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Ciencia y Religión

En este hilo trataré de armonizar a la ciencia y la religión, y eximirlas de todo conflicto.

Para entender este hilo, deben tener en cuenta mi debate con el usuario, y su hilo al que respondo.

El formato será el siguiente:

I. Un caso histórico a favor de la ciencia y la religión.

II. Aclarando la diferencia entre naturalismo metodológico y metafísico

III. Errores cometidos en el hilo.

IV. Dos argumentos a favor de la incompatibilidad entre la ciencia y el naturalismo

V. Argumentos para la armonización ciencia-religión

I. Un caso histórico a favor de la ciencia y la religión

El pensamiento que parece predominar es que la ciencia y la religión han estado peleadas desde
siempre. Pero nada más lejos de la realidad. Vemos, por el contrario, un gran impulso teísta (y
especialmente cristiano) en favor de la ciencia. Tampoco es el caso que la historia de la ciencia haya
sido el triunfo exorbitante del materialismo por sobre otras teorías. El filósofo Robert Koons señala 4
tradiciones que contribuyeron a forma actual de la teoría científica: (1) un realismo matemático
platónico-pitagórico, (2) telemecanismo aristotélico, (3) especulación neoplatónica y hermética
sobre poderes ocultos y principios vitales, y, finalmente, (4) demócrita (atomista) y versiones
empedocleanas (no atomistas) del materialismo. Todas estas tradiciones han tenido mucha
influencia, pero la (4) no ha predominado. De hecho, parece que el realismo matemático platónico-
pitagórico fue mucho más significativo. Pero esto se pone aún mejor, y es que el atomismo antiguo
había demostrado ser un callejón sin salida, y “la física matemática solo se hizo posible cuando los
pensadores cristianos (…) volvieron al estudio de los fenómenos naturales, con fe en el poder
misterioso, incluso místico, de las matemáticas para revelar la esencia de la realidad.” (Paul Moser y
Paul Copan, 2003) Pero el elemento clave de ese resurgimiento fue que, en la mentalidad cristiana,
el universo había sido creado por Dios, por lo que cabría esperar un orden en sus leyes y fenómenos
naturales.

Podría estar mucho tiempo más hablando sobre cómo el cristianismo favoreció a la ciencia, pero dije
que sería breve. Pero dejo bibliografía al respecto:

Nancy Pearcey y Charles Thaxton, El alma de la ciencia: fe cristiana y filosofía natural

How Christianity Change de World, de Alvin J. Schmidt, Capítulo 9.

Cómo la Iglesia construyó la Civilización Occidental, Thomas E. Woods, capítulo 5.


II. Aclarando la diferencia entre naturalismo metodológico y metafísico

El naturalismo puede de definirse de dos maneras:

Naturalismo Metafísico: No existen entidades sobrenaturales. Todo lo que existe es el espacio-


tiempo y sus contenidos

Naturalismo Metodológico: Metodología para que nuestras conclusiones impliquen solamente


contenidos naturales.

Ciertamente, no parece haber conflicto entre ninguna de las dos. La adopción del naturalismo
metodológico no implica la verdad del naturalismo metafísico. Uno puede elaborar una metodología
para estudiar el mundo físico para que las conclusiones sean naturales, pero de esto no se sigue que
no haya entidades sobrenaturales. Al no tener acceso epistémico a la estructura ontológica de la
realidad, la ciencia puede describir cómo funcionan las cosas, pero nada nos puede decir respecto a
verdades metafísicas. De hecho, la ciencia tiene presupuestos metafísicos (como que existe el
mundo externo, por ejemplo)

III. Errores cometidos en el hilo.

Aquí daré algunas observaciones sobre lo que presentó el usuario. En primer lugar, podríamos tirar
todo este debate por la borda adoptando una postura antirrealista científica, diciendo así que “el
éxito pragmático por sí solo no garantiza la verdad de las conjeturas científicas; El fruto técnico de la
investigación científica puede explicarse viendo la ciencia como una búsqueda efectiva de fruto
técnico y no de la verdad.” (Bas C. van Fraassen, La imagen científica, Oxford: Clarendon Press,
1980).Esta postura parece haber sido olvidada por el usuario. Y sería realmente un problema, ya que
él está comprometido con la verdad de la ciencia. Pero bueno, adoptemos un enfoque realista para
continuar la conversación.

El dice las ciencias adoptan el materialismo ya que no hay evidencia científica de nada supra-natural.
Pero esto no es un buen argumento, ya que lo mismo cabría esperar si la ciencia adopta un
naturalismo metodológico. Es decir, si la ciencia sigue un método en el que sus conclusiones son
solamente naturales, uno no espera que metan a Dios en una probeta o que describan los procesos
mentales de un fantasma. Pero esto no significa que la ciencia niegue la existencia de entidades
sobrenaturales.

Luego dice que no hay argumentos materialistas en favor de entidades supra-naturales. Pero eso es
justamente asumir que el materialismo es cierto para probar que el teísmo es falso. Claramente, no
hay ningún argumento materialista para las entidades sobrenaturales, porque para el propio
materialismo no hay entidades sobrenaturales, todo lo que existe es la materia. Sería como decir
que el ateísmo es verdadero porque no hay ningún argumento teísta que concluya que Dios no
existe.

Después plantea un punto de encuentro entre el idealismo (al cual no adscribo) y el materialismo.
Bueno, pese a que dada mi definición dicho encuentro no sería posible, para no dejar aquí el tema
analizaré un caso parecido: el de la ciencia y los milagros.
Este escenario parece ser propicio, pues demuestra la acción de un ser sobrenatural en el mundo
físico. ¿Cómo responde la ciencia ante esto? Seré sincero, sobre este tema se ha escrito mucho, así
que me limitaré a explicar cosas puntuales. Aun así, los derivo al libro “Introducción a la Filosofía de
la Religión” de Michael J. Murray y Michael Rea, capítulo 7.

El milagro parecería ser una violación a las leyes de la naturaleza (como diría Hume), pero esto no es
así. Un milagro es más bien un acontecimiento causado (en última instancia) por Dios, que no puede
ser justificado por los poderes naturales de las sustancias naturales. En este sentido, los milagros no
serían violaciones a las leyes de la naturaleza, y por lo tanto no serían imposibles. Mi punto es que la
interacción de Dios con el mundo parece ser algo posible, y algo en lo que la ciencia no tiene por qué
tener la última palabra. “Lo que la ciencia puede mostrarnos es que algunos acontecimientos que
una vez pensamos que eran milagros, no lo son. Quizá pensábamos que el trueno y el relámpago
eran milagros, pero la ciencia nos ha mostrado que no lo son. Por eso, la ciencia es relevante en la
medida en que puede mostrarnos que algo que creíamos milagroso no lo era en realidad. Sin
embargo, también la ciencia tiene sus límites. Primero, la ciencia no puede mostrarnos que un
acontecimiento es milagroso. Para hacer esa inferencia, deberíamos, en primer lugar, ponernos de
acuerdo sobre que el acontecimiento en cuestión no es y probablemente no será explicable en
términos científicos, y tendremos que juzgar que las pruebas indirectas indican una causa divina.
Segundo, la ciencia no puede decirnos que los milagros son imposibles. La razón es que la ciencia
solo puede decirnos lo que pueden hacer las entidades naturales por medio de sus poderes
naturales. Más allá de eso, la ciencia debe permanecer en silencio.” (del libro antes mencionado)

IV. Dos argumentos a favor de la incompatibilidad entre la ciencia y el naturalismo

Expondremos brevemente dos argumentos, el de Robert Koons y el de Alvin Plantinga.

El argumento que presenta Plantinga en Warrant and Proper Function y en Where the conflict really
lies es el siguiente: El materialista no tiene otra opción real que creer que la humanidad es
únicamente el producto de un proceso darwiniano no dirigido y no planificado: cambios aleatorios
seleccionados por la selección natural. La selección natural solo se preocupa por el comportamiento
que promueve la supervivencia y la reproducción: no tiene interés en la verdad como tal. No hay una
buena razón para creer que la aptitud para la verdad es la única forma, o incluso un mecanismo
especialmente probable, para producir un comportamiento que mejore la supervivencia. Dado el
naturalismo, el conocimiento de que las vías causales que conducen a nuestras creencias actuales
carecen de una propensión intrínseca a promover la verdad, nos da una razón convincente para
dudar de todas las liberaciones de nuestras facultades cognitivas, ya sea de percepción, memoria,
razonamiento lógico o inferencia científica. Por lo tanto, el materialista científico no puede
razonablemente, al final, afirmar saber que los resultados de la ciencia (o cualquier otro modo de
conocimiento humano) son de hecho verdaderos.

El argumento que presenta Robert Koons es parecido: El argumenta que es imposible, si el


materialismo es verdadero, que cualquier creencia científicamente formada acerca de la física
fundamental sea conocida o incluso verdadera. El materialista debe adoptar una explicación causal o
teórica de la información del significado de las proposiciones de la teoría científica, y una explicación
similar de la naturaleza del conocimiento. Esto una estrecha conexión entre la semántica y la
epistemología: es imposible para nuestras teorías llevar información sobre el mundo a menos que
nuestras inferencias a las teorías sean en gran medida confiables. Dado que la simplicidad, la
simetría y otras cualidades cuasiestéticas de las teorías juegan un papel indispensable en nuestra
práctica teórica, nuestras inferencias a la teoría científica no pueden ser confiables a menos que
haya una explicación causal para la conexión entre la simplicidad y la verdad. Sin embargo, no es
posible una explicación materialista de tal conexión causal, ya que cualquier explicación causal del
vínculo entre la simplicidad y la verdad tendría que implicar una referencia a un factor que hizo que
las leyes fundamentales del mundo fueran simples, y cualquier causa fuera de la ley material, ha de
ser inmaterial. Por lo tanto, el materialista no puede creer consistentemente que la ciencia nos
brinde conocimiento o que nuestras teorías científicas sean realmente sobre el mundo (en el sentido
de que corresponden con bastante precisión y verdad a la naturaleza).

Estos dos argumentos se complementan. Plantinga argumenta que el materialista no tiene una
explicación adecuada de cómo estamos constituidos para aprender la verdad, mientras que Koons
sostiene que el materialista no tiene una explicación adecuada de cómo las leyes fundamentales de
la naturaleza están tan constituidas como para ser aprendidas a través de la experiencia.

(Extractos de “The Coherence of Theism”, de Copan y Moser)

V. Argumentos para la armonización ciencia-religión

Ciertamente, luego de haber tratado los supuestos conflictos entre ciencia y religión, lo único que
queda decir es “¿por qué no?” ¿Por qué habría algún problema entre la ciencia y la religión?
Ciertamente no lo hay. La religión es mucho mejor para la ciencia que el materialismo, ya que, si los
argumentos de Plantinga y Koons son ciertos, la ciencia solo funcionaría si es el caso que Dios existe.
Y esto ya lo hemos comprobado en nuestro caso histórico. El gran aporte del teísmo a la ciencia fue
el de postular un mundo ordenado, regido por leyes naturales, con seres conscientes cuyas
facultades cognitivas apuntan hacia la verdad.

Queda resuelto así, o al menos eso espero, este debate. No creo seguir respondiendo, al menos que
vea alguna objeción realmente interesante. No es porque sea malo, sino porque estoy bastante
ocupado. Saludos.

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