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CAPÍTULO 36
Tumores ováricos
de células germinales
y del estroma
de los cordones
sexuales
Diagnóstico diferencial
SECCIÓN 4
CUADRO 36-1. Marcadores tumorales séricos en tumores rasgos sólidos en este grupo de mujeres de edad joven, debe valo-
rarse la concentración sérica de hCG y AFP, además de referir
ováricos malignos de células germinales
a las pacientes con un ginecólogo-oncólogo para el tratamiento
Histología AFP hCG
CAPÍTULO 36
quirúrgico primario.
Disgerminoma − ± Cuando no se cuenta con un especialista, o el diagnóstico no
Tumor del saco vitelino + − se anticipa, las decisiones transoperatorias son cruciales para que el
tratamiento sea adecuado y no se comprometa la fertilidad futura.
Teratoma inmaduro ± −
Se realizan lavados peritoneales y el líquido se deja aparte antes
Coriocarcinoma − + de proceder con la disección de cualquier tumoración sospechosa
Carcinoma embrionario + + en los anexos. El fluido puede desecharse después si se descarta la
Tumor mixto de células germinales
malignidad. En principio, la decisión de realizar una cistectomía
± ±
o una ooforectomía depende de las circunstancias clínicas (cap. 9,
Poliembrioma ± ± pág. 263). En general, todo el anexo debe extirparse una vez que
AFP, fetoproteína alfa; hCG, gonadotropina coriónica humana. se diagnostica un tumor ovárico maligno de células germinales.
El ginecoobstetra debe solicitar la asistencia transoperatoria de un
ginecólogo oncólogo para la estadificación o referir a la paciente
después de la operación si no hay un especialista disponible de
justifica realizar una CT o una imagen por resonancia magnética
inmediato. Como mínimo, debe explorarse el abdomen. La palpa-
(MR, magnetic resonance) antes de la cirugía. Según el diagnóstico
ción del epiplón y la parte superior del abdomen, y la inspección
se realiza una radiografía torácica en busca de metástasis tumorales
de la pelvis, sobre todo el ovario contralateral, son fáciles de realizar
en los pulmones y el mediastino.
y documentar.
Procedimientos diagnósticos
La toma de una biopsia guiada con ecografía o CT no tiene sitio ■ Patología
en el tratamiento de pacientes con tumoraciones ováricas sospe- Clasificación
chosas de malignidad. Es necesaria la resección quirúrgica para
La clasificación modificada de la Organización Mundial de la Salud
establecer el diagnóstico histológico definitivo, la estadificación y
(OMS) para los tumores ováricos de células germinales se presenta
el tratamiento. El cirujano debe solicitar la valoración de un corte
en el cuadro 36-2 (Nogales, 2003). Dichas neoplasias están com-
congelado para confirmar el diagnóstico, pero son frecuentes las dis-
puestas por varios tipos tumorales histológicos distintos derivados
crepancias entre la interpretación de éste y de las imágenes histoló-
de células germinales primordiales de las gónadas embrionarias.
gicas de los cortes finales incluidos en parafina (Kusamura, 2000).
Hay dos categorías principales: tumores malignos primitivos de
Además, a menudo es necesaria la tinción específica con anticuer-
células germinales (disgerminomas) y teratomas, de los cuales casi
pos para resolver casos dudosos (Cheng, 2004; Ramalingam, 2004;
todos son teratomas quísticos maduros (quistes dermoides).
Ulbright, 2005).
Teratomas
Inmaduro
Maduro
Sólido
Quístico (quiste dermoide)
Monodérmico y muy especializado
Tumores tiroideos (estruma ovárico: benigno o maligno)
Carcinoides
Tumores neuroectodérmicos
Carcinomas (epidermoides o adenocarcinoma)
Grupo melanocítico
Sarcomas
Tumores sebáceos
Célula germinal
SECCIÓN 4
Disgerminoma Carcinoma
embrionario
Estructuras Estructuras
extraembrionarias embrionarias
CAPÍTULO 36
FIGURA 36-5. Micrografía de un disgerminoma. La imagen microscó- FIGURA 36-6. Cuerpo de Schiller-Duval. Esta estructura consiste en
pica del disgerminoma se caracteriza por una población relativamente un capilar central rodeado por células tumorales, presentes dentro de
monótona de células que parecen células germinales primordiales, con un espacio quístico que puede estar recubierto por células tumorales
un núcleo central redondeado o con contorno cuadrado y abundante planas o cuboides. Cuando existe, el cuerpo de Schiller-Duval es patog-
citoplasma claro rico en glucógeno. Como en este caso, el tumor a nomónico de un tumor del saco vitelino, aunque sólo son conspicuos en
menudo contiene tabiques fibrosos, que en la figura se ven como unos cuantos casos. Los cuerpos de Schiller-Duval pueden encontrarse
hebras eosinofílicas, infiltradas por células inflamatorias crónicas, que en pequeños números, estar ausentes o tener rasgos morfológicos
incluyen linfocitos, macrófagos y células plasmáticas ocasionales. atípicos. (Contribución fotográfica de la Dra. Kelley Carrick.)
(Contribución fotográfica de la Dra. Kelley Carrick.)
son la cavidad peritoneal y los ganglios linfáticos retroperitonea- necrosis y hemorragia focal, con degeneración quística y rotura. La
les. A pesar de esta recurrencia significativa, una técnica quirúrgica apariencia microscópica de los tumores del saco vitelino a menudo
conservadora no afecta la supervivencia a largo plazo por la sensi- es diversa. El aspecto más frecuente, el patrón reticular, refleja
bilidad de este tipo de cáncer a la quimioterapia. la diferenciación extraembrionaria con formación de una red de
Los disgerminomas tienen el mejor pronóstico de todas las espacios irregulares recubiertos por células epiteliales primitivas.
variantes de tumores ováricos malignos de células germinales. Los cuerpos de Schiller-Duval son patognomónicos cuando existen
Dos tercios se encuentran en etapa I al momento del diagnóstico (fig. 36-6). Por lo general, tienen una papila única recubierta por
y la supervivencia a cinco años específica para dicha patología se células tumorales y que contiene un vaso central. Dichos tumores
aproxima al 99% (cuadro 36-3). Incluso en la enfermedad avan- a menudo producen AFP y como resultado casi siempre contienen
zada, las tasas de supervivencia son altas después de la quimiote- células reactivas a la tinción inmunitaria dirigida a dicha proteína.
rapia. Por ejemplo, las pacientes con enfermedad en etapas II a Las concentraciones séricas representan un marcador tumoral con-
IV pueden tener una tasa de supervivencia superior al 98% con fiable en la vigilancia posterior al tratamiento.
fármacos hechos con base en platino (Chan, 2008). Los tumores del saco vitelino son el tipo más letal de las neo-
plasias ováricas malignas de células germinales. Como resultado,
Tumores del saco vitelino todas las pacientes reciben quimioterapia, cualquiera que sea la
Las neoplasias del saco vitelino representan del 10 al 20% de todos etapa de la enfermedad. Por fortuna, más de la mitad se presenta
los tumores ováricos malignos de células germinales. Antes, dichas con enfermedad en etapa I, en la que se logra una supervivencia a
lesiones se llamaban tumores del seno endodérmico, pero hace poco cinco años específica para el padecimiento cercana al 93% (Chan,
se revisó la terminología. Un tercio de las pacientes aún no llega a 2008). Por desgracia, los tumores del saco vitelino tienden a crecer
la menarquia en el momento de la presentación. El compromiso de de forma rápida y a diseminarse al peritoneo y a los pulmones por
ambas gónadas es raro y el otro ovario casi siempre se invade sólo vía hematógena. Por consiguiente, las personas con enfermedad en
cuando existen otras metástasis en la cavidad peritoneal. etapas II a IV tienen una tasa de supervivencia a cinco años de 64
A simple vista, tales tumores forman tumoraciones sólidas más a 91%. La mayoría de los casos de recurrencia tumoral ocurre en el
amarillas y friables que los disgerminomas. A menudo presentan primer año y el tratamiento casi siempre es efectivo (Cicin, 2009).
CUADRO 36-3. Supervivencia de pacientes con tumores ováricos malignos de células germinales frecuentes según la etapa
Disgerminoma Tumor del saco vitelino Teratoma inmaduro
Etapa al momento del diagnóstico
I 66% 61% 72%
II–IV 34% 39% 28%
Supervivencia a 5 años
Etapa I 99% 93% 98%
Etapas II–IV >98% 64–91% 73–88%
Las fuentes de las cifras de supervivencia se citan en el texto.
Otros tumores primitivos de células germinales puro, obligan a buscar otros componentes de células germinales
Los subtipos más raros de tumores que no son disgerminomas casi con un estudio histológico más extenso (Aoki, 2003).
siempre están mezclados con otras variantes más frecuentes y no
Teratomas inmaduros
suelen encontrarse en forma pura.
SECCIÓN 4
confirma sólo en el examen patológico final (Pavlakis, 2009). Los de platino, con o sin radiación pélvica, es el tratamiento adyu-
tumores se clasifican del 1 al 3, sobre todo con base en la cantidad vante más frecuente para la enfermedad en etapa temprana (Dos
de tejido que contienen. O’Connor y Norris (1994) analizaron Santos, 2007). Sin embargo, sin importar el tratamiento recibido,
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244 teratomas inmaduros y notaron inconsistencias importantes las mujeres con enfermedad avanzada tienen un mal pronóstico
en la asignación del grado por parte de distintos observadores. Por (Gainford, 2010).
tal razón, propusieron cambiar el sistema a dos valores: bajo (antes Otros tumores malignos identificados incluyen carcinomas
grados 1 y 2) y alto (antes grado 3). Sin embargo, esta práctica no basocelulares, tumores sebáceos, melanomas malignos, adenocar-
tiene aceptación universal. cinomas, sarcomas y tumores neuroectodérmicos. Además en los
En general, la forma más precisa de pronosticar la supervivencia teratomas quísticos maduros pueden encontrarse neoplasias de tipo
es con base en el grado histológico del tumor. Por ejemplo, casi endocrino como el estruma ovárico (teratoma formado sobre todo
tres cuartas partes de los teratomas inmaduros se encuentran en la por tejido tiroideo) y carcinoide. Tales tumoraciones son malignas
etapa I cuando se diagnostican y tienen una tasa de supervivencia en menos de 5% de las pacientes.
a cinco años de 98% (Chan, 2008). Las pacientes con teratomas
inmaduros grado 1 en etapa IA tienen un pronóstico excelente
y no requieren quimioterapia adyuvante (Bonazzi, 1994; Marina,
■ Tratamiento
1999). Las mujeres con neoplasias en etapas II a IV tienen una tasa Cirugía
de supervivencia a cinco años de 73 a 88% (Chan, 2008). Por lo general se recomienda una incisión abdominal vertical si
La salpingooforectomía unilateral (USO, unilateral salpingo- se sospecha de una neoplasia ovárica maligna. Sin embargo, los
oophorectomy) es el tratamiento de elección para estos y otros investigadores con habilidades endoscópicas avanzadas han obser-
tumores malignos de células germinales en mujeres en edad repro- vado que la laparoscopia es una alternativa segura y eficaz para
ductiva. Sin embargo, Beiner et al. (2004) trataron a ocho mujeres mujeres con pequeñas tumoraciones ováricas y enfermedad en
con teratoma inmaduro en etapa temprana mediante cistectomía etapa I aparente (Chi, 2005). Si hay ascitis, ésta se evacua y se
ovárica y quimioterapia adyuvante y no encontraron recurrencias. envía una muestra para su valoración citológica. De lo contrario
Los teratomas inmaduros pueden relacionarse con implantes de se hacen lavados de la pelvis y correderas parietocólicas para su
tejido maduro que tachonan el peritoneo; no aumentan la etapa estudio antes de manipular el contenido intraperitoneal. El líquido
del tumor ni disminuyen la esperanza de vida. No obstante, estos de los lavados puede desecharse después si la valoración e interpre-
injertos de elementos teratomatosos maduros, aunque sean benig- tación del corte congelado muestra datos inequívocos de enfer-
nos, son resistentes a la quimioterapia y pueden crecer durante o medad benigna. Sin importar la estrategia quirúrgica, se hará una
después de ésta. Se les conoce como síndrome de teratoma creciente, inspección sistemática de toda la cavidad peritoneal. Los ovarios
y requieren laparotomía de revisión y resección para descartar recu- se valoran en cuanto a tamaño, compromiso tumoral, rotura cap-
rrencia de la malignidad (Zagame, 2006). sular, excrecencias externas, así como adhesión a estructuras cir-
cundantes.
Transformación maligna de teratomas quísticos En todas las mujeres en edad reproductiva con diagnóstico de
maduros (quistes dermoides) tumores ováricos malignos de células germinales debe practicarse
Se trata de tumores poco comunes que son las únicas variantes una USO con conservación de la fertilidad. En general tal estrategia
de células germinales que suelen desarrollarse en mujeres posme- conservadora no afecta la supervivencia (Chan, 2008; Lee, 2009).
nopáusicas. Las áreas malignas casi siempre se encuentran como Después de la USO no se recomienda tomar una biopsia a ciegas ni
pequeños nódulos en la pared quística o como una tumoración la resección en cuña del ovario contralateral de apariencia normal.
polipoide dentro de la luz después de extirpar todo el teratoma Para mujeres satisfechas con su procreación, es apropiado realizar
quístico maduro (Pins, 1996). El carcinoma epidermoide es el tipo una histerectomía con salpingooforectomía bilateral (BSO, bilate-
más frecuente y se encuentra en casi 1% de los teratomas quísti- ral salpingo-ooforectomy). En cualquier caso, después de extirpar el
cos maduros (fig. 36-8). La quimioterapia basada en compuestos ovario afectado, procede la estadificación quirúrgica por laparoto-
mía o laparoscopia como se describió antes para el cáncer ovárico
epitelial (cap. 35, pág. 868) (Gershenson, 2007a). Por los patrones
de diseminación tumoral, la linfadenectomía es muy importante
para los disgerminomas, mientras que las biopsias peritoneal y del
epiplón para estadificación son muy valiosas en los tumores del
saco vitelino y en los teratomas inmaduros (Gershenson, 1983).
Por lo general, se recomienda cirugía citorreductora para los
tumores ováricos malignos de células germinales cuando se encuen-
tra compromiso extenso en la operación inicial. La reducción
tumoral hasta el nivel de enfermedad residual mínima aumenta la
probabilidad de respuesta a la quimioterapia y de curación (Bafna,
2001; Nawa, 2001; Suita, 2002). Los mismos principios generales
de la cirugía citorreductora se aplican como se describió para el cán-
cer ovárico epitelial (cap. 35, pág. 870).
Por la gran sensibilidad a la quimioterapia de casi todos los tumo-
res de células germinales, es probable que los cirujanos elijan una
FIGURA 36-8. Fotografía de transformación maligna a carcinoma de estrategia menos enérgica al realizar procedimientos citorreductores
células epidermoides dentro de un teratoma quístico maduro. radicales (Gershenson, 2007a).
Muchas mujeres se refieren al ginecólogo oncólogo después de antes de poder considerarlos como tratamiento estándar (Williams,
una USO por un tumor confinado al ovario extirpado, según crite- 2004). En pacientes con resección tumoral incompleta, hoy en día
rios clínicos. En estas pacientes, si la estadificación quirúrgica inicial se recomiendan al menos cuatro ciclos de BEP (Williams, 1991).
fue incompleta, las opciones incluyen una segunda operación para
SECCIÓN 4
pronóstico después de la recidiva es malo, menos del 10% de las El pronóstico general de estos tumores es bueno, sobre todo por
pacientes sobrevive un lapso prolongado (Murugaesu, 2006). la etapa temprana de la enfermedad al momento del diagnóstico
La mayoría de las mujeres tratadas con medios quirúrgicos que y la cirugía curativa. Pero, la escasez de estas neoplasias limita la
CAPÍTULO 36
permiten conservar la fertilidad, con o sin quimioterapia, reanuda comprensión de su historia natural, su tratamiento y el pronóstico.
la menstruación normal y puede concebir (Gershenson, 2007b;
Zanetta, 2001). Además, ninguno de los estudios publicados ha
notado un aumento en el índice de defectos congénitos o aborto ■ Epidemiología
espontáneo en quienes recibieron quimioterapia (Brewer, 1999; Los SCST representan mucho menos de 5% de los tumores malig-
Low, 2000; Tangir, 2003; Zanetta, 2001). nos ováricos y son el subtipo mayor más infrecuente de cáncer
ovárico. La incidencia ajustada por edad es mucho menor (0.20
por cada 100 000 mujeres) que para el carcinoma ovárico epitelial
■ Tratamiento durante el embarazo (15.48) y representa la mitad de la de los tumores malignos de
Se detectan tumoraciones persistentes en los anexos en 1 a 2% de células germinales (0.41). Existe una probabilidad dos veces mayor
todos los embarazos. Por lo general, tales neoplasias se observan de que tales tumores se desarrollen en mujeres de raza negra por
durante procedimientos de ecografía obstétrica sistemática, pero razones que se desconocen (Quirk, 2005).
a veces un aumento espectacular en las concentraciones séricas A diferencia de los cánceres ováricos epiteliales o de los tumores
maternas de AFP (MSAFP, maternal serum alpha-fetoprotein) es el malignos de células germinales, los SCST ováricos por lo común
signo de presentación de un tumor maligno de células germinales afectan a mujeres de todas las edades. Este intervalo tiene una dis-
(Horbelt, 1994; Montz, 1989). Los teratomas quísticos maduros tribución bimodal única que refleja la heterogeneidad inherente
(quistes dermoides) comprenden un tercio de las neoplasias extir- de dichas neoplasias. Por ejemplo, los tumores juveniles de células
padas durante el embarazo. Por el contrario, los disgerminomas de la granulosa, tumores de células de Sertoli-Leydig y tumores
representan sólo de 1 a 2% de tales tumoraciones, pero aún son la estromales esclerosantes se encuentran sobre todo en niñas prepu-
neoplasia maligna más frecuente durante el embarazo. El desarrollo berales y mujeres en los primeros tres decenios de vida (Schneider,
de otros tumores de células germinales es raro (Shimizu, 2003). 2005). Las neoplasias de células de la granulosa de mujeres adultas
El tratamiento quirúrgico inicial que incluye estadificación es a menudo se desarrollan en personas mayores, en promedio alre-
el mismo que para mujeres no embarazadas (Horbelt, 1994; Zhao, dedor de los 50 años de edad (Boyce, 2009; Fotopoulou, 2010).
2006). Por fortuna, muy pocas pacientes tienen enfermedad avan- No hay factores de riesgo comprobados para los SCST. Sin
zada que amerite disección radical para citorreducción. La deci- embargo, en un estudio que incluyó casos y controles para generar
sión de administrar quimioterapia durante el embarazo es causa de una hipótesis, Boyce et al. (2009) observaron que la obesidad como
controversia. Los tumores ováricos malignos de células germinales estado hiperestrogénico tenía una relación independiente, mientras
tienden a crecer con rapidez y es peligroso retrasar el tratamiento que la paridad, el tabaquismo y el uso de anticonceptivos orales
hasta el parto. Parece que el régimen con BEP es seguro durante tenían un efecto protector. Se desconoce la causa de estas neopla-
la gravidez, pero en algunos reportes se especula la posibilidad sias, sin embargo en fecha reciente se observó que una mutación
de complicaciones fetales (Elit, 1999; Horbelt, 1994). Por tal particular recurrente en el gen FOXL2 (402C→G) se encuentra en
razón, algunos sugieren retrasar el tratamiento hasta el puerperio todos los tumores de células de la granulosa de tipo adulto, pero
(Shimizu, 2003). Por desgracia, no hay resultados de estudios a no en una gran variedad de otras neoplasias sólidas. Por lo tanto,
gran escala para resolver este dilema. En caso de disgerminomas dicho alelo mutante parece ser un fenómeno muy específico en la
extirpados completos, sin embargo, se retrasa la administración de patogenia de estos tumores raros (Schrader, 2009; Shah, 2009).
dicha terapia hasta el puerperio. No obstante, las neoplasias distin- No existe predisposición hereditaria conocida para el desarrollo
tas a los disgerminomas (sobre todo los tumores del saco vitelino y de estos tumores y los casos familiares son raros (Stevens, 2005),
los teratomas inmaduros) y las que no se extirpan completas ameri- aunque los SCST ováricos se relacionan con varios trastornos here-
tan una consideración seria de quimioterapia durante el embarazo. ditarios definidos con una frecuencia que rebasa la mera casuali-
dad. Las patologías relacionadas incluyen la enfermedad de Ollier
TUMORES OVÁRICOS DEL ESTROMA (que se caracteriza por múltiples neoplasias cartilaginosas benignas,
DE LOS CORDONES SEXUALES (SCST) pero que producen desfiguración) y el síndrome de Peutz-Jeghers
(que se distingue por la presencia de pólipos hamartomatosos
Estos tumores ováricos son un grupo heterogéneo de neoplasias intestinales) (Stevens, 2005).
poco comunes que se originan en la matriz ovárica. Las células
en esta matriz tienen la capacidad de producir hormonas y casi
90% de las neoplasias ováricas que producen dichas moléculas son
■ Diagnóstico
SCST. Como resultado, las manifestaciones clínicas incluyen sig- Signos y síntomas
nos y síntomas de exceso de andrógenos. La pubertad precoz isosexual es el signo de presentación en más de
El tratamiento primario es la resección quirúrgica; por lo gene- 80% de las niñas prepuberales en las que al final se diagnostica un
ral, los SCST están confinados al ovario al momento del diag- SCST ovárico (Kalfa, 2005). Las adolescentes a menudo refieren
nóstico. Además, la mayor parte tiene un patrón de crecimiento amenorrea secundaria. Como resultado, estas jóvenes que presen-
indolente y bajo potencial maligno. Por tales razones, pocos tan síntomas endocrinos tienden a diagnosticarse en etapas más
pacientes requieren quimioterapia basada en platino. Aunque la tempranas. El dolor abdominal y la distensión son otras quejas
enfermedad recurrente a menudo responde de manera deficiente frecuentes en este grupo de edad (Schneider, 2003a).
al tratamiento, las pacientes pueden vivir muchos años por la pro- En mujeres adultas, los síntomas más frecuentes son menome-
gresión lenta que caracteriza a estas neoplasias. trorragia y hemorragia posmenopáusica. Además, el hirsutismo leve
CUADRO 36-4. Marcadores tumorales para tumores ováricos del estroma de los cordones sexuales con potencial maligno
Tumores de células de la granulosa (forma adulta y juvenil) Inhibina A y B, estradiol (no tan confiable)
Tumores de células de Sertoli-Leydig Inhibina A y B, fetoproteína alfa (en ocasiones)
SECCIÓN 4
que progresa en poco tiempo a la virilización franca obliga a realizar pueden distinguirse en el estudio histopatológico de los tumores
una valoración para descartar tales tumores. La presentación típica de células germinales, de los cánceres ováricos epiteliales y de otras
es una mujer posmenopáusica con estigmas de exceso androgénico neoplasias de células fusiformes mediante la tinción con anticuer-
que avanzan con rapidez y una tumoración compleja en algún pos contra inhibina (Cathro, 2005; Schneider, 2005).
anexo; otros signos y síntomas reportados son dolor abdominal y
una tumoración que palpa la misma paciente (Chan, 2005).
■ Participación del médico general
Exploración física Antes de la operación, las pacientes con un SCST ovárico poten-
El tamaño del SCST es muy variable, pero por lo común se iden- cialmente maligno deben referirse a un ginecólogo oncólogo para
tifica una tumoración abdominal o pélvica en la exploración, cual- su valoración. Sin embargo, a menudo los ginecoobstetras diag-
quiera que sea la edad de la paciente. Sin embargo, son raros el nostican la mayor parte de los SCST ováricos después de la resec-
signo de onda líquida y otros hallazgos físicos sugestivos de enfer- ción de una tumoración de apariencia benigna, pero compleja, en
medad avanzada. mujeres con concentraciones normales de CA-125, si es que se
midió de antemano. La operación inicial por lo común se realiza
Pruebas de laboratorio en un hospital comunitario y sin la estadificación adecuada. En tal
Las concentraciones altas de testosterona, androstenediona o ambas situación, un patólogo con experiencia debe revisar y confirmar los
son muy sugestivas de un SCST ovárico en una mujer con signos resultados histopatológicos. Después de la referencia a un ginecó-
y síntomas de virilización. Es más probable que el hiperandroge- logo oncólogo, a veces está indicada la estadificación quirúrgica por
nismo clínico se deba a síndrome de ovarios poliquísticos, pero laparotomía o laparoscopia.
las concentraciones séricas de testosterona mayores de 150 g/100
ml o los niveles de sulfato de dehidroepiandrosterona (DHEAS, ■ Patología
dehydroepiandrosterone sulfate) superiores a 8 000 g/L sugieren una
Clasificación
probabilidad muy alta de presentar un tumor secretor de andróge-
nos (Carmina, 2006). En la mayor parte de los casos no se solicitan Los SCST ováricos se originan de los cordones sexuales y de las
pruebas de marcadores tumorales, porque muchas veces no se sos- células mesenquimáticas de las gónadas embrionarias (cap. 18, pág.
pecha el diagnóstico de SCST ovárico. Cuando éste se confirma, 485). Las células de la granulosa y de Sertoli se desarrollan a partir
pueden medirse los marcadores tumorales apropiados durante o de los cordones sexuales y por consiguiente, del epitelio celómico.
después de la intervención quirúrgica (cuadro 36-4). En cambio, las células de la teca, las de Leydig y los fibroblastos
provienen del mesénquima (futuro estroma). Este estroma gonadal
Imágenes primitivo tiene doble potencial sexual. Por tanto, los tumores que
La apariencia macroscópica de un SCST varía desde una neoplasia se desarrollan pueden estar formados por un tipo celular dirigi-
poliquística grande hasta tumoraciones sólidas pequeñas, lo que do al sexo masculino (células de Sertoli o de Leydig) o uno diri-
impide realizar un diagnóstico radiológico específico. Los tumores
de células de la granulosa a menudo presentan rasgos semisólidos
en la ecografía, pero no es posible distinguirlos en forma confiable
de los tumores epiteliales (Sharony, 2001). Además, es posible que
el endometrio esté engrosado por el aumento en la producción de
estrógenos. Aunque se ha utilizado la CT o la MR para aclarar las
ecografías inespecíficas, no existe un estudio radiológico definitivo
para diagnosticar estas lesiones (fig. 36-9) (Jung, 2005).
Procedimientos diagnósticos
Las pacientes con una tumoración ovárica sospechosa de maligni-
dad con base en las manifestaciones clínicas y ecográficas requieren
resección quirúrgica para lograr hacer el diagnóstico histopatoló-
gico definitivo, la estadificación de la patología y la elección del
tratamiento. No hay sitio para la biopsia bajo guía ecográfica o
tomográfica. Además, son inadecuadas la laparoscopia y la laparo-
tomía diagnósticas con valoración visual de la tumoración en algún
anexo; se necesita extraer las tumoraciones y realizar estudios de FIGURA 36-9. Imagen por tomografía computarizada (CT) de un tumor
patología. Después de extirparlos, los SCST ováricos casi siempre de células de la granulosa. (De Jung, 2005, con autorización.)
CAPÍTULO 36
Tumores de células de la granulosa-estromales mayoría de las mujeres con un tumor de células de la granulosa
Tumor de células de la granulosa de tipo adulto se diagnostica después de los 30 años de edad; el
Tipo adulto promedio es a los 50 años. La menometrorragia y la hemorragia
Tipo juvenil posmenopáusica son signos frecuentes y reflejan exposición endo-
Grupo de tecoma-fibroma metrial prolongada a estrógenos. En relación con este exceso de
Tecoma
hormonas, se han identificado alteraciones concomitantes (como
Fibroma/fibrosarcoma
hiperplasia endometrial o adenocarcinoma) en un cuarto de las
Tumor estromal esclerosante
pacientes con tumores de células de la granulosa de tipo adulto.
Tumores de células de Sertoli-estromales De igual manera, el crecimiento y la hipersensibilidad mamarios
Tumor de células de Sertoli
son quejas frecuentes relacionadas y hay informes de amenorrea
Tumor de células de Sertoli-Leydig
secundaria (Kurihara, 2004). Otra posibilidad es que los síntomas
Tumor del cordón sexual con túbulos anulares se deban a las tumoraciones ováricas y no a las hormonas que pro-
Tumores de células esteroideas ducen. Un tumor creciente y con potencial hemorrágico puede
Luteoma estromal causar molestia y distensión abdominales. El dolor pélvico agudo
Tumor de células de Leydig sugiere torsión del anexo; la rotura del tumor con hemoperitoneo
Tumor de células esteroideas no especificado puede simular un embarazo ectópico.
No clasificado Si durante la intervención quirúrgica se confirma un tumor de
Ginandroblastoma células de la granulosa de tipo adulto, puede solicitarse la valora-
ción de marcadores tumorales. De éstos, la inhibina B (que parece
ser más específica que la inhibina A) a menudo se eleva meses
antes de la detección clínica de la recurrencia (Mom, 2007). Sin
gido al sexo femenino (células de la granulosa o de la teca). Aunque embargo, el valor diagnóstico de este marcador disminuye por su
se han definido distintas categorías de SCST, los tumores mixtos amplio intervalo fisiológico normal (Schneider, 2005). El estradiol
son relativamente frecuentes (cuadro 36-5). Por ejemplo, tumo- tiene uso limitado en la vigilancia, sobre todo en una mujer joven
res de células de la granulosa ovárica pueden tener componentes que desea conservar la fertilidad y en la que queda in situ el ovario
de Sertoli mezclados. De igual manera, es posible que las neopla- contralateral.
sias con predominio celular de Sertoli o de Leydig contengan ele- A simple vista, los tumores de células de la granulosa son gran-
mentos menores de la granulosa. Se cree que tales tumoraciones des, poliquísticos y a menudo tienen más de 10 a 15 cm de diá-
mixtas surgen de un linaje común con diferenciación variable y metro (fig. 36-10). La superficie a menudo es edematosa y muy
no representan dos entidades separadas concurrentes (McKenna, adherente a otros órganos pélvicos. Por tal razón, casi siempre se
2005; Vang, 2004). necesita una disección más extensa que para los cánceres ováricos
epiteliales o los tumores malignos de células germinales. Durante
Gradación histológica la escisión, también son frecuentes la rotura inadvertida y la hemo-
Se considera que todos los tumores ováricos de células de la granu- rragia transoperatoria del tumor mismo.
losa tienen potencial maligno. Sin embargo, no hay un criterio
definido para establecer con claridad la malignidad o benignidad
de la mayor parte de los otros subtipos de SCST. Los intentos de
la gradación de estos tumores mediante las características nucleares
o la actividad mitótica han tenido resultados inconstantes (Chen,
2003).
A B
FIGURA 36-11. A. Tumor de la granulosa de tipo adulto. B. Los cuerpos de Call-Exner se identifican por su apariencia de roseta. (Contribución
fotográfica de la Dra. Raheela Ashfaq.)
El interior del tumor es muy variable. Es probable que predo- 2004). Los tumores en etapas II a IV conllevan una supervivencia
minen los componentes sólidos, con grandes áreas de hemorragia de 30 a 50% a los cinco años (Malmstrom, 1994; Miller, 1997;
y necrosis. Otra posibilidad es que sea quístico, con muchas cáma- Piura, 1994).
ras llenas de líquido seroso-sanguinolento o gelatinoso (Colombo, La atipia celular y la cuenta mitótica ayudan a establecer el pro-
2007). El estudio microscópico muestra sobre todo células de la nóstico, pero son difíciles de cuantificar (Miller, 2001).
granulosa con núcleos pálidos y hendidos, en forma de “granos de
café”. El rasgo histológico característico es el cuerpo de Call-Exner, Tumores de células de la granulosa juveniles. Estas neo-
una roseta formada por células alrededor de un espacio lleno de plasias poco comunes se desarrollan sobre todo en niñas y muje-
líquido eosinofílico (fig. 36-11). res adultas jóvenes; el 90% se diagnostica antes de la pubertad
Los tumores de células de la granulosa de tipo adulto son neo- (Colombo 2007). La edad promedio al momento del diagnóstico
plasias de baja malignidad, casi siempre con crecimiento indolente. es de 13 años, pero la edad de las pacientes varía desde el naci-
El 95% de los casos es unilateral y de 70 a 90% está en etapa miento hasta los 67 años (Young, 1984). Dichos tumores a veces se
I al momento del diagnóstico (cuadro 36-6). La supervivencia a relacionan con la enfermedad de Ollier y el síndrome de Maffucci
cinco años para pacientes con enfermedad en etapa I es de 90 a (que se caracteriza por la presencia de endocondromas y heman-
95% (Colombo, 2007; Zhang, 2007). Sin embargo, de 15 a 25% giomas) (Young, 1984; Yuan, 2004).
de las pacientes en etapa I recae al final. La mediana de tiempo Es probable que las mujeres afectadas tengan concentraciones
hasta la recurrencia es de cinco a seis años, pero el periodo puede elevadas de estrógenos, progesterona y testosterona, con supresión
ser de varios decenios (Abu-Rustum, 2006; East, 2005). Por for- de gonadotropinas. Como resultado, son frecuentes las irregulari-
tuna, estos tumores indolentes casi siempre progresan despacio y dades menstruales y la amenorrea.
la mediana de supervivencia después de la recaída es de otros seis Las niñas prepuberales casi siempre presentan pubertad precoz
años. Un tumor en etapa avanzada y la presencia de enfermedad periférica isosexual, que se caracteriza por crecimiento mamario
residual son factores de mal pronóstico (Al Badawi, 2002; Sehouli, y aparición de vello púbico, de secreciones vaginales y de otros
caracteres sexuales secundarios. Tales tumores pocas veces secretan
andrógenos, lo cual induce virilización. A pesar de estos signos
endocrinos, es frecuente el diagnóstico tardío de los tumores juve-
CUADRO 36-6. Supervivencia de pacientes con tumores niles de células de la granulosa en niñas prepuberales y pospube-
ováricos frecuentes del estroma rales, y se acompaña de un riesgo alto de diseminación tumoral al
de los cordones sexuales según la etapa peritoneo (Kalfa, 2005).
Células de la Células de Además de cambios hormonales, las mujeres pueden presentar
granulosa, adulto Sertoli-Leydig efectos del tumor. Por ejemplo, las pacientes mayores casi siem-
pre buscan atención médica por dolor o inflamación abdominales.
Etapa al momento
del diagnóstico
La rotura preoperatoria con hemoperitoneo puede causar sínto-
I 70–90% 97% mas abdominales agudos en 5 a 10% de las pacientes; también se
II–IV 10–20% 2–3% observa ascitis en 10% de los casos (Young, 1984).
A simple vista, los tumores de células de la granulosa de tipo
Supervivencia
juvenil se parecen a los de tipo adulto, con componentes variables
a cinco años
Etapa I 90–95% 90–95%
sólidos y quísticos. Pueden alcanzar un tamaño considerable, el
Etapas II–IV 30–50% 10–20% diámetro promedio es de 12 cm. Al microscopio, las características
citológicas que distinguen a estos tumores de los de tipo adulto son
Las fuentes de las cifras de supervivencia se citan en el texto.
sus núcleos redondeados hipercromáticos sin hendiduras en forma
de “grano de café”. Los cuerpos de Call-Exner son raros, pero a las pacientes es de 20 años y 80% de los casos se desarrolla antes
menudo existe un componente de células de la teca (Young, 1984). de los 30 años. Los tumores estromales esclerosantes tienen un
El pronóstico es excelente, el índice de supervivencia a cinco comportamiento clínico benigno y por lo general son unilatera-
CAPÍTULO 36
años es de 95%. Ambos tipos de tumores son unilaterales y se les. Las irregularidades menstruales y el dolor pélvico son síntomas
encuentran en etapa I al momento del diagnóstico (Young, 1984). frecuentes (Marelli, 1998). Pocas veces hay ascitis (a diferencia
Sin embargo, el tipo juvenil es más agresivo en etapas avanzadas de los fibromas). El tamaño de las tumoraciones varía; puede ser
y el tiempo entre la recaída y la muerte es mucho menor. Por lo microscópico o llegar hasta a 20 cm. En el estudio histopatológico,
general, las recurrencias aparecen en tres años. Las reincidencias los rasgos distintivos son la presencia de seudolobulación de áreas
más tardías son inusuales (Frausto, 2004). celulares separadas por tejido conjuntivo edematoso, aumento de
la vascularidad y áreas prominentes de esclerosis.
Grupo tecoma-fibroma
Tecomas. Se trata de SCST relativamente frecuentes y rara vez Tumores de células estromales y de Sertoli
malignos. Dichas neoplasias son únicas debido a que casi siempre Tumores de células de Sertoli. Los tumores ováricos de célu-
se desarrollan en mujeres posmenopáusicas de 60 a 70 años de las de Sertoli se observan con poca frecuencia, representan menos
edad, son infrecuentes antes de los 30 años. Estos tumores sólidos de 5% de todos los SCST. La edad promedio de las pacientes al
están entre los SCST de mayor actividad hormonal y casi siem- momento del diagnóstico es de 30 años, pero varía de dos a 76
pre producen exceso de estrógenos. Como resultado, los signos y años. La cuarta parte de las pacientes se presenta con manifesta-
síntomas primarios son hemorragia vaginal anormal, tumoración ciones estrogénicas o androgénicas, sin embargo la mayoría de las
pélvica o ambas. Muchas mujeres también presentan hiperplasia neoplasias carece de funcionalidad en términos clínicos.
endometrial o adenocarcinoma concurrente (Aboud, 1997). Tales Estas tumoraciones casi siempre son unilaterales, sólidas, ama-
tumores están formados por células de estroma cargadas con lípi- rillas y miden entre 4 y 12 cm. Provienen del tipo celular que da
dos, a veces luteinizadas. La mitad de estos tecomas luteinizados origen a los túbulos seminíferos y a menudo se organizan en túbu-
carece de actividad hormonal o produce andrógenos, con capaci- los que son característicos en términos histopatológicos (Young,
dad para generar masculinización. 2005). Sin embargo, los tumores de células de Sertoli pueden
Los tecomas son tumores sólidos cuyas células se asemejan a las simular a muchas neoplasias distintas; en estos casos, la tinción con
de la teca que rodean los folículos ováricos normales (Chen, 2003). anticuerpos específicos es invaluable para confirmar el diagnóstico.
Por su textura, en la ecocardiografía se ven como tumoraciones Más de 80% de los casos se encuentra en etapa I al momento
sólidas en los anexos y pueden simular leiomiomas extrauterinos. del diagnóstico y casi todos son benignos. La atipia celular mode-
El compromiso de ambos ovarios y la diseminación fuera de éstos rada, la actividad mitótica enérgica y la necrosis de las células
son eventos raros. Por fortuna, los tecomas ováricos tienen rasgos tumorales son indicadores de mayor potencial maligno. Tales
clínicos benignos y la resección quirúrgica es curativa. datos se encuentran en 10% de las personas con enfermedad en
etapa I y en la mayoría de aquellas con tumores en las fases II, III
Fibromas-fibrosarcomas. Los fibromas son variantes de SCST o IV. El riesgo de recurrencia es mayor cuando se observan dichas
relativamente frecuentes, sin actividad hormonal y que casi siem- características (Oliva, 2005).
pre se desarrollan en mujeres perimenopáusicas y menopáusicas
(Chechia, 2008). Estas neoplasias ováricas sólidas, por lo general Tumores de células de Sertoli-Leydig. Estos tumores repre-
benignas, se originan en las células fusiformes productoras de colá- sentan sólo de 5 a 10% de los SCST ováricos (Zhang, 2007). Su
gena del estroma. La mayoría de los fibromas se encuentran de incidencia es semejante a la de los tumores de células de Sertoli y la
manera incidental en la exploración o en la ecografía pélvicas. Son edad promedio es de 25 años. Aunque se han identificado en niñas
tumores sólidos, redondos, ovales o lobulados, relacionados con y mujeres posmenopáusicas, más de 90% se desarrolla durante la
líquido libre o, menos a menudo, con ascitis franca; su vasculari- edad reproductiva.
dad es de mínima a moderada (Paladini, 2009). Con frecuencia, dichos tumores producen hormonas esteroi-
Quizá 1% de las mujeres se presenta con síndrome de Meigs, deas sexuales, más a menudo andrógenos. Como resultado, hay
una tríada que incluye derrame pleural, ascitis y un tumor ovárico virilización franca en un tercio de las pacientes y otro 10% tiene
sólido (Siddiqui, 1995). Los derrames pleurales casi siempre son manifestaciones clínicas de exceso de andrógenos caracterizado por
del lado derecho; por lo general el líquido pleural y el fluido de hirsutismo, calvicie en la región temporal, voz grave y crecimiento
ascitis que lo acompaña es un trasudado que se resuelve después del clítoris (Young, 1985). También son frecuentes los trastornos
de extirpar el tumor (Majzlin, 1964). A pesar de la relación que menstruales. Por consiguiente, debe sospecharse un tumor de célu-
hay entre la ascitis y los fibromas benignos, cuando la primera y las de Sertoli-Leydig antes de una operación en pacientes con una
una tumoración pélvica coexisten, se debe suponer malignidad al tumoración palpable unilateral en algún anexo y manifestaciones
realizar la valoración. androgénicas. En estas mujeres el aumento del índice sérico de
El pronóstico después de la escisión de los fibromas es el de testosterona:androstenediona es muy sugestivo del diagnóstico.
cualquier tumor benigno. Sin embargo, 10% presenta aumento Aunque tales efectos hormonales son frecuentes, la mitad de las
de la celularidad y grados variables de pleomorfismo y actividad pacientes tiene síntomas inespecíficos de una tumoración abdomi-
mitótica, indicativos de un tumor mejor caracterizado como de nal como única molestia de presentación. Pocas veces hay ascitis
bajo potencial maligno. En 1% de los casos se encuentra transfor- (Outwater, 2000). Las anomalías tiroideas también coexisten con
mación maligna a un fibrosarcoma. los tumores de células de Sertoli-Leydig, con una frecuencia que
rebasa la casualidad.
Tumores estromales esclerosantes. Son neoplasias raras Dichos tumores tienden a ser grandes al momento de la extirpa-
y representan menos de 5% de los SCST. La edad promedio de ción, con un diámetro promedio de 13 cm, aunque se han publi-
la quimioterapia o a la radiación adyuvantes, los objetivos de la demostrado que la práctica de la linfadenectomía mejore la super-
cirugía no sólo incluyen establecer el diagnóstico hístico definitivo vivencia en caso de SCST (Chan, 2007).
y conocer la extensión de la enfermedad, sino también eliminar La extirpación quirúrgica de SCST productores de hormonas
CAPÍTULO 36
todos los tumores identificables a simple vista en las pocas pacien- sexuales causa una caída inmediata de las altas concentraciones
tes con enfermedad avanzada. Además, para planear la operación preoperatorias de dichas moléculas. Sin embargo, la resolución
los médicos deben considerar la edad de la paciente y su deseo de parcial o completa de las manifestaciones físicas de dichos niveles
conservar la fertilidad. En aquellas que completaron la procrea- se alcanza en forma gradual.
ción, se realiza una histerectomía con salpingooforectomía bilate-
ral, mientras que la USO con conservación del útero y la fertilidad Vigilancia
es apropiada en ausencia de diseminación tumoral evidente a estos En general, las mujeres con SCST ováricos en etapa I tienen un
órganos (Zanagnolo, 2004). Debe tomarse una muestra endome- pronóstico posquirúrgico excelente y casi siempre pueden vigi-
trial, sobre todo cuando se planea un procedimiento que conserve larse en intervalos regulares sin necesidad de tratamiento adicional
la fertilidad en mujeres con tumores de células de la granulosa o (Schneider, 2003a). La vigilancia incluye un examen físico general,
tecomas, puesto que muchas de ellas tienen hiperplasia o adenocar- valoración pélvica, la evaluación de marcadores séricos y estudios
cinoma concomitante capaces de influir en la decisión de practicar de imagen según lo indiquen los hallazgos clínicos.
la histerectomía.
La cirugía laparoscópica de mínima invasión tiene varias apli- Quimioterapia
caciones relevantes. En algunos casos, el diagnóstico de SCST no La decisión de administrar tratamiento posoperatorio depende de
puede establecerse hasta que se extirpa la tumoración por vía lapa- diversos factores (fig. 36-14). Aunque casi siempre se tratan sólo
roscópica y se envía para valoración de corte congelado. Entonces con cirugía, los SCST ováricos en etapa I a veces necesitan quimio-
puede proceder la estadificación quirúrgica laparoscópica. Cuando terapia adyuvante cuando el tumor es grande, el índice mitótico
no se hace el diagnóstico hasta que se confirma el reporte final de es elevado, el tumor se rompe, la estadificación es incompleta, los
patología después de la operación, puede proponerse la estadifi- resultados de patología son dudosos o si hay excrecencias capsula-
cación laparoscópica para determinar si existe enfermedad metas- res. Se cree que las mujeres con una o más de estas características
tásica al tiempo que se reduce la morbilidad de otra operación sospechosas tienen mayor riesgo de recaer y deben considerarse
(Kriplani, 2001). como candidatas para recibir quimioterapia basada en platino
Aunque la laparotomía o la laparoscopia de estadificación son (Schneider, 2003b). Además, la enfermedad en etapas II a IV ame-
esenciales para determinar la extensión de la enfermedad y la nece- rita tratamiento quirúrgico. En general los SCST tienen menor
sidad de tratamiento adyuvante en la mayoría de las personas con sensibilidad a la quimioterapia que otras neoplasias malignas ová-
posibles subtipos malignos SCST, sólo en cerca del 20% de las ricas, sin embargo los fármacos adyuvantes a base de platino son
pacientes se hace la estadificación completa (fig. 36-13) (Abu- exitosos en la mayoría de las mujeres con riesgo alto de progresión
Rustum, 2006; Brown, 2009). Los datos más recientes sugieren (Schneider, 2005).
que debido a las vías de diseminación superficial y hematógena, El régimen de cinco días de tratamiento con bleomicina, etopó-
puede modificarse el procedimiento estándar para cáncer ovárico. sido y cisplatino (BEP) es la quimioterapia combinada de primera
Los lavados pélvicos, la exploración abdominal, las biopsias peri- línea más utilizada (Gershenson, 1996; Homesley, 1999). Para
toneales y la omentectomía parcial conservan su importancia, pero aquellas pacientes en las que se extirpó el tumor completo, son sufi-
cada vez se cuestiona más la utilidad de la linfadenectomía pélvica cientes tres cursos administrados cada tres semanas. Se recomien-
y paraaórtica como medida de rutina. En un estudio de 262 SCST dan cuatro ciclos para mujeres con resección incompleta del tumor
ováricos, ninguna de las 58 pacientes sometidas a disección gan- (Homesley, 1999). Además de la combinación de BEP, los taxanos
glionar tuvo ganglios positivos (Brown, 2009). Además, no se ha tienen actividad demostrada contra los SCST ováricos. Asimismo,
Tecoma
Fibroma
Tumor estromal esclerosante
Estadificación
Ginandroblastoma
no necesaria
Tumor de células de Sertoli-Leydig (bien
diferenciado)
Tumor del cordón sexual con túbulos anulares
(relacionado con PJS)
FIGURA 36-13. Estadificación de los tumores del estroma de los cordones sexuales. PJS, síndrome de Peutz-Jeghers.
FIGURA 36-14. Tratamiento posoperatorio de los tumores del estroma de los cordones sexuales.
la quimioterapia combinada de paclitaxel con carboplatino tiene en proceso de valoración en un estudio en fase II del Gynecologic
resultados alentadores (Brown, 2004, 2005). Para determinar el Oncology Group (protocolo #187) y amerita más investigación
régimen más efectivo se está llevando a cabo un estudio aleatori- cuando se combina con platino (Brown, 2005).
zado prospectivo que compara el paclitaxel y el carboplatino con No existe tratamiento estándar para mujeres con enfermedad
la combinación de BEP en pacientes con diagnóstico reciente de progresiva a pesar de la cirugía radical y la quimioterapia basada en
SCST ovárico (GOG, protocolo #264). Por desgracia, la rareza platino. Hay que señalar que en estudios pequeños se ha observado
relativa de las mujeres con SCST ovárico que reciben quimiote- que el bevacizumab tiene actividad significativa y hay un estudio
rapia limita la capacidad para conducir estudios con asignación al fase II a mayor escala (GOG protocolo #251) (Tao, 2009). El régi-
azar a gran escala. men con vincristina, actinomicina D y ciclofosfamida (VAC) tiene
poca actividad (Ayhan, 1996; Zanagnolo, 2004). El tratamiento
Radiación hormonal puede ser útil y su toxicidad es mínima en las pacientes
Hoy en día, la radioterapia posoperatoria está limitada en el tra- con tumores resistentes a la quimioterapia. Sin embargo, la expe-
tamiento de los SCST ováricos. Existe evidencia que indica una riencia clínica con esta modalidad es muy limitada (Hardy, 2005).
mayor supervivencia al menos en algunas mujeres con enfermedad El acetato de medroxiprogesterona y la leuprorelina, un agonista
recién diagnosticada que recibieron radioterapia abdominal total de la hormona liberadora de gonadotropinas (GnRH, gonadotro-
(Wolf, 1999). Sin embargo, la quimioterapia suele ser el trata- pin-releasing hormone), tienen actividad demostrada para detener
miento posoperatorio primario porque casi siempre es más tole- el crecimiento de los SCST ováricos recurrentes (Fishman, 1996;
rable, más accesible y más fácil de administrar. Es mejor reservar Homesley, 1999). Sin embargo, es probable que los antagonistas
la radioterapia para paliar síntomas locales (Dubuc-Lissoir, 2001). de GnRH no sean tan efectivos (Ameryckx, 2005).
Además de los fármacos habituales, el descubrimiento de la
Recurrencia mutación FOXL2 402C→G (exclusiva de todos los tumores de
El tratamiento del SCST ovárico recurrente depende de las cir- células de la granulosa tipo adulto) podría conducir al desarrollo
cunstancias clínicas. La reducción quirúrgica secundaria de volu- de tratamientos dirigidos para las mujeres con enfermedad avan-
men debe considerarse con seriedad por el patrón de crecimiento zada o recurrente. Aunque FOXL2 no es un objetivo farmacoló-
indolente, el intervalo libre de enfermedad casi siempre prolon- gico perfecto como factor de transcripción, el conocimiento sobre
gado después del tratamiento inicial y la insensibilidad inherente su función y sus efectos subsiguientes podrían identificar alteracio-
a la quimioterapia (Crew, 2005; Powell, 2001). La quimioterapia nes moleculares en estos tumores posibles de tratar (Kobel, 2009).
combinada de fármacos basados en platino es el tratamiento de
primera elección para tratar la enfermedad recurrente, con o sin
reducción quirúrgica de volumen (Uygun, 2003). De los regíme- ■ Pronóstico
nes disponibles, la combinación de BEP es la que se usa con mayor En general, los SCST ováricos tienen un pronóstico mucho mejor
frecuencia porque tiene el índice de respuesta más alto conocido que los carcinomas ováricos epiteliales, sobre todo porque la
(Homesley, 1999). El paclitaxel es otro agente prometedor que está mayoría de las mujeres con SCST se diagnostica en la etapa I de
la enfermedad. Los tumores en etapas II a IV son raros, pero las Boyce EA, Costaggini I, Vitonis A, et al: The epidemiology of ovarian granulosa
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CAPÍTULO 36
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