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“Año del Fortalecimiento de la Soberanía Nacional”

Universidad católica de Trujillo

Benedicto cvi

Facultad ciencia contable administrativa y economía

DOCENTE:

DRA. EMY VILCHEZ CERNA

INTEGRANTES:

Delgado Mauly Maricruz

Valenzuela Vicente Gisela

CURSO:

DERECHO ADMINISTRATIVO

CICLO: X B

Trujillo_2022
Tabla de contenido
Caratula:.....................................................................................................................................1
DERECHO ADMINISTRATIVO..............................................................................................1
CONTRATO ADMINISTRATIVO............................................................................................................2
¿Que se entienden por contrato administrativo?..........................................................................2
Teorías del contrato administrativo...............................................................................................3
Las Prerrogativas En La Contratación Pública.................................................................................3
Criterios Del Contrato Administrativo Y Elementos Que Lo Distingue Con Otros...........................4
la diferenciación de estos dos contratos son:................................................................................5
Contrato celebrado por las Administraciones públicas:.................................................................5
En derecho administrativo:............................................................................................................5
Grandes rasgos la generación del contrato administrativo se articula en dos fases:.....................6
Los contratos administrativos típicos:............................................................................................7
Veamos algunas de sus peculiaridades:.........................................................................................7
Mantenimiento del equilibrio económico del contrato.................................................................9
Elementos del contrato administrativo:.........................................................................................9
Conclusión........................................................................................................................................10
CONTRATO ADMINISTRATIVO

¿Que se entienden por contrato administrativo?

Cuando nos referimos al tema de los contratos tal vez la primera idea que se nos puede
venir a la mente es la del contrato que está estipulado en el código civil o que en algunas
ocasiones se puede llegar a la equivocación de que es el único contrato que se aplica en la
actividad jurídica, pero esto no es del todo cierto puesto que en la doctrina general del
contrato podemos encontrar el contrato civil, el contrato laboral, el contrato comercial y el
contrato administrativo del que nos ocuparemos a continuación: Para empezar el contrato
administrativo no tiene un término exacto que haga referencia a su existencia, distintos
libros y distintos autores tienen su propia forma de nombrarlos como señala Moron Urbina
“Algunos se refieren a ellos como contrato estatal o del Estado. Otros prefieren hablar de
contrato administrativo. Algunos mencionan a los contratos de la Administración. En
algunos acuerdos internacionales se prefiere hablar de los contratos públicos” (1) peor aún
que en el Perú son muy poco los trabajos destinados al estudio del contrato administrativo
tanto así que nuestra legislación sectorial administrativa casi ni los menciona

El contrato administrativo goza de un alto grado de dogmatismo, por mucho tiempo se


habló de la existencia de esta figura jurídica, pero en el Perú nunca fue estipulado o
regulado por alguna ley o reglamento más solo la idea que se tenía del contrato
administrativo existía en los libros, en el esfuerzo de los profesores de derecho
administrativo que creen en la especialidad de la rama y en la doctrina extranjera, por ello
el solo hecho de tener esta denominación causa preguntas y polémica en relación a los
contratos celebrados por el Estado. Las preguntas que nacen de manera natural pueden ser;
¿el solo hecho de que el estado participe en la relación contractual puede ser motivo para
llamar contrato administrativo? ¿Existe realmente derechos y potestades implícitas por
parte de la administración hacia los administrados, y de ser así quien o que las regula? ¿la
finalidad publica es elemento suficiente para la razón de ser del contrato administrativo?

Teorías del contrato administrativo

El debate que hasta ahora y en algunos espacios tiene lugar, es si la administración al


celebrar los contratos tiene una naturaleza jurídica distinta al contrato privado o
simplemente no existe tal diferencia y se considera como si fuera tal, este debate tiene su
origen en dos teorías; la teoría unitaria y la teoría dualista, la primera refiere a que los
contratos que suscribe el estado son únicos no habiendo distinción entre contratos privados
y contratos administrativos (La teoría más antigua) y por otro lado la teoría dualista que sí
reconoce distinción de los contratos privados con los contratos administrativos, donde este
último es un contrato en el que la Administración participa como parte contratante, en su
mayoría con un particular y es aquí donde el estado tendrá una relación de mayor poder
contractual frente al administrado, pero este mayor poder no solo es un poder económico
como pasa en una relación laboral, sino también es un poder jurídico donde por medio de la
figura del contrato administrativo se reafirmara la subordinación a favor de la
administración, y esta se ve reflejado en características como las cláusulas exorbitantes, la
subordinación contractual por parte del contratista, la mutabilidad del contrato por parte de
la Administración, los efectos a terceros, entre otros. Si bien es cierto, no todos los
contratos que se celebra la Administración tienen categorías de Contrato Administrativo,
pero ahí el problema ¿cómo diferenciarlos si la ley no hace esa diferenciación?

Las Prerrogativas En La Contratación Pública

Las cláusulas exorbitantes son aquellas que dan a las partes derechos y a imponer
obligaciones que sobrepasan los límites del contrato privado u comercial, sobre la base de
tener naturaleza de contrato administrativo, es decir si en un contrato privado las reglas
generales son que exista igualdad contractual entre las partes, en el contrato administrativo
cambia rotundamente la figura en el sentido que la administración tiene prerrogativas
especiales frente al administrado, que aun no siendo tipificadas expresamente en la ley estas
prerrogativas se sobrentienden o son implícitas a su naturaleza, todo a fin de asegurar el
cumplimiento del fin público, algunas de las cláusulas exorbitantes conocidas son: La
modificación unilateral del contrato, resolución unilateral del contrato, poder de control y
dirección, la aplicación de penalidades, la ejecución de garantías, etc. No hay un acuerdo
total en la doctrina para darle naturaleza de contrato administrativo pero la tesis mayoritaria
menciona que tienen carácter de contrato administrativo por que persigue y protege esta
finalidad publica, pero es necesario mencionar que estas prerrogativas tienen que ser
inspirados en el principio de razonabilidad administrativa ya que deberán ser
proporcionales al objeto que se pretende conseguir, respetar la legalidad y los derechos
constitucionales propio de un estado respetuoso de los derechos fundamentales.

Criterios Del Contrato Administrativo Y Elementos Que Lo Distingue Con Otros.

Muchos son los criterios que se postulan como característica para darle vida al contrato
administrativo algunos autores se inclinan por la finalidad publica, la participación de la
entidad como parte contratante en la relación contractual y las prerrogativas a favor de la
administración, son elementos principales para definir un contrato administrativo, como
sostiene Trelles de Belaunde En este sentido, se podría señalar que resaltan el qué, el quién
y el cómo, es decir, la satisfacción del interés público, para lo cual una de las partes
contratantes es una entidad estatal, y los medios que esta posee para alcanzar dicha
finalidad

(2) Mientras que otros autores como el profesor Ricardo Salazar Chávez son de la postura
que existe un solo elemento caracterizador queda claro que el elemento distintivo del
contrato de la Administración Pública no es el hecho de que la entidad administrativa que
celebra el contrato tenga prerrogativas especiales a su favor pues, como se señaló, puede
tenerla o no, e incluso condicionar tal prerrogativa a determinadas circunstancias sino que
por lo menos una de las partes que celebran el contrato es una entidad de la Administración
Pública

(3) De igual manera no hay un acuerdo en la doctrina sobre los elementos que van a
diferenciar el contrato administrativo con otras figuras contractuales sobre todo con el que
en algunos casos tiene algunos puntos de encuentro, nos referimos al contrato privado, que
como ya mencionamos en algún punto, esta era la encargada de regular los contratos
celebrado por la administración hasta la aparición del contrato administrativo en Francia.
Algunos elementos desarrollados para

la diferenciación de estos dos contratos son:

a) El criterio subjetivo, según el cual se considera contrato administrativo el solo hecho de


que una de las partes sea la Administración con competencia para contratar ( aunque es
importante mencionar que la administración también puede celebrar contratos privados y
no solamente contratos administrativos)

b) Criterio jurisdiccional, conforme el cual los contratos administrativos tienen su propia


especialidad en los tribunales (Contencioso administrativo)

c) Criterio teleológico, por el cual el contrato administrativo tiene como finalidad el


servicio público o el interés general;

d) El criterio legal es la postura más simple y menciona que solo la ley o quienes legislan le
darán calidad de contrato administrativo. Es decir, queda a plena voluntad del legislador
decidir cuáles son contratados administrativos y cuáles no. Entre otros.

 Contrato celebrado por las Administraciones públicas:

 que se caracterizan por su sometimiento a un régimen jurídico público y por la existencia


de cláusulas exorbitantes que derivan de la posición jurídica de la Administración y de
su privilegio de autotutela. Los contratos administrativos pueden ser: a) típicos, y tí)
especiales.
TRLCAP, arts. 5, 7 en la redacción dada por Ley 13/2003, de 23 de mayo

En derecho administrativo:

Se habla de contrato administrativo cuando la Administración Pública establece


una relación negociar con un contratista, con objeto de satisfacer una necesidad. A
diferencia de otros países de la Unión Europea (principalmente Reino Unido y Alemania)
en los que el régimen jurídico de la contratación de los entes públicos es el propio
del Derecho Común, en el nuestro se reconoce la figura del contrato administrativo
heredado del Sistema Francés.

Este Sistema distingue dos ámbitos en la actividad contractual pública, por un lado,


los contratos privados de la Administración cuyo conocimiento se atribuye a
la jurisdicción ordinaria, y, por otro, aquellos que se regulan con arreglo al Derecho
Administrativo sustantivo, y cuya jurisdicción es, por supuesto, la jurisdicción contencioso-
administrativa.
En definitiva, en otras palabras, la justificación de esos poderes especiales en favor de
la Administración Pública radica en que ésta no puede desentenderse de la marcha de las
actividades que son de su competencia, que, en todo caso, deben orientarse
al interés general. Por ello, las facultades de interpretación y resolución de dudas, y
de dirección y control (que podrían conllevar la
modificación, suspensión o resolución del contrato) se producen en la fase de ejecución del
mismo.

Grandes rasgos la generación del contrato administrativo se articula en dos fases:

Fase Interna.

En ella el órgano de contratación va configurando su voluntad para contratar. Desarrolla


las actuaciones preparatorias del contrato que van a ir formando el expediente de
contratación: Estudio de necesidades, elaboración de un proyecto (contrato de obras),
redacción de los pliegos de cláusulas administrativas y de prescripciones técnicas,
formulación de un presupuesto, verificación de si existe crédito adecuado y suficiente para
acometer el contrato y sometimiento del expediente a fiscalización previa.
Esta fase finaliza con la decisión del órgano de contratación de que efectivamente va a
contratar. Esta decisión se plasma en el acuerdo de aprobación del expediente de
contratación, que, normalmente, también supone la aprobación del gasto correspondiente, y
conlleva.la apertura del procedimiento de adjudicación.

Fase Externa.

En esta fase la Administración Pública ya sabe qué va a contratar y decide dar publicidad al


proceso, de manera que se produzca la concurrencia de ofertas.
La publicidad y concurrencia variará en función del importe del presupuesto del contrato,
ya que de ello va a depender que el anuncio deba o no publicarse en el Diario Oficial de las
Comunidades Europeas, o en el Boletín Oficial del Estado o de los boletines o diarios de
las Comunidades Autónomas o de las entidades locales, y
en relación al procedimiento de adjudicación que vaya a utilizarse para seleccionar
al adjudicatario, a saber, procedimientos abierto, restringido y negociado con o
sin publicidad.

De cualquier manera conviene insistir en que hasta que el órgano de contratación no dicta
el acuerdo de adjudicación el contrato no existe, por tanto será entonces cuando se
perfeccione. A partir de dicho acuerdo, de su notificación al contratista seleccionado y al
resto de licitadores, de su formalización, de la constitución de la garantía definitiva que, en
su caso, proceda, se inicia el periodo de ejecución del contrato que finaliza con
la recepción y pago del precio convenido. A partir de dicho momento comienza, en su caso,
el periodo de garantía de la obra o prestación realizada por el contratista. Expirado dicho
periodo sin salvedad alguna el contrato extingue completamente sus efectos.

Igualmente, conviene aclarar que las causas de invalidez concurrirán hasta la fase


inmediatamente anterior a la adjudicación (normalmente hasta
la propuesta de adjudicación que realiza la Mesa de Contratación), mientras que las causas
de resolución se producen una vez perfeccionado el contrato.

Los contratos administrativos típicos:

Veamos algunas de sus peculiaridades:

En el contrato de obras: sin duda la nota más caracterizadora es la necesaria elaboración


de un proyecto, que podrá simplificarse, en obras de primer establecimiento,
gran reparación o reforma cuyo importe sea inferior a 20.000.0000 de pesetas, o en su caso
ser sustituido por un anteproyecto o por las bases técnicas a las que debe ajustarse el
proyecto que elabore el adjudicatario, en el caso de contratación conjunta de éste y de
la ejecución de las obras.

En el contrato de suministros: se incluyen aquellos que tengan por objeto la compra,


el arrendamiento con o sin opción de compra, o la adquisición de productos o bienes
muebles, salvo los relativos a propiedades incorporales y valores negociables que se regirán
por la legislación patrimonial de las Administraciones Públicas. Dentro de
este concepto tienen cabida la adquisición y el arrendamiento de equipos y sistemas para
el tratamiento de la información, sus dispositivos y programas, y la cesión del derecho de
uso de estos últimos, así como los equipos y sistemas de telecomunicaciones. No obstante,
la adquisición de programas de ordenador a medida tendrá la consideración
de contrato de servicios.

El contrato de concesión de obra pública: contemplado dentro del contrato de obra no es


propiamente tal, ya que, por la aplicación del principio de importancia económica
predicable de los contratos mixtos, se trata de un contrato de gestión de servicios públicos.
La razón de su inclusión dentro del contrato de obras radica en que, de no ser así, no
quedaría sujeto a ningún tipo de publicidad, como ocurre en los contratos
de gestión de servicios públicos.

El contrato de gestión de servicios públicos: no es un verdadero contrato, sino una


amalgama de figuras contractuales a través de las cuales se puede gestionar de
modo indirecto un determinado servicio público. Asimismo este
llamado contrato de gestión de servicios públicos es absolutamente desconocido como tal
en el ámbito comunitario de la contratación pública.

El contrato de consultoría y asistencia : tiene por objeto estudiar y elaborar informes,


estudios, planes, anteproyectos, proyectos de carácter técnico, organizativo, económico o
social, dirigir la ejecución y el mantenimiento de obras e instalaciones,
implantar servicios organizativos, así como llevar a cabo en colaboración con
la Administración y bajo su supervisión las actividades previstas en la ley.

Características de los contratos administrativos

Un de las características esenciales de los contratos administrativos, es el carácter


“colaborativo”, esto es, que la entidad, al actuar en ejercicio de la función administrativa y
tutelando del interés público41, goza de especiales potestades que, como señala Juan Carlos
Cassagne, le otorgan prerrogativas de modificar unilateralmente el contrato, de aplicar
multas por sí y ante sí, entre otras.”42 Estas especiales potestades o prerrogativas son las
denominadas “cláusulas exorbitantes”.43 Se llaman así porque son evidentemente
diferentes del derecho común. No se concebirían en los contratos civiles porque quedaría
roto el principio de igualdad de las partes y el de la libertad contractual.
Mantenimiento del equilibrio económico del contrato

El principio del mantenimiento del equilibrio económico financiero del contrato consiste en
que al verse afectado un contrato cuyo objeto sea de interés público, por un factor
imponderable que rompa el equilibrio entre las expectativas económicas justas del
contratista y sus prestaciones, el Estado, en vez de proceder a la resolución por la vía civil
de la fuerza mayor, restituye el equilibrio inicial a favor del contratista, subsistiendo la
relación contractual. El instituto es extenso y ha sufrido evoluciones que han terminado en
la actualidad por la reparación integral del equilibrio, reconociéndose incluso a favor del
contratista el pago del lucro cesante por la aplicación del principio de igualdad ante las
cargas públicas en vez de sólo evitar que el negocio sea a perdida corno estaba concebido
inicialmente en la sola justificación de tener al contratista corno un colaborador de
finalidades públicas.

Elementos del contrato administrativo:

El acuerdo de voluntades o consentimiento: Para que exista contrato se requiere la concurrencia


de dos voluntades opuestas y válidas de los sujetos que concurren a su formación. En el contrato
administrativo, uno de los sujetos de la relación contractual es la administración y el otro el
cocontratante32. El acuerdo de voluntades o consentimiento implica, entonces, una manifestación
de voluntad coincidente de las partes y presupone, por un lado, la capacidad jurídica del
cocontratante de la administración y por el otro la competencia del órgano estatal, pues sin
acuerdo de voluntad no hay contrato33, pues, por ello se le atribuye la “bilateralidad”34 que
caracteriza a este primer elemento.

• El objeto del contrato. es la obligación que por él se constituye, en obligación que tiene por
contenido una prestación de dar y hacer o no hacer querida por las partes. Los contratos
administrativos pueden tener por objeto una obra o servicio público y cualquier otra prestación
que tenga por objeto el fomento de los intereses y la satisfacción de las necesidades generales35 o
también podría considerarse como objeto del contrato como aquella operación que permite
realizar trabajos, ventas de bienes y servicios, etc.

• La causa. Es la situación de hecho que ha considerado la administración y que la determina a


contratar para satisfacerla, es decir, es la razón por la cual nos comprometemos contractualmente.
• La forma: En el caso del contrato, también la forma comprenderá no solamente la
exteriorización del acuerdo de voluntades, sino también todas las formalidades requeridas para la
formación de la voluntad administrativa y su notificación, en términos generales, la validez de los
contratos administrativos no están sujetas a condiciones de formas particulares38. Es por ello que
a este elemento se le atribuye su carácter “solemne”.39 • La finalidad. El último elemento del
contrato administrativo es el fin. La administración persigue un fin; la satisfacción del interés
general. De manera que el contrato debe ser realizado por la administración teniendo en cuenta
este fin.

La finalidad: constituye un elemento esencial en la contratación administrativa, pues,


esencialmente, ambas partes buscan que los efectos se realicen conforme al derecho

Conclusión

En el contrato administrativo, a diferencia de los contratos regidos por el derecho privado, la


Administración procura la satisfacción de un interés público relevante, de realización inmediata o
directa, que se incorpora al fin u objeto del acuerdo, proyectándose en su régimen sustantivo.

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