Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Reyes (Dir): Diccionario Crítico de Ciencias Sociales
Generaciones / Clases de edad Enrique Martín Criado
Universidad de Sevilla
>>> ficha técnica
Los conceptos de generación y clase de edad son herramientas fundamentales para cualquier sociología de
las edades de la juventud, de la vejez..., que, renunciando a la identificación de la edad biológica con la
edad social, se plantee la producción social de las edades.
Buena parte de la investigación sociológica, en efecto, suele tomar, sin mucha reflexión, la edad como
simple variable independiente: la edad sería la variable estadística soñada. La relación simple y
unidireccional de esta variable con las "variables dependientes" ideología, voto, "actitudes", etc.
identifica, sin más, la contemporaneidad cronológica el hecho de pertenecer a la misma cohorte con la
identidad social. Esta identificación abusiva, o bien no suele explicitar sus presupuestos funcionando así
sobre una ideología implícita e incontrolada de los estadios de la vida (v.gr.: los jóvenes son impulsivos,
idealistas, irreflexivos...), o bien justifica esta identificación recurriendo principalmente a dos argumentos:
a) una naturaleza psicológica asociada a cada estadio de la vida así, la "psicología del joven"; b) una
identidad de condiciones de existencia para todos los pertenecientes a la misma cohorte.
El primer argumento no necesita mucho comentario: cae en el error típico de "sustancialización
psicologista": partir de presuntas "naturalezas psicológicas" para explicar los fenómenos sociales, en vez
de plantearse la producción social es decir, social e históricamente diferenciada de los sujetos.
En cuanto al segundo argumento, será discutido en lo que sigue a continuación. Nuestro argumento
principal es: hay que plantearse la construcción diferencial de las edades y de los sujetos a partir de las
dinámicas sociales que los originan: dinámicas que nos remiten, fundamentalmente, a las luchas por la
reproducción social de las posiciones, de los distintos grupos sociales. De esta manera, hay que distinguir
claramente el concepto de "cohorte" mera contemporaneidad cronológica, identidad de edades biológicas,
de los de "generación" y "clase de edad":
El concepto de "generación" nos remitirá a la problemática de la producción de diferencias entre los
miembros de diferentes cohortes de un grupo social cuando cambian las condiciones materiales y sociales
de existencia y de reproducción de ese grupo.
El concepto de "clase de edad" nos remite a la categorización que se establece, en el seno de cada grupo,
en función de la edad. Trazado de fronteras entre distintas condiciones asociadas a la edad "joven",
"adulto", "viejo"...., cada una con una serie de derechos, obligaciones, comportamientos, en fin, "esencias
sociales" asignadas, que hay que explicar, no a partir de "naturalezas psicológicas", sino a partir de las
condiciones de reproducción social de cada grupo y de las luchas que se producen en su seno a propósito
del tempo de la sucesión.
I. Generación
Dos autores son fundamentales para abordar teóricamente el concepto de generación: Karl Mannheim y
Pierre Bourdieu.
El concepto de generación es tratado de forma sistemática, por primera vez en la sociología, por Karl
Mannheim. Dos aportaciones del autor alemán son fundamentales en el planteamiento del problema:
a) una generación no es un grupo concreto, sino un grupo delimitado por compartir unas mismas
condiciones de existencia:
"la unidad de una generación no es un lazo social que tienda a la constitución de grupos concretos, incluso
aunque pueda ocurrir ocasionalmente que la unidad de la generación se convierta en el fundamento
consciente y unificador de la formación de grupos concretos" (Mannheim, 1990:41)
"A las unidades de grupos concretos se opone el fenómeno de la situación análoga de los hombres en el
espacio social un momento del análisis donde situación de clase y conjunto generacional son análogos.
"Nuestro primer paso en el análisis consiste por tanto en oponer el fenómeno de la situación a la formación
de 'grupos concretos'; y debería estar claro que el conjunto generacional reposa sobre una situación
análoga en el espacio social de individuos que pertenecen a una misma generación" (op. cit., p. 43).
b) la contemporaneidad cronológica no basta para formar generación.
"La contemporaneidad del nacimiento, de hacerse joven, adulto, viejo, no es constitutiva de la situación
común en el espacio social; es por el contrario en primer lugar la posibilidad que se sigue de participar en
los mismos acontecimientos, en la misma vida, etc. y, más aún, de hacerlo a partir de una misma forma
de estratificación de la consciencia. Es fácil demostrar que la contemporaneidad cronológica no basta para
constituir situaciones de generación análogas. (..) No se puede hablar de una situación de generación
idéntica más que en la medida en que los que entren simultáneamente en la vida participen potencialmente
en acontecimientos y experiencias que crean lazos. Sólo un mismo cuadro de vida históricosocial permite
que la situación definida por el nacimiento en el tiempo cronológico se convierta en una situación
sociológicamente pertinente. Además, hay que tomar en consideración aquí el fenómeno de la
estratificación de la experiencia" (Mannheim, 1990:5253)
A partir de estas citas, ya podemos ver lo que es fundamental para Mannheim: las condiciones materiales y
sociales a partir de las cuales se producen los individuos. Distinguir estas condiciones nos lleva a descartar
cualquier concepto de generación que sea puramente cronológico: hay que tener en cuenta también la
situación en la estructura social. Y ello por dos razones:
a) porque las experiencias que producirán los sujetos serán distintas según la posición en el espacio social.
b) porque estas experiencias tendrán efecto distinto sobre los sujetos en función de sus distintos habitus
(formas de "estratificación de la conciencia", en palabras de Mannheim) que también difieren según el
origen social.
En Mannheim nos encontramos ya, por tanto, con unas precisiones conceptuales que rompen con cualquier
intento de hablar de una generación que abarcase a todo el espacio social. Asimismo, en él encontramos
las razones por las que el concepto de generación es fundamental: nos remite a las variaciones en el
tiempo de las formas de producción de individuos variaciones que no se deben al tiempo en sí mismo, sino
a la variación de las condiciones sociales y materiales. Y estas variaciones cobran relevancia por la
importancia de los primeras etapas de la vida en la producción del individuo: en la "estratificación de la
experiencia": su formación supone unas determinaciones negativas y positivas sobre lo perceptible, sobre
lo pensable, sobre lo factible:
"la situación de clase y la situación de generación (pertenencia a clases de edad vecinas) tienen en común
circunscribir, por el hecho de su situación específica en el espacio sociohistórico, a los individuos en un
campo de posibles determinado y favorizar así un modo específico de experiencia y de pensamiento, un
modo específico de intervención en el proceso histórico. Cada situación descarta por tanto de entrada un
gran número de modos de experiencia, de pensamiento, de maneras de sentir y de actuar posibles y
restringe el margen de juego de los efectos de individualidad a posibilidades precisas y limitadas. Pero no
está todo todavía cubierto con esta delimitación negativa. Positivamente, a cada situación le es inherente
una tendencia a un modo de comportamiento, una manera de sentir y de pensar determinadas, tendencia
que el sociólogo debe aprehender a partir del peso específico de la situación. En este sentido, hablaremos
por tanto ahora de una tendencia inherente a cada situación, definible a partir de la especifidad de la propia
situación." (Mannheim,1990:45)
Retraduzcamos lo que dice Mannheim en términos de la teoría de Bourdieu: no podemos hablar de
generación más que en la medida en que se comparta, además de una contemporaneidad cronológica, una
misma situación en el espacio social que comporta unas mismas condiciones materiales y sociales de
producción de individuos. Esta coincidencia social y temporal hallarse en la misma situación del espacio
social en la misma época supondrá una producción similar de habitus.
Bourdieu planteará el problema en estos términos: las diferencias de generación son diferencias en el
"modo de generación" es decir, en las formas de producción de los individuos. Estas diferencias en el
modo de generación no afectan, en un momento determinado del tiempo, a toda la sociedad, sino que se
limitan, en cada momento, a grupos y campos concretos. Y es que estas diferencias en el modo de
generación nos remiten a las diferentes condiciones materiales y sociales de reproducción de los grupos
sociales.
El tiempo, por tanto, no es una variable independiente, sino que su eficacia no es otra que las de las
variaciones estructurales del campo de producción de los agentes. En una sociedad completamente
estática, en la que las condiciones sociales y materiales con que se encuentran los nuevos miembros son
idénticas a las que se encontraron los viejos en su tiempo, no habría diferencias de generación: las
diferencias entre "jóvenes" y "viejos" serían meras diferencias de clases de edad.
Cuando cambian las condiciones de reproducción de los grupos sociales y, por tanto, las condiciones
sociales y materiales de producción de nuevos miembros, es cuando se producen diferencias de
generación: los nuevos miembros son generados de manera distinta tanto como sujetos competentes
(cognitiva y pragmáticamente) como como sujetos morales:
"Una clase o una fracción de clase está en decadencia, y por consiguiente orientada hacia el pasado,
cuando no está en condiciones de reproducirse con todas sus propiedades de condición y de posición, y
cuando, para reproducir su capital global y mantener su posición en el espacio social (la de su familia de
origen o su posición presente), sus miembros más jóvenes, en una proporción importante, tienen que
realizar por lo menos una reconversión de su capital, que se acompaña con un cambio de condición,
marcada por un desplazamiento horizontal en el espacio social: cuando, en otros términos, la reproducción
de la posición de clase llega a ser imposible (desclasamiento) o no se cumple si no es mediante un cambio
de fracción de clase (reconversión). En ese caso, la transformación del modo de generación social de los
agentes determina la aparición de generaciones diferentes, cuyos conflictos no se reducen a aquello que
normalmente se inscribe en los conflictos generacionales, puesto que tienen por principio la oposición entre
los valores y los estilos de vida asociados al predominio en el patrimonio del capital económico o del
capital cultural." (Bourdieu, 1988: 4645)
No es posible, por tanto, trazar generaciones más que a partir del conocimiento de la historia específica del
campo: la eficacia del tiempo es la eficacia de las variaciones estructurales del campo de producción de
sujetos: del campo de reproducción de las posiciones de los grupos sociales:
"La historia estructural de un campo (ya se trate del campo de las clases sociales o de cualquier otro)
constituye en períodos la biografía de los agentes que en él se encuentran comprometidos (de suerte que la
historia individual de cada agente contiene la historia del grupo al que pertenece); en consecuencia, no es
posible separar en una población unas generaciones (por oposición a unas simples clases de edad
arbitrarias) si no es sobre la base de un conocimiento de la historia específica del campo en cuestión: en
efecto, únicamente los cambios estructurales que afectan a ese campo poseen el poder de determinar la
producción de generaciones diferentes, al transformar los modos de generación y al determinar la
organización de las biografías individuales y la agregación de esas biografías en clases de biografías
orquestadas y sometidas a un ritmo según el mismo tempo. Aunque tenga como efecto el sincronizar
durante un tiempo más o menos largo los diferentes campos y el confundir, por espacio de un momento, la
historia relativamente autónoma de cada uno de esos campos en una historia común, los grandes
acontecimientos históricos (revoluciones o cambios de régimen), que lo más a menudo son utilizados como
puntos de referencia en la periodización de los campos de producción cultural, introducen con frecuencia
unos cortes artificiales y desaniman en la búsqueda de las discontinuidades propias de cada campo."
(Bourdieu, 1988: 4656)
De todo lo anterior se deduce que hablar en términos de generaciones que abarcarían a toda la sociedad
generadas por una serie de acontecimientos fundadores una guerra, una crisis económica, la extensión del
sistema escolar, etc. que afectarían por igual a todo el espacio social es un error. Porque estos
acontecimientos aún los más brutales y, en principio, más globalizantes, como las guerras tienen efectos
muy distintos según la estructura del campo y la posición en el espacio social en que se hallen los sujetos.
En vez de partir de totalizaciones "la generación del 68", etc. buenas para los relatos periodísticos, pero
nefastas para los sociológicos, lo que hay que plantearse es los efectos, en cada campo particular, y para
cada grupo de agentes, de un acontecimiento que en principio abarca a todo el espacio social.
Asimismo, se deduce de lo anterior que para entender los famosos "conflictos de generaciones" no habría
que aludir a ningún tipo de invariante psicológica universal: por el contrario, estos conflictos deberían
explicarse a partir de las variaciones en los modos de generación de los sujetos en un campo determinado
las variaciones en los modos de reproducción social de los grupos sociales.
I.1. Delimitación de generaciones
Definidas las generaciones por las diferencias en el modo de producción de los sujetos en el interior de un
campo o de un grupo social, nos encontramos con un problema: ¿cómo delimitamos las generaciones, tanto
en el espacio social como en el tiempo?
En el espacio social: ¿cómo delimitamos un grupo social definido por unas mismas condiciones de
existencia?
En el tiempo: los cambios en las condiciones materiales y sociales de existencia son paulatinos, no
bruscos: así, los cambios en el sistema escolar aumento de la población estudiante y desvalorización de
los títulos escolares o en el sistema productivo crecimiento del paro, precarización del empleo no son
cambios bruscos, que podamos circunscribir a una fecha concreta.
Es el problema del paso de lo analógico a lo digital. Paso que nos remite a la paradoja de Eubúlides:
¿cuántos granos de trigo forman un montón de trigo?
Las paradojas se resuelven mediante un acto de violencia. Este lo puede llevar a cabo el sociólogo, en su
construcción del objeto; o los grupos sociales, en la dinámica de construcción política de grupos.
El sociólogo: la delimitación de fronteras generacionales dependerá de las categorías que el sociólogo
estime pertinentes y del grado de restricción o amplitud en la consideración de lo que son condiciones
sociales y materiales homogéneas:
"si se adopta una definición precisa de la pertenencia a una misma clase de condiciones de existencia, no
se pueden delimitar generaciones más que en el interior de un grupo estrechamente definido (clase o
fracción de clase especificada por la profesión y/o el sexo, región, etc...) o en un campo precisamente
definido del espacio social (campo político, campo de producción cultural). Pero se puede, a la inversa
adoptar una definición fluída (..) Es decir, que la extensión de una generación en el espacio social puede
variar de un grupo restringido de pretendientes en tal o cual campo (vanguardias literarias o artísticas) a la
cuasitotalidad de una clase de edad (como, en caso de guerra, en la movilización de los soldados de un
contingente) en función de la definición adoptada de la pertenencia a un mismo 'cuadro de vida histórico
social': de la entrada en el mismo momento en una misma profesión (que supone un mismo 'modo de
generación') a la simple participación en un mismo 'acontecimientofundador' (como una guerra o una crisis
política: la guerra de Algeria o Mayo 68), de la confrontación a una misma situación (la crisis del mercado
de empleo, por ejemplo) de toda una clase de edad, a la situación específica de los titulares del mismo
sexo de tal categoría de diploma." (Mauger, 1990: 11)
Pero la división de generaciones también es realizada por los propios grupos sociales en las luchas políticas
por las posiciones y por la apropiación de diversas especies de capital que son siempre, en una de sus
dimensiones, luchas simbólicas por construir los grupos, por trazar las fronteras entre unos grupos y otros.
En el caso de las generaciones, esta delimitación de fronteras se realizaría entre los "viejos" y los
"jóvenes" y nos remitiría a las luchas por la sucesión en el interior de un campo social. Los atributos
conferidos a cada grupo construido dependerían de la posición en el campo: así, los "viejos" legitimarían su
posición de poder remitiéndola a los valores de "sabiduría", "madurez", "experiencia", "cordura",
rechazando así a los jóvenes a los polos de la locura, del idealismo, de la irresponsabilidad, de la
irreflexividad. Por su parte, los "jóvenes" trazarían un cuadro inverso: la sabiduría, la prudencia, la
experiencia de los viejos se convertirían en "conservadurismo", "arcaismo", "senilidad": no serían seres
"completos", sino "acabados", "estancados" frente a las "nuevas ideas", a la "evolución", al "progreso"...
En resumen: para hablar de generaciones tenemos que conocer previamente la historia concreta del campo
concreto: la historia de las variaciones en las condiciones sociales y materiales de reproducción de los
distintos grupos sociales: de producción de sus miembros. El tiempo no es una variable independiente: su
eficacia depende de las variaciones estructurales del campo. La extensión en el espacio social e histórico
de una generación dependerá de las categorías del observador y de la extensión o restricción de lo que se
entienda como "homogeneidad de las condiciones de existencia". En todo caso, lo que no puede hacer es
partir del principio de alternancias generacionales que afectarían a todo el conjunto de la sociedad: lo que
se estaría haciendo en este caso es dejarse llevar por las construcciones simbólicas de la realidad de
aquellos grupos que, mediante un trabajo políticosimbólico de construcción de grupos mediante la
construcción de representaciones de las fronteras entre grupos impondrían la visión de su alternancia
generacional particular como alternancia generacional general.
II. Clases de edad
Conceptualmente distinta de la noción de "generación" es la de "clase de edad". Mientras que la primera
nos remite a las variaciones estructurales en el tiempo, dentro de un campo, de los modos de generación
de sujetos; la segunda nos remite, en un momento del tiempo, a la división que se opera, en el interior de
un grupo, entre los sujetos, en función de una edad social: definida por una serie de derechos, privilegios,
deberes, formas de actuar... en suma, por una 'esencia social' y delimitada por una serie de momentos
de transición que difieren históricamente: matrimonio, servicio militar, primera comunión, certificados de
escolaridad.... A su vez, cada grupo social establece una serie de normas de acceso más o menos
codificadas y ritualizadas en forma de "ritos de paso" de una clase de edad a otra.
Esta división de clases de edad, por tanto, es variable históricamente: no depende de una serie de
"naturalezas psicológicas" previas, sino que se construye en el seno de cada grupo social en función de sus
condiciones materiales y sociales y, sobre todo, de sus condiciones y estrategias de reproducción social.
Desde este punto de vista, la división en clases de edad no es algo que el investigador pueda imponer
desde fuera a su objeto de estudio a partir de unas categorías de división previas. Por el contrario, debe
comenzar por delimitar grupos sociales con los problemas de categorización que esto comporta y que
hemos señalado más arriba y, en el interior de estos, en sus dinámicas de reproducción social, reconstruir
las dinámicas de construcción de clases de edad. Lo que implica, frente al "olvido" corriente de las clases
sociales en la mayoría de los estudios de sociología de las edades, analizar siempre las clases de edad en
relación con las dinámicas de reproducción de las diferencias sociales, de las relaciones de dominación
entre unas clases y otras:
a) En primer lugar, la división de clases de edad diferirá, tanto en extensión, como en contenido y sentido,
según los campos, las clases sociales y las fracciones de clase:
"A las nociones vagas de 'familia', 'escuela', 'trabajo', utilizadas para construir el esbozo de un 'prêtà
porter' biográfico, hay que reemplazarlas por las de las posiciones ocupadas en el espacio sociológicamente
construido de las familias, de las posiciones ocupadas en tal o cual red de la escuela, de las posiciones
ocupadas en la división capitalista del trabajo. Y, como la sucesión de las posiciones ocupadas en el espacio
de las familias, en el campo escolar, en el campo de la división del trabajo no se opera al azar (..) hay que
sustituir el 'prêtáporter' biográfico inicial por haces diferenciados de trayectorias biográficas: trayectorias
biográficas de clases. (...) A diferencia, por tanto, de una periodización biológica o psicológica de las
edades de la vida, que define respectivamente una 'juventud biológica' y una 'juventud psicológica',
categorías naturales, universales y estables, una periodización sociológica no puede definir la categoría de
juventud como edad de la vida más que clase social a clase social, sexo a sexo, en una sociedad
determinada, en una época determinada." (Mauger, 1986: 50)
b) En segundo lugar, al ser la definición de las clases de edad función de las condiciones estructurales de la
reproducción social de las diversas fracciones de clase, cualquier delimitación, por parte del investigador,
de una construcción determinada de las clases de edad no será más que la congelación sincrónica de un
proceso de continua redefinición, negociación.
c) En tercer lugar, hay que tener en cuenta que buena parte de las luchas simbólicas que son siempre
luchas políticas son luchas por la definición de los grupos, de las fronteras que dividen los grupos. Y que el
rigor o la fluidez en esta definición de las fronteras constituyen apuestas sociales. El conflicto entre
sucesores y detentadores del poder en un campo 'jóvenes' y 'viejos' es un conflicto por la definición de la
frontera.
BIBLIOGRAFIA
BOURDIEU, Pierre, 1988, La distinción. Taurus. Madrid.
CASTEL, Robert, 1995, Les métamorphoses de la question sociale. Une chronique su salariat. Fayard. Paris
MANNHEIM, Karl, 1990, Le problème des générations. Nathan. Paris. (ed. orig., 1927)
MAUGER, Gérard, 1986, "La categorie de jeunesse. Essai d'inventaire, de classement et de critique de
quelques usages courants ou savants", en PROUST, François (ed.), Les jeunes et les autres. Contribuions
des sciences de l'homme à la question des jeunes. Centre de Recherche Interdisciplinaire de Vaucresson.
1990, "Unité et diversité de la jeunesse". Journées d'études francoallemandes. "Les mutations de la
jeunesse et de ses représentations en France et en Allemagne dans les années 80". Deutsches Jugend
Institut, "Jeunesses et Sociétés". OFAJ. Vaucresson, 252627 octubre 1990.
THEVENOT, L, 1979, "Une jeunesse difficile. Les foctions sociales du flou et de la rigueur dans les
classements". Actes de la Recherche en Sciences Sociales, n° 2627, pp. 318.
THEORIA | Proyecto Crítico de Ciencias Sociales Universidad Complutense de Madrid