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Artículo de

Maribel Cruz Ortiz* Cristina J enaro Río**


Revisión Ma. Del Carmen Pérez Rodríguez *** Martha Landeros López****

La Necesaria Discusión del


Modelo de Atención
Psiquiátrica en México

Resumen: The necessary discussion of the model of psychiatric


Nuevas visiones hacia la atención de las personas care in Mexico.
con enfermedades mentales han aparecido desde fina- Summary
les de los 60. La mayoría de ellas propugnaron modelos New visions about care of people with mental illness
de atención más inclusivos, de puertas abiertas y aten- have emerged since the late 60`s. Most of them called for
ción continuada en el tiempo en los distintos niveles de more inclusive, opened and ongoing attention models of
atención sanitaria. Estos modelos han permeado de dis- care, among the different levels of healthcare. These
tintas formas en muchos países de la mano del models have permeated in different forms in many countries
cuestionamiento del modelo biomédico y en consonan- by questioning the biomedical model and in line with
cia cada vez mayor con conceptos como calidad de vida, growing concepts as quality of life, disability,
discapacidad, intersectorialid ad y trabajo multidis- intersectorality and multidisciplinary work. In this context
ciplinario. En este contexto se discuten los escasos cam- we discuss the limited changes generated by these trends

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bios generados por estas tendencias en el panorama de in the panorama of mental health services in Mexico, as
los servicios de salud mental en México, así como la well as the need to analyze and implement this change
necesidad de analizar e introducir este cambio para dar to promote the involvement of users and health workers
paso a la participación de los usuarios de los servicios y through active participation.
de los propios trabajadores de la salud a través de una
participación activa. Key words: Models of care, mental illness, disability,
quality of life.
Palabras clave: Modelos de atención, enfermedad
mental, discapacidad, calidad de vida.
Introducción
Nuevas visiones hacia la atención de las personas con
enfermedades mentales han aparecido desde finales de
*Estudiante de doctorado en di scapacidad en el Instituto los 60, la mayoría de ellas propugnaron modelos de aten-
Superior de Integración a la C omunidad, Universidad de
ción más inclusivos, de puertas abiertas y atención conti-
Salamanca, España.
**Doctora en Psicología, profeso ra titular del nuada en el tiempo en los distintos niveles de atención
Departamento de Personalidad, Evaluación y Tratamiento sanitaria. Estos modelos han permeado de distintas for-
Psicológico de la Facultad de Psicología, Universidad de mas en muchos países de la mano del cuestionamiento
Salamanca, España. del modelo biomédico y en consonancia cada vez mayor
***Doctora en Enfermería, profeso ra Hora clase de la
con conceptos como calidad de vida, discapacidad,
Facultad de Enfermería de San Luís Potosí, Universidad
Autónoma de San Luís Potosí, M éxico. intersectorialidad y trabajo multidisciplinario.
****Doctora en Enfermería, profeso ra de tiempo completo Estas propuestas involucran un cambio de modelo en
de la Facultad de Enfermería d e San Luís Potosí, la atención psiquiátrica, pero este cambio sólo puede
Universidad Autónoma de San Lu ís Potosí, México. efectuarse a la luz del análisis de los elementos que lo
integran, su interacción y la forma como son entendidos.
Correspondencia: Maribel Cruz Ortiz M.S.P. Correo
electrónico: redazul@hotmail.c om Por esta razón a partir de la experiencia en el contexto
mexicano, se describen algunos rasgos de los usuarios,
Manuscrito 544 recibido Junio, aceptado Julio, 2009. profesionales, estructura y modelo vigente en este mo-

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mento, vinculándolos con los conceptos introducidos bajo Las recientes discusiones sobre política y economía
el modelo social de discapacidad y resaltando las necesi- de México ante la crisis mundial, y el análisis de cómo la
dades de un cambio real en el modelo de atención. inacción propositiva de la clase política ha fomentado la
Visto desde este contexto, es necesario mencionar existencia de monopolios que viven, crecen y devoran
que si bien es cierto que ha ocurrido un cambio en el nuestro país en muchas de las esferas de la economía
paradigma de atención a las personas con enfermedad nacional, constatan que no sólo se trata de una cuestión
mental que se ha traducido en la consideración de estas política con un reflejo económico estrictamente hablan-
personas como sujetos de derechos, y por lo tanto ciu- do. Este modelo hegemónico, único, incuestionable, e
dadanos en plenitud, este cambio a nivel mundial ha se- inamovible se refleja en muchas áreas en las que en el
guido distintos derroteros. discurso aparenta estar abierto al cambio, pero la prácti-
En el contexto Latinoamericano, este cambio ha teni- ca refleja un estancamiento que no admite cambios más
do un proceso mas lento, y bajo la influencia predomi- que de forma.
nante de las escuelas norteamericanas se ha introduci- El sistema de salud en México refleja también un
do con fuerza el concepto de calidad en los servicios, modelo monopólico, no en el sentido de que un ciudada-
encaminado a mejorar procesos institucionales más que no no tiene opción de elegir la institución que lo atende-
resultados personales en los usuarios. Es así que con rá, (situación que también se requiere analizar), sino en
frecuencia este proceso se ha descontextualizado de las el sentido del establecimiento del modelo biomédico como
necesidades y deseos de las personas, y quizá por ello forma de entender y enfrentar el proceso de salud-enfer-
en las evaluaciones formales (1) , se evidencian contradic- medad casi de forma única.
ciones entre teoría y práctica.
Así, si bien se encuentra una buena calidad en la El modelo presente
documentación referida a la planificación de los servicio, Refiriéndonos específicamente a la atención a las per-
también se evidencian limitaciones "con muchas áreas sonas con enfermedad mental en México, el sistema de
identificadas en los objetivos, sin una jerarquía de priori- salud ha tenido momentos claves de cambio. El último en
dades, lo que dificulta la posibilidad de implementación y el recuerdo llamado "Modelo Hidalgo", supuso un cambio
ejecución", "No ejemplifican de forma suficiente la ade- tibio, focalizado, que no ha logrado extenderse a la mayo-
cuación a los problemas concretos y específicos de cada ría de los Estados de la República, y que no generó un
lugar", "en los programas y planes revisados se conside- verdadero debate sobre la obsolescencia de la institución
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ra la importancia del trabajo en equipo y se resalta el psiquiátrica actual como alternativa para la mejor atención
valor de la práctica interdisciplinaria, pero durante las vi- a las personas con enfermedades mentales.(3)
sitas se observó que la labor es eminentemente médica, El debate en la mayoría de los Estados se centró, en
quedando los restantes miembros de los servicios en un el mejor de los casos, en los cambios en las estructuras
mero rol auxiliar y secundario".(1) físicas y reformas materiales necesarias y de sobra cono-
Es así que el cambio de modelo acentúa los cambios cidas. Sin embargo, el análisis de cuestiones conceptua-
del modelo administrativo, restando importancia con ello les de forma participativa, en la que existiera la opción real
al modelo conceptual de fondo. En estudios como Aproxi- de escuchar y atender la voz de quienes reciben los servi-
mación a la realidad de las personas con discapacidad cios y en la que los trabajadores de estos servicios explo-
en Latinoamérica (2) , se identifica la superposición de ráramos otras formas de entender los servicios y el cuida-
paradigmas de atención, cuando en el discurso se habla do que brindamos a las personas con enfermedad mental,
de derechos y plena participación pero en la actuación con una visión mas allá de la patología y más cercana a la
profesional predomina un paradigma de rehabilitación y vida cotidiana y a los apoyos requeridos para ello, quedó
subsiste una práctica derivada del paradigma tradicional. pendiente para mejor momento.
Es importante insistir en que aún en un sólo país, Las razones para la resistencia a este cambio reside
como en el caso mexicano, las características regiona- en las características propias del sistema de salud y en
les varían, pero en general se puede decir que la red el histórico rezago en el que se ha mantenido la salud
psicosocial complementaria a la estrictamente sanitaria mental, con escasos recursos materiales, recursos hu-
es incompleta o inexistente, sobre todo si se consideran manos insuficientes (4) y carencias formativas(5). Ello im-
las necesidades de cuidados comunitarios de las perso- plica no sólo deficiencias técnicas sino también dificulta-
nas con enfermedad mental. Así también, aún en los des para comprender que restringir el papel de los usua-
modelos novedosos introducidos bajo la premisa de la rios al mundo de la institución y a la enfermedad, supone
atención comunitaria, persisten vestigios de la organiza- dejar de lado el entendimiento de los determinantes
ción jerárquica, lineal, regida por modelos administrati- contextuales que interactúan para generar salud/enfer-
vos y con alternativas de atención que reflejan la preemi- medad, y perpetuar la carencia de conocimiento y la in-
nencia de la teoría biologicista. capacidad para su adquisición.

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El rol actual de los usuarios ca, auditiva, y visual. Sin embargo en esta clasificación
Refiriéndonos a las personas con enfermedad mental, no es frecuente visualizar la discapacidad relacionada
es necesario insistir en la importancia del concepto de con la enfermedad mental, y se confunde con la
inclusión, ya que en las relaciones con este grupo de po- discapacidad intelectual a la que se refiere el antiguo
blación es mayor aún la dificultad para modificar esta pos- término de "retraso mental".
tura de poder y fomentar una participación activa en la que Son estos cuatro grupos para los cuales se desarro-
no sólo se les proporcionen mejores servicios, sino que llaron organizaciones e intervenciones y que de alguna
éstos sean además los requeridos por ellos. Esto implica forma potenciaron no sólo un cambio teórico sino tam-
abrir las puertas para el trabajo conjunto en una organiza- bién en las prácticas en el ámbito de la discapacidad.
ción más lineal. Así lo demuestra el cambio del término retraso mental
La razón de ser de los cuidados consiste en garanti- por discapacidad intelectual, surgido principalmente por
zar la vida del sujeto y su autonomía. Es necesario insis- la creciente comprensión del proceso de discapacidad y
tir en este aspecto, dado que la atención a las personas su mejora, evolucionado desde un rasgo o característica
con enfermedad mental, más que en otros colectivos, se centrada en la persona hacia un fenómeno originado por
ha centrado fundamentalmente en el control de la enfer- factores orgánicos y/o sociales. Estos factores orgáni-
medad. El valor de las relaciones democráticas en el in- cos y sociales dan lugar a limitaciones funcionales que
terior del sistema de salud mental constituye una de las se reflejan en incapacidad o restricción en el funciona-
recomendaciones de las diez que la OMS hiciera en el miento y el desempeño de los roles y las tareas espera-
año 2001, año conocido como "año de la salud mental". dos de un individuo en un ambiente social (9).
La OMS, a fin de impulsar el progreso en la atención Como ya señalábamos, la discapacidad engloba mu-
psiquiátrica, recomienda involucrar a las comunidades, chas problemáticas de distinto tipo. En el caso de la
las familias y los usuarios en la formulación y la adop- enfermedad mental la distinción entre el proceso de la
ción de las políticas, los programas y los servicios. (6) enfermedad y la discapacidad resultante es menos clara
Y es que la falta del análisis consciente y comprome- que para otras discapacidades, razón (entre otras), por
tido del modelo que rige en salud mental nos hace olvidar la que tiene poco tiempo de se r considerada como
que la normatividad social y sanitaria en México ha esta- discapacidad. Es evidente que las discapacidades psi-
blecido algunos instrumentos para que este modelo se quiátricas son diferentes de otras discapacidades en la
torne más participativo. (7, 8) Si bien dichos instrumentos medida en que fluctúan y son el resultado de un proceso

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son aún insuficientes especialmente en el caso de perso- intermitente y esporádico, pero en general puede aplicar-
nas con discapacidad intelectual y psíquica quienes tie- se el mismo concepto de discap acidad ya citado, y
nen más limitados sus derechos, constituyen sin embar- operativamente debiera analizarse el término para refle-
go disposiciones indispensables para la participación siem- jar claramente sus implicaciones, pero para ello aún se
pre y cuando se utilicen y no constituyan letra muerta. requiere un consenso en su definición.

El cambio en la práctica a par tir de la recon- Tenemos así, dos retos a los que parecen llegar tarde
ceptualización los servicios de salud mental: Por una parte la compren-
Al producirse el cambio de paradigma de la incapaci- sión de la enfermedad mental c omo generadora de
dad a la discapacidad, el grupo heterogéneo de perso- discapacidad; por otro lado, la urgente necesidad de es-
nas con diversas enfermedades pero compactado bajo tablecer redes de trabajo que potencien su integración y
su agrupación común, se fue diferenciando de acuerdo a participación ya de por si postergada.
la función que se encontraba afectada. Sin embargo, Ambos retos están relacionados porque la compren-
compartían problemáticas comunes reflejadas en la ex- sión de la discapacidad plantea también la vinculación
presión de limitaciones en el funcionamiento individual directa con la cuestión social de forma más específica y
en un contexto social, que representaban una desventa- práctica, a través del reconocimiento de que la aplica-
ja sustancial para el individuo. La discapacidad tiene así, ción sistemática de apoyos individualizados, no sólo de
su origen en una condición de salud que da lugar a déficit servicios en materia de salud, puede mejorar el funciona-
en el cuerpo y las estructuras, limitaciones en la activi- miento humano (9). Con ello se orienta la transformación y
dad y restricciones en la participación en el contexto de cambio de los sistemas sociales, educativos y de salud
los factores personales y ambientales (9, 10) . hacia la persona con su plena participación.
Refiriéndonos a la común invisibilidad de las perso- La participación colectiva ha facilitado en muchos
nas con enfermedad mental, hemos de señalar que en casos el análisis de la enfermedad mental desde pers-
los últimos años, con la intro ducción del concepto pectivas diferentes, no sólo desde la inacabable cues-
discapacidad, clásicamente se ha hecho referencia a tión de la etiología sino sobre el entendimiento de su
cuatro grandes grupos de discapacidad: intelectual, físi- abordaje. En este sentido, el actual predominio del mo-

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Maribel Cruz Ortiz y Cols.

delo biológico ha ganado terreno a partir de su fortaleci- ra, a la importancia de llevar la concepción de curar (cure)
miento en Norteamérica y su reflejo mas palpable se nota hacia la de cuidar (care), y la de sanar hacia la de recu-
en las características de la atención a las personas con perarse (15). Ello hace referencia no sólo a la "recupera-
enfermedad mental, muy circunscritas al sector de la ción" del trastorno, sino sobre todo a la recuperación del
salud y de la patología. proyecto vital una vez que ha aparecido la enfermedad y
Un enfoque más cercano a la realidad práctica de las la discapacidad. Implica sobre todo apoyarse en las for-
personas, y por supuesto no excluyente de la visión talezas, en las potencialidades remanentes y en el pro-
etiológica de la enfermedad, muestra que en general mas ceso dinámico de querer seguir.
allá del diagnóstico, este grupo de personas comparten Pareciera una cuestión obvia y de sobra evidente, pero
características que tienen su reflejo directo en necesida- este entendimiento de las necesidades de la persona
des generadas por un mayor o menor déficit en situacio- mas allá de su enfermedad ha de hacer frente al menos a
nes de adaptación a la vida diaria. Así pues, coincidimos dos tipos de dificultades. La primera de ellas se deriva de
con Blanco y Pastor(11), quienes aluden a las siguientes la definición del campo de acción de la medicina; cues-
áreas afectadas en estas enfermedades: tión discutida hasta la saciedad pero que en este mo-
• Autocuidados (higiene personal, manejo de su entor- mento se enfrenta a un nuevo reto como es la acelerada
no, hábitos de vida saludables, etc.) difuminación de los límites de actuación entre sectores y
• Autonomía (manejo del dinero, autonomía en el ma- aún entre profesiones. Los requerimientos de la pobla-
nejo de transportes, utilización del ocio y tiempo li- ción llevan cada vez con más fuerza a responder con
bre, integración económica y desempeño laboral.) equipos multidisciplinarios y multisectoriales para poten-
• Autocontrol (manejo de situaciones de estrés, com- ciar los resultados de las intervenciones.
petencia personal, etc.) Sin embargo no es sólo cuestión de entender estas
• Relaciones Interpersonales (red social, manejo de si- necesidades, sino también de cambiar el funcionamien-
tuaciones sociales, habilidades sociales.) to del sistema de salud mismo y la forma autoritaria que
• Ocio y tiempo libre (socialización, manejar el ocio, prima en nuestro modelo, donde el sujeto es mero objeto
disfrute, motivación e interés.) de la atención y por tanto tiene una participación nula no
• Funcionamiento cognitivo (atención, percepción, con- sólo en el diseño, implementación y evaluación de los
centración y procesamiento de información.) servicios, sino también en la discusión conceptual.
En suma, como señala Gilbert, para avanzar hacia De este modo el sujeto llamado paciente es converti-
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una adecuada atención e integración de las personas do en objeto, y por lo tanto inerte, pero además, de forma
con discapacidad psiquiátrica se deben ir articulando sis- más o menos voluntaria, consentida, pero sobre todo
temas de atención y soporte comunitario. Sus pilares "normalizada", la mayoría de quienes nos desempeña-
básicos se deben asentar en la colaboración entre el sis- mos dentro del sistema, asumimos que la práctica es
tema sanitario a través de sus servicios de salud mental, así de incuestionable. Y así como al "paciente" le está
unidades de hospitalización, hospitales de día y otros implícitamente (y a veces explícitamente), prohibido cues-
recursos y el sistema de servicios sociales, tanto gene- tionar, estas mismas relaciones de poder se van repro-
rales como especializados. Ello ha de posibilitar su man- duciendo en las instituciones desde niveles operativos
tenimiento e integración en el entorno social, atendiendo hasta niveles de gestión y decisión. Se trata de una rela-
necesidades específicas de atención como apoyo a la ción meramente jerárquica donde las discusiones se
rehabilitación psicosocial, integración social, rehabilita- centran en cómo, cuándo y dónde y no en por qué.
ción laboral, apoyo a la integración laboral, atención resi- Los modelos centrados en la incapacidad definidos
dencial y soporte comunitario, sin olvidar el apoyo a las por Schalock como aquellos focalizados en un defecto
familias (12-14). personal más que en el potencial humano, y con un énfa-
sis exagerado en la calidad de los cuidados basados en el
La participación de los profesionales control, el poder, la salud, la seguridad, la minusvalía, y la
No es ocioso señalar la importancia que este enten- clasificación, se ven reflejados en el la gran importancia
dimiento reviste para los profesionales de la Enfermería, que se ha dado a la calidad de la atención. Por el contra-
toda vez que la concepción holística y el énfasis en el rio, la calidad de vida se centra en la inclusión social, la
cuidar son terreno propio de las enfermeras, limitado por autodeterminación, el desarrollo personal, la inclusión en
el ejercicio institucional predominantemente, y constitui- la comunidad, y la provisión de apoyos individualizados"(16).
do en oportunidad inmejorable a la vista de los cambios Es indispensable entonces hacer consciente los pre-
que incrementan las necesidades de apoyo por depen- supuestos, generalizaciones e imágenes profundamente
dencia y/o discapacidad. inculcados que tenemos para entender el mundo llama-
Visto desde esta perspectiva, es conveniente referir- dos modelos mentales. Ello permitirá entender las razo-
nos en el ámbito de la salud, aunque sea de forma some- nes por las que el concepto de autodeterminación ha

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venido siendo desatendido en nuestros programas y servi- Las políticas públicas son la instrumentación de las
cios. Dicha autodeterminación se entiende como la capa- necesidades de la población. En este sentido se plantea
cidad y el derecho de las personas a participar no sólo en la participación conjunta de investigadores y organizacio-
la solicitud, planificación, organización y evaluación de los nes para formular instrumentos que permitan no sólo co-
servicios, sino en la definición del curso de su vida. nocer sino también medir, es decir crear instrumentos que
Mucho de lo discutido hasta aquí, está en consonan- ofrezcan información operativa del grado de afectación,
cia con las teorías humanista-sociales, sin que ello ex- áreas afectadas y posibles vías para minimizarlo, a través
cluya per se los elementos biológicos de la enfermedad de apoyos identificados. En este sentido, la participación
que ayudan en algunos casos a comprender el surgi- de las organizaciones de familiares o personas con pro-
miento y curso de la enfermedad mental pero que son blemáticas comunes es validada por el conocimiento di-
irrelevantes para entender al ser humano en su conjunto, recto que poseen y por el derecho que tienen como ciuda-
haciéndose necesario el uso de un enfoque dialéctico danos de demandar servicios más próximos a su realidad.
para integrar estos elementos. Sin embargo es difícil predecir en qué medida las organi-
zaciones ciudadanas adquirirán un poder equiparable al
Las perspectivas de la estructura médica tan ponderada por su conocimien-
El desafío entonces para los servicios de salud es en to científico que se ve asociado como algo natural a su
dos sentidos: por una parte adoptar la cultura de la calidad presencia constante en la estructura directiva.
como un forma de integrar no sólo los nuevos conceptos
generados en torno a la discapacidad, sino también los Referencias bibliográficas
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en la planificación, organización y evaluación de los servi- 4. World Health Organization. Men tal Health Atlas-2005.Geneva; 2005.
cios, y rediseñar estructuras más flexibles que permitan [Recuperado junio de 2009]. http://www.who.int/es/
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compartir y crear el conocimiento no sólo con los usuarios, Sectores de intervención prioritaria. Ginebra; 2006. [Recuperado mayo de
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2001. Ginebra; 2001. [acceso e l 22 de mayo de 2009]. Disponi ble en:
La estructura institucional está diseñada para el tra- http://www.who.int/es/
bajo por tareas independientes que diseccionan al usua- 7. Secretaría de Salud. Norma Oficial Mexicana NOM-025-SSA2-1994, para
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hospitalaria médica-psiquiátrica. México; 1994.
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Es necesario señalar además una variable que apare- 10. Palacios A. El modelo social de discapacidad: Orígenes, caracterización y
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liderazgo más democráticos, y mayor capacitación y 12. Gisbert C. Rehabilitación psicosocial del trastorno mental severo: Situación
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