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Situaciones clínicas

Convulsiones febriles
M. D. Márquez Moreno
Pediatra. CS Buenavista. Toledo. España.

PUNTOS CLAVE CASO CLÍNICO

 Las
 crisis febriles (CF) son el trastorno convulsivo Lactante de 18 meses de edad que es llevada a la con-
más frecuente de la infancia. Aparecen en lactan- sulta por sus padres, tras haber presentado en su domici-
tes y niños de 6 a 60 meses de edad, con un pico de lio un episodio de convulsión generalizada, con desco-
incidencia a los 18 meses. nexión del medio de dos minutos de duración, y
 Las CF simples son generalizadas, duran menos de recuperación posterior de la conciencia. Llevaba 12 horas
15 minutos y no se repiten dentro de las primeras con fiebre (temperatura axilar 38 °C), tos y congestión na-
24 horas desde el inicio de la fiebre. Son las más sal. En los antecedentes personales destacan infecciones
frecuentes (80%). frecuentes de vías respiratorias altas. La gestación y el par-
 Las CF complejas son crisis parciales, de más de 15 to fueron normales, con peso de 3300 g, longitud de 50 cm
minutos de duración, o múltiples, que se repiten y test de Apgar 9/10, con un desarrollo psicomotor nor-
más de una vez, dentro de las primeras 24 horas. mal, sin alteraciones neurológicas. El padre refiere convul-
Constituyen el 20%. siones febriles en la infancia y hay antecedentes familiares
 Presentan muy buen pronóstico, con bajo riesgo de epilepsia en un hermano del progenitor. En la explora-
asociado de epilepsia posterior y, a excepción de ción física presenta foco otorrinolaringológico. Los padres
una alta tasa de recurrencias, no suelen dejar se- se muestran muy angustiados y preguntan si su hija ha
cuelas. tenido una crisis epiléptica y cuál es su tratamiento. Están
 No se recomienda realizar de forma rutinaria en un muy inquietos, porque no saben si se va a volver a repetir
niño sano, con una primera CF simple, punción cada vez que tenga fiebre y si corre peligro, incluso sugie-
lumbar, analítica de sangre, electroencefalograma ren su derivación, para realizar análisis de sangre y otras
o pruebas de neuroimagen. pruebas (electroencefalograma [EEG], tomografía compu-
 Las benzodiazepinas constituyen el tratamiento de tarizada [TC]).
elección en la fase aguda, para yugular la crisis. La
más empleada es el diazepam en solución rectal o
endovenoso. DEFINICIÓN. CONVULSIONES FEBRILES
 No hay evidencia de que el tratamiento profiláctico
continuo o intermitente con anticonvulsivos dis- La definición que se ha utilizado con mayor frecuencia
minuya el riesgo de epilepsia posterior. es la adoptada en 1980 por la Conferencia de Consenso,
 Los antipiréticos, aunque alivian el malestar aso- avalada por los National Institutes of Health1 (INH), a la
ciado con la fiebre, no son eficaces en la prevención que más tarde se unió la de la Commission on
de las convulsiones febriles recurrentes. Epydemiology and Prognosis, de la International League
 No hay evidencia de que causen daño cerebral, dis- Against Epilepsy2 (ILAE), que fue publicada en la revista
minución del coeficiente intelectual, del rendi- Epilepsia en 1993. Aunque ambas definiciones coinciden
miento académico ni del aprendizaje y no conlle- básicamente en el concepto, la diferencia fundamental
van riesgo aumentado de fallecimiento. se establece al considerar la edad de inicio: de tres meses

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(INH) y por encima de un mes (ILAE), respectivamente. do), y/o prolongadas de más de 15 minutos, y/o múlti-
Ha sido, sin embargo, la primera la más ampliamente ples, que se repiten más de una vez dentro de las primeras
aceptada en la literatura científica en general. 24 horas o se suceden en el mismo proceso febril. Van
En 1989, la ILAE en su Propuesta de Clasificación seguidas de una recuperación lenta del sensorio o de
Internacional de Crisis Epilépticas3 (CE), incorporó las cri- anomalías neurológicas postictales, (la más frecuente la
sis febriles (CF) en el grupo de las CE no clasificadas y en parálisis de Todd). Representan el 20% y se asocian con
el año 2001 el Grupo de Trabajo ad hoc, propuso una cla- un mayor riesgo de epilepsia6 (nivel de evidencia I). En la
sificación de síndromes epilépticos que las incluía, esta Tabla 1 se sintetizan las características de ambas.
vez en los “Procesos con CE que no requieren un diagnós-
tico de epilepsia”4.
Atendiendo a las referencias, una convulsión o CF es una EPIDEMIOLOGÍA
CE asociada con fiebre (temperatura de al menos 38 °C),
que se presenta en lactantes y niños entre los tres meses y Constituyen el trastorno convulsivo más frecuente de
los cinco años de edad, pero sin evidencia de una infección la infancia. Su incidencia se estima de un 2 a un 5% de
intracraneal u otra causa definida. Se excluyen de la defini- todos los niños menores de cinco años. Son muy raras
ción las CE con fiebre, en niños que han sufrido una CE afe- después de esta edad y antes de los seis meses. La edad
bril previa y los procesos en los que la fiebre y las convulsio- media de inicio es de 18 meses y en la mitad de los casos
nes pueden aparecer juntas, como los desequilibrios aparecen entre los 12 y los 30 meses7.
electrolíticos y las infecciones del sistema nervioso central Suelen presentarse durante el primer día de la fiebre y
(SNC). en su mayoría son generalizadas, tónico-clónicas y de
Con posterioridad, la Academia Americana de Pediatría corta duración (de uno o dos minutos, a veces tan solo de
(AAP) viene refiriéndose en sus publicaciones al grupo de unos segundos), pero en el 9% de los niños pueden pro-
lactantes y niños en el rango comprendido entre los 6 y longarse por encima de los 15 minutos8 y no hay eviden-
los 60 meses de edad. cia de que sean más frecuentes coincidiendo con el máxi-
En 1976, Nelson y Ellenberg, con datos del National mo ascenso de la temperatura9. Hasta un 5% puede
Collaborative Perinatal Project, las subdividieron en sim- evolucionar hacia el estatus febril (crisis de más de 30
ples y complejas5. minutos de duración o secuencia de crisis cortas, sin re-
Las CF simples o típicas se definen como crisis genera- cuperación de la conciencia entre ellas). La exclusión de
lizadas primarias, breves, de menos de 15 minutos de una infección del SNC es fundamental, especialmente en
duración, que no se repiten dentro de las primeras 24 estos niños.
horas desde su inicio, en un niño con fiebre que no pre- La causa es desconocida, pero múltiples revisiones se-
senta infección intracraneal, trastorno metabólico o his- ñalan un origen multifactorial, con interacción de facto-
toria de crisis afebriles. Cursan con recuperación comple- res genéticos y ambientales. Su incidencia es mayor en
ta del nivel de conciencia y no dejan secuelas neurológicas los padres y hermanos de los niños que presentan CF, que
(nivel de evidencia I). Son las más frecuentes (80%). en la población general. Hasta el 24% de los afectados
Las convulsiones febriles complejas o atípicas, son cri- tiene una historia familiar de crisis febriles, y el 4%, ante-
sis parciales o focales (con un inicio unilateral, lateraliza- cedentes familiares de epilepsia7. Diversos loci cromosó-

Tabla 1. Convulsiones febriles


Convulsión febril simple Convulsión febril compleja*
Generalizadas (tónico-clónicas) Inicio focal, unilaterales
Breves: <15 minutos Prolongadas: >15 minutos
No recurre en las primeras 24 horas Recurren en <24 horas
No patología neurológica previa Puede haber patología neurológica previa
No anomalías neurológicas postictales Asocian anomalías neurológicas postictales: parálisis de Todd
* Ha de cumplir al menos uno de los criterios.

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micos han sido identificados en la compleja herencia de nos metabólicos, alteraciones hidroelectrolíticas, trau-
las CF y, al analizar a los familiares, se pone de manifiesto matismos previos (traumatismo craneoencefálico, he-
un componente genético que sigue una herencia autosó- morragias) o malformaciones. Se completará con una
mica dominante, con un patrón de penetrancia incom- exploración general y neurológica detallada.
pleta y más raramente poligénica10.

¿SON NECESARIOS ESTUDIOS


ANAMNESIS Y EXPLORACIÓN FÍSICA NECESARIAS COMPLEMENTARIOS?
ANTE UNA CONVULSIÓN FEBRIL
La AAP, tras una revisión de la literatura basada en la
El diagnóstico es fundamentalmente clínico y está ba- evidencia, publicó en el año 2011, las Directrices para la
sado en la anamnesis y la exploración física, dirigidas a evaluación del diagnóstico neurológico del niño con una
investigar las características de la convulsión, la presencia convulsión febril simple11. Las normas, que sustituyen a
de signos neurológicos o focales y la etiología de la fiebre, las publicadas en 1996, no están destinadas a los niños
para descartar principalmente una infección del SNC u con convulsiones febriles complejas o con patología neu-
otras causas asociadas (metabólicas, traumáticas, etc.). rológica previa, anomalías del SNC o antecedentes de
convulsiones no relacionadas con la fiebre.
Anamnesis Siguiendo las recomendaciones, no estaría indicado
El interrogatorio sistematizado es básico para clasifi- realizar punción lumbar, analítica sanguínea, EEG o prue-
car el tipo de convulsión y debe incluir una minuciosa bas de neuroimagen (TC o resonancia magnética [RM]),
descripción del episodio. Es importante recoger la infor- de forma rutinaria en un niño sano, en las 12 horas si-
mación de los padres o, en su defecto, de los familiares o guientes de presentar una convulsión febril simple.
de otras personas que estuvieran presentes, buscar ante- Razonamientos:
cedentes personales de convulsiones febriles o afebriles,
edad de comienzo, número de episodios, enfermedades Punción lumbar
previas y actuales, incluyendo las neurológicas o infeccio- No está indicada porque el riesgo de que una menin-
sas y los traumatismos. Obtener información actualiza- gitis bacteriana se presente como una primera convul-
da del calendario de vacunación y si hay antecedentes sión febril en un niño de 6 a 18 meses es muy baja, si no
familiares de crisis febriles o de epilepsia. Verificar si tiene enfermedades y está correctamente vacunado. Sin
hubo otros síntomas llamativos antes de comenzar la embargo, debe ser considerada si:
convulsión. Preguntar sobre sus características, inicio, si  Hay sospecha de meningitis (presenta signos me-
hubo o no pérdida de conciencia, tipo de movimientos, níngeos: rigidez de nuca, Kernig y/o Brudzinski) o
duración, frecuencia, tiempo de recuperación y recurren- de encefalitis, o si la historia clínica o la exploración
cia, para poder tipificarla en simple o compleja, y los tra- física sugieren la sospecha de una infección del
tamientos recibidos, sobre todo si es epiléptico conocido SNC, salvo que haya contraindicación, como la
o si ha tenido cambios recientes en los mismos. existencia de hipertensión intracraneal, signos
neurológicos focales, compromiso cardiorrespira-
Exploración física torio, alteración del nivel de conciencia o infección
El examen físico irá orientado a poder identificar un en la zona de punción.
posible foco infeccioso y descartar alteraciones neuroló-  Tiene entre 6 y 12 meses y no está vacunado frente
gicas previas o producidas por la crisis. Comenzará con la a dos de las causas más frecuentes de meningitis
valoración inicial del estado cardiorrespiratorio y del ni- bacteriana en este rango de edad (Haemophilus
vel de conciencia, así como la búsqueda de signos rela- influenzae tipo b o Streptococcus pneumoniae) o no
cionados con una enfermedad neuromeníngea, infeccio- ha recibido las vacunas programadas como se re-
sa o exantemática, como la presencia de erupciones comiendan o cuando el estado de vacunación no
cutáneas, petequias, signos neurológicos, meníngeos, se puede determinar, porque en estas situaciones
rigidez de nuca o de hipertensión intracraneal, trastor- presentan mayor riesgo de meningitis bacteriana.

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 T ambién es una opción si el niño ha sido tratado pante de espacio, una hemorragia o hidrocefalia, un abs-
con antibióticos, porque pueden enmascarar los ceso o un edema cerebral, que requieran de intervención
signos y síntomas de una meningitis. neuroquirúrgica urgente14. Sin embargo, deben conside-
Estudios prospectivos de base poblacional han de- rarse en niños con estatus febril o CF complejas recurren-
mostrado que la meningitis bacteriana se produce hasta tes, que tienen otros hallazgos neurológicos, como un
en un 18% de los niños que presentan estatus epiléptico perímetro cefálico anormal, un retraso significativo del
febril, por lo que en este caso estaría recomendado ini- desarrollo o una alteración focal neurológica persistente.
ciar la administración temprana de antibióticos parente-
rales, si existe alguna contraindicación para realizar pun-
ción lumbar12. ¿QUÉ DIAGNÓSTICOS DIFERENCIALES ES
NECESARIO REALIZAR?
Electroencefalograma
No está indicado porque no hay evidencia de que ten- Básicamente con los siguientes:
ga implicación pronóstica para predecir la aparición de  Trastornos paroxísticos no epilépticos (TPNE):
recurrencia o el desarrollo ulterior de epilepsia, incluso como los síncopes febriles, que son crisis anóxicas
en el subgrupo de las convulsiones febriles complejas, reflejas desencadenadas por la fiebre, habitual-
donde la tasa de encontrar alteraciones en el EEG postic- mente en procesos infecciosos, que cursan con pér-
tal es baja, pero podría considerarse cuando en el niño dida transitoria de conciencia y del tono postural,
con una CF haya sospecha de patología cerebral. bradicardia, cianosis y/o palidez y que, si se prolon-
gan, pueden incluso producir sacudidas clónicas
Analítica de sangre (síncope convulsivo); o con los estados confusiona-
Con base en la evidencia científica publicada, la AAP les transitorios (delirios febriles) o los escalofríos
no recomienda la determinación de glucosa, electrolitos que van asociados a fiebre elevada en los que no se
séricos (iones, calcio, fósforo, magnesio) ni hemograma pierde la conciencia, pero que pueden ser conside-
completo de forma habitual, en un niño con una primera rados erróneamente crisis convulsivas febriles.
convulsión febril simple, porque no hay constancia de su  Epilepsia mioclónica grave de la infancia (EMGI) o
beneficio, pero se deberían solicitar cuando haya indica- síndrome de Dravet, de inicio precoz en lactantes
ciones específicas, dirigidas a poder identificar la causa en el primer año de vida, que tienen un desarrollo
de la fiebre. neurológico normal y ausencia de factores etioló-
gicos. Suelen presentarse antes de los seis meses,
Pruebas de neuroimagen en la fase febril, como crisis desencadenadas por la
No son necesarias en la evaluación inicial de un niño fiebre. Pueden ser clónicas generalizadas o focales,
con una primera CF simple. Aunque podrían detectar de duración prolongada (mayor de 20 minutos) y
precozmente lesiones cerebrales, como una displasia o tendencia al estatus epiléptico. En estadios preco-
más raramente un absceso o un tumor, son mayores los ces, son muy difíciles de diferenciar. Son recurren-
riesgos añadidos que los beneficios: la TC se asocia con la tes y cursan con deterioro cognitivo y neurológico
exposición a la radiación, que puede elevar el riesgo de progresivo y resistencia precoz al tratamiento.
cáncer en el futuro, como una leucemia o un tumor cere-  Epilepsia generalizada con convulsiones febriles
bral13 y la RM con los riesgos potenciales de la sedación, plus: son niños que presentan un patrón de heren-
además de tener un alto coste. Tampoco es necesario el cia autosómica dominante, con convulsiones febri-
uso de radiografías de cráneo en la evaluación del niño les múltiples de inicio precoz (primer año), que per-
con una convulsión febril. La extrapolación de los datos sisten después de los seis años, con crisis febriles o
de la literatura sobre el uso de TC en niños neurológica- afebriles. Tienen un curso benigno con desarrollo
mente sanos que presentaron una convulsión febril com- neurológico normal y desaparecen en la adoles-
pleja ha demostrado que tampoco son necesarias de ru- cencia.
tina, porque es poco probable que tengan patología  Crisis con fiebre: son CE que ocurren con fiebre, en
intracraneal asociada, como una lesión o una masa ocu- un niño con infección del SNC (meningitis, encefa-

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litis, absceso cerebral) o con patología neurológica orofaringea); B: mantener una adecuada ventilación
de base. La meningitis debe ser considerada en el (oxigenación con mascarilla o cánulas nasales). Valorar
diagnóstico diferencial de cualquier niño que con- color, movimientos torácicos, frecuencia respiratoria,
vulsiona con fiebre, y la punción lumbar se debe auscultación pulmonar, pulsioximetría; C: asegurar la
realizar si hay signos o síntomas de sospecha, so- perfusión periférica, monitorización de constantes (pul-
bre todo en lactantes menores de 12 meses, en los sos, frecuencia cardiaca, presión arterial) y evaluar cana-
que pueden estar ausentes. También es importan- lización de vía venosa periférica.
te descartar encefalopatías agudas, como la ence-
falitis herpética en un niño con convulsiones foca- Fármacos que pueden emplearse para el tratamiento
les o estado postcrítico prolongado, o el síndrome de una convulsión febril
de Reye. Las benzodiazepinas son de primera elección, para el
 Otros trastornos que provoquen convulsiones, tratamiento de una CE en la fase aguda. La más emplea-
como fenómenos paroxísticos durante el sueño da y que cuenta con mayor evidencia científica y se tiene
(parasomnias, mioclonías rítmicas, sobresaltos), mayor experiencia de uso, es el DZP en solución rectal
trastornos del movimiento de presentación pa- (microenemas) a 0,5 mg/kg/dosis, máximo 10 mg/dosis
roxística, los espasmos del sollozo, infecciones o por vía endovenosa a 0,3 mg/kg/dosis, lento, máximo
(gastroenteritis víricas o bacterianas, enfermeda- 10 mg/dosis (nivel de evidencia I). Su absorción es rápida
des exantemáticas), intoxicaciones farmacológi- e inicia su acción en 1-3 minutos (tarda diez segundos en
cas, los trastornos metabólicos, alteraciones elec- alcanzar una concentración eficaz en el cerebro), su efec-
trolíticas, enfermedades sistémicas (déficit de to máximo se alcanza a los 5-10 minutos, con una dura-
biotinidasa, síndrome urémico hemolítico) o trau- ción de acción de entre 10 y 20 minutos. Sin embargo, la
matismos craneoencefálicos. administración rectal en supositorios no es útil, por su
lenta absorción. El MDZ resulta ser más efectivo que el
DZP rectal, cuando se utiliza por mucosa bucal (nivel de
ACTITUD TERAPÉUTICA. PROTOCOLO evidencia I), en dosis de 0,5 mg/kg/dosis o intranasal (ni-
DE ACTUACIÓN vel de evidencia III), en dosis de 0,2 mg/kg/dosis15,16. El
MDZ y el DZP resultan ser igual de efectivos cuando se
Dado su carácter benigno y autolimitado, y puesto administran en dosis intranasal e intravenosa, respecti-
que la mayoría de las CF son breves, duran menos de dos vamente, para frenar la convulsión (nivel de evidencia
minutos, y suelen ceder espontáneamente, algunos au- III)17. Sin embargo, no se ha demostrado la seguridad del
tores recomiendan no tratar antes de ese tiempo. Cuando empleo del MDZ (bucal o intranasal), en el medio ex-
una convulsión dura más de cinco minutos, las recomen- trahospitalario (nivel de evidencia IV), y debe preferirse la
daciones aconsejan iniciar tratamiento con benzodiaze- utilización del DZP rectal (grado de recomendación A)18.
pinas: diazepam (DZP) rectal o midazolam (MDZ) intra- El DZP rectal es efectivo en el tratamiento agudo de las
nasal o bucal15,16. CF, en las crisis con una duración mayor de cinco minutos
y en el tratamiento del estatus febril. También cuando no
Fase crítica se consigue rápidamente un acceso venoso y cuando no
se obtiene atención médica inmediata en el domicilio.
Tratamiento general Las medidas son secuenciales: asegurar ABC y oxige-
El tratamiento de la fase aguda incluye la aplicación nación y administrar DZP para yugular la convulsión. La
de medidas generales, que son similares para cualquier disminución de la temperatura corporal con antipiréticos
tipo de crisis: estabilización de la vía aérea, respiración y también debe formar parte del tratamiento primario.
circulación. Asegurar la protección física y colocar en po- Si la crisis se prolonga (esperar respuesta durante diez
sición de decúbito lateral semiprono, para evitar la posi- minutos antes de considerarlo ineficaz), hay que conti-
bilidad de aspiración, excepto si hay antecedentes de nuar la secuencia con el algoritmo de emergencias de la
traumatismo. ABC, A: mantener vía aérea permeable (la- fase crítica de las CE. Si se tratara de un estatus epiléptico
teralizar la cabeza, aspirar secreciones, colocar cánula convulsivo, la fenitoína es el anticonvulsivo inicial en el

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tratamiento de emergencias. Si la crisis no cede o no se gar a retirarlos22. Ni la carbamazepina ni la fenitoína son


encuentra una causa conocida o una causa infecciosa cla- eficaces para la prevención de las recurrencias de las CF
ra, deberá ser remitido al hospital tras su estabilización. simples23. En la Tabla 3 se muestran los principales efec-
En general, el niño que presenta convulsiones febriles tos adversos.
no necesita ser hospitalizado. Sin embargo, en lactantes
de 12 a 18 meses y en los niños que han recibido trata- Tratamiento intermitente
miento antimicrobiano previo, es necesaria la observa- Un ensayo clínico aleatorizado doble-ciego controla-
ción durante las siguientes 24 horas de ocurrir esta. En do, en pacientes con antecedente de convulsiones febri-
lactantes menores de 18 meses, los signos de meningitis les, demostró que la administración de DZP oral en dosis
pueden ser muy sutiles y puede estar indicada la punción de 0,33 mg/kg/8 horas durante 48 horas, disminuye la
lumbar. La AAP la recomienda en lactantes menores de recurrencia (disminución del riesgo del 44% por persona
12 meses con fiebre y convulsión. En la Tabla 2 se resu- y año), en niños con alto riesgo24. Otros estudios abiertos
men los criterios de derivación a un centro hospitalario. también lo documentan25. La profilaxis intermitente con
DZP para prevenir las recurrencias puede ser eficaz (nivel
Tratamiento profiláctico de las recurrencias de evidencia III). Los efectos adversos incluyen somno-
Eficacia del tratamiento antiepiléptico continuo o lencia y ataxia. La depresión respiratoria es sumamente
intermitente, para la prevención de las recurrencias de rara, incluso cuando se administra por vía rectal22. Sin
las CF. embargo, conviene recordar que la sedación causada por
cualquiera de las benzodiazepinas administradas por vía
Tratamiento continuo oral, rectal, nasal o bucal puede enmascarar una infec-
Tres metaanálisis publicados en 1988, 1997 y 200319-21 ción del SNC.
encontraron que la profilaxis continua con fenobarbital Pese a la evidencia de que el tratamiento antiepilépti-
(PB) es eficaz para prevenir la recurrencia de las CF sim- co continuo con PB, primidona o VPA, o intermitente con
ples, cuando se administra a diario y en rango terapéuti- DZP oral, es eficaz para disminuir el riesgo de recurrencia
co (nivel de evidencia I) en dosis de 3,5-5 mg/kg/día, en de las CF simples; sin embargo, dada la benignidad y el
dos tomas. La primidona también disminuye la tasa de excelente pronóstico que presentan y los potenciales
recurrencias en dosis de 15-20 mg/kg/día y el ácido val- efectos adversos de los fármacos anticonvulsivos, que
proico (VPA) parece ser al menos tan eficaz como el PB superan los riesgos relativamente menores asociados
(nivel de evidencia I) en dosis de 30 mg/kg/día en dos con estas, la AAP no recomienda el tratamiento a largo
tomas. Sin embargo, la aparición de efectos adversos plazo, ni continuo ni intermitente, para los niños que pre-
como los trastornos del comportamiento, que en el caso sentan una o más convulsiones febriles simples, al no
del PB pueden llegar hasta el 20-40%, o las reacciones de aumentar significativamente tampoco el riesgo de desa-
hipersensibilidad, o bien la asociación, aunque rara, de rrollar una futura epilepsia.
hepatitis fulminante en el caso del VPA, sobre todo en Sin embargo, en las situaciones en que la ansiedad de
menores de dos años, limitan seriamente su utilidad, ya los padres asociada con las convulsiones febriles es in-
que pueden ser de intensidad suficiente como para obli- tensa, el DZP oral intermitente al inicio de la enfermedad
febril puede ser eficaz en la prevención de la recurren-
cia22. La dosis recomendada es de 0,5 mg/kg/día (máxi-
Tabla 2. Criterios de derivación mo 10 mg), por vía oral o rectal en 2-3 dosis al día, duran-
 Sospecha de infección del SNC o metabólica te las primeras 48 horas de la fiebre.
 Convulsión febril compleja, atípica o prolongada
En lo que respecta al riesgo del desarrollo de epilepsia
 Afectación del estado general o con enfermedad de base importante
 Crisis prolongada que no cede con el tratamiento posterior, no hay evidencia de que la prevención de las
 Criterios sociales: recurrencias disminuya este riesgo (nivel de evidencia I)18.
– Gran ansiedad familiar
– Condiciones sociales desfavorables
– Inadecuada atención en el domicilio
Beneficios y riesgos de los antipiréticos
– Lejanía del centro sanitario En general, el paracetamol y el ibuprofeno se conside-
SNC: sistema nervioso central. ran seguros y eficaces en los niños y son muy útiles para

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Tabla 3. Efectos secundarios de los fármacos


Fenobarbital Primidona Ácido valproico
Trastornos del comportamiento Trastornos del comportamiento Hepatotoxicidad
Hiperactividad Irritabilidad Trombocitopenia
Irritabilidad Trastornos del sueño Pérdida/aumento de peso
Letargia Trastornos gastrointestinales
Trastornos del sueño Pancreatitis
Reacciones de hipersensibilidad

aliviar el malestar asociado con la fiebre, pero ningún es- ¿Cuál es el riesgo de recurrencias?
tudio ha demostrado que su administración profiláctica Al contrario que el ligero aumento del riesgo de epilep-
disminuya el riesgo de recurrencia. Efectos adversos im- sia, los niños con CF simples tienen una gran tasa de re-
portantes son hepatotoxicidad, insuficiencia respirato- currencias, que pueden llegar a alcanzar hasta el 30 o el
ria, acidosis metabólica, insuficiencia renal y coma, en los 40% de probabilidad de presentarla, tras su primera crisis
niños tras sobredosis o en presencia de factores de ries- (nivel de evidencia I). En la Tabla 4 se enumeran los facto-
go22. res de riesgo. En función de esta, el cálculo aproximado
de probabilidad a los dos años sería: niños sin factores de
riesgo, menos del 15%; con un factor de riesgo, 25%; con
PRONÓSTICO Y RIESGOS POSTERIORES dos, 30-50%, y con tres o más, superior al 60%, sobre todo
si tienen una edad menor de 18 meses e historia de con-
Las convulsiones febriles tienen un pronóstico exce- vulsiones febriles en familiares de primer grado (nivel de
lente y no suelen dejar secuelas a largo plazo. evidencia I)18.

¿Las convulsiones febriles producen deterioro Mortalidad


del coeficiente intelectual? Finalmente, el riesgo de fallecimiento de un niño durante
No hay evidencia de que causen daño cerebral, ni del una convulsión febril simple, como consecuencia de una
SNC (nivel de evidencia I). No se ha demostrado que pro- lesión, aspiración o arritmia cardiaca documentadas, es teó-
duzcan disminución del coeficiente intelectual, ni del ricamente posible, pero hasta la fecha no se ha notificado22.
rendimiento académico o del aprendizaje, excepto en los En resumen, con la excepción de una gran tasa de recu-
niños que presentaban anomalías neurológicas previas a rrencia, no se han identificado efectos adversos a largo plazo.
la primera CF, ni que las anomalías del comportamiento
sean una consecuencia de las CF recurrentes, incluso en
los niños con CF complejas22. CONSEJOS Y MEDIDAS DE ACTUACIÓN
ORIENTADAS A LA FAMILIA
¿Qué riesgo hay de epilepsia posterior?
La mayoría de los niños no desarrollará epilepsia. El La mayoría de las familias perciben las crisis febriles
riesgo global durante su vida tras una CF es del 2%, fren- como una situación alarmante. La gestión de la informa-
te al 1% del que existe en la población general, pero en
presencia de factores de riesgo, como antecedentes de Tabla 4. Factores de riesgo de recurrencia de crisis febril
epilepsia en familiares de primer grado, CF compleja o
 Edad inferior a 12-18 meses en la primera CF
déficit neurológico previo (parálisis cerebral, desarrollo  CF en familiar de primer grado
tardío u otras anormalidades neurológicas), la probabili-  CF con temperatura menor o cercana a 38 °C
dad puede aumentar significativamente hasta el 10%  Inicio de la convulsión una hora antes de la fiebre
 Epilepsia en familiar de primer grado
(nivel de evidencia I). En los niños sin factores de riesgo  Asistencia a guardería
asociados, el incremento del riesgo es bajo (nivel de evi-  Primera CF múltiple
dencia I). CF: crisis febril.

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ción es clave y ha de formar parte importante de los ob- demora, o si no recupera la conciencia o tiene pará-
jetivos del tratamiento. Es necesario asesorar a los pa- lisis tras esta, presenta vómitos, petequias o rigi-
dres y cuidadores sobre su naturaleza benigna, ofrecer dez del cuello.
apoyo e información verbal o escrita sobre la causa y el Las indicaciones para iniciar tratamiento agudo en
pronóstico y dar orientación y pautas si el niño presenta- el domicilio incluirán a los niños con alto riesgo de
ra una nueva crisis, son actuaciones que contribuirán a recurrencia o con una primera convulsión febril
aliviar la angustia y la ansiedad de los familiares. Las me- prolongada, o cuando el niño esté geográficamen-
didas deben de incluir los siguientes puntos: te aislado de la intervención médica.
 Tranquilizar y explicar a los padres sus característi-  Proporcionar información sobre el pronóstico y la
cas, la tendencia a ser breves, a desaparecer con la utilidad de la terapia preventiva. El principal trata-
edad y los escasos riesgos asociados que compor- miento está dirigido a la enfermedad que causó la
tan. Informar que no hay evidencia de fallecimien- fiebre. La gran mayoría de las convulsiones febriles
to, ni causan daño cerebral, retraso mental, ni difi- no son graves y ocurren con enfermedades comu-
cultades en el aprendizaje y el riesgo de desarrollar nes, como infecciones del oído, infecciones de vías
epilepsia en un futuro es muy bajo, que no difiere respiratorias altas o gastroenteritis aguda. Las in-
del que presenta la población general. Sin embargo fecciones graves como neumonía, meningitis, etc.,
tras la primera, hay riesgo de que se repitan, incluso son causas menos frecuentes. Se debe dejar claro
en el mismo proceso febril (uno de cada tres niños que la profilaxis continua con un anticonvulsivo no
tendrá un nuevo episodio). ¿Qué debe hacerse? reduce en modo alguno el riesgo de epilepsia y,
Es importante que los padres conserven la calma y aunque son eficaces para la prevención de las recu-
le observen cuidadosamente. Si está inconsciente, rrencias, el predominio de los riesgos sobre sus be-
se le ha de colocar en una zona segura, solo si suce- neficios (efectos adversos) hace que no estén indi-
de en un sitio que pueda resultar peligroso, para cados en un niño con una o más convulsiones
prevenir caídas o heridas accidentales, en posición febriles simples. Dado su excelente pronóstico y los
lateral o boca abajo, para evitar ahogo o aspiración escasos riesgos asociados con estas, el tratamiento
y limpiar la boca si hay restos de alimentos o vómi- con antiepilépticos generalmente no se recomien-
tos. No hay que intentar forzar su apertura, ni colo- da y solo estaría indicado en casos seleccionados.
car ningún objeto entre los dientes (puede romper-
se o incluso obstruir la vía aérea), ni tampoco
sujetarle durante la convulsión. Si el niño ha perdi- BIBLIOGRAFÍA
do la conciencia, no hay que darle antitérmicos
orales ni líquidos. La CF cederá en pocos minutos, 1. Consensus Development panel. Febrile suizures: long-term ma-
por lo que hay que mantener la vigilancia hasta nagement of children with fever associated seizures. Pediatrics.
que concluya. Tras esta, se le puede administrar un 1980;66:1009-12.
antitérmico por vía rectal, si está disponible. El pa- 2. Comission on Epidemiology and Prognosis, International
racetamol y el ibuprofeno son útiles para aliviar el League Against Epilepsy Guidelines for epidemiological studies on epi-
malestar del niño asociado con la fiebre, pero no lepsy. Epilepsia. 1993;34:592-6.
previenen la convulsión. 3. Commission on Classification and Terminology of the
 Educar y enseñar a los padres y familiares cómo International League Against Epilepsy. Proposal for revised classifica-
deben actuar, si no cede en cinco minutos o recu- tion of epilepsy and epileptic syndromes. Epilepsia. 1989;30:389-99.
rre, para iniciar la administración de DZP en solu- 4. Engel J Jr. A proposed diagnostic scheme for people with epilep-
ción rectal (microenemas 5 y 10 mg), a la dosis in- tic seizures and with epilepsy: Report of the ILAE Task Force on
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