Está en la página 1de 83

UNIVERSIDAD PERUANA DE CIENCIAS APLICADAS

CURSO

DESARROLLO HUMANO DEL ADULTO MAYOR

SECCIÓN

PS31

MONOGRAFIA FINAL

INTEGRANTES

Comisario Andres Guzmaro Anthony - U20201C618


Paiva Mendez Dayane Nicol - U202018854
Martínez Puccinelli, Sergio Enrique Alejandro - U201814272
Vera Tineo, Juan Rodrigo - U202012208
Garay Cubas, Carla Sofía - U20181C732

DOCENTE

ANDREA MONTALVO GRAY

Lima 30 de Noviembre de 2021


I. INTRODUCCIÓN:

La vida de un ser humano pasa por diferentes etapas; estas etapas son las que presentan al

individuo una oportunidad de individualidad y de crecer como persona. Las personas de edad

avanzada, en su mayoría, presentan la necesidad de aceptar sus vivencias pasadas y seguir

adelante con sus vidas. Ellos luchan por lograr un sentido de integridad, coherencia y

totalidad en sus vidas, en vez de dar vía a la desesperación sobre la incapacidad de volver a

vivirla de manera diferente (Erikson y Kivnick, 1986).

La tercera edad es la etapa del desarrollo humano durante la cual los esfuerzos de toda una

vida se consolidan. En esta etapa hay cierta madurez acerca de las cosas, de la naturaleza del

hombre y de la vida en general que solo los años y la experiencia pueden dar. Tanto la vejez

como el concepto de edad cronológica son determinadas por la sociedad y la cultura a la que

se pertenece, así es como se da el concepto de edad social, la cual va a variar de acuerdo con

el concepto (Erikson, 1978).

En este trabajo se explicará a detalle las etapas que vivió nuestra entrevistada, en el cual

abordaremos temas desde la infancia, adolescencia y juventud, adultez y vejez. A su vez,

buscamos relacionar y complementar toda esta información con las lecturas revisadas a lo

largo del curso.

Nuestro trabajo tiene la finalidad de poner en evidencia todo lo que hemos aprendido todas

estas semanas, haciendo contraste con un caso real; el cual nos ayudó a profundizar cada uno

de los temas; dándonos la oportunidad de identificarlos en nuestra vida cotidiana.


II. INFORMACIÓN GENERAL

II.1 Datos de filiación

Nombre: Estefanía Vásquez (nombre falso para proteger su privacidad)

Edad: 70 años

Sexo: Femenino

Lugar y fecha de nacimiento: 03-08-51 en Chimbote

Grado De Instrucción: Secundaria - Instituto

Profesión: Ama de casa

Estado Civil: Divorciada

Residencia: Lima

N° de Hermanos: 6 hermanos

Lugar ocupado entre los hermanos: 4ta hermana

Número de hermanos vivos actualmente: 1

Número de hijos: 6

Sexo y edades de los hijos: 4 hombres y 2 mujeres

Personas con las que vive actualmente: Con 2 hijos


II.2 Descripción física

Estefanía es una adulta mayor que aparenta su edad de 70 años, su contextura es flaca, su

color de piel es marrón claro y usa lentes. Constantemente se le podía ver arreglada y bien

abrigada con un gorro y saco.

En ambas sesiones hemos comenzado con Estefanía tejiendo, dejaba de tejer una vez que

respondía cuestiones largas y comenzaba a tejer otra vez una vez que esperaba una pregunta

nueva. Uno de sus hijos la ayudaba con la llamada zoom y con respecto al ángulo de la

cámara, continuamente estaba en contrapicado, bastante cerca de Estefanía. Estefanía nos

veía y nos escuchaba con claridad, una vez que había interferencias nos lo dejaba saber.

II.3 Descripción de conducta

Al ver el comportamiento de la Señora Estefanía, notamos un comportamiento bastante

común y llamó nuestra atención que nos habló y respondió las cuestiones de todos los puntos

de su historia sin ningún problema. No hubo problema alguno al responderlas, no lloró. Más

bien, su estado de ánimo ha sido alegre en ambas sesiones. Se le veía feliz, colaboradora y

gozaba contando anécdotas.

Su discurso era fluido, sin embargo, notamos una variación en el curso del habla o del

pensamiento al instante de dialogar. Percibimos que Estefanía no podía seguir normas de la

sintaxis y no había una correcta ilación de palabras. Podíamos comprender con paz lo que nos

contaba la entrevistada; no obstante, al transcribir la entrevista se logró más conocido pues

había oraciones sin concluir o ideas que Estefanía comenzaba y combinaba con otras. Al

instante de leer la transcripción es muchísimo más clara la variación de la que se habla.

Percibimos el carácter de Estefanía como bastante flemático. Era una persona bastante

paciente, calmada y su discurso era bien reflexivo. Reiteradamente, en varias cuestiones, solía

concluir con una meditación bastante preciosa. Su reacción no tuvo ninguna alteración en ni

una de ambas entrevistas, su alegre humor tampoco.


III. DESARROLLO

1. Adolescencia y juventud:

En este fragmento podremos ver que la señora E. sentía cierta presión social por parte de su

familia por el tema de que a corta edad ella se encontraba trabajando con su madre y abuela

para sustentar un poco más la economía de su casa y hacía el papel de hermana mayor

corrigiendo a su hermanito quien no quería hacer los deberes del hogar. La teoría sociológica

dice que la adolescencia es el resultado de tensiones y presiones que vienen del contexto

social, fundamentalmente en lo relacionado con el proceso de socialización que lleva a cabo

el sujeto y la adquisición de roles sociales, donde la adolescencia puede comprenderse

primordialmente a causas sociales externas al mismo sujeto. Por eso la teoría de Piaget,

releva los cambios en el pensamiento durante la adolescencia, donde el sujeto tiende a la

elaboración de planes de vida y las transformaciones afectivas y sociales van unidas a

cambios en el pensamiento, donde la adolescencia es el resultado de la interacción entre

factores sociales e individuales (Delval, 1998:550-552). Dentro de este fragmento de la

entrevista no es precisamente en el tiempo de adolescente sin embargo se encuentra ella

trabajando a una corta edad sin poder disfrutar mucho de lo que esa etapa le brinda.

¨Sra. E.: Bueno… pues cuando era… Bueno, era pequeña y mi mamá, mi papá…

pertenecíamos a una familia un poco humilde, y pues los recuerdos bonitos o los

recuerdos que te dejan cosita pues… eran cuando eras menor de edad. Entonces lo

que recuerdo es que ayudé a mis padres, a mi madre, a trabajar, a ayudar a cuidar a

mis hermanitos, a colaborar en la casa como si fuéramos personas ya más

grandes… pero era un recuerdo un poco no muy bonito, pero a la vez bonito porque

era algo que hoy en día no se ve casi…¨

Abordando el tema de la ‘’Construcción de las nociones’’, Los conceptos de adolescencia y

juventud corresponden a una construcción social, histórica, cultural y relacional, que a través
de las diferentes épocas y procesos históricos y sociales han ido adquiriendo denotaciones y

delimitaciones diferentes: «la juventud y la vejez no están dadas, sino que se construyen

socialmente en la lucha entre jóvenes y viejos» (Bourdieu, 2000:164) y específicamente en la

teoría psicoanalítica; se puede observar que el resultado se concibe en el desarrollo que se va

produciendo dentro de la pubertad, a la vez ocurre un despertar de la sexualidad y una

modificación en los lazos familiares, pudiendo presentar una desvinculación con la familia y

oponiéndose a las normas que estás trajeron para sus hijos adolescentes. La señora E en su

etapa de adolescente empezó a dar más importancia a su identidad, maquillándose y saliendo

a jugar con sus vecinos, sin que su mamá lo notara ya que podría recibir un castigo. En ese

momento quería tener su despertar, desprenderse socialmente con los demás adolescentes de

la cuadra. Se dio cuenta que la forma de pensar en la que se basaba iba cambiando y mostraba

aún más interés por querer desenvolverse socialmente. Dentro de este fragmento se encuentra

como la señora E. hablaba acerca de su adolescencia y sobre su desenvolvimiento social con

sus hermanos y vecinos del barrio.

¨Sra. E.: Pues sí verdad… Uno comienza a arreglarse, a despertar, a querer mirar a

otro, pero a escondidas porque si tu mamá te veía pues te decía “qué cosa te pasa” y

te quería echar el látigo (...)

Entrevistador (E): ¿Con amigos del barrio o entre ustedes, los hermanos?

Sra. E.: No, primero entre nosotros, pero luego ya los vecinitos… podíamos facilitar

jugar entre vecinos. Solo cuando nos mandaban a cargar el agua (…) a los 12-13

años nos cambió un poquito el pensamiento y te pones un poquito ya (…) alguien te

mira y dice bueno, era cosa de niños, pero es una adolescencia bonita. (...) Nuestro

trofeo lo dejábamos y es como que observas algo, pero no lo puedes decir y era

bonito, son muy bonitas experiencias de repente… no sé, mirarse al espejo, se


arreglaron, que no tenía muy bonito y por ahí no es mi primera experiencia como

sentirme una señorita aun siendo chica parecía que hubiera una señorita. ̈

En cuanto al tema de ‘’Trayectoria de vida y condiciones juveniles’’ La perspectiva analítica

de las trayectorias de vida y nuevas condiciones juveniles, se configura como un intento de

avanzar en la comprensión del fenómeno adolescente y juvenil, la que se constituye en una

nueva o recreada miradas al conjunto de situaciones por las que atraviesan estos segmentos

sociales, con énfasis distintos y posibles implicancias en el plano de impacto en las políticas

orientadas a los adolescentes y jóvenes. Asimismo el posicionar la atención en los cambios y

transformaciones sociales experimentadas a nivel global en las últimas décadas,

representadas en la lógica del paso de la sociedad industrial hacia la sociedad informacional o

del conocimiento (Castells, 2001a)a lo que corresponde a la señora E. es que las transiciones

que ella llevó fueron bastante repentinas, ya que durante su niñez y adolescencia son etapas

en las que ella trabajaba y a la vez se identificaba ella misma, conociéndose y envolviéndose

socialmente con las personas de su misma edad. Sin embargo, nos cuenta que hubo un tiempo

de ‘’ignorancia’’ para ella en el cual a la edad de entre los 15 y 16 años salió embarazada;

asumiendo la responsabilidad sin el padre y al poco tiempo abandonando su hogar.

¨Sr. E: Ay pues me salí de mi casa. No me salí, sino que tenía que trabajar porque mi

madre era muy pobre, como a los 14-15 años me fui a trabajar. Trabaja, vendía, así...

y pues mis hermanos mayores recibían las órdenes de la mamá que si, entonces, yo

me fui a trabajar y cuidaba de que mi mama no me vaya a pegar, antes había mucha

ignorancia. Antes, hace muchos años y no podía sonreírle a nadie porque mis

hermanos ya me estaban mirando si miraba a alguien. Entonces cuando ya he tenido

15, 16,17 y ya por ahí me enamore jovencita. Y yo no me marché de casa, pero salí

embarazada y luego tuve que asumir mi responsabilidad, pero dentro de mi casa. Y

fui criando a mi niño y luego cuando crecí un poquito más tuve que salir ya Y pues
me Sali con mi niño y me comprometo, tenía dos años (el bebé). Más o menos a los 21

años. ¨

Haciendo referencia a ‘̈Las tareas de la adolescencia ̈ Blos (1976) enfatiza que las tareas de

adolescencia ha sido un enfoque constante aludido el cual permite comprender las

transiciones de la adolescencia además menciona que este ha demostrado ser de mayor

utilidad para describir y definir las etapas evolutivas. Ofter (1969) el cual sostiene que el

concepto de crisis adolescente debe ser visto como una de las rutas de la adolescencia ya que

no todos los adolescentes viven esta etapa como ̈tormentosa ̈. Concluye que la mayoría de los

adolescentes llevan a cabo las tareas de su edad con éxito y sin una agitación perturbadora

por tener un yo lo suficientemente fuerte y el sostén de sus padres como para resistir las

presiones. Sin embargo, esto no significa que estén exentos de problemas, sino que algunos

adolescentes pueden vivir adaptados, en contacto con sus sentimientos y con relaciones

significativas; en este sentido la adolescencia como un periodo de crecimiento puede ser

atravesada sin rupturas graves entre generaciones o entre el adolescente y su antigua

identidad por lo cual un estado de conmoción interior no tiene que ser la clave comprensiva

para la adolescencia. Esto se logra observar en lo relatado durante la entrevista de la Sra. E ya

que pese a atravesar por una adolescencia con vivencias tormentosas logró mantener gran

resiliencia y así mantenerse optimista frente a las adversidades. Parte de estas adversidades

fueron que durante su adolescencia tenía que salir a trabajar y a la vez cuidar de sus

hermanos; razón por la cual decidió trabajar desde temprana edad pese a no contar con el

apoyo de sus padres en algunas situaciones.

¨Sr. E: Yo me fui a trabajar y cuidaba de que mi mama no me vaya a pegar, Y yo no

me marché de casa, pero salí embarazada y luego tuve que asumir mi

responsabilidad. (...)
Sra. E: Bueno… pues cuando era pequeña mi mamá, mi papá… pertenecíamos a una

familia un poco humilde, ayudé a mis padres, a mi madre, a trabajar, a ayudar a

cuidar a mis hermanitos, a colaborar en la casa … pero era un recuerdo un poco no

muy bonito, pero a la vez bonito. (...)

Sra. E: Uno comienza a arreglarse, a despertar, a querer mirar a otro pero a

escondidas porque si tu mamá te veía pues te decía “qué cosa te pasa” y te quería

echar el látigo. (....)

Sra. E: ya teníamos la tarea repartida y cada uno teníamos que hacerlo porque me

acuerdo que tengo un hermanito que no le gustaba hacerlo, entonces pues él recibió

su corrección.¨

2. Adultez

Dentro de ‘’Las tareas del desarrollo de la adultez’’ como dice R. Zapata, A, Cano y J,

Moya el término edad adulta no denota unos años definidos con precisión, sino que alude,

más bien, a un proceso que tiene lugar en la mitad de la vida y que forma parte general del

proceso de envejecimiento que avanza fisiológica, psicológica y socialmente desde el

momento de concepción. Los cambios que la señora E tuvo que pasar dentro de la etapa de la

adultez fueron repentinos por el cambio de rol a madre, tuvo que cumplir con esas

obligaciones porque ya tenía un hijo de quien se estaba haciendo responsable. Empezaba a

dedicarse mucho más al hogar que ahora manejaba, dejando a un lado la comunicación que

tenía con sus hijos, siendo algo importante para el rol de la madre dentro de la familia. Ella

tenía siempre una actitud perseverante con respecto a sus hijos, plasmaba un futuro ideal para

ellos en donde se encontrarán rodeados de gente buena e impulsando para que ellos salgan

adelante. La señora E tuvo que hacer un esfuerzo doble en su rol como madre y a la vez los

acercaba a la religión, esta tarea para ella era una asunción de importancia con las tareas

sociales que brinda para sus hijos


¨Sra. Elena: Lo que más me gustaba hacer en ese tiempo por la necesidad era ir a

trabajar, ayudar a mi esposo, me gustaba ir a la casa de trabajar y tratar de compensar

para ver si hacemos algo bien o no. En cuestión de qué me gustaba mucho era mi casa,

limpiar, desordenaba, volvía a limpiar, no era muy apropiado, pero me gustaba hacer

algo que me correspondía en ese tiempo, formaba mi pequeño rancho y era algo curioso

porque cuando venía (su esposo) me decía “Pero ¿Quién te ha ayudado?” yo le decía yo.

Sra. Elena: Lo que yo viví como los 30 años, mmm pues mi primer reto, a ver, tener que

seguir adelante a pesar de todo siempre tenía que salir adelante, decía “Voy a luchar, voy

a sacar a mis hijos adelante, si no tienen voy a sacarlo yo”. No sé, mi reto más grande

era como siempre tenerlos juntitos, que todos tenían que ser en grupito, que cada niño se

porten bien, que cada niño estudie, que se formen para el reto de mañana, como antes la

gente no hacía esas cosas no podía cumplir muchas cosas y para mí eso fue un reto y una

de las cosas más bonitas que viví empujándose para que todos salgan para arriba, a la

vez que crezcan dentro del grupo familiar en las buenas y en las malas.

Sra. Elena: Me costaba mucho porque era el doble de trabajo, porque tenía que hacer el

doble de lo que normalmente se hace, la supermamá. Tenía que madrugar, lo que iba

hacer en el día de semana lo hacía en la madrugada, siempre quería que mis hijos

crezcan y desarrollen su vida, aparte iba a trabajar y atenderlos para que todo vaya bien,

en el estudio iban al mismo tiempo, se iban juntos a las 10 de la mañana y horario de la

tarde. Era un reto para una mamá que no presentaba sus recursos para salir adelante,

pero gracias a Dios que poco a poco y dentro de todo podemos conservar esa unión.

Algunos hijos ya crecen y empiezan a tomar sus decisiones, pero eres muy lindo porque

cuando eran pequeños tú puedes tenerlos ahí en una bolita y todos duermen en una hora

y era muy bonito. ¨


En cuanto a la identidad femenina Alizade en ¨la mujer sola¨, la mujer accede a la

posibilidad de influenciar el curso de la vida y volcar el ancho mundo lo aprendido sobre si

en la intimidad privada de sus días, por lo tanto podemos ver que la señora E. demuestra gran

experiencia en cuanto a su propia identidad y los ideales que tiene sobre el futuro. Entre estas

variadas muestras de identidad propia cabe destacar su mentalidad de aprender de situaciones

difíciles, de tener mente abierta y de hacer respetar sus ideales. Este caso de mujer sola se

muestra principalmente en su matrimonio, en el cual, a pesar de no estar sola se muestra

independiente y preparada para enfrentar desafíos en solitario. Ella no necesita de su marido

siendo que ella ya estaba preparada para ser una madre sola; el acercamiento del marido en

esta situación se muestra mayormente como una molestia para ella hasta que por su

persistencia la conquista.

En el caso de hacer respetar sus ideales se puede ver que en su matrimonio le fue difícil

hacerlo ya que su esposo le gritaba, le golpeaba y se molestaba. Esto combinado con el

consumo de alcohol nos demuestra una imagen de una adultez dificultosa para la entrevistada

en la cual la solución más fácil hubiera sido doblegarse. No obstante, la señora E. muestra

resiliencia y crea tácticas para minimizar el enojo de su marido el cual termina por respetar

sus decisiones e ideas. Esto se demuestra en la siguiente cita de la entrevista:

¨Señora E.: Pero luego así fuimos construyendo poco a poco, pero siempre estábamos

muy sumisos al lado ellos. El hombre de la casa va a venir y a decir que le sirvas la

comida, que le planches la camisa, eso era casi ya un deber. Era un deber de la

esposa, y fui construyendo, mis hijitos fueron creciendo y también fueron. Después sin

darme cuenta ya tenía mi familia, una casita y así fue la vida. ¨

En este fragmento de la entrevista se muestra cierta similitud en las ideas presentadas por

Alizade sobre la identidad femenina siendo que en el caso de la señora E. muestra una rara

independencia del marido y a pesar de no estar sola y todavía cuidar de los hijos
considerándolos importantes. Citando a Alizade (1998) se puede observar que la Sra. E. crea

una escena nueva de ser ¨madre de sí misma¨ cómo se puede ver en la siguiente cita de:

¨La mujer emerge hacía lo propio. Se desarrolla en ella un espacio de intensa

soledad. Es tiempo de reflexividad: se escucha, habla, cuida, complace. Se ha

convertido en una rara ¨madre de sí misma¨. ¨

Con lo que corresponde a la sexualidad y reproducción, la señora E., tiene su primera

relación sexual sin conocimientos previos y de manera precaria con la cual concibe su primer

hijo. Ella nos describe como posteriormente a este encuentro no tenía conocimientos sobre

salud sexual, sobre cómo se conciben los hijos o cualquier conocimiento que pudiera

ayudarle a tomar una mejor decisión. No obstante, ella decide hacerse responsable de sus

acciones y tenerlo, aunque no contará con el apoyo del padre del niño. La sexualidad y

reproducción en el trabajo de Montesinos nos habla sobre el rol del hombre de probar la

superioridad masculina sobre la mujer; lo cual no se ven sino como un intento fútil del

marido de mostrarse mejor que la entrevistada y doblegarla a sus deseos.

¨Señora E: Si, mucho porque al comienzo era un poquito muy, bueno los primeros

días era miel, toda pura miel, miel, (…) poco de conversación y era celoso, no quería

que me pintara me arreglara yo, pero él me conoció así muy arregladita muy

pintadita y ya cuando llegó a ser su mujer su esposa dijo que no era necesario que yo

me arreglara para que saliera entonces yo dije que no, a mi tú me vas a mandar le

dije, tú me has conocido así y tú me vas a aceptar y era una lucha a veces discutimos,

se ponía celoso y pase pues entre altos y bajos, tenía celos, no quería que vaya para

allá quería que haga lo que él quería pero yo dije que no porque si yo hoy me dejo

mañana me va a pegar, me va dominar y pasamos dos veces de manos y bueno no se

si hice mal o hice bien pero me defendí, defendí a mis hijos prefería pelear yo pero

que con mis hijos no se agarrara, pero después con el tiempo puede no se si yo pero
calmar eso y empecé a ser una mujer más inteligente como aprender que maso menos

le gustaba y que no pero no porque me lo ordenaba si no porque yo usaba eso yo

decía si él ha venido tomando, podía pasarse de mano.¨

En este fragmento se puede ver lo mencionado anteriormente el marido que intenta demostrar

su lugar de superior y la entrevistada que no lo acepta y que le discute. Esto rompe con

algunas ideas presentadas por Montesinos siendo que en el caso del hombre rompe su

sentimiento de superioridad y autoestima; también se ve incapaz de demostrar a otros que

tiene relaciones satisfactorias y poder sobre la relación. La sexualidad también se menciona

en Alizade en la cual menciona la diferencia entre los deseos del hombre y de la mujer en una

relación; el hombre busca placer ante todo y la mujer ser amada y estabilidad en su vida. La

mujer según Alizade se margina de los intercambios erógenos mientras más pasa el tiempo

siendo que su cuerpo en comparación al pasado ha cambiado y es rechazado por ellas

mismas. En el caso de nuestra entrevistada no se habla mucho sobre el tema aparte de sus

encuentros donde termina embarazada y no en el tema de sexualidad como el acto. La

entrevistada como se menciona en el fragmento de la entrevista se entrega sexualmente por

atracción sin saber las consecuencias, por lo contrario, en su segundo encuentro ella desea

una pareja estable que la ame y acompañe a criar a sus hijos.

Haciendo referencia a la idealización de la maternidad y el conflicto entre el trabajo y la

maternidad Sharon Drassinower (2016). La maternidad es idealizada desde tiempos

inmemoriales hasta la actualidad. Esta idealización se presenta en ciertas virtudes

relacionadas con el cuidado y en ocasiones suelen ser promovidas y exaltadas. Estos ideales

con respecto a la maternidad y crianza son en mayoría influenciados por la cultura, así como

también por los libros y publicaciones sobre crianza. Matilde Caplansky en su artículo La

Maternidad, Afectos que Convoca (2001) menciona que: ¨La idealización es tan intensa y fija

que incluso llega a impedir que se esta se logre ejercer adecuadamente ̈.


¨Sra. E.: Me costaba mucho porque era el doble de trabajo, porque tenía que hacer el

doble de lo que normalmente se hace, la supermamá. Tenía que madrugar, lo que iba

hacer en el día de semana lo hacía en la madrugada, aparte iba a trabajar y

atenderlos para que todo vaya bien, en el estudio iban al mismo tiempo. Era un reto

para una mamá que no presentaba sus recursos para salir adelante.

Sra. E.: yo me fui de viaje a España estuve muy consternada, porque tuve que hacer

un esfuerzo muy grande fue el reto más grande de mi vida por primera vez en mi vida

irme lejos a trabajar para mis hijos, algo que nunca en la vida voy a olvidar fue muy

triste, muy desolador, luchar por algo que quería y que mis hijos no les faltara nada y

darles lo que no tuvieran en su momento.

¿En qué momento decidieron tener hijos y cómo te sentiste tú en tu primer embarazo?

Sra. E: No fue planeado, no fue algo que yo quise, o que estaba tan enamorada para

nada fue algo que me hizo sufrir, llorar, ¨

Uno de los puntos más relevantes es el conflicto que surge entre el trabajo y la maternidad

esto se logra observar en cierta manera según lo relatado por la ¨Sra. E¨ cuando esta fue

consultada a cómo se sintió cuando nació su hija lo cual ella dijo que vivió un poco de todo,

que era feliz por la llegada, sin embargo, se sentía infeliz porque no podía darle todo lo que

necesitaba y así creció, tenía que dejar a su hija para poder trabajar. Tenía que dedicarse a

trabajar gran parte del tiempo, razón por la cual tenía que dejar encargada a su hija con su

mama para que ella pueda trabajar y así poder cubrir sus necesidades.

En el caso de la parentalidad tenemos a la señora E. y a su pareja los cuales crían juntos a

los hijos hasta que se divorcian en un punto. La señora E. como madre se muestra con fallas

siendo que aprendió de su madre una manera que según ella define ¨mala¨ e ¨traumática¨ para

sus hijos. Ella en ese sentido muestra que aprende de sus errores y se redime de diferentes

maneras en el presente. La entrevistada aprende de su propia madre que para disciplinar a los
hijos tenías que golpearlos, gritarles y enseñarles por las malas cómo comportarse. La señora

E. y su madre eran personas que pensaban en sus hijos llegando a trabajar trabajos difíciles y

separándose de ellos por el bien de ellos; aunque sufrieran por la soledad o por la dificultad

de los trabajos. Como se puede ver en el siguiente fragmento:

¨Señora E.: Tengo mucho cuando ya creces me va más mayor en aquellos tiempos yo

me fui de viaje estuve muy consternada, porque tuve que hacer un esfuerzo muy

grande fue el reto más grande de mi vida por primera vez en mi vida irme lejos a

trabajar para mis hijos, algo que nunca en la vida voy a olvidar fue muy triste, muy

desolador, luchar por algo que quería y que mis hijos no les faltara nada y darles lo

que no tuvieran en su momento. Eso fue lo que me marcó, siempre era un reto cumplir

eso, siempre tengo en la mente y digo guau qué tristeza, pero al final siempre dice

uno, pero cómo es la vida siempre hizo un reto cumplido. ¨

3. Vejez

Abordando el tema de ‘’La Resignificación’’ tenemos a la señora E hablando del tiempo que

ha pasado desde que ella dejó de ser una niña para convertirse en una madre adulta, poniendo

en énfasis lo corto que el tiempo ha sido demasiado corto para ella y que hubiera deseado

pasar más tiempo con sus padres y las pequeñas reuniones que tenía cuando era más joven. A

la vez siente que los cambios físicos que obtuvo con el pasar del tiempo se ven reflejados de

manera que le cambia el estado de ánimo. Uno de los traumas que ella presenta actualmente

es que se va a quedar sola, sin la compañía de sus hijos.

¨Sra. Estefany: Bueno un poco es que uno no lo siente el tiempo y cuando te das

cuenta ya estás mayor, y pues un poco te miras al espejo y bueno dices están pasando

los años y luego pues hay que seguir viviendo y tratar de vivir mejor, en algunos

aspectos que la vida, en la comida en otras áreas también.


Sra. Estefany: Bueno lagunas eh cuando. Bueno ahí siempre un varía un poquito pero

normal con mis hijos algunas amigas y eso pero hay pequeños bajones porque ya a

mi edad es un poquito a veces hay momentos de soledad pero no tanto pero así me

mantengo entretenida y eso se pasa bien algunas veces y otras veces un poquito

llegan los achaques y ya pues entonces cambia tu estado de ánimo porque dices wow

ahora si me voy a ser estoy y esto y no hay que aceptar la vida después de todo.¨

Hablando sobre el tema de Proceso de Envejecer, Merchan y Cifuentes dicen que el

envejecimiento es un proceso dinámico normal de la vida humana que desborda el campo de

lo biológico, lo psicológico, lo sociocultural y económico. Aspectos, estos, que deben ser

considerados en interrelación y evolución permanente. Este fenómeno ha de anclarse en la

realidad individual de cada persona, considerando la mella ideológica adquirida, donde las

reacciones emocionales ante la propia vejez están determinadas por las circunstancias

personales del momento, por la biografía y la personalidad previa. En este espacio tenemos a

la señora E hablando de las etapas que pasaron desde que ella dejó de ser una niña e ir

creciendo para convertirse en una persona mayor o adulta mayor, entrando a la etapa de

envejecimiento, lo cual siente que es muy notorio sus cambios físicos que obtuvo con el pasar

del tiempo, el cual se ven reflejados de manera que le cambia el estado de ánimo.

Sra. E: Bueno un poco es que uno no lo siente el tiempo y cuando te das cuenta ya estás

mayor, y pues un poco te miras al espejo y bueno dices están pasando los años y luego pues

hay que seguir viviendo y tratar de vivir mejor, en algunos aspectos que la vida, en la comida

en otras áreas también.

E: Claro

Sra. E: Esa era mi respuesta


E: Y cómo ha cambiado su personalidad en esta etapa de su vida, como es su estado de

ánimo, en qué momento se siente triste o qué situaciones la ponen triste

Sra. E.: Bueno lagunas eh cuando. Bueno ahí siempre un varía un poquito pero normal con

mis hijos algunas amigas y eso pero hay pequeños bajones porque ya a mi edad es un

poquito a veces hay momentos de soledad pero no tanto pero así me mantengo entretenida y

eso se pasa bien algunas veces y otras veces un poquito llegan lo achaques y ya pues

entonces cambia tu estado de ánimo porque dices wow ahora si me voy a ser estoy y esto y no

hay que aceptar la vida después de todo.

TEORÍAS PSICOSOCIALES DE LA VEJEZ

El proceso del envejecimiento no es solamente un hecho biológico. También es un

acontecimiento cultural y social conformado según una ideología general sobre la vejez. En

cada cultura y sociedad, así se analizará con un ejemplo transcultural, que tienen como propia

manera de significar o empequeñecer la persona anciana en beneficio de las generaciones

más jóvenes a quienes se atribuye mayor capacidad de producción para el desarrollo

económico, presuponiendo que esta la finalidad última de los individuos en una sociedad. En

conclusión, la vejez es un hecho psicológico.

En un fragmento de la lectura nos brindan distintas teorías como la teoría de la

desvinculación que es una teoría psicosocial del envejecimiento porque afecta a las relaciones

entre el individuo y la sociedad, así como los procesos internos que experimenta una persona

en ordenar su vida. Un estudio realizado por E.Cummings y W.E. Henry (1961) publicaron el

resultado, el cual se realizó un estudio en el medio ambiente donde las personas residen, en su

comunidad donde se han establecido sus lazos afectivos y sus desarrollos de trabajo y no en

las instituciones en las que personas mayores frecuentan. En conclusión de este estudio se vio
que las personas de edad madura con el paso de los años iban reduciendo el número de

actividades y limitando el contacto social.

Esto dio a lugar a la formulación de esta teoría de las cuales se habla acerca del

distanciamiento entre las personas mayores con la sociedad, como proceso inevitable del

envejecimiento que va acompañado de una disminución gradual del interés por actividades y

los acontecimientos sociales de donde se encuentran las personas ancianas.

E: Qué bonito lo que nos cuenta, bueno entonces


sobre las relaciones sociales ¿Cómo es la relación con sus
amigos o familiares de su edad?

Sra. Elena: Bueno, que tengo pocos amigos,


mayormente dentro de las relaciones familiares se puede decir que,
dentro de mi grupo de mis hijos, de mis nietos son muy buenos y bonitas,
muy buenas , pero a veces como uno está tan lejos no puede disfrutarlo.

Las críticas a la teoría expuesta por Cumming y Henry no se hicieron esperar. Havighurst

(1968), usando la misma regla redefinió ‘’La Teoría del Desapego’’ como una forma posible

de envejecer que afectaría a unos individuos de distinta manera, pero nunca en su totalidad.

Existiendo así algunos aspectos de la personalidad diferenciadores entre los sujetos

estudiados que determinan la manera de cómo afrontar el proceso del envejecimiento. En

este espacio el fragmento del texto con la entrevista a la señora E se relacionan ya que hablan

de un aislamiento social ante la sociedad y sólamente tener las amistades contadas o

familiares quienes se encuentren en la red de apoyo de la señora E.

VEJEZ NORMAL:

Al hablar acerca de la vejez, se puede hacer referencia a la última etapa de Erikson llamada

“Integridad del yo vs desesperación” en su libro “Ocho edades del hombre”(1973) la cual es

una de las más importantes ya que trata del cierre de la vida y como la persona lo lleva a

cabo, en esta etapa la persona debe de ser capaz de hacer un discurso coherente de su vida,
valorar todos los hechos que han trascendido en su vida y sentir que ha valido la pena, la

aceptación también es fundamental en esta etapa, aceptar que todo lo que ha vivido tiene un

fin los ayuda a descansar y poder morir tranquilos, aceptando que la muerte es parte de esa

vida que ha vivido.

Como se puede observar en la lectura de Graciela Zarebski ¨Una vejez normal¨ se menciona

que la vida le plantea situaciones de cambio es decir situaciones referentes a las costumbres,

normas, valores cambio cultural frente al cual un ¨viejo normal¨ puede reflexionar, tomando

esta situación a favor o en contra, pero que no recupera un supuesto privilegio por ser viejo.

Admite las diferencias generacionales y es capaz de autocrítica. Puede criticar y criticar

Se menciona también que existen diversos tipos de personas en esta etapa es decir se

encuentran los productivos, los que disfrutan de su cuerpo, de la naturaleza, que aprenden,

que crean y subliman. Cabe reflexionar si se trata de actividades para “matar el tiempo”, para

que el tiempo pase “sin pensar” o si se trata de recreación para re-crearse a través de ellas,

para recuperar el sentido que tiene para cada uno el estar vivo.

El filósofo C. Castoriadis plantea que lo que caracteriza a un humano es la facultad que él

denomina “imaginación radical”. Es la capacidad intrínseca al ser humano de experimentar

placer simplemente a través de la representación; la facultad de hacer surgir un flujo ilimitado

de representaciones no sometidas a fines predeterminados .Placer de representación que

prevalece por sobre el placer de órgano. Lo esencial de la vida humana se despliega entonces

en la búsqueda, a través de caminos de desplazamientos y sustituciones, que permiten ver una

cosa en otra cosa, tomar una cosa por otra, generar nuevas representaciones, tener o aceptar

ideas nuevas, actividades ligadas a objetos socialmente valorados, que no procuran placer de

órgano ni satisfacción pulsional directa.


Sra E: vivo acompañada de dos muy bien, muy feliz gracias a Dios y me han atendido.

Lo único que trato es de decirles que por favor de repente yo no fui una madre ejemplar,
pero que ellos lo sean. Aconsejando, para que …
tratando de ver que yo aquel tiempo fui un poco.
Cuando era niña me hacían esto, me hacían aquel y tú
tienes que hacerlo de diferente con tus hijitos; de manera que ahora crecen que están
creciendo, pero a veces no entienden.

Pues yo trabajo hasta ahora, bueno digo trabajo, pero de lejitos. Siempre he tenido un
pequeño negocio. En la cual siempre ha estado luchando. Hasta ahora una casa se mantiene
con mucho dinero, si no trabaja o no genera, pues nada. Mis hijos son buenos siempre
estamos en comunicación contacto

Sra E: Ahora, bueno pasar un poco más con los nietos,


un poquito de comunicación con los hijos si
y pues me gusta también ver la tv y tejer un poco y coser y eso me relaja.
También me gusta el campo, la playa y algunas veces que puedo siempre estoy ahí
disfrutando.

Sra E: Bueno. Dificultad siempre hay no en algunos casos he tratado de...


bueno al comienzo como que te pone un poquito débil,
pero luego tienes que ir asimilando y
tratar de superar en algunas áreas y bueno tirar para adelante, pero algunas veces te pone
triste y otras veces tenemos que tomar coraje, la vida es así con sus altos y con sus bajos.

Zaberksi (2008) plantea que los vínculos familiares sanos permiten a sus miembros

incorporar y valorar el aporte de los abuelos. No sólo como proveedores de cuidados sino

también como transmisores de historia familiar. Los abuelos les permiten a los nietos

interiorizarse en las diferencias entre las generaciones a través de historias que se relatan con

o sin palabras. Son transmisores de la genealogía familiar más allá de las cargas genéticas.

Adicionalmente plantea que para los abuelos , sus nietos son, como suele decirse, el interés

del capital intervenido. Esas vidas nuevas que los reafirman en su identidad y vienen a

renovar sus esperanzas hacen que el tiempo que comparten con ellos adquiera cualidades

especiales. Al estar este vínculo mediado por los padres y al no tener que hacerse cargo de

ellos diariamente, resulta un vínculo menos conflictivo y les permite compartir otras
sensaciones con distinto valor afectivo. Todo ello conforma una nueva oportunidad para

seguir creciendo y recreándose.

ABUELIDAD:

Este es uno de los temas del envejecimiento que nos permite comprobar el modo normal o

patológico de solucionarlo. Para entender por dónde pasa la diferencia entre uno y el otro

modo, debemos comenzar con el análisis de esa función. Este permite el abordaje desde

diversas perspectivas tales son: psicosociales, culturales y familiares. Para ir aportando a esas

consideraciones desde el psicoanálisis, se debe de determinar que lo que nos proponemos es

un análisis del modo de ubicarse en relación a un lazo particular del parentesco. La temática

de la abuelidad contribuirá a arrojar luz sobre la cuestión del envejecimiento.

Como plantea Redler (1) ‘... lo simbólico precede y constituye al sujeto en la genealogía. La

abuelidad está ahí siempre, acceda o no, rehuse o no el individuo. Se trata de dilucidar cómo

habita el individuo, desde su nacimiento, su origen trigeneracional.

Sra. Elena: Ay bueno la crianza fue un poco muy fuerte porque en aquellos tiempos dicen que

los hijos copiamos lo que los padres hacen no.

E: Si

Sra. Elena: Como yo fui criada a mano dura a mano dura, a golpes, a palabras gruesas,

toscas he pues uno como chica queda grabado todo lo que te pasa y bueno yo viví esas cosas

bueno porque no conocí a mi padre y pues mi madre era muy rígida, muy estricta porque así

la habían criado a ella y tenía que pedir como la mayorcita de las mujeres yo tenía que

cocinar, lavar, planchar porque mi madre me lo mandaba y tenía que hacerlo y a través de

esa crianza yo fui optando lo que ella hacía conmigo fui una copia de ella, no eran muchos
aspectos en todo. Yo erróneamente pensaba que era lo correcto cuando mis hijos crecen yo

aplicaba los mismos métodos porque pensaba que era lo bueno.

Entonces se puede sostener que la abuelidad trasciende la cuestión del envejecer, desde el

momento en que , si bien no todos llegaremos a ejercerla, todos estamos atravesados por ella

en la estructuración de nuestro psiquismo: el lugar que ocupan los abuelos en nuestra historia,

y específicamente en nuestra historia edípica, está dado justamente por su función de abuelos

y por lo tanto padre/madre de nuestro padre/madre, y es a través del modo en la que se

cumplen que dejan en nosotros su impronta. La relación entre el texto y lo entrevistado con la

señora E es que ella misma nos habla de como se ha ido criando durante su niñez y que esta

ha sido a través de mano dura, por la temprana edad en la que ella se encontraba trabajando, y

todo esto lo llevó de igual manera a sus hijos.

Las relaciones en la vejez:

En un intento por dar una mayor claridad a la definición de ¿cúal es el rol del abuelo?,

Newgarten y Weinstein (1964) evaluaron el significado y los estilos de rol de 70 parejas de

abuelos pertenecientes a la clase media de los Estados Unidos. A partir de los resultados

dados, Noriega y Velasco identificaron cinco estilos de ejercer la abuelidad: divertidos

(caracterizados por emplear un estilo informal, relajado e indulgente con los nietos), formales

(abuelos que asumen un rol tradicional), distantes ( abuelos autoritarios que apenas tienen

contacto con los nietos), de memoria histórica ( abuelos guardianes de la memoria familiar) y

padres subrogados (abuelos que asumen la responsabilidad del cuidado y educación de los

nietos), siendo los abuelos distantes los que mostraron un menor confort con su rol y una

mayor distancia emocional con el nieto.


E: ¿Qué es lo que más disfruta de su edad actualmente? ¿Qué es lo
que más disfruta hacer?
Sra. Elena: Ahora, bueno pasar un poco más con los nietos, un
poquito de comunicación con los hijos si y pues me gusta
también ver la tv y tejer un poco y coser y eso me relaja.
También me gusta el campo, la playa y algunas veces que
puedo siempre estoy ahí disfrutando.

E: ¿Cómo es su relación con ellos? Veo que hay mucha cercanía, pero más allá otras
anécdotas que usted no desea contar.

Elena: Bueno mi nietecita ya no está acá, se fue de viaje y entonces ya no la tengo. Ella
me hacía disfrutar muchas cosas lindas como lo que le comenté; me hacía podología,
manicure, me pintaba la cara, muchas cosas y bueno yo la pasaba lindo con ella.
Pero cuando se fue me dejo muy triste, a veces hablo con ella me da un poco de
tranquilidad. Otra anécdota que tenga - uy! las anécdotas de los nietos - Pues si a
veces uno pasa muchas anécdotas con alguno de ellos; le había contado de 2 o 3 y
unos de mis hijos también

En un estudio posterior, Robertson (1977) describió cuatro estilos de abuelos a partir de la


interacción de dos dimensiones independientes: a) necesidades y expectativas sociales y b)
necesidades y expectativas personales. Los cuatro estilos encontrados fueron los siguientes:
permisivos, simbólicos, individualistas y remotos. Estas tipologías de abuelos también fueron
encontradas a cabo de un estudio realizado por Robert y Stroes ( 1992) siendo el estilo
permisivo más frecuente entre abuelas y abuelos. Sin embargo, no se pudo observar en
ninguno de los casos ningún estilo individualista por parte de los abuelos y abuelas, y que el
remoto se encontraba en los abuelos. En relación con nuestra entrevistada la señora E,
apreciaba mucho el tiempo que pasaba con sus nietos cuando tenía que cuidarlos debido a
que sus padres se encontraban trabajando y se lo delegaban a nuestra entrevistada, ella
asumió un papel divertido y subrogado con sus nietos por el tiempo que pasaba jugando con
ellos y la enseñanza de respetar siempre a sus padres basado en los mismos valores que a sus
hijos les ha enseñado.
La espiritualidad en la vejez:

En cuanto al rol de la espiritualidad en la vejez según Petersen (2008) la espiritualidad está

asociada a varios efectos positivos aunque con pocos estudios científicos. Este es un factor

como los demás que tienen que verse replanteado con la edad como el carácter, entre otros.

Envejecer en este caso es un proceso del desarrollo humano al que es necesario adaptarse,

puesto que las distintas características de la etapa de la vejez suponen cosas tanto negativas

como positivas. En el caso de nuestra entrevistada ella respeta a Dios y le lleva rezando desde

pequeña; ella tiene la idea de que Dios es un apoyo emocional que la ayuda con sus

dificultades entre ellas la soledad.

Sra. E: La relación con Dios está en mi oración, le digo a él mis


cosas, mis anhelos, mis debilidades, le cuento, le hablo.
Después de orar y pedirle me siento aliviada, me siento feliz
porque guau digo es como que te liberas y te sientes bien.

Sr. Elena: Ay pues, no me veo mejor. La vida va pasando y tú


no lo vas notando, ¿no? En cuanto llegue, seguro que trataré
de ser mejor. Si Dios me da vida, ¿no? Seguir siendo mejor,
hacer lo que no pude hacer antes y eso para mí sería llenar mi
vida. Si me veo a unos años, espero que Dios me deje ver a
todos mis nietos tranquilos, felices, estudiando. Ese es mi
mayor anhelo.

En la cita anteriormente mencionada se puede ver la constante presencia de Dios en la vida de

la entrevistada. No solo como compañía sino también como alguien que la escucha y que

valida su existencia. Algunos abuelos suelen pensar que no tienen valor o se sienten

limitados por sus bajas capacidades físicas por lo cual creemos que es bastante importante

que los validemos y ayudemos en lo que podamos. El autor menciona esto como una manera

de adaptarse a los cambios de la edad y a aceptarlos, a través de la espiritualidad.


La muerte y el duelo:

En cuanto a la muerte y el duelo este es un tema bastante fuerte y que llega a afectar

fuertemente a la gente mayor. Esto por su cercanía con la muerte y la continua inevitabilidad

del paso del tiempo; la mayoría de los abuelos entienden que van a morir como parte de

envejecer y crecer. Perder personas cercanas siempre presenta un duelo pero en los abuelos

les sirve al mismo tiempo de recordatorio de la mortalidad. Según el autor los duelos en la

vejez suelen presentarse de manera más amplia con el cuerpo que fue y que ya no es. Existen

diferentes tipos de duelo desde: jubilación, relaciones de dependencia, de que la vida útil

haya terminado.

Sra. E: Bueno, siempre el ser humano ha pensado en la muerte.


Hemos vivido con temor y hasta ahora, pocas creo que son las
personas que creen que no sienten mucho temor, cuándo tú
sabes que estás sana y todo no te importa mucho pero cuando
tú estás enfermo creo yo, no hablo por los demás, pero digo si
es algo que está pasando contigo. Siempre la mente hace a los
jóvenes nerviosos, decimos guau tengo que esto tengo que ir y
te pones un poco triste, pero después de eso yo pienso que la
muerte es para todos igual vamos a morir todos en algún
tiempo y si a veces hay temor Y creo que la mayoría lo
tenemos, eso opino.
y

Sr. Elena: Pues en este año he pasado muchas cosas negativas,


muchas cosas que este año… del año pasado a este año, y
bueno, salir adelante nada más porque ya fue la muerte de mi
madre, mi hermano, fue la muerte de mi padre, mi sobrino y
bueno, yo también caí mal y eso pero bueno, ahí estamos
luchando para poco a poco salir adelante y superar... tratar de
superar lo que hoy nos duele tanto, el vacío, y dejar de estar
sufriendo pues porque igual la vida es pasajera.

La cita anteriormente presentada sería el concepto y la asimilación que tuvo la entrevistada de

este concepto y sobre sí misma. Ella lo usa para superar el duelo ante la muerte y al mismo

tiempo para adaptarse a los cambios continuos que pasan a su alrededor. Tenemos que tomar

en consideración que la entrevistada está dentro del rango de edad baja aunque sea en la vejez

por lo que no ha tenido mucho tiempo para asimilar lo que conlleva la vejez y la subsecuente

muerte. Nos cuenta de sus pérdidas más recientes frente al COVID y sobre su enfermedad

reciente que enfrenta de manera positiva.

IV. CONCLUSIONES:

Podemos concluir después de un largo análisis en la entrevistada, que la Sra. E ha tenido una

infancia difícil ya que pertenecieron a un hogar en el cual no contaban con los recursos

suficientes para que entre ellos puedan disfrutar de bienes, esto tuvo sus repercusiones como

tomar en cuenta un trabajo a tan corta edad sin poder disfrutar de su plena niñez. Ella

recuerda esos tiempos como algo no tan bonito y a la vez sí porque son situaciones que ya no

volverán a pasar, personas que ya no volverá a ver.

Con respecto a su adolescencia, como ella nos indica tuvo que seguir trabajando a orden de

su madre junto a la presión que sus hermanos ejercen sobre ella en horas laborales con el

motivo de alejar a cualquiera que se le acercara a ella. Por cierta ‘’ignorancia’’ la Sra. E. nos

comenta que salió embarazada y tuvo que asumir la responsabilidad del bebé.

En su juventud y adultez, la entrevistada nos habla de que era más trabajo que educar a sus

hijos, mantenía cierta distancia con ellos y tampoco había una comunicación continua. Se

concentraba más en la vida de la casa y como poder sustentar la economía de esta. Le

encantaba trabajar en su casa, limpiaba, desordenaba y esta conducta era repetitiva. Durante

esta etapa surgió un problema grande el cual era la muerte de su abuela materna y de su
padrastro, dentro ella guardaba afecto emocional a sus dos familiares siendo personas

importantes en su vida. Tuvo el temor de que la economía de su casa ya no pudiera crecer

más, e incluso podría caer ya que su padrastro aportaba en el hogar en el que ella vivía. Sin

embargo, detrás de todo esto ella le da énfasis a una enseñanza que le dejó la muerte de sus

dos parientes.

En la actualidad, se da cuenta de que el tiempo que ha pasado desde que era una niña hasta

hoy ha sido muy rápido, por lo que ahora trata de mejorar todas las áreas en las que ella

práctica. Siente temor a que pueda sus nietos e hijos la dejen sola, teniendo en cuenta los

¨bajones¨ de la edad que ella menciona, sin embargo, trata de mantenerse entretenida y

aceptando las cosas que se vienen con buen ánimo. Aprecia los momentos que ahora pasa con

sus nietos y disfruta la poca comunicación que tiene con sus hijos, pero a la vez también

aprovecha el tiempo que pasa en la televisión, cosiendo y tejiendo, lo cual provoca relajación.

Por ello, es importante formar vínculos entre la familia ya que todos formamos parte de un

rol importante en un desarrollo colectivo para lograr un estado próspero en la familia.

Con lo ya mencionado previamente, podemos deducir que en cada etapa de la vida se forma

una personalidad manifiesta y latente, todo esto para tomar decisiones en las etapas en las que

se están viviendo.

No hay link hacia la entrevista porque usamos una que nos mandó la profesora.
V. APRECIACIÓN PERSONAL (¿QUÉ APRENDIMOS DEL CURSO?)

Juan Rodrigo Vera Tineo:

En cuanto a mi opinión sobre la entrevista con la señora E. me pareció bastante interesante

poder aplicar los conocimientos aprendidos durante el ciclo e identificarlos en

personas/situaciones reales. La señora E. fue de gran ayuda para esto siendo que tenía mucha

experiencia al hablar y tenía varios recuerdos que podíamos comparar con los textos. A su

vez, poder usar una persona real fue algo catártico ya que en el caso de las lecturas en su

mayoría no me podía relacionar a muchas situaciones que se mencionan porque no las he

vivido y no las podía colocar en contexto. Para estos problemas la entrevista en esta ocasión

fue algo que me ayudó bastante dándole una ¨cara¨ a las lecturas y humanizando las de alguna

manera.

Poder trabajar en base a la entrevista con una adulta mayor me permitió aprender no solo

sobre el curso sino también sobre algunas cosas que mencionó la señora E. Poder ver las

vivencias y experiencias de la entrevistada nos dio una idea de la esencia sobre su

personalidad y de cómo vive la vida en general. A pesar de en nuestro caso no poder trabajar

directamente con ella y solo hacer uso de una transcripción siento que la conozco de alguna

manera y que su forma de pensar me ha llegado a influenciar.

Cabe mencionar que el uso de las viñetas en el curso, a pesar de al inicio no parecerme

importantes, terminaron siendo una herramienta útil para el trabajo y para poder estudiar

fragmentos que me parecían importantes del texto/entrevista. Personalmente me parece que

este trabajo nos ha ayudado a todos los de nuestro grupo a comprender mejor el tema y

cumplir con lo que se pide en la mitad de este ciclo. Poder comparar ideas y ayudarnos entre

nosotros me ayudó bastante a comprender algunos conceptos que desconocía y que no

entendía del todo pero que quería aprender.


Guzmaro Anthony Comisario Andres:

Lo que aprendí del curso durante todo el semestre fue a trabajar en equipo, aprendí a leer y

realizar fichajes, aprendí temas muy interesantes acerca del adulto mayor, que me enseñaron

a ver esta etapa de una manera diferente como la veía antes, por otro lado también aprecio la

enseñanza y la paciencia de mi profesora, el cual me ayudó a fortalecer ciertas debilidades, ya

que aprendí a preparar y realizar entrevistas, por eso lo que puedo mencionar al respecto es

que antes, durante y después de hacer la entrevista, el trabajo y todo el curso, me he sentido

bastante satisfecho, debido a que he aplicado cada conocimiento impartido por mi profesora.

Sin embargo, de lo cual me llevo de este semestre es que ciertamente la totalidad de la que

nos habla A. Zapata en su lectura de “Tareas Desarrollo en la Edad Adulta”, debería

cultivarse para admitir el pasado personal que, aun cuando irreversible, podría ser asumido,

reelaborado, e incluido, para afrontar el deceso, referente con las dos sesiones en la entrevista

a la Señora E.. Todo aquello es verdad, pero también es verdad, (para los posmodernos no

hay verdades absolutas y sí muchas historias probables y varios relatos, todos con igual

derecho a existir), que la desesperación no se crea únicamente por la necesidad personal de

llevar a cabo una reacción frente a el futuro que cada vez es más corto, y que nos anuncia el

límite final. Referente a los adultos mayores, como testigos y actores de un pasado

representan una historia viviente, ellos forman parte de nuestra historia social y colectiva, que

una vez que no se asume, se olvida, o se desconoce, elabora la desintegración del nosotros

mismos colectivo. Y con relación a mi proceso sobre estas 2 unidades, puedo mencionar que

entender y ejercer un nuevo modelo de desarrollo puede ser difícil si no se tiene una visión

clara de quiénes son los actores que participan de este y cuáles son sus papeles específicos.

Más difícil todavía es definir si dentro del modelo presente hay vacíos y gigantes debilidades.
Dayane Nicol Paiva Mendez:

Durante la entrevista realizada la entrevistada me transmitió un sinfín de emociones,

conforme se realizaba la entrevista se fue desenvolviendo lo cual nos permitió conocer parte

de sus vivencias, experiencias y cómo enfrenta cada una de las etapas y pese ha haber

atravesado por vivencias tormentosas como lo fue parte de su adolescencia, su primer

embarazo entre otras se mantuvo optimista y con el deseo de superarse y mantener a su

familia unidad lo cual fue de suma importancia, asi como tambien siento que realice parte de

la entrevista de manera adecuada, estableciendo rapport y escucha activa lo cual me permitió

que esta surja de una manera más fluida. Sin embargo se presentaron ciertos inconvenientes

al momento de empezar ya que debido a la coyuntura actual tenemos que realizar la

entrevista de forma virtual lo cual nos dificulta en varios aspectos ya que por momentos la

cobertura de internet era de cierta manera deficiente a esto se le suma el no poder observar

los movimientos, gestos de la entrevistada, sin embargo en compañia de mi grupo supimos

sobrellevar esta situación buscando soluciones adecuadas y pertinentes. Con respecto al

trabajo en equipo considero que este fue excelente, pese a presentar diversos inconvenientes

logramos mantener buena comunicación y organización lo cual resultó de gran ayuda y

beneficioso para que el trabajo en equipo se desarrolle de manera adecuada. Durante lo

transcurrido en esta segunda parte del ciclo quiero destacar la importancia de las viñetas

realizadas ya que me facilitó el entendimiento de las lecturas así como también los diversos

temas presentados durante el ciclo ya que si bien es cierto presentaba ciertas dificultades,

esto ayudó a que este fuera mas optimo.


Sergio Enrique Martínez Puccinelli:

Lo que me ha interesado mucho del curso son las lecturas variadas que la profesora nos

brindaba, en especial la de Kancyper La Edad Media de la vida habla acerca de cierto alcance

de madurez emocional por parte de las personas quienes pasan esta etapa, y en nuestro caso la

paciente pudo lograr dicho logro. Asimilando las cosas que le sucedían sin que exista un

tormento. Durante la realización de este trabajo fue un poco tedioso y cargado, por lo que

tuvimos que cambiar drásticamente de entrevista y empezar algo nuevo con las lecturas ya

obtenidas a lo largo del curso. Al momento de analizar y leer el nuevo caso siento que ha sido

mucho más completo, con unas respuestas mejor hechas hacia las preguntas correspondidas.

La entrevistada no tuvo alguna complicación grande en responder las preguntas designadas y

era algo manifestante al leer lo que ella explicaba. De cierta forma pude entender cada

situación objetiva. Con respecto a mi aprendizaje en esta unidad 2, la verdad es que captar

toda la información de las lecturas sigue siendo un desafío, por el hábito de lectura bajo que

tengo. Sin embargo, pude entender que existen distintos tipos de modelos en diferentes etapas

de la vida que si o si tienen que cumplirse para tener una plena vivencia en estas mismas. El

tema ya último que hemos tocado acerca de la abuelidad me enseñó a conocer un poco más

sobre los rasgos psicosociales que los abuelos presentan y los tipos de abuelo que pueden

haber, he tenido la oportunidad de conversar con todos los tipos de abuelo pero no los había

visto de la forma de cómo Cristina Noriega y Cristina Velazco lo describen.


Carla Garay Cubas:

Respeto a mi apreciación personal, podría decir que al realizar este trabajo fue bastante

interesante, asimismo, considero que las lecturas y los materiales revisados en el curso son

piezas fundamentales para un mayor entendimiento y desenvolvimiento ya que nos permitió

asociar la entrevista a las lecturas y aprender de manera más fluida. Por otro lado, en relación

a la entrevista fue todo un reto ya que tuvimos que cambiar y empezar nuevamente gran parte

del trabajo, cómo también me pareció interesante poder conocer la historia de vida de 2

personas distintas, ha sido emotivo e interesante.

VI. TRANSCRIPCIÓN DE LA ENTREVISTA

E: Buenas tardes, señora E..

Sra. E: Buenas tardes. Sí, dígame.

E: Ok, ya podemos comenzar. En primer lugar, mucho gusto conocerla. Su nombre es Maria

E., ¿o prefiere que le llame E.?

Sra. E: Mm… E..

E: Ok, mucho gusto conocerla. Mi nombre es E. Nosotras somos 5 participantes de la carrera

de psicología de la universidad UPC. Estamos realizando esta entrevista con el objetivo de

conocer la historia de vida de un adulto mayor, así que desde ya agradecemos contar con su

participación y disposición para ayudarnos con este trabajo.

Sra. E.: Ok, sí.

E: Por otro lado, quería confirmar si es que se le hizo llegar el documento del consentimiento

informado. ​
Sra. E.: Sí.

E: Ok… en resumen habla un poco sobre qué temas vamos a tratar, el objetivo de esta

entrevista, también sobre la confidencialidad y anonimidad de la información que vamos a

recolectar y también hacerle recordar si en algún momento no desea responder alguna

pregunta es libre de no responderla, o si se desea retirar del proyecto es totalmente libre de

hacerlo. ¿No tiene ninguna duda o pregunta acerca de ello?

Sra. E.: No, a ver si lo podré contestar.

E: Ok, entonces para confirmar… usted está de acuerdo con este documento del

consentimiento informado.

Sra. E.: Sí.

E: Ok, muchas gracias. Entonces ahora sí pasando a la parte donde van a empezar las

preguntas le comento que vamos a tener varias secciones de preguntas que van a abarcar

distintos temas y yo voy a empezar con las preguntas sobre sus datos generales. ¿Cuál es su

nombre completo?

Sra. E.: Mi nombre es E..

E: ¿Cuál es su estado civil?

Sra. E.: Pues soy divorciada ya muchos años.

E: ¿Qué edad tiene?

Sra. E.: Tengo cincuenta y… tengo… soy del año cincuenta y uno. Tengo setenta años.

E: ¿Cuál es su lugar y fecha de nacimiento?


Sra. E.: 03-08-51.

E: Ok… ¿y dónde nació?

Sra. E.: Pues nací en el departamento de una ciudad llamada Chimbote, pero vivo en Lima.

E: ¿Cuál es su grado de instrucción alcanzada?

Sra. E.: Pues hice un estudio superior. En aquel tiempo todavía universidades no existían.

Pude hacer secundaria, más de ahí un instituto nomás.

E: ¿Tiene hermanos?

Sra. E.: Pues sí, tengo hermanos

E: ¿Cuántos hermanos tiene?

Sra. E.: Mm… 6, 7 hermanos… 6 hermanos, conmigo 7.

E: ¿En total…? Ah, con usted 7, ok. ¿Qué lugar ocupa usted entre sus hermanos? ¿Es la

mayor, la menor?

Sra. E.: Ah, pues la cuarta… en mujeres porque eran hombres y mujeres.

E: ¿Cuántos hombres…?

Sra. E.: Pues los varones son mayores.

E: Ok, ¿y cuántos de sus hermanos están actualmente vivos?

Sra. E.: Oh pues ya tengo uno menos nomás.

E: ¿Disculpe? ¿Solo un hermano vivo?


Sra. E.: ¿Perdón? Sí.

E: Ok. ¿Tiene hijos?

Sra. E.: Pues sí, tengo hijos.

E: ¿Cuántos hijos tienes?

Sra. E.: Ah, 6.

E: 6 hijos, ok. ¿Cuál es el sexo y edad de cada uno de sus hijos?

Sra. E.: Mis hijos son de… tengo 4 hombres y 2 niñas.

E: ¿De qué edades son?

Sra. E.: Mi hijo mayor tiene 45, ya los otros van menorando. El último tiene 29 años.

E: Ok… ¿y con quienes vive actualmente?

Sra. E.: Vivo con mis hijos, mis hijos son casados.

E: ¿Con cuántos hijos vive usted?

Sra. E.: Pues con 2 hijos.

E: Ok… ahora pasaremos a la sección que habla más sobre los recuerdos de su infancia y

adolescencia.

Sra. E.: Mhm, sí.

E: En primer lugar, ¿cuáles son los principales recuerdos que tiene usted de su infancia?

Quizás alguna anécdota que nos podría contar.


Sra. E.: Bueno… pues cuando era… bueno, era pequeña y mi mamá, mi papá…

pertenecíamos a una familia un poco humilde, y pues los recuerdos bonitos o los recuerdos

que te dejan cosita pues… eran cuando eras menor de edad. Entonces lo que recuerdo es que

ayudé a mis padres, a mi madre, a trabajar, a ayudar a cuidar a mis hermanitos, a colaborar en

la casa como si fuéramos personas ya más grandes… pero era un recuerdo un poco no muy

bonito, pero a la vez bonito porque era algo que hoy en día no se ve casi…

E: Claro…

Sra. E.: Pues un poquito marcadito, pero también dices bueno serán mejores tiempos que hoy

en día, porque hoy en día pues ya todo ha cambiado, ya no hay respeto… ha cambiado mucho

la vida.

E: Sí, pero de todas maneras esos son los recuerdos que marcan, con su familia.

Sra. E.: Sí… recuerdo más cuando era pequeña trabajando, ayudando a hacer pues las cosas,

ayudar a trabajar a mis padres desde chiquitas trabajábamos juntas con ellos.

E: ¿En qué trabajaban sus padres?

Sra. E.: Bueno, mi madre estaba… vendía, era una persona que… mi abuela traía cosas de la

Sierra y entonces ella le mandaba los jamones, unas piernas de puerco hechas de jamón que

le llaman, entonces le pasaba a mi mamá y mi mamá vendía, lo mandaba para que lo vendiera

a donde vivía, pues ella también los vendía y luego yo era muy pequeña y le ayudaba a mirar

cómo los cortaba y eso, para luego llevarlo al mercado y comenzar a vender. Y luego, eso es

cuando era muy pequeña. Ya cuando fui creciendo un poquito más, ya mi mamá se puso a

vender, así como una ambulante vendía otras cositas, era así como una ambulante vendiendo

pues… sus potajes que preparaba en aquellos años, así muchos años. Yo me acuerdo que
venían unos circos, pero muy bonitos y mi mamá pues vendía y nosotras la ayudábamos a

preparar, íbamos ahí a vender hasta con ella y eso.

E: ¿Y todos los hermanos ayudaban colaborando?

Sra. E.: Perdón, no la escuché, disculpe.

E: Le preguntaba que si todos los hermanos colaboraban, ayudaban.

Sra. E.: Pues por obligación sí porque allá no decías… ya teníamos la tarea repartida y cada

uno teníamos que hacerlo porque me acuerdo que tengo un hermanito que no le gustaba

hacerlo porque le gustaba jugar a las canicas, entonces pues él recibió su corrección.

E: Claro, debía hacerlo.

Sra. E.: Debía disciplinar. Entonces ya lo hacía. Y le daba su castigo porque pues como él no

hacía eso... en ese tiempo había por unos sacos de yute que venía la harina y eso mamá lo

lavaba y por no haber hecho… para que no escapara a las canicas pues le ponía así como

amarrado aquí y ya no se salía. Eran aquellos tiempos… muy, muy lejos.

Sra. E.: Cosas que no olvidamos.

E: Claro… muchas gracias. Lo siguiente sería… ¿cuáles son sus experiencias que han

marcado la etapa de su adolescencia?

Sra. E.: Pues sí verdad… uno comienza a arreglarse, a despertar, a querer mirar a otro pero a

escondidas porque si tu mamá te veía pues te decía “qué cosa te pasa” y te quería echar el

látigo. Con alguna vecinita salíamos a jugar a la soguita, así a los 10-11 años ya estábamos

jugando.

E: ¿Con amigos del barrio o entre ustedes, los hermanos?


Sra. E.: No, primero entre nosotros pero luego ya los vecinitos… podíamos facilitar jugar

entre vecinos. Solo cuando nos mandaban a cargar el agua nos íbamos a traer el agua del

pozo que no teníamos, no hay agua y teníamos que cargar. Nos gustaba hacer las cuentitas, ...

cosita bonita entonces por ahí pasábamos… mariposita y pues por demorarnos ya una

mariposita no es que esto… ya se nos iba haciendo… a los 12-13 años nos cambió un poquito

el pensamiento y te pones un poquito ya… alguien te mira y dice bueno, era cosa de niños

pero es una adolescencia bonita. Ya cuando tenía 12 años… bueno, digo en la mente…

porque si tú lo comentabas pues te van a ver la mamá o el papá, ni que te ves el hermano

mismo porque te echaba a patadas, entonces nosotros calladitos. Nuestro trofeo lo dejábamos

y es como que observas algo pero no lo puedes decir y era bonito, son muy bonitas

experiencias de repente… no sé, mirarse al espejo, se arreglaron, que no tenía muy bonito y

por ahí no es mi primera experiencia como sentirme una señorita aun siendo chica parecía

que hubiera una señorita.

E: Justo la edad, ¿no? De cómo descubrirse un poco y arreglarse… amigos, conocer amigos,

novios también.

Sra. E.: Pero no porque si mi mamá me descubría ya…

E: Un poco difícil en esa época… Bueno, por mi parte eso sería todo, ahora la siguiente

compañera seguirá con otra sección de preguntas. Muchas gracias.

Sra. E.: ¿Me va a seguir llamando o ya no?

E: Hola E., qué tal. Me llamo E y yo te haré preguntas sobre tu juventud y adultez temprana

Sra. E.: Ah ya, muy bien


E: ¿Cuál es el momento de su vida que marca su independencia y deja de vivir en casa de sus

padres o le hace sentir más adulta?

Sr. E.: Ay pues me salí de mi casa. No me salí, sino que tenía que trabajar porque mi madre

era muy pobre, como a los 14-15 años me fui a trabajar. Trabaja, vendía, así... y pues mis

hermanos mayores recibían las órdenes de la mamá que si (...) Entonces yo me fui a trabajar y

me cuidaba de que mi mama no me vaya a pegar, antes había mucha ignorancia. Antes, hace

muchos años y no podía sonreírle a nadie porque mis hermanos ya me estaban mirando si

miraba a alguien. Entonces cuando ya he tenido 15, 16,17 y ya por ahí me enamore jovencita.

Y yo no me marché de casa, pero salí embarazada y luego tuve que asumir mi

responsabilidad, pero dentro de mi casa. Y fui criando a mi niño y luego cuando crecí un

poquito más tuve que salir ya Y pues me Sali con mi niño y me comprometí, tenía dos años

(el bebé). Mas o menos a los 21 años.

E: ¿A los 21 te fuiste de casa?

Sr. E.: Si, pero ya tenía mi bebe hijita. Y mi mamá que bueno luego que me hecho la

corrección me tuvo ahí

E: Bueno, entonces ya me contaste un poco de cómo saliste de tu casa, ¿pero también me

gustaría saber cómo construiste tu proyecto familiar? O sea, tu propio proyecto de vida

familiar, ¿Cómo lo imaginaste y cómo se fue dando realmente?

Sra. E.: Bueno, como me volví a comprometer, luego de mi primera experiencia tuve que

pisar más fuerte, ¿no? Porque éramos un poco muy cerraditos. En ese tiempo, no era como

hoy en día que todo hay, ¿no? Teníamos que hacer lo que los papás decían. Entonces como yo

me salgo a vivir pues con el hombre que fue mi esposo, pasamos muchas penurias, pero igual

fuimos construyendo poco a poco mediante el trabajo. Trabajaba él, lo ayudaba yo. Siempre
mirando a los niños, o sea era una vida ya. eh ya era mi familia y teníamos que esforzarnos.

Yo en casa me esforzaba y pues el traía la plata.

Pero luego así fuimos construyendo poco a poco, pero siempre estábamos muy sumisos al

lado ellos. El hombre de la casa va a venir y a decir que le sirvas la comida, que le planches

la camisa, eso era casi ya un deber. Era un deber de la esposa, y fui construyendo, mis hijitos

fueron creciendo y también fueron. Después sin darme cuenta ya tenía mi familia, una casita

y así fue la vida.

E: ¿Me podrías relatar un poquito más sobre el momento en el que decides elegir una pareja y

establecerte para vivir juntos y formar esta familia de la que ya me has contado?

Sra. E. Bueno si es que yo trabajaba, pero ayudando en un consultorio, hacer café y eso. Y

cuando yo llego hasta ya porque me enamore y mi esposo me dijo que quería vivir conmigo

que quería casarse y me fui y dije que era momento de que me vaya porque en mi casa no

había espacio

Me fui a la casa de mi suegra y teníamos que ayudar, colaborar, al comienzo un poquito con

la cabeza cabizbaja porque siempre las suegras no te recibían bien. Pero ya… me salí, me

enamoré, hice mi hogar… Pasamos penurias, altos y bajos, un poco también de golpes que

nos echaba el marido por cualquier cosa. Y en ese tiempo la mujer tenía que ser más

obediente. Parecía que ellos eran los papás y nosotros éramos más sumisas.

E: Claro, como que la tutela pasaba de la familia al esposo.

Sra. E.: A veces uno se quiere ir de la casa, ¿no? Y piensa que te va a ir mejor con alguien,

pero muchas veces uno se equivoca, pero ya como estás ahí tienes que vivir nomás y tratar de

acomodarse a la vida. Y algunas veces pues funciona y otras no.


En el mío funcionó toda esa vida, ya de ahí fueron creciendo mis hijos, yo también ya…

fuimos más aceptando la vida

E: Bueno E., me contaste que te casaste, ¿me puedes contar un poco más cómo fue el rito

matrimonial? Si hubo ceremonia… y qué tanto significó para ti y para tu pareja

Sr. E.: Pues sí, me casé del civil y pues toda mi familia aceptó… mi suegra… y ya en ese

lapso me casé civil. Y para nosotros sea una alegría ya pues porque yo me había casado

luego. Primero yo me había ido a vivir con él, pero ya nos dijeron que los novios tenían que

estar casados. Entonces nos casamos.

Era muy bonito, no era grande pero bonito. Para mí fue muy hermoso. Porque luego pues ya

yo comencé a amarlo, a tener a los niños, y sí, compartí y viví una vida muy bonita. Ante la

pobreza y lo antiguo que era, pero muy bonito. Éramos felices bajo nuestra pobreza, pero

éramos felices. Porque yo ya aprendí de repente a que si tenía que hacer eso ya era solo para

darle el gusto.

La abuelita también nos contaba que la mujer tenía que ser así y ya pues, fui aprendiendo.

E: Bueno, gracias ahora una compañera pasará a hacerte otras preguntas más.

E: Hola, buenas tardes Señorita E. María y yo le voy a hacer preguntas sobre todo el texto

empezando a las 2:30 de la primera pregunta es ¿Qué sintió al cumplir 30 años y en qué

momento de su vida estaba?

Sra. E.: Pues que sentí, bueno no lo sentí mucho la edad porque viví comprometida, los años

pasaron y no lo sentí porque estaba ya casada y tenía mi esposo.


E: Claro, sí. Entonces entonces no lo sentía

Sra. E.: No, no los sentí los 30 años. Será porque me veía poco al espejo, no lo sentí la

verdad. Luego ya cuando llego a tener niños, ya era wow tengo hijos, pero la edad no la tenía

en cuenta.

E: Bueno, en general ¿Cómo considera que fue su adultez?

Sra. E.: Bueno, antiguamente cuando salí embarazada éramos más concentrados en la vida de

la casa y no se le dedicaba a los hijos en compartir más, hablar mucho más, de repente hubo

un error porque era más trabajo y te dedicabas a las niñas, atender limpiar la casa y poco a

poco vas creciendo.

E: Ok, ¿Y qué era lo que más le gustaba hacer? En su adultez

Sra. E.: Lo que más me gustaba hacer en ese tiempo por la necesidad era ir a trabajar, ayudar

a mi esposo, me gustaba ir a la casa de trabajar y tratar de compensar para ver si hacemos

algo bien o no. En cuestión de qué me gustaba mucho era mi casa, limpiar, desordenaba,

volvía a limpiar, no era muy apropiado pero me gustaba hacer algo que me correspondía en

ese tiempo, formaba mi pequeño rancho y era algo curioso porque cuando venía (su esposo)

me decía “Pero ¿Quién te ha ayudado?” yo le decía yo.

E: Entiendo, me van comunicando que nos quedan cinco minutos de la sesión de zoom, pero

si se corta le vamos a volver a enviar un link, una solicitud para que vuelva unirse por si se

corta ahora. Pero por mientras le voy preguntando ¿Cuáles fueron uno de los grandes retos

que vivió en su adultez?

Sra. E.: Lo que yo viví como los 30 años, mmm pues mi primer reto, a ver, tener que seguir

adelante a pesar de todo siempre tenía que salir adelante, decía “Voy a luchar, voy a sacar a
mis hijos adelante, si no tienen voy a sacarlo yo”. No sé, mi reto más grande era como

siempre tenerlos juntitos, que todos tenían que ser en grupito, que cada niño se porten bien,

que cada niño estudie, que se formen para el reto de mañana, como antes la gente no hacía

esas cosas no podía cumplir muchas cosas y para mí eso fue un reto y una de las cosas más

bonitas que viví empujándolos para que todos salgan para arriba, a la vez que crezcan dentro

del grupo familiar en las buenas y en las malas.

E: ¿Y cómo se sintió ante esto que nos está contando? ¿Cómo se sintió al afrontar esto de

hacer que su familia vaya adelante, siga adelante?

Sra. E.: Me costaba mucho porque era el doble de trabajo, porque tenía que hacer el doble de

lo que normalmente se hace, la supermamá. Tenía que madrugar, lo que iba hacer en el día de

semana lo hacía en la madrugada, siempre quería que mis hijos crezcan y desarrollen su vida,

aparte iba a trabajar y atenderlos para que todo vaya bien, en el estudio iban al mismo tiempo,

se iban juntos a las 10 de la mañana y horario de la tarde. Era un reto para una mamá que no

presentaba sus recursos para salir adelante, pero gracias a Dios que poco a poco y dentro de

todo podemos conservar esa unión. Algunos hijos ya crecen y empiezan a tomar sus

decisiones, pero eres muy lindo porque cuando eran pequeños tú puedes tenerlos ahí en una

bolita y todos duermen en una hora y era muy bonito.

E: Qué lindo lo que nos está contando. Me están avisando que vamos a cortar el zoom para

empezar uno nuevo, y como le digo le voy a mandar el link para que se conecte y sigamos

con las preguntas que faltan.

Sra. E.: Ya, señorita.

-----
E: Bienvenida nuevamente, continuamos con las preguntas, Sr. E.. La siguiente pregunta es

“¿Cuál fue el recuerdo más triste de esta etapa?” (de la adultez) y “¿Cómo lo superó?”

Sra. E.: Dentro de la adultez nada más ¿no?

E: Claro, desde los 30 años.

Sra. E.: Pues, cuando falleció mi abuela de parte de mi madre. Nos dejó la marquita porque

siempre cuando venía nos traía cositas. Como le contaba a la otra señorita, traía para que mi

madre vendiera y cuando falleció fue algo muy triste que me marcó también porque yo tuve

un padrastro, cuando él falleció tenía como 35 años, él era como un papá para mí. Yo lo

quería mucho, lo quería como un padre porque era un hombre que se desvelaba por mí y por

mis hermanos a pesar que no éramos sus hijos. Lloré mucho porque él era como un papa, se

fue la persona que más nos quiso y yo lo quise como un padre.

E: Qué interesante lo que nos cuenta, siguiendo con las preguntas, durante esta nueva etapa

¿Surgieron algunos nuevos temores?

Sra. E.: Pues muchos en este tapa si porque sabíamos que ya no iba estar él y ahora nos

preocupaba quién nos iba dar más adelante, él era como un papá más que en la economía era

mucho en el cariño y siempre se preguntaba por nosotras era algo muy hermoso porque como

no conocía amor fraternal mi temor más adelante era de quién no sería o qué pasaría después

pero con el tiempo nos fuimos recuperando pues yo ya tuve hijos y la vida iba cambiando,

cómo dicen poco a poco, cómo ya no vivía cerca y me tuve que mudar, me dejó un buen

recuerdo, donde quiera que voy siempre me acuerdo de él, superé con el tiempo ese temor y

siempre les contaba a mis hijos que era un buen hombre y que a veces por obra del destino el

padre nos abandonan o pasa cualquier cosa y el ser humano se queda un poco frustrado, pero

con ayuda de Dios y con ayuda del amor de las personas se puede superar.
E: ¿Tiene algún recuerdo importante de su adultez y cómo se sintió frente a esta experiencia?

Cómo nos estaba contando antes.

Sra. E.: ¿De mi adultez?

E: Claro puede ser de lo que nos iba contando, de lo que se acuerde en este momento.

Sra. E.: Tengo mucho cuando ya creces me va más mayor en aquellos tiempos yo me fui de

viaje estuve muy consternada, porque tuve que hacer un esfuerzo muy grande fue el reto más

grande de mi vida por primera vez en mi vida irme lejos a trabajar para mis hijos, algo que

nunca en la vida voy a olvidar fue muy triste, muy desolador, luchar por algo que quería y

que mis hijos no les faltara nada y darles lo que no tuvieran en su momento. Eso fue lo que

me marcó, siempre era un reto de cumplir eso, siempre tengo en la mente y digo guau qué

tristeza, pero al final siempre dice uno pero cómo es la vida siempre hizo un reto cumplido

E: ¿Le podríamos preguntar a dónde se fue de viaje?

Sra. E.: Pues si en aquellos tiempos me llevaron a España no soy para ir haz todos los años

con la esperanza de trabajar salir hacer una persona que trabajaba y darle a mis hijos lo que

no puede darles antes desea que ya se sienta mejor y darles lo que yo no tenía.

E: Bueno, como nos cuenta que durante su adultez hubo el fallecimiento significativo de su

padrastro, la siguiente pregunta es “¿Cómo influyó esto en usted y en su vida familiar?”

Sra. E.: Pues sí, nos dejó muchas cosas. Tanto enseñanzas como tristezas, enseñanzas porque

nos enseñó de qué pueden querer a las personas aun no siendo sus hijos, darles amor, cariño,

y darles lo que de repente su padre no les pudo dar. En lo triste, pues, marcó mucho porque se

quedó mi madre triste y todos llorábamos porque a todos nos compartía lo poco que traía pero

nos daba mucho cariño, mucha alegría en casa, a mi hermano menor lo queremos mucho
porque a través de él podemos ver lo que su padre fue en su momento, muy cariñoso, y el

salió parecido a él. Entonces eso fue lo que me marcó con mucha tristeza su partida y a la vez

alegría porque recordamos siempre lo bueno que fue con nosotros.

E: Bueno, muchas gracias por contestar las preguntas. Ahora, mi compañera va a seguir con

las demás preguntas y gracias por su tiempo.

Sra. E.: Gracias Señorita.

E: Hola E.. Buenas tardes.

Sra. E.: Buenas tardes

E: Mi nombre es E, un gusto conocerte, conocer un poco más sobre ti y agradecerte por

darnos este tiempo. Yo voy a hacerte preguntas sobre las relaciones afectivas en tu entorno

con la pareja, familia y tus hijos. La primera pregunta que te voy hacer es ¿Cómo conociste a

tu pareja? y ¿Qué sentiste cuando lo conociste?

Sra. E.: Bueno. A ver la verdad que yo lo conocí cuando aún trabajaba. Un día sin querer mi

hermanita me dice, en ese tiempo era la promoción de mi hermanita, la promoción en la que

terminaba su primaria y yo ya trabajaba. Entonces ella me dice hermanita mi mama no va a

querer darme permiso para ir a la promoción, a la fiestita que se va a dar, nunca le había

salido ella aun tenía 13 años y la acompañe para que vaya a la promoción y dentro de esa

fiesta de que la acompañó lo conocí ahí al que fue mi pareja mi esposo. Entonces a través de

esa situación lo conozco y como toda joven pues, se miran comienzas a echar coqueteo de

repente pero muy discreto en ese tiempo y entonces bueno de ahí salió una amistad, empezó a

escribirse, en aquel tiempo me mando una cartita con alguien yo no le respondí pues porque

yo estaba más pensando en mi trabajo que en otra cosa. Luego un día yo me escondí porque

lo vi por ahí me escondí porque no quería verlo yo más pensaba en trabajar pero me gusto
como era en aquel tiempo, la alegría de ver a un chico nada importante, pero cuando ya la

segunda vez me logra ver yo no quise dejar nunca más me correteaba, me daba cartitas yo le

decía que no que no porque en ese entonces también había todavía un para de jovencitas, y

era una lucha que no que no y al final pues me conquistó y cuando lo conozco ya comienza

pues un enamoramiento así de otro día, otro día y ya se pasa el tiempo y ahí me enamoro de

él y ya no me dijo que quería vivir conmigo, que quería formar una familia y ya yo tenía un

hijito que era mío el no tenía hijos y es cuando nos comprometemos.

E: Ay que lindo, y como se sentía usted en el momento que empezó a coquetear con usted, a

mandarle las cartitas y usted no quería ¿Cómo se sentía usted?

Sra. E.: Pues, no quería porque yo decía no yo tengo mi hijito y tengo que trabajar y además

como en aquel éramos un poco pues nos arreglábamos y estábamos bonitas no y no tanto eso

si no que yo más quería mentalizarme que quería trabajar. Y me decían ay no mira que una

cartita te ha mandado y yo no tenía tiempo, yo quería trabajar y así bueno esto pasa una vez y

otra vez y ya se empieza a salir para que te digan lo que te van a decir y yo me enamore y

después de decirle que ya no le dije que sí.

E: Así su historia interesante, y ¿Qué aspectos cambiaron de su etapa de noviazgo al

matrimonio, cambió en algo?

Sra. E.: Si, mucho porque al comienzo era un poquito muy, bueno los primeros días era miel,

toda pura miel, miel pero conforme vas conviviendo y él era un poquito menor que yo

entonces y como yo era más madurita y yo a veces quería que fuera como yo y él era un poco

menos de edad, entonces pasamos un tiempito que yo le entendí y no le entendí y así. Fue un

poquito, había amor por parte de los dos pero faltaba conexión, poco de conversación y era

celoso, no quería que me pintara me arreglara yo, pero él me conoció así muy arregladita muy

pintadita y ya cuando llegó a ser su mujer su esposa dijo que no era necesario que yo me
arreglara para que saliera entonces yo dije que no, a mi tú me vas a mandar le dije, tú me has

conocido así y tú me vas a aceptar y era una lucha a veces discutimos, se ponía celoso y pase

pues entre altos y bajos, tenía celos, no quería que vaya para allá quería que haga lo que él

quería pero yo dije que no porque si yo hoy me dejo mañana me va a pegar, me va dominar y

pasamos dos veces de manos y bueno no se si hice mal o hice bien pero me defendí, defendí a

mis hijos prefería pelear yo pero que con mis hijos no se agarrara, pero después con el tiempo

puede no se si yo pero calmar eso y empecé a ser una mujer más inteligente como aprender

que maso menos le gustaba y que no pero no porque me lo ordenaba si no porque yo usaba

eso yo decía si él ha venido tomando, podía pasarse de mano.

E: Claro, para evitar conflictos.

Sra. E.: Si, claro yo evitaba los conflictos porque yo me acerque a una persona mayor y yo le

contaba como, de confianza una persona y yo le pedía un consejo le digo mira esto me pasa,

yo no quería perder mi hogar porque yo amaba a ese hombre y mis hijos ya estaban crecidos

y trataba de lo desarreglado arreglarlo yo. Entonces recibí el consejo de una amiga, una

señora, entonces yo lo puse en práctica entonces me dice hija si el hombre está mareado y tú

le vas a gritar estás haciendo mal una porque no te va escuchar y dos porque está mareado

puede actuar mal y comencé a escuchar sus consejos y comencé hacer lo que supuestamente

iba a ser mejor y me fue bien, me fue bien porque cuando el venia bueno alguno vez había

tomado mucho y vino mareado y empujaba la puerta y yo salía y le decía “amor hola, te has

tomado dos copitas “ y así iba siendo y el en vez de reaccionar mi amor me decía esta mujer

vale oro, no me grita “wow” eso sí que va a funcionar y así fue y algunas cosas que no le

gustaba iba aprendiendo y yo fui evitando el conflicto tanto que después él se amargaba y

pegaba a la pared, se apuñeteaba ahí no se a mí nunca más y esa es una parte de la familia, en
que yo desde un comienzo dije que a mí nadie me va ordenar, nadie me va a pegar pero la

idea es que los consejos traten de evitar que mis hijos no vieran esas cosas también.

E: Claro

Sra. E.: Y así pasó

E: Y como recuerda su relación de pareja a mitad de adultez cuando la compara con una

relación que ha tenido a inicios de su vida

Sra. E.: Ah pues mire todos tenemos algo bueno, algo malo lo bonito que recuerdo de mi

adultez con el papa de mis hijos que me case era algo que recuerdo que es que él era muy

amoroso, muy cariñoso hacia sus hijos hacia mí, éramos una pareja como usted ha visto la

película Romeo y Julieta , a él le gustaba darme besitos en la calle, me cargaba y yo tenía

vergüenza suéltame le decía porque la gente está mirando aun delante de mi suegra nunca

podía darme besos porque yo me sentía que me moría que era algo vergonzoso.

E: Incómodo

Sra. E.: Porque siempre era así yo le decía aunque sea cuando estemos en otro lugar en el

cuarto no importa pero acá no ay déjate mujer yo te amo, yo te quiero, eres mi esposa y eso

es lo que más recuerdo es su amor, su atención que me daba a pesar de no tener mucho pero

bueno yo ahí ayudaba a rebuscar para que no nos faltara pero lo que más recuerdo es que

quería mucho a mis hijos amoroso, cariñoso con ellos y conmigo y en el lado malo bueno un

carácter muy fuerte, muy mandón pero se acomodó.

E: Justo ahora que me está comentando eso que había situaciones entre ustedes que hacía que

se enojen ¿Cómo afrontan sus discusiones?


Sra. E.: Pues yo también cuando ya lo veía que estaba molesto muy molesto, yo iba y le decía

amor pero eso tiene remedio ya está hecho, ya se rompió, ya está y él insistía no pero esto

pero le digo que vas a ganar ya mañana se compra o si se murió un animalito pues ya la

gallina va sacar otros animalitos ya déjalo y seguía y seguía y bueno no me hace caso, yo no

decía nada agarraba mi llave y me salía me iba a la vuelta a la vecina, me iba comprar al

mercado y cuando venía pues ya el hombre ya estaba tranquilo por lo que había pasado y me

decía que tú eres una mujer sabia entonces yo me reía y trataba de que no se levantara aunque

sí a veces pues gritaba hasta que se cansaba y yo no le decía nada, calladita me quedaba para

evitar porque yo tengo carácter fuerte, pero al final conmigo ya no. En ese tiempo yo decía si

voy a seguir va ser peor y fue algo beneficioso para mí porque después yo siempre le cuento

algunas personas cuando conversamos y me dicen que sí ay yo le tiraba con esto ay yo le

tiraba con el otro cuentan yo le tiré una sola vez le di pero que lo mate para siempre, nunca

más se atrevió a ponerme la mano, pero no, fue bonito son experiencias que nos quedan para

contar.

E: Claro, le queda marcada para toda la vida. Y ¿En qué momento decidieron tener hijos y

cómo te sentiste tú en tu primer embarazo?

Sra. E.: Ay no, pero yo tuve mi primer embarazo antes de que me casara, ósea de mi primer

compromiso. Pues me sentí muy mal muy mal porque yo no decidí embarazarme

E: No fue planeado

Sra. E.: No fue planeado, fue algo que la situación estuvo ahí y no fue algo que yo quise, no

fue algo que yo lo premedite o que estaba tan enamorada no no para nada fue algo que me

hizo sufrir, llorar pero amaba mucho a mi hijito

E: Claro
Sra. E.: Después Cuando lo tuve en mi vientre lloraba y decía que eso vale mucho como voy

hacer esto, pero no había en aquellos tiempos una forma de cuidarse, nunca sabía yo que era

ni cuidado porque aún no había no había tenido ni una primera relación sexual ni nada.

E: Claro

Sra. E.: Entonces esa es la experiencia que tuve.

E: Y ¿cómo se sintió ante el nacimiento de su hijo?, mal como me estaba comentando o

cuando nació se sintió feliz ¿cómo se sintió?

Sra. E.: Ah cuando nació pues claro era muy feliz yo, ya todos esperaban a mi niña, nació y

obvio que yo también tenía hermanos pequeños. Mi madre pues a las justas lo que trabaja era

para comer y tuve una gran responsabilidad porque dije bueno ya tengo mi hija ahora si ya

tengo que trabajar, tenía que encargar a mi madre a mi hijita para yo irme a trabajar, viví un

poco de todo porque era feliz porque la tenía pero era infeliz porque no podía darle todo lo

que necesitaba y así creció dejaba mi niña para irme a trabajar venía la amamantaba pero

igual iba venia y tenía que cumplir para todo.

E: Claro

Sra. E.: Feliz por una parte y triste porque no podía darle lo que yo hubiera querido. Que ella

hubiera sido algo que tu podías planificarse pero dices “oye mira pero no fue así” y la

situación se dio, la vida se dio pero mi corazón estaba feliz porque tenía una niñita que

amaba, me robo el corazón a mi familia a mi madre, pero si viví con muchas penumbras

tener que ser papá y mamá para que ella creciera y me esforcé mucho porque a través de su

nacimiento ella tenía una pequeña así como una enfermedad que le nacía que conforme iba

creciendo le iba aumentando entonces mi preocupación era mayor a más esfuerzo de trabajo

para que pueda curarle todo.


E: Claro

Sra. E.: Eso fue mi primera etapa

E: Y como se fue sintiendo frente al naciente de sus siguientes hijos

Sra. E.: Ahí un poco más segura pues porque

E: Ya sabía

Sra. E.: Ya yo me case tuve otro hijo si, ya tenía un poquito de experiencia pero un poquito

más segura porque decía bueno ya tengo mi hijita está grande. Bueno ya tenía el apoyo de él,

mi suegra no me quería tanto mi suegra no me llevaba mucho pero ya tenía donde vivir él era

una persona que trataba por todos los medios que yo esté feliz aunque con pobreza y todo

pero el trataba por todos los medios que este feliz y así.

E: Y ¿Usted se ha ido sintiendo identificada con alguno de sus hijos?

Sra. E.: Identificada bueno un poco no mucho porque la verdad es que yo, bueno mis hijos

han pasado un poco de sus cosas pero en diferentes formas

E: Todos diferente

Sra. E.: Diferentes formas o sea no como mi experiencia no, otro tipo de experiencia

E: Y desde que nacen sus hijos cómo ha ido a cambiado la relación con su esposo

Sra. E.: Pues al comienzo era felicidad, fueron creciendo los niños ya me hija se fue, se casó

una, los otros quedaron más solos y ya como yo tuve que ausentarme pues porque, no

primero se tuvo que ausentar él se tuvo que ir porque como yo siempre lo apoyaba en que yo

pues los ayudaba a veces con la economía, porque yo trabajé mucho, tenía un negocio y la

verdad es que ya tenía seis hijos y cuando yo llego a tener mi sexto hijo y dijo ya basta ya me
canse de trabajar, ya te ayude ahora si me quedo en casa ahora trabajas tú porque yo ya me

canse. Entonces esa fue la causa se puede decir para que el matrimonio comience a tambalear

porque como yo ya no podía, ya no quería trabajar porque mi niño ya estaba un poco más

grande. Agarró y me dijo, le dije que se fuera para otro sitio para que trabajara porque no

había entonces en ese tiempo daban la oportunidad en otros lugares y le dije que se fuera pero

para que me ayudara, pero la distancia es un mal enemigo, mal elemento muy mala para las

personas que están juntas hoy en día.

E: Si

Sra. E.: Entonces él empezó a cambiar, el cambio un poco otro poco y de la noche a la

mañana no encontré la razón y fue cuando se empezó a tambalear todo y pues se tomó sus

decisiones y como era distante no podía verlo yo y comenzó el fracaso en el matrimonio.

E: Y como se…perdón como se relacionaba su esposo con sus hijos era más pegado más

cercano alguno de ellos

Sra. E.: Ah si pues al comienzo. Usted me dice cuando convivimos todos

E: Claro si su esposo o sea era más pegado a uno de sus hijos

Sra. E.: Pues sí era antes que cambiara el sí pues si a mi hijo el mayorcito siempre él era muy

cariñoso con ellos, muy cariñoso, muy amoroso. Ya cuando nace. ¿Ala?

E: Si la escucho, si la escucho

Sra. E.: Cuando ya pasó tenía a mi hijo mayor. Perdón que el cable se vaya a doblar. ¿Alo, me

oye ?

E: Si la escucho
Sra. E.: ¿Me oye?

E: Si la escucho, ¿me escucha?

Sra. E.: Le digo que cuando ya cambia eso, si mi hijo tenía él era muy cariñoso con mis hijos,

cariñoso muy amoroso y siempre con el mayorcito era una persona muy éste le decía que

cuando sea grande vas a ser esto hijito le enseñaba y pues mis hijitos también lo querían

muchísimo. Cuando comienza a cambiar, comienza a cambiar el a ser distante al comienzo no

mucho pero luego poco comienza la ausencia porque pues como él no vivía a acá el vivía en

otro lado la comunicación bajo y comenzó a cambiar todo hasta que un día cambio por

completo y ellos pues sufrieron mucho pues porque comenzó a perder el amor del padre y si

se hizo una pena grande en sus corazones.

E: Me imagino

Sra. E.: Y ver esas penas, son penas muy profundas y creo que lo que hubiese. ¿Alo?

E: Si la escucho se cortó un poco, la escucho

Sra. E.: Ya entonces

E: Se está cortando un poco. ¿Alo? Si la escucho voy a seguir con la siguiente pregunta. ¿Nos

puede contar sobre la crianza y las anécdotas de la familia cuando sus hijos estaban

pequeños?

Sra. E.: Pues sí.

E: Cómo era, que anécdotas se acuerda, como los crió, como fue la crianza.

Sra. E.: Ay bueno la crianza fue un poco muy fuerte porque en aquellos tiempos dicen que los

hijos copiamos lo que los padres hacen no.


E: Si

Sra. E.: Como yo fui criada a mano dura a mano dura, a golpes, a palabras gruesas, toscas he

pues uno como chica queda grabado todo lo que te pasa y bueno yo viví esas cosas bueno

porque no conocí a mi padre y pues mi madre era muy rígida, muy estricta porque así la

habían criado a ella y tenía que pedir como la mayorcita de las mujeres yo tenía que cocinar,

lavar, planchar porque mi madre me lo mandaba y tenía que hacerlo y a través de esa crianza

yo fui optando lo que ella hacía conmigo fui una copia de ella, no eran muchos aspectos en

todo. Yo erróneamente pensaba que era lo correcto cuando mis hijos crecen yo aplicaba los

mismos métodos porque pensaba que era lo bueno.

E: Lo mejor

Sra. E.: Lo mejor que podía hacer, lo que debía hacer entonces equivocadamente también

maltrate un poco a mis hijos que por lo cual estoy muy arrepentida y no era lo correcto pero

eso lo aprendo ya cuando era, cuando una de mis hijas se va de mi casa no entonces aprendo

y digo no esto no puede ser así y opte por cambiar porque dije no puedo pegar, maltratar a mi

hijos pero ya lo había hecho

E: Claro

Sra. E.: Entonces yo me sentía muy mal, muy triste y comencé a cambiar y a decir no voy a

ser así yo tengo que cambiar me dieron unos consejos que no siguiera lo que realmente otros

hicieron porque no era ...Estoy trabajando… perdón, no quería y trate de cambiar y ser una

madre diferente pero ya mis hijos habían pasado por esa etapa que solo recuerdo, no recuerdo

bueno si no recuerdos malos, pero también recuerdo algo bueno éramos felices cuando eran

más pequeños, yo decía que éramos felices pero como yo le causaba grietas en su alma tal

vez por la ignorancia, yo luego me ponía triste y decía yo les he pegado, yo les he maltratado
porque era así y luego me eche al recuerdo de que mis padres, mi madre me hacía lo mismo

me golpeaba mi tío, me pegaba mi hermano, me insultaba mi mamá aun siendo una niña

inocente y eso lo que te deja marcado y te marca lo bueno y lo malo, lo bueno le estoy

contando perdón lo malo. Y lo bueno pues cuando éramos felices no se hacíamos una reunión

así entre nosotros y reíamos, veíamos tele juntos, jugábamos el vóley era algo bonito y los

mejores recuerdos para mí son de mis hijitos, no sé a una tontería que hacían ellos, yo tenía

un hijo que era un poquito ocurrente.

E: Señora E. disculpe que la corte, se va a cortar el zoom, ya va ser el último se lo prometo

para terminar la entrevista, así que le mando el link

Sra. E.: Ay el link, ya.

E: Gracias. Señora E. bueno me estaba contando de que se acordaba de uno de sus hijos que

tenía 6 años y se quedó ahí. Me iba a contar cuáles eras sus....

Sra. E.: ¿La anécdota de mi hijo?

E: Si, la anécdota.

Sra. E.: Estaban todos reunidos en la mesa haciendo la tarea, los niños después de cenar eran

como las 4 pues ellos hacían la tarea todos juntitos no pues el niño de 6 años de hecho a

dormir, se levantó y…no perdón voy a a contar…los niños hacían tarea y uno no hacía y yo le

comencé a reñir a decirle pero qué te pasa esto el otro porque no has hecho la tarea y el niño

que tenía 6 años me quedo mirando y yo le contesto mal porque me dijo este, me dijeron algo

y yo dije bueno que te importa el niño se miró me miro serio y me dijo come torta jajaja y yo

me mate de la risa y siempre lo recuerdo y cuando les cuanto se reían pues porque tenía….

E: Imaginación
Sra. E.: Siempre lanzaba algo, si tuvo otro más cuando se echó a dormir después se levantó

pues eso de las cuando pasaba unos animalitos en vivo para que le tomaras fotos al niño con

el animalito este la llama entonces le dice, se levanta todo coloradito hijito ven para tomarte

foto le digo con la llamita, mami mami él come chicle me dice él come chicle jajaja pues

porque el animalito. Que mami comía chicle la llama y esas cositas eran algo curioso porque

hasta ahora lo cuenta y yo lo cuento y me dicen que curioso que era pues ese era mi hijo que

más nos dejaba anécdotas de sus cositas que les pasaba y veía una vecina y me decía el niño

Daniel es tremendo pero porque si era un niño que no tenía mucha sabiduría pero tenía

ocurrencias … anécdotas y lo último que hizo fue algo curioso salían a vacunar a los perritos

porque en ese tiempo las perreras se cargaban a los perros para matarlos porque habían

muchos perros, entonces y hubo una vacunación de los perritos y mi hijo llevo a su perrito

para que lo vacunaron y pues yo le digo hijito en la esquina esta así mira poquito más

grandecito pues se fue a vacunar al perro y el señor que vacunaba le dice el nombre y él le

pone el nombre al perrito y él le pone el nombre al perrito le dice Laica Amoroso y con sus

apellidos de él, era causante de la risa de todos y al otro día las vecinas se morían de la risa ay

me dicen pero el Dani sabe lo que ha hecho que todos nos reímos y ha dicho que el perrito se

llamaba así como pues apellido del padre y de tu madre antes eso era cuidado porque el

perrito no era tan protegido, antes el perrito era Lacica, Beauty era así y ya, pero le le dijo

con apellido y todo le dicen loco porque marcaba sus ocurrencias, eso es algo que marcó que

me dejo así como alegre digo de chiquito era así así tenía unas cosas así repentinas que pum

tiraba y ya pues él tiene como 30 años y cuando le contamos se muere de la risa. Anécdotas

no, esa una anécdota que cuento para que diviertan y le sigo hijito tu saliste así y hasta ahora

él es un chico normal que tiene su familia

E: Que lindo, que lindo E. ahora otra compañera te va hacer las últimas preguntas ya te paso

con ella.
Sra. E.: OK

E: Hola de nuevo, E.. Ehm, se me escucha? ¿Sí? Creo que tengo mala conexión.

Sra. E.: Hola buenas tardes. No, ya estás bien.

E: Ya genial, ¿En general, que normas había en su hogar?

Sra. E.: Ah pues había normas, sí. De que todos dormían a la misma hora; las normas de que

no tenías que salir a la calle sin que tu papá o mamá te lo ordene; de que si el papá te corregía

tenías que obedecerle; no mentir… o sea cositas así, reglas como todos a comer a la misma

hora, no pelear. Había cositas muy bonitas. También había exageraciones, no todos los niños

tienen criterio, unos son más obedientes otros menos, pero sí había reglas. Que siempre

impusimos, y se llevaban a cabo. Nosotros decíamos que así se tenía que hacer y era, pero

realmente a veces pensábamos en las reglas y no pensábamos y cómo se siente el niño y eso.

E: ¿Estabas de acuerdo con todas estas normas? ¿O había alguna con la que no estabas de

acuerdo?

Sra. E.: No, no, ahora no. Antes ignorantemente decía que era así, pero conforme va pasando

el tiempo, aprendes pues que estuvimos equivocados los papás y uff, mi papá y mi mamá se

equivocaron peor porque yo ya estudié un poco más que ellos y aprendí un poco más, ¿no?

Pienso que uno debe aprender muchas cosas... el grande del chico y el chico del grande. Y

dentro de todo eso no era lo correcto. Había cosas que sí, que nunca van a cambiar, pero otras

cosas que hoy en día la juventud no contempla muchas cosas buenas más contempla las

malas que las buenas. Nunca es tarde para aprender.

E: Claro… y, ¿quién de ustedes papá o mamá ponían la autoridad en sus hijos?

Sra. E.: Perdón, ¿Qué dijo? No le entendí.


E: ¿Quién de ustedes papá o mamá ponían la autoridad en sus hijos?

Sra. E.: Los dos

E: y ¿Qué tipo de castigos había en casa?

Sra. E.: Uy, en aquel tiempo era muy feo. Pues porque a veces era la corrección, como darle

dos látigos, como corregirle, decirle que no haga eso, que no era lo correcto. Pero

equivocadamente pensábamos que era lo correcto. Y la corrección que dábamos era,

castigarle; darle correazos para que el niño entienda y aprenda y eso no es así, eso no se hace

asá. Mucha ignorancia.

E: ¿Los mismos castigos que daban en la infancia de sus hijos también los daban en la

adolescencia? ¿O fueron cambiando?

Sra. E.: Cuando eran más pequeños al menos sí, yo al menos imité lo de mis padres. Y que,

por cierto, estoy muy arrepentida. Nunca lo hubiera hecho si tal vez no hubiera estudiado un

poco más, no hubiera aprendido y me hubiera puesto en la misma vida que ellos. Porque a mí

no me hubiera gustado que mis papás… bueno me pegaron y todo, pero nunca me gustó que

me pegaran, que me insultaran, eran castigos muy fuertes. Insultos, nunca me hubiera

gustado, pero yo también aprendí a hacerlo. Les he pedido perdón a mis hijos, pero ya les

quedan las heridas, ¿no? Y hoy en día no estoy de acuerdo con los maltratos. La corrección

disciplinaria, es verdad, a veces una nalgada es buena. Pero hoy en día no se puede el golpe.

Hay consejos, o corrección con quitarle la tele. A pesar de los castigos, lo que más queda en

la vida, de todo, es el amor. El amor va a curar todo, el amor te hace reaccionar. Cuando

tienes el amor de papá y mamá, es algo que te llena, aunque a veces la juventud de hoy en día

se aburre. “Ay déjame mamá” y ya no, al amor lo tiran. Pero antes buscábamos amor, y si hoy

en día lo tienen, pero acá en el corazón vacío. Porque hoy en día trabajan más, están
pendientes del celular, de la llamada, de la amiga, del amigo, y a veces lo que tus padres o tus

abuelos te quieren dar no te sobra tiempo también.

E: Gracias por tus respuestas, bueno ahora le voy a dar el pase a una compañera más y ahora

sí son las ultimas preguntas. Gracias.

E: ¡Hola E.!, me escuchas.

E.: ¡Hola!, Buenas Tardes, sí.

E: Buenas tardes -este- Yo me llamo Pía Sarango. En mi caso vamos a hablar sobre dos temas

más. Primero voy a comenzar sobre el nido vacío, que más quiere decir; por ejemplo, cuando

sus hijos empiezan a hacer sus vidas muy aparte. Dejando la casa. Bueno vamos a comenzar

La primera pregunta es…Cuando sus hijos fueron creciendo y ya se hicieron más

independientes, no. Cada uno con su trabajo, quizá ya cada uno con su familia ósea en la de

adolescencia y jóvenes- ¿Cómo se fue sintió usted y su esposo? ¿Qué sentimientos hubo?

E.: Bueno. Al comienzo como todo padre le choca. Desde inicio cuando son adolescente, ya

van mirando por allá. Cómo mamá estás más pendiente. Le estás diciendo mi niño, mi viejito

esas son ilusiones no vayas a hacer. Le aconsejas, no. Pero, Cuando ellos van creciendo ya

pues te enteras que se enamoran por ahí acá.

A muchos padres no nos gustan. No porque te metas en su vida de ellos, sino porque piensas

que vas a repetir la historia y como a ti te pasó cosas no quieres que a tu hijo le pase; y

siempre pensamos porque miramos nomás, porque esa chica no me gusta, esa chica es así y

es asá. Pero juzgamos, no – No le damos oportunidad y conforme van creciendo ellos – Ellos

se equivocan y uno le dice bueno yo te dije y yo te advertí…

[problemas de conexión]
Donde ellos son su vida y si se equivocaron de repente ya se den cuenta cuando tengan sus

hijos. Pero cuando ya cuando tienen su plan de casa y hacen su vida. A veces me pregunto –

Ya la madre lo va amar igual, pero. Yo al menos he sido una madre que ha estado como

aconsejando, diciendo; siempre evitando el conflicto entre la pareja y ya nació un niño y otro

niño. Y las mamás siempre aconsejando para que ellos no repitan la historia que sean mejores

que nosotros en su vida matrimonial en su vida que están llevando como jóvenes que son.

Porque, alguna vez fui joven yo, pero de repente no hice las cosas bien y nosotros queremos

que ellos si fueran mejor que nosotros

E: Claro, entiendo -eh- cuando sus hijos decidieron casarse – y algunos porque tengo

entendido que ahorita está viviendo, sino me equivoco con uno o dos de ellos.

E.: Dos hijos

E: Los otros que ya decidieron formar su familia, muy aparte. ¿Cómo vivieron esa

experiencia? Ósea ellos, como la ha sentido. Usted como ha ido aconsejando por así decirlo.

E.: Pues de todo, les fue bien y les fue mal. Se equivocaron, se peleaban, se separaron, se

volvieron a juntar y pasaron sus problemas. Pero en aquel tiempo yo ya solo le decía y le

aconsejé – y te dije – Pero no importa vas a salir adelante y siempre apoyando. Aunque

muchas veces quería ponerme como la manzana de la discordia, pero decía mejor no, stop –

ellos – bueno mi hijito no me va a meter en tu corazón, pero si me voy a meter en esto. Solo

espero que comprendas y le apoyaba de una forma moral.

A veces cuando están pasando ese trance; pues pierden el trabajo – muchas veces – dejan de

trabajar …

[problemas de conexión]
Y siempre les ayudaba económicamente hasta que ellos volvieran a retomar su chamba y casi

de todo. Alegrías y penas juntos al lado de ellos – de los casados – porque es que tengo una

casa grande y siempre voy a tener espacio para ellos.

E: Claro

E.: Pero no era de las personas que me metía [entrecortado] a veces los escuchaba pasar o a

veces también lo llamaba a cada uno de manera individual para aconsejar según mi

experiencia para que ellos no repitieran la historia. Muchas veces funcionó y otras veces tuve

que escuchar solamente. Porque hoy en día el dueño de … No somos dueños de sus

corazones.

E: Claro

E.: Somos dueños de su amor de Dios

E: Y este. - ¿Cómo fue en adelante la relación con el esposo cuando sus hijos ya se fueron

independizando?

E.: Pues ahí quedó todo. Él se fue con otra mujer, yo me quedé como papá y mamá. Hice las

dos veces de padre y madre. Trabajé mucho, dejé a mis hijos – eh – hice retos muy fuertes

porque no había manera más y mis hijos se criaron; al final crecieron junto conmigo.

E: Mm, Y…

E.: Bajo mi tutela podría decirse

E: Claro – Y – Pero ¿Seguían viviendo en la misma casa o usted se mudó a otra?

E.: No, si se mudaron. Pero como la casa es grande; yo le decía que … cógete ahí ándate

para arriba, hacen un pedazo ahí y viven. Nadie te va a molestar. Y si claro, dos hijos se
fueron a vivir a otro lado, mi otro hijo a otro lado y la casa siempre era grande. A veces

cuando discutían venían acá. Pero igual vivo acompañada de dos – pero – muy bien, muy

feliz gracias a Dios y me han atendido. Lo único que trato es de decirles que por favor de

repente yo no fui una madre ejemplar, pero que ellos lo sean. Aconsejando, para que …

tratando de ver que yo aquel tiempo fui un poco. Cuando era niña me hacían esto, me hacían

aquel y tú tienes que hacerlo de diferente con tus hijitos; de manera que ahora crecen que

están creciendo, pero a veces no entienden.

E: Después de la partida de sus hijos que actualmente aún tengo entendido sigue viviendo con

usted, ¿qué actividades empezó a hacer, ya cuando cada uno tenía su rumbo de vida? Alguna

anécdota

E.: Pues yo trabajo hasta ahora, bueno digo trabajo, pero de lejitos. Yo trabajé mucho hasta

que ellos se casaron, pero siempre he tenido un pequeñito negocio. En la cual siempre ha

estado ahí ahí luchando. Pero a veces se van los hijos pero no se va la responsabilidad Yo he

sido papá y mamá Entonces hay que trabajar para todo. Hasta ahora una casa se mantiene con

mucha con dinero, si no trabaja o no genera, pues nada. Mis hijos son buenos siempre

estamos en comunicación contacto y ya no trabaja como antes pero he trabajado siempre.

E: Ha continuado entonces estar en actividad, por así decirlo

E.: Si

E: Bueno no ahorita vamos a entrar a una parte como que más sobre el cuerpo pero en la

parte de la adolescencia y un poco en otras etapas Esta habla no tanto la adolescencia; perdón

la adultez me reitero, ¿Cuándo desapareció su menstruación, qué emociones le surgieron?

E.: Pues sí tuve seis hijos tengo 6 hijos Cuando a mí me deja la regla pues a los 36 años

porque regle muy pequeña Me sentí pues por una parte bien y por otra no porque dije no voy
a poder tener más hijos porque ya no quiero más hijo, ya tengo hijos; tengo 6. Pero por otra

parte como no tenía tanta información me sentí triste; porque digo y ahora si yo voy a querer

más adelante cuando mis hijos crezcan y sean jóvenes. Porque él me dejó cuando mis hijos

quedan un poco No muy mayores entonces Dije ay! no voy a poder tener más hijos que

penita, pero no lo noté demasiado porque ya tenía mis hijos. Pues sí ya no puedo tener ya

tengo para qué más.

E: Claro

E.: No me frustro solamente que por un momento pensé y dije que bueno que penita. Ya no

era tan joven dije y mi hijito todavía tenía -pues- creo que tenía. Todavía era chico. No me

sentí muy - lo único que sentí fue, cuando entraba más mayorcita, me sentí acalorada Y

bueno que me estoy quemando hay que tengo que tengo esto y no teníamos mucha

información; yo decía los bochornos que ya te va a dejar la menstruación que ya te va a dar

no sé qué Cuando tienes poco conocimiento a veces te asustas, pero nada más.

E: Bueno en ese entonces cuando deja la menstruación. Bueno más adelante se aproxima más

o menos que a partir de los 40 o 45 no es siempre pero entras en esta etapa dónde te da la

menopausia no. Usted habido tenido como un choque brusco o algo por el estilo.

E.: Sí porque me comenzó hacer cambios en todo casi porque

[pequeña pausa]

E.: Aló

E: Diga, si la escucho.

E.: Perdón ya se me borró la pregunta


E: Le comentaba que si había cambios bruscos o bueno choque cuando le dio la etapa de la

menopausia.

E.: Sí tenía mucho bochorno, tenía calores, tenía cambios hormonales porque sentía

sensaciones que nunca había sentido. Me asustaba porque me quemara la cara, me daba

calores. Pero graves graves no. Me dijeron esos bochornos es la menopausia. No he sufrido

de dolores, solo eran cosas así ligeras.

E: No ha sido así como otras personas cuentan que les ha cambiado la vida que han odiado

esa parte.

E.: A mí más bien me alegró porque en esa etapa yo tenía. Era joven, me arreglaba; no tenía

esposo. Me comencé a hacer más bonita, ya me hacía el pelito, me pintaba. Todo un poquito

más. Fue porque no tenía quién … Es como que la chica va creciendo que quiere estar

moneando. Me preguntaban ¿Cuántos años tienes? Tengo como 38 o 40 - me decían -Que tú!;

¡ay no! Tu debes tener unos 30 y decía Wow que bien. Y yo me sentía joven porque siempre

mi edad no lo aparentaba y con lo que me echaba en la cara me veía un poquito bonita.

E: Como recordar un poquito la juventud

E.: Si, también. Comencé a cambiar mi forma de vestir. Cuando algo me pongo me decían -

¡Ay que lindo te queda! te levanta, te hace así; mira esa cintura - decía será verdad? Me

echaba a mirar al espejo. Me sentía alegre. Tanto que después un día me voy a una fiesta y

por ahí alguien me pregunta (hablando, con el baile). ¿Cuántos años tienes?; 40; ¿porque?

¿En serio te voy a poner 30? Y me dice porque me engañas. Tú me estás fastidiando y le

pregunta a una amiga y la amiga le dijo - le mintió- le dijo 30 años. Yo ya le decía que tenía

30 y no me creía, pero no mentira yo tenía 40. Por eso siempre uno cambia. Yo cambié, no
tenía esposo; mi vida era más comunicativa con la gente porque tenía más cercanía a la gente.

Para la gente nunca cumplía años

E: Que bonito - este- ¿Cómo ha sentido su despedida de la maternidad?, después que ha

tenido sus 6 hijos cada uno por su cuenta y usted siguiendo su vida

E.: ¡Ay no!, se siente un poco triste, alegra por una parte porque ya tienes tus hijos, ya tienes

tus nietos ya están creciendo, pero a la vez te vas sintiendo triste pues porque la edad va

avanzando y más este pues porque ya no tengo compañero. Pero uno va sintiendo la ausencia

de ellos . Ya mis hijos tienen así y tantos años y viven allá, el otro viene acá y el otro a lo

suyo. Y pues uno va quedando un poquito en el espacio, porque ellos deben de tener su

propia vida, ya su familia es ellos, su esposa y sus hijos. Aunque los míos siempre están

presentes. Hay un momento en que te pones a analizar y dialogar tu sola y que será de acá a 5

años. O sea ya vas sintiendo el peso de la edad. Encima que no tienes un compañero es más.

Pero lo pasamos ahí, pero hay momentos de soledad que uno va llegando a vivir pero hay que

seguir para adelante.

E: Entiendo. ¿Cómo usted sintió los cambios que ha ido generando su cuerpo o

experimentando durante estas etapas de su vida?

E.: Muy mal porque va generando muchas cosas. Yo pienso que es a lo que has vivido,

porque yo he trabajado mucho mucho y entonces más me preocupaba que el resto esté muy

bien que no le falte, que tengo que hacer y que … dejándome un poco yo para que los demás

sean felices. Pero eso es algo que no puede ser porque ahora me doy cuenta cuando ya estoy

mayor, porque antes quería que todo el mundo tenga y que reciba todo. Pero yo no me

contaba nunca. Porque quería siempre lo mejor para los demás; para mis hijos, para mis

nietos, todo era para ellos, pero yo me ponía a un costado porque pensaba que era así con tal
que ellos sean felices y yo ... que me importa yo decía. Pero creo es parte estaba equivocada

porque Dios es amor y uno tiene que ser amado y querido; es lo que ahora entiendo

E: Comprendo. ¿Tiene así algunas anécdotas o experiencias con sus nietos de algunas visitas

o algo por el estilo?

E.: Si tengo experiencias bonitas. Tengo unos nietecitos cuando iban a un cumpleañitos o

algo siempre te dan una palabra - Te deseo lo mejor - que siempre están pendientes o me dan

un papelito - Mamita te amamos, te queremos - Hace poco estuve un poco malita; me

hicieron unas cositas. En sus regalos más bonitos que saben hacer ellos unos papelitos que es

más valioso que todo y eso me llena de satisfacción y alegría. Digo mientras no crezcan,

porque son hermosos cuando son pequeños. Ya a veces cuando crecen ya van a tomar sus

propios caminos. Me abrazaban

Tengo mi nietecita que ya no está acá, pero siempre venía y me maquillaba. Mamita hoy día

te voy a hacer tu limpieza - no sabía - pero lo hacía, Hoy día te voy a hacer podología. Tiene

8 años. Me decía mamita acuéstate, me sacaba los zapatos a la mala, traía agua en su balde y

me metía los pies. Pegando gritos porque estaba fría.

E: Un poco recordando la infancia de sus hijos, ¿Cierto?

E.: Esta es la infancia de mis nietos, la última

[No entendió la pregunta y se prefirió dejarla continuar]

E.: Me hace dar nostalgia y me da alegría. Nostalgia porque hoy día no está acá y alegría

porque fue la primera nieta en toda mi vida; de todos mis hijos que hacían esas cosas muy

curiosas. La última me maquillaba cuando ya me tenía que ir al negocio y a veces por el


apuro le decía mi amor me voy. Me iba con un ojo rojo y el otro marrón que en el sueño me

había hecho.

E: Gracias E.; la verdad ha sido un gusto conocerte y de parte de todas mis compañeras

también.

[Explicación de que se iba a tomar otra sesión para segunda parte]

E.: Muy bien, muchas gracias.

A. SEGUNDA ENTREVISTA

Sra. Estefania: Alo, buenas tardes

E: Hola, buenas tardes Señora E., soy E

Sra. Estefania: Ah Camilita buenas tardes dígame señorita

E: Bueno vamos a seguir con la entrevista, le voy hacer unas preguntas de la etapa de adulto

mayor, de la edad actual. Si en algún momento usted no quiere responder alguna pregunta nos

comenta porque está en todo su derecho.

Sra. E: Okay

E: La primera pregunta es ¿Qué eventos siente usted siente que marcó su entrada a la etapa de

ser un adulto mayor? y ¿Cómo se siente actualmente?

Sra. E: Bueno un poco es que uno no lo siente el tiempo y cuando te das cuenta ya estás

mayor, y pues un poco te miras al espejo y bueno dices están pasando los años y luego pues

hay que seguir viviendo y tratar de vivir mejor, en algunos aspectos que la vida, en la comida

en otras áreas también.


E: Claro

Sra. E: Esa era mi respuesta

E: Y cómo ha cambiado su personalidad en esta etapa de su vida, como es su estado de

ánimo, en qué momento se siente triste o qué situaciones la ponen triste

Sra. E.: Bueno lagunas eh cuando. Bueno ahí siempre un varía un poquito pero normal con

mis hijos algunas amigas y eso pero hay pequeños bajones porque ya a mi edad es un poquito

a veces hay momentos de soledad pero no tanto pero así me mantengo entretenida y eso se

pasa bien algunas veces y otras veces un poquito llegan lo achaques y ya pues entonces

cambia tu estado de ánimo porque dices wow ahora si me voy a ser estoy y esto y no hay que

aceptar la vida después de todo.

E: Claro ya disfruto

Sra. E.: Ya pues ya

E: ¿Qué es lo que más disfruta de su edad actualmente? ¿Qué es lo que más disfruta hacer?

Sra. E.: Ahora, bueno pasar un poco más con los nietos, un poquito de comunicación con los

hijos si y pues me gusta también ver la tv y tejer un poco y coser y eso me relaja. También me

gustaría me gusta el campo, la playa y algunas veces que puedo siempre estoy ahí

disfrutando.

E: Ahí pasa su tiempo libre

Sra. E.: Si algunas veces

E: Con la familia y ¿Qué es lo que menos disfruta de la edad actual? ¿Qué es lo que menos

disfruta ahora?
Sra. E.: ¿Ahora? Bueno antes pues echaba unas reuniones, unos bailecitos otras cosillas y

también pues antes disfrutaba un poco más de mi papá, de mi mamá pero ya no están y ya no

están ya. Entonces disfruto estar más en compañía y tratar de ser mejor de lo que era antes y

aceptar algunas cosas buenas no.

E: Claro

Sra. E.: A esta edad diferenciamos un poquito más de las cosas que viviste antes que vives

ahora

E: Y ¿Qué nuevas dificultades tiene que enfrentar ahora? ¿Qué hace frente a ellas? O sea

cuando tiene una dificultad usted que hace

Sra. E.: Bueno. Dificultad siempre hay no en algunos casos he tratado de... bueno al

comienzo como que te pone un poquito débil, pero luego tienes que ir asimilando y tratar de

superar en algunas áreas y bueno tirar para adelante, pero algunas veces te pone triste y otras

veces tenemos que tomar coraje la vida es así con sus altos y con sus bajos.

E: Que linda. Actualmente que lo que más le gusta hacer en su tiempo libre, que hace

normalmente cuando no tiene cosas importantes que hacer

Sra. E.: Bueno a veces me gusta tejer jejeje tejer un poco, ver la tele y tratar de estar con los

hijos un rato durmiendo, compartir con ellos en lo que se puede porque a veces también sus

tiempos son de los niños un poco limitados. Ahora por el tiempo del COVID que los estudios

ya no son…hay que estar todo el día en la computadora y si trato de disfrutar lo más que

puedo tratando de enmendar y orando y otras veces pidiendo a dios pero así si pues es lo que

más disfruto.

E: Esta bien. Señora E. muchas gracias ahora otra compañera va continuar con las preguntas
Sra. E.: Gracias señorita hasta luego.

E: Hola, E.. ¿Qué tal? Soy E

Sr. E.: Buen día, Barbarita. Bien, aquí disfrutando.

E: A ver, si tuviera la oportunidad de cambiar algo en su vida ¿Qué sería?

Sr. E.: Ay, muchas cosas. Ser mejor de lo que fui, disfrutar lo que no pude, compartir más de

lo que antes no se pudo por el trabajo, por las circunstancias. Y disfrutar pues con los míos,

con mi familia, con mis hijos, mis nietos… y todos ellos. Ese sería mi mayor anhelo.

E: Qué lindo. ¿Y cómo te ves de aquí en adelante?

Sr. E.: Ay pues, no me veo mejor. La vida va pasando y tú no lo vas notando, ¿no? En cuanto

llegue, seguro que trataré de ser mejor. Si dios me da vida, ¿no? Seguir siendo mejor, hacer lo

que no pude hacer antes y eso para mí sería llenar mi vida. Si me veo a unos años, espero que

dios me deje ver a todos mis nietos tranquilos, felices, estudiando. Ese es mi mayor anhelo.

E: Qué lindo. ¿Qué temores tienes en estos tiempos?

Sr. E.: Perdón no le entendí.

E: ¿Qué temores tienes en estos tiempos?

Sr. E.: Bueno como todos, algunos tenemos miedo a quedarnos solos; a que se vaya un hijo,

un familiar, o muchas veces a la muerte. Porque uno dice “Guau, ¿Cómo será más adelante?”

“¿Y si me quedo solo o me enfermo?”. Mejor no lo pienso, pero igual hay temores en la vida

del ser humano. Y yo creo que los mayores los tenemos solo que no lo expresamos. No todos,

pero algunos.

E: ¿Cómo se siente con la perdida de la fuerza en el cuerpo?


Sr. E.: Claro, es notorio, porque ya no puedes hacer o que tú hacías. De repente como levantar

algo más pesado; como ir, correr y venir, pues te pone un poco más lerda y a veces quieres

pues hacer algo, pero ya no puedes. Muchas veces decimos “ya estoy vieja” porque ya no

puedo. Pasa factura los años. Aunque cuando yo era joven no lo pensaba: “Ay, pero que tanto

va a ser”. Pero cuando uno lo llega a tener ya es otra cosa. Y conforme van pasando los años

pues hay que ir aceptando.

E: Claro, y ¿Tienes alguna enfermedad?

Sr. E.: No, bueno de momento estuve malita hace poco pero ahora ya… no sé, estoy un

poquito delicada por eso voy para el médico. Todavía no sé qué tendré, pero ya me

chequearan y entenderé qué tengo.

E: y ¿Cómo te sientes ahora que vas a ir al doctor? ¿Cómo lo estás enfrentando?

Sr. E.: Bueno ahorita estoy un poco nerviosa porque digo “¿Qué será?” “¿Qué es esto?” “¿No

lo he tenido nunca o no me he dado cuenta?”. ¡No sé! Pero exactamente uno siempre, creo

que en el interior de una persona es que nos sentimos un poco preocupados y bueno al final

tenemos que ser fuertes y decir “No tengo nada”, y ya está. Pero creo que la mayor fuerza que

nos puede dar en cualquier circunstancia es dios, eso es para mí muy importante.

E: ¡Qué lindas palabras! ¿Con quienes vives ahora?

Sr. E.: Pues vivo con mis hijos, algunos de mis nietos porque otros viven fuera. Cada hijo

vive en su departamentito y estoy dentro de ellos. Y estoy bien con ellos hasta cuando se

muden, si algún día se mudan. Para mí son muy valiosos y muy importantes porque son mi

compañía, son mi razón de ser, aunque yo sé que cuando los hijos se casan pues cada uno

tiene que ir y hacer sus cosas. Pero mientras están acá, me siento muy bien, muy feliz con

ellos
E: ¡Qué bueno! Bueno, esas serían mis preguntas. Le tocaría preguntarte a una compañera

más. ¡Gracias!

Sr. E.: Cuídese, hasta luego señorita.

...

[Interferencia de audio]

E: Buenas tardes Sra. E.. ¿Ya me escucha?

E.: Si

E: Disculpe, tengo problemas de conexión. Como le comentaba yo le voy a hacer unas

preguntas cortas. Bueno, usted comentó que se había separado de su esposo después de que

sus hijos habían hecho su vida. Pero quería saber ¿cómo había sido su relación con él y que

cosas solían hacer juntos?

E.: Bueno, antes no había muchas cosas y nos amábamos mucho y nos queríamos. éramos

muy unidos y compartimos paseos, de estar con los hijos. No había mucha cosa diferente,

pero estábamos juntos siempre hasta que pasó que se tuvo que marchar de viaje y cuando se

fue de viaje ahí pasó la cosa que comenzó un poquito los problemas y la separación. Más era

la unión familiar

E: Entiendo, pero solía como que tipo salir o pasar tiempo en familia

E.: Por eso le digo, éramos juntos, pasábamos juntos, salíamos a unas cosas. Pero, más

vivíamos pendientes del grupo familiar de nosotros, bueno mi suegra, nosotros, mis hijos y si

compartimos; salíamos al río, a la playa, pero pocas veces más era la unión familiar. En ese

tiempo nos dedicábamos a criar animalitos y era así como nuestro tiempo. Criamos de todo
animalito; teníamos unos galpones donde criábamos muchísimos animales. Primero era por

hobby y nos daba el gusto. Compartíamos con la familia ahí

E: Entiendo. ¿Cómo es la relación con sus hijos en esta etapa cuando estaba con su esposo?

E.: Bueno, al comienzo no mucho porque los niños a veces porque tuve a los niños pequeños

otros ahí no más y yo tenía que mandar al colegio a todos. Pero, era bonito porque pasábamos

juntos reunidos. No había muchos paseos, no había muchas cosas así; más era … Bueno por

falta de conocimiento, a veces pensamos que cuando te casas debes estar ahí sujeto al esposo

y eso. Pero ahora es otros tiempos y creo que ya todo ha cambiado.

E: Y cuando usted pasa tiempo - Bueno ahora por pandemia no debe ser igual como antes -

¿Cómo se siente usted cuando pasa tiempo con sus hijos? Me imagino que más allá de la

alegría y de ver como madre que otros sentimientos le llegan al ver a sus hijos.

E.: Bueno digo yo que hermoso cuando vienen mis hijos a verme de lejos - WOW- que

hermosura, pensar que esto no lo pude hacer antes por razones que en ese tiempo yo

trabajaba. Me tuve que ir lejos a trabajar y perdí mucho contacto, amor que en ese tiempo

necesitan los hijos. Pero, hoy en día cuando los veo estoy muy feliz y es más como padres

verlos felices a los hijos nos ponemos más felices.

E: Me imagino, sí. Sus hijos ¿Cada cuánto tiempo la vienen a visitar ahora en pandemia?

¿Cómo se siente con eso?

E.: Mmm bueno, acá a mi lado tengo 4 hijos (explicaba donde vivía cada uno de sus hijos).

Pero tengo 2 hijos fuera

E: Y cuando está con ellos - Usted me comentó antes que se siente muy alegre cuando los

viene a visitar - y sus 2 hijos que están los llega a ver con una cierta frecuencia?
E.: A unos sí pero, mi otra hija vive lejos fuera de la ciudad y viene de vez en cuando. Ahora

tenemos más comunicación que antes porque ya está pendiente. Y a veces una palabra de

ella, un saludo me hace sentir que estoy muy bien y cuando viene ya mis hijos se alegran; nos

alegramos. Es algo que como no lo tenemos y mis nietos se alegran. Muy bien.

E: Me alegra que le de esa felicidad a pesar de todo ¿Cómo es la relación con sus nuera y

yerno, sino me equivoco usted tiene?

E.: Si, siempre he sido una suegra un poco más consejera que se puede decir que me tira - risa

- y con algunas cosillas les he hablado una o dos como si fueran unas hijas; siempre he tenido

cariño por ellos y ahora soy una persona que trato de que mis hijos sean felices con ellos y

mayormente siento mucho cariño por ellos. Siempre he sentido cariño por nueras y yernos.

Nunca he discutido con ninguno. Siento que alguien haya pensado que una suegra es mala y a

veces nos catalogan como mala pero sin serlo. Pero a veces uno se da a conocer. pero bien

muy bien.

E: Es bueno oír eso, como usted dice hay muchas que generalizan mucho de que las suegras

son así y no siempre se da el caso como dice usted los ha aconsejado y criado como hijos más

¿Cómo es la relación con sus nietos? Me comentó la semana pasada sino me equivoco unas

de sus nietas le hacía podología, maquillaje.

E.: Mi nietecita linda. Dígame, ¿Cuál es la pregunta?

E: ¿Cómo es su relación con ellos? Veo que hay mucha cercanía, pero más allá otras

anécdotas que usted no desea contar.

E.: Bueno mi nietecita ya no está acá, se fue de viaje y entonces ya no la tengo. Ella me hacía

disfrutar muchas cosas lindas como lo que le comenté; me hacía podología, manicure, me

pintaba la cara, muchas cosas y bueno yo la pasaba lindo con ella. Pero cuando se fue me
dejo muy triste, a veces hablo con ella me da un poco de tranquilidad. Otra anécdota que

tenga - uy! las anécdotas de los nietos - Pues si a veces uno pasa muchas anécdotas con

alguno de ellos; le había contado de 2 o 3 y unos de mis hijos también.

E: Bueno señora ha sido otro gusto de volverla a escucharla; quizá no verla pero por

problemas de conexión. Hasta aquí ha sido todas las preguntas conmigo. Gracias.

E.: Gracias también.

...

E: Buenas tardes Sr. E., yo voy a seguir con las preguntas sobre la familia y las relaciones

sociales. Bueno, la siguiente es “¿Cada cuánto ve a sus nietos y cómo pasan su tiempo

juntos?”

Sra. E.: Ay pues , bueno algunos nietos los veo a diario, otros los veo algunos días de la

semana y hay otros, hay otros nietos que los veo en un muy largo tiempo pero con muchísima

alegría. Cuando vienes me dan ganas de tantas cosas pero a veces los niñitos sólo quieren

estar jugando y eso es una alegría para mí, que los niños jueguen, la nieta que tengo juega con

las cositas que se pueden hacer en casa.

E: Claro, que lindo. Entonces, ¿Cómo se siente cuando pasa tiempo con sus nietos?

Sra. E.: Feliz, alegría, a veces los veo un poco porque están fuera o están ocupaditos, hay días

que a veces no los veo pero porque a veces cuando trabajo y me iba, cuando trabajaba mucho

tiempo fuera y volvía sus padres así me avisaron que estaban ocupados o haciendo otras

cosas. Cuando llegaban ya me había dormido, mayormente a diario ahora ya las veo porque

bajan, vienen a jugar, a veces me traen la comida, a veces cuando me ven malita y esto pero
bien es lindo y cuando viene mi nieta del viaje me siento más feliz porque no los veo después

de cuánto tiempo.

E: Qué bonito lo que nos cuenta, bueno entonces sobre las relaciones sociales ¿Cómo es la

relación con sus amigos o familiares de su edad?

Sra. E.: Bueno, que tengo pocos amigos, mayormente dentro de las relaciones familiares se

puede decir que, dentro de mi grupo de mis hijos, de mis nietos son muy buenos y bonitas,

muy buenas , pero a veces como uno está tan lejos no puede disfrutarlo.

E : Si entiendo, suele pasar a menudo. ¿Participa de algún programa de adulto mayor o qué

actividades comparten?

Sra. E.: No, adulto mayor ninguno, todavía no participo en programas, bueno me dedico a

veces a echarme un paseíto por la calle y de repente conversar con alguna vecina o algo, pero

no participo en ningún programa de adulto mayor.

E: Está bien, bueno vamos ahora a pasar a las preguntas sobre espiritualidad, en donde la

siguiente es ¿Participa de algún grupo religioso o de oración? ¿Qué encuentra en ellos y qué

ventajas le da su vida?

Sra. E.: Bueno, a ver no participo en grupo pero siempre he sido creyente de Dios, siempre he

creído en Dios y en el espíritu, siempre he dicho que es importante sentirla y te da mucha

confianza para seguir ascendiendo en muchas cosas, más por qué eso te da tranquilidad, te da

paz, te fortalece en muchas veces que estás en debilidad.

E: Si, suele pasar ¿Cómo diría usted que su relación con Dios?
Sra. E.: La relación con Dios está en mi oración, le digo a él mis cosas, mis anhelos, mis

debilidades, le cuento, le hablo. Después de orar y pedirle me siento aliviada, me siento feliz

porque guau digo es como que te liberas y te sientes bien.

E: Qué lindo lo que nos dice. Esta siguiente pregunta es una muy controversial que dice así

¿Qué piensa acerca de la muerte?

Sra. E.: Bueno, siempre el ser humano ha pensado en la muerte. Hemos vivido con temor y

hasta ahora, pocas creo que son las personas que creen que no sienten mucho temor, cuándo

tú sabes que estás sana y todo no te importa mucho pero cuando tú estás enfermo creo yo, no

hablo por los demás, pero digo si es algo que está pasando contigo. Siempre la mente hace a

los jóvenes nerviosos, decimos guau tengo que esto tengo que ir y te pones un poco triste,

pero después de eso yo pienso que la muerte es para todos igual vamos a morir todos en algún

tiempo y si a veces hay temor Y creo que la mayoría lo tenemos, eso opino.

E: Sí, como usted dice creo que también la mayoría tenemos este temor, para finalizar mi

próxima compañera va a continuar con las preguntas de espiritualidad. Muchas gracias por su

tiempo conmigo.

Sra. E.: Hasta luego señorita.

E: Buenas tardes, señora E..

Sra. E.: Buenas tardes, Danita.

E: Yo voy a seguir con las preguntas sobre espiritualidad y quería empezar preguntándole si

es que ha tenido alguna pérdida significativa en los últimos tiempos, quizás familiar, por el

COVID, algo así…


Sra. E.: Sí, tuve... he tenido 3,4... 4 personas que se han ido. Pues tengo a mi madre, primero

mi sobrino falleció por el COVID y bueno, dijeron el COVID pero creíamos que era otra

enfermedad. Mi madre también falleció, hace 3 meses falleció mi padre y pues último falleció

un sobrinito niño especial y claro, me dejó mucha pena mi madre, mi padre y pues estuve

muy deprimida pero con el tiempo uno lo va asimilando poco a poco hasta que llegas a

entender que ya no está.

E: Señora E., ¿me escucha?

Sra. E.: Sí, sí la escucho.

E: ¿Apagó su cámara?

Sra. E.: No, es que está entrando una llamada pero no le quiero… que siga nomás.

E: Ah ya, está bien. Sí, justo le iba a preguntar cómo se sentía y justo me lo respondió ya.

Lamentablemente esta pandemia mínimo un familiar o un conocido se nos ha llevado pero...

y de un momento a otro…

Sra. E.: Sí… deja mucho vacío.

E: … que es lo más duro. Bueno, y en este momento de su vida, ¿qué balance podría hacer?

Por ejemplo, ¿decir que le pasaron más cosas positivas o negativas?

Sra. E.: Pues en este año he pasado muchas cosas negativas, muchas cosas que este año…

del año pasado a este año, y bueno, salir adelante nada más porque ya fue la muerte de mi

madre, mi hermano, fue la muerte de mi padre, mi sobrino y bueno, yo también caí mal y eso

pero bueno, ahí estamos luchando para poco a poco salir adelante y superar... tratar de superar

lo que hoy nos duele tanto, el vacío, y dejar de estar sufriendo pues porque igual la vida es

pasajera.
E: Me alegra mucho que sea consciente quizás de los problemas o las situaciones malas pero

que quiera seguir siendo bastante fuerte, me alegra mucho que tenga esa actitud. Y si pudiera

regresar al pasado a hacer algo que le quedó pendiente en su vida o que quizás le gustaría

rectificar, ¿qué cosa les gustaría cambiar, qué haría?

Sra. E.: Me hubiera gustado ser mejor madre, me hubiera gustado ser mejor hija y me hubiera

gustado concretar algún sueño que no se me cumplió.

E: ¿En qué aspecto ese sueño… académico, profesional?

Sra. E.: Ajá, ajá, profesional.

E: ¿Qué le gustaría haber logrado?

Sra. E.: Pues siempre quise ser una gran enfermera. Bueno, estudié sí secretariado pero no fui

la enfermera, fue estudiar secretariado médico pero siempre quise ser enfermera pero no lo

concluí y me gustaba parte de la medicina, y se quedó ahí truncado pero de eso tengo muchas

cosas aprendidas; cómo inyectar, cómo todo... que algunas veces lo he practicado. He hecho

por servicio así y eso era mi… quería ser siempre una enfermera y estudiar algo más sobre la

medicina.

E: Entiendo, gracias. Y hablando un poco más sobre su proyecto personal, ¿qué planes

considera que tiene a futuro?

Sra. E.: Ahora… bueno, ahora el futuro... que Dios me tenga sana, que me dé vida para poder

seguir en mis cosas que tengo que hacer y estar unidos con mis hijos, con mi familia. El resto

ya vendrá.
E: Y bueno, finalmente quería preguntarle un poco en torno a toda esta entrevista, ¿qué le ha

hecho pensar toda esta conversación que ha tenido con cada una de nosotras, cómo le ha

parecido?

Sra. E.: Interesante, interesante pues porque creo que a veces cada pregunta es sacar algo de

ti, un recuerdo, una pregunta que a veces no pudiste resolver tú misma y con el pasar del

tiempo pues a veces cuando he tocado el tema me dice… qué anécdotas o qué esto, qué el

otro, wow… después me echo a reír porque digo: “ay era así, era bandida”. Y comencé a

preguntar a un amigo: “oye mira tuve una entrevista y me dijo así”. Y ja, se reía pues porque

decía qué bonito no y esto. Y así me entero un poquito de pensar, ¿no? Que a veces en la vida

nada es perfecto pero siempre que haya tiempo hay que tratar de ser mejores.

E: Qué bonito que lo haya comentado con un amigo. Sí, varias veces la hemos visto reírse

contando algunas anécdotas, recordar... la expresión en su cara de estar recordando. Nos

alegramos mucho que haya disfrutado de esta entrevista y volver a agradecerle por ayudarnos

con este proyecto, de verdad.

Sra. E.: Mucho gusto y muchas gracias, igual me he sentido bien con cada una…

E: Eso sería todo entonces, señora E., muchas gracias, nos despedimos de usted.
I. REFERENCIAS

● Azilade. A (1998). La mujer sola. Editorial Lumen. Argentina. [Consulta 5 de

Octubre de 2021].

● C. Noriega, C. Velasco. (2013) Tipologías de Abuelos. Relaciones abuelos-nietos:

una aproximación al rol de los abuelos. Sociedad y Utopía. (5-7)

● Erikson. E (1973). Infancia y sociedad. Editorial Hormé. Buenos Aires, Argentina.

[Consulta 5 de Octubre de 2021]

● Espinosa, H. B. (2010). Tareas de la adolescencia: Una lectura de la adolescencia

normal. Clínica de Salud Relacional. 4 (3): 620-647 [ISSN: 1988-2939] [Consulta 5

de Octubre de 2021]

● E. Merchán, R. Cifuentes (2014). Teorías del envejecimiento. Universidad de Castilla

La Mancha y Escuela Universitaria de Enfermería de la Comunidad de Madrid,

Universidad Autónoma de Madrid. [Consulta 30 de Noviembre de 2021]

● Kancyper. L. (2013). La edad media de la vida: el fin de la procrastinación. Lima:

Universidad de Ciencias Aplicadas. [Consulta 5 de Octubre de 2021]

● Montesinos, R. (2002). Los enfoques de la masculinidad. Lima: Universidad Peruana

de Ciencias Aplicadas. [Consulta 5 de Octubre de 2021]

● Montesinos, R. (2002). La masculinidad ante una nueva era. El cotidiano: vol. 18,

núm, 113. México: Universidad Autónoma Metropolitana. Unidad Azcapotzalco

Distrito Federal. [Consulta 5 de Octubre de 2021]


● Davila, O. (2004). Adolescencia y juventud: de las nociones a los abordajes. Editorial

Última Década. Chile: Centro de estudios sociales. [Consulta 5 de Octubre de 2021].

Disponible en: https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=19502103

● Drassinower, S. (2016). Subversiones Maternales La idealización de la Maternidad y

los Afectos que Genera. Revista psicoanálisis 18 ed. [Consulta 5 de Octubre de 2021]

También podría gustarte