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Tema 1

Procesos cognitivos II

Neuropsicología de las
funciones ejecutivas
Índice
Esquema 3

Caso clínico: planteamiento 4


Caso: NH201641 4

Material de estudio 6
1.1. Introducción y objetivos 6
1.2. Conceptualización del término 7
1.3. Anatomía de los lóbulos frontales 11
1.4. Modelos de funciones ejecutivas 15
1.5. Funciones de la corteza prefrontal 22
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1.6. Síntomas y síndromes de la corteza prefrontal 25


1.7. Referencias bibliográficas 28

Caso clínico: resolución 29

A fondo 30

Test 32
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Tema 1. Esquema
Esquema

Procesos cognitivos II
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Caso clínico: planteamiento

Caso: NH201641

Descripción del caso

Se trata de un varón de 77 años de edad remitido por el Servicio de Neurología para


estudio neuropsicológico. El familiar que lo acompaña a consulta refiere que el
paciente ha sido siempre una persona muy dócil, pero que desde hace 2 o 3 años se
ha vuelto más terco y continuamente le tienen que estar recordando algunas
cuestiones de la vida diaria, entre ellas tomarse la medicación. Además, se ha vuelto
excesivamente lento y apático en todo lo que concierne a su actividad diaria, desde
actividades básicas a instrumentales.

Pruebas complementarias

RMI de cráneo: marcada atrofia córtico-subcortical de predominio supratentorial,


con prominencia de cisura de Silvio y lagunas aracnoideas, que se acompaña de
dilatación del sistema ventricular, de predominio supratentorial, sin áreas de
exudado trasependimario. Hallazgos sugestivos de hidrocefalia normotensiva.
Valorar en el contexto clínico del paciente. Focos lacunares puntiformes de gliósis
isquémica en sustancia blanca periventricular.

RMN cráneo: severa atrofia cerebral. Leucopatía isquémica de pequeño vaso.


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La exploración cognitiva evidenció una bradipsiquia moderada, alteración de


memoria en los procesos de recuperación mnésica, escasa capacidad de estructurar
su lenguaje a nivel oral. Procesos de lectoescritura y cálculo mermados para su
edad. Ausencia de estrategias a la hora de resolver problemas. Comportamiento

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Tema 1. Caso clínico
apático, tendente a la inactividad. Semiología prefrontal disejecutiva observada en
la ejecución de las praxias ideomotoras.

Resto de dominios cognitivos: dentro de la normalidad.


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Tema 1. Caso clínico
Material de estudio

1.1. Introducción y objetivos

En este primer tema, abordaremos la función cognitiva más compleja de las


existentes. Su aparición supuso un salto cualitativo en el desarrollo de la especie
humana, sus habilidades, sus conductas y el cómo conoce y manipula su entorno
con respecto a los demás animales. Es la función más compleja porque las
funciones ejecutivas, gracias a las conexiones de la corteza prefrontal con el resto
del cerebro, organizan al resto de funciones cognitivas, orquestando la sincronía de
la puesta en marcha de cada uno de los procesos implicados en el cerebro.

Para comprender esto revisaremos la conceptualización del término funciones


ejecutivas y qué procesos cerebrales implica exactamente. Localizaremos su
actividad a nivel neuroanatómico y estudiaremos los diferentes modelos teóricos
que explican estas funciones. Finalmente, en los últimos puntos, revisaremos las
funciones de la corteza prefrontal, esto nos ayudará a establecer el diagnóstico
diferencial de la variedad de síntomas que pueden producirse cuando hallamos
lesiones prefrontales.

La interiorización de los contenidos de este tema se considera vital en la


comprensión de esta asignatura, pues los trastornos psicopatológicos apuntan a
disfunciones de la corteza prefrontal y sus conexiones con el resto del cerebro. Así
para este tema nos marcaremos los siguientes objetivos:
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 Conocer los diferentes procesos cognitivos que implica el término funciones


ejecutivas.
 Conocer los principales modelos teóricos que explican esta función.
 Conocer la neuroanatomía del lóbulo frontal y sus principales conexiones con el
resto del sistema nervioso.

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Tema 1. Material de estudio
 Saber correlacionar la diversa sintomatología del lóbulo frontal con su
localización neuroanatómica.

1.2. Conceptualización del término

Para Lezak (1982) las funciones ejecutivas son las capacidades mentales esenciales
para llevar a cabo una conducta eficaz, creativa y aceptada socialmente. Sholberg y
Mateer (1989) destacan procesos como: anticipación, planificación, elección de
objetivos, selección de la conducta, autorregulación, automonitorización y empleo de
feedback, dirección de la atención, reconocimiento de patrones de prioridad,
formulación de la intención, plan de consecución o logro, ejecución del plan y
reconocimiento del logro.

Luria (1979) se refería a ellas como alteraciones de la conducta que afectaban a la


iniciativa, motivación, formulación de planes de acción y en la automonitorización del
comportamiento. Todas estas características se refieren a acciones complejas, propias
de nuestra especie.

En este tema se conceptualizarán las funciones ejecutivas como el conjunto


de procesos cognitivos capaces de coordinar el funcionamiento del resto de
funciones cognitivas y ponerlas al servicio de nuestra conducta más eficiente.

Esto nos permitirá dirigir nuestra atención hacia objetivos deseables, satisfactorios y
orientados a nuestro bienestar, rechazando aquellos estímulos distractores que nos
alejan de ellos. También a utilizar la información de la memoria, aprender de la
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experiencia, abstraer información del ambiente y razonar de manera lógica la


resolución de nuevos problemas que se nos planteen en la vida, realizando hipótesis y
poniendo en marcha estrategias previamente elaboradas, teniendo en en cuenta las
opciones más eficientes.

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Tema 1. Material de estudio
Las funciones ejecutivas nos permiten analizar las señales emitidas por nuestro propio
organismo, tener capacidad de introspección, movernos hacia ambientes estimulantes,
motivarnos hacia la consecución de logros, deseos y anhelos, etc. Nos posibilitan
adaptar nuestra conducta a los diferentes contextos sociales en los que nos
desenvolvemos, e inhibir nuestros instintos y pasiones impropios de una sociedad
desarrollada que se rige por normas socialmente aceptadas.

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En un ambiente distendido Jorge Sepulcre, neuropsicólogo y neurólogo de la


Universidad de Hardvard llegó a decir «las funciones ejecutivas son lo que las funciones
ejecutivas quieren ser». Esta afirmación nos sirve de ejemplo para otorgar a las
funciones ejecutivas la jerarquía y superioridad sobre el resto de funciones cognitivas
y les da en consecuencia la potestad de autorregulación. Una correcta función ejecutiva
será capaz de organizar nuestro pensamiento, modificar el entorno circundante en pro
de aquellas ideas y, posteriormente, ese ambiente tendrá la capacidad de modificar
nuestros patrones de conducta.

Bajo el paraguas de esta definición, ¿qué encontraremos cuando una persona tenga
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alterada esta función? No puede ser de otro modo, que una función tan compleja
manifestará una diversidad de síntomas que además afectan a los diferentes procesos
que conforman esta función. Para Tirapu (Tirapu. et al, 2012), velocidad de
procesamiento, memoria de trabajo, inhibición, fluidez, ejecución dual, flexibilidad
cognitiva, planificación y toma de decisiones son los procesos que conforman estas

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Tema 1. Material de estudio
funciones. Veremos cada uno de estos procesos más detalladamente a lo largo del
tema.

Los pacientes con alteración ejecutiva se mostrarán impulsivos en sus ejecuciones,


incapaces de aprender de los errores, recayendo siempre en los mismos fallos,
carentes de estrategias. Algunos se mostrarán desinhibidos, verborréicos o
hiperactivos, otros sin iniciativa y faltos de motivación, en estados de mutismo
acinético o pseudodepresivos. Pueden mostrar conductas más infantiles o acercarse a
estados de perfil psiquiátrico: obsesivos, ansiosos, suspicaces o paranoides, etc.

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Phineas Gage (García-Molina, A. 2012).


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Figura 1. Phinias Gage muestra la barra de hierro que le atravesó el cráneo.


Fuente: Wikipedia.

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Tema 1. Material de estudio
Phineas Gage es uno de los casos más famosos en la historia de la
neurología y, por tanto, también de la neuropsicología. Phineas Gage
era un operario de ferrocarriles que a la edad de 25 años sufrió un
accidente laboral, una barra metálica le atravesó el cráneo por la zona
orbital como se puede ver en la fotografía. Lo más llamativo del caso,
aparte de salvar la vida, es que Phineas empezó a tener
comportamientos extraños. Sus más allegados así como sus compañeros
de trabajo describían su nueva personalidad como pueril, grosera,
impulsiva y desinhibida.

El caso de Phineas Gage es el gran ejemplo utilizado en los libros de


neuropsicología para estudiar las consecuencias de las afectaciones del
lóbulo frontal, gracias al caso, se pudo describir con exactitud la
sintomatología de un daño en el lóbulo frontal del cerebro.

1.3. Anatomía de los lóbulos frontales

Los lóbulos frontales están situados en la parte anterior del córtex, por delante de la
cisura de Rolando o surco central, ocupan el 20 % de la corteza. Podemos dividirlos
anatomo-funcionalmente en cuatro áreas que aparecen detalladas en la figura 2.
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Figura 2. Áreas de Brodmann. Fuente: Baars y Gage, 2018.

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Tema 1. Material de estudio
Áreas motoras (A 4, 6, 8, 44 de Brodmann)

La corteza motora y premotora forman un sistema funcional que controla el


movimiento. La corteza motora proyecta hacia las neuronas motoras espinales para
controlar los movimientos de los miembros y hacia las neuronas motoras de los
nervios craneales para controlar los movimientos faciales. También se proyecta
hacia otras estructuras como ganglios de la base y núcleo rojo.

La corteza premotora puede influir en el movimiento a través de las proyecciones


corticoespinales o hacia las proyecciones de la corteza motora. La región premotora
también recibe proyecciones desde áreas posteriores.

Los campos oculares frontales (A8) reciben proyecciones desde regiones que
controlan los movimientos oculares y envían proyecciones hacia estas regiones. Así,
reciben estímulos visuales desde la región parietal posterior y el tubérculo
cuadrigémino superior.

Todas las áreas premotoras reciben proyecciones de la corteza prefrontal


dorsolateral.

Córtex dorsolateral (A 9, 10, 11, 45, 46, 47 de Brodmann)

Irrigado por la arteria cerebral media, recibe sus principales vías aferentes de las
áreas parietales posteriores y del surco temporal superior (conexiones recíprocas).
Además, tiene conexiones amplias con la corteza parietal posterior, como la
corteza del cíngulo, ganglios basales y el tubérculo cuadrigémino superior.
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Su circuito funcional se relaciona con las funciones ejecutivas clásicas: memoria de


trabajo, atención selectiva, formación de conceptos, flexibilidad cognitiva, etc.

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Tema 1. Material de estudio
Regiones orbitarias (A10, 11, 12, 13 de Brodmann)

Irrigado por la arteria cerebral anterior, recibe su principal vía aferente del lóbulo
temporal, recibe información de todas las modalidades sensitivas. Se proyecta
subcorticalmente hacia la amígdala e hipotálamo, otorgando una vía para influir en
el sistema autónomo, que controla los cambios de presión arterial, respiración, etc.
Tiene su importancia en las respuestas emocionales, toma de decisiones y conducta
social.

Parte medial

Irrigado por la arteria cerebral anterior, abarca el tejido motor de la convexidad


lateral y de las áreas orbitales, incluyendo el área del cingulado anterior (A24). Su
circuito funcional se relaciona con la capacidad de inhibición y la iniciativa.

El córtex prefrontal tiene conexiones con numerosas estructuras, conocer dichas


conexiones es crucial si queremos llegar a entender sus implicaciones funcionales.
Dichas conexiones permiten al lóbulo frontal activar o inhibir una determinada
zona para provocar algún cambio en alguna conexión neuronal. Para algunos
autores, el lóbulo frontal no tiene una actividad propia, sino que su función es
regular, monitorizar, orquestar el funcionamiento de aquellas áreas del cerebro que
sí desempeñan funciones específicas.
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Tema 1. Material de estudio
Figura 3. Catani. et al., 2012. 1, 2, 3, 4, 5. Tracto frontoparietal. 5) Tracto frontal oblicuo. 6) Tracto
frontal superior medio. 7) Tracto frontal inferior medio. 8) Tracto fronto-insular. 9) Tracto fronto-
orbitopolar. 10) Tracto fronto-marginal. 11) Tracto frontal longitudinal superior. 12) Tracto frontal
longitudinal inferior.

Aferencias

Las cuatro fuentes principales de entrada al lóbulo frontal son (Whishaw, 2016):

 Aferencia 1: recibe información altamente procesada del mundo externo desde


las áreas corticales involucradas en el procesamiento desde cada una de las cinco
grandes modalidades sensoriales. Dicha información proviene de las áreas de
asociación sensoriales, que median entre el mundo externo y las cortezas
primarias sensoriales.
 Aferencia 2: la corteza prefrontal recibe aferencias desde el hipocampo, vía
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fascículo uncinado, que le proporciona información desde la memoria a largo


plazo.
 Aferencia 3: la corteza prefrontal recibe información acerca del estado fisiológico
y motivacional del organismo vía sistema límbico (vía hipotálamo) desde la
amígdala.

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Tema 1. Material de estudio
 Aferencia 4: la corteza prefrontal recibe entrada desde los núcleos talámicos,
sobre todo desde el núcleo mediodorsal, que recíprocamente recibe información
desde la corteza prefrontal.

Figura 4. Baars y Gage, 2018.

Eferencias

Desde la corteza:

 Eferencia 1: proyección de regreso a todas las áreas sensoriales.


 Eferencia 2: proyección a estructuras propias del lóbulo frontal como son la
corteza prefrontal y la corteza motora suplementaria, que a su vez proyecta al
área motora.
 Eferencia 3: proyección al núcleo estriado (caudado y putamen), que a su vez
proyecta al tálamo y hacia corteza premotora y motora (vía del control motor).
 Eferencia 4: vía hacia los colículos superiores.
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 Eferencia 5: conexiones directas con el sistema límbico, en especial el


hipotálamo, para controlar la función autónoma y endocrina y así regular la
conducta emocional.

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1.4. Modelos de funciones ejecutivas

Modelo de memoria de trabajo. Baddeley y Hitch (1974), (Tirapu et al.,


2012)

Este modelo reconceptualiza el concepto memoria a corto plazo por el de memoria


de trabajo que se define como «un sistema que mantiene y manipula la
información de manera temporal, interviniendo en importantes procesos
cognitivos, como la comprensión, el lenguaje, el razonamiento, etc.». No es un
modelo realizado explícitamente para explicar las funciones ejecutivas, de hecho,
existe cierto debate en torno a si la memoria de trabajo debe ser considerada como
parte de las funciones ejecutivas. Sea como fuere no podemos desechar la
vinculación anatómico y funcional de este proceso con la corteza frontal.

La memoria de trabajo se subdivide en tres componentes diferenciados:

 Bucle fonológico: actúa como un sistema de almacenamiento articulatorio, por


lo que actúa como un sistema de almacenamiento que permite un lenguaje
subvocal para mantener la información en la conciencia durante un tiempo
deseado. En la vida diaria, sería ese almacén que se pone en funcionamiento
cuando estamos en la calle y nos encontramos a un amigo que nos da su nuevo
número de teléfono. Imaginemos que no tenemos nada para apuntar y tenemos
que mantener en la «memoria a corto plazo» esa información. Eso sería un buen
ejemplo de memoria de trabajo.

 Agenda visoespacial: actúa de forma similar al bucle fonológico, pero opera con
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imágenes. Se utiliza cuando por ejemplo empleamos una regla mnemotécnica


basada en la visualización, o miramos el Google Maps para llegar a un lugar y
dibujamos mentalmente el recorrido en nuestra «mente».

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Tema 1. Material de estudio
 Sistema ejecutivo central: no es un sistema propiamente dicho de
almacenamiento de información, su función es jerárquicamente superior, ya que
es el encargado de que los otros dos componentes funcionen. Este sistema
ejecutivo central es el encargado de activar procesos de memoria a largo plazo,
inhibir estímulos no relevantes para la tarea que tenemos que desempeñar y
monitorizar las conductas que realizamos.

Figura 8. Modelo de memoria de trabajo. Fuente: Baddeley y Hitch, 1974. (Tirapu et al., 2012)

Sistema Atencional Supervisor (SAS). Normal y Shallice (1982). (Tirapu


et al., 2012)

Es un modelo atencional que trata explicar el comportamiento humano a través de


una serie de esquemas mentales que especifican la interpretación de las entradas
externas y la consiguiente acción. Y lo hace a través de dos sistemas: el
programador de contienda y el sistema atencional supervisor.
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Figura 9. Modelo Atencional Supervisor. Adaptado de Norman y Shallice, 1982. (Tirapu et al., 2012)

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El programador de contienda evalúa la importancia de las acciones y realiza un
ajuste de la conducta para adaptarse a ellas. Una conducta se produce cuando un
estimulo ambiental aparece (al mismo tiempo, el sistema de inhibición se pone en
marcha) y la conducta más activada gana. Un reflejo de este sistema lo vemos en la
clínica diaria. El paciente con afectación ejecutiva ante dos estímulos siempre se
decanta por el más «fuerte» (desde el punto de vista perceptivo), aún cuando le
digamos que tiene que atender al otro.

Este sistema resulta útil para tareas sencillas, con poca exigencia cognitiva. Pero
¿qué sucede cuando en la vida diaria nos invaden tareas novedosas, imprevistos, o
toma de decisiones inhabituales? En ese momento el SAS entra en acción
impidiendo que se produzcan respuestas que de otra manera, estarían a merced de
los estímulos ambientales. El deterioro o daño de este proceso sería el responsable
de las conductas de perseveración, rigidez conductual o déficits inhibitorios.

Modelo de Stuss y Benson (1984) (Tirapu et al., 2012)

Propusieron un modelo jerárquico para explicar el funcionamiento de las funciones


mentales. En este modelo, el lóbulo frontal ejercería el control sobre las funciones
mentales básicas localizadas en estructuras basales a través de las funciones
ejecutivas, que, aunque también estarían dispuestas jerárquicamente, tendrían una
relación interactiva entre ellas.
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Tema 1. Material de estudio
Figura 6. Modelo Adaptado de Stuss y Benson 1984. (Tirapu et al., 2012)

En la cúspide estaría la autoconciencia, que hace referencia a las experiencias


subjetivas actuales y las relaciona con las pasadas, monitorizando la actividad
mental y utilizando el conocimiento adquirido para resolver problemas y orientar la
toma de decisiones en el futuro. Este nivel guarda relación sobre el estado de la
propia conciencia.

En el segundo escalón estarían las funciones ejecutivas: anticipación, selección de


objetivos, planificación y monitorización. Este nivel es imprescindible en situaciones
novedosas y no rutinarias que requieren la creación de una nueva solución.

El tercer nivel lo forman el impulso y la organización temporal. El primero de ellos


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hace referencia a la capacidad de iniciar y mantener una actividad mental o


conducta motora. La motivación se relaciona con este concepto, que se relaciona
como la emoción del individuo. El segundo, organización temporal, es la
responsable de que percibamos y mantengamos el orden temporal de los sucesos.

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Tema 1. Material de estudio
El modelo defiende que las funciones ejecutivas funcionan de manera jerárquica:
independientes, pero interactivas.

Modelo de Stuss (1991). Revisión del modelo anterior. (Tirapu et al.,


2012)

Mantiene la jerarquía y la independencia de las funciones ejecutivas, pero cada uno


de sus subsistemas utiliza un mecanismo de control que utiliza tres elementos
básicos: un sistema de entrada, uno de salida y uno intermedio comparador. El
sistema básico es un sistema sensorial y perceptual (cada sistema para cada
sentido).

El sistema perceptual corresponde a conductas aprendidas y automáticas por lo que


no exigen participación del córtex prefrontal. Durante la adquisición de un nuevo
aprendizaje, el córtex prefrontal exige gran cantidad de recursos y una vez
aprendido, la participación frontal disminuye. El sistema comparador se asocia a los
comportamientos ejecutivos, este sistema entra en juego cuando ante situaciones
novedosas o en aquellos casos en los que se requiere una monitorización en la
ejecución de una conducta. El tercer componente se refiere a la autoconciencia y
refleja la capacidad que ser consciente de uno mismo y los pensamientos propios.
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Tema 1. Material de estudio
Figura 7. Modelo Adaptado de Stuss, 1991. (Tirapu et al., 2012)

La corteza motora es la responsable de ejecutar los movimientos, la premotora de


seleccionar dichos patrones para hacer posible el acto motor. Por tanto, un primer
papel que juega la corteza frontal es la de controlar los procesos cognitivos
encargados de seleccionar los movimientos apropiados en el momento y lugar
precisos.
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Tema 1. Material de estudio
Modelo de memoria operativa de Golman-Rakic (1998). (Tirapu et al.,
2012)

Defiende que hay diferentes áreas de la corteza prefrontal implicadas en las tareas
de memoria de trabajo. Bajo esta premisa, propone que cada componente de la
memoria de trabajo de Baddeley estaría interconectado con diferentes áreas
corticales. La red frontoparietal sería la responsable de los procesos de memoria
de trabajo espacial y la memoria de trabajo verbal encargada de los objetos
conectaría el frontal con el lóbulo temporal. Otra red estaría compuesta por áreas
de asociación sensorial (temporal y parietal), premotora (cingulado) y límbica.

El funcionamiento del sistema ejecutivo central es el resultado de la interacción de


múltiples sistemas de procesamiento de la información independientes, cada uno
con su propio control motor, sensorial y mnésico.

Otros procesos integrados en el concepto memoria de trabajo:

 Selección de la información: basado en estudios donde se ha comprobado la


activación de zonas dorsolaterales ante la selección de estímulos entrantes en la
memoria. Este componente da por hecho otro componente realmente
importante y es que para poder seleccionar unos estímulos han de inhibirse
otros y eso es otra actividad cognitiva. La activación del giro cingulado izquierdo
se ha relacionado con procesos de inhibición con contenido verbal, el derecho
para contenido espacial.
 Capacidad de identificar y alternar criterios cognitivos: se asocia al
funcionamiento de áreas prefrontales dorsolaterales.
Planificación: se requiere buena memoria de trabajo para realizar un buen
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ejercicio de planificación, pero no es un componente solo y exclusivamente


dependiente de la memoria de trabajo. Planificar requiere prever situaciones,
organizar una secuencia de pasos, monitorizarlos, anticipar posibles

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Tema 1. Material de estudio
consecuencias, en ocasiones tener un plan B, etc. Es, en definitiva, una función
cognitiva superior que implica a una gran cantidad de procesos.

Para tratar de explicar la relación entre memoria de trabajo, córtex prefrontal y


control ejecutivo se incluye el componente «buffer episódico» donde la
información visual y verbal se combina integrando la información de la memoria a
largo plazo. Este componente está ampliamente repartido a través de diferentes
conexiones neuronales.

En la actualidad, el concepto de memoria de trabajo ha sido revisado y pocos


piensan que es un almacén de memoria a corto plazo, sino que está integrado
en un sistema de control atencional.

Modelo integrador de Tirapu, Muñoz-Céspedes y Pelegrín (2002).


(Tirapu et al., 2012)

Basado en los anteriores, estos autores pretenden explicar los diferentes modelos y
la interacción que se producen entre ellos.
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Figura 10. (Tirapu et al., 2012)

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Tema 1. Material de estudio
Simplificando la explicación de los autores podríamos resumir:

 Componente 1: sistema sensorial y perceptual. Accede a la memoria declarativa


y las respuestas que se producen son aprendidas, automáticas y rápidas. Son
comportamientos que se producen a lo largo del día a día, es implícito.

 Componente 2: el sistema se activa ante situaciones reconocidas como


novedosas, haciendo que se pongan en marcha los procesos de anticipación,
selección de respuestas, planificación y monitorización. Como vemos en el
esquema, en cada uno de estos subcomponentes actuaría la memoria de trabajo
con sus respectivos bucles (fonológico y visoespacial) y su sistema atencional
supervisor. La activación de cada uno de ellos, en detrimento de la desactivación
de otros, depende del marcador somático, concepto acuñado por Damasio que
trata de explicar la implicación de algunas regiones del córtex prefrontal en el
proceso de razonamiento y toma de decisiones (sobre todo, el papel de las
emociones en la toma de decisiones). El marcador somático forzaría la atención
hacia las consecuencias a las que puede conducir una acción determinada y
funciona como una señal (emocional) de alarma automática ante lo inadecuado
de algunas decisiones. Así, las emociones se cruzan con las funciones ejecutivas
para tomar decisiones. Las neuronas encargadas de adquirir las señales de los
diferentes marcadores somáticos se han localizado en las cortezas prefrontales:
• Reciben señales de todas las áreas sensoriales.
• Reciben señales de varios sectores biorreguladores del cerebro (núcleos del
tallo cerebral y prosencéfalo basal, amígdala, cingulado anterior y tálamo).
• Representan una organización de las situaciones en las que el organismo se ha
visto implicado a lo largo de la vida.
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Tema 1. Material de estudio
El marcador somático otorga un valor positivo o negativo que la atención y la
memoria se encargan de procesar. De tal manera, que un marcador somático es el
reflejo de un cambio corporal provocado por un estado emocional y que nos
influye a la hora de tomar decisiones.

La capacidad de anticipar las consecuencias de una decisión genera


respuestas corporales de origen emocional que guían al proceso de la toma
de decisiones. Las respuestas surgidas de la anticipación de las
consecuencias de una decisión determinada encuentran su origen en las
reacciones emocionales originadas por las decisiones tomadas
anteriormente (Tirapu et al., 2012).

Dentro del modelo, las funciones ejecutivas sería un sistema amplio donde el
sistema atencional supervisor y la memoria de trabajo crean posibilidades y el
marcador somático fuerza la atención hacia una de ellas y de ahí se llega a la toma
de decisiones.

1.5. Funciones de la corteza prefrontal

Al lóbulo frontal se le conocen multitud de procesos: flexibilidad cognitiva,


planificación, organización, inhibición de respuesta, memoria de trabajo, juicio
social, previsión, monitorización, etc. Procesos que permiten el rendimiento del
resto de funciones cognitivas y el desempeño de conductas propias de la especie
humana (Tirapu Ustarroz, García Molina, Luna Lário, Roig Rovira y Pelegrín Valero,
2008).

Estos procesos están íntimamente relacionados, esto quiere decir que cuando uno
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de estos se muestra alterado, otros procesos también lo están.

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Tema 1. Material de estudio
Figura 11. Funciones del lóbulo frontal. Alberto del Barco.

Flexibilidad cognitiva

Es la capacidad de adaptarnos a nuevas situaciones. Para poder adaptarnos a una


nueva situación se requiere tener la capacidad de inhibir o desechar otras
elecciones o situaciones que se nos presentan. Adaptarse a situaciones novedosas
se ha relacionado con «inteligencia» (no entraremos en el debate del concepto
inteligencia). Los seres humanos que consiguieron adaptarse a los cambios
ambientales sobrevivieron y así el ser humano pudo continuar su desarrollo como
especie. Se han identificado dos tipos:
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Dependiente del estímulo:

 Flexibilidad reactiva: capacidad de cambiar la cognición y la conducta en


respuesta a las demandas cambiantes de una situación.

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Tema 1. Material de estudio
 Flexibilidad espontánea: Es el fluir de las ideas y respuestas frente a una
cuestión.

Flexibilidad perceptiva (cambiar el foco atencional), cognitiva (pensamiento rígido)


o conductual (conductas estereotipadas y perseverantes).

Planificación

Se refiere a la acción de llevar a cabo un plan general organizado para obtener un


determinado beneficio. Un plan es intención, tener un proyecto, un modo de
actuación que se elabora de manera anticipada y se lleva a cabo. Por tanto,
planificar supone intencionalidad y aquellas actividades que se realizan de manera
correcta pero no se hacen de manera intencionada, no están planificadas. Llevar a
cabo un plan supone haber elaborado una serie de alternativas, haber previsto una
serie de situaciones (pros y contras), nos exige de la memoria de trabajo para que la
información esté presente en el momento de la toma de decisiones, tomar
decisiones y ser flexibles para modificar el plan inicial en caso de resultados
adversos…

Previsión

Es la acción de hacer conjeturas a raíz de unos indicios sobre lo que va a suceder,


disponer o preparar medios contra futuras contingencias. Se trata de plantearnos lo
que puede «llegar a ocurrir en el caso de». Supone la capacidad de viajar en el
tiempo hacia delante, tener la capacidad de «adivinar» lo que puede acontecer en
el futuro con la información que disponemos en el presente. Las personas que
poseen gran cantidad de información presente son capaces de razonar e inhibir sus
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impulsos, de no dejarse llevar por las emociones (que suelen solo mostrar un punto
de vista egocéntrico) suelen ser personas que prevén muy bien los acontecimientos
futuros.

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Tema 1. Material de estudio
Razonamiento

En sentido amplio, se entiende por razonamiento a la facultad que permite resolver


problemas, extraer conclusiones y aprender de manera consciente de los hechos,
estableciendo conexiones causales y lógicas necesarias entre ellos. Por tanto, el
razonamiento está relacionado con la capacidad de pensar u ordenar ideas para
llegar a conclusiones. Gracias al razonamiento podemos acceder a ideas o
pensamientos que no están al alcance de la mano. La distinción clásica de
razonamiento es:

 Razonamiento inductivo: es aquel que va de lo particular a lo general.


 Razonamiento deductivo: es aquel que va de lo general a lo particular.

Monitorización

Es la capacidad que nos permite valorar los errores en la realización de una


actividad o conducta que previamente habíamos planificado. Para llevar a cabo este
proceso necesitamos de la información que nos proporciona la memoria de trabajo,
que constantemente nos compara la ejecución ideal con la ejecución real.

Abstracción

La abstracción supone el ejercicio o capacidad de extraer cualidades de un objeto o


un concepto.

Metacognición
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Se define como el conocimiento que una persona tiene sobre el propio


rendimiento de su función cognitiva. Relacionado con esto está la anosognosia,
que se refiere a la falta de conciencia del propio déficit.

Procesos cognitivos II
27
Tema 1. Material de estudio
1.6. Síntomas y síndromes de la corteza prefrontal

La lesión frontal provoca alteraciones en la planificación, en el razonamiento


abstracto, en la resolución de problemas, en la formación de conceptos, en el
ordenamiento temporal de los estímulos; trastornos de la atención, aprendizaje
asociativo, del proceso de búsqueda en memoria y del mantenimiento de la
información en la memoria de trabajo; alteración de algunas formas de habilidades
motoras, generación de imágenes, manipulación de las propiedades espaciales de
un estímulo, metacognición y cognición social, etc.

Esta definición engloba los tres circuitos funcionales de los lóbulos prefrontales:
córtex dorsolateral (conductas ejecutivas), córtex orbitofrontal (conducta social) y
córtex medial (motivación).

Principales síndromes del lóbulo frontal


Síndrome prefrontal
dorsolateral Disminución de la excitación, déficit de atención. Síndrome disejecutivo.
Síndrome prefrontal
Desinhibición, estado de ánimo elevado.
orbitario
Síndrome prefrontal
Apatía, hipocinesia, mutismo.
medial

Tabla 1. Principales síndromes del lóbulo frontal. Goldberg, 2002.

Síndrome prefrontal dorsolateral

Se asocia a la disminución de la excitación general y al deterioro de la atención y la


conducta que en ocasiones es vulnerable a la interferencia.
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Estas lesiones se asocian a apatía, pulsión reducida, bajo estado de alerta y estado
de ánimo reducido. En determinados estados degenerativos los pacientes
presentan esta sintomatología y es fácil confundirlos con pacientes psiquiátricos

Procesos cognitivos II
28
Tema 1. Material de estudio
que padecen depresión. Una exploración neuropsicológica puede detectar la
presencia de signos neuropsicológicos que pongan en evidencia una lesión cerebral
(perseveraciones, imantaciones, signos de dependencia del medio, etc.).

Las sintomatologías ejecutivas son las que se ven alteradas en este síndrome, de
hecho, al síndrome frontal dorsolateral se le conoce también como síndrome
disejecutivo. Este mismo síndrome puede ocurrir en el desarrollo: son niños con
enlentecimiento en esta función que, con un buen profesional a cargo, un entorno
favorable (escolar y familiar) puede normalizarse con la edad.

Síndrome prefrontal orbitario

Los pacientes con alteración orbitaria presentan alteración en la inhibición de los


impulsos. Estos pacientes tienen características diferentes a los pacientes con
alteración dorsolateral puesto que la característica de este tipo de pacientes es que
presentan conductas impulsivas, expresiones desinhibidas y un estado de ánimo
elevado. Se asocia a hiperactividad y, tal como le sucede al síndrome dorsolateral, la
alteración de la atención está presente. Sin embargo, la alteración de la atención
está más relacionada con el efecto de los estímulos internos y externos que ejercen
un efecto negativo sobre el sistema de atención. Es como si los sistemas de
inhibición de la atención quedarán mermados.
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Accede a la píldora a través del aula virtual

Procesos cognitivos II
29
Tema 1. Material de estudio
Síndrome prefrontal medial

Este síndrome es el menos definido. Se asocia con lesiones que incluyen la


circunvolución cingulada, en concreto el área motora suplementaria, que se vincula
a conductas de iniciación y ejecución del movimiento de extremidades y habla
(ejemplo de los pacientes que padecen mutismo). La apatía e hipocinesia son
trastornos que se producen en este síndrome.

El diagnóstico del síndrome prefrontal no es sencillo, la gran heterogeneidad


de su afectación conlleva que el mismo diagnóstico presente afectaciones
diferentes.

Para empezar, no podemos dividir los diferentes procesos ejecutivos, ya que, como
hemos visto, todos están íntimamente vinculados. Segundo, los test no sirven por sí
solos para establecer este diagnóstico. No sería la primera vez que un paciente
supera (o «aprueba») los test neuropsicológicos cuando su comportamiento en la
vida diaria, su manera de ejecutar y relacionarse con los demás es completamente
disejecutiva. Tercero, la gran cantidad de conexiones del lóbulo frontal con el resto
del cerebro le hace indirectamente partícipe del funcionamiento de otras funciones
por lo que una alteración frontal podrá desencadenar alteraciones en otras áreas
del cerebro alejadas desde el punto de vista neuroanatómico, como por ejemplo:
déficits en procesos atencionales de características parietales, alteraciones en los
procesos de recuperación de información mnésica, dificultades para ejecutar tareas
de cálculo complejo, enlentecimiento cognitivo generalizado, dificultad para
coordinar diferentes aspectos cognitivos a la vez.
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Otros cuadros sindrómicos

 Síndrome de la mano ajena: descrito por Goldstein (Hidalgo Borrajo, 2009), se


caracteriza por la presencia de movimientos involuntarios e incontrolados en

Procesos cognitivos II
30
Tema 1. Material de estudio
uno de los miembros superiores. A esto le acompaña una sensación de rareza o
extrañeza de su propio miembro.

 Síndrome de dependencia del medio: los pacientes quedan «presos» de los


estímulos que se les presentan, sin poderse liberar de dichas conductas. Por
ejemplo, un paciente agarra todo lo que tiene ante sus ojos aún a pesar de haber
recibido la orden de no hacerlo. Este síndrome está relacionado con las
conductas de imitación y utilización (Goldberg, 2002).

 Fabulaciones: el hilo conductor de los pacientes no es del todo claro y los


pacientes que la manifiestan consideran como ciertos recuerdos que no han
ocurrido. También puede ocurrir que saquen de contexto algo que ha ocurrido o
una idea que han oído de otras personas.

 Síndrome de la reduplicación: es la creencia de que un entorno ha sido


duplicado, por lo que el lugar original y el reduplicado coexisten. Suelen ser
lugares conocidos por el paciente (Goldberg, 2002).

1.7. Referencias bibliográficas

Baars, B., y Gage, N. (2018). Fundamentals of cognitive neuroscience (2nd ed.)


Academic Press.

Catani, M., Dell’Acqua, F., Vergani, F., Malik, F., Hodge, H., y Roy, P. et al. (2012).
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Doebel, S. (2019). Transcript of "Cómo funciona la función ejecutiva de su cerebro y


cómo mejorarla." Retrieved 1 December 2019, from
https://www.ted.com/talks/sabine_doebel_how_your_brain_s_executive_function_w
orks_and_how_to_improve_it/transcript?language=es#t-21841

Procesos cognitivos II
31
Tema 1. Material de estudio
García-Molina, A. (2012). Phineas Gage y el enigma del córtex prefrontal.
Neurología, 27(6), 370-375.

Goldberg, E. (2002). El cerebro ejecutivo. Barcelona: Crítica.

Hidalgo Borrajo, R., Belaunzaran Mendizábal, J., Hernáez Goñi, P., Tirapu Ustárroz,
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Lezak, M. (1982). The Problem of Assessing Executive Functions. International


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Luria, A. (1979). El cerebro en accion. Barcelona, Espaą: Editorial Fontanella, S. A.


Papazian, O., Alfonso, I., y Luzondo, R. (2006). Trastornos de las funciones
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Sohlberg, M., y Mateer, C. (1989). Introduction to cognitive rehabilitation. New


York: Guilford Press.

Tirapu Ustárroz, J., García Molina, A., Luna Lario, P., Roig Rovira, T., y Pelegrín
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Tirapu Ustárroz, J., García Molina, A., Luna Lario, P., Roig Rovira, T., y Pelegrín
Valero, C. (2008). Modelos de funciones y control ejecutivo (II). Revista De
Neurología, 46(12), 742.
© Universidad Internacional de La Rioja (UNIR)

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neuropsicología. Barcelona: Viguera.

Whishaw, B. (2016). Neuropsicologia humana (5th ed.): Panamericana.

Procesos cognitivos II
32
Tema 1. Material de estudio
Caso clínico: resolución

Resolución del caso clínico: NH201641

Leyendo la historia clínica del paciente, su anamnesis y los resultados de


neuroimagen, nos decantamos por un cuadro neuropsicológico de características
prefrontales. En la anamnesis su conducta apática y rigidez son llamativas, ha
habido un cambio en su personalidad no justificable si no es por un cuadro
degenerativo. En neuroimagen hay hallazgo de atrofia cortical en corteza
prefrontal.

Queda por tanto delimitar el subtipo de perfil frontal que va a tener nuestro
paciente. Por un lado, presenta comportamiento apático y un déficit ejecutivo
manifestado en las tareas propuestas en la evaluación: las disejecuciones en la
ejecución práxica, los déficits de memoria, que reflejan fallos en la evocación de la
información (característica claramente frontal, no temporal), y los resultados de
cómo es su conducta en el día a día (apático, tendente al mutismo y la inactividad).

Todo esto nos orienta a un perfil neuropsicológico prefrontal mixto (cingulado y


disejecutivo). Disejecutivo porque los procesos puramente cognitivos están
alterados. Cingulado porque todo lo que es la iniciativa, el componente
motivacional y motriz, la puesta en marcha de todos los procesos cognitivos están
mermados.
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Procesos cognitivos II
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Tema 1. Resolución del caso clínico
A fondo
Recurso 1
Trastornos de las funciones ejecutivas

Papazian, O., Alfonso, I., y Luzondo, R. (2006). Trastornos de las funciones ejecutivas.
Revista De Neurología, 42(S03), S045. Recuperado:
https://www.neurologia.com/articulo/2006016

Este breve artículo servirá al alumno a comprender algunos de los procesos


cognitivos que conforman las funciones ejecutivas. Los autores esbozan de una
manera accesible los conceptos vistos en el tema y servirá al alumnado a
comprender por qué estas funciones se sitúan en la parte más alta de la jerarquía
de las funciones cognitivas.

Recurso 2
Cómo funciona la función ejecutiva de su cerebro y cómo mejorarla

Doebel, S. (2019). Transcript of "Cómo funciona la función ejecutiva de su cerebro y


cómo mejorarla." Retrieved 1 December 2019, from
https://www.ted.com/talks/sabine_doebel_how_your_brain_s_executive_function_w
orks_and_how_to_improve_it/transcript?language=es#t-21841

En este vídeo se reflexiona sobre la influencia del ambiente en el funcionamiento de


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nuestras funciones ejecutivas. En el tema se ha expuesto la capacidad de la función


ejecutiva de formar patrones de conducta eficaces, pero no debemos olvidar que
todo esto se desarrolla en un contexto que moldea bidireccionalmente nuestras
funciones ejecutivas, de ahí que la modificación del contexto sea una poderosa

Procesos cognitivos II
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Tema 1. Test
arma de intervención en los procesos de neurorrehabilitación o en la adquisición de
nuevos aprendizajes.
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Procesos cognitivos II
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Tema 1. Test
Test
1. ¿Qué diagnóstico neuropsicológico se ajusta más a la afectación de Phineas
Gage?
A. Síndrome de la mano ajena.
B. Síndrome prefrontal orbitario.
C. Síndrome prefrontal dorso-lateral.
D. Síndrome prefrontal dorso-medial.

2. ¿Cómo se llama el haz de fibras que conecta el lóbulo frontal con con las
estructuras subcorticales?
A. Fascículo longitudinal superior.
B. Fascículo longitudinal inferior.
C. Cuerpo calloso.
D. Fascículo uncinado.

3. ¿Qué diferencia existe entre el síndrome prefrontal dorsolateral y el prefronal


orbitario?
A. Las únicas diferencias se refieren a la localización de la lesión anatómica,
pues comparten sintomatología.
B. El síndrome prefrontal dorsolateral es similar al dorsolateral medial, el
orbitario es más complejo porque implica a la red ejecutiva frontoparietal.
C. En el síndrome prefrontal dorsolateral predominan las alteraciones
ejecutivas, en el orbitario el cambio de personalidad vuelve a las personas
más desinhibidos, excéntricos, hiperactivos, con alteración en controlar los
impulsos.
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D. En el síndrome prefrontal orbitario predominan las alteraciones ejecutivas,


en el dorsolateral el cambio de personalidad vuelve a las personas más
desinhibidos, excéntricos, hiperactivos, con alteración en controlar los
impulsos.

Procesos cognitivos II
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Tema 1. Test
4. E.M era estudiante de periodismo cuando a la edad de 20 años sufrió un grave
accidente de tráfico. Tras la recuperación del trauma y los problemas
ocasionados por la estenosis laríngea ocasionada por la traqueotomía E.M.
retomó sus actividades como mejor pudo. Al poco tiempo sus familiares
empezaron a observar que E.M. tenía dificultades para continuar los estudios.
Los abandonó y se matriculó en relaciones laborales, con mucho esfuerzo
consiguió la diplomatura, pero se vio incapaz de hacerse un hueco en el mundo
laboral. Encontró su refugio al amparo de la empresa familiar, donde realizó sus
labores comerciales lo mejor que pudo. A la muerte de su padre se hizo cargo de
la lista de clientes de este, pero tras años de pérdidas, la familia se vio obligada a
cerrar el negocio. A nivel personal consiguió contraer matrimonio y tener dos
hijos, matrimonio que no mantuvo. En la actualidad tiene dificultades en la
crianza de sus hijos, que ya son adolescentes. Actualmente tiene 50 años, pero
su mentalidad es inmadura, se ve incapaz de tomar decisiones de manera
responsable, ni tampoco llega a plantearse realizar una vida de otra manera. Su
hermana mayor la acompaña a todas partes y se vale de ella para llevar una vida
relativamente «autónoma». En función de esta anamnesis, señala las
características disejecutivas que presenta esta paciente.
A. Infantilidad, dificultad de aprender de los errores, déficits en planificación y
organización.
B Rigidez cognitiva, sintomatología depresiva, desmotivación.
C. Alteraciones en memoria de trabajo, mutismo.
D. Desinhibición, impulsiva, hiperactiva.
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Procesos cognitivos II
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Tema 1. Test
5. Señala la opción verdadera:
A. Un paciente anosognósico podrá utilizar sus recursos metacognitivos para
compensar sus funciones ejecutivas.
B. Un paciente hiperactivo no puede presentar enlentecimiento cognitivo.
C. La memoria de trabajo es un proceso cognitivo transversal, sin el mínimo
funcionamiento de este proceso no podríamos operar con información en
nuestras actividades diarias.
D. Lo que más caracteriza a un paciente con rigidez cognitiva es su capacidad
para elaborar diferentes planes de acción cuando no puede resolver un
problema.

6. ¿Dónde se sitúa el córtex prefrontal dorsolateral según el mapa de Brodmann?


A. 9, 10 y 11.
B. 4, 6, 8 y 44.
C. 9, 10, 11, 12 y 13.
D. 9, 10, 11, 45, 46 y 47.

7. ¿Cuál de los siguientes modelos comulga con la siguiente afirmación? El Sistema


Atencional Supervisor es el encargado de evaluar la importancia de los estímulos
novedosos que llegan a nuestro cerebro y por tanto actuar en consecuencia,
rompiendo las pautas de actuación prefijadas por nuestras conductas
automáticas.
A. Norman y Shallice.
B. Baddeley.
C. Golman-Rakic.
D. Luria.
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8. ¿Un paciente que presente mutismo acinético será fácilmente confundible con?
A. Demencia de Alzheimer.
B. Estado de mínima consciencia.
C. Amnesia.
D. Afasia.

Procesos cognitivos II
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Tema 1. Test
9. De los siguientes procesos, ¿Cuál no se considera parte de las funciones
ejecutivas?
A. Memoria de trabajo.
B. Memoria declarativa.
C. Memoria de la fuente.
D. Memoria prospectiva.

10. Elija la verdadera:


A. Dentro de las funciones ejecutivas encontramos otros procesos fácilmente
jerarquizables, por ejemplo, la atención ocurre antes que la memoria.
B. Un déficit ejecutivo provocará en la mayoría de las ocasiones dificultades
visoespaciales debido a la desconexión frontoparietal.
C. Las funciones ejecutivas tan relevantes en el funcionamiento del cerebro
que fueron las primeras funciones cognitivas en acontecer desde un punto de
vista ontogénico.
D. La importancia de las funciones ejecutivas es tal, que su alteración
provocará fallos en otras funciones cognitivas, aunque éstas no estén
primariamente afectadas.
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Procesos cognitivos II
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Tema 1. Test

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