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Pedagogía y Práctica Educativa | vol. 1 | núm. 1 | julio - diciembre 2019, pp.

5-22 issn digital en trámite

¿ACASO TENGO DEMASIADO APEGO A MI CELULAR?


NOMOFOBIA EN ESTUDIANTES DE PREPARATORIA

AM I TOO ATTATCHED TO MY CELLPHONE?


NOMOPHOBIA IN HIGH SCHOOL STUDENTS

Luz María Velázquez-Reyes


Instituto Superior de Ciencias de la Educación del Estado de México, Toluca, México.
luzmariavr@hotmail.com
Recibido: 8 de enero de 2019; aceptado: 9 de abril de 2019.

Resumen Abstract

Este artículo reporta los hallazgos de This article reports the findings of a
una investigación de campo cuan- quantitative field research on nomopho-
titativa sobre nomofobia, la cual se bia, defined as experiencing discomfort,
define como incomodidad, angustia, anguish, fear and even desolation due to
temor e incluso desolación por no not having the smartphone at hand and/
disponer del teléfono inteligente y/o or losing the wifi or data connection, in
perder la conexión. La investigación 697 students from four high schools in
se realizó con 697 estudiantes de cua- the State of Mexico, based on the ap-
tro escuelas preparatorias del Estado plication a self-report called "Do you
de México, a partir de la aplicación have nomophobia?" (Velázquez, 2017;
del autoinforme “¿Tienes nomofo- Yildirim & Correia, 2014). Some of the
bia?” (Velázquez, 2017; Yildirim & findings are: Indices of nomophobia in
Correia, 2014), encontrando: Índices problematic use (70.41%), abusive use
de nomofobia en uso problemático (9.34%), girls are more affected than
(70.41%), uso abusivo (9.34%), las boys, both uses indicate social links of
chicas más afectadas que los chicos, dependence on smartphones that impact
ambos usos indican vínculos sociales everyday family life, social and school life
de dependencia al celular inteligente of boys and girls.
que impactan la vida cotidiana fami-
liar, social y escolar de chicos y chicas.

Palabras clave: TIC, ciberadicción, Keywords: ICT, internet addiction / cyber ad-
nomofobia, estudiantes, nivel medio diction, nomophobia, students, high school.
superior.

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Cambian los deleites que anhelamos,


y los pesares que nos aquejan.
Paula Sibilia

Introducción

Este artículo tiene el propósito de tanto física como psico-emocional


indagar, bajo el enfoque teórico que hacia una sustancia, actividad o
mira con sospecha la tecnología des- relación humana; de esta mane-
de la postura crítica de Walter Benja- ra Echeburúa, Labrador y Becoña
min (2008, 2010), las interacciones (2009) afirman que cualquier acti-
sociales que despliegan 697 estu- vidad llevada a cabo de forma des-
diantes de preparatoria a partir del mesurada puede desembocar en
uso y abuso del teléfono inteligente una adicción, haya sustancia o no.
(smartphone), se explora y cuantifica Aunque numerosos autores defi-
el grado de nomofobia, tanto en su nen el término en esta línea, otros
uso problemático como en uso abusivo muchos lo vinculan exclusivamen-
o adictivo a partir de la aplicación te a las drogas, lo que impide que
del autoinforme “¿Tienes nomofo- la adicción a internet llegue a con-
bia?” (Velázquez, 2017; Yildirim & templarse como un trastorno en el
Correia, 2014). El autoinforme in- Manual diagnóstico y estadístico de
cluye 25 condiciones que han sido los trastornos mentales (DSM-5)
asociadas a la nomofobia, como ex- (American Psychiatric Association,
perimentar incomodidad, angustia, 2014); no obstante, en su última
temor e incluso desolación por no versión ha incluido el juego online
disponer del teléfono inteligente y/o en el rubro de “adicciones no re-
perder la conexión. El estudio se ubi- lacionadas con sustancias”, dado
ca en el campo de investigación Con- que activa sistemas de recompensa
vivencia, disciplina y violencia en la similares a los del consumo de sus-
escuela, del comie (Consejo Mexi- tancias y tiene síntomas conductua-
cano de Investigación Educativa), les semejantes. Debido a ello, Eche-
particularmente en el eje Violencia a burúa y Amor (1998) consideran
través de las tecnologías de la infor- que la adicción al internet comparte
mación y la comunicación (tic). características similares con otras
De acuerdo con la Organización adicciones, tales como: pérdida de
Mundial de la Salud (oms) la adic- control, presencia del síndrome de
ción es la relación de dependencia abstinencia, dependencia psicoló-

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gica e interferencia en actividades consigo el teléfono inteligente, mos-


cotidianas y pérdida de interés por trar ansiedad por la falta de conexión
otras actividades. y temor a quedarse fuera de contacto
Los juegos de socialidad (Simmel, con el celular.
2002) han cambiado de forma radi- La palabra proviene de no-mobi-
cal: hoy en día, el estar juntos adopta le-phone-phobia y entre los síntomas
novedosas modalidades a partir de la más frecuentes se encuentran: expe-
participación online en redes sociales rimentar pánico a perderse de algo en
con actividades tan diversas como el caso de imposibilidad de ver las no-
merodear o residir en más de dos tificaciones en cualquier momento o
redes simultáneamente, además de bien de revisar las redes sociales, ade-
comentar, postear, recibir, compar- más puede resultar extremadamente
tir, otorgar o escatimar likes, publicar incómoda la sensación de sentirse
selfies o imágenes diversas, publici- desconectado al no poder chatear.
tar estados de ánimo, sentimientos De manera radical, a los nomófobos
y ubicación, entre otras muchas inte- se les ha catalogado como phonbies,
racciones digitales. autómatas pegados a su dispositivo
La socialidad también se ve marca- digital de manera permanente; con
da por el uso de las Tecnologías de la frecuencia experimentan “modifica-
Información y Comunicación (tic), ya ciones perceptivas” (Benjamin, 2008),
que juegan un papel central en la vida ya que suelen “sentir” la vibración del
de los contemporáneos. Particular- celular sin que esto suceda realmente.
mente, el teléfono inteligente (smar- Además, concentrados en su teléfono
tphone), a partir de su aparición en inteligente, presentan un estado de
2007, se convirtió en una extensión del distracción constante; “percepción
cuerpo en movimiento, como ya lo ha- en distracción”, le llama Benjamin
bía advertido Benjamin (2008); niños, (2008). Para este filósofo, la distracción
adolescentes, jóvenes y no pocos adul- es similar a la alienación, dado que se
tos viven prácticamente pegados a su está ensimismado e incluso esclaviza-
celular, de tal modo que no se sale de do a reaccionar de manera expedita al
casa sin él y de igual manera represen- menor ruidito o destello de la pantalla
ta el más jactancioso símbolo de esta- de cualquiera de sus múltiples dispo-
tus. Vale entonces preguntarse: ¿a qué sitivos (Bauman, 2011).
se debe tal apego? ¿Se trata de la adap- Para el apego excesivo a las tic,
tación de una necesidad social o bien parti­cularmente al celular inteligente,
de una “adicción tecnológica”? (Griffi- se encuentran diferentes nominacio-
ths, 2010). La nomofobia se entiende nes: se habló de “uso compulsivo”
como la adicción comportamental (Greenfield, 2009), “uso abusivo”
caracterizada por el miedo a no tener (Ramos Soler, López-Sánchez &

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Quiles-Soler, 2017), “uso problemá- abstinencia y conflicto interpersonal


tico” (Aguilar, 2016; Simó, 2017), (Griffiths, 2005).
“uso intensivo” (Sánchez & Otero, Ramos Soler et al. (2017) indican
2009), también se ha denominado ocho manifestaciones características
“uso envolvente” (Cuesta, 2012) e de la adicción: indispensabilidad fí-
incluso “adicción” (Echeburúa & Co- sica y cognitiva, la sensación de pér-
rral, 2010), mas fue Griffiths (2005) dida de algo debido a la desconexión,
quien acuñó el término “adicciones constantes conflictos interpersona-
tecnológicas”. les debido a la distracción y recaídas
Ahmed y colaboradores (2011) constantes, pérdida de control sobre
discurren que la nomofobia deviene el uso debido a que se asocia éxito
como “la adicción del siglo XXI”; en con conexión, prominencia conduc-
este sentido, se habla de ciberadicción tual e invariablemente, disminución
si se acompaña de pérdida de control, del rendimiento escolar en el caso de
dependencia y daño por el uso, además los estudiantes. Sinek (2016), en en-
de interferir negativamente en la vida trevista sobre los millenials, puntuali-
cotidiana (Estallo, 2001). Lo que la ca- za “si antes de dar los buenos días a
racteriza es la relación que la persona una persona tocas tu smartphone eres
establece con el dispositivo (Echeburúa un nomófobo”, lo cual coincide con
& Corral, 2010), en otras palabras, el Echeburúa y Corral (2010: 95), quie-
problema con el apego o adicción al te- nes señalan “meterse en internet al
léfono inteligente no radica exclusiva- levantarse y ser lo último que se hace
mente en la cantidad de horas inverti- antes de acostarse, así como reducir
das o en los efectos directos de estar co- el tiempo de las tareas cotidianas,
nectados sino en las cosas que se dejan tales como comer, dormir, estudiar
de hacer por estar conectados (Twenge, o charlar con la familia, configuran
2017); un grado extremo de la adicción el perfil de un adicto a internet; más
son los llamados hikikomori, monjes que el número de horas conectado
posmodernos que sólo hablan y están a la red, lo determinante es el grado
presentes en las redes sociales. de interferencia en la vida cotidiana”.
Es importante remarcar la dife- Griffiths (2010: 121) enfatiza que la
rencia entre uso problemático y uso ciberadicción se manifiesta a través
patológico, pues en el primero se del flujo de transrealidad, es decir, se
presenta tolerancia y compulsivi- experimentan vivencias anómalas
dad, no obstante, el propio usuario debido al trastrocamiento entre lo di-
manifiesta una preocupación por su gital y la realidad física.
condición, mientras que el uso pato- Resulta evidente que no se ha
lógico se presenta debido a la com- consensuado la categoría que nom-
binación de tres factores: recaída, bra al problema, su conceptualiza-

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ción, criterios diagnósticos y grave- des sociales (Velázquez, 2014; Eche-


dad (Aguilar, 2016), empero “se está burúa & Requesens, 2012), además
generalizando un concepto que deli- de que la edad de inicio en el uso
mitaría de manera clara y precisa la de dispositivos digitales es cada vez
situación a la que nos enfrentamos: más baja, incluso niños de preesco-
la nomofobia” (Ramos Soler et al., lar poseen al menos uno. Debido a
2017, p. 203), y ya se dispone de un la disponibilidad encontramos un
considerable cúmulo de hallazgos “incremento paulatino del número
entre los que destacan: de horas de navegación” (Gómes &
Sendin, 2016, p. 50). Estos autores
1. Ser mujer es una señal de alarma recalcan que los jóvenes encuentran
para uso problemático (Espinar & en internet un refugio y escudo so-
González, 2009; Carbonell, Fúster, cial para afrontar sus problemas, por
Chamarro & Oberst, 2012) y “un in- lo que resulta comprensible que “los
dicador para uso intensivo” (Sma- jóvenes manifiesten preferencia por
hel, Wright & Cernikova, 2015); las interacciones online sobre la inte-
26% mujeres dependientes del ce- racción cara a cara” (Velázquez, 2017,
lular versus 13% hombres (Sánchez p. 33). Por su parte, Ramos Soler et al.
y Otero, 2009); también Yildirim y (2017) encontraron un uso abusivo
Correia (2014) encontraron que las de los celulares y aplicaciones junto
mujeres se ven más afectadas por la al temor o miedo a estar desconecta-
dependencia. Ellas puntuaron más dos (Velázquez, 2015).
alto que los hombres mostrando 4. Existen diferentes formas de apego
consecuencias negativas de su uso al celular. Ramós Soler et al. (2017,
desadaptativo (Beranuy, Chamarro, pp. 208-209) destacan la presencia de
Graner, & Carbonell, 2009). tres grupos: los conectados, los crea-
2. Respecto al autoreconocimiento de tivos y los nomofóbicos.
la adicción no hay consenso; mien-
tras Carbonell et al., (2012) afirman a) Los conectados muestran depen-
que los jóvenes españoles sobresti- dencia al móvil, no pueden pres-
man su adicción, Velázquez (2017), cindir de él, ni salir a la calle sin
encontró que los estudiantes mexi- su terminal, se agobian si no lo
quenses la subestiman. tienen a su lado al creerse incomu-
3. Como consecuencia de la centra- nicados. Están siempre atentos a
lidad de las tic´s en la vida de los su smartphone aunque estén con
estudiantes se ha incrementado su su familia y se enfadan con ellos
umbral de vigilia, permaneciendo por este motivo. Duermen menos
despiertos hasta altas horas de la por utilizar el móvil y les disgusta
noche por estar pendientes de las re- apagarlo en el colegio o reuniones

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familiares. Creen que su felicidad domino tecnológico no va acom-


depende de la posesión de un pañado del control de impulsos
smartphone de última generación de las acciones, lo que facilitaría
o simplemente de la utilización de una adicción comportamental
un móvil con conexión a internet. (Potenza, 2006); por esto mismo,
b) Los creativos usan poco el móvil, Munno, Saroldi, Bechon, Sterpo-
menos de una hora; les gusta Ins- ne y Zullo (2016, p. 210) señalan
tagram y WhatsApp, se conectan que “los adolescentes son par-
por diversión y tienen una vida ticularmente vulnerables a las
offline intensa. adicciones por la frágil identi-
c) Los nomofóbicos presentan no- dad característica de este estadío
mofobia severa o comportamien- evolutivo, siendo propensos a
to hacia el móvil más obsesivo. aislarse cuando interactúan con
No saben qué hacer sin su móvil, el mundo virtual (juegos online,
se sienten más seguros y felices chats)”. Por sí mismo, el incre-
con él, primando su uso frente a mento de horas de navegación,
las relaciones personales, sociales indica ya cierta psicopatología
y familiares y mostrando enfado (Gómes & Sendin, 2016)
o incomodidad cuando no están
conectados a la red o no pueden En contrapartida, autores como
comunicarse con los demás a Pedrero, Rodríguez y Ruiz (2012)
través de su terminal. Se ponen y Carbonell et al. (2012) se mues-
nerviosos si se quedan sin datos tran renuentes a calificar el apego
o batería o si pierden la señal wifi. al celular como adicción ya que para
Nunca salen a la calle sin el teléfo- ellos: “La literatura disponible no es
no en su mano. El uso continua- suficiente para afirmar la existencia
do del móvil les despista de las ta- de un cuadro que pueda clasificar-
reas escolares e incluso sacrifican se como adicción al móvil, si bien
horas de sueño por no perder la la evidencia acumulada aconseja
conexión. Suelen tener discusio- seguir investigando” (Pedrero et
nes con familia y amigos por la al., 2012, p. 149); por su parte, Car-
excesiva atención que le prestan a bonell et al. (2012, p. 88) creen que
sus smartphone. “el término ‘adicción a internet’ no
debe utilizarse en el caso de Espa-
5. Por último, es de sobra conocida ña”. No obstante, la totalidad de los
la maestría con la que niños, ado- investigadores coinciden en la ne-
lescentes y jóvenes se mueven en cesidad de investigación profunda
el mundo de las tic aventajando que contribuya a la comprensión
a la mayoría de adultos, mas este del fenómeno.

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Prevalencia En este caso, las cifras de prevalencia


iban del 0% al 38%, siendo las muje-
Carbonell et al. (2012), producto de res que presentaban baja autoestima
la revisión de 14 estudios realizados las más vulnerables al uso excesivo
en España entre 2001 y 2011, refie- del móvil. Y de nuevo se observó que
ren que la prevalencia para el uso las autopercepciones como adictos al
problemático de internet oscila entre móvil superaban las cifras obtenidas
el 3.7% y el 9.9%, siendo los más jó- en los estudios realizados. Reporta-
venes más vulnerables al uso inade- ron además que la depresión y la baja
cuado de esta tecnología. En el caso autoestima se relacionaban con el
del uso abusivo de la telefonía móvil uso abusivo del teléfono móvil.
la prevalencia va desde el 2.8% hasta Por su parte, Turkle (2013) encon-
el 13% en los adolescentes y 21.6% tró que 20% de las personas entre 18 y
en las adolescentes. Otro dato des- 34 años contestaba al teléfono mien-
tacable es que los jóvenes sobreva- tras mantenía relaciones sexuales,
loran la incidencia de este problema, 90% de los estudiantes afirma enviar
considerándose un 16.2% adicto a mensajes de texto en clase y 80% duer-
internet y hasta un 27.7% adicto al me con sus móviles, mientras 44% re-
móvil, que en realidad son porcenta- conoce que nunca se desconecta.
jes superiores a los encontrados em- Ante este panorama considero
pleando cuestionarios validados. En necesario investigar qué sucede en el
cuanto a los problemas que se aso- mundo juvenil mexicano, en el cual el
cian con el uso abusivo de internet, apego al celular parece ser una situa-
los autores citan, entre otros, insom- ción constante. Es de dominio público
nio y trastornos del sueño, disfun- que los estudiantes superan el pro-
ción social, depresión y ansiedad, medio nacional de ocho horas diarias
pensamientos negativos, síntomas de navegación (Velázquez, 2017), por
somáticos, disfunción sexual y ma- lo tanto me interesa interrogar sobre
lestar psicológico. El uso problemá- las relaciones sociales que estable-
tico del teléfono móvil se ha encon- cen consigo mismos y con el entorno
trado relacionado, por su parte, con a partir del uso y abuso de tic en su
consumo excesivo de alcohol, fumar versión de teléfono inteligente (smart-
tabaco, depresión, ansiedad, insom- phone). Entiendo “relaciones sociales”
nio y fracaso escolar. como el vínculo que se establece en-
Pedrero et al. (2012) revisaron 86 tre la persona y el dispositivo digital a
artículos internacionales del período partir de las dos premisas básicas del
2000-2011 que abordaban el tema de interaccionismo simbólico: “La pri-
la adicción o abuso del teléfono móvil mera es que los seres humanos actúan
en adolescentes y adultos españoles. con respecto a las cosas de acuerdo a

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los significados que éstas tienen para abusivo (uso severo, uso adictivo,
ellos…la segunda premisa es que el serán usados como sinónimos) en-
significado de estas cosas se deriva o tre los preparatorianos? ¿Cuáles son
surge de la interacción social que se las condiciones problemáticas que
tiene con los propios compañeros” generan su posesión y uso? Para
(Blumer, 1969, citado por Flick, 2007, identificar tendencias se aplicó el
p. 32). De esta manera las interaccio- autoinforme “¿Tienes nomofobia?”
nes sociales señalan los vínculos que de Yildirim & Correia (Velázquez,
establecen los estudiantes con su te- 2017) a 697 estudiantes de prepa-
léfono inteligente y el significado que ratoria durante los meses de abril a
tiene para ellos, el cual se comparte septiembre de 2017.
con sus pares y el resto de la sociedad. El cuestionario está integrado por
dos apartados:
Metodología
a) Datos generales (cinco preguntas).
Esta investigación de campo cuantita- b) Situaciones problemáticas que
tiva busca identificar los índices de uso indican nomofobia (25 asevera-
problemático y uso abusivo entre los es- ciones tipo Likert). Cada aseve-
tudiantes de cuatro escuelas prepara- ración incluye cinco tipos de res-
torias de financiamiento público: tres puesta de acuerdo a la frecuencia:
ubicadas en una zona urbana (dos con nunca, casi nunca (si ha sucedi-
turno matutino y la tercera con turno do una o tres ocasiones), a veces
vespertino); la cuarta, aunque urbana, (si ha sucedido entre 4 y 6 veces),
se encuentra ubicada en una colonia casi siempre (si ha acontecido 7
marginal de la ciudad de Toluca, Es- y 9 veces) y siempre (más diez
tado de México. La selección de las veces). La temporalidad refiere
escuelas y de los estudiantes partici- exclusivamente el momento ac-
pantes fue por conveniencia, dado que tual. El autoinforme incluye to-
son las escuelas que otorgaron per- das las condiciones que han sido
mis­o para observar, entrevistar y apli- asociadas a la nomofobia, es de-
car el autoinforme. En el artículo solo cir, experimentar incomodidad,
se recuperan los hallazgos cuantitati- angustia e incluso desolación
vos de la aplicación de este último. por no disponer del celular.

Preguntas de investigación El cuestionario “¿Tienes nomofo-


bia?”, desarrollado por Yildirim & Co-
¿Padecen nomofobia los estudian- rreia (2014), investigadores de la Iowa
tes preparatorianos? ¿Cuáles son los State University School of Education, fue
índices de uso problemático y uso previamente piloteado con 100 estu-

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diantes de diferentes niveles educati- significativas en el promedio de ce-


vos entre septiembre de 2016 y febre- lulares entre mujeres y hombres.
ro de 2017; el cuestionario original de
20 cuestiones fue adaptado realizando 2. Nomofobia
las siguientes actividades: se adecuó a
la población mexicana, se descartaron La nomofobia es el miedo a perder la
ciertas situaciones problemáticas ya conectividad, experimentando diver-
obsoletas y se incorporaran algunas sas molestias como ansiedad, preo-
de reciente aparición, por lo que que- cupación y agobio; se entiende como
dó finalmente de 25 cuestiones. Por la “una adicción comportamental que
forma de aplicación se trata de un au- implica un alto temor a quedarse sin
toinforme y su contestación consume teléfono móvil” (Ramos et al., 2017:
menos de 30 minutos. 201). A continuación, se presentan los
porcentajes encontrados a partir de la
Resultados aplicación del autoinforme “¿Tienes
nomofobia?” (Velázquez, 2017; Yildi-
1. Datos generales rim & Correia, 2015), de mayor a me-
nor frecuencia. El uso problemático
697 estudiantes preparatorianos, se integra por las frecuencias de cua-
394 mujeres y 303 hombres, con tro de las cinco columnas del autoin-
una edad promedio de 16.17 años, forme, es decir, las columnas que re-
siendo el rango de seis años que gistran frecuencias superiores a una
va desde una edad mínima de 15 y ocasión, se desagregan los porcenta-
máxima de 21 años. En promedio jes de acuerdo a la frecuencia con que
los preparatorianos han tenido 5.23 ocurre (casi nunca, a veces, casi siem-
celulares (el rango es bastante am- pre y siempre), también se incorpora
plio ya que transita de dos a 21 ce- el número de la pregunta en el orden
lulares). No se observan diferencias que aparece en el autoinforme.

Cuadro 1. Uso problemático

Casi nunca A veces Casi siempre Siempre Total


Situación problemática
(%) (%) (%) (%) (%)

13. Mira constantemente su 24.67 34.86 16.64 11.44 87.92


celular
25. Al despertar, su celular es lo 13.32 23.66 17.93 31.6 86.52
primero que toca

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Casi nunca A veces Casi siempre Siempre Total


Situación problemática
(%) (%) (%) (%) (%)

4. Se molesta al no poder usar su


28.82 31.12 15.07 8.76 83.64
teléfono y sus aplicaciones cuando
quiere hacerlo
24.65 33.44 13.49 12.05 83.64
23. Nunca se separa de su celular
2. Se molesta al querer buscar in-
formación en su dispositivo móvil 21.81 36.76 17.71 8.47 82
y no poder hacerlo

1.Se siente incómodo(a) si no


26.53 40.29 10.35 3.73 80.91
dispone de acceso constante a la
red a través de su celular

24. En caso de olvidarlo, es capaz 17.35 22.51 13.62 26.25 80.07


de regresar por él.
11.62 25.54 14.47 28.09 79.77
21. Duerme cerca de su celular
9. Cuando no comprueba su
celular durante un tiempo, siente 26.51 28.4 14.13 9.04 76.59
el deseo de mirar si tiene nuevas
notificaciones

3. Si no tiene su celular consigo


se pone ansioso porque no puede 28.38 25.83 13.64 6.61 74.02
comunicarse al instante con su
familia y amigos
24.79 33.37 9.91 4.88 72.96
11. Nunca se desconecta
14. Si no tiene su celular consigo,
se agobia al pensar que alguien 32.13 25.92 9.17 4.59 72.02
ha intentado contactarse y no ha
podido

22. Ha recibido quejas de que


27.09 25.38 8.18 10.73 71.42
presta más atención a su celular
que a sus interlocutores.

7. Si no dispone de conexión a la
red, comprueba constantemente si 27.4 24.83 11.03 8.04 71.15
hay alguna señal cercana a la que
se conecte

8. Le preocupa quedarse tirado en


21.22 25.67 11.91 9. 77 68.56
algún lugar cuando no funciona
su teléfono inteligente

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Casi nunca A veces Casi siempre Siempre Total


Situación problemática
(%) (%) (%) (%) (%)

15. Prefiere comunicarse a través 28.83 27.56 6.74 4.74 67.59


de mensajes que frente a frente
8. Le asusta la idea de que se
22.66 23.53 8.9 11.61 66.71
acabe la batería de su teléfono
inteligente

12. Si no tiene su celular consigo


27.55 23.82 7.9 4.16 63.43
se pone nervioso porque no puede
recibir mensajes ni llamadas

20. No sabe qué hacer si no tiene 27.81 22.41 6.6 6.31 63.14
consigo su teléfono inteligente
17. Si no tiene su celular consigo
30.63 20.95 6.31 3.59 61.98
se siente incómodo porque no
puede estar al día en redes sociales

18. Se siente incómodo porque no


28.98 20.66 7.6 2.87 60.11
puede ver las notificaciones de sus
contactos

6. Le da pánico quedarse sin crédi- 21.5 33.23 13.61 7.18 57.21


to en su plan de datos
19. Aun en clases envía mensajes 26.26 19.42 6.04 3.74 55.47
de texto
10. Aun estando con su pareja
21.37 15.94 5.74 4.6 47.64
responde mensajes o mira la acti-
vidad de las redes sociales

16. Si no tiene su celular consigo


28.71 12.92 3.24 0.85 45.78
se pone nervioso porque no puede
mostrar lo que hace en la red
Promedio 70.41 %
Fuente: ¿Tienes Nomofobia? (Velázquez, 2017)

En promedio 70.41% de los prepa- agobiados si no están permanente-


ratorianos presentan nomofobia en mente revisándolo, nueve de cada
grado de uso problemático, es decir, diez miran constantemente su dis-
siete de cada diez estudiantes pa- positivo, un porcentaje similar re-
decen angustia por la desconexión, porta que su celular es lo primero
mantenerse alejado del celular les que toca al despertar, mientras que
resulta impensable y se sienten ocho de cada diez nunca se separa

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de él, la misma proporción mues- ción, se encuentra que la implica-


tra incomodidad al no tener acce- ción en nomofobia severa es dife-
so, también ocho de cada diez son rente para hombres y mujeres como
capaces de regresar a casa en caso se observa en el siguiente cuadro.
de olvidarlo y la misma proporción
duerme cerca de él; además siete Nomofobia severa, implicación
de cada diez ha recibido quejas por continua y permanente
su involucramiento y distracción
permanente. Sin duda, los prepa- A continuación, se exponen las con-
ratorianos se desplazan entre la diciones que se registraron como
cercanía digital y la lejanía física de aquellas que realizan los prepara-
lo cercano y próximo, ya que se ven torianos de manera invariable, es
impactados por su uso envolvente decir, aquellas involucradas dentro
(Cuesta, 2012). Las mujeres (38.85% del uso abusivo, severo o adictivo,
en promedio) resultaron más afec- se distinguen los porcentajes entre
tadas que los hombres (31.31% en hombres y mujeres, se presentan en
promedio) empero si se atiende ex- orden decreciente.
clusivamente al grado de suscrip-

Cuadro 2. Índices de nomofobia severa comparación hombres y mujeres


Siempre H M
Condición
% % %

25. Al despertar, mi celular es lo primero que 31.06 17.21 14.34


miro.
21. Duermo cerca de mi celular. 28.04 12.04 16.0
24. En caso de olvidarlo, soy capaz de regresar por él. 26.25 13.62 12.48
23. Nunca me separo de mi celular. 22.05 11.0 11.0
5. Me asusta la idea de que se acabe la batería de mi 11.65 4.0 7.60
teléfono inteligente.
11.44 6.4 5.0
13. Miro constantemente mi celular.
22. Se han quejado de que presto más atención a 10.73 6.88 3.87
mi celular que a mis interlocutores.
8. Me preocupa quedarme tirado en algún lugar 9.77 4.4 5.30
cuando no funciona mi teléfono celular.
9. Cuando no compruebo mi celular durante un
9.04 3.73 5.30
tiempo, siento el deseo de mirar si tengo nuevas
notificaciones.

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4. Me molesta no poder usar mi teléfono y sus 8.76 3.58 5.16


aplicaciones cuando quiero hacerlo.
2. Me molesta querer buscar información en mi 8.47 5.34 3.73
dispositivo móvil y no poder hacerlo.
7. Si no dispongo de conexión a la red (ya sea me-
diante datos o wi-fi) compruebo constantemente 8.04 4.5 3.5
si hay alguna señal cercana a la que me conecte o
trato de encontrarla.

6. Me da pánico quedarme sin crédito en mi tarifa 6.61 2.21 4.4


de datos mensual.
6.61 3.47 3.21
3. Si no tengo mi celular me pongo ansioso.
20. No sé qué hacer si no tengo conmigo mi celular. 6.31 2.72 3.44
10 Aun estando con pareja envía mensajes 4.6 2.58 2.08
19. En clase envío mensajes. 3.74 1.74 2.0
Promedio de las 25 condiciones evaluadas 9.34

Fuente: ¿Tienes Nomofobia? (Velázquez, 2017)

Como se observa en el cuadro 2, al querer buscar información y no


los índices de nomofobia severa, es poder hacerlo (8.47%); comprobar
decir, la condición en la cual el com- constantemente si hay alguna señal
portamiento evaluado supera más cercana a la que se conecte o tratar de
allá de diez ocasiones, (columna encontrarla (8.04%); sentir pánico al
“siempre” del autoinforme), fluctúan quedarse sin crédito en la tarifa de
entre 0.85% y 31.06%, siendo las datos mensual (7.18%); si no tiene
más frecuentes: al despertar mi celu- su celular, sentir ansiedad al no po-
lar es lo primero que miro (31.06%); der comunicarse al instante con fa-
dormirse con el celular (28.09%); milia (6.61%); no saber qué hacer si
regresar por él, en caso de olvidarlo no se tiene consigo el celular (6.31%);
(26.25%); nunca separarse (22.05%); contestar mensajes aun estando con
asustarse porque se acabe la batería su pareja (4.6%), preferir comunicar-
(11.61%); mirarlo contantemente se online (4.74%); y en clase enviar
(11.44%); recibir quejas sobre que mensajes (3.74%).
presta atención excesiva a su celular Las mujeres se ven más afecta-
(10.73%); preocuparse de quedarse das que los hombres en las siguien-
tirado en algún lugar si no funciona tes condiciones: dormir cerca de su
su celular (9.77%); sentir el deseo de celular, tocarlo apenas despiertan,
mirarlo cuando ha pasado un tiempo regresar por él en caso de haberlo ol-
(9.04%); molestarse al no poder usar vidado, sentir el deseo de comprobar
su dispositivo (8.76%); molestarse si tiene notificaciones, asustarse ante

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la idea de que se acabe la batería y promedio reportado en los países que


quedarse tirada en algún lugar o que- integran la ocde (Organización para
darse sin datos. Los hombres lo mi- la Cooperación y el Desarrollo Econó-
ran constantemente, lo tocan apenas micos), el cual es de 54%.
despiertan y definitivamente prestan Las mujeres (38.85% en prome-
más atención a su celular que a sus dio) resultaron más afectadas que los
interlocutores, con mayor frecuencia hombres (31.31% en promedio). Los
desean mirarlo y se molestan al que- porcentajes encontrados, tanto de uso
rer buscar información y no poder- problemático (70.41%) como de uso
lo usar en el momento que quieren abusivo (9.34%), son superiores a los
hacerlo. Como vemos, los hombres reportados por Carbonell et al. (2012)
puntúan con mayor frecuencia en las y Pedrero et al. (2012); además, si se
condiciones que perturban su deseo atiende a comportamientos específicos
y poder, expresando escasa toleran- tenemos las siguientes comparaciones:
cia a la frustración, mientras que las nunca desconectarse (72.95%) es muy
mujeres exhiben mayor dependencia superior al 44% reportado por Turkle
psicológica y expresan su temor a la (2013), mientras que enviar mensajes
pérdida de conexión. de texto aun estando en clase (55.47%)
es menor al encontrado por Turkle, que
Discusión asciende a 90%.
Los índices encontrados son altos,
En promedio, de las 25 condiciones por lo tanto se puede afirmar que para
problemáticas evaluadas en el autoin- los jóvenes mexiquenses quedarse
forme, se encontraron los siguientes desconectado representa un problema
hallazgos: 70.41% de los preparato- severo y por ello mantenerlo a la vista
rianos se ven afectados de nomofobia resulta primordial sin importar que se
en grado de uso problemático, es de- les acuse de prestarle mayor atención a
cir, siete de cada diez estudiantes pa- su dispositivo que a sus interlocutores
decen la sensación angustiante ante o a las actividades offline. Los prepara-
la falta de conectividad, mantenerse torianos experimentan la paradoja de
alejado del celular resulta impensable la proximidad digital gracias a su telé-
y se muestran agobiados si no están fono inteligente, que funciona como
permanentemente revisándolo. Una extensión del cuerpo en movimiento
situación similar reporta el informe (Benjamín, 2008), pero que los aleja fí-
pisa de 2015, ya que 69% de los alum- sicamente de lo cercano.
nos españoles de 15 años confiesa sen- El porcentaje de preparatorianos
tirse muy estresados al no conectarse mexiquenses que duermen cerca de
a internet. No obstante, este índice su celular (79.77%) es similar al 80%
(70.41%) se encuentra por encima del reportado por Turkle (2013) y al 80%

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Luz María Velázquez Reyes | ¿ACASO TENGO DEMASIADO APEGO A MI CELULAR? NOMOFOBIA EN …

reportado por el Centro de Estudios Es- con lo encontrado con Pedrero (2012),
pecializados en Trastornos de Ansiedad Espinar y González (2009), Carbonell
(ceeta) para la población española. et al. (2012), Yildirim y Correia (2014)
Además, 71.41% ha recibido que- y Beranuy et al. (2009). Es posible dis-
jas respecto a que presta más atención tinguir un patrón de género de uso
a su celular que a sus interlocutores. diferenciado en la implicación severa
Tal apego interfiere con las relacio- de nomofobia, donde chicos y chicas
nes sociales cara a cara, lo cual es un se muestran adictos en diferentes con-
indicador definitivo para calificarlo diciones. Las chicas se preocupan más
de adicción (Ramos Soler et al., 2017; por la desconexión debido a que exhi-
Echeburúa & Corral, 2010); este índice ben una mayor necesidad de mostrar-
es similar al 70% de usuarios que se se online, mientras que en los chicos la
desconectan del mundo real y se ale- desconexión afecta su deseo y poder:
jan de los que lo rodean, reportado por ellas más impactadas por la sociedad
ceeta de España. del espectáculo (Debord, 2007), ellos
particularmente influenciados por la
Conclusiones tiranía de la dominación masculina
(Bourdieu, 1999).
La interacción social de los prepara- El uso envolvente del teléfono in-
torianos con su celular y sus pares los teligente impacta la vida cotidiana de
lleva a padecer el Síndrome del cambio chicos y chicas, ya que le prestan mayor
constante, ya que a sus 16 años han ad- atención y apego que a las personas
quirido más de cinco celulares en pro- de su entorno próximo, sean padres,
medio y en casos extremos han conta- profesores o pareja. La relación social
bilizado hasta 21 dispositivos; si bien que sostienen con su dispositivo es
se encuentran a la vanguardia de los de extrema cercanía, superando el va-
avances tecnológicos, también experi- lor de uso económico y acercándose
mentan los efectos indeseables que el a un vínculo estrecho con su dispo-
uso problemático y abusivo acarrean, sitivo, como lo muestra el que nueve
como la distracción constante, la an- de cada diez mira constantemente su
siedad por estar conectado permanen- dispositivo, o que su celular es lo pri-
temente y dormir con un dispositivo mero que toca al despertar, o que nun-
que fue creado para comunicarse, pero ca se separa de él, o bien que muestra
que ellos lo eligen para compañero incomodidad al no tener acceso, o
permanente en vigilia y sueño. que son capaces de regresar a casa en
Las chicas muestran mayor apego caso de olvidarlo. Estas interacciones
al celular (38.83%) que sus compañe- remarcan dos condiciones de la cibe-
ros (31.31%) y exhiben índices más radicción: la indispensabilidad tanto
altos de uso abusivo, lo cual coincide física como psicológica (Young, 1998);

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además, resaltan que el celular inteli- descuidan e incluso dejan de hacer ac-
gente funciona como una extensión del tividades escolares y familiares.
cuerpo en movimiento (Benjamin, 2008) Las implicaciones de la nomofobia
que se porta con gusto y satisfacción. en estudiantes son múltiples: en el as-
Chicos y chicas se encuentran al pecto familiar tenemos padres y ma-
tanto de la actividad online de sus con- dres e hijos hiperconectados pero poco
tactos, así como de su reputación online comunicados; en la escuela, su desem-
(Cuesta, 2012), por ello se esmeran e peño escolar se ve afectado de distintas
invierten grandes cantidades de tiem- maneras, los estudiantes se desvelan
po en y con su teléfono inteligente. por estar pendientes de la vida online y
Inadvertidamente arriban a un estadío llegan cansados, incumplen con tareas
de ciberdependencia, ya que gracias y actividades extraclase, se distraen fá-
a la promesa de felicidad (Benjamin, cilmente en el aula, se molestan si no
2010) que conlleva la navegación sin pueden usar su teléfono y, por último,
fin saltan a experimentar agobio y an- en el plano emocional, los estudiantes
gustia debido a la posibilidad de per- invierten mayor cantidad de tiempo
derse de algo, mostrando impaciencia a la vida online que a la offline a riesgo
e irritación en caso de querer mirar o de perder la capacidad de solucionar
consultar y no poder hacerlo, además problemas en la realidad física. Están
de padecer frecuentes y prolongados acostumbrados a la sobresaturación de
periodos de distracción, es decir, ig- información y a transitar con rapidez
noran a las personas mientras otorgan de una pantalla a otra. La escuela tendrá
atención a sus múltiples dispositivos, aprender a aprovechar los beneficios de
descuidando tanto tareas escolares las tic para atraer a los estudiantes y
como actividades offline. evitar su eventual abandono.
La ciberdependencia conforma un Los índices de nomofobia, tanto de
cóctel de malestares debido al uso com- uso problemático como de uso seve-
pulsivo, repetitivo y prolongado, afec- ro, se incrementan año con año, por lo
tando tanto la salud del preparatoriano cual es conveniente concientizar sobre
como su vida escolar, familiar y social. el uso responsable de dispositivos in-
A mayor tiempo de conexión online, teligentes y de esta manera lograr que
mayor cantidad de quejas por su ais- el apego al celular no conspire contra
lamiento y confinamiento. Asimismo, la capacidad de reflexionar ni de crear
emerge un comportamiento inédito, ya vínculos afectivos sólidos offline. El
que siete de cada diez prefiere comuni- cibermundo y su promesa de felicidad
carse online antes que cara a cara, por (Benjamin, 2010) requieren de una éti-
lo que se puede afirmar que a medida ca del cuidado de sí mismo y del otro,
que la actividad online se intensifica, la que estimule al mismo tiempo una
vida offline se deteriora debido a que sana convivencia virtual y offline y, so-

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Luz María Velázquez Reyes | ¿ACASO TENGO DEMASIADO APEGO A MI CELULAR? NOMOFOBIA EN …

bre todo, que el vínculo social con el ginar y crear un mejor mundo para uno
celular privilegie la posibilidad de ima- mismo y los otros.

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