RESOLUCION DE UN CASO

DANIELA

MARIA ADRIANA MORENO VARGAS

ESTABLECIMIENTO DE HIPÓTESIS DE TRABAJO

Como miembros del EAP estamos en condiciones de abordar la participación de la

familia en los procesos educativos de la niña. Esto es fundamental porque en el
entorno familiar se pueden encontrar muchas explicaciones para el
comportamiento de la niña (su agresividad, su incapacidad para estarse quieta y
su distracción) y allí enfocar acciones para su intervención.

Igualmente trabajar con la maestra para buscar estrategias de comunicación y

acercamiento con la familia de la niña. Por difíciles que esto haya sido hasta el
momento, ella debe hacerlo porque necesitan colaborarse mutuamente si quieren
que la situación de la menor mejore. Es importante determinar si estos
comportamientos se están presentando en casa y en su entorno social. Si es así
es necesario descartar, con ayuda de un profesional, un posible diagnóstico de
TDAH. El DSM-5 (Manual Diagnóstico y Estadístico de Trastornos Mentales, 5ª.
Edición), indica que se debe analizar esta posibilidad si estas conductas se
presentan desde una edad temprana (antes de los 12 años), si son
desproporcionadas al compararlas con las de otros niños del grado, si no tienen
explicación por problemas médicos o psiquiátricos y si afectan al menos dos
ambientes distintos de la vida del niño. En este caso se cumplen estas
posibilidades.

PLAN DE TRABAJO

El papel de la familia es muy importante para que los niños desarrollen pautas
sociales y afectuosas. Es en este núcleo donde inicialmente se toman las bases
que determinan sus habilidades para ser miembro de una sociedad. Esto no se da
por el simple hecho de ser humano, sino en las relaciones que se entablen en
estos primeros años. En el núcleo familiar están los primeros referentes en este
aspecto del desarrollo social y en este sentido, la familia va más allá de los padres
del niño. Marcan este desarrollo los adultos con quienes se establecen vínculos.
Todos ellos son sus referentes para sus futuras pautas sociales y emocionales.
Recordemos que la imitación marca mucha de las actuaciones iniciales del niño.
Después de explorar este aspecto, se debe profundizar en las relaciones y
ambientes de aula y descartar alteraciones, como TDAH en este caso en
particular. Para esto es indispensable el apoyo de un profesional para evitar
diagnósticos errados. Se debe orientar a la familia o realizar las diligencias
pertinentes para la ubicación del personal adecuado para ello.

Para minimizar la problemática es necesario plantear una intervención multimodal,

orientado a las áreas cognitivo, conductual y afectiva. Para esto es indispensable
que se establezcan acuerdos de trabajo y comunicación entre la maestra y los
padres de la niña. Solo así se podrán implementar métodos que permitan superar
las dificultades, al identificar mancomunadamente los factores del ambiente y de
relación que influyen de manera directa en el niño. En todos estos aspectos y los
que se plantean a continuación, el psicopedagogo puede intervenir perfectamente,
sin causar traumatismo para ninguna de las partes interesadas.

Se deben identificar actividades y elementos que más llamen la atención de la

niña. Por ejemplo algún personaje televisivo, mascota o un animal en particular y
desarrollarle propuestas alrededor de ellos. Si le gustan los dinosaurios se podrían
desarrollar un proyecto de aula, vinculando a todos sus compañeros, alrededor de
esta temática y dándole a ella un papel central dentro del mismo. . Este proyecto o
cualquier, debe contar con el apoyo de los padres de familia o el entorno de la
estudiante, ya que les daría puntos comunes de comunicación necesarios para
mejorar su atención.

El hecho de ubicarla junto a un modelo positivo en el aula es muy importante, en

especial si le brinda la tranquilidad y seguridad que ella necesita. Mientras se
avanza en los procesos es necesario evitar que la niña esté cerca a compañeros
ruidosos o de comportamientos difíciles, ya que agudizan su agresividad y falta de
atención. Igual cuidado se debe tener en el entorno familiar.
OBJETIVO GENERAL

Mejorar el desarrollo social, afectivo y escolar de la niña mediante una

intervención en su entorno familiar y escolar, estableciendo canales de
comunicación entre sus padres y maestra para llegar a un proceso conjunto en el
plan de trabajo.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS:

-Indagar acerca del ambiente extraescolar de la menor, de la relación con los

padres, madre o responsables, de sus métodos educativos.

-Profundizar en el ambiente de aula y de las relaciones de la docente con los

padres de la niña.

-Establecer la relación que tienen los métodos educativos usados por padres,
madres y maestras con las actitudes de la niña.

-Buscar apoyo profesional para descartar un posible TDAH que esté afectando a
la menor en su desarrollo social, afectivo y escolar.

-Diseñar y aplicar una propuesta de orientación psicopedagógica para la niña, una

vez analizados todos los factores de incidencia planteados.