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I. La Jurisdicción Contencioso-Administrativa.

1. La Jurisdicción Contencioso-Administrativa. Extensión y límites.


• Introducción.
· La jurisdicción es la potestad, derivada del poder del Estado, para resolver los
conflictos personales de cualquier ciudadano utilizando la ley como medio de
presión
para que se cumpla el veredicto fijado por el juez.
La jurisdicción puede ser de varios tipos: civil, penal, social, contencioso-
administrativa
y militar.
Dentro de la jurisdicción contencioso-administrativa encontramos distintos tipos de
actuaciones, tales como:
• Responsabilidad patrimonial.
• Recursos contra la administración que suponen acciones sancionadoras.
• Contratación pública.
• Recursos contra normas administrativas (ordenanzas).
· Los órganos de la jurisdicción contencioso-administrativa son varios y diversos:
• Juzgados de lo contencioso.
• Tribunal Superior de Justicia [de Castilla y León, con dos salas: Valladolid y
Burgos].
• Tribunal Supremo.
Hay actos que no se inician en los juzgados de lo contencioso, sino que por su
entidad
y características se inician en los Tribunales Superiores de Justicia, como son por
ejemplo, las actuaciones con carácter normativo (ordenanza), las actuaciones de un
ministro, etc.
· Las partes del proceso contencioso-administrativo se dividen principalmente en:
• Demandante – recurrente.
• Demandado – recurrido.
• Ministerio Fiscal.
Debemos recordar que en un mismo procedimiento se puede ir contra dos personas a
la vez, tanto físicas como jurídicas (v.gr. Confección hidrográfica del Duero y
Riego de
aguas).
Las partes tienen que tener una capacidad determinada para poder formar parte del
proceso. Esta capacidad se enuncia como legitimación activa y pasiva.
La legitimación activa es la facultad para interponer una demanda; mientras que la
pasiva es la facultad para poder estar en un proceso como demandado o
codemandado.
· El objeto del recurso contencioso-administrativo puede ser muy variado. Ha de
tratarse de actuaciones impugnables y pretensiones procesales.
· El procedimiento puede ser de dos tipos:

Aroa Martínez Colinas

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• P. ordinario. Se trata de un procedimiento con interposición, demandas,
acciones, etc.
• P. abreviado. Engloba procedimientos especiales.
· La terminación del procedimiento puede darse con sentencia firme y ejecución de
la
misma, pero también encontramos otros modos de terminación del proceso. Algunos
de ellos son: el allanamiento (sometimiento a las pretensiones de la parte que
acciona),
que no puede darse con la figura del codemandado; o el desistimiento (abandonar la
pretensión, sin renunciar al derecho en que se basaba, podrá volver a plantear la
litis
posteriormente).
· Por último en esta introducción, debemos mencionar los recursos, contra
providencias, autos y sentencias. Los recursos se plantean con la intención de
modificación, revocación o invalidación de una resolución judicial, ya sea por el
mismo
juez u otro de superior jerarquía.
• Las normas reguladoras de la Jurisdicción Contencioso-Administrativa.

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