PROCEDIMIENTO : PROCEDIMIENTO ORDINARIO DE

APLICACIÓN GENERAL
MATERIA : NULIDAD DEL DESPIDO, DESPIDO INJUSTIFICADO
Y COBRO DE PRESTACIONES LABORALES ADEUDADAS
DEMANDANTE : CLAUDIA ROSARIO ADASME DONOSO
CÉDULA DE IDENTIDAD: 13.979.658-6
DOMICILIO : ALONSO DE ERCILLA 2218, PAPUDO
ABOGADO PATROCINANTE : JOSE ESPINOSA RODRIGUEZ
CÉDULA DE IDENTIDAD : 10.027.792-1
DOMICILIO : AV ALEMANIA 5882, DEPTO. 401 VALPARAISO.
DEMANDADO : ILUSTRE MUNICIPALIDAD DE PAPUDO
RUT : 69.050.300-K
REPRESENTANTE LEGAL: ROSA PRIETO VALDES
RUT : 8.320.872-4
DOMICILIO : CHORRILLOS Nº 9, COMUNA DE PAPUDO.

EN LO PRINCIPAL: NULIDAD DEL DESPIDO, DESPIDO

INJUSTIFICADO Y COBRO DE PRESTACIONES LABORALES
ADEUDADAS;
EN EL PRIMER OTROSÍ: NOTIFICACION DE DEMANDA A
EMOPRESAS QUE INDICA
EN EL SEGUNDO OTROSÍ: ACOMPAÑA DOCUMENTOS;
EN EL TERCEROTROSÍ: PATROCINIO Y PODER.

S.J.L en lo Laboral
LA LIGUA
CLAUDIA ROSARIO ADASME DONOSO, chilena, Asistente
Social, domiciliada en calle Alonso de Ercilla 2218, Papudo,
Cédula de Identidad N.º 13.979.658-6, a US. Con respeto digo:
Que, de conformidad a lo dispuesto en los artículos 162, 168,
446 y demás disposiciones pertinentes del Código del Trabajo,
y encontrándome dentro del plazo legal, vengo en deducir
demanda en Procedimiento de Aplicación General por Nulidad
del Despido, Despido Injustificado y Cobro de Prestaciones
Laborales Adeudadas, en contra de la ILUSTRE
MUNICIPALIDAD DE PAPUDO, Rol Único Tributario N.º
69.050.300-k, cuya representante legal es doña ROSA PRIETO
VALDES, Alcaldesa, Cedula de Identidad Nº 8.320.872-4,
ambos domiciliados para estos efectos en Chorrillo Nº 9,
Comuna de Papudo, Región de Valparaíso de conformidad a los
antecedentes de hecho y fundamentos de derecho que a
continuación paso a exponer:

I.- EXPOSICIÓN CIRCUNSTANCIADA DE LOS HECHOS.

1. Antecedentes de la relación laboral.

Comencé a prestar servicios bajo subordinación y dependencia

a partir del día 01 de Abril del año 2003, a favor de la
demandada Ilustre Municipalidad de Papudo, mediante una
serie de sucesivos, permanentes y reiterados contratos de
Honorario, mismos que en la realidad eran contratos de
Trabajo.
La totalidad de labores que desempeñe durante todo el periodo
laboral, fueron con constantes aumentos de sus funciones y
remuneraciones, hasta el momento del término de la relación
laboral, esto es el día 27 de marzo del año 2020.

En efecto, durante todo el tiempo que desempeñe labores a

favor de la demandada, realice una seria de labores, llegando a
ocupar el “cargo” de encargada de Organizaciones comunitarias
de la Ilustre Municipalidad de Papudo, desempeñando además
un sinnúmero de otras funciones, todas propias de la entidad
demandada y que obviamente no guardaban ninguna relación
con los cometidos específicos previstos en los permanentes y
sucesivos contratos de honorario.
Durante todo el periodo estuve sujeta al cumplimiento de
jornadas de trabajo claramente establecidas, al poder de
mando de mis superiores y, a su vez permanentemente sometida
al deber de obediencia en el desempeño de mis funciones.
Tal como réferi, los sucesivos contratos celebrados con la
demandada, constituyen una abierta infracción a la legislación
vigente y aplicable en la materia, pues estos denominados
“contratos de Honorarios”, mismos que en la especie eran un
mero maquillaje a una relación laboral común de aquella
prevista en el código del trabajo. En efecto, los contratos
referidos, analizados al prisma del principio de la supremacía de
la realidad constituyen una efectiva relación laboral, sujeta a
vínculo de subordinación y dependencia, como más adelante
expondré.
SS., durante todo el tiempo que trabaje para la demandada,
Ilustre Municipalidad de Papudo, esto es por más de 16 años
realice un sin número de funciones, tal como podrá verificarse de
los contratos de honorario que acompaño a esta presentación y
de los que se aportaran durante el termino probatorio, esta
multiplicidad de funciones me llevo a ocupar incluso un especial
nombramiento dentro de la Dirección de Desarrollo Comunitario
de la Municipalidad, donde se me designo como “Encargada
comunal de Organizaciones Comunitarias” debiendo asumir en
dicho rol la representación de la corporación edilicia ante
órganos de la administración del estado, ante las organizaciones
y en el equipo de la Dirección de Desarrollo Comunitario labores
de coordinación administrativa tendientes a atender de la mejor
manera a la comunidad organizada de la comuna.
Cabe recordar en estén punto que la demandada constituye una
corporación autónoma de derecho público, con personalidad
jurídica y patrimonio propio, reglada por la ley orgánica
Constitucional de Municipalidades cuya finalidad primordial es
la de satisfacer las necesidades de la comuna y asegurar a los
vecinos de la misma su participación en el desarrollo y progreso,
económico, social y cultural.
2. Regulación de la relación laboral

Indispensable resulta en este punto señalar a SS. que la relación

contractual existente entre esta parte demandante y la
demandada Ilustre municipalidad de Papudo, no se sujetó a las
normas estatutarias de la ley 18.883, pues no mantenía al
término de la relación contractual la calidad de funcionario de
Planta o Contrata de la corporación edilicia. Tampoco mi relación
contractual se veía reglada o regulada por alguno de los otros
estatutos aplicables a los funcionarios municipales, como son el
Estatuto de la Atención Primaria de Salud, el Estatuto Docente o
el Estatuto de los funcionarios auxiliares de la educación.

Conforme a los contratos suscritos se prestaron servicios desde

el año 2003 hasta el día 27 de marzo del año 2020, según
acreditare en la etapa procesal correspondiente, siendo el último
de los contratos el de fecha 23 de Diciembre de 2019, mediante
el cual se me asignaba el cometido especifico de Programa de
Apoyo a las Organizaciones Comunitarias, en materias propias
de estas, Programa de Apoyo a la comunidad, enfocado al
emprendimiento en las fichas de Postulacion FIP 2020,
coordinación y selección de expositores, mismo que en la práctica
era absolutamente sobrepasado, por cuanto cumplía una serie
de otras funciones llegando incluso a desempeñarme como
Encargada de organizaciones Comunitarias de la
Municipalidad, como ya se ha señalado reiteradamente.
A pesar de desempeñar funciones que van mucho más allá de
un simple cometido especifico se me contrató bajo la norma del
artículo 4º de la Ley N° 18.883, esto es, aquella que permite la
contratación sobre la base de honorarios a profesionales y
técnicos de educación superior o expertos en determinadas
materias.

Sin embargo la demandada, olvida muy convenientemente el

cumplimiento de las exigencias previstas en la citada norma,
para la aplicación de dicha modalidad de contratación, esto es:
a) Que tales materias no sean las habituales de la
municipalidad;
b) Que se trate de cometidos específicos;
c) Que sean transitorios y temporales.

Muy por el contrario, como demostrare en la etapa procesal

pertinente, los servicios que preste bajo subordinación y
dependencia, correspondían a materias habituales de la
Municipalidad, no se trataba de funciones específicas ni mucho
menos transitorias, pues como dije, me desempeñe incluso como
encargada de Organizaciones Comunitarias de la Comuna. Así
las cosas, la relación mi ex empleadora de llevo a cabo fuera del
marco legal establecido en el artículo 4 de la ley 18883, razón
por la cual resulta aplicable a este caso las normas de derecho
laboral común previstas en el Código del Trabajo.
Este criterio jurídico ha encontrado sustento en nuestros más
altos tribunales y así ha sido declarado por la Excelentísima
Corte Suprema de Justicia en Sentencia de Reemplazo del
Recurso de Unificación de Jurisprudencia, Rol 11.584-2014, de
fecha 01 de abril del año 2015, caratulado “Juan
Pablo Vial con Municipalidad de Santiago”
La situación fáctica de la causa citada es similar a la que hoy
ponemos ante el arbitrio de SS. en ambos casos la relación
laboral es de larga data, los servicios se extendieron por largo
tiempo, se prestaron bajo las características esenciales de un
contrato de trabajo, con cometidos genéricos, permanentes en el
tiempo y prestados en forma ininterrumpida.

Reiteraremos lo referido anteriormente en cuanto a que la

relación laboral de las partes nunca se sometió efectivamente a
lo previsto en la norma excepcional del artículo 4 de la ley 18883,
y en consecuencia no nos encontramos en presencia de una
contratación sometida a un estatuto laboral especial conforme al
artículo 1 inciso 2 del Código del Trabajo, que dispone: “Estas
normas no se aplicarán a los funcionarios de la Administración
del Estado centralizada y descentralizada, del Congreso
Nacional y del Poder Judicial, ni a los trabajadores de las
empresas o instituciones del Estado o de aquéllas en que éste
tenga aportes, participación o representación, siempre que
dichos funcionarios o trabajadores se encuentren sometidos por
ley a un estatuto especial”; y tampoco siendo aplicable a este
caso el artículo 4 de la ley N°18.883.

3. Antecedentes del término de la relación laboral.

La relación laboral termina mediante el envió de carta ingresada

en oficina de partes de la Corporación demandada con fecha 27
de marzo del corriente en la que se hace una somera
aproximación a los fundamentos de hecho de esta demanda,
mismos que transcribo para conocimiento de SS. y que son del
siguiente tenor: “Por medio de la presente comunico a usted, mi
decisión de poner término del contrato de trabajo que nos liga
poniendo fin a mis funciones a partir del día de hoy 27 de Marzo
del año 2020, lo anterior en virtud de lo dispuesto en el artículo
171 en relación al Número 7 del artículo 160 del Código del
Trabajo, esto es, "Incumplimiento Grave de las Obligaciones que
impone el contrato de trabajo".
Fundo mi decisión en el hecho de que Uds., han mantenido
por más de 16 años una relación laboral con esta funcionaria,
manteniendo la misma vigente en forma permanente mediante
una sucesiva concatenación de contratos a los cuales se les ha
intitulado, Contrato de Prestación de Servicios a Honorarios, en
circunstancias que como es de público conocimiento, mi relación
para con la Ilustre municipalidad de papudo, fue siempre una
relación de carácter laboral.
En efecto, mantenía una obligación de asistencia diaria,
cumplía jornada de trabajo y tenía supervigilancia directa de
una jefatura, esto es la Dirección de Desarrollo Comunitario, las
funciones por mi desempeñadas en la referida dirección eran
ser jefe del departamento Comunitario, manteniendo
permanente relación con las diversas organizaciones de la
Comunidad y relacionándome en las diversas y múltiples tareas
tanto con los directivos municipales cuanto dirigentes sociales,
además de lo anterior cumplía funciones de apoyo a la gestión y
por largos años me desempeñe como encargada de la
modulación de la Feria Internacional, cooperaba en la redacción
y confección de diversa documentación y desde mi titulación
como asistente social he colaborado sustancialmente también en
las materias propias de la Dirección a la cual servía. Durante
todo este tiempo en forma permanente la municipalidad ha
desconocido la relación contractual y no me ha pagado las
cotizaciones previsionales y de salud, como tampoco me ha dado
el derecho a vacaciones pagadas y la entrega de los beneficios
que la institución otorga a sus funcionarios en materia de
escolaridad, bonos y reajuste fiscal de remuneraciones,
estimando que todo lo anterior es una flagrante vulneración de
mis derechos laborales y consecuentemente me habilita a llevar
adelante el término de la relación laboral al amparo del código
del trabajo.”
Así las cosas, debe entenderse que la acción se plantea en
términos de auto despido previsto en el artículo 171 del Código
del Trabajo fundada en los graves, permanentes y sostenidos
incumplimientos de la demandada a las obligaciones que le
impone al ley laboral, en especial aquellas que dicen relación con
duración de la jornada, pago de horas extraordinarias, feriado
legal y por supuesto pago de las correspondientes cotizaciones
previsionales. En tal razón debe producirse condena de la
demandada al pago de las indemnizaciones contempladas en el
artículo 162, 163 y a los recargos del artículo 168 del Código del
trabajo, según se referirá en el acápite correspondiente.

4. De la Subordinación y Dependencia:

En este punto debemos referir a SS. que la demandada no

considero al momento de la contratación original, como en
ninguna de las restantes contrataciones (efectuadas con el solo
animo de dar una apariencia de juridicidad administrativa a la
relación) el estatuto jurídico idóneo aplicable a la contratación.
Debemos señalar que la Municipalidad de Papudo, en forma
unilateral impuso las condiciones de contratación, sin reconocer
que la relación contractual más allá de lo que señalen los
documentos era una relación de carácter laboral, pues las
diversas regulaciones establecidas por la demandada,
desvirtuaron la contratación de honorarios bajo la cual
intentaban disfrazar la relación laboral.
Haremos una breve detención para tratar de explicitar las
diferencias que se suscitaron entre los documentos y los hechos,
pues la realidad de la contratación publica, ha hecho a las
municipalidades en términos generales entes que disfrazan u
ocultan sus relaciones laborales bajo las formulas de la
contratación a honorarios.
Existen sendas diferencias entre la realidad de los hechos y los
documentos en que la demandada sustento la contratación
intentando darle la apariencia de legitimación administrativa.
En este punto nos referiremos a la forma de la prestación, donde
en las contrataciones efectuadas vía código del trabajo, la forma
es una sola, es aquella que estipula el contrato, en materia de
contratación a honorarios debemos recordar que esto no es así,
pues la contratación a honorarios puede revestir la modalidad
de arrendamiento para la confección de una obra material o la
de arrendamiento de servicios personales
Recordemos que como se ha señalado esta demandante presto
servicios a la demandada por más de 16 años en forma
ininterrumpida, realizando una multiplicidad de labores
diferentes y llegando a ocupar cargos de jefatura el interior de
la corporación edilicia, mismos que normalmente solo se
desempeñan en el aparato estatal por funcionarios de la planta.
Entre las innumerables funciones que desempeñaba a diario en
mi trabajo están:
a) “Encuestadora Digitadora”
b) “Apoyo”, donde ejecute entre muchas otras las siguientes
funciones:

 En feria internacional de papudo, se coordinaba la

instalación de expositores, se participaba de los trámites
de selección de los expositores, se realizaban las
cobranzas del stand de la feria y se actuaba como
coordinadora entre la Dirección de desarrollo comunitario
y los expositores en sus requerimientos diarios.
 En el área social para escuelas de verano coordinando
salida de niños, niñas y adolescentes, coordinar los
buses de transportes, las colaciones de los menores; para
la unidad social propiamente tal, realice en el último
tiempo visitas domiciliarias atendida mi calidad de
 asistente social, elabore informes y memos internos sobre
situación de familias de la comuna.
 Durante aproximadamente cinco años fui Encargada de
Fomento Productivo del Municipio, cumpliendo la
representación del Municipio en las mesas Técnicas de
Fosis hasta el año 2019, Postulación a proyectos de
emprendimiento a diversos emprendedores de la comuna,
Formulación de talleres para adquirir herramientas para
potenciar habilidades emprendedoras.
 Área registro social de hogares, encuestas, cambios de
hogar, cambio de situación económica, visitas
domiciliarias y aplicación de encuestas en domicilio
 En el Área Comunitario prestaba apoyo permanente en
las diversas actividades que llevaba adelante la
Dirección de desarrollo comunitario, tales como, el
Festival Ranchero, la noche del pescador, el año nuevo en
el mar, la feria internacional de turismo,
conmemoraciones del día de la madre, del padre, del
niño, aniversario de adultos mayores, y otras
organizaciones de la comuna y otro sin número de
actividades llevadas adelante por la municipalidad, como
la semana Pullallyna, la semana Papudana,
competencias y torneos, etc.
 Finalmente me desempeñe como Encargada de
Organizaciones Comunitarias de la Comuna, el que
consistía en estar a cargo de todas las organizaciones de
la Comuna, apoyarlas y asesorarlas en diversas
materias propias de su funcionamiento. Dentro de estas
funciones asesoraba en materias de Elecciones de
Directorio, Actualización en el Registro de Receptores de
Fondos Públicos, Informaba constantemente las
publicaciones de Fondos concursables, gestionaba
recursos para las organizaciones, apoyaba en materias
de rendición de Subvenciones, asistía constantemente a
reuniones, posterior a la jornada de trabajo, en horarios
relativos, generalmente entre las 19.00 y las 22.00 horas,
formule proyectos para muchas organizaciones los cuales
fueron adjudicados por las mismas, Año a año asesore y
apoye las postulaciones a los fondos Autogestionados de
Senama para todos los Clubes de Adulto Mayor de la
Comuna, Coordine el Desarrollo de la mesa Comunal del
 Adulto Mayor, Gestione diversas capacitaciones para
Juntas de Vecinos, Clubes Deportivos, Clubes de Adulto
Mayor y Centros de Madres, Coordine el Programa
Vacaciones Tercera Edad, Coordine Programa
Vacaciones Familiares, Coordine durante las 14
Versiones de la Feria Internacional de Papudo los
expositores, Este cargo lo desempeñe desde el año
2010, este cargo es un cargo de responsabilidad de
carácter permanente y habitual de la institución
demandada y como tal jamás debió de contratarse bajo
la fórmula de un contrato de arrendamiento de obra
material o de servicios.

Ahora bien, es dable además referirnos a la forma en que se

prestan los servicios, pues en los servicios contratados bajo la
modalidad de contrato de trabajo, el trabajador presta delo
servicios en forma PERMANENTE y estos constituyen servicios
propios de la institución, en cambio en el contrato de honorarios
el profesional lo hace de manera independiente, a título de
asesoría, consulta o investigación, o bien en función de la
ejecución de una obra o proyecto determinado.
En mi caso preste servicios (bajo subordinación y dependencia)
por más de 16 años a la Ilustre municipalidad de Papudo, de
manera constante y permanente, sujeta a cumplimiento de
jornada de trabajo, al cumplimiento de instrucciones impartidas
por mis superiores y con permanencia en las dependencias de
la institución.
Es de relevancia referir que al ser labores de naturaleza
intrínseca de la demandada Municipalidad de Papudo, mis
labores requerían de permanecía en las oficinas de la
Corporación edilicia y en terreno, desplegando funciones propias
de la institución, sin que durante todo el tiempo de servicio a la
demandada, haya efectivamente cumplido funciones propias de
una contratación a honorarios bajo la forma de un contrato de
arrendamiento de obra material ni de servicios.
A mayor abundamiento referiremos en este acápite sobre las
instrucciones que el empleador impartía para el desempeño de
mis funciones pues como sabemos en el contrato de trabajo el
trabajador esta constantemente sometido al deber de
obediencia, lo que es en la practica un claro índice de la
subordinación y dependencia, propia de este tipo de
contratación.
A contrario en el contrato de Honorarios el profesional no recibe
órdenes, ni instrucciones con motivo de su trabajo, podría
eventualmente recibir lineamientos o directrices, pero nunca
órdenes directas de parte de quien le ha contratado.
SS. durante todos los años que trabaje en la Municipalidad,
estuve permanentemente sujeta a jefatura, en mis primeros
años como funcionaria, recibía órdenes directas de quien era el
Director de Desarrollo Comunitario, don Rodolfo Fernández
Alfaro, posteriormente de don Claudio Cofre Nuñez y de don
Mario Bustamante, del administrador municipal de la época don
Wilson Astudillo, y de Claudio Cofre Nuñez. Estando en todo
momento sujeta las instrucciones impartidas, la permanente
observación de mi desempeño diario y control de horario de
entrada y salida. Durante todas mis jornadas laborales debía
desplegar una serie de labores, actividades y trabajos que
emanaban del mando y dirección que estos superiores ejercían
a nombre de mi empleadora.
Las referidas instrucciones eran entregadas diariamente en
forma verbal y escritas a través de correo electrónico y
mensajería de texto, en reuniones semanales y diarias, todo lo
que acreditaremos en la etapa procesal correspondiente.
La constante dirección de la jefatura directa no constituye un
simple lineamiento, sino que un claro ejemplo de existir un
vínculo de subordinación y dependencia, pues me veía
compelida al cumplimiento sin posibilidad de negarme.
En este punto del análisis efectuaremos un paralelo entre la
realidad de la prestación de los servicios y lo que
documentalmente está señalado en cuanto al cumplimiento de
una jornada laboral. Recordemos que en el caso de contrato de
trabajo, el trabajador no solo tiene la obligación de asistir a
prestar sus servicios, sino que además debe hacerlo en forma
regular y periódica en las dependencias de la empresa, de
manera tal que la asistencia es una obligación durante el
periodo de la jornada de trabajo. Por su parte en la regulación
de los contratos a Honorarios el profesional No está obligado a
asistir de forma regular a la empresa ni mucho menos está
obligado a cumplir una determinada jornada de trabajo.
Como acreditare durante la secuela del juicio, durante los más
de 16 años que trabaje para la demandada, siempre estuve
vinculada a la misma por extensas jornadas de trabajo, asistí
regularmente al cumplimiento de mis labores diarias e incluso
trabajando en una multiplicidad de ocasiones los fines de
semana en días sábados domingos y festivos
La jornada de trabajo se distribuía de lunes a viernes en dos
parcialidades de 8:30 a 13:30 horas y luego de 16:00 a 20:00
horas. Hago presente SS. Que en muchísimas ocasiones
producto de mi cargo como encargada de organizaciones
comunitarias por expresas instrucciones de mi jefatura, esto es
el director de desarrollo comunitario, debía concurrir a prestar
servicios en horarios diferentes en las tardes, en especial los
días en que había que constituir alguna organización o en
aquellas ocasiones en las que se debía participar de alguna
reunión, donde la jornada de tarde concluía en una multiplicidad
de ocasiones cerca de las 23 horas.
Junto con lo anterior señalar que muchas veces las
Constituciones de Organizaciones Sociales en las cuales
participaba con mi Jefatura Directa, es decir el Director de
Desarrollo Comunitario lo debíamos hacer los fines de Semana
que eran las fechas que los vecinos podían reunirse.
Indudablemente ello es un indicio sustancial para establecer la
efectividad de la relación laboral.
A mayor abundamiento debemos señalar respecto del lugar y
regularidad de los servicios que los mismos en el código del
trabajo se conciben para que el trabajador los preste en
dependencias de la institución en forma continua y permanente,
tal como ocurría en mi caso, donde me desempeñe siempre en
dependencias de la Dirección de desarrollo comunitario de la
Ilustre Municipalidad de Papudo, a diferencia de lo que ocurre
en el caso de los honorarios puros y simples que no están afectos
a dicha circunstancia.
Hago especial mención que siempre estuve dotada de ropa
institucional, de materiales institucionales como teléfono,
papelería, computador contaba con oficina propia en las
dependencias de calle El Maitén número 19 de Papudo, lugar
donde funciona la dirección de desarrollo comunitario e incluso
tenia personal a mi mando, entregándome la demandada, todos
los insumos para el cumplimiento de las tareas que se me
encomendaban por parte del director de desarrollo comunitario.
Ahora me referiré al pago de los servicios prestados, mismos que
en el caso del contrato de trabajo corresponden a la retribución
o estipendio que obtiene el trabajador a cambio de la prestación
de sus servicios, lo que se denomina Remuneración. Por su parte
en el contrato de Honorarios, la remuneración se denomina
Honorario.
Si bien en la práctica, emití boletas de honorario para obtener el
pago de mi sueldo, en la práctica recibía la contraprestación
directamente del Departamento de Administración y Finanzas,
recibiendo en el mes de febrero de este año 2020. Una
remuneración que ascendió a las suma de $ 1.500.000. (un
millón quinientos mil pesos)
Conforme al principio de la realidad y de acuerdo con la
cotidianeidad del pago, esta constituía una forma de
remuneración encubierta en un pseudo y peculiar honorario.
Mismo que se pagaba previa confección de un Informe Mensual
de Gestión que se adjuntaba a la boleta emitida a nombre la ex
– empleadora y del cual el municipio guarda registro, para
efectos de acreditar la imputación del gasto a un determinado
ítem presupuestario.
En este punto debemos menesterosamente hacer una nueva
detención para referirnos a la existencia misma del Vínculo de
subordinación y dependencia toda vez que al existir este vínculo
indudablemente existe una relación laboral entre el trabajador y
el empleador, siendo esto un elemento propio de esta
contratación, por el contrario en el contrato de honorarios no
existe tal vinculo, pues las partes en este tipo de contrato están
unidas por una relación que se limita al cumplimiento del
servicio específico contratado y al pago del honorario
comprometido.
En la especie, entre esta demandante y su ex empleadora
existió por más de 16 años, un vínculo de
subordinación y dependencia, circunstancia que se
acreditará en la etapa procesal correspondiente.
Todo esto, conforme a las labores que desempeñaba en virtud
de mi contrato, de las jornadas de trabajo de las que era objeto,
las ordenes e instrucciones impartidas por mis superiores
directos con asistencia diaria y extensiva en el tiempo a las
dependencias municipales y demás lugares en los que debía
ejercer mis labores fuera de mi jornada laboral, siempre bajo la
atenta vigilancia de cumplimiento por parte de mi superioridad
directa.
Siendo todos los elementos referidos aquellos que permiten
determinar la efectiva existencia de una relación de carácter
laboral regido por el artículo 7° del Código del Trabajo, y que
desconoció en todo momento la Municipalidad de Papudo solo
corresponderá que en definitiva SS. luego de las probanzas que
esta parte rendirá declare que dichos indicios o elementos
referidos constituyeron el fundamento de una sentencia que
declare efectivamente la existencia de la relación laboral

Junto a todos los elementos ya referidos es menester referir a

SS., que mis remuneraciones ascendía a la suma de
$1.500.000.- (un millón quinientos mil pesos)

Referiré nuevamente a SS. que mi ex empleadora me exigía

previo al pago de mis remuneraciones la emisión de una boleta
de honorarios y un informe de gestión, el cual daba cuenta de
las funciones desarrolladas mes a mes para que sea coherente
con la respectiva boleta.

De la nulidad del despido y del despido injustificado.

Por las razones anteriormente expuestas, resulta evidente que la

demandada nunca ha dado cumplimiento a su obligación legal
de enterar en arcas de la entidad administradora de previsión
mis cotizaciones previsionales, de salud y seguro de cesantía,
obviamente no ha dado cumplimiento a lo dispuesto por el
artículo 162 inciso 5 en cuanto a enterar previo al término de la
relación laboral en arcas de las instituciones correspondientes
las cotizaciones previsionales, ni acompañar los antecedentes
que las acrediten como pagadas.
La ley ha dispuesto SS que si el empleador no hubiere efectuado
el íntegro de dichas cotizaciones previsionales del trabajador, el
DESPIDO simplemente no producirá efecto. Situación que es
absolutamente compatible con el caso de autos, precisamente
cuando la causal de término de la relación laboral invocada, es
el grave incumplimiento de las obligaciones que impone el
contrato de trabajo, por no haber enterado jamás las
cotizaciones previsionales y de salud de esta trabajadora
en las instituciones de previsión social correspondientes.
El incumplimiento de los deberes señalados me franquea la
posibilidad de reclamar la aplicación de la denominada “ley
Bustos”
Como ha sido expuesto previamente en esta demanda, mi ex
empleadora adeuda, cotizaciones de seguridad social
correspondientes a cotizaciones previsionales del Fondo de
Pensiones, Fondo de Salud y del Fondo de Cesantía, por todo el
período trabajado entre el día del 01 de Abril del año 2003
y el día 27 de marzo del año 2020.
Conforme a lo expuesto procede sea declarada la existencia de
dicha deuda por cotizaciones y sea condenada a su pago, más
los correspondientes intereses y reajustes desde la fecha en que
debieron enterarse y la fecha en la que se hagan cumplido pago
declarando la deuda de dichas cotizaciones ordenando se oficie
a las instituciones de previsión social a fin de que inicien el cobro
judicial de las mismas.

De la Sanción del artículo 162 incisos quinto y siguientes del

Código del Trabajo

Como se ha referido anteriormente de conformidad a lo

dispuesto en el artículo 162 inciso quinto del código del trabajo,
que dispone “Si el empleador no hubiere efectuado el integro de
dichas cotizaciones previsionales al momento del despido, este
no producirá́ ́ el efecto de poner término al contrato de trabajo”.
Por su parte el inciso séptimo de la norma citada que establece
una sanción legal: “el empleador deberá pagar al trabajador
las remuneraciones y demás prestaciones consignadas en el
contrato de trabajo durante el período comprendido entre la
fecha del despido y la fecha de envío o entrega de la referida
comunicación al trabajador.”
En el caso de autos SS. procede aplicar la referida sanción a la
demandada Ilustre Municipalidad de Papudo, toda vez que de
forma permanente, ilegal y arbitraria negó a esta demandante
el pago de las cotizaciones previsionales, lo que la hace
merecedora de la sanción de nulidad del despido, toda vez que
se encuentra en mora de pagar las referidas cotizaciones.
Esta afirmación se ampara no solo en la disposición legal
invocada sino que además en sendos fallos de la Excelentísima
Corte Suprema de justicia, entre los que destaca el fallo recaído
en Recurso de Unificación de Jurisprudencia, autos Rol 45.842-
2016, de fecha 31 de diciembre del 2016 “Farfán con Ilustre
Municipalidad de Maipú”, que dispone en lo pertinente: “Décimo
sexto: Que, en estas condiciones, si el empleador durante la
relación laboral infringió la normativa previsional y no dio
cumplimiento a la obligación establecida en el inciso quinto del
artículo 162 del Código del Trabajo, corresponde imponerle la
condena que el mismo contempla en el inciso séptimo, de manera
que yerran los sentenciadores de la Corte de Apelaciones de
Santiago al estimar que la sanción contenida en el artículo 162
del Código del Trabajo no es aplicable a la situación en que la
sentencia reconoce la existencia del vínculo laboral, y a resultas
de lo cual, consideran que no es procedente la acción de nulidad
del despido. Sobre esta premisa, el recurso de nulidad planteado
por la parte demandada, fundado en la causal del artículo 477
del Código del Trabajo, por infracción al artículo 162, incisos
quinto y séptimo, del Código del Trabajo, debió ser rechazado.”

De la continuidad de los Servicios

Referirnos a este tema, merece un capitulo a parte en la presente
demanda, toda vez que además de ser su declaración una de
las peticiones concretas sometidas a SS, el elemento de la
continuidad es de aquellos que permite a esta parte poder
comprobar que las supuestas contrataciones a honorarios no
eran tales, en efecto, este elemento de continuidad de labores
en el tiempo se opone a uno de los aspectos que configura el
contrato de Honorarios que establece el artículo 4 de la ley
18.883, puesto que la continuidad es absolutamente contraria
al aspecto temporal especifico que admite este tipo de
contrataciones.
Uno de los elementos que permitirá acreditar la continuidad
laboral invocada son las constantes y permanentes boletas de
honorarios emitidas por esta parte demandante a nombre de la
Ilustre Municipalidad de Papudo, así como el cumplido pago que
ha efectuado la demandada de las correspondiente retenciones
que practicaba a los honorarios pactados para enterarlos como
impuestos. Hechos producidos durante 16 años.

Adicionalmente se cuenta por parte de esta demandante de

documentación y certificaciones emanadas de la propia
demandada que acreditan la existencia de mi relación
permanente y continua en el tiempo para con la Municipalidad
de papudo, todo lo que se acreditara durante la secuela del
proceso en la etapa procesal correspondiente.

II. CONSIDERACIONES DE DERECHO.

Sobre la calificación jurídica de la relación laboral

Nuestra constitución en los artículos 6 y 7 establece el principio

de juridicidad que exige a los órganos del estado actuar
conforme a la constitución y a las leyes previendo que la
infracción o incumplimiento de las referidas disposiciones
conllevara sanciones y la exigencia de responsabilidades .
Resulta así de vital importancia para el análisis de lo
demandado, lo previsto en el artículo 7 de la carta fundamental
que dispone “Los órganos del Estado actúan válidamente previa
investidura regular de sus integrantes, dentro de su competencia
y en la forma que prescriba la ley.
Ninguna magistratura, ninguna persona ni grupo de personas
pueden atribuirse, ni aun a pretexto de circunstancias
extraordinarias, otra autoridad o derechos que los que
expresamente se les hayan conferido en virtud de la
Constitución o las leyes.
Todo acto en contravención a este artículo es nulo y originará las
responsabilidades y sanciones que la ley señale.”
A esta norma de rango constitucional esta efectivamente
sometida la demandada Ilustre Municipalidad de Papudo, y
debió actuar conforme a la misma, lo que como se ha sostenido
no ocurrió en el caso de esta demandante.
Por su parte debemos en este punto del análisis citar la norma
del artículo 4 de la ley 18883 que dispone “Artículo 4°.Podrán
contratarse sobre la base de honorarios a profesionales y
técnicos de educación superior o expertos en determinadas
materias, cuando deban realizarse labores accidentales y que
no sean las habituales de la municipalidad; mediante decreto
del alcalde. Del mismo modo se podrá contratar, sobre la base
de honorarios, a extranjeros que posean título correspondiente a
la especialidad que se requiera.
Además, se podrá contratar sobre la base de honorarios, la
prestación de servicios para cometidos específicos, conforme a
las normas generales.
Las personas contratadas a honorarios se regirán por las
reglas que establezca el respectivo contrato y no les serán
aplicables las disposiciones de este Estatuto”.
Advertimos desde ya a SS. que la normativa citada que permite
la contratación, a honorarios solo autoriza que esta modalidad
se aplique a los casos en los cuales deban desarrollarse labores
de carácter accidental NO PERMANENTE; NI HABITUALES; y
acotados a cometidos específicos.
Así al analizar las disposiciones citadas resulta evidente que mi
contratación infringió gravemente el principio de estado de
derecho y el de juridicidad previsto en la constitución política de
la república. Toda vez que como se ha dicho la municipalidad
celebro pseudos contratos de honorarios vulnerando
abiertamente la normativa legal que la regula, sin encontrar
amparo para su suscripción en ley alguna que le habilite para
ello, puesto que dicha contratación en realidad se trató de un
vínculo de carácter LABORAL. Por cuanto se me asignaron en
forma permanente y habitual funciones generales propias del
municipio.

Es de suma relevancia señalar SS. que en la propia ley 18883,

se prevé la facultad de las municipalidades para contratar
servicios permanentes, ya sea mediante la designación de
funcionarios a contrata o mediante la contratación que permite
el referido estatuto de trabajadores sometidos a la legislación
laboral común, por cuanto la Municipalidad de Papudo, admite
la aplicación de la Ley Balneario, misma que le franquea dicha
posibilidad. Cabe en consecuencia solo sostener que el estatuto
jurídico aplicable a la relación laboral que mantuve con la
demandada era el de trabajadora y en ningún caso de
prestadora de servicios, hecho y circunstancia que en definitiva
deberá ser reconocido en la sentencia de autos, luego de las
probanzas que se rendirán.
Expuesto lo anterior, resulta en este punto menester referirnos a
las normas laborales aplicables de manera tal que podamos
fijar el ámbito de aplicación del código del trabajo y sobre el
particular cabe señalar que el artículo 1 del Código del trabajo
señala “Las relaciones laborales entre los empleadores y los
trabajadores se regularán por este Código y por sus leyes
complementarias.
Estas normas no se aplicarán, sin embargo, a los funcionarios
de la Administración del Estado, centralizada y descentralizada,
del Congreso Nacional y del Poder Judicial, ni a los trabajadores
de las empresas o instituciones del Estado o de aquellas en que
éste tenga aportes, participación o representación, siempre que
dichos funcionarios o trabajadores se encuentren sometidos por
ley a un estatuto especial.
Con todo, los trabajadores de las entidades señaladas en el
inciso precedente se sujetarán a las normas de este Código en
los aspectos o materias no regulados en sus respectivos
estatutos, siempre que ellas no fueren contrarias a estos últimos.
Los trabajadores que presten servicios en los oficios de notarías,
archiveros o conservadores se regirán por las normas de este
código.”
S.S., conforme a lo expuesto, debemos señalar a SS. que jamás
ocupe la calidad de FUNCIONARIA MUNICIPAL, pues nunca fui
contratada como personal de planta , o suplente de la entidad
edilicia, así queda descartada la hipótesis de haber actuado
como funcionaria pública en un órgano descentralizado del
Estado.
Referiré que la contratación del artículo 4 de la ley 18883,
constituye una excepción a las normas generales del estatuto
administrativo de los funcionarios municipales, que habilito mi
contratación y vinculación con mi ex empleadora mediante los
pseudos contratos de honorarios como ya latamente se ha
referido, toda vez que siempre trabaje en labores de carácter
permanente, esenciales, propias y fundamentales del municipio.
Todos los servicios prestados se desarrollaron y orientaron al
cumplimiento de funciones propias permanentes y enmarcadas
en las funciones propias de la municipalidad por lo que no puede
siquiera intentar sostenerse que los mismos puedan ser
catalogados de no habituales. Vale en este punto recordar que
los servicios se prestaban bajo mando y dirección de
funcionarios de carácter “directivo” de la institución quienes
asignaban mis funciones, controlaban mi desempeño y me
exigían en forma permanente el cumplimiento. De las
instrucciones impartidas para la prestación de las labores
desarrolladas.
Así SS. al haberse explicitado, porque no se aplica la norma del
artículo 4 de la ley 18883, y porque tampoco se aplican las
normas estatutarias de los funcionarios públicos, solo cabe
concluir que el régimen aplicable a esta demandante es el de la
legislación laboral común.
En efecto el inciso tercero del articulo primero del código del
trabajo señal expresamente que “Con todo, los trabajadores de
las entidades señaladas en el inciso precedente se sujetarán a
las normas de este Código en los aspectos o materias no
regulados en sus respectivos estatutos, siempre que ellas no
fueren contrarias a estos últimos”. Es este en consecuencia el
estatuto laboral aplicable a los funcionarios de la administración
municipal cuando las labores a desempeñar no se encuentran
ajustadas a algún estatuto especial de los previstos en la ley.

Así conforme a ello, la municipalidad estaba expresamente

habilitada a efectuar mi contratación por aplicación de las
normas referidas, y en función de las labores a las que fui
destinada a cumplir.

JURISPRUDENCIA APLICABLE

Sobre la calificación de la relación laboral

a) La Excelentísima Corte Suprema de Justicia resolviendo un
recurso de unificación de Jurisprudencia con fecha 01 de
Abril del año 2015 en autos rol 11.584 del año 2014 señalo
que: “Décimo: Que, en consecuencia, la acertada
interpretación del artículo 1° del Código del Trabajo, en
relación, en este caso, con el artículo 4° de la Ley N°
18.883, está dada por la vigencia de dicho Código del
Trabajo para las personas naturales contratadas por la
Administración del Estado, en la especie una
Municipalidad, que aun habiendo suscrito sucesivos
contratos de prestación de servicios a honorarios, por
permitírselo el estatuto especial que regula a la entidad
contratante, prestan servicios en las condiciones previstas
por el Código del ramo. En otros términos, se uniforma la
jurisprudencia, en el sentido que corresponde calificar
como vinculaciones laborales, sometidas al Código del
Trabajo, a las relaciones habidas entre una persona
natural y un órgano de la Administración del Estado, en la
especie, una Municipalidad, en la medida que dichas
vinculaciones se desarrollen fuera del marco legal que
establece –para el caso- el artículo 4° de la Ley N° 18.883,
que autoriza la contratación sobre la base de honorarios
ajustada a las condiciones que dicha norma describe, en la
medida que las relaciones se conformen a las exigencias
establecidas por el legislador laboral para los efectos de
entenderlas reguladas por la codificación correspondiente”
b) Fallo de unificación de jurisprudencia recaído en autos rol
31160 del año 2016 que “Decimotercero: Que, entonces, la
acertada interpretación del artículo 1 del Código del
Trabajo, en armonía con el artículo 11 de la Ley N° 18.834,
está dada por la vigencia de dicho Código para las
personas naturales contratadas por la Administración del
Estado, que aun habiendo suscrito sucesivos contratos de
prestación de servicios a honorarios, por permitírselo el
estatuto especial que regula a la entidad contratante, se
desempeñan en las condiciones previstas por el Código del
ramo. Bajo este prisma debe uniformarse la jurisprudencia,
en el sentido que corresponde calificar como vinculaciones
laborales, sujetas al Código del Trabajo, a las relaciones
habidas entre una persona natural y un órgano de la
Administración del Estado, en este caso, en la medida que
dichos lazos se desarrollen fuera del marco legal que
establece el artículo 11 de la Ley N° 18.884, que autoriza
la contratación, sobre la base de honorarios, ajustada a las
condiciones que dicha norma describe, en la medida que
las relaciones se conformen a las exigencias establecidas
por el legislador laboral para los efectos de entenderlas
reguladas por la codificación correspondiente.”
c) Fallo de unificación de jurisprudencia recaído en autos rol
5699 del año 2015 que: “Decimosexto: Que, en ese
contexto, si una persona se incorpora a la dotación de una
municipalidad bajo la modalidad contemplada en el
artículo 4° de la Ley N° 18.883, pero en la práctica presta
un determinado servicio que no tiene la característica
específica y particular que señala dicha norma -o que
tampoco se desarrolla en las condiciones de temporalidad
que indica-, sino que, más bien, satisfaciendo una
exigencia que la ley reclama de un órgano público, como en
este caso, un Municipio, corresponde aplicar el Código del
Trabajo si los servicios se han prestado bajo los supuestos
fácticos ya señalados en el motivo anterior, y que conducen
necesariamente a la conclusión que es de orden laboral. Lo
anterior, porque dicho código constituye la regla general en
el ámbito de las relaciones laborales, y, además, porque
una conclusión en sentido contrario significaría admitir
que, no obstante concurrir todos los elementos de un
contrato laboral, el trabajador queda al margen del
 Estatuto del ramo, en una situación de precariedad que no
tiene justificación alguna. Decimoséptimo: Que, en
consecuencia, la acertada interpretación del artículo 1° del
Código del Trabajo en relación con el artículo 4° de la Ley
N°18.883, está dada por la vigencia de dicho Código para
las personas naturales contratadas por la Administración
del Estado, en la especie una Municipalidad, que aun
habiendo suscrito sucesivos contratos de prestación de
servicios a honorarios, por permitírselo el estatuto especial
que regula a la entidad contratante, prestan servicios en
las condiciones previstas por el Código del ramo; en otros
términos, corresponde calificar como vinculaciones
laborales, sometidas al Código del Trabajo, las relaciones
habidas entre aquéllos en la medida que dichas
vinculaciones se desarrollen fuera del marco legal que
establece –para el caso- el artículo 4° de la Ley N° 18.883,
que autoriza la contratación sobre la base de honorarios
ajustada a las condiciones que dicha norma describe, y se
conformen a las exigencias establecidas por el legislador
laboral para los efectos de entenderlas reguladas por la
codificación correspondiente. Tal es la correcta doctrina,
que, además, ha mantenido esta Corte en el último tiempo,
v. gr., Roles N°11.584-14, N°24.388-14 y N°23.647-14 (este
último, contra el Servicio de Vivienda y Urbanismo). Por lo
tanto, la interpretación que se aviene con las reglas y
principios invocados, en lo específico, la contiene la vertida
en los fallos que en que se apoya el recurso de unificación
de jurisprudencia.”

Sobre la aplicación de la Sanción de Nulidad

a) Fallo de Unificación de Jurisprudencia dictado por la
Excelentísima Corte Suprema de Justicia en autos rol
45842 del año 2016 que dispone: “Que las reflexiones
anteriores permiten concluir que si la sentencia determina
que la relación habida entre las partes es de naturaleza
laboral, el trabajador puede reclamar que el empleador no
ha efectuado el íntegro de las cotizaciones previsionales a
la época del despido, y, por consiguiente, el pago de las
remuneraciones y demás prestaciones que correspondan
durante el período comprendido entre la fecha del despido
 y la de envío al trabajador de la misiva informando el pago
de las imposiciones morosas, puesto que la sentencia es
declarativa, unido al hecho que, como se señaló, la
finalidad de la citada norma es proteger los derechos de
los trabajadores afectados por el incumplimiento del
empleador en el pago de sus cotizaciones de seguridad
social”
b) Fallo que rechaza Recurso de Unificación de
Jurisprudencia interpuesto por la parte demandada en
autos rol 6604-2014 de la Excelentísima Corte Suprema
de Justicia que señala en lo pertinente que: “Undécimo:
Que, al contrario de los fallos indicados, la sentencia
recurrida en la presente causa, interpretando la normativa
contenida en el artículo 162 del Código del Trabajo, decidió
que la de la instancia no incurrió en el vicio denunciado,
concluyendo que es procedente aplicar al demandado la
sanción señalada en esa disposición, al haberse
determinado la existencia de la relación laboral entre las
partes. Por su parte, en el motivo duodécimo del fallo de la
instancia, se asentó que al haberse acreditado la
existencia de un contrato de trabajo, la ocurrencia de un
despido, y que a la fecha del despido las cotizaciones no
estaban declaradas y menos pagadas, era plenamente
procedente aplicar al demandado la sanción que consigna
el inciso 7° del artículo 162 del estatuto laboral, sin
perjuicio de su obligación de pago de las cotizaciones de
seguridad social cuyo cobro debe hacerse por la
instituciones respectivas”
c) Fallo que Acoge recurso de Unificación de Jurisprudencia
y dicta Sentencia de Reemplazo en autos Rol CS 8.318-
2014 que señala en lo pertinente que : “Sexto: Que sobre
la base de la existencia de una situación jurídica dada, en
el caso de autos una relación laboral, se dedujo demanda
con el objeto que se declarara además de la injustificación
del despido, que este fue nulo e ineficaz porque las
cotizaciones de seguridad social no habían sido
“íntegramente pagadas” a lo cual se accedió. Se constató o
declaró su existencia, pero en ningún caso se constituyó,
puesto que ésta no registra su nacimiento desde que quede
ejecutoriada la decisión en que el tribunal la reconoció, sino
desde la fecha que en cada caso se indica, que corresponde
 a la oportunidad en que las partes la constituyeron. Cosa
distinta es que una de ellas se resista a dar cumplimiento
a las prestaciones que de esa relación jurídica se
desprenden, las que el tribunal especificará en su
sentencia, condenando al demandado a su pago; condena
que tiene por antecedente el reconocimiento del derecho
que le asiste al actor, el cual también ha sido declarado. Se
conjugan las acciones declarativas y de condena. De
estimarse que se constituye el derecho en la sentencia,
nada ha existido con anterioridad y no procedería hacer
lugar a la demanda.”
Sobre la Irrenunciabilidad de los derechos.
SS. recordaremos que el Derecho del trabajo, en Chile se
caracteriza por la existencia de normas heterónomas impuestas
por la autoridad , inderogables y de naturaleza indisponible.
Esta legislación se impone independiente de la voluntad de las
partes y se aplica de manera directa a la relación laboral.
Cuando planteamos la indisponibilidad de los derechos que
emanan de estas normas hacemos directa alusión a la
imposibilidad del trabajador a renunciar sus derechos toda vez
que estos afectan directamente el contrato e ingresan a su
patrimonio, así a tribunales solamente le queda respecto de los
mismos garantizar y velar su adecuado cumplimiento.
El principio de la Irrenunciabilidad puede definirse como la
imposibilidad jurídica que afecta a un trabajador de privarse
voluntariamente de un derecho o prerrogativa conferido por ley
en su beneficio. La irrenunciabilidad de derechos laborales se
encuentra prevista en la norma del artículo 5 inciso dos del
Código del trabajo en cuanto la referida norma dispone “Los
derechos establecidos por las leyes laborales son irrenunciables,
mientras subsista el contrato de trabajo”

III. PETICIONES CONCRETAS

Conforme a todo lo antes explicitado esta parte solicitara a SS.

un directo pronunciamiento sobre las siguientes materias:
1) Existencia de la Relación Laboral: Solicitamos desde
ya se reconozca la existencia de relación laboral desde el
mes de Abril del año 2003 hasta el 27 de marzo del año
2020.
2) Continuidad de los servicios: En mérito de lo expuesto
solicito a SS. desde ya se declare la continuidad de los
servicios prestados por esta demandante a la demandada
Ilustre Municipalidad de Papudo desde el día del 01 de
Abril del año 2003 hasta el día 27 de Marzo de 2020 y que
la última remuneración mensual ascendió a la suma de
$1.500.000 (un millón quinientos mil pesos).
3) Que se declare nulo e injustificado o carente de
causal el despido efectuado por parte de la demandada,
mi ex empleadora Ilustre Municipalidad de Papudo, por no
haber dado cumplimiento a la legislación vigente y no
haber cumplido la demandada con su obligación de
informarme la fecha del despido ni haberlo hechos hasta la
fecha, el estado de pago al día de las cotizaciones
previsionales que me corresponden en la administradora
de fondos de pensiones señalada en el cuerpo del libelo
como los pagos a la institución de salud previsional por
concepto de cotización de salud.
4) Indemnizaciones adeudadas: Solicito desde ya a SS.
que se declare que con ocasión del término de la relación
laboral , la demandada adeuda a esta parte demandante
las siguientes indemnizaciones:

a) Indemnización Sustitutiva del Aviso Previo, ascendente

a la suma de $1.500.000 (un millón quinientos mil
pesos).
b) Indemnización por años de Servicios, por el máximo de
11 meses atendida la larga relación laboral que me
vínculo con la demandada. Suma que asciende a
$16.500.000 (dieciséis millones quinientos mil pesos).
c) En mérito del articulo 168 letra b) solicito se dé lugar al
recargo del 50% de las indemnizaciones por años de
servicios. Correspondiente a los 16 años de servicios
prestados a la demandada esto es la suma de
$8.250.000 (ocho millones doscientos cincuenta mil
pesos).
 d) Feriado legal/proporcional: Por estos conceptos la
demandada adeuda a esta demandante los feriados
legales y proporcionales devengados en el periodo que
va desde el uno de abril del año 2003 y el 27 de febrero
del año 2020, correspondiente a 16 años , 10 meses y
26 días Por concepto de feriado legal adeuda Feriado
legal:$16.800.000 equivalente a 336 días (16 años) y
por concepto de feriado proporcional adeuda la suma de
$979.000 equivalente a 19,58 días
e) Otras Prestaciones adeudadas.: A las sumas ya
referidas corresponderá que SS. condene además a la
demandada Ilustre Municipalidad e Papudo al pago de:
e.1) Cotizaciones previsionales, de seguridad social y
fondo de cesantía, Impagas durante todo el periodo que
duro la relación laboral, según la liquidación que al
efecto confecciones este Tribunal.
e.2) el pago de las sumas que deriven de la aplicación
de las normas de los artículos 162 incisos 5 y 7 del
Código del trabajo, correspondiendo a lo que
coloquialmente se conoce como ley Bustos, según la
liquidación que practique este tribunal.

POR TANTO,

En mérito de lo expuesto, normas legales citadas y lo dispuesto

en los artículos 162, 168, 446, 496, 499 y siguientes y demás
pertinentes del Código del Trabajo, RUEGO A US tener por
interpuesta demanda en Procedimiento de Aplicación General
por Nulidad del Despido, Despido Injustificado y Cobro de
Prestaciones Laborales Adeudadas en contra de LA ILUSTRE
MUNICIPALIDAD DE PAPUDO, cuyo representante legal es doña
ROSA PRIETO VALDES, ambos ya individualizados, con
domicilio en Chorrillo Nº 9, Comuna de Papudo, a efectos de que
S.S. declare y reconozca la relación laboral, la continuidad de
ésta, la nulidad del despido, que mi representada fue víctima de
despido injustificado, y que, por ende, se le adeudan las
prestaciones indicadas precedentemente, condenando a la
demandada a que pague las sumas señaladas en el cuerpo de
este escrito, o las que SS. estime en derecho correspondan, todo
lo anterior con los reajustes e intereses que por ley
corresponda, condenando además en costas de la causa a la
demandada.

PRIMER OTROSÍ: Ruego a SS para efectos de lo dispuesto en

el inciso final del artículo 446 del Código del Trabajo se sirva
notificar en forma legal la presente demanda a las siguientes
instituciones de seguridad social a las cuales me encuentro
afiliada, para efectos de percibir las cotizaciones previsionales
adeudadas por la demandada:
1) AFP Capital S.A, rut 98.000.000-1 representada por don
Jaime Munita Valdivieso, ambos con domicilio en Avenida
Apoquindo numero 4820, Comuna de Las Condes, Región
Metropolitana de Santiago.
2) FONASA, Rut 61.603.000-0, representado para estos
efectos por don Marcelo Mosso Gómez., ambos domiciliados
en calle Monjitas N° 665, comuna de Santiago, Región
Metropolitana.
3) SOCIEDAD ADMINISTRADORA DE FONDOS DE CESANTÍA
DE CHILE S.A., AFC CHILE., Rut 76.237.243-6
representada para estos efectos por don Francisco
Guimpert Corvalán, ambos domiciliados en calle Huérfanos
670, piso 13, Santiago Centro, Región Metropolitana.
SEGUNDO OTROSÍ: Ruego a SS. se sirva tener por
acompañados los siguientes documentos:
1) Copia de contrato de Honorarios de fecha 23 de Diciembre
del año 2019.
2) Copia de decreto Alcaldcio número 2001 de fecha 31 de
diciembre del año 2019 que ordena mi contratación en la
Ilustre municipalidad de Papudo
3) Copia de Certificado emanado de la Ilustre municipalidad
de Papudo, extendido por la señora Rosa Prieto Valdés
con fecha 18 de Mayo de 2018.
4) Boletas de Honorarios emitidas por esta demandante a la
Ilustre Municipalidad de Papudo en los meses de Enero y
Febrero del 2020.
TERCER OTROSÍ: Ruego a SS. se sirva tener presente que me
patrocina el abogado don JOSÉ ESPINOSA RODRÍGUEZ, a quien
confiero poder para que me represente en estos autos, con todas
las facultades del artículo 7 del C.P.C, en especial las de avenir,
percibir y transigir, de mi domicilio para estos efectos con correo
electrónico adasmedonosoclau@gmail.com, para efectos de
notificaciones.