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ACCIONES PREVIAS FRENTE A LA EVALUACIÓN VOCACIONAL

La Orientación Vocacional es un proceso en el cual se busca guiar a una persona para definir su

elección profesional. Para ello, debe contar con algunas sesiones de entrevista y evaluación con

un orientador vocacional, en las cuales se le brinda el asesoramiento y herramientas necesarias

para lograr identificar sus características personales, tales como: intereses, habilidades,

fortalezas, debilidades, y personalidad, las cuales le permiten definir con mayor claridad sus

opciones (Ascenzo Rouillon, 2019).

De igual manera, este permite a los estudiantes ser consientes sobre su futuro e informarse

respecto a las carreras a las cuales se sienten interesados o interesadas, pudiendo visualizar las

mallas curriculares, la competencia en el ámbito laboral, su proyecto de vida y lo que les depara

en el futuro. El propósito de la orientación vocacional es bridar un soporte al estudiante, para de

este modo no se sienta insatisfecho con su profesión, evitar la deserción en la universidad o

instituto y que pueda desenvolverse adecuadamente en el mercado laboral.

Asimismo, es importante que los alumnos no tomen decisiones respecto a la carrera a la cual

escogerán en base a pensamientos como: económicamente es más factible, tal carrera es sencilla,

esta no contiene matemáticas en la malla curricular o que está de moda. Pues en consecuencia, se

observaran conductas como la deserción, el fracaso académico, la insatisfacción, estrés o

ansiedad, conllevando un nivel bajo de la calidad de su trabajo.

Por otro lado, según la autora Ascenzo Romina menciona que: “Este proceso siempre fue

importante, años atrás las personas solo buscaban orientadores vocacionales cuando se les

presentaban fracasos laborales o de elección de carrera. Hoy en día, se sabe que este ha cobrado
mayor relevancia y posee un valor más preventivo, con el fin de reducir la incertidumbre que

surgen en esta etapa y las posibilidades de enfrentar fracasos vocacionales” (p. 5, 2019).

Las acciones previas a considerar frente a la evaluación vocacional fueron las siguientes:

En primer lugar, se debe considerar el proyecto de vida del estudiante, permitiendo planear

organizadamente su futuro y no vivir sin un porvenir. Para ello, tanto los docentes como

psicólogos deben orientar al alumno a poder ser consciente de la magnitud del mismo. De este

modo, las personas encuentran su sentido de vida y su propósito, conllevando a una mayor

productividad, calidad y seguridad en su ámbito laboral y por ende a su sociedad.

En segundo lugar se encuentra la historia de vida personal del estudiantado, la cual, es el proceso

que vive cada ser humano desde su nacimiento. Este nos brinda información, respecto a cómo es

su ambiente, los estímulos a los cuales estuvo expuesto, su familia, su barrio o país. Según

Guzmán Diana indica que: “Lo esencial, al reconstruir la historia de vida en cada etapa es,

escribirla en forma de biografía con fechas y acontecimientos o en forma de relatos, tomándose

el tiempo para recopilar la información, haciendo uso de fotografías o gráficos y personalizando

su escrito, según la motivación del joven estudiante”(p. 33, 2012).

En tercer lugar se encuentra la motivación, la cual, la anterior autora la describe como: “Los

individuos motivados persisten en la búsqueda personal de alcanzar los sueños personales que se

hacen realidad integrando procesos psíquicos, es decir, actividades nerviosas superiores, y de

actividad externa reflejada en acciones. Entonces, la motivación según podría estar determinada

como el conjunto concatenado de procesos psíquicos, que conteniendo el papel activo y

relativamente autónomo de la personalidad y en su constante transformación y determinación,


dirigidos a satisfacer las necesidades del hombre, manifestándose como actividad motivada” (p.

34, 2012).

En cuarto lugar se tiene a los intereses, los cuales se dan por los gustos y satisfacción del

alumnado, en consecuencia se mantienen a futuro el interés vocacional. Estos tienen

clasificaciones, los cuales son: Realista, se caracteriza porque trabajan con máquinas u objetos;

Investigador, las cuales tienden a trabajar con ideas, son objetivos y analíticos; El artístico, los

cuales trabajan con ideas creativas, dejando volar su imaginación e innovación; Los sociales, son

personas serviciales y amistosas, que prefieren trabajar en un entorno social; El emprendedor, se

caracteriza por ejercer mando y liderazgo, así como también comunicación y por último, se

encuentra el convencional, que por lo general prefieren organizar y manejar datos, es decir,

ambientes en los cuales se requiere la sistematización de la información.

En quinto lugar se presenta a las habilidades, que según la autora lo define como: “la capacidad

de realizar con éxito una tarea. Mientras mejores sean las habilidades y éstas correspondan con

los intereses, se tendrá más probabilidades de éxito personal, académico y profesional. Las

habilidades son elementos que pueden desarrollarse, permitiéndole al ser humano la posibilidad

de mejorar” (p. 38, 2012).

Además, existen habilidades generales, como el razonamiento verbal o matemático, en los cuales

se forman conceptos o memoria, sin embargo, no son añadidas usualmente como relevantes,

puesto que se supone deben contar con tales habilidades, lo cual, suele poner en aprieto a los

profesionales a futuro.

En conclusión, podemos decir que las acciones previas observadas nos permiten organizar y

posteriormente programar asesorías pertinentes en el alumnado. Por ende, es importante el


proceso de la orientación vocacional, ya que previene la deserción, ya sea en la universidad o

instituto. De igual manera, se impulsa una sociedad desarrollada, puesto que los estudiantes, los

cuales serán futuros profesionales, realizaran su labor eficientemente, empleando su ingenio, su

pasión e interés por el área en el cual laboran, de este modo se verá reflejado tal ímpetu en el

desarrollo de la sociedad.

Bibliografía

Ascenzo Rouillon, Romina (2019). Programa de orientación vocacional. Lima. Recuperado de

https://repositorio.ulima.edu.pe/bitstream/handle/20.500.12724/8493/

Ascenzo_Rouillon_Romina.pdf?sequence=1&isAllowed=y

Guzmán Suárez, Diana Carolina (2012). Guía de orientación vocacional para estudiantes del

grado undécimo, de las instituciones educativas municipales de Facatativá. Bogotá.

Recuperado de

https://repository.unilibre.edu.co/bitstream/handle/10901/8548/1.PRELIMINARES.pdf

Monroy Romero, José Alberto (2004). Diagnóstico vocacional. Liberabit. Revista de Psicología,

núm. 10. Universidad de San Martín de Porres Lima, Perú. Recuperado de

https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=68601002

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