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Interfaz gráfica

El proceso de incluir tantas funciones en un solo programa generó un grave problema: cómo poner
todas estas posibilidades en manos del usuario, sin obligarlo a hacerse de un complejo manual o a tomar
un curso especializado. La solución vino con el uso de interfaces gráficas. La interfaz de usuario, o
interfaz gráfica de usuario, es la forma como aparecen en pantalla los comandos de un programa: por
medio de botones, colores, símbolos y ventanas.

La interfaz tiene dos principales "misiones": la primera es informar al usuario acerca de los elementos
que tiene a su disposición y para qué sirven, y la segunda es brindar la posibilidad de elegir entre las
distintas opciones.

Ahora revisemos brevemente la interfaz de un procesador de textos muy popular. Debemos hacer notar
que, dada la flexibilidad que existe para que el usuario "personalice" la interfaz, es decir distribuya a su
gusto los elementos que la componen, el ejemplo que usamos es sólo una posibilidad dentro de las
muchas para que aparezcan ordenados en la pantalla los elementos de la interfaz.
De manera sintética, la interfaz consiste en un área de trabajo rodeada por diferentes barras en las que
se encuentra dispuesta una buena cantidad de botones. En la parte superior tenemos la Barra de título
del programa, que nos indica el nombre del programa que utilizamos así como el del archivo con el que
estamos trabajando.

La Barra de menús está compuesta por botones que, al click, despliegan una oferta de funciones. Esta
"persiana" recibe el nombre de menú porque pone a nuestra disposición diversas opciones, entre las
que podemos elegir.

Al hacer click en alguno de los botones que componen la Barra de herramientas "estándar" se activa una
determinada función: pegar, cortar o copiar texto, imprimir, guardar, etcétera. El método para aplicar
una función consiste en bloquear la sección del texto que se quiere modificar y hacer click en el icono
correspondiente a la función deseada. La Barra de herramientas formato contiene funciones que
modifican las características de la fuente o tipo de letra con que está escrito el texto, así como el
tamaño y la alineación de los párrafos. Con las funciones agrupadas en esta barra también es posible
alterar el color del texto y subrayar palabras, como si usáramos un marcador fluorescente en una hoja
impresa.

Con la Barra de herramientas imagen el usuario puede controlar las características de las imágenes que
ha insertado en un texto: puede hacer que las columnas de palabras rodeen a las imágenes, que queden
detrás o delante de ellas o hacer semitransparente la imagen y colocarla como fondo de la página.

La Barra base de datos contiene funciones que permiten al usuario crear ficheros tan minuciosos como
quiera y posteriormente cruzar a su antojo la información contenida en ellos. Con las funciones
agrupadas en la Barra de herramientas Web el usuario puede armar sencillas páginas Web, listas para
ser publicadas en Internet. La Barra portapapeles contiene iconos correspondientes a archivos de trozos
de texto que el usuario ha cortado para luego pegar en otra parte. Las Reglas sirven para colocar objetos
en la página, alinear columnas de texto u otros elementos similares.

El área de trabajo es ese gran espacio en blanco en el que se muestra el avance y estado de nuestra
labor, y que nos brinda una idea precisa de cómo se verá nuestro texto una vez impreso. Una función
muy útil para los usuarios que no tienen mucha experiencia en el manejo de este tipo de software, es la
Ayuda a la que se puede recurrir en momentos difíciles mediante el planteamiento de preguntas con un
lenguaje sencillo acerca de cómo utilizar las distintas herramientas.

La Barra de avance horizontal sirve para movernos de derecha a izquierda y viceversa a lo largo del
documento que tenemos en pantalla, y además contiene algunos botones que nos ofrecen vistas
diferentes de nuestro trabajo.

En la Barra dibujo se encuentran los iconos de las funciones que permiten al usuario diseñar imágenes
más o menos complejas, además de esquemas, cuadros analíticos y organigramas, recursos todos ellos
cuya aplicación en las necesidades cotidianas del maestro es muy frecuente.

En la Barra de estado podemos localizar información tal como el número de páginas totales de nuestro
texto, la página en la que nos encontramos, la línea, la columna, etc. Finalmente, la Barra de estado no
corresponde al procesador de textos sino al sistema operativo: en ella se despliega información acerca
de los programas (incluyendo nuestro procesador), así como la hora y fechas actuales y otros datos que
van más allá de lo relativo a nuestro escrito.

Referencia

Valle Pérez, P. (2009). Interfaz Gráfica. Recuperada el 23 de octubre del 2010 del link:

http://www.mailxmail.com/curso-informatica-administracion-publica-3/interfaz-grafica

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