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El cursograma es una herramienta gráfica que suple la ambigüedad e inexactitud que puede
presentar la redacción narrativa de los procesos administrativos.
Características
Permite visualizar e identificar:
‐ los puntos de control y/o sus omisiones
‐ el flujo de información
‐ las áreas de responsabilidad
‐ el orden cronológico de los procesos, dado que deben representarse en secuencia,
conforme se desarrollan.
El cursograma es mucho más rico respecto al diagrama de procesos, en elementos a
representar y en detalles ampliatorios. Muestra, además de los sectores, los soportes de
información involucrados y un detalle de los procesos, lo suficientemente amplio y detallado,
como para tener una visión cabal del sistema bajo análisis.
Partes esquemáticas
Se divide la hoja en columnas, cada columna constituye un área de responsabilidad más una
columna en el extremo derecho, destinada a “observaciones”. En esta última columna se
deberá consignar la aclaración a las referencias consignadas en el cursograma, sobre el mismo
renglón de la referencia (sin tener en cuenta el espacio no utilizado desde la referencia
inmediata anterior).
Cada columna debe un tener un encabezado que identifique el área de responsabilidad. La
disposición (orden) deberá seguir la secuencia natural de los procesos, el sentido general será
de izquierda a derecha, de arriba hacia abajo (efecto cascada), intentando evitar los
cruzamientos en las líneas de comunicación. Respetando esta lógica se ordenarán las
columnas, según su intervención en el proceso.
Se conectan los procesos mediante líneas, a fin de evidenciar la necesaria continuidad que da
sentido y coherencia al modelo.
Simbología
Línea continua, se utiliza para graficar el traslado físico de información
(ej. la factura que se le entrega a un proveedor).
Línea punteada, uso para traslado lógico de información (ej. mail).
Flechas; la ausencia de sentido (solo una línea) presume el sentido izquierda a derecha y/o de
arriba hacia abajo, el sentido inverso requiere necesariamente indicación con la flecha.
Cruce de líneas; se hará con puentes respetando el sentido de la información que “salta”.
Ejemplos:
Documento; se identificará el documento del que se trata mediante la
sigla que será debidamente indentificada en la cartilla de siglas.
Archivo definitivo: no será utilizada la documentación que contiene, en
ningún otro momento dentro del circuito que se analiza.
Archivo transitorio: será utilizada la documentación que contiene, en
algún otro momento dentro del circuito que se analiza.
Base de datos: para archivo de información lógica.
Demora; se utiliza cuando el circuito espera que ocurra un evento
puntual para reanudarse.
Operación, las acciones deben ser evaluadas para identificar si se trata
o no de operaciones.
Alternativa, se utiliza cuando se multiplica el número de caminos que
puede continuar el circuito.
Control; esta operación es tan particular y crítica que tiene su propio
símbolo (cuadrado).
“Rutina no relevada” se desconoce qué ocurre en el circuito o “rutina
no relevante” aunque se tenga conocimiento qué ocurre, no
corresponde consignarlo (ej. qué hace un proveedor para emitir una
factura).
Conectores de salida o de entrada, respectivamente; se utiliza cuando
por la extensión o por facilidad de lectura es necesario cortar la
continuidad y/o reiniciarla. Debe incluirse el número de conector (nro.
grande) y el número de página (nro. pequeño).
Ejemplos:
debe leerse e interpretarse como “el conector nro 4 viene de la página 2”
debe leerse e interpretarse como “el conector nro 4 sigue en la página 8”
Puntos a tener en cuenta:
Todo cursograma debe tener una cartilla de siglas y una cartilla de símbolos; las mismas
constan de un listado con las siglas/símbolos y su significado.
Los cursogramas solo pueden ser iniciados con un símbolo de rutina o con una demora.
Los cursogramas solo pueden ser finalizados con un símbolo de rutina, con un archivo
definitivo o destrucción de formulario.
Para indicar la conexión entre el sistema bajo análisis y el inicio de otro sistema (por ej. compra
y pagos) se utiliza el símbolo de rutina.
Las rutinas, en un circuito de diseño, solo deben utilizarse para indicar inicio de circuito,
conexión con otro circuito o tareas en áreas fuera de la organización (ej. proveedores o
clientes). Mientras que en un circuito bajo análisis, puede utilizarse para indicar información
no relevada (esto deberá ser resuelto en el diseño).
Control: cuando resulte necesario consignar un control deberá tenerse presente que, para
controlar, deben existir dos elementos de entrada (el control es contra “algo” un documento,
una normativa, el calendario, etc.) y la salida siempre debe presentar como alternativas, al
menos dos caminos, qué ocurre si el resultado del control es positivo (todo lo controlado está
bien) o si es negativo (algo del control no resultó satisfactorio). Por lo cual, se sugiere pensar el
control como la suma de los siguientes símbolos.
Por ej. se controla la factura con el parte de recepción.
Importante: siempre a cada control le sigue una alternativa, pero no siempre a cada
alternativa le precede un control.
Operación de extracción: ante la necesidad de extraer documentación (ej. factura) de un
archivo transitorio, se sugiere pensar esa operación como la suma de los siguientes símbolos.