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Márquez Aldana Christopher Grupo: 1103

DERECHO PROCESAL CIVIL EN ROMA

El derecho civil en roma, se entiende desde un punto de vista inicial, el proceso a


grandes rasgos durante la lectura comprender los aspectos y funciones que se
desprenden ya que son conceptos e ideas de estructura fundamental para la
compresión de las definiciones romanas que se mencionan.
Dicho esto en roma el derecho procesal se constituía desde sus orígenes con una
característica específica del proceso, este tenía que ser de forma oral
indiscutiblemente, protegiendo los derechos en consigna de que fueran eficaces al
protegerlos y para el cumplir de ello se requerían órganos auxiliares que ayudaran
a la ejecución de esto sin problema alguno, estableciendo una decisión para dicho
incumplimiento llamada sentencia dando como resultado la justicia, todo esto
regulado por el Estado.

Por una visión de prosperidad se dan cuenta que este modo de justicia de una
sentencia dio resultados y se llevó a cabo sin problema alguno hasta el momento
en que por falta de organismos de Estado las sentencias se encaminaron a una
forma de venganza, administradas por el jefe de la familia resolviendo las
controversias por un resultado mutuo de ojo por ojo pasando a casos tan insólitos
como a las sanciones en nombre de la divinidad hasta la época de Augusto donde
volvió a un régimen concordante estableciendo que no se puede tomar justicia por
sí mismo a excepciones como en caso de la defesa privada utilizando la agresión
en defensa propia.

Una vez ya tomado en cuenta que el proceso se puede discernir como una
sentencia o ejecución, dentro de este se encuentra determinado al derecho privado,
similar al que se tiene en la actualidad con aspectos como la resolución determinada
por un juez obviamente privado a diferencia del proceso público, iniciado por algún
ente representando a la comunidad con la finalidad de aplicar una sanción justa,
tomando en cuenta durante el proceso de este sus clases ya sea penal, utilizada
particularmente en los procedimiento públicos por medio de inculpar al individuo o
civil, tratándose más a los conflictos entre particulares.
Para los juicios privados dichas funciones les correspondían a los magistrados de
los cuales se deriva mucha trayectoria, en la republica estos eran cónsules y a
diferencia de sus funciones judiciales en juicios privados eran administradores de
justicia entre los ciudadanos de roma, el nombre de magistrados los dividía en 2
contaban con la potestad para administrar la justicia civil y en el caso de los
magistrados superiores se les adicionaba la intervención en el proceso.
Dentro de la misma organización judicial a los jueces se les dividía en 2, el juez
particular era elegido para conocer el asunto y dictaba la sanción que resolvía el
magistrado a diferencia de los jueces permanentes, estos pertenecen a dos
tribunales colegiados con diferentes funciones como, intervención en algunos
procesos de libertad incluso dentro del tribunal de los jueces centunviros su
composición era de ciento cinco miembros con la oportunidad de ser elegidos y
posteriormente alcanzar un número mayor.
Se determinan varios aspectos, uno de ellos hace mención a que nadie puede litigar
en contra de sí mismo, se admiten solo casos de particularidad donde pueden
intervenir, partes auxiliares con una participación singular encaminando a una
inclinación del conflicto con auxiliares dando a entender que se representa a la parte
o individuo necesariamente en el juicio.
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Como auxiliares de estas partes se tienen a los abogados, los oradores y a los
jurisconsultos, estos como asesores durante el proceso con una colaboración a
manera sencilla y concreta de representar y hablar en nombre de la persona en
debates, con la emisión de dictámenes judiciales dando pie a los sentidos del
derecho, el abogado durante el periodo clásico destaca el lema donde menciona
que el derecho no debe ser doblegado por el favor, ni sometido por el poder pues el
derecho solo pretende la victoria en base a la verdad, durante ese periodo a los
abogados se les consideraba especialistas en el ámbito de cuestiones jurídicas en
conjunto de los juristas brindando un apoyo como consejeros, durante el imperio
bizantino tomaron un alto grado de importancia los abogados a tal grado en que
sustituyen a los jurisconsultos tomando el control de ser los únicos para actuar en
tribunales.

Así mismo como el abogado se volvió de mayor importancia debía contar con
virtudes estableciendo respeto a cualquier creencia o religión, leal hacia su cliente
con un alto valor de postura al hablar, el servicio que brindaba el abogado por un
periodo era gratuito sin embargo con el tiempo se fue creando la necesidad de
retribuir los servicios de una manera económica, dichas retribuciones fueron
establecidas en la época del cuarto emperador romano el cual impuso formalmente
el pago de honorarios.
Entrando en lo que son las acciones de ley aparece la redacción de las 12 tablas,
esto durante la época republicana en donde pasaron a desuso con la expedición de
la Ley Aebutia, con ello haciendo que los romanos elijan entre las acciones de ley
que eran llevadas a cabo por algún ciudadano con finalidad de hacer valer los
derechos o bien escoger por el sistema formulario el cual corresponde a la etapa
del alto imperio romano que nace con la ley Aebutia, imponiendo un nuevo sistema
procesal riguroso que siguió vigente, pero poco a poco la posibilidad de usar este
nuevo procedimiento permitió el acceso a la justicia de todos los habitantes
utilizando solución de controversias por medio de las normas del derecho civil.
Dicho proceso de ley se efectúa por ciudadanos romanos ante los magistrados,
contaban con una fuerte solemnidad al término de la determinación de ley, para el
efecto de esto se necesitaban realizar durante el periodo de los días fastos que en
base a la explicación del profesor Osuna, los colegios pontificales o sacerdotales
eran los que se encontraban agrupados por colegias dependiendo del culto que
llevaran con el auxilio del monarca y de la republica a los magistrados con el
incumplimiento de sus funciones religiosas, a su cargo tenían al Ponte Facere,
dichos colegios estaban integrados por cinco miembros presididos por un pontífice
máximo podían interpretar leyes para que se tomara en cuenta la justicia divina,
esto es que hay días donde se pueden realizar juicios, negociaciones jurídicas o
cualquier tipo de función pública denominados como los dos días fastos, también
determinaban los días no aptos para la celebración de los mismo denominados días
nefastos.

El proceso de cómo se llevan a cabo dichas demandas comienzan con el


demandante, solicitándole al demandado su presencia en el magistrado y la
presencia de testigos en caso del incumplimiento del este una vez presentes ante
el magistrado se asignaba a un juez inmediatamente en vista de que la expedición
de ley se establecía en un término de treinta días, todo proceso era de forma oral
por lo que se tomaba de testigos a cualquier presente durante el juicio, con la
finalidad de en caso de necesitar un testimonio sobre lo que ocurrió durante el juicio
cualquiera de los presentes estaba obligado a ello.
Con esto se establecieron cinco leyes de acción, considerada como la más antigua
esta la ley per sacramentum utilizada para controversias referentes a los derechos
reales encaminado a la protección de los derechos personales en dicha ley los
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depósitos del vencido pasaban a aumentar los bienes del Estado destinados a
saldar los gastos del templo a diferencia de la ley per arbitrive que constaba de un
procedimiento mucho más simple, existía la afirmación del demandante presidida
de una serie de preguntas al demandado para que acepte o niegue la intención, y
en caso de esto se solicitaba al pretor el nombramiento de un juez para hacer valer
un derecho de crédito o alguna división de propiedad o herencia.

Una de las leyes más recientes era, per condictionem, que consistía de la colocación
del demandado con el objeto de que el juez compadeciera de él, ante la
determinación de ciertas obligaciones y de una determinada suma a pagar, la acción
tomada al reclamar no necesariamente tenia aspectos determinados como contar
con una clara explicación, tan solo bastaba con afirmar, que es acreedor a su
derecho de crédito. La cuarta ley de acción per manus iniectionem, consistía de la
percepción corporal efectuada por el acreedor sobre la persona que es la deudora,
para esto, se requiere fundamentalmente de un medio de ejecución utilizado para
emitir contestaciones de magistrados aplicadas a las personas que ya fueron
condenadas por un juez con anterioridad en virtud de deuda. Y la quinta ley de
acción que consiste en el proceso de apoderarse de bienes del deudor con el objeto
de que el acreedor obtuviera un objeto, prenda o algún bien del deudor para
obligarlo a pagar la deuda.
Este sistema de ley de acciones tuvo una decadencia, atribuían esta decadencia al
grado de complejidad y extenso procedimiento, con riesgo de perder el caso por
cosas tan insustanciales como el olvido de alguna palabra o formula de la
estructuración del asunto, dicho sistema se fue tornando poco práctico para su
utilización hasta quedar en completo desuso aunque cabe señalar que dichas
acciones de ley se conservaron en dos casos, en juicios ante un tribunal conocidos
como centunviros y en los juicios en que los vecinos podían entablar contra el
propietario denominado juicio infectum.

Se establece el proceso formulario como un nuevo procedimiento donde se emplea


la formula escrita por un magistrado, sirviendo de base para que el juez las resuelva
este tipo de proceso, no juzga por sí mismo, a excepciones, limitándose desde un
inicio a no hacerlo, generalmente se encarga de procesos entre ciudadano y
peregrino o entre ellos mismos todo esto en base a dos instancias, la primera daba
inicio con la comparecencia de que el magistrado concediese contra él una acción
de carácter penal, a diferencia del sistema de procedimiento el sistema formulario
permite la representación judicial de las partes y existe la posibilidad de ser
reemplazados en justicia por mandatarios, este acompañado de su abogado expone
las bases de su demanda y elige la acción que realizara esto con la posibilidad de
variación antes de la contestación de la demanda y riesgo de ser rechazada por no
reunir los requisitos señalados.
La fórmula del proceso termina siendo solamente la redacción por escrito mediante
la cual se tiene que fijar el contenido de un proceso determinado por el juez
mediante la condena o absolución según el convencimiento que le hayan dado las
pruebas.
La decisión fue tomada en base a las partes de la formula la primer parte es el
nombramiento de la persona que iba a figurar en calidad de juez o árbitro o de los
que integraran el tribunal, continua con la parte en la que se reclama la protección
a determinar la situación del echo y en el caso del juez la función de las acciones
divisorias se le atribuían y adjudican las cosas comunes a uno o a otro y por último
se le otorga al juez la facultad de condenar y absolver al demandado dependiendo
de cómo se mostraba la verdad es como se condena al demandado o es declarado
en libertad.
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Cuando se habla de una excepción, se entiende como parte de la formula y


elemento donde es intercalada entre el demandante y el demandado esto con el fin
de hacer validas dichas circunstancias, una variante de la formula limita al juez en
la facultad que tiene a condenar para que en el caso de presentarse pruebas y se
comprobaran los hechos a favor este no podía condenar y en caso de que la
decisión del juez sea justa pero no llega a perjudicar verdaderamente a el actor del
delito legalmente se pueden seguir oponiendo axcepciones mutuas sin límite.
De estas excepciones se deriva la clasificación con el nombre de praescriptiones,
esta contenía desde el punto de partida partes escritas que se encajan al principio,
su aspiración se enfocaba en poder precisar la demanda, las cuales tenían
diferentes nombres dependiendo si eran a favor del actor o en contra del mismo de
ella se deriva la pro actore con un objetivo centralizado en limitar la demanda con
exactitud para hacer valer el derecho, constando completamente de la precisión del
autor, de lo contrario al ser rechazada la demanda no podría imponerse de nuevo
dando pie por consiguiente a la clasificación pro reo dirigida al juez poniéndolo en
advertencia para antes de examinar a fondo la cuestión del litigio resolviera las
cuestiones discutidas por el demandado y pronunciar sentencia en caso de que
sean ciertas, esto en forma de escudo por parte del demandado protegiéndose de
que le reclamen el bien, exponiendo la posesión prolongada de este, en si la
praescriptio se le denomina a cualquier objeción mediante la cual el demandado sin
discusión, trata de impedir el litigio o procura evitar que se pronuncie sentencia.

En base a una instancia tomada como dos acepciones la primera equivale a solicitud
o petición, que es cuando se dice que el juez debe proceder a instancia de parte,
se da a entender que debe proceder con una previa petición y no de oficio y por la
segunda acepción es designada como un conjunto de actuaciones practicadas,
tanto en lo civil como en la criminal, lo cual comprenden hasta la sentencia definitiva,
se le conoce así como primer instancia al ejercicio de la acción ante el primer juez
que debe conocer del asunto a la segunda instancia con función de la misma acción
ante el juez o tribunal de apelación, con el objeto de que reforme la sentencia del
primer juez donde finalmente se produce la sentencia.

Para las instancias, el juez debía ajustar su acción a las pretensiones expuestas en
la fórmula que mencione con anterioridad, aplicando con justicia los principios del
derecho que son los que dan sentido a las normas jurídicas legales o
consuetudinarias que hay en alguna comunidad, y se subordina un conjunto de
soluciones particulares y estos pueden referirse simplemente al sistema jurídico de
cada estado o conectarse con el derecho natural en cuyo caso trascenderían del
derecho positivo, como hoy en día una parte importante de los principios generales
del derecho son los principios constitucionales, y suelen confundirse con las
llamadas reglas de derecho.
En el caso de que no compareciera el actor, el juez declaraba inocente al
demandado de los cargos que se le imputarían a efectos de la sentencia como el
absolver, cuando el actor no comprobaba sus pretensiones al condenar, la
pretensión del actor se probaba debidamente, y es donde se podría dar el caso de
que el juez se declarara incompetente para resolver el asunto, esto se puede
entender más como una incompetencia judicial o como ausencia de competencia,
donde no es muy apreciable el oficio de parte de un determinado asunto judicial
para conocer en concreto la demanda planteada y en conformidad con lo previsto
sobre las formulas o los procesos generales de ley ya establecidas en el texto
declara el asunto como no claro y no puede emitir el fallo dando como resultado
oficial de la demanda en el tribunal un fracaso en el cobro de deudas sin poder hacer
acreedor al cobrador de las deudas un fallo a favor .
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El derecho procesal civil en roma es de gran importancia, se desenvuelve en la


lectura detalladamente desplegando los pasos a seguir, la secuencia de cada
proceso que se llevaba a cabo en conjunto con una explicación histórica que
relaciona, al derecho antiguo con el derecho actual lo cual es básico para
entenderse, en vista de que el derecho romano se estudia para conocer nuestra
cultura histórica jurídico y conocer los antecedentes del derecho actual pues es
desarrollado en sentido del presente con las variables en la herencia del pasado.

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