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ELIZABETH ELVIRA CALZADA ALVAREZ

VS.
OSCAR HERNANDEZ SANCHEZ
EXPEDIENTE: 177/2019
JUICIO: CONTROVERSIA SOBRE EL
ESTADO CIVIL DE LAS PERSONAS Y EL
DERECHO FAMILIA
SECRETARÍA: SEGUNDA
INCIDENTE DE PAGO DE PENSIONES
ALIMENTICIAS

C. JUEZ SEGUNDO FAMILIAR DEL DISTRITO JUDICIAL DE CUAHUTITLAN CON


RESIDENCIA EN CUAHUTITLAN IZCALLI ESTADO DE MÉXICO.

PRESENTE

OSCAR HERNANDEZ SANCHEZ, por mi propio derecho,


señalando domicilio para oír y recibir notificaciones el ubicado en Cerrada
Bugambilia 31, Colonia Hacienda de la Luz, C.P. 52929, Atizapán de Zaragoza,
Estado de México, autorizando para que a mi nombre y representación las reciban
los CC. Guillermo Antonio Morales Flores, José Luis Sánchez Araoz y Alfredo Juárez
Castañeda, ante usted con el debido respeto comparezco para exponer:

Que, en cumplimiento a la vista que me fuera dada mediante


auto de fecha 7 de octubre del año en curso, por medio del presente escrito, y estando en
debidos tiempos y forma vengo a dar contestación a los agravios expresados por mi
contrario, para lo cual paso a manifestar lo siguiente:

Antes de dar contestación a los infundados agravios manifiesto


a esta autoridad superior lo siguiente:

Conforme al articulo1.138 del código de procedimientos civiles,


corresponde al juzgador la dirección del proceso en los términos siguientes:

Artículo 1.138.- La dirección del proceso está confiada


al Juez, el que la ejercerá de acuerdo con las
disposiciones de este Código; deberá tomar las
medidas que ordena la ley para prevenir y, en su caso,
sancionar cualquier actividad u omisión con la finalidad
de impedir el fraude procesal, la colusión y las
conductas ilícitas o dilatorias.

Por otro lado, los artículos 1.97 y 1.98 del propio código
sustantivo civil establecen lo siguiente:

Artículo 1.97.- Las promociones y actuaciones


judiciales deberán firmarse por quienes las realizan.
Las partes si no saben escribir o no pueden firmar,
imprimirán su huella.

Artículo 1.98.- No se dará curso a las promociones que


carezcan de firma o huella del interesado.

Ahora bien, como se desprende de todas y cada una de las


actuaciones en que se encuentran escritos firmados por el actor de nombre OSCAR
ARTURO HERNANDEZ CALZADA cada uno de dichos escritos tiene una firma
completamente diferente a la que calza la promoción numero 18898 mediante la cual
supuestamente interpone el recurso de apelación que fuera admitido en el auto de 7 de
octubre del año en curso.

Cabe señalar que dichas firmas al ser completamente


diferentes, y cuya diferencia al ser palpable no requiere de peritajes especiales si no que
el juzgador debió detectar la diferencia manifiesta, y consecuentemente debió reservar el
acuerdo requiriendo al C. OSCAR ARTURO HERNANDEZ CALZADA a efecto de que se
presentara al juzgado con la finalidad de ratificar el contenido y firma de la promoción
18898 presentada el día 6 de octubre del 2022, apercibiendo a dicha persona de que para
el caso de que no lo hiciera se desecharía su promoción y no se daría curso a la misma
en términos del artículo 1.98 antes mencionado.

Consecuentemente y toda vez que dicho juzgador


no lo realizo, violando las disposiciones antes anotadas, solicito a esta
H. Sala que ante la notoria diferencia de las firmas que calzan los
escritos presentados por el actor, así como la firma asentada en la
razón de fecha 23 de mayo del 2022 y en la audiencia de juicio del
expediente del cual emana la apelación que hoy se contesta en relación
con la firma que calza el escrito de apelación presentado con fecha 6 de
octubre del año en curso, se requiera al supuesto apelante a efecto de
que comparezca ante esta H. Sala a efecto de que ratifique el contenido
y firma del escrito de apelación con el apercibimiento de que en caso de
no hacerlo se tendrá por no puesto el mismo y no se dará curso al
escrito de referencia.

Así mismo y para el caso de que esta superioridad no considere


necesaria la ratificación solicitada y reservándome el derecho para impugnar tal decisión
paso a dar contestación a los supuestos agravios formulados por el supuesto apelante:

PRIMERO.-Debe declarase infundado e inoperante el presente agravio en atención a


que la sentencia impugnada se encuentra debidamente fundada y motivada, toda vez que
como se desprende de la simple lectura de los autos del expediente del cual emana la
sentencia recurrida se desprende un escrito suscrito por el hoy apelante medicínate el cual
refiere de manera concreta que “ hago mías las prestaciones reclamadas por mi señora
madre cuando aun ejercía mi representación”, sin embargo es claro que cuando se
presentó la demanda por la progenitora del apelante esta ya no ejercía su representación
por lo que es claro que no se refería a las prestaciones reclamadas en el presente
incidente.

Así mismo tampoco ratifico la plantilla de adeudo, luego entonces es claro que no existió
materia para condenar al suscrito al pago de cantidades que jamás fueron reclamadas por
quien tenía derecho para ello.

Ahora bien también es claro y de explorado derecho que los alimentos deben ser
proporcionales a la necesidad de quien debe recibirlos y a la capacidad de quien debe
otorgaros, consecuentemente resulta claro que quedo debidamente acreditado que el
suscrito siempre estuvo al pendiente y cumplió con la satisfacción de las necesidades
alimentarias de mi hijo como quedo comprobado con la prueba confesional que
concatenada con la testimonial y la falta de ratificación del pliego de adeudo presentado
por su progenitora, por lo que resulta falso que se hayan violentado las disposiciones
legales que argumenta dicho apelante.

Por lo anterior y toda vez que quedo debidamente acreditado que el suscrito siempre
cumplió con su obligación alimentaria que jamás deje en el desamparo a mi entonces
menor hijo resulta infundado e inoperante el presente agravio.

SEGUNDO.-este segundo agravio también debe declarase infundado e inoperante en


atención a que las manifestaciones realizadas por el apelante carecen de fundamento
legal alguno ya que en la audiencia de juicio incidental dicho apelante confeso que el
suscrito siempre he estado al pendiente de sus necesidades económicas
proporcionándole diversa cantidades de las cuales jamás ha dado recibo alguno, por lo
que al no haber señalado ni ratificado la planilla de supuesto adeudo presentado por su
progenitora es claro que no se puede acreditar adeudo alguno que tenga el suscrito;
Maxime que al dar contestación a la demanda incidental el suscrito manifesté oposición a
dicha planilla manifestando que no existía adeudo alguno ya que siempre cumplí con mi
obligación alimentaria e incluso tuve viviendo en mi domicilio a mi hijo por largos periodos
de tiempo e incluso en mi domicilio el tenia una recamara que ocupaba cuando se
quedaba vivir con el suscrito, contestación con la que se dio vista al apelante sin que
contestara nada al respecto por lo que se tuvo por rebelde y por perdido su derecho para
realizar manifestación posterior, por lo que es de considerar que al no existir oposición se
tiene por cierto lo manifestado por el suscrito, lo cual concatenado con el resultado de la
prueba confesional a cargo del apelante así como con la testimonial propuesta por el
suscrito quedo debidamente acreditado que no existía ningún adeudo de parte del suscrito
en favor de mi hijo de nombre OSCAR ARTURO HERNANDEZ CALZADA.

Así mismo es de considerar que como lo mencione en mi escrito de contestación a la


incidencia al perder mi trabajo y cambiar mis posibilidades económicas acorde con mi hijo
que entonces contaba con 17 años de edad y ya era capaz de comprender la situación, de
proporcionarle de manera directa las cantidades necesarias para solventar sus
necesidades económicas lo cual vine realizando hasta la fecha en que dejo de estudiar,
luego entonces es de presumir que si durante todo ese tempo no manifestó rechazo
alguno a esa forma de ministrar la pensión alimenticia es claro que el convenio se estaba
cumpliendo en sus términos, sin embargo resulta particularmente extraño que es hasta
que ya había cumplido la mayoría de edad y cuando ya no estaba dedicado al estudio, es
que su progenitora procede a demandar pensiones caídas es decir cando esta ya no tenía
la legitimación para representarlo, e incluso esta apelación se formula con un escrito con
una firma totalmente distinta a la de mi hijo que es el actor y hasta el último momento, lo
cual no debe pasar desapercibido para esta superioridad.

Por todo lo anterior es claro que este supuesto agravio debe declarase infundado e
inoperante.

TERCERO.-debe declarase infundado e inoperante el presente agravio en atención a


que nuevamente se refiere de manera infundada que no se cumplió con el convenio, sin
embrago es claro que al no haber dado contestación a la vista que le fuera dada al actor
con la contestación a la coincidencia así como la oposición a la planilla de adeudo resulta
claro que quedo acreditado que el suscrito cumplió con su obligación alimentaria en los
términos pactados al quedarme sin trabajo situación que jamás fue controvertida por el
actor confesando incluso que siempre estuve al pendiente de sus necesidades
económicas entregándole diversas cantidades de las cuales no otorgo ningún recibo por lo
que al haber confesado que recibió diversas cantidades y al no haber señalado realmente
un adeudo resulta acreditado que al haber entregado diversas cantidades de dinero al
actor para la satisfacción de sus necesidades económicas no es posible ni seria legal que
se condenara al suscrito al pago de cantidad alguna ya que entonces se me estaría
condenado a un doble pago; Sin soslayar que durante todo el tiempo que duro esta forma
de solventar mi obligación alimentaria jamás hubo reclamo alguno por parte de la
progenitora de mi menor hijo ni por parte de este como se encuentra perfectamente
acreditado en autos.

Consecuentemente resulta procedente declarar infundado e inoperante el presente


agravio.
CUARTO.-por lo que hace a este último agravio también debe declarase infundado e
inoperante, en atención a que si bien los alimentos tiene la finalidad como lo dice el
apelante de salvaguardar la supervivencia de quien no está en posibilidad de allegarse por
sus propios medios es claro que en la secuela procesal del presente incidente quedo
debidamente acreditado que mi hijo hoy supuesto apelante jamás quedo desprotegido,
Maxime que en ninguna parte de sus escritos refiere tal situación, y en contrasentido si
confeso que el suscrito siempre estuvo al pendiente de sus necesidades económicas por
lo que sus manifestación resultan totalmente inaplicables al presente caso.

Ahora bien también resulta claro que aun cuando los alimentos son irrenunciable
imprescriptibles e intransigibles es claro que ninguna de estas hipótesis se da en el
presente juicio toda vez que simplemente al quedar sin trabajo el suscrito es que cambio la
forma de ministrar los alimentos pero nuca se convino en que no se pagaran tan es así
que quedo debidamente acreditado que jamás deje de atender las necesidades de mi
entonces menor hijo.

En este caso cabe señalar lo que establece el artículo 4.138 párrafo 6 del código
sustantivo civil para el estado de México que establece que los alimentos determinados
por convenio o sentencia se modificaran de acuerdo a los ingresos del deudor alimentario,
por lo que la forma en que se cubrió la pensión alimenticia a mi entonces menor hijo se
encuentra sustentada en lo referido en dicho artículo.

Por todo lo anterior es que procede se declaren infundados e inoperantes los agravios
expresados por el apelante y consecuentemente se confirme la sentencia recurrida.

Por lo anteriormente expuesto y fundado;

A USTED C. JUEZ. - Atentamente pido se sirva:

PRIMERO. - Tenerme por presentado en los términos el presente


escrito dando contestación en debidos tiempo y forma a los agravios formulados por mi
contrario.

SEGUNDO. – Acordar de conformidad lo solicitado por resultar


procedente conforme a derecho.

Cuautitlán Izcalli Estado de México a 13 de octubre del año 2022

PROTESTO LO NECESARIO

OSCAR HERNANDEZ SANCHEZ

Abogado patrono.
Lic. Guillermo Antonio Morales Flores.
Ced. Prof. 1167677

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