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Buenos días profesor, buenos días compañeros, mi nombre es Luciano Astudillo (Presentación de
compañeros), hoy día les vengo a hablar sobre la Historia de la psicología, para ser más específico,
en el capítulo 4 de este libro llamado “Lo Psicológico” en la primera mitad del siglo XIX, escrito
por Francisco Tortosa y Cristina Civera, y en mi caso, me tocó el capítulo 4.1 titulado “Ideas
psicológicas en la filosofía británica previctoriana” y bueno
¿Qué es el asociacionismo?
Teoría psicológica según la cual cualquier fenómeno psicológico deriva de la asociación de ideas
simples.
David hume, pretendió fundar una ciencia del hombre que sirva de apoyo a las otras ciencias, ya
que, reduce los contenidos mentales a impresiones e ideas que se diferencian entre sí por el grado
de fuerza y vivacidad con que inciden sobre la mente.
- Para ver como los fenómenos mentales se conectan entre sí hay que tener en cuenta varios
puntos:
3) La fuerza de la conexión.
4) Los sentimientos están conectados más fuertemente en la medida en que son más o menos
recientes.
5) Nuestros sentimientos se asocian más firmemente entre sí en la medida que están más
disociados de otros fenómenos.
Finalmente señala como ley secundaria de la asociación el hábito, a quien atribuye una influencia
muy poderosa en la modificación de las leyes primarias de la asociación.
Con James Mill el asociacionismo llegará a su versión mecanicista más radical. Prescinde de las
facultades como agentes de conexión de los elementos mentales. Asociación significa conexión
automática de unos contenidos con otros sin que la mente intervenga de modo alguno.
Concibe (Mill, 1829) la mente como pasiva, receptiva de sensaciones simples, a partir de las cuales
se forman sensaciones complejas mediante los eslabones asociativos de los elementos mentales.
Esos eslabones asociativos de sensaciones o de ideas se forman por medio de un doble proceso:
- Mill complementó los mecanismos asociativos para explicar la variedad de resultados posibles.
No basta con la ley de la contigüidad y sucesión. Hay que tener también en cuenta la vivacidad de
las sensaciones y su mayor o menor frecuencia. Ello explicaría por qué unas asociaciones son más
permanentes y otras más lábiles.
- Un paso más allá lo daría su hijo, John Stuart Mill, que defendió a legitimidad de la Psicología.
Consideraría legítimo el método de la auto-observación empírica retrospectiva, afirmando que la
praxis personal nos advierte de su realidad y que, además, “un hecho puede ser estudiado por
medio de la memoria, no en el momento exacto en el que lo percibimos, sino en un momento
posterior (...) no podemos dudar de lo que vivenciamos”. La autoconciencia posibilita un
conocimiento directo e inmediato de la mente.
Liberaliza el duro mecanicismo de su padre. Frente a una rígida concepción sensista y pasivista de
la mente, defiende su carácter productivo.
Niega las leyes asociativas secundarias, acentuando el papel de las primarias, especialmente del
principio de semejanza en el que vio el fundamento de la eficacia del de contigüidad.