Es un agente antiepiléptico muy utilizado en el tratamiento de las crisis
tónico-clónicas parciales y generalizadas. Su estrecho rango terapéutico y su elevada capacidad depresora del sistema nervioso central junto con su capacidad de producir autoinducción enzimática hace que sea uno de los fármacos más frecuentemente monitorizados en el laboratorio clínico. En este trabajo revisamos la farmacología del fenobarbital, estudiando además la farmacocinética, las reacciones adversas debidas a la intoxicación, las indicaciones de su monitorización y los métodos empleados en el laboratorio para la medida de los niveles plasmáticos.
Propiedades farmacológicas
El fenobarbital es el prototipo del grupo de barbitúricos que poseen actividad antiepiléptica
específica a dosis inferiores a las que producen sueño. Es eficaz en crisis tónico-clónicas generalizadas y tiene valor limitado en crisis parciales simples, pero no es activo en las ausencias, que incluso puede agravar. Como todo barbitúrico el fenobarbital es químicamente una diamida cíclica de seis miembros, derivado de la estructura del ácido barbitúrico (malonilurea). Su denominación sistemática es 5-etil-5-fenil-2,4,6- (1H,3H,5H)pirimidina triona. Es un ácido débil, con un Pka=7.3. El grupo fenilo de la posición 5 dota al fenobarbital de una actividad antiepiléptica específica.
Como se ha señalado además de la acción sedante-hipnótica y anestésica propia de
todos los barbituratos, el fenobarbital presenta acción anticonvulsiva, a dosis inferiores a las hipnóticas, que no es antagonizada por anfetaminas. Igual que la fenitoína, suprime la fase tónica de la respuesta al electroshock, pero a diferencia de esta aumenta el umbral de electroshock necesario para producir convulsiones. Es capaz de deprimir la actividad de ciertos focos y reduce los fenómenos de propagación, lo que indica que actúa sobre neuronas anormalmente activas.
El mecanismo de acción no está totalmente aclarado, y se supone que está relacionado
en parte con el responsable de la acción hipnosedante. Es conocido que el fenobarbital actúa como estabilizante de la membrana neuronal por afinidad fisicoquímica por los lípidos de membrana, afectando a su permeabilidad y al flujo iónico; en efecto, presinápticamente reduce la entrada de calcio en la neurona y con ello la exocitosis de neurotransmisores, mientras que de modo no sináptico reduce la conductancia a los iones Na+ y K+, bloqueando las descargas repetidas. Los estudios a nivel celular muestran depresión de la transmisión sináptica, sin disminución de la excitabilidad neuronal, pero esta acción no es uniforme en todas las neuronas.
Además de esta acción "inespecífica" el fenobarbital actúa postsinápticamente facilitando
la inhibición mediada por GABA y reduciendo la excitación producida por glutamato y/o acetilcolina. A las dosis en que se emplea en la clínica este mecanismo postsináptico es el predominante. En cuanto a las indicaciones clínicas cabe señalar que encuentra su máximo uso en el gran mal, pero también puede utilizarse en el tratamiento de las epilepsias focales y estados convulsivos del niño.
Es uno de los fármacos de elección en el tratamiento del status epilepticus y de las
convulsiones febriles. Otras indicaciones son el síndrome de abstinencia en niños nacidos de madres adictas a los opiáceos o barbitúricos y la hiperbilirrubinemia debido a la inducción de enzimas microsomales hepáticas, lo que acelera el aclaramiento de la bilirrubina.