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EL SISTEMA PENSIONAL EN COLOMBIA: MOTIVOS PARA

AFILIARSE A COLPENSIONES O A UN FONDO PRIVADO

CIPA: PODEROSOS

DAILIS ALMARIO HERNANDEZ


LEANDRA BARBOZA MONTES
MARIA VERGARA CORREA
ALEJANDRA MENDOZA VERONA
ANDRES DORIA TEJADA

TUTORA:

JUAN DEL CRISTO SIERRA

ASIGNATURA:

DERECHO LABORAL

TRABAJO COLABORATIVO CONTEXTUALIZADO

UNIVERSIDAD DE CARTAGENA

ADMINISTRACIÓN DE EMPRESA IV SEMESTRE

CERETE

2022
INTRODUCCION

En el presente trabajo colaborativo, se busca clarificar lo que hoy vive


Colombia en material pensional, analizando su sistema pensional, el
concepto de pensión de vejez, está cada vez más desvirtuado por los
afiliados a los 2 regímenes que hoy co- existen, por un lado están los
que defienden el régimen de prima media con prestación definida,
administrado hoy por Col pensiones y otros de la postura que el
régimen de ahorro individual con solidaridad, administrado por los
fondos privados, ofrece otras ventajas, de aquí la importancia de
conocer las características de cada uno de ellos, ha pasado el tiempo
y aun se generan muchas dudas sobre este tema en su parte jurídica,
económica, y social, el estado debe realizar una reforma pensional
donde se revisen los requisitos actuales para obtener esta prestación.

El sistema de pensiones, fundamental para la protección de los


adultos mayores de un país, está compuesto en Colombia
principalmente por dos regímenes alternativos, uno público,
denominado Régimen Solidario de Prima Media con Prestación
Definida (RPM), y uno privado, correspondiente al Régimen de Ahorro
Individual con Solidaridad (RAIS). Existen también unos regímenes
especiales, algunos plenamente vigentes y otros en proceso gradual
de desaparición. Las formas en que funcionan los regímenes
principales son muy diferentes, y sus detalles y comparación resultan
complejos.
OBJETIVO GENERAL.

• Analizar en contexto general el sistema pensional en


Colombia

OBJETIVOS ESPECIFICOS.

• Determinar el sistema pensional en fondos privados y col-


pensiones

• Identificar las características del sistema pensional en


Colombia, conformado por los dos regímenes pensionales
(RPM) y (RAIS)

• Describir el marco legislativo del sistema pensional en


Colombia-Ley 100 de 1993, con modificaciones de las
Leyes 797 de 2003 y 1328 de 2009.
BASES CONCEPTUALES

AFP. Sociedad Administradora de Fondos de Pensiones creada con


arreglo a las normas especiales que regulan el sistema financiero y
funciona bajo la inspección, control y vigilancia de la Superintendencia
Financiera. Una AFP puede administrar uno o varios fondos de
pensiones en el Régimen de Ahorro Individual. Su patrimonio es
independiente del de los fondos, que son propiedad de los afiliados.

CUENTAS INDIVIDUALES DE AHORRO PESIONAL. Las


cotizaciones obligatorias y voluntarias se abonarán a la cuenta
individual de ahorro pensional del afiliado, quien solo podrá tener una
cuenta.
FONDO DE PENSIONES. Es el conjunto de afiliados y aportes,
operaciones y canalización de recursos de ahorros pensionales
pertenecientes a un determinado sector de la población afiliada al
Régimen de Ahorro Individual. El fondo por sí solo no tiene personería
jurídica y lo representa judicialmente o extrajudicialmente la respectiva
AFP. En su administración toman parte la AFP y los afiliados.
REGIMEN DE AHORRO INDIVIDUAL. Este régimen es el conjunto de
entidades, normas y procedimientos mediante los cuales se
administran los recursos privados y públicos destinados a pagar las
pensiones y prestaciones que deban reconocerse a los afiliados. Este
régimen está basado en el ahorro proveniente de las cotizaciones y los
respectivos rendimientos financieros, la solidaridad a través de la
garantía de la pensión mínima y aportes al Fondo de Solidaridad.

REGIMEN DE PRIMA MEDIA. Es aquel mediante el cual el afiliado o


sus beneficiarios obtienen una pensión de vejez, de invalidez, o de
sobrevivientes o una indemnización sustitutiva, de conformidad con las
normas establecidas en la ley de seguridad social y sus decretos
reglamentarios. A este régimen se le aplican las disposiciones
vigentes para el seguro de invalidez, vejez y muerte a cargo del ISS,
con las adiciones, modificaciones y excepciones contenidas en la Ley
100 de 1993.
ANALISIS DEL SISTEMA PENSIONAL EN COLOMBIA: MOTIVOS
PARA AFILIARSE A COLPENSIONES O A UN FONDO PRIVADO

El sistema general de pensiones en Colombia, regulado a través de


la Ley 100 de 1993, se encuentra conformado por dos regímenes
pensionales: el régimen de prima media con prestación definida –
RPM–, administrado por Col-pensiones (fondo público), y el régimen
de ahorro individual con solidaridad –RAIS–, administrado por fondo
de pensiones privados.
El sistema pensional vigente en Colombia tiene 25 años de antigüedad
(fue creado en 1993) y se implementó con el objetivo de acabar con
los múltiples regímenes que existían. Antes de la ley 100 los requisitos
de pensión y condiciones de acceso no estaban unificados, de hecho,
existían más de 100 regímenes que con el tiempo se han ido
desmontando.

El que en Colombia coexistan dos regímenes e incluso compitan entre


ellos, haciendo referencia al Régimen Solidario de Prima Media con
Prestación Definida (RPM) y el Régimen de Ahorro Individual con
Solidaridad (RAIS), es una particularidad de nuestra política que
incluso hoy es motivo de grandes debates.

En términos simples, el RPM es el modelo bajo el que opera la


administradora pública Colpensiones y el RAIS es el esquema de las
administradoras de fondos de pensiones privadas (AFP), que en
nuestro país son Protección, Porvenir, Colfondos y Old Mutual.

La decisión de a qué régimen pertenecer no es cualquier cosa, pues


cada uno (RPM y RAIS) cuenta con sus propias condiciones de
acceso, permanencia y beneficios. He aquí la importancia de entender
en qué consisten para decidir con suficiente información cuál es el
más conveniente, según la particularidad del caso.

La medida básica cuando se trata de pensiones es el número de


semanas cotizadas, es decir, la suma de todas las semanas que el
trabajador aportó a seguridad social, ya sea a través de una empresa
o como independiente. Una persona que está afiliada a Colpensiones
debe completar 1.300 semanas, equivalentes a trabajar 25 años
ininterrumpidamente. Para un afiliado de los fondos privados serán
1.150 semanas o un poco más de 22 años.

La complejidad de las pensiones está en que cada regla tiene su


excepción, y aquí está la primera: en el RAIS, la cantidad de semanas
no es de cumplimiento obligatorio, pues el principal requisito es contar
con el capital suficiente para tener derecho a una renta vitalicia que
esté al menos, 10 % por encima del salario mínimo. Es por ello que
muchas personas que hacen aportes voluntarios o que tienen ingresos
millonarios logran pensionarse a temprana edad, aunque es una
excepción.

Lo mismo sucede con la edad. Por ley, los hombres pueden


pensionarse a los 62 años y las mujeres a los 57, pero si tienen el
capital suficiente en el RAIS no es necesario esperar. El tema de la
edad es tan flexible que incluso las personas pueden seguir cotizando
hasta 10 años más para incrementar su ahorro o completar el número
de semanas tanto en el RPM como en el RAIS.

En el RAIS (gestionado por las AFP) la pensión corresponde a la suma


del ahorro hecho por cada persona a lo largo de su vida (incluidos los
aportes voluntarios) más los rendimientos (porque los fondos de
pensiones invierten ese dinero para multiplicarlo a largo plazo), así
que cada aporte va a una cuenta individual. En este modelo es
fundamental el capital reunido, pero para el cálculo también se
contemplan factores como si tiene hijos y de qué edades (dado que
son heredables).

Con respecto a la liquidación durante la vida laboral, para ambos


casos (RPM y RAIS) los trabajadores aportan cada mes un valor
equivalente al 16 % de su salario (4 % se le descuenta al empleado y
12 % lo pone el empleador), mientras que los independientes no
cotizan sobre el salario total sino sobre 40 % de su ingreso, y es a
partir de esa cifra que calculan un aporte de 16 % (como no tienen
empleador lo pagan completo).

1.2 Sistema pensional en fondos privados y Col-pensiones

En el diseño jurídico-institucional que se ha generado desde la Ley


100 de 1993, se ha apostado por un sistema que cobije tanto a los
trabajadores del sector privado afiliados a lo que en su momento fue el
Instituto de Seguros Sociales y los trabajadores públicos del orden
nacional que no se encuentran inmersos en regímenes especiales,
sobre los cuales, se debe decir, se han ido extinguiendo conforme a
las reformas surtidas al SGP, en la búsqueda de ampliar la base de
afiliados al RPM o RAIS (Santamaría, Steiner, Botero, Martínez y
Millán, 2010).

En la dinámica del RAIS, se establece que, para la obtención de la


pensión, se deben realizar aportes durante la vida laboral, que en el
caso del trabajador asalariado corresponde un 75% al empleador y, un
25% al empleado. Estos aportes se acreditan mensualmente en la
cuenta de ahorro individual de un fondo de pensiones y se puede
disponer de ellos solo al momento del que se presente alguna de las
contingencias aseguradas, o al cumplir con los requisitos para
devolución de saldos (Narváez, 2004).

En este caso, los aportes a pensiones son de naturaleza obligatoria y


se realizan mensualmente (Reveiz, León, Laserna y Martínez, 2008),
de manera conjunta entre el trabajador y empleador por un valor del
16% sobre el salario base de cotización establecida por la ley y son
acreditados en la cuenta individual, pagando los empleadores el 75%
de la cotización total y los trabajadores el 25% restante; por su parte,
en el caso de los cotizantes independientes, estos asumen el 100% de
la cotización.
De igual manera se debe señalar que los rendimientos de los fondos
de pensiones se basan en inversiones que garantizan la rentabilidad y
liquidez de los recursos del sistema, de acuerdo con los lineamientos
establecidos por la Superintendencia Financiera de Colombia, además
de constituir garantías para responder por el correcto manejo de las
inversiones, entre las que se encuentran las del Fondo de Garantías
de Instituciones Financieras [FOGAFIN] (Zúñiga y Del Águila, 2015).

A partir de la caracterización hecha, se puede reconocer que, la


pensión obligatoria es una retribución económica generada para el
afiliado del SGP, con el propósito de cumplir a contraprestación por la
cotización regular con lo establecido en la Ley 100 de 1993, en lo
referente a brindar al trabajador un respaldo económico en el evento
que se generen las contingencias derivadas de la vejez, la invalidez o
la muerte (Franco, Oquendo y Berrio, 2015).

En suma, se tiene en tanto un régimen de ahorro individual por medio


del cual la Ley 100 de 1993 ha facultado a las AFP para que estas
administren los ahorros de sus afiliados, contando que por la dinámica
del régimen, su operación se encuentra bajo el control y supervisión
de Superintendencias como la Financiera, en el camino de lograr la
administración trasparente de estos recursos, siendo relevante señalar
que esta Superintendencia, ha actuado en la tarea de instar a las
administradoras a información en caso de traslados, como se presenta
más adelante.

En complemento de lo previamente dicho, se puede reiterar sobre el


RAIS y RPM que ambos son la expresión materializada de un sistema
que le asigna a los administrados el goce de un derecho fundamental
al amparo de artículos como el 48 y 49 de la Constitución Política de
1991 y, los principios que lo desarrollan a modo estructural, presentes
estos en el Sistema de Seguridad Social Integral [SSSI], del cual se
desprende el Sistema de Seguridad Social en Salud [SSSS], al que
corresponde las prestadoras de servicios de salud, el de Riesgos
Laborales y el SGP (Almario, 2016).
Más allá de las precisiones brindadas, algunas que corresponden a
situaciones ya reiteradas, se recoge en la diferenciación estructural
entre el RAIS y el RPM administrado por Colpensiones que, este
último es un fondo de naturaleza pública, el cual, aparte maneja
mesadas pensionales adicionales, no existe aportes voluntarios, por lo
mismo no se pueden retirar los aportes cuando son voluntarios, la
pensión máxima de 25 SMMLV y, no existe pensión anticipada; todos
estos, condiciones que si se pueden dar en el RAIS.

2. CARÁCTERÍSTICAS DE RÉGIMEN DE PRIMA MEDIA (RPM)


Este régimen obedece a las siguientes características:

• Solidaridad. “Es la práctica de la mutua ayuda entre las


personas, las generaciones, los sectores económicos, las
regiones y las comunidades bajo el principio del más fuerte
hacia el más débil”39. El Estado es el encargado del
direccionamiento de los recursos procurando siempre favorecer
a las poblaciones más vulnerables.

• De Prima Media. Esto se refiere al direccionamiento financiero


que tomó el ISS, el cual se encuentra plasmado en el artículo 19
del Decreto 1650 de 1977 donde se específica:

• Con prestación definida. En la Ley 100 de 1993, se estableció


la formula por la cual se liquidan las pensiones, permitiendo un
cálculo aproximado de la mesada pensional para cualquier
interesado.

• Fondo común de los aportes. Los aportes realizados por los


afiliados al RPM, se captan en un solo fondo donde se reparten
las prestaciones a las personas pensionadas. El aporte para
pensión es del 16%, si es trabajador dependiente, el empleador
aporta el 12% y el trabajador el 4% restante, si es dependiente
deberá aportar la totalidad. Los afiliados con ingreso mensual
igual o superior a (4) salarios mínimos mensuales legales
vigentes (smlmv), aportarán un 1% adicional sobre el IBC,
destinado al fondo de solidaridad pensional. Los afiliados con
ingreso igual o superior a 16 (smlmv), harán un aporte adicional
sobre el IBC, así: de 16 a 17 smlmv de un 0.2%, de 17 a 18
smlmv de un 0.4%, de 18 a 19 smlmv, de un 0.6%, de 19 a 20
smlmv, de un 0.8% y superiores a 20 smlmv de 1% destinado
exclusivamente a la subcuenta de subsistencia, del Fondo de
solidaridad Pensional.

• Responsabilidad Gubernamental. Al ser un Fondo común


público, el Estado garantiza el pago de los beneficios adquiridos
por los afiliados.

3. CARACTERISTICAS DE RÉGIMEN DE AHORRO INDIVIDUAL


CON SOLIDARIDAD (RAIS)
Este régimen obedece a las siguientes características:

• Cuentas individuales de ahorro. Las cotizaciones de sus


afilados se consignan en cuentas individuales donde, le pensión
deriva de sus ahorros propios y los respectivos rendimientos
financieros. El aporte para pensión es del 16%, si es trabajador
dependiente, el empleador aporta el 12% y el trabajador el 4%
restante, si es dependiente deberá aportar la totalidad. Los
afiliados con ingreso mensual igual o superior a (4) salarios
mínimos mensuales legales vigentes (smlmv), aportarán un 1%
adicional sobre el IBC, destinado al fondo de solidaridad
pensional. Afiliados con ingreso igual o superior a 16 (smlmv),
harán un aporte adicional sobre el IBC, así: de 16 a 17 smlmv de
un 0.2%, de 17 a 18 smlmv de un 0.4%, de 18 a 19 smlmv, de un
0.6%, de 19 a 20 smlmv, de un 0.8% y superiores a 20 smlmv de
1% destinado exclusivamente a la subcuenta de subsistencia,
del Fondo de solidaridad Pensional.
De este 16% de cotización, el 3% va dirigido a gastos de
administración, prima de seguros de invalidez y supervivencia y
prima FOGAFIN, 1,5% se dirige al fondo de garantía de pensión
mínima y el 11,5% restante, va a la cuenta individual del afiliado.

• Esquema Multifondos. En la Ley 1328 de 2009 “se autoriza al


Gobierno Nacional para diseñar y reglamentar un esquema de
multifondos en el Régimen de Ahorro Individual con Solidaridad,
compuesto, en su etapa de acumulación, por tres (3) fondos,
conservador, moderado y de mayor riesgo y, en su etapa de des
acumulación un fondo especial para los pensionados de retiro
programado.
El esquema multifondos fue diseñado para dar un manejo
capitalizable a los recursos de los afiliados con el objetivo de
aumentar los recursos de las cuentas individuales buscando
obtener una mejor pensión para su vejez.

• Fondo Conservador. Este fondo está diseñado para los


afiliados cotizantes que están próximos a cumplir su edad de
pensión. Los recursos que se encuentran en esta cuenta
individual tienen una exposición mínima al riesgo para procurar
conservar los recursos del afiliado.

• Fondo Moderado. Este fondo se recomienda para las personas


que se encuentran en la mitad de su vida laboral o entre diez y
cinco años anteriores a su fecha de retiro, que buscan que sus
ahorros generen mayores rentabilidades mediante una
exposición moderada al riesgo.

• Fondo de Mayor riesgo. Este fondo presenta una exposición


mayor al riesgo, se recomienda para los afiliados que se
encuentren a más de diez años de su edad de retiro. Este fondo
busca una rentabilidad superior de los ahorros al largo plazo,
ajustándose fluctuaciones del mercado con la posibilidad de
recuperarse de estas.

• Fondo especial de Retiro Programado. Este fondo solo


aplicará para los afiliados que decidan retirarse por la modalidad
de retiro programado. Las cifras correspondientes a este fondo
se pueden observar en el apartado individual correspondiente a
cada AFP.

• Responsabilidad Privada. El Régimen de Ahorro Individual con


Solidaridad será administrado exclusivamente por las
Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) autorizadas por
la Superintendencia Financiera de Colombia.

• Capitalización de los Aportes. Los aportes realizados a las


cuentas de ahorro individual de los afiliados, estarán sujetos a
las capitalizaciones que generen sus recursos dependiendo del
tipo de fondo en el cual se encuentre el respectivo capital.

• Responsabilidad Gubernamental. Cuando las Administradoras


de Fondos de Pensiones incumplan con la obligación de pagos
que hubiere a lugar a sus afiliados, el Estado responderá dichos
pagos y ahorros, de la misma forma se encargará de realizar las
sanciones pertinentes por incumplimiento hacia las AFP.

El Estado también proveerá, con base al principio de solidaridad,


los recursos necesarios para el pago de las pensiones mínimas
siempre y cuando los recursos de sus afiliados sean insuficientes
para la obtención de su pensión.

• Cotizaciones voluntarias. Las personas afiliadas al RAIS


“podrán cotizar, periódica u ocasionalmente, valores superiores a
los límites mínimos establecidos como cotización obligatoria, con
el fin de incrementar los saldos de sus cuentas individuales de
ahorro pensional, para optar por una pensión mayor o un retiro
anticipado
• Modalidades de pensión. Contrario al RPM, en el Régimen de
Ahorro Individual con Solidaridad, existen diferentes
modalidades de pensión para todos los riesgos: vejez, invalidez
y sobrevivencia:
• Renta vitalicia Inmediata. En esta modalidad el afiliado
“contrata directa e irrevocablemente con la aseguradora que el
elija el pago de una renta mensual hasta su fallecimiento y el
pago de pensiones de sobrevivencia para sus beneficiarios”70,
el pago de esta pensión deben ser rentas constantes y no
pueden ser inferiores a una pensión mínima.
Esto significa que la responsabilidad del pago de la pensión es
de la aseguradora que escoja el afiliado, sin embargo, la AFP
aún debe responder por el afiliado ante la aseguradora.

• Retiro programado. El afiliado determina con la AFP, los


términos de la pensión para un periodo de tiempo determinado,
de acuerdo con su expectativa de vida y su capital acumulado,
dividiéndolos en pagos mensuales constantes durante el tiempo
determinado. El saldo del capital al fallecimiento del pensionado,
se entregarán a sus herederos. “Una vez que se agote el plazo y
los recursos, aunque el afiliado continúe viviendo, habrá cesado
para la APF la responsabilidad de pagar la pensión.

• Retiro programado con renta vitalicia diferida. “Es un sistema


combinado de los dos anteriores por el que le afiliado contrata su
pensión por un periodo determinado y al finalizar este, con el
capital restante se contrata la renta vitalicia con una compañía
de seguros, cuyo pago comenzará a hacerse desde una fecha
determinada futura, hasta el fallecimiento.
• Otras modalidades. Siempre y cuando se encuentren
autorizadas por la Superintendencia Financiera de Colombia.

4. El marco legislativo bajo el cual se enmarca en la actualidad


el sistema en Colombia-Ley 100 de 1993, con modificaciones
de las Leyes 797 de 2003 y 1328 de 2009.

La legislación sobre el sistema pensional en Colombia El sistema


pensional colombiano se remonta a 1946 cuando se creó Cajanal y
varias cajas públicas. En 1967 se establece un sistema para afiliados
privados administrado por el Instituto Colombiano de Seguros Sociales
(ICSS), el cual en 1977 se transforma en el Instituto de Seguros
Sociales (ISS). De otro lado, en 2007 se reemplaza el ISS por
Colpensiones.

Posteriormente, 26 años después de la creación del régimen privado,


el sistema se modificó con la Ley 100 de 1993, la cual transformó los
regímenes de afiliados privados y las cajas públicas por un sistema
mixto de Régimen Solidario de Prima Media con Prestación Definida
(RPM) y Régimen de Ahorro Individual con Solidaridad (RAIS). Entre
las principales características que se intentaron mejorar se encuentran
la sostenibilidad, equidad, cobertura y rentabilidad de las tasas de
reemplazo. Posteriormente, la Ley 100 de 1993 se complementó con
la Ley 797 de 2003 y la Ley 1328 de 2009.
Con las reformas al sistema pensional para mejorar su sostenibilidad
se aumentó la edad de pensionarse y las semanas cotizadas teniendo
en cuenta el incremento de la expectativa de vida de la población.

Sin embargo, el nuevo régimen pensional tuvo un periodo de


transición de 21 años de 1993 hasta 2014 del aumento de la edad de
pensión de 55 años para las mujeres y 60 años para los hombres, a 57
años para las mujeres y 62 años para los hombres. De igual manera,
el número de semanas se incrementó de 1.000 a 1.300 para el 2015.

En la modalidad de las pensiones en el caso del RPM se estableció


una pensión correspondiente a una renta vitalicia, mientras en el RAIS
se establecieron las alternativas de renta vitalicia o retiro programado.

La tasa de cotización se aumentó desde 13,5% en 1993 hasta


alcanzar 16%. En el caso de los individuos con más de 4 SMMLV se
adicionó en 1%, y para aquellos con más de 16 SMMLV hasta más de
20 SMMLV, se incrementó desde 0,2% hasta 1%.

Las cotizaciones se fijaron en el 16% del ingreso. En el RPM el 13%


corresponde a la pensión de vejez y el 3% restante a los gastos de
administración, y a las pensiones de invalidez y sobrevivencia. En el
RAIS el 11,5% corresponde a los ahorros de vejez, el 1,5% al Fondo
de Garantía de Pensión Mínima (FGPM) y el 3% restante a los gastos
de administración, y las pensiones de invalidez y sobrevivencia.

Por su parte, al Fondo de Solidaridad Pensional en sus cuentas de


solidaridad y subsistencia se destinan el 1% de aportes adicionales de
quienes ganan más de 4 SMMLV, con 0,5% respectivamente.
Mientras, se destina exclusivamente a la subcuenta de subsistencia el
0,2% para quienes tienen entre 16 y 17 SMMLV, 0,4% de 17 SMMLV
a 18 SMMLV, 0,6% de 18 SMMLV a 19 SMMLV, 0,8% de 19 SMMLV
a 20 SMMLV y 1% con más de 20 SMMLV.

Además, en el RAIS se estableció el FGPM para el financiamiento de


quienes no alcanzan una pensión de 1 SMMLV, asignando para lo
anterior el 1,5% de las cotizaciones de los afiliados.

Tanto para el RPM y el RAIS se estableció una pensión mínima de


vejez de 1 SMMLV. De otro lado, una proporción de los recursos de
las cotizaciones se destinó a la financiación de las pensiones de
invalidez y sobrevivencia, en los cuales la pensión mínima también es
de 1 SMMLV.

Para aumentar la cobertura se estableció la obligatoriedad de las


cotizaciones por parte de los afiliados, empleadores y contratistas. Sin
embargo, quedaron por fuera de la cotización los trabajadores con
contratos por obras realizadas, los contratos por días o tiempo parcial,
los microempresarios y los trabajadores informales.
El Acto legislativo 01 de 2005 creo los Beneficios Económicos
Periódicos (BEPS) y la Ley 1328 de 2009 los reglamentó. Los BEPS
se encuentran a cargo de Colpensiones y en este se pueden realizar
aportes voluntarios inferiores a 1 SMMLV, como también la renta
vitalicia puede ser menor a 1 SMMLV. Por su parte, el Estado realiza
un subsidio de 20% en los ahorros de los BEPS.

A su vez, el RPM se subdivide en el de los afiliados privados y


públicos, segundo con varias cajas del Estado. Luego de la reforma de
la Ley 100 de 1993 se han agrupado las diferentes 6 cajas del Estado
y el Instituto del Seguro Social (ISS) se transformó en Colpensiones.
Entre las cajas del Estado se encuentran los regímenes especiales del
Fondo del Congreso, Fondo de Pensiones Públicas (Fopep), Fondo
del Magisterio (Fomag), Caja de Fuerzas Militares y Caja de Sueldos
de Retiro de la Policía.

Los maestros sin distinción de género acceden a la pensión a los 57


años. En las fuerzas armadas la pensión la obtienen a los 20 años de
servicio por retiro forzoso y a los 25 años por retiro voluntario, a
cualquier edad. En las fuerzas armadas la cotización de los miembros
es de 5% y la tasa de reemplazo oscila entre 50% y 95% del sueldo
básico.
CONCLUSIONES
• En los tipos de fondos, los recursos se invierten en portafolios de
inversión donde generan rentabilidades, incrementando los
ahorros de los afiliados. Sin embargo, no siempre son positivos,
ya que al estar expuestos a los mercados 125 financieros existe
un riesgo, este riesgo será mayor o menor dependiendo en el
tipo de fondo en que se encuentren los ahorros.

• Las modalidades de pensión permiten al afiliado escoger la


forma en que desea retirarse y como los recursos de sus ahorros
se destinen a su pensión de vejez.

• La naturaleza excluyente del Sistema General de Pensiones no


permite una cooperación entre el Régimen de Prima Media y el
Régimen de Ahorro Individual con Solidaridad, esto se refleja en
el perjuicio de los afiliados y pensionados del sistema. Un
sistema pensional complementario permitiría a los colombianos
gozar de los beneficios que propone cada régimen, realizando
cotizaciones constantes a ambos, con el objetivo de generar una
mayor estabilidad económica en su vejez

• Los afiliados a los fondos de pensiones deben conocer los


beneficios que otorga cada régimen para así conocer cuál es el
más apropiado para ellos. Tomar estas precauciones puede
evitar una mala decisión a futuro, con respecto al régimen por el
cual el afiliado decida pensionarse.
BIBLIOGRAGIA

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