Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
La Grenouillère
La Grenouillère
gastronómica en la ruta de Le
Touquet
Por Stéphane Durand-Souffland Publicado el 23/09/2017 a las 08:00
En su restaurante, Alexandre Gauthier logró poner en marcha un viaje
gustativo y estético que comienza desde la entrega de la carta...
La mejor mesa de Le Touquet no se encuentra en realidad allí, eso sería muy
aburrido, sino a unos quince kilómetros, en La Madelaine-sous-Montreuil. La
Grenouillère (dos estrellas Michelin, 19/20 Gault & Millau), Gauthier ofrece
una cocina diferente, una estética única, un nuevo universo. No es común que
un chef logre tal armonía entre un lugar y su cocina. Aquí, se vive un viaje de
principio a fin, sin la necesidad de moverte del asiento, con escalas para
saborear, para sorprenderse, para rendirse ante el encantamiento. Para un
chef es fácil perder su esencia, pero solo como los verdaderos grandes,
Gauthier, de tan solo 38 años, aun la conserva.
Con el paso de los años, el servicio se ha vuelto más flexible; hoy en día,
perfectamente desvinculado de cierta arrogancia que le restaba aquel espíritu
hogareño. Primero, como un inicio dulce, se hace entrega de la breve carta,
impresa en una hoja frágil, elegantemente arrugada: siempre me embarga la
nostalgia por aquella sensación de recibir el menú, el primer estremecimiento
proviene de las palabras y del misterio gustativo que contienen. Entonces,
con la misma expectativa que se siente cuando un adivino te pide escoger una
carta, se sirven los aperitivos. Aquel día, a medida que el telón se elevaba, una
deslumbrante combinación de oxalis y alcaparras (ácido y polvo), en ese
momento te das cuenta que el viaje te llevará lejos, sin recurrir al exceso de
las especias ya que solo hay ocasionalmente azafrán. También encontraremos,
a merced del gran menú (11 comensales por 135 € cada uno, que dice ser el
mejor en un establecimiento de este tipo). Algunos de los ingredientes
utilizados para afilar el apetito: el ritual del aperitivo forma parte fundamental
de la comida, no es un simple adorno llamativo, sino una apertura. Al igual
que en los adelantos de un episodio de tu serie preferida, donde se muestran
breves extractos de escenas que después se proyectarán a profundidad.