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OBLIGACIONES
•El comprador, si fuere perturbado en la posesión o hubiere motivo justificado para temer que lo será, podrá el
juez autorizarlo para retener la parte del precio que baste a cubrir la responsabilidad del vendedor, salvo que
Art. 1828 y
1829 éste haga cesar la perturbación o garantice el saneamiento
•El comprador, quien tiene derecho a retener el precio mientras se le demora la entrega de la cosa.
Art. 1832
•El comodatario, quien no puede retener la cosa en seguridad ni en compensación de lo que le debe al
comodante, pero si la duda procede de gastos extraordinarios e indispensables en beneficio de la misma,
Art. 1971 podrá retener en calidad de depósito mientras no se haga el pago.
•El depositario, quien podrá retener la cosa depositada mientras no se le hayan pagado o garantizado los
Art. 1982
gastos o los daños y perjuicios.
•El constructor de una obra mueble, quien tienen el derecho de retenerla mientras no se le pague.
Art. 2026
Cláusula de indemnización:
Según Brañas, la cláusula de indemnización tradicionalmente ha sido
denominada cláusula penal.
En el derecho romano, se le dio origen y fue considerada como una
estipulación (obligación accesoria), que establece una indemnización,
como pena, si el deudor incumplía, adicional al resarcimiento de los
daños.
Su objeto es crear un incentivo para el debido y oportuno cumplimiento
de la obligación, y precisar anticipadamente la indemnización de los
daños si el deudor incumple, según criterio posterior de la jurisprudencia
romana, que diluía el criterio de la pena adicional.
El Artículo 1436 C.C. establece: “las partes pueden fijar anticipadamente
una cantidad que deberá pagar el que deje de cumplir la obligación, o
no la cumpla de la manera convenida, o retarde su cumplimiento; la
cual en tales casos, compensa los daños y perjuicios”.
Fianza:
El Código Civil la regula como contrato Artículos del 2100 al
2120.
La fianza es estudiada como un contrato especial de garantía,
el Artículo 2100 C.C. lo regula: Por el contrato de fianza una
persona se compromete a responder por las obligaciones de
otras.
El fiador puede estipular con el deudor una remuneración por
el servicio que le presta.
La fianza puede ser total, cuando el fiador se compromete a
afianzar el total del valor de la obligación; y puede ser parcial,
cuando el deudor se compromete a afianzar únicamente una
parte de la obligación.
Acción subrogatoria u oblicua:
Según Brañas, esta acción surge cuando la ley faculta al acreedor a
ejercitar ciertas acciones en razón de la conducta del deudor,
tendiente a no incrementar con ciertos bienes que por inactividad de
él, podrían no llegar a su patrimonio, en perjuicio del acreedor.
La acción subrogatoria u oblicua, según algunos civilistas tiene su
fundamento sustantivo en la prenda general patrimonial (Artículo
1329 C.C.), todos los bienes enajenables del deudor están
potencialmente afectados al cumplimiento de la obligación que este
contraiga.
El criterio aceptado por la legislación guatemalteca es el principio de
sustitución procesal (un tercero haciendo efectivo un derecho del
que no es titular).
Acción revocatoria o pauliana:
Es la facultad que la ley le concede al acreedor y que tiene por objeto
procurar y lograr la revocación de los negocios jurídicos realizados por el
deudor con el propósito de reducir sustancialmente su patrimonio a tal
manera que el acreedor no pueda hacer efectiva la prestación a que tenga
derecho.
Esta disminución en el patrimonio por parte del deudor debe de realizarla el
sujeto pasivo, con el propósito de lesionar los legítimos intereses del acreedor,
y como mecanismo de protección hacia este último, la ley le concede la
facultad de intervenir directamente a efecto de reintegrar al patrimonio del
deudor los bienes que habrían salido del mismo, en la forma que el sujeto
activo consideraba como perjudicial y fraudulenta para su persona.
La acción revocatoria o pauliana tuvo su origen en el derecho romano; en el
cual se conocía una especie de síndico, en representación de los acreedores,
la acción pauliana, para revocar los actos que fraudulentamente hubiere
ejecutado el deudor originando su insolvencia.
Rojina Villegas considera que si el deudor ejecuta un acto en fraude
de acreedores, cuando lleva a cabo una enajenación o renuncia de
derechos, que provoque o aumente su insolvencia, y por
consiguiente, perjudica al acreedor; este tiene el derecho de pedir la
nulidad del acto ejecutado por el deudor, que origino su insolvencia
y lo perjudica.
El Artículo 1290 C.C. establece que el acreedor puede pedir la
revocación de los negocios celebrados por el deudor en perjuicio o
fraude de sus derechos.
El Artículo 1291 determina lo referente a los negocios que realice el
deudor insolvente o reducido a la insolvencia a consecuencia de
estos negocios.
El Artículo 1292 regula lo referente a los negocios onerosos que realice
el deudor en donde se establece que el acreedor podrá exigir su
revocación cuando exista mala fe por parte de ambos contratantes.
El Artículo 1293 C.C. establece que procede la revocación tanto en
negocios en que el deudor enajena los bienes que efectivamente
posee, como la renuncia de derechos constituidos a su favor.
El Artículo 1294 C.C. establece los principios generales de la
revocación, los cuales son:
1. Solo pueden ejercitar la acción revocatoria los acreedores cuyos
créditos sean anteriores al negocio impugnado (Artículo 1290 última
parte)
2. Dicha acción debe seguirse a instancia del acreedor, y la
revocación sólo será declarada en interés de los acreedores que la
hubiesen pedido y hasta el importe de sus créditos (Art. 1294 C.C.).
3. La acción revocatoria cesará luego que el deudor satisfaga su
deuda o adquiera bienes con qué poder cubrirla (Artículo 1295 del
Código Civil)”.