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Una de las grandes metas en la vida es lograr la paz mental. La gente no la ve como una
meta importante dentro de sus vidas y si lo hace, no se da el tiempo para entender lo que
se interpone entre ello y su paz mental.
Ya hablamos de patrones de hábitos negativos; el temor al fracaso, rechazo, sensación
de inadaptabilidad, falta de mérito, de no merecer, sentimientos de culpa, etc. que nos
roban la paz mental.
Imaginación negativa
Es algo que creamos en nosotros mismos y que al mismo tiempo nos causa una enorme
cantidad de estrés y desesperación. Crea “Temor”, es decir, experiencias de fantasías
que parecen reales, son experiencias que creamos en nuestra mente e imaginación y
vivimos con ellas y mientras más vivimos con ellas más se vuelven reales.
Preocupación
Forma sostenida de temor causada por la indecisión, significa que cuando tomamos
decisiones nos deshacemos de la preocupación. En un estudio:
40% de las preocupaciones era por cosas que nunca habían pasado. Ej. Nunca iban a
llegar tarde, no los habían echado del trabajo, no iban a funcionar bien en una relación.
30% Cosas que habían ocurrido en el pasado. Ya había pasado, no puede hacerse nada al
respecto.
12% Por la salud.
10% Triviales.
8% Sustancial.
Casi un 96% de todo los que nos preocupa o más es irrelevante.
Una vez que hacemos esto la mayoría del estrés o la desesperación desaparece, su
mente se aclara y podrá enfrentar el problema de forma efectiva.
¿Cuál es el antídoto de la preocupación?
Actuar con un propósito. Cualquier cosa que lo lleve a actuar firme y con un propósito
eliminará la preocupación por la ley de sustitución: No puede estar pensando y actuando
en un problema o situación. La preocupación surge cuando se tiene demasiado tiempos
el problema en las manos. Es una forma de establecimiento negativo de metas.
Ley de concentración: Lo que siembras cosecharás.
Cuando hay algo que le preocupa, lo que se encuentra haciendo es pensando, hablando,
cosechando, imaginando vívidamente exactamente lo que no quiere. Atraerá a su vida a
las personas y las circunstancias que van de acuerdo con sus pensamientos dominantes.
Es un buen método para tomar decisiones. La primera pregunta que debe hacerse cuando
ya lo haya analizado es ¿Qué es lo peor que podría pasar? Y asegurarnos de que lo peor
no pasara.
Así que tome la decisión AHORA de que va a eliminar la preocupación, las experiencias
fantásticas que parecen reales, que va a aceptar el peor desenlace posible que pueda
ocurrir y luego ocuparse y hacer todo lo posible para tomar una actitud constructiva,
para eliminar la situación preocupante y desecharla.
Esta es la clave para eliminar el final de las emociones negativas.
Un hombre lleva consigo el éxito o su fracaso, no depende de condiciones externas.