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¿Qué es la argumentación?
La argumentación es una práctica discursiva que tiene como propósito
defender una postura o una opinión y disuadir al otro de la propia. Para ello
emplea razonamientos (argumentos) lógicos, conscientes, demostrables.

Se trata de un ejercicio común en ámbitos de confrontación de ideas, como los


parlamentos nacionales, los debates públicos o las negociaciones. Se
considera saludable para la convivencia democrática y para la pluralidad
de opiniones, ya que permite el contraste apasionado de ideas, en lugar de
recurrir a la violencia.

Al mismo tiempo, se llama argumentación (o Teoría de la argumentación) al


estudio de los argumentos, de la mano de la lógica, la filosofía y la oratoria, así
como a los textos argumentativos que una persona puede producir, en los
cuales hace uso de sus capacidades expresivas y de su razonamiento para
defender o atacar ciertas ideas.

El estudio de la argumentación proviene de épocas antiguas, cuando


numerosas escuelas de filosofía estudiaban el arte de la persuasión. De
particular importancia fueron los Sofistas de la Grecia clásica, quienes
florecieron durante la Atenas democrática del siglo V a. C., así como los
posteriores filósofos Platón (c. 427-347 a. C.) y Aristóteles (384-322 a. C.),
quienes cultivaron ampliamente el arte de la argumentación.

Puede servirte: Pensamiento lógico

Características de la argumentación
En líneas generales, todo ejercicio de argumentación cumple con las siguientes
características:

 Aspira a convencer, a modificar el punto de vista contrario, o sea, a la


persuasión.
 No consiste simplemente en opinar, sino en sustentar las opiniones de
manera comprobable.
 Se basa en la construcción y el manejo de argumentos. Emplea para
ello premisas, datos e información para sustentar lógicamente un punto de
vista.
 Apela a la razón y no las emociones.

Estructura de la argumentación
La argumentación no consiste en el manejo libre de las premisas, sino que se
apega a ciertas estructuras para resultar eficaz. Así, debe constar de:
 Una tesis a defender, o sea, a favor de la cual se argumenta.
 Un conjunto de premisas a partir de las cuales se desprende la tesis.
 Un argumento que vincula las premisas con la tesis a demostrar.

Las premisas toman la forma de un enunciado, del cual podrá extraerse


una conclusión a través de un razonamiento lógico, el cual podrá ser tenido
como válido, o no. Según Christian Plantin en La argumentación (2001), el
siguiente esquema describe una estructura argumentativa:

Dato        →        Propuesta


(premisa menor)                 (conclusión)

“Hoy es lunes”              “Hoy hay clases”

Ley de pasaje
(premisa más general)

“La semana comienza los lunes”

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