de lo Civil y Mercantil de esta ciudad. Analizados los argumentos expuestos por
ambos funcionarios esta Corte considera lo siguiente:
A tenor de lo dispuesto en el Art. 458 CPCM que expresa: "El proceso ejecutivo
podrá iniciarse cuando del título correspondiente emane una obligación de pago exigible,
líquida o liquidable, con vista del documento presentado.", se infiere, que entre los
requisitos básicos del juicio ejecutivo, se encuentra el título, que no es más que la
declaración solemne que la ley otorga específicamente a un documento por la suficiencia
necesaria que ostenta para ser antecedente inmediato de un proceso ejecutivo. El título es
una declaración contractual o autoritaria, que consta siempre por escrito y que da cuenta de
la existencia de la obligación de manera fehaciente; es decir, que el título ejecutivo es la
declaración sobre la cual debe tener lugar la ejecución. Es indispensable además, que el
objeto de la obligación a perseguirse por medio del juicio ejecutivo, sea líquido en especie
o en dinero; y se dice que es líquido en dinero —como en el caso de autos- cuando aparece
avaluado con los datos que el título ejecutivo suministra.
Asimismo, el Art. 459 del mismo cuerpo normativo, refiere que en la demanda del
proceso ejecutivo, se solicitará el decreto de embargo por "la cantidad debida y no pagada",
entendiéndose la misma, el capital o lo que se hubiere dejado de pagar en concepto del
mismo, es decir, el remanente; no debe entonces pretenderse que al capital reclamado debe
sumársele los intereses para fijar la cuantía de la pretensión, como concluyó el Juez Tercero
de Menor Cuantía; puesto que los intereses son accesorios al reclamo de lo principal, lo
cual se infiere de lo estipulado en el Art. 22 de la Ley del Arancel Judicial que en su inciso
2°. dice: "Por la dirección general de los juicios ordinarios que tengan valor determinado y
por todos los escritos que firmen en los mismos, cobrarán los honorarios siguientes: y en su
inciso final prescribe: "Para fijar el total de las cantidades a que se refiere este artículo,
deberán tomarse en cuenta los accesorios de la cosa reclamada, como intereses, frutos, etc.,
si fuesen determinables."

Aunado a lo anterior, una vez reconocida la legitimidad del demandante y la fuerza


ejecutiva del título, el juez al decretar embargo y expedir el mandamiento respectivo,
deberá establecer la "cantidad que debe embargarse para el pago de la deuda, intereses y
gastos demandados."; así lo prescribe el Art. 460 CPCM; disposición legal que refuerza lo
expuesto en el párrafo anterior, en el sentido de que aún y cuando el acreedor al presentar
su reclamo cuantifique los intereses que considera se le deben, lo mismo no debe servir de
parámetro para que el juez ante quien se presente el mismo, delimite su competencia en
razón de la cuantía; la misma vendrá dada por la cantidad reclamada en concepto de capital;
los accesorios los fijará el juez en su sentencia, de acuerdo a las probanzas del proceso; y en
los límites que la ley le permite.
Ahora bien, es necesario recalcar tal como ya anteriormente lo ha hecho esta Corte,
que para que "exista conflicto de competencia es necesario que haya controversia entre dos
entes jurisdiccionales que se atribuyen o niegan la competencia; en el caso de autos dicho
conflicto no existe, ya que las diligencias no se remitieron al tribunal que a juicio del Juez
[...] era competente sino a la Secretaría Receptora y Distribuidora de Demandas, la que no
debía haberlas recibido, pues no es su atribución conforme a su acuerdo de creación, ni
mucho menos asignarla a otro tribunal, para el caso [...], el que tampoco tenía que remitir
las diligencias a esta Corte, pues lo que hizo con ello fue oponerse a la asignación hecha
por la Secretaría, pero en ningún momento crear conflicto de competencia, porque jamás
puede haber conflicto de esta clase entre un tribunal y la Secretaría Receptora y
Distribuidora de Demandas." (Revista Judicial enero-diciembre 1995 tomo XCVI Pág.362).
La Corte, en la sentencia citada, ordenó devolver el expediente al que inicialmente lo
recibió para que a su vez, lo enviara al que consideraba ser el competente.
Ahora bien, compartimos el criterio sostenido en la citada sentencia en cuanto al rol
de la Secretaría Receptora y Distribuidora de Demandas; y de que no existe un verdadero
conflicto de competencia; pero entre las atribuciones que la Constitución confiere a la Corte
Suprema de Justicia, se encuentra en el Art.182 la at. 5a., que a su letra reza: "vigilar que se
administre pronta y cumplida justicia, para lo cual adoptará las medidas que estime
necesarias."; por lo que en base en tal atribución y en aras de garantizar los principios
rectores del proceso, como son los de Economía Procesal, Celeridad, Abreviación, el de
una Tutela Judicial Efectiva, y a fin de evitar dilaciones innecesarias en la tramitación de
las expresadas diligencias, lo que va en detrimento de una pronta y cumplida
administración de justicia, se determina que es competente para ventilar y resolver las
diligencias de que se ha hecho mérito, el Juez Tercero de Menor Cuantía de esta ciudad, y
así se impone declararlo.
Se advierte al Juez Tercero de Menor Cuantía de esta ciudad, que cuando considere
no ser competente para conocer de un asunto sometido a su competencia, proceda de
conformidad a lo establecido en el Art. 40 del Código Procesal Civil y Mercantil que le
ordena remitir el expediente al tribunal que considere competente, y no a la Oficina
Receptora y Distribuidora de Documentos Judiciales del Centro Judicial Integrado de
Derecho Privado y Social de esta ciudad, como efectivamente lo hizo.
POR TANTO: De acuerdo a las razones expuestas, disposiciones legales citadas y
Arts. 182 at. 2ª y 5ª Cn., y 47 inc. 2° CPCM, a nombre de la República, esta Corte
RESUELVE: A) Declárase que es competente para sustanciar y decidir el proceso de
mérito el Juez Tercero de Menor Cuantía de esta ciudad; B) Remítanse los autos a dicho
funcionario, con certificación de esta sentencia, a fin de que disponga el llamamiento a las
partes para que comparezcan a hacer uso de sus derechos dentro del término legal
correspondiente; y, C) Comuníquese la misma a la Jueza Segunda de lo Civil y Mercantil
de esta ciudad; y a la Oficina Receptora y Distribuidora de Documentos Judiciales del
Centro Judicial Integrado de Derecho Privado y Social de esta ciudad para los efectos de
rigor. HÁGASE SABER.
J. N. CASTANEDA S.-----E. S. BLANCO R.------M. REGALADO-------PERLA J.------M. POSADA------M. A.
CARDOZA A.-------R. E. GONZÁLEZ.--------L. C. DE AYALA G.------PRONUNCIADO POR LOS SEÑORES
MAGISTRADOS QUE LO SUSCRIBEN------M. S. RIVAS DE AVENDAÑO.----------RUBRICADAS.

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