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El proceso, en cualquiera de sus formas, supone una actividad generadora

de actos lógicos, cronológicos y jurídicamente regulados, encaminados a obtener


una resolución jurisdiccional. En este contexto, entendemos que las tres nociones
fundamentales del derecho procesal son la jurisdicción, el proceso y la acción.
(Trilogía Estructural del Proceso).

1) Jurisdicción (y competencia)
Trilogía Estructural del Proceso 2) Acción
3) Proceso

1.- Jurisdicción: Se le considera como un atributo de la soberanía. Como


la finalidad del proceso es impartir justicia, su ejercicio conlleva el imperio, el hacer
cumplir (coerción). También se valora como la facultad de decir el derecho. (Jus =
derecho, Dicere = decir o declarar; Jus + Dicere = decir o declarar el derecho).

La jurisdicción, la debemos entender como:


“…la potestad de declarar el derecho por parte del órgano del estado, en
los casos concretos que se le plantean, para tutelar el interés jurídico lesionado y
hacer efectiva la tutela mediante la ejecución. Poder o autoridad de gobernar y
poner en ejecución a las leyes…”

Piero Calamandrei, nos indica en relación con la jurisdicción, que consiste


en:
“… la función del estado de decir o declarar el derecho…”.

Por ello se debe destacar que la facultad de administrar la justicia, es una


función propia del Estado, los particulares no podemos hacer justicia por sí
mismos.
El maestro Miguel Bermúdez Cisneros, en su obra Derecho del Trabajo, nos
indica las diferencias entre jurisdicción y competencia:
También es importante precisar cuáles son los límites y los alcances
de la jurisdicción laboral. Por ello, en primer lugar habremos de considerar
que una cosa es la jurisdicción y otra muy diferente la competencia. La
amplitud de la jurisdicción se determina en su extensión por las
pretensiones que integran lo que sería el objeto del proceso, como también
por la naturaleza de la relación que sirvió de fundamento a la pretensión; en
otras palabras, en lo que permite saber si el conflicto pertenece o no a la
materia laboral. En cambio, la competencia tiene que partir del supuesto
previo de la jurisdicción y, desde ella, establecer sus límites funcionales,
jerárquicos y territoriales.

Competencia: Es considerada como la medida o el límite de la jurisdicción.


Es la atribución que tiene un tribunal para conocer un asunto y resolverlo. Puede
haber jurisdicción sin competencia. Sin embargo, la competencia siempre
presupone la existencia de la jurisdicción.

2.- Acción: Se entiende como el derecho a la jurisdicción. Es la instancia


del particular dirigida al órgano estatal para provocar el ejercicio de la jurisdicción.
Se le considera como el:

“…poder jurídico de acudir ante los órganos jurisdiccionales. Derecho de


pedir justicia. Derecho a provocar la función jurisdiccional...”.

Es un derecho subjetivo y potestativo de acudir al órgano cuya función es


jurisdiccional.
En la acción se configura la propuesta que hace el actor de lo que debe ser
la sentencia o el laudo. De tal manera que la resolución tiene como límite y marco,
lo que se reclama en la acción. En tal virtud, el órgano jurisdiccional no puede ir
más ml lejos de lo que se le pide, de acuerdo al principio de congruencia entre lo
que se demanda y lo que se resuelve.

3.- Proceso: Serie de actos jurídicos regulados por normas legales que
están vinculados por el fin que se quiere perseguir mediante ellos. En términos
generales, implica el “conjunto de actos coordinados entre las partes y quien
resuelve, conducentes al ejercicio de la jurisdicción y tienen una finalidad que
reside en el efecto jurídico de obtener una decisión, laudo o sentencia.”
Otras nociones interesantes de la disciplina procesal en general, que se
deben tomar en cuenta son:
Procedimiento: Conjunto de formalidades o reglas que atañen a la
exterioridad del proceso, esto es, a su desarrollo. Las actuaciones que exteriorizan
el desarrollo del proceso están vinculadas, sobre todo a los siguientes aspectos:
a) Forma de las notificaciones;
b) Términos, y
c) Normas relativas a la realización de las audiencias.

Litigio: Conflicto de intereses con trascendencia jurídica. Se estima que


todo litigio debe comprender lo siguiente 1:
1) Conflicto de interés entre dos o más personas;
2) Conflicto de interés de carácter jurídico, (derechos y obligaciones), y
3) Que se manifieste por medio de pretensiones opuestas.

Juicio: Se debe considerar que existe un juicio, cuando hay un litigio


sometido a un órgano jurisdiccional.

Excepción: Es un derecho subjetivo y potestativo, que requiere el ejercicio


de la acción. (Exipere = rechazar o repeler). Derecho a defenderse. Es un medio
de combatir las pretensiones del actor, dilatando o destruyendo su procedencia.
Pretende hacer ineficaz la acción del demandante.
Las excepciones se clasifican en:

1) Dilatorias
Excepciones 2) Perentorias
3) Mixtas

El maestro Santiago Kelley, en su obra Teoría del Derecho Procesal, al


respecto nos indica la clasificación de las excepciones en los siguientes términos:
1.- Excepciones dilatorias: atacan el proceso y no el derecho en
que se basa la acción, tienden a dilatar la procedencia de las prestaciones
1
Puede haber litigio sin haber juicio.
reclamadas dentro del proceso, como por ejemplo: falta de personalidad,
incompetencia del juez, falta de vencimiento del plazo, la falta de
cumplimiento de la condición, etcétera.

La procedencia de una excepción dilatoria, deja abierta la posibilidad


de volver a ejercitar la acción.

2.- Excepciones perentorias: no atacan el proceso, sino el derecho


en que se basa el ejercicio la acción. Las excepciones perentorias, no
aparecen anunciadas en los códigos, como aparecen las excepciones
dilatorias. Se puede decir que las excepciones perentorias combaten el
derecho en que se fundan las prestaciones reclamadas en la demanda.

Ejemplos de excepciones perentorias serían: pago, prescripción,


etcétera.

La procedencia de una excepción perentoria, concluye el conflicto y


no deja abierta la posibilidad de volver a iniciar un nuevo juicio por el mismo
motivo.

3.- Excepciones mixtas: funcionan procesalmente como dilatorias,


porque atacan el proceso, pero al ser declaradas procedentes tienen los
efectos de las perentorias, al poner fin al conflicto, como por ejemplo: la
cosa juzgada, es una excepción, que al declararse procedente concluye el
conflicto y no deja abierta la posibilidad de volver a demandar como sería el
caso de las excepciones dilatorias.

Defensa: Es la negación del derecho en que se fundan las prestaciones


reclamadas. Es el argumento o razón que en el juicio correspondiente se hace
valer, con el fin de desvirtuar o de oponerse a la acción del demandante.

DIFERENCIA ENTRE EXCEPCION Y DEFENSA


Así mismo, sobre la cuestión de diferenciar las excepciones y defensas, el
maestro Kelley, en su citada obra, Teoría del Derecho Procesal, nos señala en los
siguientes términos:
La excepción es un medio de combatir las pretensiones que el actor
reclamó en la demanda, dilatando o destruyendo su procedencia; la
defensa no tiende a dilatar o destruir nada, la defensa es la negación del
derecho en que se fundan las prestaciones reclamadas.

LA ACCION Y LA EXCEPCION, NATURALEZA


Acción Derecho subjetivo
Derecho potestativo

Requiere el ejercicio de la
acción.
Excepción Derecho subjetivo
Derecho potestativo Sin acción no hay
excepción.

Señala el Maestro Santiago Kelley, en su obra ya citada, en relación entre


acción y excepción, lo siguiente:
“… sí el juicio fuera una contienda, la acción sería la espada del que ataca y la
excepción sería el escudo que protege del ataque…”

En estos términos, considero se puede advertir ampliamente la distinción


entre la acción y la excepción, pero también surgen dudas sobre la diferencia
entre las excepciones y defensas, por ello es importante ejemplificar dicha
cuestión.

¡EXCEPCIONES y DEFENSAS, ejemplo sobre diferencias!

Alberto (trabajador) presenta una demanda ante la Junta Local, en contra


de José (patrón) por el pago de dos meses de salarios devengados, respecto de
la relación de trabajo que los une, ¡sí el demandado José, se defiende
manifestándole a la Junta que conoce del juicio, que esa autoridad no es
competente, porque la empresa se ubica en una zona bajo jurisdicción federal, y
en consecuencia los servicios se desarrollan fuera de su competencia territorial!,
se estaría interponiendo una excepción dilatoria de incompetencia por
declinatoria.
Ahora bien, sí José manifestará en su contestación de demanda, que los
salarios cuyo pago se demandan, ya están liquidados, ya que le fueron entregadas
oportunamente las cantidades correspondientes personalmente al actor Alberto,
mediante cheques, mismos que firmó de recibido, se estaría oponiendo una
excepción perentoria de pago.

Por otra parte, sí en la contestación de demanda José, argumentará que


él actor Alberto, no era su trabajador, y por tanto no tiene derecho el señor
Alberto, a demandarle el pago de los salarios, entonces se estaría interponiendo
una defensa, porque no se está pretendiendo dilatar o destruir las pretensiones
reclamadas, lo que se hace es negar que exista el derecho en que se basan las
prestaciones reclamadas.

Hechos que se desprenden de Excepción o defensa


autos

Alberto presenta una demanda en la


Junta Local, en contra de José por el
pago de dos meses de salarios
devengados, respecto de la relación En este caso se hace valer una
de trabajo que los une. José se excepción dilatoria de
defiende manifestándole a la Junta incompetencia por declinatoria.
que conoce del juicio, que esa
autoridad no es competente, porque
la empresa se ubica en zona bajo
jurisdicción federal y en consecuencia
los servicios se desarrollan fuera de
su competencia territorial.

Sí José manifestara en su
contestación de demanda, que los
salarios cuyo pago demanda Alberto,
ya fueron pagados y que le fueron Se estaría oponiendo una excepción
entregadas las cantidades perentoria de pago.
personalmente al actor Alberto
mediante cheques, mismos que firmó
de recibido.
Sí en la contestación de demanda Se estaría interponiendo una
José argumentara que él actor defensa, porque no se está
Alberto no era su trabajador y por pretendiendo dilatar o destruir las
tanto no tiene derecho el señor pretensiones reclamadas, lo que se
Alberto a demandarle el pago de los hace es negar que exista el derecho
salarios. en que se basan las prestaciones
reclamadas.

QUE ES EL DERECHO PROCESAL


El derecho procesal es el conjunto de normas jurídicas cuyo objeto es el
proceso. Esta rama jurídica tiene una vinculación evidente con la acción legislativa
realizada por el congreso y con la jurisprudencia integradora, a cargo del órgano
jurisdiccional.
Asimismo, el derecho procesal es el instrumento ideal para hacer efectivas la
justicia y la seguridad jurídica.
El derecho procesal es esencialmente una rama del derecho público y cada
vez resulta más clara la participación protagónica del estado en las relaciones
jurídicas procesales.
El diccionario de Derecho Procesal, del Colegio de Profesores de Derecho
Procesal de la Unam (Oxford, septiembre 2004), menciona que el derecho
procesal constituye el conjunto de normas jurídicas que regulan la actividad
jurisdiccional del estado.

ETAPAS DEL PROCESO


En el derecho procesal, se menciona constantemente hablar de las etapas, es
pertinente mencionar, que primeramente haremos alusión a las etapas del
proceso, las cuales en ocasiones se confunden con las etapas de las audiencias.
En el proceso encontramos varias etapas o periodos, en los que el mismo se
desarrolla. Principalmente advertimos las etapas de instrucción y de decisión:

a) El periodo o etapa de instrucción: comprende dos fases, la postulatoria y


la probatoria.
Fase Postulatoria: En esta fase las partes plantean sus pretensiones y
exigencias.

Fase Probatoria: La fase probatoria contempla a su vez, las fases de:


1) Ofrecimiento de pruebas. (a cargo de las partes).
2) Admisión de pruebas. (a cargo de la autoridad).
3) Preparación de las pruebas. (citar testigos, absolventes, etc.); y
4) Desahogo de pruebas. (de aquellas que requieran de diligencia especial,
como la prueba confesional, testimonial, pericial, inspección, etc.)
Algunos tratadistas incluyen dentro del periodo de instrucción a la fase
preconclusiva, la cual comprende principalmente los alegatos o conclusiones.

b) El periodo o etapa de decisión: Comprende la fase resolutoria, en la que se


dicta la sentencia o el laudo correspondiente.
La resolución (sentencia o laudo) culmina la función jurisdiccional. Es la
decisión con la cual la autoridad resuelve el litigio y concluye el proceso, de
acuerdo al artículo 837 de la Ley Federal del Trabajo.
CLASIFICACION DEL ARTÍCULO 17 DE LA LEY FEDERAL TRABAJO
En el artículo 17 de la LFT, se establece lo que podemos entender por
fuentes del derecho procesal del trabajo, ya que menciona:

Artículo 17.- A falta de disposición expresa en la Constitución, en esta Ley o


en sus Reglamentos, o en los tratados a que se refiere el artículo 6o., se tomarán
en consideración sus disposiciones que regulen casos semejantes, los principios
generales que deriven de dichos ordenamientos, los principios generales del
derecho, los principios generales de justicia social que derivan del artículo 123 de
la Constitución, la jurisprudencia, la costumbre y la equidad.
FUENTES DEL DERECHO PROCESAL DEL TRABAJO
Constitución
Ley Federal del Trabajo
Reglamentos
Tratados Internacionales
Disposiciones semejantes (analogía)
Principios Generales de Justicia Social
Principios Generales del Derecho
Principios Generales de Justicia Social, derivados del artículo 123 Constitucional
La Jurisprudencia
La Costumbre
La Equidad

Cabe mencionar que el legislador, al hacer referencia a los principios, trato


de ser específico, ya que menciona los Principios Generales del Derecho,
Principios Generales de Justicia Social y los Principios Generales de Justicia
Social derivados del artículo 123 de la Constitución, los cuales pudiéramos
considerar que sobre todo los dos últimos, que se refieren a lo mismo.
Así mismo es importante hacer referencia a los convenios y tratados
internacionales, los cuales hoy en día están de moda en los conflictos laborales,
ya que constantemente se solicita su aplicación en el derecho interno,
especialmente en materia de derechos humanos laborales, por lo que en páginas
subsecuentes abordaremos este tema de los derechos humanos en materia
laboral.

CONFLICTOS LABORALES
Los conflictos de trabajo, se consideran por Eugenio Pérez Botija, citado en
la obra de Néstor de Buen, como:

“…las fricciones que pueden producirse en las relaciones de


trabajo…”,

Así mismo en dicho texto se hace referencia al Doctor Mario de la Cueva,


quien al respecto nos indica:
“…los conflictos laborales tienen dos características
fundamentales: primeramente una de las personas que intervengan
en el conflicto, por lo menos, debe ser sujeto de una relación de
trabajo…. y en segundo lugar, la materia sobre la que verse el
conflicto ha de estar regida por las normas del derecho del
trabajo…”.

Normalmente se generan cuando surge el incumplimiento espontáneo de


las normas de trabajo, incluyendo de manera especial el derivado de los contratos
de trabajo, ya sea individuales y colectivos, o bien de los estatutos que rigen la
vida sindical.

CONCEPTO DE CONFLICTO
El término conflicto se considera de origen latino, “…conflictus…” que a la
vez deriva del término, “…confligere…”, que implica combatir, luchar, pelear. Es
considerado a la vez, como controversia, contienda, diferencias, oposición.
Se tiene que generar el conflicto, por lo menos entre dos o más personas,
que expresen intereses opuestos.

CLASIFICACION DE LOS CONFLICTOS LABORALES


Entre las diversas clasificaciones de los conflictos de naturaleza laboral, nos
interesan de manera especial, las siguientes:
a) En cuanto a los sujetos que participan:

Se establece la clasificación en atención a los sujetos que intervienen en los


conflictos.

b) En cuanto a los intereses en pugna:

Se establece la división de los mismos en atención al interés en juego, sin


considerar el número de individuos que intervienen en el conflicto, sino que el
factor que determina el tipo de conflicto de que se trata, se deriva de la
afectación de los intereses en pugna, de tal manera que cuando el interés que
pueda resultar lesionado es el profesional, estamos en presencia de un
conflicto colectivo.
En este orden de ideas, procederemos a clasificar las distintas diferencias
que surgen entre las partes, considerando principalmente en cuanto a los sujetos
que participan y los intereses en pugna, los conflictos pueden ser:

Clasificación de los Conflictos Laborales

Sujetos que participan Intereses en pugna


Entre trabajadores y patrones Individuales
Intersindicales Colectivos
Entre un sindicato y sus agremiados Naturaleza jurídica
Entre trabajadores Naturaleza económica
Entre patrones Naturaleza económica****

CLASIFICACION LEGAL
Considerando a lo establecido en la ley, podemos determinar, que en la
misma, se hace referencia específica a los conflictos de trabajo, en los términos
siguientes:
Artículo 604.- Corresponde a la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje el
conocimiento y resolución de los conflictos de trabajo que se susciten entre trabajadores y
patrones, sólo entre aquéllos o sólo entre éstos, derivados de las relaciones de trabajo o de
hechos íntimamente relacionados con ellas, salvo lo dispuesto en el artículo 600 fracción
IV.

Artículo 621.- Las Juntas Locales de Conciliación y Arbitraje funcionarán en cada


una de las Entidades Federativas. Les corresponde el conocimiento y resolución de los
conflictos de trabajo que no sean de la competencia de la Junta Federal de Conciliación y
Arbitraje.

Artículo 700.- La competencia por razón del territorio se rige por las normas
siguientes:
I. Si se trata….
V. En los conflictos entre patrones o trabajadores entre sí, la Junta del domicilio del
demandado; y

CONFLICTOS LABORALES EJEMPLOS

Entre trabajadores vs. Patrones Demanda por despido.

Entre trabajadores vs. Trabajadores Conflicto en cuanto al escalafón


Entre patrones vs. Patrones Conflicto de sustitución patronal

Entre sindicato vs. Sindicato Demanda por titularidad contrato colectivo

Entre sindicato vs. Agremiado Aplicación cláusula de exclusión

SOLUCION DE LOS CONFLICTOS LABORALES


Señala la exposición de motivos de la Ley Federal del Trabajo de 1970,
respecto de los conflictos de trabajo, en el apartado LI, menciona lo siguiente:
LI. Juntas de Conciliación y Arbitraje.
La organización y funcionamiento de las Juntas de Conciliación y Arbitraje
fue objeto de especial preocupación, pues una justicia pronta y expedita es
la mejor garantía y, además, un motivo de confianza de los hombres en sus
instituciones jurídicas. Los conflictos de trabajo han sido clasificados por la
doctrina y la jurisprudencia de conformidad con dos criterios: de acuerdo
con el primero, se dividen en individuales y colectivos, según que los
intereses en juego sean los de uno o varios trabajadores, individualmente
determinados, tal es el caso de las demandas para el pago de salarios,
despidos o riesgos de trabajo, bien que se trate de intereses de los grupos
de trabajadores, esto es, de conflictos que afecten los intereses generales
de las comunidades obreras. La segunda clasificación comprende también
dos tipos de conflictos, unos de naturaleza jurídica y otros de naturaleza
económica: los primeros son los que se refieren a la interpretación y
aplicación de las normas jurídicas vigentes en relación con casos correctos,
en tanto los conflictos económicos son los que tienden a la creación o
modificación de las normas que deberán regir en el futuro las relaciones
entre los trabajadores y los patronos. Se estudiaron detenidamente las
diferentes soluciones que ha propuesto la doctrina para la organización de
las Juntas de Conciliación y Arbitraje: una de ellas consiste en dividirlas en
dos organismos, uno que conozca de los conflictos jurídicos, que pueden
ser individuales o colectivos, y otro dedicado al conocimiento y resolución
de los conflictos económicos. Pero nuestra tradición y la unidad indisoluble
del derecho del trabajo, hace inaceptable esa división, la cual, por otra
parte, rompería la interpretación uniforme que desde hace más de cuarenta
años ha sido la Suprema Corte de Justicia al mandado constitucional que
ordena que los conflictos entre el Capital y el Trabajo, entre los cuales no
hace ninguna distinción, se sometan a la decisión de una Junta de
Conciliación y Arbitraje.

LA CLASIFICACION DE LOS MEDIOS DE SOLUCION

Entre los medios de solución de cualquier conflicto, normalmente


encontramos los siguientes:
a) Trato directo
b) Mediación
c) Transacción
d) Arbitraje
e) Jurisdicción de trabajo

No todas estas figuras, se pueden aplicar en los conflictos laborales, pero


las mencionamos, por los aspectos particulares que presenta cada una de ellas en
la solución de diferencias entre los sujetos laborales.

LA SOLUCION DIRECTA ENTRE LAS PARTES


Se genera cuando las partes de manera espontánea buscan solución de
manera directa al conflicto, se le denomina “…trato directo…”, y entre los aspectos
principales que se generan esta, el pago, la transacción o el convenio (nuevas
condiciones de empleo).

LA SOLUCION CON INTERVENCION DE TERCEROS


Se genera con la participación de conciliadores, mediadores y árbitros, así
como también cuando el conflicto se ventila con la intervención de otros órganos
públicos jurisdiccionales.

LA CONCILIACION
La conciliación pretende siempre acercar a las partes con la intención de
lograr un acuerdo que ponga fin al conflicto. En la conciliación las partes
normalmente se hacen concesiones reciprocas de sus pretensiones, para resolver
sus conflictos de intereses. En otro apartado se hace referencia a esta cuestión.

LA MEDIACION
El mediador, normalmente desempeña una función activa, formulando
propuestas de solución del conflicto. En otro apartado se hace referencia a esta
cuestión.

EL ARBITRAJE
En algunos contratos colectivos de trabajo se prevé la intervención de un
árbitro en la solución de algún conflicto y consiste en la resolución dictada por un
tercero que las partes, previo sometimiento expreso acordaron que su decisión o
pronunciamiento sería obligatoria para las mismas.

LA INTERVENCION JURISDICCIONAL
Es la intervención propia de la autoridad jurisdiccional laboral, las
denominada Juntas de Conciliación y Arbitraje, ante las cuales se ventilan la
mayoría de los conflictos de trabajo. Se desarrollan bajo un sistema de doble
competencia, federal y local.

LOS TRIBUNALES LABORALES


Como ya se mencionó, en la exposición de motivos de la Ley Federal de
Trabajo vigente en nuestro país, nos señala que para la solución de los conflictos
de trabajo, la administración de justicia laboral tiene características especiales,
que no encontramos en otra legislación, ya que, de acuerdo a nuestra constitución
los tribunales laborales, se integran con representantes obreros, con
representantes patronales y con representantes de gobierno.

LA CREACIÓN DE LOS TRIBUNALES LABORALES


El nacimiento del artículo 123 de la Constitución General de la República,
en su fracción XX, apartado A, pone de manifiesto la necesidad de crear
organismos con un perfil especial, para lo cual establece:
Artículo 123, fracción XX.- Las diferencias o los conflictos entre el capital y el
trabajo se sujetarán a la decisión de una Junta de Conciliación y Arbitraje,
formada por igual número de representantes de los obreros y de los patrones, y

uno del gobierno.


La exposición de motivos de la Ley Federal del Trabajo, alude a la
característica propia de la administración de justicia para la solución de los
conflictos de trabajo, ya que se encomienda a organismos que representan los
intereses y puntos de vista de los factores de la producción, trabajo y capital; por
otra parte, se considera el interés general de la nación representado en la persona
del presidente de la junta, por eso su formación y organización sectorial y
colegiada de carácter tripartita.
En este mismo documento se afirma que entre las razones nacidas de la
realidad para la formación de los tribunales laborales, destaca la inquietud de los
trabajadores por buscar el establecimiento de tribunales que dirimieran las
controversias surgidas en el ambiente obrero patronal. Lo anterior se ajusta a
necesidades diferentes a las previstas por los tribunales establecidos, cuyos
jueces aplican la norma con procedimientos formalistas de derecho común, más
no interpretan los hechos como lo requieren los conflictos de trabajo.
Los conflictos colectivos de trabajo de principios del siglo XX sirvieron para
plantear la urgente necesidad de establecer, no sólo procedimientos especiales,
sino tribunales con las características necesarias para atender y dar satisfacción a
esas controversias y a los diversos conflictos individuales derivados de las
relaciones obrero - patronales.
En esa época, el sector obrero desconfiaba de los procedimientos
tradicionales y de los jueces que impartían justicia. Esta desconfianza prevalece
hoy, aun con la integración tripartita de las Juntas de Conciliación y Arbitraje, ya
que en opinión del sector obrero, las autoridades jurisdiccionales laborales son
patronales, es decir, tienen una supuesta tendencia a favorecer con sus
resoluciones a los patrones, pero, por otra parte, los patrones argumentan que la
Ley Federal del Trabajo protege en exceso a la clase trabajadora, además que la
legislación de referencia no promueve ni trata de generar o inclusive conservar
nuevos empleos, hoy en día tan necesario en nuestro país. 2
También se afirma en la exposición de motivos de la ley que la formación
tripartita de los tribunales laborales obedece a las necesidades interpretativas que
2
Las conclusiones anteriores se derivan de más de treinta años de experiencia profesional en los
tribunales.
requerían los conflictos de trabajo. La necesidad de ser entendidos como sector
provocó la formación tripartita y sectorial de los tribunales laborales, ya que era
indispensable la representación e intervención de los factores en pugna y así fue
establecida en nuestra carta magna.
En el Temario de Derecho Procesal del Trabajo, se establece que México
es el único país en el mundo que tiene tribunales de trabajo con procedimientos
especiales para resolver cualquier tipo de conflictos en materia laboral, ya sean
conflictos económicos, jurídicos, individuales o colectivos. 3
Por otra parte advertimos que el carácter de tribunales jurisdiccionales de
las juntas se corroboró en la Ley de Amparo vigente, en el artículo 158, que
establece que el amparo directo procede contra laudos pronunciados por los
tribunales del trabajo.

COMPETENCIA LABORAL
En materia laboral, rige un sistema de doble competencia, federal y local,
en los términos del artículo 527 de la Ley Federal del Trabajo, así como el
correspondiente de la Constitución Federal, se determina cual es la competencia
de naturaleza federal, y por exclusión se deduce cual es la competencia local.

COMPETENCIA FEDERAL
La competencia federal se determina de acuerdo a los siguientes criterios:
1) por razón de la materia;
2) por razón de la participación estatal;
3) por razón del territorio, y
4) por razón de la naturaleza federal.

Según se desprende de la fracción XXXI, del artículo 123 Apartado A de la


Constitución, estrechamente vinculado con el 527 de la legislación laboral. De
ambos preceptos se desprende que la aplicación de las normas de trabajo,
corresponde a las autoridades federales bajo un criterio excluyente o de
excepción, ya que únicamente se reservan facultades para conocer en los casos

3
Junta Federal de Conciliación y Arbitraje Temario de Derecho Procesal del Trabajo. Secretaría del
Trabajo y Previsión Social. Talleres Gráficos de la Nación, México, 1985.
determinados en los artículos en comento, los cuales se resumen en los siguientes
términos:
Por razón de la materia: En los términos del inciso a) de la fracción
constitucional citada, en sus veintidós numerales, se comprenden las principales
industrias y servicios de banca que resultan ser de especial importancia para la
economía nacional.
Por razón de la participación estatal: Igualmente en el inciso b), del
artículo en comento, se comprenden aquellas empresas en las cuales el estado
participa en su manejo, ya sea porque son administradas en forma directa o
descentralizada por el Gobierno Federal, o bien porque actúan en virtud de un
contrato o concesión federal o porque se trata de industrias conexas.
Por razón del territorio: Por otra parte en el mismo inciso b), también se
hace mención que corresponde la aplicación de las normas de trabajo a las
autoridades federales, cuando se trate de aquellas empresas que ejecuten
trabajos en zonas federales y aguas territoriales.
Por razón de la naturaleza federal: En la última parte de la fracción XXXI,
dispone que sean de competencia federal aquellos conflictos que se susciten en
empresas que afecten a dos o más entidades federativas y los contratos colectivos
que hayan sido declarados obligatorios en más de un estado de la república.

COMPETENCIA LOCAL
Conforme a los criterios de los cuales resulta la competencia federal, se
advierte que el legislador reserva el conocimiento a las autoridades federales,
única y exclusivamente en los conflictos que se susciten en las industrias o
empresas, que específicamente se detallan en el artículo constitucional de
referencia, que se encuentra estrechamente vinculado con el artículo 527 de la ley
reglamentaria y que por asociación de ideas se desprende, que todo lo no
reservado para las autoridades federales, por exclusión, es competencia de las
autoridades locales. Esto significa que la competencia federal es la excepción y la
competencia local es la regla, en armonía con lo que dispone el artículo 124 de la
Constitución General de la República, que nos indica que:
"…las facultades que no están expresamente concedidas por
esta Constitución a los funcionarios federales se entiende reservada
a los Estados…"

El ejercicio de la función jurisdiccional se encuentra encomendado, tanto


en la carta magna como en la ley, a las autoridades federales y locales, cobrando
plena aplicación y vigencia la regla de jurisdicción establecida en los artículos 698
y 699 de la Ley Federal del Trabajo, los cuales nos indican:
Artículo 698.- Será competencia de las Juntas Locales de Conciliación y de
Conciliación y Arbitraje de las Entidades Federativas, conocer de los conflictos que
se susciten dentro de su jurisdicción, que no sean de la competencia de las Juntas
Federales.

Las Juntas Federales de Conciliación y Federal de Conciliación y Arbitraje,


conocerán de los conflictos de trabajo cuando se trate de las ramas industriales,
empresas o materias contenidas en los artículos 123, apartado A), fracción XXXI
de la Constitución Política y 527 de esta Ley.

Artículo 699.- Cuando en los conflictos a que se refiere el párrafo primero del
artículo que antecede, se ejerciten en la misma demanda acciones relacionadas
con
En el supuesto previsto en el párrafo anterior, la Junta Local, al admitir la
demanda, ordenara' se saque copia de la misma y de los documentos presentados
por el actor, las que remitirá' inmediatamente la Junta Federal para la
Substanciación y resolución, exclusivamente, de las cuestiones de capacitación y
adiestramiento, y de seguridad e higiene en los términos señalados en esta Ley.

En relación con este segundo aspecto competencial, nuestra


legislación en el artículo 604 de la Ley Federal del Trabajo, hace referencia a este
supuesto para determinar la competencia, ya que indica lo siguiente:
Artículo 604.- Corresponde a la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje
el conocimiento y resolución de los conflictos de trabajo que se susciten entre
trabajadores y patrones, solo entre aquellos o solo entre estos, derivado de la
relación de trabajos o de hechos íntimamente relacionados con ella, salvo lo
dispuesto en el artículo 600 fracción IV.

COMPETENCIA TERRITORIAL
En cuanto a la competencia territorial, la Ley Federal del Trabajo, en el artículo
700, fija las reglas que la determinan, independientemente que se trate de
competencia federal o local, ya que establece lo siguiente al respecto:
a) Si se demanda ante una Junta de Conciliación, tendrá competencia la junta
del lugar de prestación de los servicios.
b) Si se demanda ante una Junta de Conciliación y Arbitraje, el actor puede
escoger para presentarla:
1. La junta del lugar de la prestación de los servicios; si fueran varios
lugares, en cualquiera de ellos.
2. La junta del lugar de celebración del contrato, o
3. La junta del domicilio del demandado.
c) En los conflictos colectivos de jurisdicción federal, en los términos del
artículo 606 de la Ley.
d) Cuando se trate de la cancelación del registro de un sindicato, la junta del
lugar donde se hizo.
e) En los conflictos interpatronales o interobreros, la junta del domicilio del
demandado.
f) Cuando el demandado sea un sindicato, la junta de su domicilio.

INCOMPETENCIA DE OFICIO
El artículo 701 de la ley de la materia prevé que las juntas pueden
declararse incompetentes de oficio en cualquier estado del proceso, hasta antes
de la audiencia de desahogo de pruebas, cuando existan en el expediente datos
que lo justifiquen.
Transcurrida la diligencia de desahogo de pruebas, en el supuesto de que
la autoridad laboral se percate que no le resultaba competencia, atendiendo al
estado del juicio, deberá continuar hasta el final, ya que la junta ante la cual se
rindieron las pruebas es la que debe resolver, lo anterior no obstante que existan
reglas de competencia que establecieran lo contrario. 701

INCOMPETENCIA Y NEGATIVA DE LA RELACIÓN LABORAL


El artículo 702 de la Ley Federal del Trabajo, señala que no se considerara
como excepción de incompetencia la defensa consistente en la negativa de la
relación de trabajo. En el supuesto de hacer valer la incompetencia derivada de la
posible inexistencia de la relación de trabajo, la autoridad laboral deberá
desahogar en todos sus términos el proceso, independientemente que a su
término se advierta que no existía el nexo de trabajo, pero es necesario tramitar
todo el proceso para llegar a esa conclusión en la resolución final. 702

CUESTIONES DE COMPETENCIA: LA DECLINATORIA


En materia de trabajo, las cuestiones de competencia, sólo pueden
promoverse por declinatoria, como lo prevé el artículo 703 de la ley; debe
tramitarla el demandado, ya que el actor no puede dejar sin efecto su
sometimiento expreso que realiza al presentar la demanda y se promueve en vía
incidental ante el tribunal que tiene radicado el expediente para que deje de
conocer el conflicto.
Esto es, la cuestión incidental de competencia o incompetencia por
declinatoria, que establece la ley de la materia, debe promoverse ante la autoridad
que conoce del juicio, ante la cual se plantea en que consiste la falta de
competencia. El propósito es que dicha autoridad deje de conocer el asunto y lo
remita ante la autoridad que se considera competente.

LA INHIBITORIA (no en materia laboral)


La incompetencia por inhibitoria se tramita ante la autoridad que se
considera competente, ante la cual se plantea la cuestión competencial y se le
solicita se declaré competente del asunto que no tiene en su poder, ya que el
expediente se encuentra radicado ante la autoridad que conoce del asunto, misma
que se considera incompetente, más no en el juicio laboral, ya que ésta figura de
la competencia por inhibitoria no existe, porque únicamente se puede hacer valer
la incompetencia por declinatoria ante la autoridad que tiene radicado el juicio.

CONEXIDAD, CONCURRENCIA y ATRACCIÓN COMPETENCIAL


Resulta interesante diferenciar estas cuestiones procesales, que se
presentan durante la tramitación de diversos juicios:

Conexidad: Existe conexidad en un juicio, cuando varios actores ejercitan


la misma acción. Se hace valer como una excepción procesal cuando existe más
de un juicio que tengan relación entre sí, o que de alguna forma estén enlazados.
Se debe procurar que los juicios se encuentren en etapas o instancias similares,
ante autoridades que ejerzan funciones jurisdiccionales de idéntico grado, que
exista identidad de las personas y de las acciones, así como de las causas
provocadoras que originan las acciones. Así mismo se menciona que se aplica en
los juicios, que por su relación deben ser objeto de un mismo proceso. (Diccionario
de Derecho Procesal)

Concurrencia: Cuando dos o más Juntas o tribunales, tienen competencia


para conocer de un mismo asunto.

Atracción Competencial: Por su parte la atracción competencial se genera


cuando una demanda contiene acciones de competencia local y federal, siendo
atractiva en este caso la competencia federal.

DECISIÓN DE LAS COMPETENCIAS


El artículo 705 de la Ley Federal del Trabajo, prevé lo relativo a la
resolución de los conflictos de competencia. Estos conflictos se decidirán de
acuerdo a las reglas que en la misma ley se contienen, atribuyéndoles facultades
para resolver al Pleno de la Junta Local o al Pleno de la Junta Federal, así como
también a la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Ver
art. 705

EFECTOS DE LO ACTUADO ANTE JUNTA INCOMPETENTE


Establece el artículo 706 de la ley de la materia que será nulo todo lo
actuado ante la junta incompetente, salvo el acto de admisión de la demanda. Esta
última disposición tutelar es establecida para los efectos de que no opere la
prescripción. Las actuaciones ante junta incompetente pueden conservar su
validez mediante un convenio celebrado que ponga fin al conflicto en el periodo de
conciliación. 706

EQUIVALENTES JURISDICCIONALES
Hemos dicho que la jurisdicción consiste en la potestad del estado de
aplicar la ley en las controversias planteadas, juzgando y haciendo ejecutar lo
juzgado. Esta es la forma de componer los litigios mediante el proceso
jurisdiccional conocido por la doctrina como la heterocomposición.
A la forma de resolver los litigios espontáneamente, se denomina
autocomposición, y se llaman equivalentes jurisdiccionales, dado que el acuerdo o
la solución de este litigio pone fin a la controversia.
Las principales formas o tipos de autocomposición, son los siguientes:
 Renuncia o desistimiento: Consiste en el abandono de la acción. Es una
declaración por la cual el actor renuncia o se desiste de la acción o de la
instancia.
 Allanamiento: Acto procesal mediante el cual el demandado reconoce
expresamente la procedencia de la acción intentada en su contra; el efecto
jurídico es someterse a las pretensiones de la contraparte. 4

 Transacción: Acuerdo de voluntades para poner término al litigio. La


transacción tiene el inconveniente en materia laboral de que implica
concesiones mutuas; por ello debe de tenerse especial cuidado, toda vez
que no pueda haber concesiones sobre derechos irrenunciables de los
trabajadores.

 Mediación: Acuerdo voluntario para poner término al litigio con intervención


de un tercero que exhorta las partes a un arreglo y propone una solución
como mediador entre ellos.

 Conciliación: Convenio por el cual las partes pueden establecer


espontáneamente un acuerdo para terminar el conflicto atendiendo en
exhorto de la autoridad.5

DIFERENCIA ENTRE MEDIACION Y CONCILIACION


La diferencia entre la mediación y la conciliación reside en la finalidad de la
mediación y de la conciliación:
Mediación: La finalidad de la mediación, es obtener la composición del
litigio, sea justa o injusta.
Conciliación: La finalidad de la conciliación, en cambio, no debe proponer
una composición cualquiera, sino una composición justa del litigio.

4
Tanto el allanamiento como el desistimiento no encuentran referencia específica en la ley federal
del trabajo, pero es evidente que son actos procesales normales en el procedimiento laboral.
5
En la conciliación no pueden sacrificarse los derechos de los trabajadores, ya que se puede
conciliar sobre los hechos más no sobre el derecho sobre todo tratándose de derechos
irrenunciables.
Ahora bien, el Licenciado Climent Beltrán, en su obra citada, Elementos de
Derecho Procesal del Trabajo, al respecto nos indica lo siguiente:
“…cabe considerar en principio que, si habiéndose
presentado la demanda individual, se llega a un arreglo para
esclarecer los hechos expuestos en la misma, por ejemplo, sobre la
verdadera naturaleza de los servicios prestados, o el monto real del
salario, el convenio es licito porque estaban sujetos a prueba esos
hechos...”6

El citado autor, Licenciado Juan B. Climent Beltrán, agrega lo siguiente:


“…Pero si un trabajador demanda indemnización por despido
y la conciliación se efectuó a base de conceder un mes y medio de
salarios, en lugar de los tres meses que fija el artículo 48 de la Ley
Federal del Trabajo, esa conciliación no es válida porque hay
renuncia de derechos…”.7

En lo particular no estamos de acuerdo, y discrepamos del autor en su


última cita, puesto que la conciliación en estos términos, no implica de alguna
manera la renuncia a los derechos irrenunciables del trabajador, en rigor, se trata
de negocios no resueltos definitivamente y, por consecuencia, se encuentran “…
sub iudice…”, de manera que no habrá constancia de renuncia alguna, por más
que pueda presumirse que la hubo con bastante fundamento basado en los
hechos notorios, ya que no existe propiamente un derecho, sino una expectativa
de derecho.
El problema de los derechos irrenunciables es más notorio cuando el
convenio se intenta celebrarlo después de dictado el laudo en sentido
condenatorio, encontrándose pendientes de resolución el amparo propuesto o,
inclusive, resuelto dicho recurso, en forma contraria al quejoso de manera que el
laudo tenga una definitividad rotunda; o bien ocurre frecuentemente que los
litigantes experimentados disimulan el convenio, el cual suele implicar alguna
rebaja importante, aludiendo a un supuesto pago previo realizado fuera de la
Junta, en la cual el actor acepta haber recibido previamente una cantidad de
dinero, misma manifestación que hace ante la propia autoridad, de tal manera que,

6
Juan B. Climent Beltrán. Elementos de Derecho Procesal del Trabajo, Esfinge, México, 1999, página 26.
7
Ibidem.
sumando a la cantidad dinero efectivamente entregada ante la autoridad en la
fecha de la comparecencia, y la supuesta cantidad entregada previamente, se
obtiene con ambas cantidades, la suma del total de la condena, por lo que
aparentemente se dio cabal cumplimiento al laudo en todos sus términos.
Sobre este particular, el doctor Néstor de Buen, señala que:

“…en realidad los llamados convenios son verdaderos


contratos de transacción, definidos en el artículo 2944 del Código
Civil del Distrito Federal…”, como aquel en el que ”…las partes
haciéndose recíprocas concesiones, terminan una controversia
presente o previenen una futura…”.8

LA CADUCIDAD
Otra forma de terminar un juicio es la “…caducidad procesal…”, derivada de
la inactividad. Por lo general un proceso laboral tiene una conclusión natural, por
medio del laudo; sin embargo, puede ocurrir que no se llegue al laudo, como ya lo
hemos dicho y que concluya el proceso antes de dictarlo. Por ello, debe ser
entendida como un medio de extinción del proceso por inactividad de las partes
durante un determinado tiempo. La caducidad es una solución incómoda en el
derecho procesal, pero ciertamente necesaria para evitar la duración eterna de los
procesos.
Néstor de Buen, cita al profesor Mario Salinas Suárez del Real, quien
señala que la caducidad tiene su origen en el derecho romano:

“…Urgente nos ha parecido evitar que los litigios se hagan casi


inmortales y excedan de la vida de los hombres. Por tanto, estimamos que
todos los litigios por los que los hombres litigan, no deben exceder de tres
años…”9

En materia laboral, es difícil que opere la figura de la caducidad, ya que el


impulso procesal corre a cargo de la propia autoridad, por lo que sólo es factible
que opere cuando el actor es omiso en señalar algún dato o hecho que resulte
estrictamente necesario para la continuidad del juicio, de tal manera que la falta de
dicha información haga imposible la continuidad del proceso correspondiente.
8
Néstor de Buen. Derecho procesal del trabajo, Porrúa, México, 1988, página 529.
9
Néstor de Buen. Op. cit, página 529.
Para Santiago Kelley, en su obra citada, señala respecto de que debemos
entender por caducidad:
“…la extinción de la instancia procesal porque las partes no actúen
dentro del proceso; el abandono del proceso por las partes es sinónimo de
falta de interés jurídico, y por ello ese proceso debe terminar, quedando las
cosas en que se encontraban hasta antes de la interposición de la
demanda…”

En nuestra legislación laboral, la figura de la caducidad está prevista en los


artículos 771, 772 y 773, mismo que a la letra dice:

Artículo 771. Los Presidentes de las Juntas y los Auxiliares cuidarán, bajo su más
estricta responsabilidad, que los juicios que ante ellos se tramiten no queden inactivos,
proveyendo lo que conforme a la Ley corresponda hasta dictar laudo, salvo disposición en
contrario. En caso de no cumplir lo anterior, se harán acreedores a las sanciones que
establezcan las Leyes de responsabilidades administrativas de los servidores públicos.
Artículo 772. Cuando, para continuar el trámite del juicio en los términos del
artículo que antecede, sea necesaria promoción del trabajador y éste no la haya efectuado
dentro de un lapso de cuarenta y cinco días naturales, el Presidente de la Junta deberá
ordenar que se le requiera personalmente para que la presente, apercibiéndolo de que, de
no hacerlo, operará la caducidad a que se refiere el artículo siguiente. Si el trabajador está
patrocinado por un Procurador del Trabajo, la Junta notificará el acuerdo de que se trata
al trabajador y a la Procuraduría de la Defensa del Trabajo, para los efectos
correspondientes. Si no estuviera patrocinado por la Procuraduría, se le hará saber a ésta
el acuerdo, para el efecto de que intervenga ante el trabajador y le precise las
consecuencias legales de la falta de promoción, así como para que le brinde asesoría legal
en caso de que el trabajador se la requiera.

Artículo 773. La Junta, a petición de parte, tendrá por desistida de la acción


intentada a toda persona que no haga promoción alguna en el término de cuatro meses ,
siempre que esa promoción sea necesaria para la continuación del procedimiento y se haya
cumplido lo dispuesto en el artículo anterior. No se considerará que dicho término opera si
están desahogadas las pruebas del actor o está pendiente de dictarse resolución sobre
alguna promoción de las partes a que se refiere este artículo, o la práctica de alguna
diligencia, o se encuentre pendiente de acordarse la devolución de un exhorto o la
recepción de informes o copias que se hubiesen solicitado a diversa autoridad dentro del
procedimiento. Para los efectos del párrafo anterior, la Junta citará a las partes a una
audiencia, en la que después de oírlas y recibir las pruebas que ofrezcan, que deberán
referirse exclusivamente a la procedencia o improcedencia del desistimiento, dictará
resolución.

PRINCIPIOS DE DERECHO PROCESAL DEL TRABAJO


Los principios procesales son una fuente de inspiración para el legislador,
también sirven para orientar al derecho mismo. El derecho laboral se basa,
principalmente, en un hecho jurídico como lo es la relación de trabajo. Por ello,
conciernen a la prestación de servicios, de donde se derivan derechos y
obligaciones establecidos en la ley, por encima de la voluntad de las partes.
En consecuencia, el proceso laboral se refiere al esclarecimiento de los
hechos, generadores de los derechos establecidos por la legislación. Por lo tanto,
se trata de aplicar la ley, razón por la cual el órgano estatal, debe asegurar el
cumplimiento de la ley.
De ahí que el proceso laboral no se rige por el principio dispositivo, sujeto al
impulso de las partes; se trata de un impulso procesal de oficio, y que no atiende a
la igualdad formal entre las partes, sino a la igualdad real para equilibrar la
desigualdad económica en que se encuentran los trabajadores frente al patrón. Es
decir, busca obtener el equilibrio entre los factores de la producción, donde reside
la justicia social, según lo indicó el poder constituyente, que aprobó los principios
constitucionales del derecho social del trabajo.
Debemos considerar a los principios del derecho procesal del trabajo, en su
acepción filosófica, como las máximas verdades universales del derecho que han
servido para orientar la misma ley positiva. Los principios deben tener una
absoluta pretensión de validez que no admite excepciones. Además, se pone de
manifiesto en la ley la conveniencia de lograr un proceso concentrado, económico
y sencillo, cualidades que más que un principio constituye una aspiración que el
legislador hace en sentido indicativo a quienes dirigirán el proceso, para que
procuren llevarlo a su fin.

CLASIFICACIÓN DE LOS PRINCIPIOS


Al hacer mención a los principios procesales, es referirse al origen, al
fundamento, a la razón, a la idea primordial que motiva el establecimiento de una
norma, y tienen especial importancia para una correcta aplicación e
interpretación de la legislación correspondiente, entre los principales tenemos los
siguientes:
a) Publicidad: Está contenido principalmente en el artículo 720 de la Ley Federal
del Trabajo, mismo que dispone que las audiencias serán públicas, salvo que
la junta ordene de oficio o a instancia de parte que sean a puerta cerrada, ya
sea cuando lo exija el mejor despacho de los negocios, la moral o las buenas
costumbres.
Se trata de un derecho que tienen las partes a presenciar todas las audiencias
o diligencias, excepto aquellas expresamente establecidas por la ley, como serían
las audiencias de discusión y votación del proyecto de laudo o en los casos que ya
se han indicado en los términos del artículo 720 de la Ley Federal del Trabajo. La
publicidad, entonces es una garantía de que el negocio será resuelto de forma
limpia y honesta, con la mayor equidad y legalidad posible.

b) Gratuidad: Consiste en que todas las actuaciones laborales son gratuitas. 10 Es


decir, no hay costas judiciales. Este principio tiene como fundamento los
siguientes artículos de la Ley Federal del Trabajo:
Artículo 19: Nos indica que todos los actos y actuaciones que se relacionen
con la aplicación de las normas de trabajo no causaran impuesto alguno.

Artículo 824: Que señala que la junta nombrara a los peritos que
correspondan al trabajador cuando no esté en aptitud de pagar los honorarios del
mismo.

Artículo 962: Nos indica que la inscripción de los bienes inmuebles,


embargados por los trabajadores será gratuita.

Artículo 975 fracción II inciso b: Nos indica que en el caso de un remate si


el bien inmueble se lo adjudica el trabajador, deberá ser libre de todo gravamen,
impuestos y derechos fiscales.

c) Inmediatez: Este principio comprende dos aspectos, en cuanto a las partes en


conflicto y en cuanto a la autoridad. En cuanto a los sujetos procesales,
consiste en primer lugar en la comparecencia personal de las partes a las
diversas etapas procesales. Se robustece en los términos de lo establecido en
el artículo 713 de la Ley Federal del Trabajo, el cual señala, la obligación que
tienen las partes de comparecer personalmente a juicio.
Asimismo, este principio comprende un segundo aspecto: los miembros de la
junta deben estar en contacto personal con las partes durante el juicio, a fin de
que estén enterados del mismo. En tal virtud, debe haber continuidad en los

10
El artículo 17 de la Constitución General de la República indica lo siguiente: “Los Tribunales
estarán expeditos para administrar justicia en las plazos y términos que fije la Ley; su servicio será
gratuito, quedando, en consecuencia prohibidas las costas judiciales”
funcionarios, para el efecto de que realmente conozcan del negocio, en forma
personal e inmediata, de tal manera que puedan estar en aptitud de pronunciar
una resolución justa.
En consecuencia, las juntas están obligadas a recibir todas las declaraciones y
presenciar todos los actos de prueba, bajo su responsabilidad. Como efecto de lo
anterior, las juntas podrán hacer libremente las preguntas que juzguen
convenientes y oportunas a las personas que intervengan en las audiencias, así
como examinar documentos, objetos o lugares, en atención de que el derecho
procesal del trabajo debe ser profundamente dinámico y humano, por la
naturaleza misma de los intereses en juego.
La inmediatez es un principio que también opera para la autoridad (junta)
procurando que haya continuidad con el auxiliar que interviene en cada proceso,
de tal manera que exista una compenetración con lo actuado; que realmente
conozca la esencia del negocio procesal por haber estado en contacto con el
juicio durante toda la secuela procesal. Bajo estos requisitos, el laudo podrá
pronunciarse a verdad sabida y buena fe guardada. Lograr este propósito, a veces
resulta muy difícil para la autoridad, en atención al cúmulo de trabajo.

d) Oralidad: Consiste en que predomina la forma oral sobre la escrita, con lo cual
se provoca una mayor comunicación directa entre las partes. Obviamente que
las partes pueden comparecerse por escrito; pero se requiere la presencia
física de las mismas, exhibiendo en el acto los escritos correspondientes.
La oralidad, provoca una mayor fluidez en el procedimiento. Las partes
normalmente tienen que formular y fundar sus réplicas, contra-réplicas, objeciones
y alegatos de viva voz, lo que contribuye a la concentración y economía en el
procedimiento, sin descartar que las mismas (réplicas, contra-réplicas, objeciones
y alegatos), según el caso concreto, se puedan desahogar en forma escrita.
Aunque predomina la palabra hablada sobre la escrita, no es posible que pudiera
desarrollarse un proceso totalmente oral debido a la necesidad de la constancia
escrita, ya que el juzgador estaría imposibilitado de conservar en la memoria todo
el desarrollo del proceso. Por ello se dice que la oralidad es para las partes. En
relación a este principio, dado el criterio que contiene, cabe señalar la siguiente
jurisprudencia:11
CONFESIONAL EN MATERIA LABORAL. ES IMPROCEDENTE
DECLARARLA DESIERTA POR LA INCOMPARECENCIA DEL OFERENTE
QUE PREVIAMENTE A LA AUDIENCIA RELATIVA PRESENTO EL PLIEGO DE
POSICIONES FIRMADO .- De la interpretación armónica de lo dispuesto en
los artículos 685 de la Ley Federal del Trabajo, en relación con los diversos
786 a 794 del propio ordenamiento legal, se concluye que es improcedente
declarar desierta la prueba confesional cuando el oferente, en un
procedimiento laboral, ha presentado el pliego de posiciones firmado
conforme al cual debe desahogarse dicha probanza, fundando dicho
proceder en que aquel omitió comparecer a la audiencia de desahogo
respectiva; ello es así, en razón de que el elemento esencial para llevar a
cabo el desahogo de la prueba no lo constituye la presencia física de las
partes sino el pliego firmado, de las posiciones conforme al cual deberá
desahogarse, aunado al hecho de que debe facilitarse a la Junta laboral el
allegarse los medios de convicción que le permitan llegar al conocimiento
de la verdad, sin obstaculizar su desahogo con exigencias que no se
encuentran previstas en la Ley Federal del Trabajo pues en dicho
ordenamiento no se establece alguna consecuencia procesal para la no
comparecencia de las partes a la audiencia de desahogo respectiva, de tal
manera que la determinación de la Junta laboral en el sentido apuntado
implica distinguir donde no lo hizo el legislador y contrariar lo dispuesto en
el artículo 779 de la ley de la materia que confiere facultades a éstas para
desechar únicamente aquellas pruebas que no tengan relación con la litis
planteada, o bien porque resulten inútiles o intranscendentes, mas no por
causas diversas.

e) Dispositividad o principio inquisitorio o de participación activa (instancia


de parte): La actividad jurisdiccional se ejercita a petición de parte; esto es, se
realiza a petición de los particulares. 12 Este principio se manifiesta
exclusivamente con la presentación de la demanda, pues a partir de la
radicación de la misma, el proceso se convierte en inquisitivo (imperativo), no
sólo en cuanto el impulso de oficio del procedimiento, sino a la participación
activa del tribunal en el proceso. Lo anterior pone en claro que la junta nada
puede hacer si previamente no se lo piden los particulares. En otras palabras
“No hay juzgador sin partes”.

OTROS PRINCIPIOS PROCESALES (¿PRINCIPIOS IMPLICITOS?)

11
Suprema Corte de Justicia. Contradicción de tesis 89/98.- Entre las sustentadas por el Tercer
Tribunal Colegiado del Décimo Primer Circuito y el Tribunal Colegiado del Vigésimo Circuito.
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Novena Época. Tomo IX. Abril de 1999.
12
La jurisdicción actúa por impulso de las partes, a diferencia de la función legislativa o ejecutiva
donde el estado puede actuar por su propia iniciativa.
Los principios de derecho procesal antes mencionados no son los únicos, toda
vez que de la propia ley se desprenden otros principios jurídicos, como los que a
continuación se mencionan:
La suplencia de la demanda: Es un principio tutelar o de equilibrio procesal,
previsto en los artículos 685 y 873 de la ley.
Laudos en conciencia: Otro principio es el que consiste en que los laudos se
dictan en conciencia, de acuerdo a lo previsto por el artículo 841 de la ley.
Igualdad o Paridad Procesal: (art. 784, 804, 824 LFT), de la Ley Federal del
Trabajo.
Concentración: (breves en su tramitación, evitar dispersión (Art. 761, 766 y
697), de la Ley Federal del Trabajo.
Flexibilidad y sencillez del Proceso: (No forma determinada en las
comparecencias o escritos Art. 687), de la Ley Federal del Trabajo.
Suplencia de la deficiencia de la norma Procesal: de acuerdo a lo previsto
en el artículo 17, de la Ley Federal del Trabajo.
Principio Protector: Existe una tutela durante el juicio que se refleja en
diversas actuaciones, así como en la interpretación de la norma y trata de
proteger a una de las partes (trabajador) para lograr una igualdad procesal.- Por
ejemplo: la autoridad laboral puede incluir prestaciones o acciones que no reclamó
el trabajador en su demanda pero que se deducen de los hechos del escrito de
demanda de acuerdo al art. 685, 686 y 873 LFT (prevenir y subsanar); así como
también en la exención de la carga de la prueba al trabajador de acuerdo al art.
784 LFT; etc.

Suplencia de la deficiencia de la norma Procesal: de acuerdo a lo previsto


en el artículo 17, de la Ley Federal del Trabajo.
In dubio pro-operario: El principio denominado In dubio pro-operario, implica
que en caso de duda en la interpretación de las normas de trabajo, debe
prevalecer aquella que favorezca al trabajador, de acuerdo a lo previsto en el
artículo 18, de la Ley Federal del Trabajo.
Buena Fe: El principio de buena fe, implica que el proceso debe basarse en la
buena fe para contribuir al esclarecimiento de los hechos, razón por la cual, la
junta tiene facultades para sancionar a quien obre con dolo o mala fe en el
proceso, de acuerdo a lo previsto en el artículo 891 de la ley.
Economía procesal: El principio de “…economía procesal…”, significa la
posibilidad de agotar las etapas procesales en menos diligencias. Por esta razón,
se prevén en el artículo 873 de la ley, las tres etapas procesales (conciliación,
demanda y excepciones, así como la de ofrecimiento y admisión de pruebas) en
una sola audiencia. De la misma manera bajo este principio se contempla la figura
de la preclusión, sin necesidad de acusar rebeldías. Con similar espíritu en el
artículo 686 de la ley, permite corregir cualquier irregularidad u omisión que
notaren en la sustanciación del proceso.
Sencillez o ausencia de formalismos: Otro principio importante resulta ser el
de sencillez o ausencia de formalismos de acuerdo a lo previsto por los artículos
687, 693, 696, 878 fracciones II y III, y 712 de la ley, los cuales contemplan lo
siguiente:
1.- Que el trabajador no está obligado a conocer el nombre del patrón;
2.- Asimismo el artículo 693 LFT, otorga a la autoridad, la facultad discrecional
en cuanto a la personalidad de los representantes de los trabajadores y sindicatos;
3.- El artículo 696 del mismo cuerpo de leyes hace referencia al poder o
mandato que otorgue el trabajador, el cual se entiende conferido para ser
representado, reclamar y hacer valer todas las prestaciones que correspondan,
aunque no se indique en el mismo.
Celeridad: El principio de celeridad, que contempla la supresión de la figura de
la recusación, en los términos del artículo 708; lo relativo a las objeciones o
tachas, las cuales se pueden realizar en la misma audiencia conforme a los
términos del artículo 818; de igual forma se reducen los términos para formular
alegatos de acuerdo al artículo 884 Fracción IV de la ley.
Indisponibilidad: Otro de los principios que destacan por su importancia, es el
que se denomina como principio de indisponibilidad respecto de las normas de
orden público, ya que no está en la voluntad de las partes el decidir o pactar sobre
cuestiones que se consideran por la ley de orden público. No está en las
facultades de los particulares, que puedan por ejemplo, pactar en un contrato de
trabajo reglas de competencia distintas a las que se desprenden de la ley de la
materia, lo cual no sería factible en atención a este principio. A mayor
abundamiento, se transcribe el siguiente criterio jurisprudencial, que nos ilustra al
respecto:13
NORMAS PROCESALES DEL TRABAJO. SE RIGEN POR EL PRINCIPIO
DE INDISPONIBILIDAD. Las normas del Derecho Procesal del Trabajo, por ser de
orden público, siguen el principio de indisponibilidad y por lo mismo son
imperativas y no pueden ser substituidas, modificadas o variarse a voluntad de las
partes, puesto que el procedimiento a seguir en el arbitraje esta' previamente
establecido en la Ley, precisamente para garantizar la legalidad del mismo.

Obligatoriedad de las formas procesales: El principio de obligatoriedad de


las formas procesales, implica que en el proceso las actuaciones que lo integran,
se regulan en cuanto a su forma, (tanto para las partes como para los órganos
jurisdiccionales), y para los respectivos servidores públicos que deban ejecutar los
actos y las diligencias; el orden en que deban suceder en relación a las diversas
fases del juicio, así como el tiempo, modo y lugar en que tienen que realizarse, de
acuerdo a lo previsto en la ley. En este orden de ideas, debemos entender que el
proceso se divide jurídicamente en una serie de actos, momentos o periodos, en
los cuales se actualiza el ejercicio de la actividad de las partes y de los tribunales,
de tal manera de que, determinados actos (actos de tracto instantáneos) deben
corresponder a cierto periodo, fuera del cual no pueden ser realizados, y sii se
ejecutan, no tienen valor. Lo anterior implica que los actos procesales se deben
ejecutar en su tiempo y en los términos ordenados por su superior. Para que una
diligencia sea oportuna, esta se debe agotar en el momento, correspondiente, sin
que sea factible que la autoridad pretenda corregir en un momento posterior de
mutuo propio, sobre alguna diligencia previabmente realizada. (IUS 165934).
Seguridad jurídica (seguridad en el procedimiento): El principio de
Seguridad jurídica o seguridad en el procedimiento, contempla la cuestión de que
la Junta, sólo puede tomar en consideración lo actuado en el juicio laboral. Esto

13
Suprema Corte de Justicia. Amparo Directo 1729/85. Sindicato "Heriberto Jara" de Trabajadores
de la Industria de Aguas Gaseosas y sus Similares del D. F., 12 de junio de 1986. 5 votos.- Ponente:
Felipe López Contreras. Secretario: Rolando Rocha Gallegos. Informe 1986. Cuarta Sala, p. 36.
es, todo aquello que obra en el proceso, (actuaciones, participaciones de las
partes o de la autoridad), como un conjunto de actuaciones, en el orden que se
lleva a cabo el juicio, mismo que deberá tener una secuencia lógica y cronológica,
y acorde al desenvolvimiento de las diversas etapas y fases procesales.

Conciliación: El principio de conciliación, que se contempla en la nueva ley,


(reforma de 2012), ya estaba implícito en la anterior ley, más sin embargo, a partir
de diciembre de 2012, se le incluye en forma específica en el artículo 685 de la
LFT, el cual consiste en la posibilidad de las partes y de la autoridad de buscar la
solución pacífica del conflicto mediante una arreglo conciliatorio en cualquiera de
las diversas etapas del proceso, hasta antes de pronunciar el laudo.

DISPOSICIONES GENERALES DEL PROCESO DEL TRABAJO


El párrafo segundo del artículo 685 de la Ley Federal del Trabajo,
presentaba en su momento la innovación de dos importantes y controvertidas
hipótesis de intervención de las juntas laborales, al momento de recibir la
demanda y tener la posibilidad de acordar sobre el contenido la misma, surgen los
siguientes aspectos:
Artículo 685, segundo párrafo: “Cuando la demanda del trabajador sea
incompleta, en cuanto no comprenda todas las prestaciones que de acuerdo con
esta ley deriven de la acción intentada o procedente, conforme a los hechos
expuestos por el trabajador, la Junta, en el momento de admitir la demanda,
subsanara esta. Lo anterior sin perjuicio de que cuando la demanda sea obscura o
vaga se proceda en los términos previstos en el artículo 873 de esta Ley.”

Al subsanar la demanda incompleta, la junta de conciliación y arbitraje


actúa de oficio. Sin embargo la aclaración de la demanda obscura vaga o irregular
le corresponde al propio trabajador, el cual debe proporcionar la información
omisa.
De lo anterior se puede desprender que la autoridad laboral puede
subsanar las prestaciones omisas que se desprenden de los hechos, pero no se
prejuzga la decisión de la Junta, la cual dependerá de la comprobación de los
hechos expuestos en la demanda, por esa razón, la autoridad jurisdiccional
laboral, no se convierte en juez y parte.
Asimismo debemos estimar que la Junta, no debe sustituir sino suplir la
acción, de ahí que cuando el trabajador omita en su demanda ejercitar la acción
correspondiente a los hechos expuestos en la misma, la Junta deberá requerirle
para que aclare, de conformidad con el artículo 873 de la ley de la materia, en su
segundo párrafo, porque habría incurrido en una omisión notoria y corresponderá
al trabajador subsanar la acción. Además que el artículo 687 del mismo cuerpo de
leyes, exige a las partes que precisen los puntos petitorios y los fundamentos de
los mismos, para evitar oscuridad o imprecisión en la demanda.
Debemos entender por ello, que sin variar los hechos expuestos por el
trabajador, la Junta podrá adicionar las prestaciones derivadas de los mismos,
cuando el trabajador en su demanda no comprenda todas las prestaciones
derivadas de la acción ejercitada, conforme a los hechos expuestos, toda vez que
dichas prestaciones serían una consecuencia jurídica de tales hechos. Ejemplo:
cuando el trabajador demanda indemnización constitucional por despido
injustificado, aunque no reclame el pago de los salarios caídos, si prospera la
acción, debe condenarse al patrón a efectuar el pago de tales salarios.
En consecuencia, en el momento de admitir la demanda incompleta, la
junta, debe subsanarla, adicionando las prestaciones omitidas que se deriven de
los hechos expuestos, como salarios caídos, salarios vencidos, prima de
antigüedad, vacaciones no cubiertas y otras más que se puedan derivar.

CAPACIDAD Y PERSONALIDAD
La capacidad: En el ámbito procesal, la capacidad consiste en la facultad
para comparecer en juicio por sí mismo, en ejercicio de su propio derecho o en
representación de otro. La capacidad consiste en las cualidades personales
requeridas para actuar en juicio (salud mental, la edad, etc.) (***ver IUS 202693 y
224399)
La legitimación: Es una calidad específica para actuar en un juicio
determinado. Se puede legitimar en juicio las personas que se hallan en una
determinada relación con el objeto del litigio. La idea de la legitimación es distinta
de la de capacidad, esto es, no puede aludirse a la falta de capacidad como
equivalente a la falta de legitimación.
Podemos citar los siguientes ejemplos:
a) En un proceso civil, quien se ostenta como arrendador ejercita la acción
de desahucio. Si no tiene ese carácter o no lo demuestra por no haber celebrado
un contrato de arrendamiento, no estará legitimado activamente en este juicio.
b) En cambio en un proceso laboral, el padre de una persona de 17 años,
presenta una demanda en nombre de su hijo, ejercitando la acción de despido
injustificado. En tal caso no se le puede reconocer ese carácter atendiendo a las
reglas laborales de capacidad procesal, por lo que no estará legitimado
activamente en este juicio, ya que en los términos de la legislación laboral, un
trabajador menor de edad, tiene capacidad procesal para acudir a juicio. Los
menores trabajadores si tienen capacidad para comparecer a juicio laboral en los
términos de lo previsto por el artículo 691 de la ley de la materia.
En conclusión, la legitimación es la facultad en virtud de la cual una acción
o derecho puede y debe ser ejercitada por o en contra de una persona, en nombre
propio, a lo anterior también se le denomina legitimación Ad causam, es tema de
nuestro estudio también la que conocemos como legitimación en el proceso. (ver
IUS 248443 y 809000, 177798 si y 194760, 183461 y 184295).

La personalidad: Entraña la cualidad reconocida por el juzgador de actuar


eficazmente en un procedimiento, por sí o en representación de otra persona. Es
el requisito para ser parte en un proceso o intervenir en él como tercero.
Siempre se debe de acreditar el origen de la representación, así como la
amplitud de las facultades con que se ostentan. En el caso del trabajador, el poder
que éste otorgue, lleva implícita las facultades de un mandatario judicial, sin
necesidad de especificar los alcances las mismas. La representación voluntaria
surge en los términos del mandato, puede ser general, para pleitos y cobranzas,
actos de administración.
Las partes son las personas físicas o morales que intervienen en un juicio y
sobre los cuales recaen los resultados de la resolución. Nuestra ley señala que “…
son parte en el proceso del trabajo, las personas físicas o morales que acrediten
su interés jurídico en el proceso y ejercitan acciones u opongan excepciones...”.
Las personas físicas o morales que son susceptibles de adquirir derechos y
contraer obligaciones en el ámbito laboral.
Las partes pueden comparecer a juicios en forma directa o por conducto de
apoderado legalmente autorizado de acuerdo a lo previsto por el artículo 692 de la
ley vigente. El apoderado puede acreditar su carácter conforme a las siguientes
reglas: (ver reforma 2012)
1) Apoderado de persona física: En el supuesto de que el compareciente sea
apoderado de persona física, el carácter se acredita con poder notarial o carta
poder firmada por el otorgante ante dos testigos.
2) Representante legal de persona moral: Cuando el compareciente actúa
como representante legal de persona moral, la personalidad se acredita
mediante la exhibición del testimonio notarial respectivo.
3) Apoderado persona moral: Cuando el compareciente actúa como apoderado
legal de persona moral, la personalidad se acredita mediante la exhibición del
testimonio notarial respectivo, también podrá comparecer con carta poder
suscrita ante dos testigos, debiendo exhibir además el testimonio notarial del
cual se desprendan las facultades del mandatario que extiende la carta poder.
4) Representantes sindicales: acreditaran su personalidad con la certificación
que extienda la autoridad, respecto del registro de la mesa directiva del
sindicato, también se le conoce como toma de nota.

Las disposiciones aplicables son de orden público, por lo que la junta esta
obligada a examinar de oficio la personalidad de las partes o de sus
representantes, siempre que comparezcan a juicio.
Además que en los términos del artículo 693 de la ley, las juntas podrán
tener por acreditada la personalidad de los trabajadores o sindicatos sin sujetarse
a las reglas del artículo 692, siempre que de los documentos exhibidos lleguen al
convencimiento de que efectivamente se representa a la parte interesada. En esta
parte, el legislador se excede, porque en el artículo 692 de la LFT, nos impone una
serie de requisitos para cumplir con las formalidades de la personalidad, y por otra
parte en el artículo 693, reacciona de una manera ligera cuando le dice a la
autoridad podrá tener `por acreditada la personalidad, si de los documentos
exhibidos, le convencen que se cumple con los requisitos de la representación.
Artículo 693.- Las Juntas podrán tener por acreditada la personalidad de
los representantes de los trabajadores o sindicatos, sin sujetarse a las reglas del
artículo anterior, siempre que de los documentos exhibidos lleguen al
convencimiento de que efectivamente se representa a la parte interesada.

PODER POR COMPARECENCIA


Asimismo, las partes pueden otorgar poder mediante simple comparecencia
ante las autoridades laborales jurisdiccionales, debiéndose acreditar la
personalidad en el juicio correspondiente exhibiendo la copia certificada que
expida la autoridad de dicha comparecencia, en los términos de los previsto por el
artículo 694 de la Ley Federal del Trabajo.
Artículo 694.- Los trabajadores, los patrones y las organizaciones
sindicales, podrán otorgar poder mediante simple comparecencia, previa
identificación, ante las Juntas del lugar de su residencia, para que los representen
ante cualquier autoridad del trabajo; la personalidad se acreditará con la copia
certificada que se expida de la misma.

EFECTOS DEL PODER QUE OTORGA EL TRABAJADOR


El artículo 696 de dicha ley, faculta al apoderado del actor a demandar
todas las prestaciones principales y accesorios que correspondan, aunque no se
expresen en el poder.
Artículo 696.- El poder que otorgue el trabajador para ser representado en
juicio, se entenderá conferido para demandar todas las prestaciones principales y
accesorias que correspondan, aunque no se exprese en el mismo.

REPRESENTANTE COMUN
Por último, el artículo 697 de la ley laboral prevé la posibilidad de
designar un representante común, cuando dos o más personas ejerciten la
misma acción u opongan la misma excepción. El representante común
tendrá los derechos y obligaciones inherentes a un mandatario judicial en
los términos del artículo 697, tercer párrafo, de la ley.

Artículo 697.- Siempre que dos o más personas ejerciten la misma acción
u opongan la misma excepción en un mismo juicio deben litigar unidas y con una
representación común, salvo que los colitigantes tengan intereses opuestos.
hb
Si se trata de las partes actoras, el nombramiento de representante común
deberá hacerse en el escrito de demanda, o en la audiencia de conciliación,
demanda y excepciones y ofrecimiento y admisión de pruebas; si se trata de las
demandadas, el nombramiento se hará en el escrito de contestación o en la
audiencia a que se ha hecho mención. Si el nombramiento no lo hicieran los
interesados dentro de los términos señalados, la Junta de Conciliación y Arbitraje
lo hará escogiéndolo de entre los propios interesados.

El representante común tendrá los derechos, obligaciones y


responsabilidad inherentes a un mandatario judicial.
IMPEDIMENTOS Y EXCUSAS
La característica fundamental de todo juzgador es su absoluta
independencia respecto del litigio planteado por las partes. Si por alguna
circunstancia, tiene interés, ya sea en el negocio o bien en su relación con alguno
de los litigantes, debe abstenerse de conocer al respecto, toda vez que su
actuación perdería el requisito esencial y básico que supone la recta
administración de justicia.

LOS CASOS DE IMPEDIMENTOS EN LA LEY


La Ley federal del trabajo, establece en el artículo 707, que los Presidentes
de las Juntas, los representantes de los trabajadores ante las Juntas y los
representantes de los patrones, así como los Auxiliares de las Juntas, pueden
tener impedimento para actuar en los conflictos en que intervengan, cuando se
esté en presencia de los siguientes causales de impedimento, las cuales se
contienen en los siguientes términos:
Artículo 707.- Los representantes del Gobierno, de los trabajadores o de
los patrones ante las Juntas y los auxiliares, están impedidos para conocer de los
juicios en que intervengan, cuando:
I. Tengan parentesco por consanguinidad dentro del cuarto grado o de afinidad
dentro del segundo, con cualquiera de las partes;
II. Tengan el mismo parentesco, dentro del segundo grado, con el representante
legal, abogado o procurador de cualquiera de las partes;
III. Tengan interés personal directo o indirecto en el juicio;
IV. Alguno de los litigantes o abogados haya sido denunciante, querellante o acusador
del funcionario de que se trate, de su cónyuge o se haya constituido en parte en
causa criminal, seguida contra cualquiera de ellos; siempre que se haya ejercitado
la acción penal correspondiente;
V. Sea apoderado o defensor de alguna de las partes o perito o testigo, en el mismo
juicio, o haber emitido opinión sobre el mismo;
VI. Sea socio, arrendatario, trabajador o patrón o que dependa económicamente de
alguna de las partes o de sus representantes;
VII. Sea tutor o curador, o haber estado bajo la tutela o curatela de las partes o de sus
representantes; y
VIII. Sea deudor, acreedor, heredero o legatario de cualquiera de las partes o de sus
representantes.

Así mismo se establece en la ley, el carácter no recusable de los


funcionarios de la Junta, cuando nos indica en el artículo 708 LFT, lo siguiente:
Artículo 708.- Los representantes del Gobierno, de los trabajadores o de
los patrones ante las Juntas, y los auxiliares, no son recusables, pero deberán
excusarse de conocer de los juicios en que intervengan, cuando se encuentren
comprendidos en alguno de los supuestos a que se refiere el artículo anterior. De
no hacerlo incurrirán en la responsabilidad a que se refiere esta Ley.

LA EXCUSA
La exigencia de imparcialidad en el juzgador ha dado lugar al
establecimiento de ciertas reglas que, ante situaciones de presunto interés por
parte de quien debe resolver, determinan la necesidad de apartarlo del proceso.
El juzgador que se encuentra en incompatibilidad relativa, debe abstenerse del
conocimiento del negocio. A esta abstención se le denomina excusa.
La excusa constituye un acto del propio juzgador mediante el cual,
invocando razones de incompatibilidad, sin gestión de cualquiera de las partes, se
abstiene de seguir interviniendo, ya sea por decisión propia, que no sujeta a
calificación por parte de otra autoridad o bien mediante una solicitud dirigida al
órgano competente para que previa calificación de las razones, le autorice a dejar
de cumplir el deber primordial del juzgador de conocer y resolver la controversia.
No basta que el juez o algunos de los miembros de la junta sean
competentes por razón de la materia, territorio, grado o cuantía, sino que es
necesario que sea capaz de realizarlo bajo la absoluta independencia respecto del
conflicto y de los litigantes. La autoridad que resuelve debe ser un tercero extraño
a la controversia, pues sólo así tendrá libertad para formarse un juicio exacto e
imparcial del asunto que se somete a su conocimiento.
Es notorio que la amistad, el interés, los afectos, los vínculos familiares o
comerciales, impiden a cualquier ser humano ser imparcial y como la parcialidad
trae como consecuencia necesaria la injusticia y la arbitrariedad, no puede ni debe
admitirse que una persona parcial administre justicia. En consecuencia, los
sistemas jurídicos han creado los medios adecuados, tanto para dejar de conocer
de los negocios, como para el caso en que a pesar de su parcialidad, insistan en
juzgar.
La excusa es una figura mediante la cual el juez, algún miembro de la junta
o autoridad que conoce del asunto, se entera que no puede conocer de un
negocio determinado por tener en él interés, debe abstenerse de conocerlo,
exponiendo a los litigantes la causa que motiva su determinación.

LA RECUSACION (no en materia laboral)


La recusación ocurre cuando se conoce la existencia de una causa o
impedimento de excusa, que el juzgador no hace valer para inhibirse del
conocimiento de un negocio, por lo que los litigantes tienen la facultad de
recusarlo.
La reforma procesal de 1980, eliminó la recusación en materia laboral y la
nueva regulación quedó referida exclusivamente a impedimentos y excusas, toda
vez que los abusos de algunos litigantes en el uso de la figura de la recusación,
perjudicaron la estructura fundamental del derecho procesal del trabajo.
Lo que nos llama la atención de dicha reforma es que el artículo 710 de la
ley, prevé la posibilidad de realizar una denuncia de impedimento, lo que
prácticamente constituye la misma figura jurídica de la recusación. Lo que se
advierte es que, por un lado, se hace nugatorio el derecho a la recusación y por el
otro, se establece una figura jurídica equivalente. Cabe señalar que en la práctica,
no es muy común, tramitar en vía incidental esta denuncia de impedimento a que
se refiere el artículo en cita. En la reforma laboral de 2012, no existe ningún
cambio a esta cuestión.

IDOINEDAD DEL JUZGADOR / COMPETENCIA SUBJETIVA


Tomando en consideración este anhelo natural en el hombre de buscar y
obtener justicia, es indispensable que los órganos del estado encargados de
impartir justicia ofrezcan a los ciudadanos la garantía de que, en efecto, resolverán
los pleitos que se sometan a su conocimiento, con imparcialidad, por encima de
toda suspicacia o prejuicio, con base en la sustancia de lo que ante ellos se
exponga y acredite. Estos órganos de justicia deben estar por encima de toda
sospecha.
La persona que tiene la responsabilidad de resolver un conflicto debe ser un
sujeto neutral, ajeno pero no indiferente a las partes, porque ello equivaldría a
deshumanizarlo, hacerlo insensible, lo cual no es lo mejor para quien resuelve, por
lo que se debe entender que el derecho es producto del hombre y sus resultados
están destinados para el hombre.
Puestos en el trance de elegir entre una buena legislación o un buen juez,
sería lo discreto preferir lo segundo. El buen juez suple todas las deficiencias
legales; mientras que una legislación perfecta en manos de funcionarios sin
escrúpulos o de formación moral e intelectual deficiente, perdería toda su eficacia.
Tener como función la dicción del derecho, es una gran responsabilidad, es
un elevado encargo, de trascendental relevancia. Las personas físicas que se les
honre con el privilegio de detentar en sus manos la vara de la justicia, se les
deben exigir ciertas cualidades, procurando que solo sea ocupado por buenos
profesionistas, ya que este es un espacio a los mejores elementos humanos.
Toda persona que tenga el honor de administrar justicia, ha de esmerarse
en capacitarse constantemente, para estar a tono con el cargo y con la investidura
que se le ha confiado. Debe sobre todo ser un hombre dotado de serenidad y no
de apasionamiento.

ACTUACIONES DE LAS JUNTAS


En este capítulo se analizan las normas relativas que rigen la actuación de
la autoridad en el desarrollo del proceso, y sobre todo la importancia de que la
actuación de la autoridad se realice en tiempo y forma de acuerdo a las
disposiciones legales de nuestra ley.

IGNORAR EL NOMBRE DEL PATRON


La ley establece en el artículo 712, la posibilidad de que el trabajador
desconozca la calidad jurídica de su empleador, ya que nos indica que:
“…cuando el trabajador ignore el nombre del patrón o la
denominación o razón social de donde labora o laboró, deberá
precisar cuando menos en su escrito inicial de demanda el domicilio
de la empresa, establecimiento, oficina o lugar donde prestó o presta
el trabajo, y la actividad a que se dedica el patrón…”,
En estos términos advertimos que el punto de partida de este supuesto, se
genera en el momento mismo en que el trabajador ignora el nombre de la entidad
patronal, y por ello es factible considerar bajo este supuesto asociado a lo previsto
por el artículo 740 de la LFT, la posibilidad de presentar una demanda en contra
de:
“…Quien resulte responsable de la fuente de empleo ubicada
en el domicilio…”

Esto es una demanda presentada ante la autoridad, aparentemente contra


quien sea, esto es contra quien resulte responsable de dicha empresa, sin precisar
a quien.
Lo anterior puede resultar ilógico desde cierto punto de vista jurídico, más
sin embargo, si es común que un trabajador desconozca el carácter o el nombre
con el cual se desempeña su patrón, por ello un trabajador puede demandar a
quien resulte responsable de la fuente de empleo, y la autoridad le da curso a la
demanda. La pregunta seria, ¿se puede emplazar a quien resulte responsable?, o
bien el actor puede demandar bajo estos términos pero el Actuario de la Junta al
tratar de emplazar a juicio se debe cerciorar que la persona que va a emplazar sea
una persona cierta y determinada.

EFECTOS DE LA PRESENTACIÓN DE LA DEMANDA


La sola presentación de la demanda interrumpe la prescripción respecto de
quien resulte ser el patrón del trabajador. Es importante considerar que cuando se
habla de la posibilidad de demandar a quien resulte responsable, se debe de
tomar en cuenta que este es un privilegio para el trabajador, más sin embargo
para la Junta constituye una carga, ya que corresponde a la autoridad determinar
fehacientemente “…quien resulta responsable…”, misma que debe ser una
persona física o moral determinada o determinable, y corresponde al funcionario
actuario de la Junta cerciorarse fehacientemente de ello.

EL DEBER DE COMPARECENCIA
Un aspecto importante, que tiene que ver con uno de los principios
procesales del derecho del trabajo, es el de inmediatez, consiste en la obligación
que tienen las partes de comparecer a juicio, en los términos de lo previsto por el
artículo 713 de la LFT, en el cual se establece que:
“…en las audiencias que se celebren se requerirá de la
presencia física de las partes o de sus representantes o
apoderados… ”

Esto es, por ley se establece la necesidad de que las partes comparezcan
en forma personal al conflicto, por lo menos esa es la intención del legislador, en
el sentido de que las partes (normalmente patrón y trabajador) concurran “…
personalmente a juicio…”, con el ánimo de solucionar el conflicto. Claro es, que
también lo pueden hacer por conducto de sus apoderados o representantes, pero
el espíritu de la norma pretende que las partes comparezcan en forma personal.
No se trata de desnaturalizar la figura del mandato, ya que como se insiste, si se
puede comparecer por conducto de apoderado, pero el espíritu de la norma, es en
el sentido de que las partes comparezcan personalmente, sin que ello implique
que no lo puedan hacer por conducto de apoderado legal.

TIEMPO, SUSPENSION, PUBLICIDAD Y FORMA DE LAS ACTUACIONES


La Ley Federal del Trabajo, establece en el artículo 714, el tiempo en que
deben celebrarse las actuaciones de las juntas, mencionando que dichas
actuaciones deberán:
“…practicarse en días y horas hábiles…”
En efecto, las actuaciones deben de practicarse en días y horas hábiles,
bajo pena de nulidad, lo anterior siempre y cuando que la ley no disponga otra
cosa, y en el artículo 715 de dicha ley, se regula cuáles son los días y horas
hábiles para los efectos procesales, y se menciona que son “…días hábiles todos
los días del año…”, para tales efectos, me permito citar los siguientes artículos de
nuestra ley que regulan esta cuestión:

Artículo 714 LFT.- Las actuaciones de las juntas deben de practicarse


en días y horas hábiles, bajo pena de nulidad, siempre que esta ley no
disponga otra cosa.
Artículo 715 LFT.- Son días hábiles todos los del año con excepción de
los sábados y domingos, los de descanso obligatorio, los festivos que señale
el calendario oficial y aquellos en que la junta suspenda sus labores.

Artículo 716 LFT.- Son días horas hábiles las comprendidas entre
las siete y las diecinueve horas, salvo el procedimiento de huelga, en el que
todos los días y horas son hábiles.”

Se menciona en la ley, lo relativo a las horas hábiles, en que deben de


realizarse las actuaciones de las Juntas, mencionando que dichas actuaciones
deberán practicarse “…entre las siete y las diecinueve horas…”.
Así mismo como se establece en el artículo 716, en materia de huelga, en
la cual, “… todos los días y todas las horas son hábiles...”, esto es, para los
efectos de un conflicto de huelga, no existen días y horas inhábiles, por
disposición de la ley, de tal manera, que la autoridad laboral, puede desarrollar
una audiencia en cualquier hora, sin necesidad de habilitar días o horas, por la
razón legal expuesta.
Ahora bien, como ya mencionamos en el artículo 715 de la Ley Federal del
Trabajo, se regula cuáles son los días y horas hábiles para los efectos procesales,
ya que en el dispositivo legal en comento, se establece que son “…días hábiles
todos los días del año…”, pero se debe de entender cuáles son las excepciones
que se señalan respecto de los días inhábiles, o como menciona la ley “… con
excepción de…”, por lo que en la siguiente gráfica establecemos, cuales son los
días en los cuales de acuerdo a la ley no puede haber actuaciones de la autoridad,
tal y como se aprecia en los siguientes términos:

Artículo 715 LFT.- Días hábiles en proceso laboral: todos los del año = 365 días
Con excepción de los siguientes días inhábiles en el año:
Los sábados y los Los de descanso Los días festivos Aquellos días en
domingos obligatorio de acuerdo al que la Junta
calendario oficial suspenda labores

Mencionados en el art. Anualmente se Con motivo de


En el año 74 de la LFT: establece cuáles son eventos de la
aproximadamente hay los días inhábiles para naturaleza o de fuerza
52 sábados y 52 1.- 1 de enero. las autoridades: mayor, puede darse el
domingos = 104 días 2.- primer lunes de Por ejemplo: caso de que la
inhábiles febrero (5 febrero) Los periodos autoridad, decrete
3.- tercer lunes de vacacionales: días inhábiles.
marzo (21 marzo) * Verano = 15 días (inundaciones,
4.- 1 mayo hábiles sismos, tsunami,
5.- 16 septiembre * Invierno = 15 días swine flu HN1HN)
6.- tercer lunes hábiles.
noviembre (20 El día del Estatuto
noviembre) Jurídico, semana
7.- 1 de diciembre santa?, etc.
cada seis años.
8.- 25 diciembre
9.- el día de la jornada
electoral

Son 9 días Otros días


inhábiles Son 35 días
hábiles promedio, inhábiles no
promedio, algunos establecidos
Son 104 días pueden coincidir se convierten en
inhábiles promedio con sábados o inhábiles
domingos.

104 días + 9 días + 35 días + otros días = 148 días inhábiles promedio.

Total días inhábiles promedio al año, entre 140 a 150 días.

365 días – 150 días inhábiles = 215 días hábiles en realidad. (58.90%)

En materia de huelga, todos los 365 días y sus horas son hábiles. (100%)

También existe la posibilidad de que los Presidentes de las Juntas y los


Auxiliares, puedan habilitar días y horas inhábiles cuando exista causa justificada
para ello, pero deberán establecer claramente en que consiste la justificación y
cuál es la diligencia que se autoriza se realice en horas o días inhábiles,
posteriormente habilitadas.

SUSPENSION DE LAS ACTUACIONES


La Ley Federal del Trabajo establece en el artículo 718, el supuesto de que
se prolongue una audiencia que inicio en hora hábil, más allá de las horas hábiles,
este es, que se prolongue después de las diecinueve horas, estableciendo que la
misma podrá continuarse hasta su terminación, sin suspenderla y sin necesidad
de habilitación expresa. Pero también establece el supuesto de que en caso de
que se suspenda deberá continuarse al día siguiente hábil, lo cual provoca serios
problemas para la autoridad que celebra la audiencia toda vez que normalmente al
mdía siguiente hábil existen otras audiencias programadas, por lo que se dificulta
dar cumplimiento a este dispositivo en estos términos, salvo que la interpretación
del artículo que se comenta, pudiera darse entendiendo que se refiere al “día
siguiente hábil disponible”, para evitar que las audiencias se empalmen.
Por otra parte, en el artículo 719 de la ley, establece, cuál debe ser la
actuación de la Junta, cuando en la fecha señalada no se realizara una diligencia,
ya que menciona lo siguiente:

Artículo 719 LFT.- Cuando en la fecha señalada no se llevare a cabo la


práctica de alguna diligencia, la Junta hará constar en autos la razón por la cual no se
practicó y señalará en el mismo acuerdo, el día y hora para que tenga lugar la misma.

Por ejemplo, si con motivo de una epidemia nacional como el “swine flu”
(fiebre porcina), se pronuncia un decreto en el cual se establece a la población la
indicación de no salir de sus hogares, y a las autoridades la suspensión de todo
tipo de actividad, en ese supuesto, las posibles audiencias programadas por la
Junta laboral, se tendrán que suspender, y la autoridad en su momento razonará
un acuerdo en el que establecerá cual fue el motivo de la suspensión y deberá
señalar nueva fecha para la celebración de las audiencias que con ese motivo se
hubieren suspendido o no celebrado. La propia Junta, deberá pugnar por la
continuidad del procedimiento, ya que se debe regir por el principio que dispone
que “…el impulso procesal corre a cargo de la autoridad…”.

PUBLICIDAD DE LAS ACTUACIONES


Ya hemos mencionado cuando señalamos cuales son los principios
procesales, y establecíamos que está contenido principalmente en el artículo 720
de la Ley Federal del Trabajo, mismo que hace referencia a que las audiencias
serán públicas, salvo que la Junta ordene de oficio o a instancia de parte que sean
a puerta cerrada, ya sea cuando lo exija el mejor despacho de los negocios, la
moral o las buenas costumbres. Como se insiste, se trata de un derecho que
tienen las partes de presenciar todas las audiencias o diligencias, excepto
aquellas expresamente establecidas por la ley.
La publicidad, es una garantía de que el negocio será resuelto de forma
limpia y honesta, con la mayor equidad y legalidad posible.

FORMA DE LAS ACTUACIONES


Las actuaciones procesales deben constar en actas, de una manera indubitable,
esto es por escrito, por ello el artículo 721 de la ley de la materia establece los
siguientes requisitos:
a) Todas las actuaciones serán autorizadas por el Secretario.
b) Lo actuado en las audiencias, se hará constar en actas.
c) Las actas deberán ser firmadas por las personas que intervengan, que
quieran y sepan hacerlo.
d) De las actas de las audiencias se entregara copia autógrafa a cada una de
las partes comparecientes.
Ahora bien, llama la atención que si bien es cierto, en los juicios laborales
impera la oralidad, debemos mencionar que esta es precisamente para las partes,
ya que la autoridad tiene la obligación de consignar en actas todas las
actuaciones, salvo en la etapa de conciliación en la cual ya mencionamos, solo se
hace constar en el acta el resultado de la conciliación, más no se captura en el
acta lo manifestado por las partes en las pláticas conciliatorias.
También es importante señalar que sucede cuando alguna de las partes
que interviene en la audiencia o diligencia correspondiente, se niega a firmar el
acta, en este supuesto el funcionario correspondiente hará constar el hecho, esto
es que estuvo presente y que se negó a firmar o bien, también se puede hacer
constar que se ausentó del recinto de la Junta pero que estuvo presente.

DECLARACIONES ANTE LAS JUNTAS


Las partes cuando comparecen a juicio deberán rendir sus declaraciones
bajo protesta de decir verdad y bajo el apercibimiento de las penas en que
incurren si declaran con falsedad ante la autoridad. Cabe mencionar, que es
necesario hacer los apercibimientos correspondientes y que consten en autos.
En el caso de los abogados (peritos en derecho) sus declaraciones no
requieren apercibimiento, ya que en su carácter de profesionales del derecho no
requieren de apercibimiento alguno, ya que son sabedores de las consecuencias
que trae aparejada el rendir una declaración falsa ante autoridad, lo anterior en los
términos de lo previsto por el artículo 722 de la Ley Federal del Trabajo.

MANEJO Y EXPEDICION DE COPIAS


El artículo 723 de la Ley Federal del Trabajo, menciona las facultades que
tiene la autoridad para expedir copias certificadas de cualquier expediente o
constancia que obre en el expediente, también se pueden certificar copias del
cualquier documento que exhiban las partes, previo cotejo con el original que obre
en autos.
¿Qué sucede cuando una de las partes es emplazada o es objeto de un
embargo de bienes por el C. Actuario, dentro de un juicio que se llevó en su
rebeldía del demandado, y dicha parte acude a las instalaciones de la autoridad,
porque requiere revisar el expediente?:
Normalmente, al llegar a la Junta, se le pide al interesado, que acredite su
carácter fehacientemente, y la pregunta es ¿Por qué?, si la propia autoridad es
quien me está llamando a juicio y/o embargando bienes, y (si así fuera, porque se
requiere acreditar el carácter para ver el expediente, pero la autoridad no lo
requiere para realizar el embargo con la misma persona), o sea, ¡ me llaman a
juicio y cuando acudo ante la Junta, no me dejan ver el expediente!, hasta en tanto
no acredite mi personalidad, lo que resulta absurdo, porque es contrario al objeto
del propio juicio, cuando lo más lógico sería, que si soy parte en el juicio, debo de
tener acceso al mismo, sin necesidad de comparecer por escrito, que ello sería
otro supuesto digno de analizarse por separado.

ARCHIVO DE EXPEDIENTES
La ley menciona en el artículo 724 de la Ley Federal del Trabajo, que los
expedientes concluidos de manera definitiva sean dados de baja, previa
certificación de la microfilmación o de su conservación por otro medio o
procedimiento técnico científico que permita su consulta. (En los años noventa
(1990), había un programa televisivo en México que se llamaba “…Se vale
soñar…”, transmitido por Televisa). Lo cierto es que la tecnología (vía
microfilmación o cualquier otro medio tecnológico de archivo), después de más de
40 años de vigencia de la nueva ley, no ha llegado a la mayoría de los tribunales
laborales del país, ya que normalmente se archiva físicamente los expedientes,
independientemente de los métodos aplicados correspondientes. 724

MANEJO, REPOSICION Y ARCHIVO DE EXPEDIENTES


Por otra parte, la ley menciona en el artículo 725 de la Ley Federal del
Trabajo, que en caso de extravío o desaparición de un expediente, la Junta de
oficio o a petición de parte podrá ordenar la “reposición de autos”, en forma
incidental. Esto es cuando un expediente se pierde o está fuera de control, la
autoridad con la participación de las partes puede ordenar reponer el expediente
exhortando a los sujetos procesales que aporten todos los elementos, constancias
y copias que obren en su poder, para reponer los autos. (Igualmente a mediados
de los años noventa, había un programa televisivo en México que se llamaba “…
Que crees…”, transmitido por TV Azteca). No es común que se pierdan los
expedientes, pero la norma procesal establece el camino correspondiente para
tratar de reponer alguno cuando ello suceda.
En los términos de lo anterior la Junta, cuando lo estime conveniente, podrá
hacer la denuncia correspondiente al ministerio público, de la desaparición del
expediente o de la actuación de referencia. 725
También se debe mencionar que cuando se pierde un expediente, alguna
de las partes, puede salir beneficiada con dicho extravió (en la etapa de
ejecución), y por ello su participación en el procedimiento de reposición de autos,
pudiera ser mínima, o bien prácticamente nula.
CORRECCIONES DISCIPLINARIAS
Para mantener el buen orden en el desarrollo de las audiencias, en las
diligencias o bien para exigir que se les guarde respeto y la consideración debidas,
los Presidentes de las Juntas y los Auxiliares del Presidente podrán imponer
correcciones disciplinarias.
Las correcciones disciplinarias que se pueden imponer son, amonestación,
multa y expulsión del local de la junta. Lo anterior en los términos de lo previsto
por los artículos 728, 729 y 730 de la Ley Federal del Trabajo.

Si los hechos que dieron lugar a decretar la imposición de una corrección


disciplinaria, pueda constituir la comisión de un delito, la Junta correspondiente
tendrá la obligación de levantar un acta circunstanciada relativa a los hechos y la
deberá turnar al ministerio público, para los efectos legales conducentes.

a) Amonestación (verbal y por escrito)


CORRECCIONES b) Multa
DISCIPLINARIAS c) Expulsión del local de la
Junta

MEDIOS DE APREMIO
Ahora bien, para asegurar el cumplimiento de sus resoluciones o bien para
que las personas acudan a las audiencias en las que su presencia sea
indispensable, los Presidentes de las Juntas y los Auxiliares del Presidente podrán
imponer conjunta e indistintamente cualquiera de los medios de apremio
establecidos en la ley de la materia.
Los medios de apremio que se pueden imponer de acuerdo a la ley son,
multa, presentación de la persona con el auxilio de la fuerza pública y el arresto
que puede ser decretado hasta por treinta y seis horas.
Lo anterior con fundamento en lo establecido por el artículo 731 de la Ley
Federal del Trabajo.

a) Multa
b) Presentación con el auxilio
MEDIOS DE APREMIO de la fuerza pública
c) Arresto hasta 36 horas

Al decretar una corrección disciplinaria o bien un medio de apremio, se


deberá fundar y motivar, además estas se imponen de plano sin necesidad de
substanciación procedimental alguna. Pero sí alguno de las partes o sujetos
procesales no está de acuerdo, con las correcciones disciplinarias o con los
medios de apremio, estos podrán ser impugnados en los términos del artículo 732
LFT. En los términos del artículo 853 de la Ley Federal del Trabajo, procede la
Reclamación, contra las medidas decretadas en los medios de apremio. Para las
correcciones disciplinarias, se utiliza el mismo remedio impugnatorio, más sin
embargo, la ley no establece recurso alguno específicamente.

LOS TERMINOS PROCESALES

Se entiende por término procesal, al espacio de tiempo dentro del cual se


deben realizar determinados actos procesales establecidos en la ley o por las
partes, para que estos tengan validez.

CLASIFICACION DE LOS TERMINOS


De acuerdo a la doctrina, los términos se clasifican en, legales,
convencionales, individuales, comunes, prorrogables, improrrogables y fatales o
perentorios, tal y como lo describe el Maestro Santiago Kelley en su obra ya
citada.
En efecto, los términos a los cuales se refiere el Maestro Kelley, pueden
mencionarse y explicarse en la gráfica, de la manera siguiente:

Términos procesales

Términos legales y Términos individuales y Términos prorrogables y Términos fatales o


Términos convencionales Términos comunes Términos improrrogables Términos perentorios

Términos legales: Son los Términos individuales: Términos prorrogables: Términos fatales o

que reglamenta la propia Son los que se establecen a Son aquellos cuya duración perentorios: Son aquellos

ley. Como el término para una persona o parte. Como puede ser aumentadas por que no se pueden

contestar una demanda o el término al demandado la autoridad. No en materia suspender. Son

para interponer un amparo. para dar contestación a la laboral. considerados como


demanda. sinónimos de los
improrrogables.
Términos convencionales:
Son los que establecen las Términos comunes: Son Términos improrrogables:

partes dentro de un los que corren Son aquellos cuya duración

proceso. Por ejemplo el simultáneamente para las no puede ser aumentadas

término para cumplir un partes dentro de un por la autoridad.

convenio. proceso. Por ejemplo el


término para formular
alegatos.

Términos Procesales

Son los que reglamenta la propia ley. Como el


término para contestar una demanda o para
Términos Legales
interponer un amparo.

Términos Convencionales Son los que establecen las partes dentro de un proceso.
Por ejemplo el término para cumplir un convenio
Son los que se establecen a una persona o
parte. Como el término al demandado para dar
Términos Individuales contestación a la demanda.

Términos Comunes Son los que corren simultáneamente para las partes dentro
de un proceso. Por ejemplo el término para formular
alegatos.

Términos individuales Son los que se establecen a una persona o


parte. Como el término al demandado para dar
contestación a la demanda.
Términos Comunes Son los que corren simultáneamente para las partes dentro
de un proceso. Por ejemplo el término para formular
alegatos.
Términos Prorrogables Son aquellos cuya duración puede ser
aumentada por el juez. No en materia laboral.
Términos Improrrogables Son aquellos cuya duración no puede ser
aumentada por la autoridad.
Términos Fatales o Perentorios Son aquellos que no se pueden suspender. Son
considerados como sinónimos de los
improrrogables.
Términos Ampliados Por razón de la distancia, se puede ampliar el
término.
Términos Genéricos Es de tres días, para realizar un acto procesal,
o el ejercicio de un derecho, que no tenga fijado
un término en la ley.

Cabe mencionar, que en materia laboral, también existe un término diverso,


al que en lo particular se le denomina, “…término ampliado…”, mismo que se
establece por la autoridad laboral por razón de la distancia de acuerdo a lo
previsto por el artículo 737 de la ley de la materia, ya que menciona lo siguiente:

Artículo 737 LFT.- Cuando el domicilio de la persona demandada se


encuentre fuera del lugar de residencia de la Junta, ésta podrá ampliar el término
de que se trate, en función de la distancia a razón de un día por cada 200
kilómetros, de 3 a 12 días, tomando en cuenta los medios de comunicación
existentes.

De acuerdo al artículo de referencia, la autoridad podrá ampliar el término


correspondiente en atención a la distancia y de acuerdo a la fórmula que en la
misma ley se menciona, la cual a simple vista provoca confusión, pero para los
tribunales, la han utilizado de una manera práctica, misma que no provoca
mayores problemas.
TERMINOS GENERICOS
También existe un término genérico mencionado en la ley de tres días para
realizar algún acto procesal, mismo que se establece por el artículo 735 de la
LFT, ya que en la misma, se menciona lo siguiente:

Artículo 735 LFT.- Cuando la realización o práctica de algún acto procesal


o el ejercicio de un derecho, no tenga fijado un término, este será el de tres días
hábiles.

Esto es, cualquier acto procesal que no tenga establecido en la ley un


término, deberá estarse al establecido por este dispositivo legal, mismo al cual se
le denomina, “…término genérico…”.

COMPUTO DE LOS TÉRMINOS


La ley menciona que los términos comenzaran a correr el día siguiente al
día en que surta efecto la notificación, mismo que se establece por el artículo 733
de la ley de la materia, ya que menciona lo siguiente:

Artículo 733 LFT.- Los términos comenzaran a correr el día siguiente al en


que surta efecto la notificación y se contará en ellos el día del vencimiento.

Por otra parte el artículo 747 de la ley, establece cuando surten efectos las
notificaciones, el cual nos indica:
Artículo 747 LFT.- Las notificaciones surtirán sus efectos de la manera
siguiente:
I.- Las personales: el día y hora en que se practiquen, contándose de
momento a momento, cualquiera que sea la hora en que se haya hecho la
notificación, salvo disposición en contrario de la ley; y
II.- Las demás: al día siguiente al de su publicación en el Boletín o en los
estrados de la Junta.
De lo anterior se infieren varias cuestiones, las cuales se mencionan a
continuación:
1.- Existen dos tipos de notificaciones:

a) Las personales; y

b) Las demás.
2.- Las notificaciones personales, surten efecto el mismo día en que se
realiza. Tienen que realizarse en los términos que se mencionan en la propia ley,
en el artículo 743.

Cabe mencionar que las notificaciones personales, están señaladas y


enunciadas en el artículo 742 de la Ley Federal del Trabajo.

3.- Las notificaciones que se denominan “…las demás…”, surten sus


efectos al día siguiente hábil al cual se realiza la notificación correspondiente.

Por último checar los temas en la Ley Federal del Trabajo los artículos de
NOTIFICACIONES

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