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El ordenamiento jurídico
1) La corriente racionalista.
Explica que un ordenamiento jurídico no puede ser sino una construcción
racional y sistemática del intelecto. Conecta con la corriente del Derecho natural
en el sentido de que pretende que la racionalidad productora del ordenamiento
no tiene que estar personificada, es decir, que es exterior a las personas pero
acorde con los principios de la naturaleza. De ahí que el ordenamiento no puede
ser imperfecto, y si lo fuera, es que no se han seguido las pautas de la naturaleza.
Según esta explicación, el ordenamiento jurídico plasmado en textos legales no
es producto de voluntades populares o generales, sino de las élites.
2) La corriente historicista.
Expresa que no son las élites, ni en general los grupos gobernantes o de poder,
los que producen el ordenamiento, sino que éste se va produciendo de manera
natural y espontánea por el pueblo, a través primero de la costumbre, por lo que
todo ordenamiento es originariamente Derecho consuetudinario.
3) La corriente ecléctica.
Postula que es verdad que la creación del ordenamiento se realiza por élites (de
gobernantes y de otras índoles que en su momento ejercen influencia en esta
cuestión) pero que con bastante frecuencia esa creación recoge el sentir del
pueblo, pues de lo contrario correría el peligro de estar condenado al fracaso, a
ser efímero, por no tener legitimidad ni apoyo de las mayorías, en la medida en
que no recoja sus sentimientos y aspiraciones y que no regule su verdadero
comportamiento.
No podía ser de otra manera, toda vez que la Constitución regula a grandes
rasgos la organización del Estado, además de los derechos fundamentales de las
personas.
Tema 2.
La norma jurídica
De manera que, acerca de un artículo de una ley, se puede afirmar que es una
norma, a la vez que la ley que contiene ese artículo es también una norma.
Puede ocurrir que no se entienda el significa de un artículo, o que ese artículo no
tenga sentido, sino en relación con otros dentro de la ley en que está inserto, o
incluso en relación con artículos de otras leyes; y ese conjunto de artículos
dentro de una o más leyes constituyen una norma.
Estructura y caracteres.
De manera que A se relaciona con los hechos y B con el Derecho. Como exponía
Kelsen, el Derecho es el ámbito del deber ser, de lo que debe ocurrir dados los
hechos. Sin embargo, de acuerdo al principio de legalidad, para garantizar la
seguridad jurídica y para hacer un ordenamiento jurídico inteligible, la norma
no establece la consecuencia jurídica sin haber establecido el hecho: no tendría
sentido que la norma estableciera los hechos sin establecer las consecuencias, o
que estableciera las consecuencias sin regular los hechos.
A tal efecto existe la distinción que se expondrá más adelante entre hecho, acto y
negocio jurídico: el hecho que deviene en jurídico (como el nacimiento y la
muerte) no depende de la voluntad de las personas, mientras que el acto
jurídico (como el matrimonio) sí; en tanto que el negocio jurídico es un acto con
el que se busca y obtiene determinado efecto de naturaleza jurídica.
El supuesto de hecho
La regulación sobre la realidad puede ser concomitante a los casos que son
objeto de regulación, pero es común que la regulación sobrevenga con
posteridad a la ocurrencia o repetición del objeto regulado.
Así, las “grandes leyes” sobre una materia, recogidas en compendios que
suelen llamarse códigos, son los ejemplos más significativos de las normas del
Derecho general, que con frecuencia suele llamarse Derecho común. El amplio
alcance material de las normas de Derecho general o común implica que se
dicte, a su vez, para todas las personas, sin distinción; por ejemplo, los códigos:
el Código Penal, el Código Civil, etcétera.
Las normas especiales son las que regulan una materia en particular, y
alcanzan a una determinada clase de personas.
Las normas rígidas o ius strictum (“de Derecho estricto”) no dejan margen
para su interpretación; o mejor dicho, deben entenderse literalmente, tal como
han sido escritas. Se dice que son taxativas. Así, cuando el Código Civil, art 312,
dice que el “hijo concebido durante el matrimonio se reputa hijo del marido”, no
admite mayor interpretación. A veces también se les llama normas de Derecho
estricto.
En el caso específico del artículo 238 del Código Procesal Penal, la Suprema
Corte de Justicia llama la atención sobre la necesidad de moderación de los
jueces al señalar que “en todo estado del procedimiento existe la posibilidad de
variar las medidas de coerción impuestas, pero esto es a condición de que surja,
real y concretamente, una variación de las condiciones y/o circunstancias que
originalmente se tomaron en cuenta al momento de dictarse la medida” 102. Ese
fragmento es una advertencia sobre la interpretación de la norma de manera
caprichosa cuando tal interpretación amerita ser fundamentada;
Normas que definen términos jurídicos o del lenguaje técnico para precisar
su significado, alcance o contenido.
Son normas de remisión, por ejemplo, las que establecen penas de prisión,
que van a remitirse al Código Penal para establecer la duración de la pena,
dependiendo de la modalidad de infracción, y al Código Procesal Penal para
establecer el procedimiento de imposición de la pena. Otro ejemplo: los
embargos están detallados en el Código de Procedimiento Civil, así que una
norma especial, en vez de repetir un procedimiento de embargo (a menos que se
trate de un embargo especial creado para esa materia), remite al que ya existe,
lo que ahorra duplicación de procedimientos, de esfuerzos y de recursos legales.
En ese caso, el derecho común está constituido por la norma (una o varias)
que perfeccionan y agotan el contenido del procedimiento de la tercería y el de
la casación, que para este caso, como ha dicho la Suprema Corte de Justicia, “lo
constituye el conjunto de disposiciones” de la Ley “3726, del 29 de diciembre de
1953, y sus modificaciones, sobre Procedimiento de Casación” 104.
Normas de Derecho común, que son las que tienen vigencia en todo el
territorio de un Estado, por ejemplo las leyes que emanan del Congreso; y
Normas de Derecho particular, que rigen una parte del territorio, como es el
caso de las ordenanzas municipales, que son normas de los ayuntamientos con
vigencia únicamente para la jurisdicción municipal.
Sin embargo, como señala Lumia, precepto y sanción son “los aspectos
complementarios de una misma norma”. En realidad, son las dos caras de una
misma moneda: no puede haber un mandato por cuyo incumplimiento no se
establezca una sanción, ni puede ordenarse una sanción sin especificar un
mandato. A veces precepto y sanción aparecen en artículos distintos de una
misma ley, o en leyes diferentes; y a veces en el mismo artículo. Así, el Código
Penal dice: “El que voluntariamente mata a otro, se hace reo de homicidio” 109, y
en artículos posteriores entra en detalles sobre las penas imponibles por
homicidio.
Por ejemplo, las empresas, como personas jurídicas, son ficciones que deben
su existencia a las leyes que regulan la materia. La premoriencia y la
conmoriencia también son ficciones jurídicas, que el legislador toma como
referencia para regular derechos sucesorios. Entre
Las normas especiales son las que regulan una materia en particular, y
alcanzan a una determinada clase de personas.
Las normas rígidas o ius strictum (“de Derecho estricto”) no dejan margen
para su interpretación; o mejor dicho, deben entenderse literalmente, tal como
han sido escritas. Se dice que son taxativas. Así, cuando el Código Civil, art 312,
dice que el “hijo concebido durante el matrimonio se reputa hijo del marido”, no
admite mayor interpretación. A veces también se les llama normas de Derecho
estricto.
Normas que definen términos jurídicos o del lenguaje técnico para precisar
su significado, alcance o contenido.
Leges imperfectae, que son aquellas que, sin penalizar al sujeto ni anular el
acto violatorio, contienen cláusulas para evitar su incumplimiento, como la
anulabilidad o la rescisión del acto.
Normas de Derecho común, que son las que tienen vigencia en todo el
territorio de un Estado, por ejemplo las leyes que emanan del Congreso; y
Normas de Derecho particular, que rigen una parte del territorio, como es
el caso de las ordenanzas municipales, que son normas de los ayuntamientos
con vigencia únicamente para la jurisdicción municipal.
La CD 2010 plantea las pautas generales de los estados de excepción, que el art
262 define como “aquellas situaciones extraordinarias que afecten gravemente
la seguridad de la Nación, de las instituciones y de las personas”, “frente a las
cuales resultan insuficientes las facultades ordinarias”.
Por ejemplo, las empresas, como personas jurídicas, son ficciones que deben su
existencia a las leyes que regulan la materia. La premoriencia y la conmoriencia
también son ficciones jurídicas, que el legislador toma como referencia para
regular derechos sucesorios. Entre
Tan pronto como una norma o ley es publicada se vuelve exigible a toda la
sociedad, no pudiendo en ningún caso excusarse su incumplimiento. La
ignorancia nunca podrá ser alegada como razón justificativa del incumplimiento
de la norma jurídica, pero sí podría ser tenida en cuenta para determinar la
eficacia de dichos actos o no.
El error de derecho: Consiste en la interpretación equivocada de una regla
jurídica: “Se le da un significado, un alcance, un fin, un contenido, un objeto
distinto al que en sí entraña”.
Las normas imperativas y prohibitivas que no pueden ser derogadas por las
convenciones entre particulares. Esto así, en razón de que tienen su fundamento
en el Orden Público, es decir, en el interés común o colectivo (Art. 6 del C.
Civil). Las normas imperativas y prohibitivas se encuentran sobre todo en la
Constitución de la República y en el Derecho Penal y son obligatorias en virtud
de su propia naturaleza.
El fraude a la ley consiste en burlar la ley que debe regir las situaciones
jurídicas. El fraude es la negación de derecho, disfrazando la realidad de una
situación jurídica. Este tipo de actuación está inspirada en preservar un interés
personal, obtener un beneficio ilícito o descargarse de una obligación que
incumbe normalmente, a burlar una norma fiscal.
La derogación tácita.
El principio de irretroactividad
Del mismo modo, dispone el artículo 2 del Código Civil Dominicano, que la ley
no dispone, sino para el porvenir; no tiene efecto retroactivo.
En su aspecto formal, las fuentes del Derecho son las formas que éste adopta
para exteriorizarse: la Constitución, las leyes adjetivas, los Principios Generales
del Derecho, la costumbre, la jurisprudencia constitucional o la doctrina.
Las directas crean Derecho propia y directamente, vg, las normas jurídicas
(Constitución, leyes, etc.) y la costumbre. Las fuentes indirectas ayudan a crear
Derecho, a explicarlo, interpretarlo y comprenderlo, vg, la jurisprudencia, la
doctrina, la analogía y la equidad.
Las leyes positivas son fuentes escritas. Los Principios Generales del Derecho y
la costumbre suelen ser fuentes no escritas.
Según los criterios clásicos, las fuentes del Derecho son: los Principios
Generales del Derecho y, o, la Constitución como inspiradores del ordenamiento
jurídico; seguidos por las leyes positivas (leyes, decretos, reglamentos,
resoluciones y ordenanzas), la costumbre, la jurisprudencia y la doctrina.
1. 1ra. Etapa: Del 1845 al 1855, mediante decreto se dispuso, que todos los
tribunales de la República agregaran a esa legislación (Francesa) sus
actos y decisiones, siempre que no se opongan a la ley fundamental ni a
las leyes dominicanas en vigor, sin que puedan valerse de otra
disposición.
2. 2da. Etapa: Del 1855 al 1861, mediante decreto se autoriza la traducción
de los Códigos Franceses, pudiendo éstos hacer modificaciones para
acomodarlos a las necesidades, usos y conveniencias del país, en armonía
con nuestros principios institucionales.
3. 3ra. Etapa: 1861 al 1865. Se inicia con los Reales Decretos, mediante los
cuales se implanta de nuevo el sistema español, excepto la legislación
civil.
4. 4ta. Etapa: del 1865 al 1884. Se autoriza y ordena la traducción de todos
los códigos franceses y que se hagan las enmiendas necesarias para su
adaptación al medio dominicano.
Esta última etapa termina o cierra con los decretos del año 1884, en que se
promulgan los llamados Códigos Dominicanos. Posteriormente en 1983, el
Presidente de la República, con motivo del centenario de la adopción de los
códigos franceses en nuestro país, dispuso la actualización de los referidos
códigos.
Constitución es la ley suprema del Estado, como norma jurídica incide sobre la
marcha de todo proceso judicial, tomando pautas o normas de procedimiento, y
como fuente del derecho es la fuente primaria de donde parten las demás leyes y
sin nunca contradecirlas.
Por otra parte, la Ley es una de las más ricas e importantes fuentes del derecho,
podemos definirlas como el acto votado por las cámaras legislativas y
promulgada por el Presidente de la República, que se impone al libre albedrío
de los hombres, indicándoles lo que debe ser, en que forma deben obrar para
conseguir una conducta recta. Surge como producto de un proceso por medio
del cual uno o varios órganos del Estado formulan, llevan a discusión de estudio,
discuten, aprueban y promulgan determinadas normas jurídicas de observación
general a las que se les da el nombre de Ley.
Con motivo de cada juicio, los tribunales pronuncian, con ese fin, resoluciones
motivadas, cuyo conjunto constituye la jurisprudencia. Es por esto que
entendemos que la jurisprudencia es una fuente de derecho de importancia
considerable.
Se dice, del mismo modo, que la costumbre es un uso que se convierte en regla
de derecho, generalizándose poco a poco, y porque el ambiente social, la
conciencia popular, llegan a considerarla como obligatoria.
Tienen como fin que los jueces tengan plena libertad para resolver un juicio en
el que no hay ley ni costumbre aplicable. Son los principios básicos que inspiran
todo nuestro ordenamiento jurídico.
Se denomina doctrina a las opiniones emitidas por los juristas, en sus respectivos
trabajos u obras. La doctrina, a diferencia del código, de las leyes, de la costumbre y de
la jurisprudencia, no es una fuente directa del Derecho, pero puede ser una fuente
indirecta.
Desde el punto de vista jurídico, la doctrina es en gran medida, medio creador del
derecho. Ella orienta, guía, pues recoge el fruto del material de experiencia y la
investigación, para ofrecer una serie de ideas tendentes a darle dirección formal.
Hoy día la doctrina no representa sino un papel indirecto en la creación de las reglas
jurídicas. Esto así, porque jamás la opinión de un autor se impone a los tribunales.
Tema 5.
La Ley.
En sentido amplio, la ley significa toda regla social obligatoria establecida por
una autoridad competente que se impone al libre albedrío de los hombres,
indicándole lo que debe ser, en qué forma deben obrar para conseguir una
conducta recta.
Según el principio de reserva de ley, solo pueden ser contenidos de las leyes los
siguientes:
1. La regulación de una libertad;
2. La creación de delitos y sus penas;
3. El establecimiento de impuestos y contribuciones;
4. La creación de una jurisdicción o de órganos jurisdiccionales.
Se lleva a cabo una primera discusión artículo por artículo, fase por fase, el cual
es votado después. Luego de aprobarse en primera lectura debe mediar un día
para la segunda discusión y en la segunda discusión se lleva a cabo de igual
manera que la anterior y es votado. Una vez aprobado el proyecto de ley deberá
ser remitido a la otra cámara, la cual se denominará cámara revisora. Sí esta
cámara le hiciere revisiones, se devolverá el proyecto con las modificaciones a la
cámara principal en la que se introdujo el proyecto de ley.
La observación: El Jefe de Estado esta facultado para observar las leyes que le
son remitidas por el Congreso para fines de promulgación y publicación.
Este derecho de observación debe ejercerse en los ocho (8) días siguientes a la
recepción del proyecto de ley que el congreso ha remitido, que es el mismo plazo
que dispone para su promulgación, plazo éste que se reduce a tres (3) días
cuando el proyecto de ley es declarado de urgencia.
El artículo 1 del Código Civil dispone que las leyes se reputan como conocidas en
el Distrito Nacional, al día siguiente de su promulgación y en el resto del país al
segundo día.
Tema 6.
Teoría de la interpretación. La aplicación e interpretación de las normas
jurídicas. La interpretación analógica. La equidad. La exégesis. La dogmática
y la crítica.
El artículo 4 del Código Civil obliga a los jueces a interpretar las leyes,
facultando a la Suprema Corte de Justicia a mantener la unidad de tales
interpretaciones mediante los fallos que producen en vista de los recursos que
las partes interponen.
6.3 La equidad.
Podemos definirla como una cualidad que consiste en tratar con imparcialidad a
las personas, dando a cada una según sus meritos.
Propensión a juzgar y actuar dando más importancia a la conciencia y al sentido
del deber que a la estricta aplicación de la Ley. Justicia natural, por oposición a
la justicia legal.
Es la aplicación del derecho por parte del Juez, especialmente en los casos de
insuficiencia u oscuridad de la ley.
6.4 La Exégesis.
Predominó en Francia durante el Siglo XIX. Creía que todo el derecho había
quedado encerrado en los Códigos Napoleónicos y que estos eran suficientes
para resolver cualquier controversia.
6.5 La Dogmática.
El dogmatismo es entendido como una "creencia" respecto de un conjunto de
proposiciones que se tienen por principios innegables en una ciencia.
Características:
El derecho se reduce a la ley;
El conocimiento con sentido estricto era el jurídico;
Suponía que el derecho era completo, exhaustivo, coherente, que
no dejaba lagunas. Se decía que los códigos no dejaban nada al
arbitrio del intérprete;
Reducía la tarea del Juez a la aplicación de un silogismo jurídico
deductivo en el que la premisa mayor era la ley, la premisa menor
el hecho y la conclusión las consecuencias dispuestas en la misma
ley.
6.6 La Crítica.
La crítica del derecho se propone su reforma con el fin de hacerlo más adecuado
y aceptable. La crítica del derecho no se detiene en esa comprensión del sentido,
sino que busca descubrir los orígenes y las funciones sociales de las normas más
allá de lo que ellas mismas dicen, y procede abiertamente a su valoración una
vez desvelada su relación con ese ámbito social del que surgen y en el que
operan. Los métodos y técnicas con los que la crítica obtiene sus conclusiones
incluyen también, junto con el razonamiento objetivo, un reproche tendente a
descalificar la obra del legislador con más o menos amplitud e intensidad. La
critica del derecho se presenta como ciencia jurídica porque intenta comprender
el derecho y explicarlo, pero va más allá de lo que constituye una actividad de
conocimiento de sentido estricto, ya que incluye una toma de posición ante el
derecho basada en valores, que requiere una justificación que no puede ser
obtenida del objeto cuyo contenido intenta conocer.
Una concepción del derecho viene a ser una respuesta articulada, a todas, o gran
parte de las siguientes cuestiones: “porque existe el Derecho, en que medida
consiste en normas, que relación guarda con el poder o con la moral, para que
sirve, que funciones sociales cumple, como debería ser, que objetivos y valores
deben- y pueden- alcanzarse con el, como puede conocerse y de que manera ha
de constituirse una ciencia jurídica, hasta que punto consiste el Derecho en una
actividad argumentativa; y en consecuencia, un sentido del Derecho.
La expresión sentido puede entenderse aquí en dos formas distintas: una cosa es
que el Derecho sea un fenómeno que se pueda explicar y, por tanto entender,
como cualquier otra realidad natural o social; y otra que se trate de una realidad
valiosa, que la existencia del Derecho- o de cierto tipo de derecho- esté
justificado.
Para entender las diferentes concepciones del Derecho hay que estudiar los dos
sistemas de Derecho:
-el Derecho Europeo o Civil Law: el Derecho suele verse la perspectiva del
legislador- el Derecho es sobre todo Derecho legislado.
-el Anglosajón o Common law: tienden a realizar la figura del juez y el
carácter comunitario.
7.4 Positivismo.
Entendía que:
Las ciencias jurídicas solo deben dedicarse al estudio de las leyes
positivas con exclusión de cualquier otra disciplina sin preocuparse si son
buenas o malas.
La ciencia jurídica debe concentrarse en la elaboración y sistematización
de conceptos.
Ataca el derecho natural y separa de manera enfática el derecho de la
moral o de toda consideración metaempírica.
El derecho debe ocuparse de lo que es y no de lo que debe ser.
7.6 El Escepticismo.
Esta corriente establecía que para el derecho poseer una autoridad y poder
exigir fidelidad y obediencia, debía contener aunque fuera minimamente, un
contenido moral.
Atribuye el fundamento de la regla del derecho a la esencia del ser humano, por
su condición de ser racional, por su instinto de preservación. La conciencia de
los individuos se ajusta a las exigencias de la naturaleza, la justicia y la razón.
Por lo que existe una justicia natural que reside en la naturaleza misma de las
cosas y que es revelada al hombre por su razón.